LEYENDO NOTICIAS DE NUESTRO MUNDO, CAZANDO TEMAS

LA CAJA DE HERRAMIENTAS FICHA TEÓRICA SEMANA 2 PISTA 8 LEYENDO NOTICIAS DE NUESTRO MUNDO, CAZANDO TEMAS Imagen Lydia Lys Selimalhigazi Los diarios e...
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LA CAJA DE HERRAMIENTAS FICHA TEÓRICA SEMANA 2 PISTA 8 LEYENDO NOTICIAS DE NUESTRO MUNDO, CAZANDO TEMAS

Imagen Lydia Lys Selimalhigazi

Los diarios están llenos de historias que piden a gritos ser contadas, deformadas o ampliadas de forma literaria. Innumerables novelas han surgido cuando su autora leyó una breve reseña que le espoleó a escribir. Os proponemos que intentéis rescatar alguna noticia que excite las ganas de escribir sobre ella. No se trata de recontar una noticia, sino de escribir un relato a partir de ella. Y puede ocurrir que en ese proceso la historia final apenas se parezca a la noticia que la motivó. Tal es el caso de un relato de Manuel Vicent (la elegimos por lo bizarro de la anécdota) que nació de esta pequeña noticia aparecida hace ya bastante tiempo en El País: Pierde un pie y no lo nota.

Una joven granadina, Estrella Cava Castro, no se dio cuenta de que había perdido el pie izquierdo cuando la moto en que viajaba chocó con un quitamiedos, hasta que, kilómetros después, la pierna empezó a dolerle. Si os sugerimos que no os limitéis a recontar la noticia es porque esta mirada resulta muy útil para practicar algo que podríamos llamar la elaboración del por qué: Una anécdota, por interesante o espectacular que sea de por sí, no constituye una historia, sino a lo sumo un hecho curioso. Una historia es una anécdota más un porqué. Esto es: un hecho inserto en un contexto que le confiere sentido pleno. El hecho central de la historia significa algo para la vida del protagonista. Ese es el truco, y eso lo que ha hecho Manuel Vicent: la anécdota inicial (la pérdida inadvertida de la pierna) le sirve para explicar el carácter de su personaje, y es a la vez una confirmación de su destino. Desde esta perspectiva es desde donde os proponemos afrontar la presente propuesta. Os incluimos algunos titulares extraídos al azar aunque en la mayoría de las noticias lo más curioso es el desarrollo de los episodios. Abrir un periódico es un regalo para el escritor/a: Juan José Millás o Truman Capote no pudieron resistirse a una buena historia de tinta deleble. Una pareja muere en el ascensor de un hospital de Barcelona tras apuñalarse mutuamente Extirpan quiste de 137 kilos La flota británica utiliza condones para proteger sus armas Esto desde el punto de vista técnico. No es casual que esta pista creativa contenga el nombre (por una vez) de tres autores: Vicent, Millás y Capote, los tres estrechamente vinculados a la prensa escrita. En efecto, un escritor tienen ante sí en un diario multitud de historias desde las que lanzar a volar la imaginación. Sobre todo desde el momento en que el género masculino es casi protagonista (como sujeto) de casi todos los titulares y noticias. Pero maticemos. Aunque más mujeres aparecen en las noticias, la 'imagen del mundo' que reflejan los medios —los rostros que vemos, las voces que escuchamos— siguen siendo abrumadoramente masculinas. ¿Qué sentimos como mujeres (y como artesanas del oficio de la escritura) al abrir un diario o escuchar un noticiero audiovisual?

"En ningún medio, región o tema noticioso la proporción femenino/masculino se acerca a la paridad. La visibilidad de las mujeres en las noticias fue extremada y uniformemente baja", señala este año el informe "¿Quién figura en las noticias?", del Proyecto GMMP (una asociación norteamericana dedicada al monitoreo y vigilancia de los medios desde le punto de vista de género) que desde 1995 ha documentado la profunda negación de la voz de las mujeres en los medios de comunicación de todo el mundo. Si bien el estudio reconoce que la situación no se ha mantenido estática y destaca que la presencia de las mujeres en las noticias ascendió de 17 por ciento en 1995 a 24 por ciento en 2010, se lamenta de que "a la velocidad actual de cambio, tomaría 40 años alcanzar la paridad de mujeres y hombres como SUJETOS de las noticias". De acuerdo con los resultados, sólo 24 por ciento de las personas sobre las que tratan las noticias de la prensa escrita, la radio y la televisión son mujeres. En contraste, 76 por ciento —más de tres por cada cuatro— de las personas en las noticias son hombres. "Esta imagen no es congruente con una realidad en la cual, por lo menos, la mitad de la población mundial está constituida por mujeres", acota el informe, que detalla además que el incremento de la visibilidad de las mujeres se da, sobre todo, en notas sobre ciencia y salud, que en realidad ocupan menos espacio en la agenda de actualidad respecto a otros temas destacados. Una parte importante de estos dilemas se decide en las salas de redacción y durante el proceso de producción de las noticias. El mundo del periodismo (así como el de la literatura), en sus puestos directivos, está copado por hombres. Para empezar, los editores en la sala de redacción, los editores de los artículos y los reporteros de mayor antigüedad, que en su mayoría son hombres, suelen ser los encargados de asignar los temas y/o sucesos a reporteros y periodistas. Así, siguen predominando los estereotipos en la distribución de las noticias. Las periodistas siguen cubriendo lo que se denomina como temas 'suaves', como cultura, salud y otros temas sociales, en lugar de informar sobre lo que podría verse como temas más desafiantes, como política, negocios, tecnología, ciencia, elecciones y finanzas. Es muy rara la vez que se considera a las periodistas como 'grandes reporteras'. La ausencia de las mujeres como sujetos de las noticias es mucho más notable en asuntos de alta prioridad en la agenda informativa, como los de economía, aunque su presencia en los temas internacionales se incrementó hasta equipararse con su presencia en las noticias locales, reconoce el estudio. Por otra parte, se sigue presentando un mundo donde los hombres continúan superando en número a las mujeres en casi todas las categorías

ocupacionales, con mayor disparidad en las profesiones. Ellas siguen establecidas en las categorías de personas "ordinarias", en contraste con los hombres, quienes abundan como "expertos". Hay otros detalles que denotan, con más o menos sutilezas, un tratamiento diferenciado a mujeres y hombres en las noticias, y que naturalizan y perpetúan estereotipos y rasgos sexistas desde los medios de comunicación. El informe señala, por ejemplo, que es doblemente probable que los periodistas mencionen las edades de los sujetos femeninos en comparación con los masculinos. Además, a las primeras se les identifica con su relación familiar cuatro veces más que a los segundos. A ellas las siguen mostrando más como VÍCTIMAS (18% respecto a 8% de los hombres), aunque, en contraste, ahora tienen el doble de probabilidades de que se las presente como sobrevivientes, en comparación con los hombres. Desde el punto de vista cuantitativo, los sujetos femeninos sobrepasan a los masculinos en las fotos de los diarios: 26 por ciento frente a 17 por ciento. Sin embargo, ellos muestran sus rostros o aparecen totalmente vestidos, mientras es mucho más frecuente verlas a ellas de cuerpo entero y "en varios estados de desnudez". Para la periodista catalana María Antonia Gusi, un factor de peso está en los propios medios, su dirección y propiamente los y las periodistas. "La mayoría, aunque cada vez haya más mujeres, salen de las facultades sin estudios de género y perpetúan las rutinas existentes en las redacciones". "Y aun cuando la actitud no sea negativa, se ha detectado y confirmado que se tiende a la deshumanización de las noticias (con un aumento en cinco años de 12 puntos), pues cada vez hay menos hombres y mujeres protagonistas y más instituciones, organismos y entidades que ocupan su papel. Lo mismo sucede con las fuentes", agrega la también directora de la revista de teatro Entreacto y subdirectora de la agencia de noticias catalana La Independiente. La integrante de la Red de mujeres periodistas y comunicadoras de Cataluña asegura que es muy grande también la resistencia a usar el lenguaje no sexista, impulsado por los colectivos de periodistas con visión de género, las organizaciones de mujeres y algunas instituciones. "Esta resistencia acentúa la falta de visibilidad de las mujeres en los medios", puntualiza. Y finalmente alude a que la precariedad laboral facilita un periodismo más superficial, sin atención a las fuentes y sin mostrar la diversidad y pluralidad de las personas que protagonizan los hechos. "Aunque esa no debería ser la excusa para ejercer un mal periodismo", sostiene.

Por otro lado, el informe comprobó que solo seis por ciento de las noticias destacaron temas sobre igualdad o desigualdad de género, mientras 46 por ciento de las informaciones reforzaron los estereotipos de género, lo que representa casi ocho veces más que las historias que los cuestionaron (6%). Esto último significa que las mujeres tienen el conocimiento, el carácter y las destrezas para realizarse en lo PRIVADO y que, por el contrario, los hombres tienen el carácter, el conocimiento y las destrezas para lo PÚBLICO. Las mujeres irrumpen en nuevos ámbitos, no tanto espacios de decisión como de poder empresarial, académico, periodístico. Entonces, para quienes hagan una comunicación seria, no habrá otra alternativa que incluir esto en sus despachos y otros productos comunicativos.

Bien, después de abordar en esta unidad el tema informativo como fuente de historias de ficción, en general, y como indicador de desigualdad y medio de perpetuar estereotipos, en particular, os sugiero que esta semana prestéis mucha atención a dos cosas: 1) Titulares leídos y/o escuchados que despierten vuestra atención por su presunta cualidad ficcional. Aquellos que creáis que contienen una historia. Y por qué no, si os animáis, podéis desarrollar microrrelatos con alguno de esos titulares. 2) En segundo y no por ello menos importante, quiero que anotéis los lugares físicos y simbólicos en los que la mujer aparece reseñada en los medios que habitualmente consumís. Simplemente anotad titulares, descripciones, fotos. No se trata de hacer nada más. Simplemente de poner nuestra atención y conciencia sobre cómo SOMOS CONTADAS por los medios. Por supuesto, si de ello devienen alguna reflexión, collage informativo o mini-historia, no dudéis en desarrollarla y compartirla. Espero que, por un lado os motive esta PISTA CREATIVA, y por otro no os desanime la situación y actualidad de la mujer en los medios contemporáneos. Que más bien el descubrimiento de estas “anécdotas” nos lleve también a preguntarnos el por qué y el para qué de esta realidad (sin bajones, necesitamos toda nuestra energía para seguir abordando lo público e ir cambiando las cosas). ☺