IMPLANTACIÓN DE LA ESCUELA DE MÚSICA STELLA MARIS

1. PROGRAMA DE MUSIC AND MOVEMENT1 Esta asignatura sera impartida en lengua inglesa. DESCRIPCIÓN DE LA ASIGNATURA Desde los primeros años de la infancia, los niños ya son capaces de participar activamente en el acontecimiento musical. Su propia curiosidad innata de percibir una determinada atmósfera sonora (ruidos, alturas, intensidades, etc.) le conducirá a la experiencia de distintas sensaciones auditivas, permitiéndole ser un individuo mucho más autónomo a la hora de expresar sus emociones, como por ejemplo, a través de los movimientos creados e improvisados de su propio cuerpo. En el transcurso de las clases de Música y Movimiento, el niño y la niña progresivamente irán madurando sus capacidades de comunicación con sus iguales y su entorno más próximo, como también, irán ganando un repertorio de habilidades cognitivas y de expresión simbólica gracias a los variados estímulos sensoriales y las diversas actividades que integran de manera elocuente, la fantasía y el juego como estrategias psicológicas para la inserción, en este caso, de la experiencia musical. En definitiva, es un hecho suponer que en Música y Movimiento aun no es posible que exista una relación equidistante entre, aquellas cualidades que integran ulteriormente el mundo estético y sonoro del niño y de la niña con aquellas habilidades y destrezas que desarrollarán a lo largo de esta primera etapa. Gradualmente, los alumnos irán integrando y valorando la experiencia musical como un requisito imprescindible para su íntegra formación como seres humanos sensibles, una actitud de vida que se irá fortaleciendo a través de la expresión y de la comunicación activa con sus iguales a través de una conciencia mucho más significativa y a la vez, más compartida con el entorno más inmediato: el Aula de Clases. OBJETIVOS GENERALES DEL CICLO •





1

Observar, explorar y canalizar diversas experiencias sensoriales, perceptivas y expresivas a través de variados estímulos sonoros y musicales, orientadas especialmente a la curiosidad y discriminación de los parámetros de los sonidos (altura, duración, timbre, textura, dinámica y agógica) Los niños deberán identificar las características y las propiedades más significativas de los elementos que conforman la música y establecer algunas relaciones que se producen entre ellas. Descubrir, conocer y controlar progresivamente las habilidades físicas y psicomotrices de los alumnos a través de la experiencia espacial, temporal, sinestésica y propioceptiva que establece su propia imagen positiva de sí mismo con aquellas capacidades y limitaciones de acción y expresión acontecidas en el entorno más inmediato. Expresar, comunicar y progresar de manera más autónoma a través del juego, la voz, la danza y la imaginación creadora de los distintos aspectos que hacen posible aprender música con alegría; es decir, la experiencia musical del sujeto irá modelando su formación afectiva y emocional desarrollando sus capacidades de iniciativa y confianza en sí mismo, y con ello construir

Este documento está bajo una licencia Creative Commons Atribución-NoComercial 3.0 Unported.

IMPLANTACIÓN DE LA ESCUELA DE MÚSICA STELLA MARIS





íntegramente la personalidad del niño a través de la vivencia cognitiva, afectiva, social y motor. Utilizar y ajustar el lenguaje oral a las diferentes situaciones de comunicación habitual para comprender y ser comprendidos por los otros dentro de un contexto musical simbólico, y expresar con la voz cantada y/o hablada las diversas ideas, sentimientos, experiencias y deseos que significativamente deben promover el descubrimiento y el aprendizaje de las necesidades estéticas, musicales y espirituales más auténticas del niño. Enriquecer y diversificar sus posibilidades expresivas y rítmicas mediante la utilización de recursos y medios a su alcance como es la inclusión de instrumentos musicales, especialmente los de percusión indeterminada (instrumentos de pequeña percusión) y los de percusión determinada (preferentemente instrumentos de láminas). La ejecución progresiva de tales instrumentos proporcionará a los niños diversas capacidades de ejecución y destreza motriz, control de su propio tono muscular y una correcta posición corporal, aspectos necesarios para la futura formación instrumental, como también, apreciar diferentes manifestaciones artísticas dentro de un contexto creativo y social.

CAPACIDADES Y ÁMBITOS DEL DESARROLLO I.- Capacidades cognitivas o intelectuales Son los procesos básicos que los seres humanos desarrollamos para generar más y nuevos conocimientos. Desde los más básicos como la percepción y la atención, hasta los más elaborados, como el lenguaje (representación simbólica) y el razonamiento. Ejemplos: Memorizar, recordar, conocer hechos, conocer convenciones, reconocer procesos, conocer principios, comprender, traducir, codificar, decodificar, componer, inferir, predecir, deducir, aplicar soluciones, realizar un procedimiento, descomponer, analizar, descubrir los elementos que componen algo, agrupa, compone, atender, fijarse, identificar, buscar, encontrar, ordenar, reunir, agrupar, seriar, clasificar, jerarquizar, categorizar, razonar, explicar, anticipar, relacionar, etc. II.- Capacidades motrices Tienen que ver con todo lo corporal, desde los aspectos relacionados con el movimiento y la postura hasta las habilidades de motricidad fina, el cuidado del cuerpo o los hábitos saludables. La motricidad incluye el desarrollo del cuerpo como herramienta de relación con el entorno y de la comunicación. Ejemplos: Interpretar, simular, dibujar, reproducir, , ejecutar, moverse, mantener el equilibrio, comunicar corporalmente, repasar, usar modelos de interpretación, expresar corporalmente, expresar instrumentalmente, responder espontáneamente, improvisar, practicar, tocar, representar y dramatizar, mantener tono muscular, coordinar y alternar segmentos, disociar distintos segmentos, agudizar la percepción motriz, controlar el cuerpo, establece relación entre objeto y cuerpo, seguir con la mirada, etc.

IMPLANTACIÓN DE LA ESCUELA DE MÚSICA STELLA MARIS

III.- Capacidades de equilibrio personal Son aquellas capacidades y habilidades que tienen relación con el desarrollo emocional y afectivo consigo mismo y con sus iguales. Ejemplos: Atender, concentrarse, toma conciencia de su cuerpo, sensibilizarse, darse cuenta, analizar constructivamente, autoanalizar, interesarse por, esforzarse, participar, dialogar, llegar a acuerdos, mantener una actitud afable, superar sus dificultades, reconocer sus errores, controlar conductas desafiantes, conseguir motivaciones intrínsecas, etc. IV.- Capacidades de relación interpersonal Corresponde a los procesos de interacción con los demás, habilidades sociales que nos permiten contactar con las personas que forman parte de nuestro entorno próximo. Ejemplo: Criticar constructivamente, reflexionar, juzgar, estimar, tener iniciativa, ser responsable con el grupo, comportarse, tener voluntad, colaborar, jugar, compartir el logro, saber protestar, discutir, aceptar ser evaluado, aceptar soluciones consensuadas, mantener una actitud dispuesta al trabajo en grupo, valorar el trabajo de los demás, etc. V.- Capacidades de inserción y actuación social Estas hacen que el sujeto actúe con iniciativa en el grupo al que pertenece, de integrarse al mundo laboral y de corresponsabilizarse en los problemas del grupo de referencia como en los de la humanidad en general. Ejemplo: Evaluar el trabajo con el grupo, participar con el grupo, respetar las normas del grupo, guiar a sus compañeros con libertad, ofrecerse espontáneamente, respetar las normas o reglas del juego, tocar y hablar en público, responder con alegría, fraternizar con sus compañeros y el entorno, tener iniciativa para, solidarizar con los problemas sociales, potenciar el pensamiento divergente, etc. CONTENIDOS Durante esta primera Etapa de escolaridad creemos conveniente considerar como criterio secuencial, las características inherentes del desarrollo evolutivo de nuestros alumnos desde los tres a los siete años de edad y la propia filosofía del área de Música y Movimiento como disciplina global y que interactúa con otras áreas extramusicales del conocimiento (pintura, drama, lenguaje, etc.), dando inicialmente más importancia y cabida a los contenidos actitudinales, procedimentales y finalmente, integrar de forma más sistemática aquellos contenidos conceptuales correspondientes a los niveles más altos de 6 y 7 años. Según este recorrido, el eje actitudinal potenciaría y aseguraría en el niño una predisposición sensible hacia el valor de la música, como también, desarrollar habilidades sociales dentro del grupo como el respeto, la autoestima y en general, todo aquello que revierta a la propia motivación. En cambio, el eje procedimental propiciaría en el niño el “saber hacer”, es decir, desarrollar habilidades y estrategias que le permita descubrir el mundo a través de innumerables recursos cognitivos y motrices, accediendo inteligentemente a un conjunto de acciones ordenadas y dirigidas a la consecución de un objetivo, y así llegar, a una descripción mucho más conceptual de la realidad. Redactar Objetivos Específicos discriminando el tipo de capacidad + nivel del contenido + condiciones de aprendizaje

IMPLANTACIÓN DE LA ESCUELA DE MÚSICA STELLA MARIS

I.- Educación de la sensibilidad auditiva Una de las intenciones educativas que más tarda por su complejidad en la práctica musical del niño, es conseguir que éste conecte su propia experiencia perceptiva que ha reconocido del mundo sonoro a través de un lenguaje mucho más descriptivo que nace del pensamiento simbólico. La abstracción que supone transcribir una serie de sensaciones individuales a un concepto compartido con otros niños conlleva un esfuerzo cognitivo tremendamente significativo para el niño. Por un lado, todas aquellas experiencias y sensaciones que han coexistido de una forma y otra casi arbitraria entre él y su entorno, deberán hacerse mucho más intencionales y concientes, y por otro lado, el alumno deberá desarrollar conceptos generalizados sin perder la correspondiente libertad que emana de la imaginación, la flexibilidad y la fluidez de pensamiento musical y así conseguir una auténtica musicalidad que muchas veces tendrá que superar por la frustración de experiencias superficiales. Por ejemplo: Regular y ajustar la altura temperada; supervisar y controlar la duración rítmica dentro de un universo medido; reconocer y codificar un lenguaje musical compartido por todo el grupo; etc. II.- Educación rítmica – corporal Probablemente, uno de los medios más significativos que promueve a los niños a representar mejor el complejo universo de la educación musical, se deba sin duda, a la intrínseca experiencia que contiene el movimiento, el gesto y el ritmo para un óptimo aprendizaje individual y socialmente organizado. Esta educación por el movimiento, como bien la denominó su principal creador Emile Jacques Dalcroze(1865-1950), consiste esencialmente en despertar y desarrollar en el alumno las distintas capacidades motrices, cognitivas y de interacción social para producir cambios duraderos, transferibles a nuevas situaciones y consecuentemente a ello, construir una enseñanza musical a través de una práctica eminentemente visible. Es decir, el cuerpo físico del niño y de la niña se transformaría en el principal instrumento de aprendizaje capaz de traducir y comunicar explícitamente todos aquellos aspectos rítmicos, melódicos, armónicos y timbrísticos de un mundo sonoro musical subjetivo para ser codificados a una realidad mucho más objetiva a través de determinadas actividades lúdicas, creativas, actitudinales y procedimentales que permitan la permeabilidad entre lo abstracto a lo concreto, y con ello, un aprendizaje musical mucho más predecible y compartido. III.- Educación personal y actitudinal Uno de los propósitos más significativos que contempla nuestro Proyecto, es sin duda, explicitar el lugar privilegiado que tienen los contenidos de actitudes, valores y normas, y en especial aquellos que destacan la creatividad, la participación activa y la valoración del trabajo colectivo. Para ello, es necesario que el profesor reconozca las señales no verbales que se utilizan frecuentemente con los alumnos de forma consciente o inconsciente y que sustancialmente comunican personalidad, sentimientos, acciones, etc. y que de alguna manera darán el grado de implicación en el acontecimiento musical. A través de las técnicas creativas y expresivas y la espontaneidad del niño con los distintos elementos estéticos que trae consigo la plástica, el drama y el juego se evitará progresivamente la tendencia de estereotipos a través de actividades expresivas, hasta sistematizar y coordinar cada una de las aportaciones individuales a través de breves propuestas artísticas, por ejemplo,

IMPLANTACIÓN DE LA ESCUELA DE MÚSICA STELLA MARIS

aquellas que se preparan como cierre de trimestre, en que el niño desarrollará su sensibilidad y fomentará su actitud crítica con respecto a su propio trabajo y en el de los demás. IV.- Educación vocal y repertorio infantil La utilización de la canción como recurso para el aprendizaje musical resulta para el niño un medio mucho más social, concreto y significativo que el propio lenguaje musical. La riqueza de elementos musicales que la integran hacen de la canción una fuente inagotable para el desarrollo de diversas capacidades vocales, motrices, auditivas, afectivas y creativas, como también, darnos cuenta que éstas pueden ser diferentes entre sí, pero pueden tener aspectos comunes en sus secciones: melódica, rítmica, formal, armónica, simbólica y textual. V.- Educación para la ejecución instrumental En este apartado, se le ofrece al niño todos aquellos conocimientos que tienen profunda relación con la práctica instrumental y su inserción creativa para un producto común. Todas aquellas capacidades relacionadas con el tono muscular, la interdependencia motriz, las habilidades y destrezas de la ejecución del propio instrumento u objeto sonoro, ofrece en los niños una enorme conciencia global entre la percepción y la expresión del acontecimiento musical. Que el niño se coordine y colabore con otros compañeros dentro de un contexto creativo e interpretativo musical lo convierte en un individuo que interactúa con su entorno. El primer instrumento musical – como bien lo propone la práctica educativa del Orff Schulwerk – es la sonoridad del propio cuerpo, ya que en sí mismo aporta una rica y creativa posibilidad sonora, puesto que está dotado de características timbrísticas diversas, permitiéndole una educación rítmica por excelencia gracias a que el niño aprende a través de la propia sensación y conciencia corporal. ACTIVIDADES Cada una de las actividades musicales (ejercicios, condiciones, experiencias) diseñadas por el profesor especializado, deberán tener como objetivo el desarrollo in situ de cada una de las capacidades y contenidos que se ha propuesto trabajar. Como ya es sabido, durante el proceso de enseñanza y aprendizaje es imposible trabajar de forma exclusiva una determinada capacidad, cada una de ellas se asolapa y convive en plena interacción con el individuo y el grupo, hecho que convierte al contexto educativo como un modelo de intercambio extremadamente complejo y que muchas veces, no se llega a reconocer objetivamente en la evaluación. No obstante, a pesar de esa composición multidimensional que sostiene el aprendizaje, el profesor debe facilitar y procurar un diseño de actividades que conduzcan al logro de aquellas capacidades más relevantes, y que de alguna manera, éstas sean capaces de absorber y agrupar otras capacidades a fines para el logro de determinados contenidos. Para que el alumno tenga una intrínseca experiencia significativa de cada aprendizaje, es necesario que éste desarrolle una intensa actividad y con ello, no exista la menor duda cuando tenga que establecer relaciones entre el conocimiento nuevo y aquellos elementos conceptuales ya disponibles en su estructura cognitiva. El alumno también deberá evaluar su aprendizaje, para luego, decidir y juzgar la mayor o menor pertenencia de éstos en sus esquemas (ideas previas) o matizarlos, reformularlos, ampliarlos o diferenciarlos en función de la nueva información.

IMPLANTACIÓN DE LA ESCUELA DE MÚSICA STELLA MARIS

Durante este proceso de búsqueda, el profesor deberá promover adecuadamente distintas experiencias o actividades musicales de origen sensorial, perceptivo, expresivo, comunicativo, creativo y de improvisación. Cada una de estas experiencias ayudará de forma permanente, organizada y jerárquica a que los niños consigan una transformación ulterior durante toda la formación curricular, permitiéndoles cada vez más, una realidad mucho más cercana, en este caso, a su experiencia infantil. Actividades y experiencias sensoriales Es cuando el niño recibe un estimulo determinado a través de cualquier canal sensorial, para luego convertirlo en una sensación. Las sensaciones que reciba el niño dependerá de la intensidad del estímulo y la previa vivencia que ha tenido sobre éste. Estos estímulos llegan al niño de forma deliberada o arbitraria, a veces, estarán mezclados, confusos o simplemente, inexistentes en la mente. Actividades y experiencias perceptivas •

Es cuando intencionalmente participan en el niño procesos mentales que le hacen ser capaz de interiorizar, interpretar y comprender las experiencias sensoriales. Por la propia experiencia previa, el niño ya es capaz de evocar y reconocer los estímulos sonoros o musicales que le son familiares en su entorno sonoro. Si la experiencia anterior le resultó significativa, entonces su capacidad de recuperación le permitirá nuevamente revivir la experiencia ya que éstas han quedado profundamente almacenadas en sus estructuras mentales. En esta fase, el niño puede ir más lejos de una experiencia puntual, como percibir sensaciones sin estímulos y que pertenecen al mundo fantástico, concreto o abstracto de los sueños.

Actividades y experiencias expresivas •

En este tipo de experiencia el niño ya es capaz de expresar a través de su propio cuerpo distintas manifestaciones gestuales, movimientos, improvisaciones, etc. Su capacidad de explicitar sus experiencias más significativas hacia el exterior normalmente se produce al mismo tiempo que la expresión sensorial y la perceptiva, aspectos constitutivos que podrían preceder o condicionar la propia expresión del niño. Estas vivencias sensoriales y perceptivas que el niño ha ido acumulando en su memoria de largo plazo también juegan un papel relevante para la expresión, puesto que de ello depende que el niño intervenga apropiadamente a través de una expresión puntual.

Actividades y experiencias comunicativas •

Este tipo de experiencia aparece cuando el niño ya es capaz de comunicarse y compartir con otros niños significados que le son comunes. Los niños pueden transmitir ideas, sentimientos o llevar a cabo propuestas grupales gracias a que comparten las mismas atribuciones y significados (Estas vivencias de inserción cognitiva actúan como sistemas de referencia para una conexión común entre varios sujetos) Para poner en práctica esta experiencia comunicativa, nuevamente acudiremos a los planos anteriores (sensorial, perceptiva,

IMPLANTACIÓN DE LA ESCUELA DE MÚSICA STELLA MARIS

expresiva) como unidades interactivas que ayudan al niño en su dimensión personal (intrapsicológico) y social (interpsicológico) Actividades y experiencias con fin creativo y de improvisación •

Desde el comienzo en que el niño es capaz de generar respuestas expresivas y comunicativas que dejan ver su mundo interior, el profesor deberá conducir estas múltiples manifestaciones a través de una práctica musical basada en el diseño de actividades que favorezcan muchas respuestas por parte de cada uno de sus alumnos. Un alumno será más creativo que otro según la cantidad de respuestas que éste consiga de un determinado producto musical. Esto quiere decir, que el alumno busca y redefine de forma consciente o no la originalidad de un determinado producto estético-musical. La didáctica de las actividades musicales debe estar orientada a la proposición de una enseñanza que potencie lo novedoso, la afluencia de respuestas y a la divergencia de pensamiento sonoro, melódico, armónico, etc. a través de la propia experiencia que genera la improvisación (Resolución divergente)

METODOLOGÍA El Programa de Música y Movimiento se basa en la concepción constructivista del aprendizaje escolar y de la intervención pedagógica centrada fundamentalmente en cómo aprenden los individuos, independientemente de que éstos consigan obtener determinados dominios musicales. Por un lado, están los componentes que constituyen el aprendizaje del individuo como: los resultados o contenidos de aprendizaje (Qué), los procesos de aprendizaje (Cómo) y las condiciones que se requieren para ese aprendizaje (Cuándo, cuánto, dónde, con quién), y por otro lado, está el principio de la globalidad en que el individuo aprende más por la reestructuración de los esquemas cognitivos que la simple adición de los conocimientos que ya poseía. Esto quiere decir, que los esquemas que sostienen el conocimiento son posible gracias a las numerosas y complejas interacciones que subyacen en el devenir de sus elementos, de manera que el nivel de significado que el alumno le atribuye al aprendizaje dependerá de la cantidad y el grado de complejidad que tengan esas relaciones establecidas con un mayor número de esquemas del conocimiento. Por lo tanto, mientras más globalizado sea el conocimiento, mayor será el aprendizaje significativo, propiciando con ello, una mayor estabilidad para su retención, transferencia y funcionalidad. En el transcurso de cada una de las sesiones de Música y Movimiento, el alumno irá progresivamente interiorizando cada uno de los aprendizajes a través de una práctica activa y socializadora como es el aprendizaje cooperativo. Desde un primer momento, el docente irá presentando cada una de los objetivos específicos planteados por el curso debidamente secuenciado, cuidando para ello, la inclusión de distintos tipos de capacidades, contenidos y condiciones de aprendizaje para asegurar en el alumno un aprendizaje duradero. Por tratarse de niños pequeños en que su desarrollo cognitivo, social y motriz dependen en gran medida de su estadio evolutivo, la metodología de enseñanza y aprendizaje se basará en los propios resultados que conlleva implícitamente la experiencia perceptiva, expresiva y creativa que los alumnos han vivido en clases, como también, procesos mucho más sistemáticos como es la guía del profesor a través de procedimientos directos y de modelado metacognitivo. Con ello se

IMPLANTACIÓN DE LA ESCUELA DE MÚSICA STELLA MARIS

pretende que el alumno alcance un cierto dominio cada vez más autónomo de su aprendizaje gracias a la propia integración del conocimiento (“hacerlo suyo”), y pueda con ello, tal como decíamos más arriba, ser capaz de inferir, transferir y generalizar el aprendizaje de la música dentro de un contexto interactivo y unificador a través de atribuir significados compartidos con el grupo. MATERIALES CURRICULARES Cuando hablamos de material curricular, aludimos a un grupo numeroso de recursos metodológicos, pedagógicos y materiales específicos en el cual el profesor de Música y Movimiento deberá recopilar, organizar y desplegar, durante todo el transcurso de sus clases para llevar a cabo con éxito, el proceso de enseñanza y aprendizaje que se ha propuesto para el logro de los objetivos planteados. Durante esta primera Etapa de escolaridad, el profesor deberá potenciar una enseñanza musical basada en las características psicológicas, motrices y sociales más elementales que goza el niño en esta edad, y que potencialmente, los sitúa privilegiadamente en un contexto óptimo para el desarrollo de la imaginación y de la creatividad. El juego como recurso didáctico será la forma más natural con que el niño aprenda, fomentando con ello, el desarrollo social y afectivo de la personalidad a través de la adquisición de actitudes, valores y normas. Sin duda, el profesor deberá contar con un amplio repertorio de tipos y modalidades de juego muy diversas, desde aquellas que han nacido de la tradición popular hasta aquellos juegos que el propio profesor creará para determinadas situaciones de aprendizaje. Otro elemento muy significativo que contribuye como material curricular, es sin duda, la improvisación. Entendida como una forma de expresión musical y dramática creativa, libre y espontánea. A través de la improvisación, el niño conseguirá adquirir nuevos conocimientos gracias a la continua exploración que hace de aquellos determinados materiales musicales o no, y así conseguir, algo personal y propio independientemente que la tarea sea sencilla o breve. Durante este proceso, el profesor deberá tener cuidado de no forzar a que sus alumnos intervengan creativamente sin estar preparados para ello, como también, procurar un clima emocional favorable para el trabajo creativo accediendo flexiblemente a cambiar sus propios proyectos cuando emerjan nuevas ideas de sus alumnos. Y finalmente, también son materiales curriculares todos aquellos recursos que emplean y promueven sistemáticamente las diversas metodologías para el aprendizaje musical, como también, todas aquellas publicaciones, textos de estudios, partituras, material fonográfico de diversos estilos musicales, etc. que representan indistintamente cada uno de esos modelos pedagógicos. En conclusión, y a la vista que nuestro Programa de Estudio se basa fundamentalmente en cómo aprende el niño a construir significativamente un determinado conocimiento, independientemente si este aprende música o no, es fundamental que el profesor se plantee una reflexión continua de su propia práctica docente, intentando descubrir y desprenderse de aquellas concepciones que mucha veces podrían ocasionar una verdadera interrupción para el aprendizaje de sus alumnos. Todo material curricular es pertinente mientras contribuya a que nuestros alumnos “aprenden a aprender” de acuerdo a sus propias capacidades y diferencias individuales, cuidando con ello, que cada material se haya seleccionado de forma intencional y consciente, cumpliendo satisfactoriamente a las necesidades educativas que se requieren para ese momento. No olvidemos que los materiales seleccionados deben reunir: Contenidos que deben estar expresados en capacidades; el tipo de conocimiento debe estar más orientado a los procesos(actitudinales, procedimentales y finalmente, los declarativos); las actividades deben reflejar reflexión considerando los

IMPLANTACIÓN DE LA ESCUELA DE MÚSICA STELLA MARIS

conocimientos previos y la evaluación de los alumnos; las actividades deben ser abiertas ya que no buscan una única solución(respuesta divergente); las actividades están centradas en el proceso, no en el producto; el texto parte de la propia realidad del alumno, así conseguirá su motivación; el material debe ajustarse al aprendizaje del alumno a través de distintas actividades que él pueda resolver (sesión de control o andamiaje); etc. EVALUACIÓN Fundamentalmente, la evaluación educativa del curso de Música y Movimiento se centrará en una función psicopedagógica, esto quiere decir, que en el transcurso de las sesiones el profesor irá evaluando el proceso de enseñanza-aprendizaje y con ello, irá revitalizando la autorregulación de los propios alumnos para el aprendizaje de los objetivos específicos. Esta permanente supervisión durante el aprendizaje cooperativo permitirá la inserción de los ajustes pertinentes de cada uno de los alumnos; para los más pequeños, se suministrarán apoyos más directos de acuerdo a sus capacidades y necesidades más inmediatas, y para los más grandes, se les ofrecerá apoyos mucho más indirectos necesarios para que reflexionen y se adapten concientemente a sus propias necesidades durante el proceso de aprendizaje(Ejemplo: Cantar entonadamente Sol y Mi a través de fonomimia; Combinar creativamente sonidos y silencios; Responder corporalmente a distintos estímulos sonoros; Representar gráficamente el silencio, el sonido y sus cualidades según una grafía inventada, pero convencional para el grupo ; etc.) En cuanto a la evaluación de las capacidades más importantes para llevar a cabo las metas propuestas, pensamos en la función pedagógica de las tareas y actividades de evaluación, en que un estudiante resuelve una tarea específica a través de una interacción entre él, sus compañeros y el profesor. A la hora de realizar estas tareas, éstas deben ser similares a las utilizadas en clase, pero nuevas y con una cierta dificultad, para que el alumno pueda ir tomando diversos caminos y soluciones. Básicamente se llevarán a cabo tres modalidades para evaluar el aprendizaje de los alumnos: la evaluación inicial, formativa y sumativa con el propósito de ajustar la ayuda pedagógica de los alumnos para atender lo mejor posible sus diferencias individuales y también, con la finalidad de constatar en qué medida se están consiguiendo las intenciones que están declaradas en el proyecto. CRITERIOS PARA LA PROMOCIÓN El niño irá adquiriendo gradual y secuenciadamente unas habilidades inherentes a los objetivos más relevantes del Área de Música y Movimiento. Durante todo el proceso de enseñanza y aprendizaje el profesor procurará trabajar y evaluar cada una de los ejes transversales (contenidos) intentando en lo posible describir qué capacidades debe poseer el alumno (conocimientos previos) y que habilidades el profesor pretende desarrollar para llevar acabo satisfactoriamente cada uno de los objetivos propuestos. El criterio de las evaluaciones estará determinado esencialmente en diferenciar, entre lo que el alumno es capaz de hacer y de aprender por sí sólo y lo que es capaz de hacer y de aprender con la ayuda de otra persona más experta. Un aprendizaje eficaz es el que evalúa el nivel de desarrollo del alumno a través de cada una de las capacidades descritas en este Programa de estudios, como también, seleccionar y secuenciar convenientemente aquellos contenidos actitudinales, procedimentales y conceptuales adecuados a cada nivel de escolarización.