REGISTRO DE PRENSA 14 DE DICIEMBRE DE 2015 TITULARES 

'METRO DE BOGOTÁ SERÁ CASI TODO ELEVADO'



TRES TEMAS CLAVES EN EL CONGRESO PARA TERMINAR EL PERIODO



PROCESO DE PAZ DÍA DECISIVO PARA EL PROCESO DE REFRENDACIÓN DE LA PAZ CON LAS FARC



OLA DE RELEVOS EN LOS ALTOS MANDOS DE GRANDES COMPAÑÍAS



ASÍ SERÁ LA TENDENCIA DEL DÓLAR DURANTE LA SEMANA



EN ARRIENDOS, SERVICIOS Y TRANSPORTE SE IRÍA LA MAYOR PARTE DEL SALARIO MÍNIMO EN 2016

Fuente: EL TIEMPO Sección: ECONOMÍA Noticia: 'METRO DE BOGOTÁ SERÁ CASI TODO ELEVADO'

NO SE DESCARTA UN PEQUEÑO TRAMO SUBTERRÁNEO, DICE ENRIQUE PEÑALOSA Enrique Peñalosa Londoño insiste en que los estudios actuales del metro sirven en un 90 por ciento para la línea elevada. Lo hemos visto muy activo integrando su gabinete. Figuran muchas mujeres, qué bueno. ¿Pero es cierto que mucha gente buena le ha dicho que no, horrorizada por los riesgos del sector público, para no quedar empapelada o encarcelada, como Andrés Camargo? Andrés Camargo fue no solamente un funcionario honesto. Fue un funcionario extraordinario. Y es muy grave lo que está pasando en Colombia. Recuerdo cuando me reuní con él y con su esposa para rogarle que me aceptara el IDU porque, obviamente, él era muy exitoso en el sector privado. Terminaron destruyéndole la vida. La gente buena que acepta es casi para prestar un servicio social... Exactamente. En Colombia, las ‘ías’ han creado un verbo, que es ‘empapelar’. Un funcionario puede pasar diez años pagando abogados. En las sociedades avanzadas no existe una situación parecida. Ya de por sí es muy difícil llevar gente al sector público con las remuneraciones que se pagan, comparadas con las del sector privado. También es cierto que el descaro con la contratación directa, a dedo, fue espantoso. ¿Usted va a corregir esa maña de la alcaldía Petro, que se ha prestado para una corruptela terrible? Por supuesto, haremos todos los esfuerzos. Por ejemplo, las alcaldías locales en Bogotá tienen un presupuesto muy grande, de libre destinación y hay un porcentaje enorme de contratos, a dedo, con fundaciones, con ONG. Estableceremos restricciones severas. Cuando se crearon las alcaldías locales se decía que los recursos debían destinarse a inversión. Ahora inversión es cualquier cosa de acuerdo con la definición legal. ¿Qué tan grave es el problema de contratación sin control en el Distrito? En los últimos 12 años han venido aumentando los gastos del Distrito de manera enorme en todas las entidades. Simplemente se van inventando más y más programas... Con un desenfreno del gasto sin austeridad ni eficiencia. Prácticamente en todas las entidades se

tienen muchos más contratistas de los que se necesitan. Más empleados de los que se necesitan. Más gasto del que se necesita. ¿Ha habido una utilización política de ese gasto? Sí ha habido una utilización política masiva del gasto público en algunas entidades. Flagrantemente, como en Canal Capital y en Integración Social. Muchos contratistas fueron enviados a los barrios a decir que si votaban por Peñalosa, les iban a quitar todos los programas de apoyo. ¿Y se los van a quitar? Por supuesto que no. Lo que es bueno lo vamos a apoyar. Nuestro tema social se va a concentrar prioritariamente en primera infancia, en los adultos mayores, en los niños especiales y personas en condición de discapacidad, y en los habitantes de la calle. Pero no vamos a politizar esos programas. Fíjese que cuando el alcalde Petro decidió apoyar la candidatura del presidente Santos o, posteriormente, la de Clara López, los que renunciaron para ir a hacer campaña política fueron el secretario y los directores de Integración Social. Utilizaron la red de contratistas, sin que yo diga que todos los contratistas estuvieran involucrados en esto, y tengo cientos de reportes de cómo intimidaban a los beneficiarios de los programas. Integración Social aumentó el gasto al doble; hoy tiene 1,2 billones de pesos anuales, un presupuesto mayor que el de todas las alcaldías de Colombia, exceptuando Medellín Cali y Barranquilla. Esto no significa que no haya muchísimos programas muy valiosos, importantes y necesarios. Recibe bajo la lupa varias empresas del Distrito… El desorden gerencial es enorme. Tenemos un problema de dimensiones oceánicas que es el SITP. Eso se negoció mal, se planeó mal, se implementó mal y cuesta un billón de pesos al año en subsidios. Arreglarlo puede costar mucho más que eso. Les quitaron el servicio de bus a los barrios y no lo reemplazaron con suficiente servicio. La gente no encuentra ni los puntos de venta ni de recarga de tarjetas. Hay miles de buses totalmente ilegales operando por la ciudad, y no se les ha pagado a los operadores. Será uno de los grandes problemas. ¿Y el Acueducto? Hace ocho meses, Empresas Públicas de Medellín compró Aguas de Antofagasta en 960 millones de dólares, y Antofagasta es una ciudad de 100 habitantes. ¿Por qué la compró? Pues porque producía utilidades. La Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá tiene un mercado de 9 millones de habitantes. El agua llega del cielo, de un páramo puro,

no como en otras ciudades en montañas donde hay que bombear el agua de abajo hacia arriba. A Bogotá llega por gravedad. Es un monopolio absoluto. La EAB debería estar produciendo de 1 a 3 billones de pesos en utilidades para descontaminar las quebradas, el río Bogotá, ampliar las redes, y, en cambio, está a punto de producir pérdida. Tiene el factor prestacional más alto de Colombia. Fuera de eso le pegaron el servicio de aseo, lo cual va completamente en contravía de la historia, es una izquierda 1950. Allí hay un problema gerencial grande. Esa empresa la tenemos que volver mucho más eficiente, más cuidadosa con los costos, para que pueda producir más con los mismos recursos. ¿La ETB? Tendremos que revisar procesos de compras y adjudicación. Le hemos solicitado respetuosamente a la administración Petro que no se haga una multimillonaria compra de software para el 123, que queremos revisar. Con Petro descubrimos en su discurso de posesión que no estábamos eligiendo a un alcalde de Bogotá, sino a un candidato presidencial. ¿Usted cuál de las dos cosas va a ser? A mí solamente me interesa ser alcalde. Los bogotanos pueden tener esa absoluta tranquilidad. La de que trataré de ser el mejor alcalde posible. Para la inmensa mayoría de los que llegan, la alcaldía es un cargo político más. Para mí es una pasión. Es una vida de soñar, de pensar, de planificar, de recorrer las calles, de estudiar, de aportar al mundo entero lo que yo pueda en el tema urbano. No sé qué tanto vamos a lograr. Pero pueden estar seguros de que lo que a mí me interesa, lo único, es ser el mejor alcalde y hacer de Bogotá una gran ciudad. Estoy convencido de que podemos enrumbarla, no simplemente para tapar los huecos sino para que se destaque por su nivel de vida. ¿Usted no tiene planeado organizar milicias urbanas para algún proyecto político futuro? Absolutamente, no. Estoy, además, listo para asumir todos los costos políticos contra mi popularidad. Para lo único que me interesaría conservarla es porque ella ayuda a generar los cambios de comportamiento que se necesitan en la ciudad. No espero que me quieran en un año o dentro de cuatro, sino en veinte. ¿Tratará de desmontar la profunda polarización que sembró Petro? Desde luego. Una de las características de una buena ciudad es que sea mejor para los más pobres y para los más ricos, que son los que traerán empleo y generarán impuestos.

¿Y para los de la clase media, que, según Petro, fue la que lo derrotó? Una de las razones por las cuales ganamos esta elección, como por ejemplo en Engativá, básicamente de estrato 3, es porque la clase media está en sándwich. No ve ningún beneficio y, en cambio, sí está pagando unas sumas enormes en prediales, con pésimo mantenimiento vial, problemas graves de inseguridad. Felizmente, esta ciudad tiene una clase media cada vez más numerosa. Quiero que el lema de mi gobierno sea: ‘Bogotá, ciudad de todos y para todos’. Hablemos del metro El alcalde Petro ha tratado de capitalizar la impresión, esperamos que sea absolutamente falsa, de que usted no está comprometido con el metro, y que no lo va a construir. ¿Nos puede contar cuál es la verdad? Las decisiones bajo mi alcaldía no serán emocionales ni políticas. No tengo ningún interés en hacer una campaña presidencial con los proyectos a futuro de Bogotá. El año pasado hice parte de la comisión de 20 personas que creó el gobernador de New York para pensar en el futuro de su transporte. Incluso tengo pendiente renunciar a esa junta. Lo que puedo asegurarles a los bogotanos es que tendremos uno de los mejores equipos que se pueda encontrar en cualquier país del mundo en el tema de movilidad. ¿Y eso qué significa? TransMilenio cumple 15 años el 18 de diciembre. Con 113 kilómetros de líneas, moviliza los mismos pasajeros diarios que el metro de Deli con 213 kilómetros de líneas. O sea, TransMilenio moviliza más pasajeros por kilómetro que todos los metros del mundo, exceptuando 5 o 6. ¿Y?... Para que comencemos a hacer la línea del metro, sin que nos guíe la emoción sino la razón, tenemos que entender y aceptar que la inmensa mayoría del transporte público en Bogotá, de los próximos 100 años, seguirá basado en buses, y que TransMilenio además hace lo mismo que un metro. En Londres, por ejemplo, que tiene la misma población de Bogotá, con una de las redes más extensas de metro del mundo, se movilizan más del doble de personas en bus que en metro.

¿Vamos o no vamos a hacer el metro en Bogotá? Lo haremos, lo prometimos en la campaña. Pero con el cuidado de invertir sus recursos asegurándonos de que maximice el impacto de la movilidad de la ciudad. Sí me llama mucho la atención que a todo el mundo le interesa mucho el metro y a nadie, el tema de las troncales de TransMilenio. La troncal Boyacá va a movilizar más gente que la línea metro. A nadie le interesa el tema de que haya 900.000 personas sin pavimento en esta ciudad; en toda la campaña no hubo un solo periodista que me preguntara por este problema. El metro le fascina a la gente porque es algo emocional que no entiende muy bien, pero que cree que va a solucionar todo. Haremos el metro, pero mucho más técnico.

¿Qué significa más técnico? El metro es, antes que nada, un tema de inversión en transporte masivo. El presidente Santos se ha comprometido con él. Trabajamos en el proyecto con el ministro de Hacienda y el jefe de Planeación de manera responsable, técnica y cuidadosa. Haremos el metro como lo habíamos dicho. Uno que va a reducir muy significativamente los costos y los riesgos de sobrecostos. ¿Es decir, elevado, subterráneo, mezcla de ambos? ¿En qué proporción? Casi todo elevado. En una primera fase, una línea que va prácticamente en el mismo del trazado anterior, pero por encima, utilizando los estudios de suelos que hay, en un 90 por ciento. ¿Primera fase? Esa primera fase irá hasta la 26 con Caracas desde Bosa–Kennedy, al occidente del Portal Américas. Subirá básicamente por la avenida Villavicencio, tomará la Primero de Mayo, luego un pequeño tramo en la NQS, después subirá por la calle octava, primera, va a la Caracas y, por ahí, a la 26. ¿Todo eso elevado? Todo elevado. Están definiéndose algunos detalles. No hemos tomado las decisiones finales, pero básicamente puede que haya un pequeño tramo subterráneo. Lo importante es que este es el 71 % del trayecto, de lo que estaba planteado.

¿Cuándo sale la licitación? La licitación se abriría en el segundo semestre del año entrante. Solo una demora de tres meses con respecto a lo que se había anunciado. ¿Quién le va a manejar ese proyecto? Estamos en ese tema. Hay un grupo muy bueno. El gerente del proyecto metro lo estamos definiendo. Debe ser un proceso muy cuidadoso porque necesito que los bogotanos entiendan que será Bogotá la que asuma cualquier sobrecosto que pueda presentarse, según lo ha dicho muy claramente el Gobierno Nacional. Por eso, lo que estaba planteado antes yo considero que era una línea muy equivocada por las carreras 13 y 11. ¿Pero esa línea no tenía todos los respaldos de entidades muy serias, incluyendo al Banco Interamericano de Desarrollo? No. Hay que tener mucho cuidado. La manera como se había definido por dónde iba la línea de metro realmente no corresponde a ningún estudio sofisticado, sino a una persona de tercer nivel del IDU. Había un estudio básico, que decía que la línea debía ir del suroccidente al centro y del centro al norte, por el oriente. Pero esto es un corredor que puede tener 500, 1 kilómetro, 2 kilómetros de ancho, no por ninguna ruta, pero cuando se fue a hacer la definición exacta de por dónde iría surgió un parámetro que se inventó un funcionario del IDU mientras se lavaba los dientes, y que no tuvo nada de técnico, consistente en que no se podía utilizar ninguna ruta por donde estuviera TransMilenio ya funcionando, o planeado hacia el futuro. Esa frasecita, que no corresponde a ningún estudio de ninguna clase, de hecho bloqueó la posibilidad de que se hiciera o por la séptima o por la Caracas–autopista. La única otra posibilidad de ir de centro a norte por el oriente era la 13 y la 11, obviamente subterráneo, porque por ahí no puede ir un metro elevado. ¿Descartado definitivamente? Sí. Es demasiado apretado. No hay espacio. No cabe. Entonces, claramente, la decisión fundamental no corresponde a ningún estudio técnico ni a nada, sino a esta frasecita del señor del IDU. Con el problema gravísimo de que lo que estaba planeado en esa línea de metro terminaba en la carrera 11 con calle 100. ¿Y de ahí en adelante? Obviamente, la inmensa mayoría de la gente que va hacia el norte o que viene del norte en el metro no va para la 100 sino que va mucho más al norte, a la 127, a los Cedritos… En cambio, un metro elevado que vaya por la Caracas sí tiene la posibilidad de que la persona se baje al primer piso, y siga en TransMilenio.

¿Entonces, la primera fase irá hasta la 26? Sí. Y la segunda hasta la 100, que solamente son 7 kilómetros más. Y como TransMilenio está abajo, tiene una gran ventaja y es que puede ser un metro expreso con muy pocas estaciones, de muy bajo costo. ¿El expreso será el metro y el local, TransMilenio? Así es. Además de eso, sí llevará a la gente para muchos lados. Porque el usuario podrá tomar el TransMilenio en la 63, o en la 80 los que van para Suba o para Engativá, o el TransMilenio por la autopista Norte… ¿Qué va a hacer por la séptima? Vamos a hacer TransMilenio por la séptima, con un corredor de buses muy bien hecho. Es que siempre estuvo diseñado así: TransMilenio décima-séptima. Pero llegó el señor Samuel Moreno y decidió que no se hacía, al igual que sus sucesores. En el esquema que estamos trabajando con el Gobierno Nacional, la idea no solamente será hacer el metro, sino que vamos a poder duplicar las troncales de TransMilenio. Faltan los estudios finales, pero esos son cálculos hechos con base en estudios muy confiables. Hoy TransMilenio tiene 113 kilómetros, haremos más de 140 kilómetros adicionales. ¿Para movilizar a cuanta gente? En lugar de movilizar 400 o 500 mil personas día, con las inversiones que va a poner el presidente Santos vamos a poder beneficiar a entre 2 y 2 y medio millones de personas. También ampliaremos la séptima en seis carriles por APP, hasta la Caro, es decir, en tres carriles en cada dirección. Hay que hacer salidas para Bogotá. En ese tema de las APP, este gobierno ha avanzado muchísimo. Vamos a beneficiarnos del trabajo que ha hecho la ANI, para construir varias vías por peaje. ¿Hablando de peajes, va a apoyar la iniciativa Petro de poner peajes dentro de algunos de los barrios de Bogotá? No de barrios. Hoy solo 15 por ciento de las personas se movilizan en carro, solo 22 por ciento de los hogares tienen carro, sería loco. Lo justo es que los automotores paguen por la construcción y el mantenimiento de las vías que usan. MARÍA ISABEL RUEDA Especial para EL TIEMPO

Fuente: EL TIEMPO Sección: ECONOMÍA Noticia: TRES TEMAS CLAVES EN EL CONGRESO PARA TERMINAR EL PERIODO

HAY DOS CONCILIACIONES QUE DEBE TRAMITAR, RELACIONADAS CON LOS ACUERDOS DE PAZ DE LA HABANA La plenaria del Senado tiene previsto votar hoy las conciliaciones del acto legislativo y del plebiscito para refrendar los acuerdos. Dos conciliaciones de iniciativas que tienen que ver con el proceso de paz y el proyecto que crea las Zidres –que busca generar una mayor productividad en las tierras de algunas zonas del país–, son los asuntos claves que debe resolver el Congreso en sus tres últimos días de sesiones ordinarias de este período legislativo. El Senado tiene en el orden del día para hoy la votación de la conciliación del acto legislativo con el que se pretende implementar los acuerdos de paz a los que se llegue en La Habana y, también, la del proyecto que regula el plebiscito para que los colombianos decidan si refrendan los acuerdos con las Farc. En lo que tiene que ver con las conciliaciones, en la Cámara está pendiente de votación la del acto legislativo, la cual está prevista para la sesión de mañana. De todas maneras, a esta iniciativa del Ejecutivo le quedan pendientes cuatro debates (segunda vuelta), que deberán surtirse en el período que se inicie el próximo 16 de marzo. El ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, afirmó que el apoyo de los partidos de la coalición (Liberal, ‘la U’ y Cambio Radical) a las iniciativas de paz ha demostrado una “gran convicción” en la necesidad de “dotar al Gobierno de los instrumentos que permitan poner fin al conflicto”. Y, precisamente en el tema de la paz, por lo pronto está demostrado que a la hora de apoyar los diálogos con las Farc, la coalición y el uribismo son agua y aceite. Mientras los partidos fieles a Santos –junto a Alianza Verde y al Polo– han sido una verdadera aplanadora, el uribismo –que también ha dado la pelea– sufrió varias derrotas. Las Zidres

En el Senado también se decide esta tarde la suerte de las denominadas zonas de interés de desarrollo rural y económico (Zidres). En lo relacionado con el trámite de ese proyecto, la iniciativa, si bien ya ha surtido los tres primeros debates ha sido objeto de cuestionamientos de algunos sectores dentro del Congreso. El último se dio el jueves pasado, cuando miembros de la banca de ‘la U’ en Senado se retiraron de la plenaria justo cuando iba a iniciarse la discusión de este proyecto. Sin embargo, en el Gobierno están convencidos de que en la plenaria de hoy se votará positivamente la iniciativa. De ser así, pasará a conciliación. Entre tanto, la Cámara espera esta tarde tratar de avanzar en el estudio del escrito de acusación contra el magistrado Jorge Petrelt, a quien se investiga por supuesta corrupción, cuyo trámite se ha enredado por los impedimentos y las recusaciones. A punto de su segunda vuelta El acto legislativo con el que se busca implementar los acuerdos a los que se llegue en La Habana solo está pendiente de la conciliación en las plenarias de Senado y Cámara, con lo cual terminará su primera vuelta. El acuerdo entre los conciliadores ya estableció que se acogerá el texto aprobado en la Cámara. Este acto legislativo contempla la creación de una “comisión legislativa para la paz”, en la cual se les dará el primer debate a los proyectos de ley y de reforma constitucional necesarios para desarrollar lo pactado en La Habana. Adicionalmente, se le darán facultades al Presidente de la República para que expida los decretos con fuerza de ley “exclusivamente necesarios para facilitar y asegurar la implementación y el desarrollo del acuerdo final”. Pero estas facultades serán limitadas. “No podrán ser utilizadas para expedir actos legislativos, leyes estatutarias, leyes orgánicas, códigos ni para decretar impuestos”, señala el proyecto. También se crea el fondo de inversiones para la paz, que se implementará por los próximos 20 años. El artículo que contempla este fondo se simplificó en la Cámara y fue el principal punto que se concilió.

Hora cero para la polémica ley Zidres Todo está listo para que, entre hoy y mañana, el Congreso vote en último debate el proyecto de ley que crea las Zidres, (zonas de interés de desarrollo rural, económico y social). Este ha sido uno de los más polémicos en los últimos dos años, pero al que el superintendente de Notariado y Registro, Jorge Enrique Vélez considera “la gran apuesta por la productividad de la tierra en Colombia”. La propuesta contiene 35 artículos, por medio de los cuales se intenta crear zonas de desarrollo rural en terrenos que hasta ahora han sido de baja productividad agrícola o que nunca han sido explotados económicamente a través de la siembra. La sensibilidad por el tema de la tierra en el país llevó a que este proyecto recorriera un camino escabroso antes de posicionarse en donde hoy se encuentra. Se planteó en el 2014, inicialmente solo con la intención de incrementar la productividad del campo en la región de la altillanura. Para ello, se propuso la constitución de alianzas productivas entre campesinos, propietarios de la tierra y empresarios, pero esta última idea fue precisamente uno de los motivos de la fuerte controversia suscitada en el país y que llevó, finalmente en marzo de este año, a que el propio Gobierno retirara la iniciativa, para modificarla y volver a llevarla al Congreso en abril. Allí ha librado una verdadera batalla campal, tanto en los más de 30 foros realizados en el país como en las sesiones de los tres debates que lleva aprobados. Es así como, en la actualidad, el proyecto de Zidres, tras los avales obtenidos, ya no se circunscribe a la altillanura, donde hay 3 millones de hectáreas potencialmente aptas para ser declaradas como zonas de interés de desarrollo rural. “Se amplió a todo el país porque puede haber potencial de tierra para Zidres en La Guajira, en el Cesar, entre otras. Se estima que, además de la altillanura, puede haber 2 millones de hectáreas más para crear Zidres”, sostiene Vélez. La idea con este proyecto es hacer realidad el hecho de que Colombia es el séptimo país del mundo con mayor reserva de tierra para producir comida.

El problema radica en que, en las zonas alejadas, la infraestructura para sacar la producción agrícola es inexistente, y el conflicto, por el riesgo de formalizar o abrir la puerta para formar latifundios ociosos, ha estado latente en este proyecto. El senador Jorge Robledo, quien radicó una ponencia negativa para que se archive la propuesta, señaló que las inconveniencias que traía al comienzo han ido creciendo. “Este proyecto lo empeoraron. Si se aprueba, le cabría una demanda por inconstitucionalidad, porque los baldíos solo pueden adjudicarse a campesinos sin tierra”. Agrega que “el punto central es que se busca arreglar la ilegalidad en la compra de tierra para acumular, como en el caso de Cargill, en la altillanura”. Este operador estadounidense de materias primas fue denunciado por la ONG internacional Oxfam, por adquirir extensiones de tierra más allá del límite legal permitido en el país (entre 36 y 1.725 hectáreas, en el caso de la altillanura). Robledo, durante los debates, ha sostenido que, con el proyecto Zidres “se estaría privilegiando a los empresarios sobre los campesinos”. Vélez, entre tanto, sostiene que la creación de las Zidres estará sujeta al proyecto productivo que presente el pequeño, mediano o gran productor. “Debe ser aprobado por el Ministerio de Agricultura y la Upra. Además, interviene el consejo de ministros. Solo los campesinos podrán adquirir la tierra, los empresarios la podrán tomar en concesión o en arrendamiento”. El senador Guillermo García Realpe, uno de los ponentes, sostiene que Zidres es una estrategia que promueve la productividad en ese campo inexplorado”. La plenaria del Senado tendrá la última palabra. Plebiscito, pendiente de plenaria de Senado El proyecto que regula un plebiscito con el que se busca refrendar los acuerdos a los que se pueda llegar con las Farc en La Habana solo tiene pendiente la aprobación de la conciliación en el Senado. Está en el orden del día de esta tarde, y en las mayorías del Legislativo se da como un hecho que no habrá ningún tropiezo para darle el visto bueno. En la Cámara ya se aprobó esa conciliación. Esta ley estatutaria implementa reglas para la utilización del plebiscito como instrumento refrendatorio. Establece que solo será para que los ciudadanos se pronuncien sobre lo

pactado entre Gobierno y Farc, y se convocaría solo en caso de que las partes lo acuerden. Además, fija un umbral mínimo para que sea válido. Está definido que sea el 13 por ciento del censo electoral. Ese porcentaje implica que para que el plebiscito por la paz sea válido deberán votar mínimo unos 4,4 millones por el ‘sí’ o la misma cifra por el ‘no’. También señala que los acuerdos a los que se llegue con las Farc deberán divulgarse 30 días antes del plebiscito, para que los colombianos los conozcan antes de votar. Además, fija garantías para quienes quieran hacer campaña a favor o en contra. Ese fue uno de los puntos centrales de la conciliación porque la Cámara eliminó que el Estado financie con dinero en efectivo esas campañas, como lo había aprobado el Senado. Pero también fija que el Gobierno estará obligado a cumplir lo que se decida en las urnas. Una vez se supere esta conciliación, por tratarse de una ley estatutaria, el proyecto deberá ser examinado por la Corte Constitucional.

Fuente: EL ESPECTADOR Sección: POLÍTICA Noticia: PROCESO DE PAZ DÍA DECISIVO PARA EL PROCESO DE REFRENDACIÓN DE LA PAZ CON LAS FARC El Senado votará la conciliación de plebiscito para la paz que servirá para que los ciudadanos se pronuncien en las urnas sobre los acuerdos de Cuba. El Senado votará el informe de conciliación del plebiscito para la paz y dejará en manos de la Corte Constitucional este mecanismo de participación ciudadana para que los colombianos se pronuncien sobre lo acordado. Es así como el Gobierno Nacional pondrá en marcha la aplanadora santista para que sea aprobado en su instancia definitiva el proyecto toda vez que éste servirá para refrendar la paz con la guerrilla. El ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, dijo que la iniciativa pasará a revisión de la Corte para que examine si hubo vicios de fondo o de forma en la aprobación del Congreso. “Esperamos que antes de terminar el primer semestre de 2016 los colombianos, luego de esta revisión, puedan ir a las urnas conociendo íntegramente los acuerdos”, sostuvo. Cristo dijo que como se presentará la totalidad del acuerdo, los ciudadanos podrán acudir a las urnas a conciencia a votar sí o no por los pactos de paz. “La intención es preguntar al país si respalda esos acuerdos de paz para ponerle fin al conflicto o si definitivamente considera que no vale la pena pagar ese costo por la paz de Colombia”, agregó. Dentro de la estrategia de defensa del Gobierno para tramitar el proyecto está que es la primera vez que los colombianos podrán ir a las urnas a votar por un acuerdo de paz. La exhortación del Gobierno a defensores y contradictores del proceso con las Farc es a adelantar una campaña por el plebiscito donde no se caiga en la polarización ni en la estigmatización del contrario. La palabra definitiva del proceso entonces la tomará este lunes la plenaria del Senado de la República.

REFORMA AL CAMPO VA POR LA DESCENTRALIZACIÓN: AURELIO IRAGORRI El ministro de Agricultura explica los cambios que se introdujeron al sector con la expedición de nueve decretos. Hace una semana, el Gobierno expidió nueve decretos para transformar la institucionalidad del sector rural. Entre los cambios, se encuentran la liquidación del Instituto Colombiano de Desarrollo Rural (Incoder) y la creación de la Agencia Nacional de Tierras y la Agencia de Desarrollo Rural. En diálogo con este diario, el ministro de Agricultura, Aurelio Iragorri, explica cuáles son los propósitos de esos cambios, cuándo se llevarán a cabo y si hay presupuesto para hacerlos. ¿Por qué una reforma como la que se hizo? Desde 1994 hasta 2014 sólo se han sembrado 640.000 hectáreas nuevas, y hemos ido en reversa en el sector agropecuario con respecto a antes de la apertura. En los 60 la participación del sector en el PIB era casi 60%, después de la apertura pasamos a por debajo del 15% y hoy estamos con una participación del 6%. Necesitamos un plan de acción, que requería, entre otras cosas, un plan real de siembra para el país y una institucionalidad moderna, ágil, que se ajuste a los requerimientos del mercado. Los cambios se resumen en Colombia Siembra, que es la meta de sembrar un millón de nuevas hectáreas en los próximos tres años, motivados por la soberanía alimentaria del país, por la necesidad de sustituir importaciones y aumentar la exportación de los productos no tradicionales, y por el otro lado, el ajuste a la institucionalidad. El ministerio tiene que dedicarse a dictar las políticas para el sector agropecuario y transferir las funciones de ejecución (a sus instituciones adscritas). La Ley 160 de 1994 también tenía la intención de reformar el sector. ¿Qué falló? Es una pregunta buena para quienes estuvieron en el Gobierno antes de que llegara este. Creo que muchas cosas se quedaron en buenas intenciones, que se alejó la institucionalidad del sector en el campo. El conflicto armado afectó este proceso, al igual que la apertura, y había una necesidad de una especie de acuerdo nacional. Esperamos que se logre y en virtud de éste (acuerdo) vamos a producir alimentos, y ver quién los va a comprar. Hay que involucrar a los 48 millones de colombianos, que prefieran un menú lleno de productos colombianos. Si las buenas intenciones de las reformas hubieran funcionado los datos estadísticos que muestra el censo agropecuario habrían sido diferentes.

Habla de alcanzar un acuerdo nacional. ¿Se refiere a un acuerdo simbólico o tangible, por ejemplo, con la industria? Tiene que ser tangible. Un acuerdo como el que logramos este semestre con el sector arrocero: definimos una tabla de precios del arroz que se les iba a comprar a los productores, que los beneficiara no solo a ellos sino a la industria molinera y a la que comercializa el arroz, y que no perjudicara a los 48 millones de colombianos cuando van a los centros de abasto. Corregimos inflación de 80%, se bajó el incremento en el costo al consumidor final al 25%, y eso se logró gracias a un acuerdo nacional. Sobre el maíz amarillo que necesita la industria de concentrados, necesitamos producir 3,4 millones toneladas. Las vamos a producir con el compromiso de que sean de buena calidad, que seamos competitivos. Necesitamos que, cuando sembremos ese maíz, resulte al precio justo, que las cantidades sean las que ellos (industria de concentrados) requieren, en la cantidad que requieren, y que así no prefieran el maíz extranjero. La Misión Rural habló de un Confis y un Conpes para la transformación del campo. ¿Hay plata para todos estos cambios? La asignación presupuestal ha sido la más grande que ha tenido el sector agropecuario, en promedio han sido $3 billones. El más alto había sido $1,6 billones. La Misión ha señalado que se requieren $13 billones por año no sólo del sector agropecuario sino de todos los sectores: salud, educación, vías, para poder corregir la inequidad en el campo. La Misión no era un documento de engavetar, el presidente dio la orden de ejecutarlo, además hay que complementarlo con el posconflicto. Si se firma el acuerdo de paz, tenemos que cumplir con un proceso. La paz no se siembra sólo con los 9.000 o 10.000 combatientes que tengan los grupos guerrilleros, sino con los 12 millones de personas que viven en el campo. Otra de las recomendaciones de la Misión es un programa de cero analfabetismo en el campo, pero para eso se necesita, por ejemplo, una articulación con la cartera de Educación. ¿Se está llevando a cabo ese tipo de diálogo entre ministerios? La obligación de articulación ya nació en el Plan de Desarrollo con la aprobación de una intervención integral en el territorio, que involucra al Ministerio de Educación, Ministerio de Salud, Ministerio de Transporte. Esa integralidad quedó concebida en la nueva Agencia de Desarrollo Rural, en donde habrá un funcionario encargado de articular las funciones del Ministerio de Agricultura con los otros ministerios. La Misión Rural habla de $13 billones, no solo del sector agropecuario, y de actuar articuladamente. Ejemplo de eso es la intervención en las vías terciarias, alrededor de las cuales están siendo sembrados los productos que necesitamos. Si las vías que se intervienen son las cercanas a esas zonas, vamos a tener mejores resultados. En definitiva, la integralidad nace en la Presidencia, se concreta normativamente en el Plan de Desarrollo, tiene la recomendación de la Misión,

e institucionalmente en el Ministerio de la Presidencia y en la Agencia de Desarrollo Rural quedan establecidos funcionarios para que esa integralidad sea real. Se creará la Dirección de Mujer Rural. ¿Qué apoyos concretos y diferenciados habrá para ellas? Lo primero era crear la Dirección. Me reuní con la Comisión de Seguimiento del Congreso. Hay una serie de senadoras y representantes que vienen liderando la bancada de la mujer y tienen propuestas, así como también las tenemos nosotros, sobre lo que debe hacer y ser la política de mujer rural. No será solo una política de cuotas, de participación de los programas. Cuando llegué tomamos la decisión de que mínimo de 30% de las inversiones en vivienda rural debe quedar a nombre de la mujer, tituladas a su nombre. Pero no se trata solo cuotas sino una política para el sector agropecuario teniendo en cuenta las ventajas de la mujer: la agricultura familiar campesina se basa en gran medida en el trabajo de la mujer en su casa. Se trata de reconocer las labores de campo que hace la mujer, que tienen que ver con temas culturales o ancestrales, trabajos artesanales. Aunque no estén necesariamente vinculados al pensamiento tradicional de lo que es el sector agropecuario, ese complemento de ingresos ayuda a que mejore la actividad agropecuaria del país. Las apoyaremos. No me quiero adelantar pero estamos esperando la reunión en los próximos días con la bancada de mujer y de ahí saldrá, sumado a lo que tenemos en el Ministerio, el plan de acción para posicionar esa dirección de la mujer rural. Están impulsando la siembra, pero la Misión dice que la frontera agraria tiene que parar en algún punto para frenar la deforestación. ¿Cuál será ese punto? Uno de los (nuevos) decretos crea un órgano consultivo para el ordenamiento de la propiedad rural. Allí se definirá hasta dónde llega la frontera agrícola, la pecuaria, la de reforestación, la de minería, hidrocarburos y otras actividades. La discusión de la vocación del suelo es muy técnica y dependiendo de los niveles que necesitemos sembrar para la seguridad alimentaria del país se irá definiendo. La Misión insiste en la necesidad de que el sector agropecuario se vuelva ambientalmente sostenible. ¿Hay un componente al respecto en esta reforma? En la Agencia Nacional de Tierras está incluido, y en la reforma del Ministerio lo vamos a incluir. Lo que pasaba es que la agricultura y la ganadería eran enemigos del medio ambiente. Venimos trabajando con gremios y asociaciones sobre el manejo de cuencas, por ejemplo con la Federación de Cafeteros, con Fedecacao. En esto tiene un papel trascendental la juventud. De pronto ya no quieren ser agricultores pero sí les gusta ser ambientalistas, y podemos generar una nueva generación de personas del campo que nos ayuden a cuidar esas cuencas, ríos y bosques.

Una de las dudas de los campesinos con esta reforma es si realmente llegará a las regiones. Las oficinas de Incoder eran unos tramitadores de papeles de las regiones hacia Bogotá. La Agencia de Desarrollo quedó estructurada de manera que las políticas salen del Ministerio y su desarrollo se hace en las regiones. Se formula en las regiones y por eso la agencia tiene una vicepresidencia dedicada al diálogo social, para formular proyectos. Las anteriores reformas tendieron al centralismo, pero el censo muestra que fracasó. Esta reforma se va por la descentralización. Se crea una entidad para determinar el uso del suelo y se le da peso como entidad técnica a la UPRA. ¿Este ordenamiento, sin embargo, no podría dar la sensación de que es una camisa de fuerza para la producción? ¿Qué va a pasar con alguien que hoy tiene ganadería en un sitio que según el ordenamiento debería ser para algún cultivo? No podemos seguir dando subsidios cada vez que hay una quiebra de un sector. El ejemplo más claro es que no puede ser que en un departamento como La Guajira, donde la gente se muere de sed, en la parte de abajo de la represa de Ranchería, se siembren tres cosechas de arroz al año. Allí no se puede sembrar arroz porque no hay el volumen de agua necesario, y el agua de la represa tendrá que darles agua a muchos municipios no solo para resolver el problema de los seres humanos que no tienen acueducto sino también de poder regar a lo largo y ancho del departamento. Como esos hay 1,5 millones de hectáreas mal sembradas. Ese orden, o camisa de fuerza si así lo quiere llamar, es una especie de camisa de orientación. Ofrecemos una serie de beneficios a las personas que quieran participar de manera voluntaria (en la reconversión). Los que quieran seguir sembrando sandías en la sabana de Bogotá que lo hagan, no nos podemos oponer porque es propiedad privada pero que cuando les vaya mal no busquen al Ministerio de Agricultura para que les atienda el desastre. ¿Hay garantías de dotación de herramientas para las personas que se quieran pasar a otro cultivo? Si quiere sembrar esto o lo otro le decimos qué producto se le puede dar bien. En asistencia técnica ayudamos con la entrega de algunos abonos, de semillas certificadas, las cinco herramientas que contempla el plan Colombia Siembra: primero, el ordenamiento del uso del suelo. Segundo, la administración del riesgo agropecuario, con el seguro, el fondo de garantías, la cobertura de precios, en tipos de cambio. Lo tercero es la asistencia técnica. Volveremos al esquema de que no puede haber crédito sin que haya asistencia técnica. El acceso a crédito debe ser oportuno, y con tasas subsidiadas. Necesitamos comercialización, que no es sólo quién va a comprar, es solucionar el problema logístico que se tiene, promocionar la creación de empresas privadas de transporte, apoyar a las empresas para que tengan acceso a maquinaria, a tecnología y,

finalmente, la educación especializada: tenemos campesinos pero no agricultores graduados, que sepan de buenas prácticas, sostenibilidad, entre otros. ¿La reforma se hizo pensando en que las Zidres van a existir? Me encantaría responder, pero el ministro (Juan Fernando) Cristo es el encargado porque yo estoy impedido. ¿Qué ha conseguido en término concretos el plan Colombia Siembra? El dinero lo tenemos todo, ya está en el presupuesto. Lo concreto que entregaremos en el mes de diciembre es el número de hectáreas que hemos ido acordando con los gremios. Son 100.000 hectáreas de maíz y fríjol que desde ya ofrecieron los cafeteros. Necesito que me den el plazo: hay que conseguir la tierra, acondicionarla, sembrar, con la semilla que toca, con las condiciones del clima. Esperamos a diciembre de 2016 tener sembradas, solo de maíz, soya, arroz, palma, cacao, caucho, forestales y frutales 2’493.000 hectáreas (en total, no nuevas). En 2015 tenemos 2’268.000.

Fuente: PORTAFOLIO Sección: ECONÓMIA Noticia: OLA DE RELEVOS EN LOS ALTOS MANDOS DE GRANDES COMPAÑÍAS Más de 23 compañías y asociaciones del sector privado registraron relevos en sus altos mandos. La salida de líderes empresariales como José Alberto Vélez, del Grupo Argos; de Beatriz Uribe, de Mineros; de Javier Gutiérrez Un movimiento importante de altos ejecutivos en varias empresas y gremios del país marca el año que termina. Aerolíneas, empresas de alimentos, de construcción y del sector energético reciben el 2016 con nuevos estilos de administración por la renovación de sus directivos.de Ecopetrol, y de representantes gremiales como Luis Genaro Muñoz, en la Federación de Cafeteros, provocó algunos de los cambios más sonados. Y quedan nombramientos pendientes. Por ejemplo, hay expectativa por quién será el sucesor de Fabio Villegas en la presidencia de Avianca. En el caso del Grupo Argos, la junta directiva de Cementos Argos designó a Juan Esteban Calle presidente de la compañía, quien ejercerá el cargo a partir del primero de abril del 2016. Calle reemplazará a Jorge Mario Velásquez quien, a su vez, fue nombrado presidente del Grupo Argos ante la decisión de Vélez de retirarse para disfrutar su jubilación. En Mineros S.A., la mayor productora de oro, asumió Andrés Restrepo Isaza, quien venía desempeñándose como vicepresidente ejecutivo, un paso que en el sector se entendió como un mecanismo de empalme para hacer la sucesión. Por su parte, a la petrolera, llegó el exministro de Hacienda Juan Carlos Echeverry, quien ha tenido que lidiar con el desplome del precio del petróleo y con una seguidilla de atentados contra la infraestructura de la empresa, solo en sus primeros tres meses al mando. Y en la Federacafé, un congreso extraordinario eligió a Roberto Vélez, quien venía de ser el representante del gremio para Asia, con sede en Tokio. Aparte de los cambios en Argos, el sector construcción registró otros movimientos directivos. Jaime Hill Tinoco asumió la presidencia de Holcim en febrero pasado.

Por su parte, a la Agencia Nacional Inmobiliaria Virgilio Barco entró Claudia Luque, para suceder a Andrés Escobar Uribe, quien pasó a la presidencia de la constructora Pedro Gómez y Cía. En las empresas de minas y energía, Jorge Londoño reemplazará a Juan Esteban Calle en EPM, en tanto que Ricardo Sierra Fernández fue nombrado como presidente de Celsia y gerente general de Epsa, en virtud de una reorganización del grupo. Después de ocho años al frente de Interconexión Eléctrica S.A. (ISA) el ingeniero Luis Fernando Alarcón decidió dar un paso al costado y, en su reemplazo, llegó Bernardo Vargas Gibsone. En el sector aéreo, LAN Colombia también tuvo cambios. El argentino Fernando Poitevin asumió la dirección en octubre, cargo que detentaba su compatriota Hernán Pasman, quien fue promovido como vicepresidente senior de Operaciones y Mantenimiento del Grupo Latam en Chile. General Electric Colombia tuvo como novedad la renuncia de Fabiola Sojet. Está al frente Luis Felipe Carrillo, presidente y CEO en la Región Andina y el Caribe. Otro cambio está por darse en el Grupo Orbis, antes Grupo Mundial. Santiago Piedrahíta deja la compañía para ponerse al mando de Contegral. Están en la búsqueda de su sucesor. Además del cambio en la Federación Nacional de Cafeteros a nivel gremial, María Mercedes Cuéllar salió de Asobancaria y asumió la tarea Santiago Castro. En el sector inmobiliario, César Augusto Llano dejó la Federación Colombiana de Lonjas de Propiedad Raíz (Fedelonjas). El empalme lo hace con María Clara Luque. En el sector de alimentos, Germán Martínez llegó a Productos Ramo, en tanto que el empresario Eduardo Urdaneta tomó el mando de Harinera del Valle, tras el retiro de Alfonso Ocampo Gaviria. En la banca, en América Latina, Citi integró las operaciones de Colombia, Chile, Ecuador, Perú y Venezuela. Esta área, llamada clúster andino, está a cargo de Bernardo Chacín, quien también llegó como presidente de Citi Colombia.

Fuente: PORTAFOLIO Sección: ECONÓMIA Noticia: ASÍ SERÁ LA TENDENCIA DEL DÓLAR DURANTE LA SEMANA Para algunos analistas, la moneda de los EE.UU. seguirá marcando nuevos máximos históricos. Muchos inversores dan por hecho que la FED incrementará los tipos de interés y por eso el precio del petróleo seguirá marcando la volatilidad de la divisa. Analistas estiman que en las próximas sesiones habrá buenas oportunidades de compra en el mercado de acciones. La Tasa Representativa del Mercado (TRM) vigente es de $3.299,36. No es un secreto que en esta semana el mercado de divisas estará pendiente de la reunión de la Reserva Federal (FED) del martes y miércoles, en las que se espera el anuncio sobre un incremento en las tasas de interés, que se han mantenido cercanas a 0 % desde hace siete años. Aunque para la mayoría de los analistas la subida gradual de los tipos de interés durante los próximos meses es un hecho, existe una percepción de que el modesto crecimiento de Estados Unidos (EE. UU.) no es suficientemente fuerte como para que haya un ‘endurecimiento’ monetario mayor después de la próxima semana. Bajo este contexto, los expertos en mercado cambiario consultados por Portafolio.co coinciden en que el billete verde podría oscilar entre los 3.350 y 3.500 pesos durante las siguientes jornadas. MERCADO NERVIOSO ANTE REUNIÓN DE LA FED La semana comienza con un nivel de 3.299 pesos en la Tasa Representativa del Mercado (TRM) y con una presión alcista motivada, además del rumbo monetario estadounidense, por la debilidad en los precios de las materias primas. En particular, los inversores seguirán de cerca las cotizaciones internacionales del crudo. Para muchos especialistas un desplome en los precios del petróleo hasta nuevos mínimos de hace siete años pesa bastante sobre la confianza de los inversores a nivel global. Y es que no resulta extraño que muchos se pregunten si la debilidad en el sector petrolero va en camino a convertirse en una nueva crisis financiera, a lo que se la ha sumado la ansiedad del cambio de rumbo de la política monetaria de la FED.

Los cálculos de Diego Franco, corredor de bolsa y analista financiero, sitúan a la divisa estadounidense en niveles entre 3.340 y 3.365 pesos para el cierre de la semana. Sin embargo, Franco cree que “más que la FED, el petróleo seguirá marcando la tendencia del dólar” porque si un nivel de 34 dólares por barril no funciona como piso y rebote, lo más seguro es que en los mercados mundiales el billete verde seguirá ganando terreno mientras que el barril de crudo bajaría hasta los 30 dólares. “Los operadores descontaron la subida de tasas de la Reserva Federal y por eso la atención se centrará en las minutas porque en ellas se podrá saber el ritmo de la política monetaria contractiva que continuaría en el 2016”, explicó el analista bursátil. Para Camilo Silva, socio y analista de Valora Inversiones, la moneda de los EE. UU. seguirá marcando nuevos máximos históricos que llegarían hasta los 3.420 pesos. “El comportamiento de los mercados en esta semana dependerá de la reacción de los inversores hacia los anuncios que harán los miembros de la FED sobre proyecciones económicas y las futuras alzas del tipo de interés en Estados Unidos”, agregó Silva. Las proyecciones de Felipe Campos, gerente de Investigaciones Económicas de Alianza Valores, muestran que el billete verde inicialmente alcanzará el nivel de 3.380 pesos con la posibilidad de estar por encima de los $3.400. "La duda para el mercado es el mensaje que se pueda interpretar del ritmo de las siguientes subidas. Si el mensaje es de calma podríamos tener un buen descanso en el dólar. Si el mensaje es que de todas formas les preocupa la inflación iríamos inmediatamente a nuestra siguiente meta de 3500 pesos. Esta meta la esperamos en los próximos meses", puntualizó Campos. Por su parte, Orlando Santiago, gerente y analista de Fenix Valor, estima un dólar por encima de los 3.400 pesos con una presión al alza debido principalmente a que los mercados de futuros sugieren que los operadores ven un 79 por ciento de probabilidad de que la autoridad monetaria de los Estados Unidos suba su interés según el programa FedWatch de CME Group. Otro elemento que estará en la mira de los operadores será la nueva tasa de cambio del yuan frente a una canasta de monedas, que intentará disuadir a los inversores de enfocarse casi exclusivamente en las fluctuaciones de la divisa china respecto del dólar.

El mercado cambiario de China, CFETS por sus siglas en inglés, anunció el viernes pasado un nuevo índice del tipo de cambio efectivo del yuan. La medida apunta a hacerle más fácil "al mercado observar la variación del tipo de cambio efectivo desde diferentes perspectivas", estimó el CFETS en un comunicado. MUCHO ‘RUIDO’ EN LAS ACCIONES Es posible que en la primera parte de la semana el mercado de renta variable se batirá entre las ganancias y las perdidas y “el Colcap podría seguir estando entre 1.040 y 1.080 unidades”, según indicó el corredor de bolsa Diego Franco. “De darse alguna baja temporal, lo más acertado seria aprovechar los precios para terminar año acumulando una cartera con activos realmente baratos”, puntualizó Franco. Cabe señalar que hace un par de semanas, papeles como el de Grupo Éxito sufrieron de olas vendedoras, pero hoy el rebote ha sido hasta de un 30 % y según expertos el ascenso llegaría hasta los 15.600 pesos en las próximas semanas. La recomendación de Orlando Santiago es comprar acciones de los sectores de ‘retail’, transporte aéreo de pasajeros e hidrocarburos por sus fuertes caídas.

Fuente: LA REPÚBLICA Sección: ECONÓMIA Noticia: EN ARRIENDOS, SERVICIOS Y TRANSPORTE SE IRÍA LA MAYOR PARTE DEL SALARIO MÍNIMO EN 2016

Las discusiones entre Gobierno, empresarios y centrales obreras le apuntan a que el salario mínimo legal para el próximo año podría quedar rondando los $700.000 mensuales con una variación entre 6% y 8% respecto a 2015. La duda que le queda a 1,25 millones de colombianos cuyo único ingreso será el monto mencionado es qué tanto podrán cubrir de sus necesidades básicas con este. En primer lugar cabe destacar que según varios estudios económicos el costo de la canasta familiar duplica la remuneración mínima legal ($1,3 millones mensuales), lo que ha llevado a los analistas a concluir que es indispensable que en un hogar trabajen dos personas para acceder a lo necesario. Ni qué decir de esta relación si se mira frente a gastos adicionales no contemplados, como las multas de tránsito, que pueden equipararse al mínimo. Por ejemplo, a inicios de año se determinó que la infracción por pasarse el semáforo en rojo, amarillo, intermitente o no respetar la señal de Pare es de $644.300.

De acuerdo con la ponderación bajo la cual el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) calcula el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de los 176 bienes y servicios que demanda un hogar al que más se destina presupuesto es al arriendo. Cada mes más de 18% del ingreso se compromete a este fin. De hecho, el grupo de vivienda se lleva buena parte de la participación si se le suman los servicios de telefonía (3%), electricidad (2,9%) y acueducto/alcantarillado (2,5%), alcanzando un peso de 27%. Pero no es el único. En la categoría de transporte también hay gastos importantes. En promedio una persona que tiene vehículo debe destinar 4,4% de su salario al mantenimiento del mismo sin contar el combustible, que representa 2,9% adicional. Lo anterior es equivalente a las compras en carne de res, arroz, leche y pollo para un mes, siendo estos los principales productos del grupo de alimentos. En un ejercicio similar que hace el Banco de la República de acuerdo a los reporte de estabilidad financiera se concluye que los hogares colombianos invierten $22 de cada $100 de sus ingresos para pagar interés y deuda de capital en créditos al sistema financiero. Sin embargo, para créditos como el de vivienda la cuota mensual puede incluso exceder un salario mínimo de acuerdo con los simuladores de crédito de las entidades financieras por lo que no alcanzaría para más. Lo anterior ha llevado a muchos analistas a considerar las falencias en el cálculo, a pesar de que otros argumentan desequilibrios en la economía si el incremento llegara a ser superior. Por ejemplo, el presidente de la Confederación General de Trabajadores (CGT), Julio Roberto Gómez, cuestionó que el ingreso de una persona sea menor al costo de la canasta familiar, dado que esto no solo implica que queden necesidades insatisfechas, sino que también impide que se puedan destinar recursos al entretenimiento. Por su parte, el director de Fedesarrollo, Leonardo Villar, insistió en la necesidad de implementar el salario mínimo diferencial por regiones, dado que “cada ciudad tiene una productividad distinta” como una fórmula para reducir el desempleo y la informalidad. Esto se evidencia en el Índice de Precios al Consumidor, cuya variación fue de 0,37% para Cali en noviembre pero en ciudades como Neiva y Santa Marta se ubicaron por encima de 0,60%.