Curso La lectura en Educación Secundaria

Marzo’2009

Las tres metamorfosis Etapa:

Bachillerato

Nivel:

Segundo

Área:

Filosofía

Autora:

Virginia Lanchas Dueñas

ASÍ HABLÓ ZARATUSTRA FRIEDRICH NIETZSCHE

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“- Voy a señalaros las tres metamorfosis del espíritu: el espíritu, en camello; el camello, en león, y finalmente el león, en niño. Muchas cargas pesadas hay para el espíritu; para el espíritu paciente y vigoroso en quien domina el respeto. Su vigor reclama la carga pesada, la más pesada. El espíritu robusto pregunta: “¿Qué hay de más peso?”, y se arrodilla como el camello y quiere una buena carga. “¿Qué hay de más pesado? – pregunta el espíritu robusto- . Dilo, ¡oh héroe! Para que cargue con ello sobre mí y mi fuerza se alegre.” ¿Acaso esto no es humillarse para hacer sufrir a su orgullo, hacer brillar su locura para cambiar en amarga burla su sabiduría? O es esto: ¿desertar de una causa en el momento en que celebra su triunfo; ascender sobre las montañas elevadas para tentar al tentador? O bien es esto: ¿alimentarse de las bellotas y del heno del conocimiento y sufrir el hambre en el alma por amor a la verdad? O bien es esto: ¿estar enfermo y despedir a los que consuelan; unirse en amistad con sordos que jamás escuchan lo que tú quieres? O bien es esto: ¿sumergirse en el agua sucia, si es el agua de la verdad, no rechazar a las viscosas ranas y a los sapos llenos de pus? O bien es esto: ¿amar a quien nos desprecia y tender la mano al fantasma

cuando quiere asustarnos? Todas estas pesadas cargas echa

sobre sí el espíritu vigoroso; y así como sale corriendo el camello hacia el desierto apenas recibe su carga, él se apresura a llevar la suya. La segunda metamorfosis se cumple en el más solitario de los desiertos: aquí el espíritu se transforma en león, pretende conquistar la libertad y ser amo de su propio desierto. Busca aquí su último dueño; quiere ser el enemigo de este dueño como es el enemigo de su último dios: quiere luchar contra el dragón para alcanzar la victoria. ¿Cuál es el dragón a quien el espíritu no quiere seguir llamando ni dios ni amo? “Tú debes” se llama el gran dragón. Pero el espíritu del león dice “Yo quiero.” “Tú debes” acecha al borde del camino reluciente de oro bajo su caparazón de mil escamas y sobre cada escama luce en letras doradas: “¡Tú debes!” Brillan sobre estas escamas valores de mil años y el más poderoso de todos los dragones habla de esta guisa: “Todo lo que es valor brilla sobre mí.” Ya ha sido creado todo lo que es valor y yo soy quien representa todos los valores creados. ¡En verdad, no debe haber más “Yo quiero”! Así habló el dragón. Hermanos míos, ¿para qué necesita el espíritu al león? ¿No es suficiente el animal robusto que se abstiene y es respetuoso? Todavía no puede crear el león valores nuevos; pero sí tiene poder para hacerse libre para la nueva creación. Hacerse libre, oponer una divina negación, incluso el deber; tal es, hermanos míos, la tarea para la que el espíritu necesita al león. La más terrible conquista para un espíritu paciente y respetuoso es la de conquistar el derecho a crear nuevos valores. En verdad, éste es para él un acto feroz, el acto de un animal de presa. En otros tiempos amaba el “Tú debes”, como su más sagrado bien: ahora le es necesario encontrar la ilusión y lo

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arbitrario, incluso en este bien, el más sagrado para que realice a costa de su amor la conquista de la libertad: para semejante rapto es indispensable un león. Más, decidme hermanos míos, ¿qué puede hacer el niño que no pueda hacer el león? ¿Por qué es preciso que el león raptor se transforme en un niño? El niño es inocente y olvida; es una primavera y un juego, una rueda que gira sobre sí misma, un primer movimiento, una santa afirmación. ¡Oh hermanos míos! Una afirmación santa es necesaria para el juego divino de la creación. Quiere ahora el espíritu su propia voluntad; el que ha perdido el mundo, quiere ganar su propio mundo. Os he mostrado tres metamorfosis del espíritu: cómo el espíritu se hace camello, cómo el espíritu se hace león y, por fin, cómo el espíritu se hace niño. Así habló Zaratustra. Y en este tiempo moraba en la ciudad que se llamaba Vaca Multicolor. “

JUSTIFICACIÓN Ésta Unidad Didáctica está dirigida a los alumnos del área de Filosofía de 2º de Bachillerato (aunque también podría aplicarse en el área de Ética, ya que hace referencia a los valores establecidos). Está organizada para llevarla a cabo en el tercer bloque de contenidos de la programación, que viene a desarrollarse en torno a la Filosofía Contemporánea, y en concreto en el tema dedicado a la filosofía de Nietzsche. De hecho la Unidad se ejecutará una vez que haya sido explicada la filosofía de este autor, sino sería casi imposible el llevarla a cabo dado la dificultad de este tema en concreto. He seleccionado este texto porque me parece que el relato refleja perfectamente el núcleo de la filosofía de este Nietzsche, además al tener una representación lírica y profética se puede aprovechar muy bien el tipo de expresión oral. Como se puede apreciar, el texto refleja el discurso de un profeta intentando educar a unos oyentes, donde éste pretende que le escuchen utilizando expresiones del tipo “oh! hermanos míos”. Ésta actividad escolar está propuesta para motivar la lectura de las fuentes textuales y, por supuesto, para adquirir un conocimiento más profundo sobre el tema que nos ocupa. PROGRAMACIÓN · OBJETIVOS: - Extraer información del texto. - Comprender el texto. - Estimular la capacidad de síntesis. - Trabajar y mejorar la expresión oral.

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- Obtener una lectura placentera. - Fomentar el espíritu de colaboración entre los alumnos. - Distinguir los diferentes tipos de textos y sus estructuras formales. - Dominar la lectura y la escritura como forma de adquisición de nuevos conocimientos. - Dominar la lectura y la escritura como forma de aprendizaje. - Dominar la lectura y la escritura como forma de autoaprendizaje. - Dominar la lectura y la escritura como forma de enriquecimiento personal.

· CONTENIDOS: · CONCEPTOS: -

Introducción al texto.

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Las tres transformaciones por las que debe pasar el hombre.

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Espíritu como camello: portador de cargas pesadas= valores establecidos.

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Espíritu como león: conquista el derecho a crear nuevos valores= libertad.

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Espíritu como niño: creador de nuevos valores= autonomía de valores.

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Nueva forma de entender la realidad: la nueva idea de verdad, la voluntad de poder,

el eterno retorno y el superhombre. · PROCEDIMIENTOS: - Utilización y estrategias para la comprensión del texto: definiciones, esquemas, mapas conceptuales, síntesis… - Expresión oral y escrita del propio pensamiento. - Utilización crítica de la información obtenida. - Investigación de los diferentes problemas que pueda plantear el texto. - Realización de actividades, comentarios, redacciones y debates, utilizando como fuente el propio texto.

· ACTITUDES: - Desarrollo de un interés por la Filosofía en general, y en este caso, por la filosofía de Nietzsche en particular. - Apreciación crítica de las propuestas del texto. - Adopción de una postura crítica y personal sobre los conocimientos adquiridos tras haber leído el texto. - Valoración de la aportación de la filosofía nietzscheana en la Historia. - Valoración de la vigencia en el mundo actual de los problemas tratados en el texto. - Dominio de la terminología empleada en el texto, valorando su vigencia en el presente.

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- Valoración de la actitud vitalista del autor, que destaca la vida como la naturaleza última de toda realidad. - Valoración de la autonomía del ser humano como creador de sus propios valores.

ACTIVIDADES · ANTES DE LA LECTURA DEL TEXTO: - Presentación del texto. - Contextualización: Éste texto forma parte de la obra Así habló Zaratustra escrita por Friedrich Nietzsche entre 1883 y 1885. La obra describe el descenso desde las soledades alpinas al seno de la civilización de este personaje – profeta y legislador oriental del siglo V a. C. en el que el filósofo alemán ocultó su personalidad -, que después de una década de meditación decide extender entre los seres humanos el néctar de su sabiduría. Pero el pueblo, entretenido en otros quehaceres, se burla de las enseñanzas que no desea ni entiende. Zaratustra buscará entonces discípulos a los que aleccionar y a quienes elevar por encima de sus semejantes, mediocres unos y pusilánimes otros. Aún habrá de retirarse nuevamente a las montañas, volviendo para predicar contra los idealistas y a favor del superhombre. -

Análisis del término metáfora, ya que el autor juega constantemente con este recurso literario. Se pedirá la definición del término y algunos ejemplos de metáforas.

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Diálogos entre alumnos y profesor que sirvan para aclarar qué es un profeta, qué es el espíritu, qué son los valores establecidos…..etc.

· DURANTE LA LECTURA DEL TEXTO: -

Separar el texto en partes para una fácil comprensión.

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Subrayar lo que parezca más relevante.

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Leer en voz alta para resaltar el carácter lírico y profético que se le da al texto.

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Diferenciar perfectamente las tres partes principales del texto.

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Cerciorarse de que se trata de un texto cerrado, con un claro mensaje.

· DESPÚES DE LA LECTURA DEL TEXTO: -

Compartir con el grupo las dudas que hayan podido ir surgiendo durante la lectura.

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Realizar resumen.

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Extraer las ideas principales.

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Realizar un esquema de contenidos.

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Extraer conclusiones y compartirlas con el grupo.

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Realizar una valoración personal.

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Responder a las siguientes cuestiones:

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1. ¿qué significa el concepto de veneración? 2. ¿por qué el “Tu debes” es el “último dios”? 3. Analiza y comenta lo que representa el niño. 4. ¿crees que tiene relación el nombre de la ciudad con lo que representa el texto? ¿por qué? 5. ¿crees que este texto resume la filosofía de Nietzsche? Razona tu respuesta.

EVALUACIÓN La evaluación se realizará teniendo en cuenta los siguientes parámetros: -

Si los alumn@s han activado los conocimientos previos.

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Si los alumn@s han leído con atención.

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Si se ha comprendido el texto.

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Si se han seleccionado las ideas principales.

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Si la expresión oral ha sido fluida.

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Si la lectura ha sido capaz de suscitar reflexiones personales.

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Si los alumn@s han mostrado buena disposición a participar en las actividades y éstas han sido resueltas sin dificultad.

Bibliografía: -

Nietzsche, F.: Así habló Zaratustra. Madrid. Ed. Libsa (2001). Págs. 22, 23 y 24.

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www. cesdonbosco.com/ lectura.

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www. nietzscheana.com