Trabajo para el eje temático: Comunidad y Cultura
La sociedad globalizada y su impacto en la subjetividad. Dra.Celia Katz de Eskenazi
Los procesos intrapsíquicos
no pueden disociarse del contexto socio-
cultural y económico en el que se producen, por lo cual es necesario revaluar los factores sociales que ínterjuegan en el establecimiento de los vínculos humanos. Las transformaciones de carácter social a las que asistimos en este fin de milenio penetran hasta el núcleo mismo de la experiencia psíquica y reestructuran las transacciones inconscientes entre los seres humanos, actuando muchas veces como acontecimientos traumáticos.. La globalización es uno de los fenómenos sociales contemporáneos que más ha modificado la relación entre los países y concomitantemente ha influido en la conducta de sus habitantes. La soberanía de los estados ha sido desbaratada y radica actualmente en los mercados. Hoy, el mundo es una aldea global y en ella el poder de decisión pasa por los agentes transnacionales. A diferencia de los años de oro del racionalismo, que brindaban la euforia de imaginar un futuro gobernado por la razón y el conocimiento, en la sociedad contemporánea hay una disociación marcada entre el universo instrumental y el universo simbólico, de la economía y de la cultura. Hay un vacío social y político que dificulta
que el hombre contemporáneo se construya como
sujeto. Todo lo que sucede se debe siempre a la decisión de otro, a algo que pasa lejos de sí mismo y de su entorno. Como dice Alain Tourene “ somos a la vez de aquí y de todas partes, es decir de ninguna.” Los hechos se insertan en un escenario mundial unificado por la transmisión de imágenes e información en que lo real y lo simbólico se fusionan creando la ilusión
de un mundo sin fronteras que configura el orden global. La
revolución informática, los avances tecnológicos, la trasmisión de imágenes en tiempo real imponen ese orden, que resulta en relaciones asimétricas de poder, entre los
países, que también se expresa en las relaciones humanas y en los vínculos, atentando contra la identidad y favoreciendo la alienacion. Los intercambios íntersubjetivos están teñidos de estas situaciones
de
desigualdad y violencia Las pautas dictadas por los mercados internaciones generan incertidumbre, falta de proyectos y de credibilidad, y terminan por destruir no solo la esfera publica sino la capacidad de pensamiento y de simbolización., provocando derrumbes catastróficos en el psiquismo de los individuos La economía de mercado y la autonomía de la vida privada tienden a oponerse. En el siglo XXI estamos dominados por enfrentamientos entre los mercados globalizados y las identidades nacionales o culturales Vivimos una crisis profunda.,
una sensación de desencanto, percibiendo como a nuestro
alrededor se disocian por un lado, el universo de los mercados y de la tecnología y por el otro el espacio de nuestra identidad
Asistimos cada vez
mas a una separación entre una sociedad globalizada y deshumanizada y una conciencia de sí mismo que no solo se apoya en el deseo individual y sexual, sino en una cultura autoritaria y violenta. que termina exacerbando los nacionalismos y los fundamentalismos étnicos o religiosos y que en la esfera privada fomenta las actuaciones violentas y destructivas En esta polaridad entre el liberalismo económico y el nacionalismo cultural lo que queda desdibujado es el sujeto. Como dice Castoriadis “El sujeto no es el momento abstracto de la subjetividad filosófica, es el sujeto efectivo penetrado de parte a parte por el mundo y por los demás ” El proceso de subjetivacion se vincula con el encuentro con el semejante, sin el cual el acceso al yo es imposible, pero transcurre un tiempo, para que el individuo comprenda su alteridad. Ser diferente es el resultado de un trabajo, que el sujeto tendrá que asumir durante toda su vida. Con la globalización la ilusión de ser parte de un todo, adquiere visos de realidad y dificulta ese proceso de reconocimiento de la alteridad, indispensable para la adquisición de la propia identidad. Por otro lado el mundo económico representa una instancia cultural que favorece modelos de identificación y exclusión, instituyendo incluso, una transformación de valores que influye en la ética y la moral. No podemos perder de vista que la
economía y” lo económico”, son significaciones imaginarias sociales a partir de las cuales una multitud de hechos son socialmente representados y reflejados, y producen también transformaciones o reacciones en los individuos componentes de una sociedad determinada y en sus vínculos En una sociedad, como la actual, que tiende a organizarse a partir del consumo, el desarrollo de la personalidad sufre en su integración. Las representaciones de tiempo, espacio, la historia,,que son indispensables para la formación de la identidad personal, son reemplazadas por la realidad virtual, por la televisión ,que inmediatiza el tiempo y el espacio, favorece la aceleración y los mecanismos de evasión y desmentida. El sujeto esta amenazado en el mundo de hoy por esa sociedad globalizada, de consumo, que lo manipula o por el hedonismo negador fomentado desde los medios por los modelos sacralizados exitistas. Vivimos en la transición, hemos perdido los puntos de referencia que organizaban nuestro psiquismo y en medio de conflictos culturales y sociales, que provocan una profunda ruptura de nuestra personalidad. La desaparición de los roles, normas y valores en la sociedad y en la familia, desocializacion, al decir de A. Tourene, que caracteriza la época actual, reducen al individuo a comportamientos diversos que no favorecen la unidad de su personalidad sino una disociación entre la aceptación de la cultura global o la defensa frente a la misma a través de los integrismos o nacionalismos , es decir identidades privadas que se cierran peligrosamente sobre sí mismas. La sociedad actual favorece la negación de la frustración, la desmentida de la castración, el incremento de la demanda en detrimento del deseo, y la búsqueda de satisfacción inmediata con la consiguiente fragilidad de los vínculos que observamos en algunas patologías actuales.Estas
ya no provienen del peso represivo que ejercen las
leyes, las prohibiciones o los prejuicios, sino de la falta de identidad y de la dificultad de formación de un yo, Este desgarramiento identitario y cultural. impide el acceso a la verdadera identidad que proporciona autonomía y el reconocimiento de si mismo y de los demás. Vuelvo a citar a Castoriadis cuando dice” la verdad propia del sujeto es siempre participación en una verdad que le supera, que cría raíces y que lo arraiga finalmente en la sociedad y en la historia
incluso en el momento en que el sujeto realiza su autonomía”. Por otra parte,los fenómenos sociales que genera la economía de mercado (desocupación, inestabilidad , pauperización, inseguridad, perdida de identidad) actúan como
acontecimientos traumáticos con constitución del
psiquismo,
las consecuencias devastadoras sobre la
generando las patologías concomitantes
No
olvidemos que un acontecimiento es traumático porque es vivido como tal aun mas allá de su significación real
y que también es necesario tener en cuenta la
constitución imaginaria de la sociedad, de la época, por la cual el individuo le imputa una significación dada a un hecho, aun utilizando los símbolos conocidos. La sociedad actual posee no solo objetos y estructuras diferentes sino un magma de significaciones imaginarias distintas a las sociedades de fin de siglo y en eso influyen los cambios tecnológicos y económicos. Como psicoanalistas no podemos soslayar esos cambios y la velocidad con que se producen, lo cual requiere una capacidad de encontrar nuevos esquemas organizativos en nuestro psiquismo, adecuados para acoger nuevas representaciones, tanto de origen fáctico como imaginario, que brinden a su vez un sentimiento de constancia, para no caer en la sensación de caos y de falta de consistencia subjetiva, de la cual padecen nuestros pacientes. Así podremos ayudarlos a ligar con representaciones sus experiencias provocada por acontecimientos traumáticos, evitando los sentimientos y fantasías catastróficas o de aniquilación. El método psicoanalítico, la terapia psicoanalítica pueden contribuir a mejorar, ese malestar en la cultura, que provoca el sufrimiento y la infelicidad del ser humano. Nos planteamos este desafió lo cual no implica apartarnos de las conceptualizaciones clásicas freudianas ni dejar de lado el acceso transferencial al inconsciente. sino encontrar nuevos abordajes que permitan trabajar con esas patologías y acceder a los espacios faltos de representacion, provocados por los acontecimientos traumáticos Creemos que los psicoanalistas debemos reivindicar el lugar de nuestra ciencia mas allá de ser un objeto cultural dependiente de las condiciones de producción y recepción e insistir en su papel innovador, insoslayable para la
comprensión de los fenómenos inconscientes que ocurren en los espacios intra, inter, y transubjetivos . Todo esto nos plantea cuestiones éticas mas allá de la eficacia de nuestros tratamientos y nos confronta con una realidad que debemos encarar también Interdisciplinariamente, ya que el conflicto se
manifiesta en diferentes
niveles, respetando, por supuesto, nuestra especificidad y nuestro método de exploración del inconsciente, pero sin menospreciar las exigencias de
autonomía, y libertad del individuo amenazado, en su identidad, por la sociedad globalizada y el poder de los sistemas
Resumen
Los procesos intrapsíquicos no pueden disociarse del contexto sociocultural y económico en el que se
producen. Es necesario revaluar los factores
sociales que interjuegan en el establecimiento de los vínculos humanos. La globalización es uno de los fenómenos sociales contemporáneos que ha modificado la relación entre los países y concomitantemente ha influido en la conducta de sus habitantes. Los intercambios intersubjetivos están teñidos de situaciones de desigualdad y violencia acordes con las pautas que dictan los mercados internacionales generando incertidumbre, falta de proyectos y de credibilidad lo cual termina por destruir no solo la esfera publica sino la capacidad de pensar, simbolizar e interfiere en el proceso de subjetivacion. Esto
nos
confronta
con
una
realidad,
que
se
debe
abordar
interdisciplinariamente, manteniendo por supuesto nuestra especificidad y nuestro método de exploración del inconsciente.
Bibliografía.
N. Carlisky, C. K de Eskenazi, M. Kijak. Vivir sin proyecto Ed. Lumen 1998 N.Carlisky
C. K de Eskenazi. Resignación o Desafió. Un enfoque
transdisciplinario sobre la sociedad actual Ed. Lumen 2000. C. Castoriadis, La institución imaginaria de la sociedad Vol. 2 Tusquet 1989 A. SA 1997 A. Ferrer Hechos y ficciones de la globalización Fondo de Cultura Economica 1997
S. Freud El malestar en la cultura
Obras completas B. Nueva 1981
S. Lash Sociología del posmodernismo. Amorrortu 1990 A. Touraine Podremos vivir juntos? Fondo de Cultura Economica 1997