La cosecha siempre comienza con una semilla

Lunes 7 de mayo La cosecha siempre comienza con una semilla Lectura Bíblica: Isaías 32:15-20; Oseas 8:7, 10:12. Versículo para memorizar: “El Señor be...
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Lunes 7 de mayo La cosecha siempre comienza con una semilla Lectura Bíblica: Isaías 32:15-20; Oseas 8:7, 10:12. Versículo para memorizar: “El Señor bendecirá grandemente a su pueblo”. Isaías 32:20a (Nueva Traducción Viviente). Objetivos que el niño y preadolescente: Descubra: Debe preparar su corazón. Crea: Dios lo bendecirá grandemente. Ore: Debe sembrar con responsabilidad para cosechar. Introducción: Para que recibas todas las bendiciones que el Señor quiere darte, debes preparar tu tierra y sembrar tu semilla, y saber cuándo es tiempo de cosecharla. 1A-

La cosecha siempre comienza con una semilla. Siembra con responsabilidad, si no no habrá cosecha.

El agricultor antes de sembrar observa muy bien si el terreno es fértil; de acuerdo a lo que quiera cosechar se fija cuál es la estación del año que debe sembrar. Y también buscará la mejor semilla para tener una mejor cosecha. Deberá contar con todos los materiales necesarios para hacer la tarea que tanto ama. Y si algo no sabe, preguntará, investigará hasta obtener la respuesta a sus dudas. Es decir, si siembra con mucha responsabilidad y cuidado podrá cosechar, de lo contrario no habrá cosecha. Y tú, ¿estás sembrando? ¿Cómo? ¿Estás preparando tu terreno? ¿Tienes todos los materiales necesarios? ¿Cuáles serían? Recuerda, que para recibir todas las bendiciones que el Señor quiere darte debes comenzar a sembrar una buena semilla y ser responsable para que luego puedas disfrutar de la cosecha. “Prepárate para buscar a Dios, siembra la semilla de justicia y tendrás una cosecha de amor…” (Oseas 10:12). B-

Debes tener visión cuando siembres.

C-

Si quieres ver cosas que nunca has visto, haz cosas que nunca hiciste.

El sembrador siempre pero siempre, cree, confía que su siembra dará una muy buena cosecha. No duda, sin temor sus ojos están puestos en lo que hará cuando llegue el tiempo de la cosecha. De la misma manera debes hacer tú, no dudar si la semilla que siembras en los demás (la Palabra de Dios, el mensaje de salvación) dará o no frutos, porque Dios afirma: “Que su Palabra cuando es sembrada no vuelve vacía”. Visualiza a tu lado a todos aquellos que le has sembrado la semilla de la verdad. Es tiempo de hacer cosas que nunca has hecho, por ejemplo: Orar por tu maestros o profesores, amigos, compañeros y hablarles de Jesús. Llevarles un regalo sembrando la Palabra, por ejemplo puede ser el Aliento Cotidiano para los grandes y el Aliento Kids para tus compañeros; un versículo bíblico; la invitación para ir a la Célula, a una reunión, a un Impacto d Fe, etc. Deja de lado toda vergüenza e incredulidad, porque Dios te ha elegido como instrumento para extender Su reino aquí en la Tierra y Él es quien hará crecer la semilla en sus vidas, pero quien debe hablarles eres tú. También lo puedes hacer en tu barrio, cuando vas a jugar al fútbol con tus amigos, cuando te juntas en algún lugar. Pídele a Dios una manera. Lo mismo con tu familia (abuelos, primos, tíos, hermanos, papis). Ya verás cómo te sentirás y el ¡Señor te bendecirá grandemente! Siempre recogerás lo que siembras. Conclusión: Hoy debes hacer algo para que puedas recibir las cosas que Dios tiene y quiere darte después. Para Orar: Que siempre sembremos a favor del Reino de Dios. [Motiva a todos los asistentes de tu célula a llevar el Aliento Kids. Úsalo para las actividades]. Para Hacer: Niño: Querido líder, ayuda a los niños a que realicen una tarjeta, o varias donde ellos harán un dibujo o collage (usando distintos materiales). Luego con su ayuda, escribe en la misma: “EL SEÑOR BENDECIRÁ GRANDEMENTE TU VIDA”. Y que ellos decidan a quién se la entregarán. Explicarles que de esta manera están sembrando a favor del reino de Dios. Preadolescente: Responde: 1-

¿Qué tipo de semilla debes sembrar para obtener una buena cosecha?

2-

¿Qué significa „sembrar a favor del Reino de Dios‟?

3Según Oseas 10:12, si siembras justicia, ¿qué recogerás? ¿Por qué debes preparar la tierra de tu corazón y para qué?

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Lunes 14 de mayo Convierte las cosas pequeñas en grandes Lectura Bíblica: Génesis 1; San Marcos 4:30-33; 1 Corintios 3:6-9. Versículo para memorizar: “Yo planté la semilla en sus corazones, y Apolos la regó, pero fue Dios quien la hizo crecer”. 1 Corintios 3: 6 (Nueva Traducción Viviente). Objetivos que el niño y preadolescente: Descubra: Con lo que tiene puede hacer mucho. Crea: Dios es especialista de convertir las cosas pequeñas en grandes. Ore: Siempre pueda sembrar buenas semillas. Introducción: Naces y a medida que vas creciendo aprendes a darte vuelta, a sentarte, a gatear, a caminar, a correr, te desarrollas y te reproduces de acuerdo al tiempo. 1A-

Cada paso es muy importante Todo nace, crece, se desarrolla y se reproduce.

[Querido líder: lleva imágenes que muestren cuando se planta una semilla; otra, cuando va creciendo, desarrollándose y se reproduce. También pueden ser imágenes de criaturas, bebés, cómo van creciendo hasta que son grandes y forman una familia; o imágenes de animales, aves, etc.] ¡Chicos, cuán importante es nacer, crecer y desarrollarnos! Cada etapa es muy importante, ¿por qué será? Por ejemplo ¿quién hace crecer el bebé en la panza de una mamá? Y cuándo nace, se va desarrollando y crece… crece y crece, ¿quién lo permite? ¡Por supuesto que Dios! Lo mismo ocurre, como dice Pablo en 1Corintios 3:6: “Yo planté la semilla en sus corazones, y Apolos la regó, pero fue Dios quien la hizo crecer”. No importa quién planta o quien riega, ambos trabajan en equipo con un mismo propósito…¡¡Lo importante es que Dios hace crecer la semilla!! B- Dios creó el cielo, la tierra, las aguas, las plantas, los animales y al hombre en seis días y el séptimo descansó. Todos sabemos que el creador del mundo y de nuestras vidas es Dios. Él dijo y cada una de las cosas fueron creadas, el día, la noche, el sol, las estrellas, los planetas, la luna, el cielo, la tierra, todas las plantas, los animales, las aves, los peces, las montañas, el mar y cuando creó al hombre y a la mujer le dio esta bendición: “Quiero que se reproduzcan y se multipliquen; llenen la tierra y la gobiernen; les he entregado todas las plantas con semillas y árboles frutales para que se alimenten”. ¡Dios sí que supo y sabe convertir las cosas pequeñas en grandes! ¡¡¡Cómo lo ha hecho contigo!!! C-

¿Qué ves en una semilla de mostaza?

Es una de las semillas más pequeñas, casi ni se pueden ver. Existen unos collares con un globito de cristal dentro del cual se encuentra una semilla de mostaza. ¿Los has visto alguna vez? Algunas personas lo usan como símbolo de su fe en Dios. [Querido líder trata de conseguir semillas de mostaza. Lee San Marcos 4:30-33 y luego muéstrales las semillas. También que ellos puedan ver en qué se transforma esa semilla cuando crece (imagen de una planta muy grande con nidos de pájaros, como dice la Palabra de Dios).] Si nos ponemos a ver nunca hubiésemos imaginado que de una semilla tan, pero tan pequeña podría salir ¡semejante planta, tan grande! Aquí podemos entender que es Dios quien hace crecer la semilla y la transforma en un gran árbol porque es especialista en convertir las cosas pequeñas en grandes. Quizás te veas tan pequeño como esta semilla de mostaza, que nadie te tiene en cuenta, ni te registran, y que lo poco que tienes no te sirve para nada. Estás equivocado porque así como la semilla de mostaza se convierte en grande para dar muchos frutos, tú también estás creciendo y continuarás creciendo, el Señor producirá ese crecimiento y convertirá en grande esto que hoy es pequeño. Conclusión: Puedes ver en una semilla un fruto, un árbol o también un bosque, todo sale de la misma semilla. ¿Y tú que ves? Para Orar: Que tengamos luz para extender Su reino. Para Hacer: Niño: Querido líder: lleva semillas de mostaza, si es posible y que los niños la peguen en una hoja y luego que ellos dibujen en qué se transformaron esas semillas: un gran árbol donde los pájaros hacen sus nidos. También

pueden realizar todo el grupo un árbol grande con distintos materiales y en cada hoja del árbol pueden escribir sus nombres representando cada una de las semillas. Preadolescente: Responde y completa. *¿Dónde se siembra la semilla? * La semilla de mostaza es la _______________________. * El ______________ es una semilla muy pequeña. * ¿Con qué se compara el Reino de Dios? * Cuando crece la semilla se transforma en _____________________donde los ________________________________________.

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Lunes 21 de mayo Llegó el momento de sembrar Lectura Bíblica: San Mateo 13:1-23; San Marcos 4:1-9; San Lucas 8:4-8. Versículo para memorizar: “Pero el que recibió la semilla que cayó en buen terreno es el que oye la palabra y la entiende. Este sí produce una cosecha al treinta, al sesenta y hasta al ciento por uno”. San Mateo 13:23 (Nueva Versión Internacional). Objetivos que el niño y preadolescente: Descubra: Su corazón es buena tierra. Crea: Quien cambia los corazones es Jesús. Ore: Para producir siempre una buena cosecha. Introducción: ¿Sabías que Jesús enseñaba a través de parábolas (comparaciones) para mostrarnos una verdad espiritual? 1A-

Parábola del sembrador (San Mateo 13:1-9). En esta parábola hay: un sembrador, un campo, una clase de semilla y un terreno fértil.

Un sembrador: Jesús, nosotros. Un campo: El mundo, los corazones de las personas Una clase de semilla: La Palabra de Dios, el mensaje del Hijo de Dios. Un terreno fértil: Aquellos niños, preadolescentes, personas que reciben el mensaje, lo entienden y dan una buena cosecha. Jesús le enseñaba a la gente por medio de ejemplos y comparaciones. Cierto día les dijo: “Un campesino salió a sembrar y mientras sembraba, algunas semillas cayeron en el camino y llegaron las aves y se las comieron. Otra parte cayó entre las piedras, esa semilla brotó pronto y al no tener suficiente tierra y raíces, cuando salió el sol la quemó y se secó. Otra parte de la semilla cayó entre espinos y los espinos crecieron y la ahogaron. Pero otra parte cayó en buena tierra, y dio buena cosecha que rindió cien, sesenta y treinta veces más de lo que se había sembrado”. [Materiales que puede llevar para mostrarles a los chicos: Por ejemplo una piedra y una esponja, que se pueda recortar en forma de corazón. Un recipiente plástico con agua que tenga gatillo. Líder trata de mojar la piedra apretando el gatillo mostrar que el agua se resbala, así ocurre con aquellos que les hablamos de Jesús y no aceptan]. 2-

Propósito de las parábolas San Mateo 13: 10-17

Como los discípulos no entendían por qué Jesús les hablaba a la gente por medio de parábolas, le preguntaron y Él les respondió: “Que a ellos les daría a conocer los secretos del reino de Dios, pero no a los demás y les explicaba que mucha gente a pesar que tenían oídos, parecían sordos, no entendían nada; tenían ojos pero no podían ver y sus corazones estaban totalmente cerrados. Pero ustedes mis discípulos, Dios los ha bendecido, porque ven y escuchan mi mensaje”. ¡Qué bueno… chicos! Hoy el Señor te dice que “Oigas, veas, escuches y pongas por obra la verdad que hay en la Palabra de Dios”. 3-

Jesús explica la parábola del sembrador.

Las semillas que cayeron junto al camino, son los que oyen el mensaje del Reino y no lo entienden; viene el enemigo y les quita el mensaje sembrado en su corazón. Las semillas que cayeron entre piedras, son los que oyen el mensaje y lo reciben con alegría, pero como no tienen raíces, cuando llegan los problemas o se les burlan (compañeros, amigos, hermanos, primos, etc.) por ser obedientes a Dios, fallan, se olvidan del mensaje. Las semillas que cayeron entre espinos, son los que también oyen el mensaje, pero no dejan que el mensaje cambie sus vidas. Solo piensan en lo que necesitan y en el dinero (ropa, calzados, estar a la moda, la mejor computadora, el último celular, etc).

Pero las semillas que cayeron en buena tierra, son los que oyen el mensaje y lo entienden. Estos sí cambian sus vidas y hacen lo bueno, dan una buena cosecha como las semillas que rindieron el cien, el sesenta y el treinta por ciento más. Esta parábola nos enseña qué importante es sembrar la Palabra en buena tierra. Si no prestamos atención en la Palabra, vendrá el enemigo y la arrebatará de nuestro corazón. Si no echamos raíces en la Palabra, seremos como la semilla que cayó entre piedras. Y si para nosotros hay cosas que son más importantes que las cosas del Reino de Dios, la Palabra no producirá buenos frutos en nosotros. “Pero el que recibió la semilla que cayó en buen terreno es el que oye la palabra y la entiende. Este sí produce una cosecha al treinta, al sesenta y hasta al ciento por uno”. San Mateo 13:23. ¡Y ese eres tú! [Sugerencias: Materiales que puede llevar para mostrarles a los chicos: Por ejemplo, una piedra y una esponja que se pueda recortar en forma de corazón. Un recipiente plástico con agua que tenga gatillo. Líder: trata de mojar la piedra apretando el gatillo y mostrar que el agua se resbala, no penetra en la piedra; en cambio sí en la esponja, porque absorbe toda el agua. La piedra se parece a un corazón endurecido, donde la Palabra de Dios no penetra; en vez la esponja simboliza un corazón blando dispuesto a recibir el mensaje de salvación]. Conclusión: La semilla es la Palabra de Dios. La diferencia en el resultado no está en la semilla, sino en los distintos tipos de terrenos. ¿Cuál es la calidad de tu terreno? Para Orar: Ser sensibles a la voz del Señor, para preparar el terreno de nuestro corazón. Para Hacer: Niño: Es momento de sembrar. (Imagen 3). Preadolescente: Verdadero o falso. 1-

Hay distintos tipo de semillas.

2-

Las semillas que cayeron entre los espinos, son las personas que dieron muchos frutos.

3-

La semilla es la Palabra de Dios.

4Las semillas que cayeron entre las piedras son las personas que reciben la Palabra con gozo, pero no tienen raíces. 5-

Las semillas que cayeron en buena tierra son las personas que dieron fruto al 30, 60 y 100 %.

6Las semillas que cayeron en el camino son las personas que el diablo les quita el mensaje sembrado en su corazón.

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Lunes 28 de mayo El trigo y la cizaña Lectura Bíblica: San Mateo 13: 24-30, 36-43, 15:13-14; Apocalipsis 20: 15. Versículo para memorizar: “Y conocerán la verdad y la verdad los hará libres”. San Juan 8: 32 (Traducción Lenguaje Actual). Objetivos que el niño y preadolescente: Descubra: Que no debe dejarse engañar por el enemigo. Crea: Cuenta con la bendición de Dios. Ore: Que la verdad lo haga libre. Introducción: ¡Debemos salir y sembrar la semilla!, aunque el campo parezca fértil o no, o quizás se encuentre muy seco… 1-

En la parábola de la cizaña hay:

A- Un dueño, un campo, un objeto, la cizaña (hierba mala sembrada entre el trigo por el enemigo), tiempo de la cosecha. Jesús se refirió a otra parábola: “El reino de los cielos es semejante a un hombre que sembró la buena semilla en su campo; pero mientras dormían, llegó un enemigo, sembró mala hierba entre el trigo y se fue. Cuando creció la hierba, apareció también la cizaña (la mala hierba). Entonces los trabajadores fueron a decirle al dueño: “Señor ¿no sembraste buena semilla en tu campo; de donde salió la cizaña? Él les dijo: “El enemigo ha hecho esto”. Los siervos le preguntaron ¿quiere que vayamos y la arranquemos? “No porque al arrancar la mala hierba también pueden arrancar el trigo. Lo mejor es dejarlos crecer juntos, hasta la cosecha y luego mandaré a que recojan primero la mala hierba y la aten en manojos, y después que guarden el trigo en mi granero”. Jesús tuvo que explicar dicha parábola a sus discípulos. “El que siembra la buena semilla es el Hijo del Hombre (dueño) y el campo es el mundo. La buena semilla son los hijos del reino, y la cizaña son los hijos del maligno. Quien sembró la mala hierba es el diablo. La cosecha es el fin del mundo (cuando Jesús venga a buscarnos), y los que recogen la cosecha son los ángeles. Como la cizaña se recoge y se echa al fuego para quemarse, así ocurrirá en el fin del mundo. Dios mandará a sus ángeles a recoger de su reino a todos los que hacen pecar a otros y a los que practican el mal y los echarán en el horno encendido, allí será el llanto y la desesperación. Pero los justos resplandecerán como el sol en el reino de su Padre; los que tienen oídos oigan”. Tú eres un hijo/a del reino de la luz, es por ello que siempre debes obedecer a tu Padre Dios. Deja crecer la buena semilla que ha sido plantada en tu corazón, no dándole lugar a la cizaña, a malas hierbas que contaminan, envenenan y destruyen la buena semilla. [Preguntarles a los chicos si han dado lugar en su corazón que crecieran malas hierbas ¿cuáles? Orar luego para que sean arrancadas de su corazón]. 2A-

Para debilitar la cizaña: Sembrar muchas y buenas semillas.

¡Qué maravilloso es poder apreciar las flores de muchos colores, los árboles frutales con ricos y abundantes frutos! Pero para que esto ocurra cuando se siembran las semillas alguien debe primero preparar la tierra, quitando toda piedra, arrancar las malas hierbas; luego, regarla, ir viendo cómo crecen, tratarlas con mucho cuidado y amor, que sean guardadas del sol para que no las queme, del frío polar, etc. Lo mismo ocurre con tu vida para que la cizaña se debilite y desaparezca debes sembrar muy buenas semillas, ¿y sabes cómo? Teniendo buenas actitudes, no contestando mal, dando siempre lo mejor, ayudando, siendo agradecido en todo, siendo el mejor compañero y alumno, el mejor hijo, leyendo La Palabra todos los días y orar todos los días para hacer siempre Su voluntad y de esa manera podrás ser luz sembrando abundantes semillas donde quiera que vayas. B-

La bendición tiene más poder que lo malo.

Tú ya conoces la verdad, la Palabra viva de Dios, quien te ha hecho completamente libre, ya no puedes darle lugar al enemigo en tu vida, ni dejarte seducir por él porque eres un heredero del Reino y como tal debes comportarte. Pues las cadenas que te ataban del enemigo fueron destruidas por la sangre de Jesús. La bendición del Padre está sobre tu vida, cuentas con Su favor. ¡Atención!: LOS JUSTOS BRILLARÁN COMO EL SOL EN EL REINO DE SU PADRE. Conclusión: Recuerda: “Conocerás la verdad y la verdad te hará libre”. No te dejes engañar por el enemigo. Para Orar: Que Dios abra tus ojos para entender lo verdadero.

Para Hacer: Niño: El trigo y la cizaña. (Imagen 4). Preadolescente: Traza una línea, según corresponda. El que siembra la buena semilla es el Las buenas semillas El campo Las malas semillas (cizaña) Quien siembra la mala hierba

es el diablo son los que obedecen al diablo Hijo del hombre son los que obedecen a Dios es el mundo