APARATO LOCOMOTOR. Huesos

APARATO LOCOMOTOR El aparato locomotor permite al animal interactuar con el mundo que le rodea. Se compone de una serie de estructuras que participan,...
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APARATO LOCOMOTOR El aparato locomotor permite al animal interactuar con el mundo que le rodea. Se compone de una serie de estructuras que participan, de forma directa o indirecta, en la realización del movimiento y en el mantenimiento de las distintas posturas típicas de cada animal. -Huesos -Músculos -Articulaciones -Tendones, ligamentos…

Huesos El esqueleto del perro, compuesto por diferentes huesos, puede ser dividido en tres partes: la cabeza, el cuerpo y las extremidades. Los huesos más importantes de la cabeza son el occipital, con una cresta llamada con el mismo nombre que dependiendo de la raza está más pronunciada o menos; el frontal, donde se localizan las fosas nasales; el parietal y el cigomático, donde podemos destacar las arcadas cigomáticas, que es la parte más ancha del cráneo y dónde se insertan los músculos del mismo nombre, estos músculos están muy desarrollados en las razas de presa. La columna vertebral, está constituida por siete vértebras cervicales, trece dorsales, siete lumbares, tres sacras y veinte o veintidós coccígeas. Las vértebras sacras junto con la pelvis forman la cadera. Esta región es muy importante ya que junto con los músculos de la zona conforman la grupa y es aquí donde se produce la fuerza que va a dar lugar al movimiento. En cuanto a las extremidades, se diferencian dos subgrupos, las anteriores y las posteriores. Estas son las que permiten las flexiones y las extensiones junto con los músculos y los tendones. Como vemos, una buena armonía entre las diferentes partes del cuerpo, huesos, músculos, tendones y articulaciones van a dar un buen movimiento y una buena conformación morfológica en nuestros perros: Todas las razas son anatómicamente muy parecidas. El esqueleto de los perros consta aproximadamente de 321 huesos, con ciertas variaciones que dependen del número de huesos de la cola y de la presencia o no de un dedo vestigial. La columna vertebral cuenta

con 7 vértebras cervicales, 13 torácicas, a las que se unen 13 pares de costillas, 7 lumbares y 3 sacras. Las patas traseras tienen cuatro dedos y las delanteras cuatro o cinco. La mayoría de los cachorros presentan 28 dientes de leche que luego se sustituyen por 42 dientes permanentes cuando cumplen seis meses.

Huesos largos Está provisto de cavidad medular y son más grandes en una dimensión que en la otra. Funcionan como palanca, sirviendo de sostén, para la locomoción y para ejercer presión.

Huesos cortos Tienen forma más o menos cúbica y todas sus dimensiones iguales. No contienen cavidad medular pero la sustancia esponjosa está llena de espacio medular. Su función es amortiguar impactos, se encuentran en las articulaciones complejas, carpo/metacarpo.

Huesos planos Tienen poco grosor en dos dimensiones. Están compuestos por dos placas de sustancia compacta las cuales contienen la capa esponjosa. Carecen de cavidad medular. Su función es la de actuar como protección de los órganos más importantes tales como el encéfalo, corazón, pulmón,… También sirven para la inserción a músculos poderosos: escápula, costillas, coxal.

Huesos sesamoideos Huesos de pequeño tamaño que se encuentran debajo de algunos tendones. Pueden cambiar el ángulo de tracción de los músculos, reduciendo asi la fricción en tendones largos. Esto constituye una ventaja mecánica que facilita el movimiento.

Huesos sinusales Contienen espacios aéreos en su interior, se encuentran principalmente en la cavidad craneana.

Huesos irregulares Son huesos impares, están situados en la línea media del animal. Su función es diversa. Sirven de protección, de sostén y de inserción muscular. Son las vértebras, huesos del cráneo…

Células óseas -OSTEOCITOS: Es la unidad estructural del hueso. Se encuentran en pequeñas cavidades del hueso llamadas lagunas, conectadas entre sí por las canículas. -OSTEOBLASTOS: Son células precursoras del hueso que dividen y dan lugar a osteocitos (que ya no tienen capacidad de dividirse). Forman una reserva que es un estato osteógeno (capaz de producir huesos) del periostio y del endosito. Capas que recubren el hueso, tanto en el interior como en el exterior respectivamente. Esta células de reserva se dividen (entran en actividad) cuando el hueso se fractura, o para aumenta el tamaño del hueso (durante el crecimiento). -OSTEOCLASTOS: Algunos osteoblastos que no se han convertido en osteocitos, se diferencian en osteoclastos, que son células encargadas de degradar el hueso a través de la reabsorción del hueso mediante enzimas proteolíticos, ácido cítrico y ácido láctico. Estas sustancias disuelven la materia mineral del hueso, con el fin de movilizar calcio hacia la sangre.

Regulación del metabolismo óseo Intervienen directamente las hormonas y vitaminas como: -Hormonas paratifoidea y calcitonina. -Vitamina D -Hormona de crecimiento y tiroxina -Estrógenos -Testosterona -Vitaminas A y C

Hormonas paratifoidea La hormona Paratiroidea o Parathormona (PTH), es una hormona peptídica producida por las células de las glándulas Paratiroideas. El principal estímulo para su secreción es la disminución de la calcemia (concentración sanguínea de Calcio). Su principal función es la de estimular al Osteoclasto, célula encargada de la resorción ósea, esto es liberación de calcio del hueso aumentando la concentración del mismo en sangre. A nivel del intestino estimula la síntesis de una proteína, la calbindina, que aumenta el transporte de calcio desde el intestino hacia la sangre. A nivel de los túbulos renales, no solo estimula la disminución de la excreción urinaria de Calcio sino que también aumenta la de fosfato. Otro efecto a nivel renal es la estimulación de la enzima 1 - a - hidroxilasa que convierte al 25 hidroxicolecalciferol en su forma activa, la Vitamina D o Calcitriol cuyos efectos también son hipercalcemiantes.

Calcitonina

La calcitonina es una hormona peptídica que interviene en el metabolismo del calcio y del fósforo. Específicamente, reduce los niveles sanguíneos de calcio de tres formas: disminuye la absorción intestinal, incrementa el almacenamiento de Ca por los huesos e incrementa excreción de calcio a través de los riñones. La mayor parte de la calcitonina se produce en la glándula tiroides.

Vitamina D La vitamina D es un heterolípido insaponificable del grupo de los esteroides. Se le llama también vitamina del raquitismo ya que su déficit provoca esta enfermedad. La vitamina D es la encargada de regular el paso de calcio (Ca2+) a los huesos. Por ello si la vitamina D falta, este paso no se produce y los huesos empiezan a debilitarse y a curvarse produciéndose malformaciones irreversibles.

Hormona de crecimiento y tiroxina Imprescindible para el crecimiento y la maduración de los huesos. Su carencia produce el enanismo.

Estrógenos Son hormonas esenciales para el proceso de osificación y mantenimiento de los huesos. Una disminución de estas hormonas, ya sea por castración o por patología ovárica, predispone a una descalcificación del hueso.

Testosterona Hormona masculina segregada por los testículos. Favorecen el crecimiento del hueso.

Vitamina A y C Favorecen el crecimiento del hueso.

Proceso de osificación Desde que comienza el desarrollo fetal y hasta los tres años de edad las membranas y los cartílagos se convierten en huesos por medio del desarrollo de la osificación. La osificación, mediante la cual el cartílago se transforma paulatinamente en hueso, empieza en la epífisis. Se inicia cuando el pericondrio es penetrado por los vasos sanguíneos. El cartílago continúa creciendo en longitud y espesor desde el centro primario de osificación hasta la epífisis.

Desde el momento del nacimiento los huesos largos tienen una diáfisis ósea y dos epífisis cartilaginosas. Poco después del nacimiento aparecen centros de osificación secundaria en la epífisis, paulatinamente las epífisis empiezan a osificarse. Estos cartílagos de conjunción permiten que los huesos se alarguen conforme se crece. El perro, en las razas medianas, termina el crecimiento en longitud aproximadamente a los diez meses.

El ejercicio, junto con la dieta correcta, es básico para conseguir un crecimiento óseo adecuado. Aunque tiene poca o ninguna influencia sobre el alargamiento, incrementa la anchura y densidad del hueso, depositando más minerales en la matriz ósea, lo cual tiene una gran influencia en el fortalecimiento del sistema óseo.

Fracturas óseas Una fractura es una interrupción patológica de la continuidad del tejido óseo debido a traumatismos o enfermedades. Tipos: -Fractura sencilla La piel sobre el foco de lesión no sufre ningún daño en el accidente. -Fractura compuesta El foco de la fractura comunica con el exterior por la lesión de la piel: -Fractura en tallo verde Es un tipo de fractura completa por un lado del hueso, pero por el otro sólo queda doblado o intacto. -Fractura epifisaria Rotura de la unión de una epífisis con su diáfisis suele producirse en animales jóvenes. -Fractura conminuta Forma numerosos fragmentos como consecuencia de un hueso aplastado o triturado.

Tratamiento de las fracturas Debe efectuarse una inmovilización completa para que el hueso no quede sodificado en una postura aberrante. Se tiene que comprobar si existe o no infección y si sufre lesiones el tejido circundante. Gracias a esta inmovilización se favorece la formación de un coágulo al que se le van sumando células conectivas. Se forma un tejido de granulación o de cicatrización que gracias a la presencia de nuevos vasos sanguíneos, promueve la multiplicación de osteoblastos de la superficie y del interior del hueso formándose un tejido osteoide llamado callo óseo. El callo óseo llena el espacio roto, formando una unión que asegura la movilidad de de los segmentos. Éste se mineraliza (depósito de sales de calcio) y el hueso puede ser curado. Los osteoclastos se encargan de eliminar las partes sobrantes del callo óseo modelando la fractura y dejándola muy parecida al hueso original. La curación de fracturas es más rápida en animales jóvenes sanos:

La médula ósea Tejido que ocupa la cavidad medular de los huesos largos, son los intersticios entre trabéculas de tejido óseo esponjoso: -La médula ósea roja Se encuentra únicamente en animales jóvenes. En los adultos se encuentra en el esternón, costillas, hueso de la base del cráneo, cuerpos vertebrales y en algunos huesos planos o cortos. Su función es la hematopoyesis o proceso de fabricación de las células sanguíneas. -La médula ósea amarilla Es una agresión de la médula ósea roja que sufre un proceso degenerativo y se transforma en tejido adiposo. Actúa como reserva de grasa. -La médula ósea gris Es una Médula ósea adulta desprovista de grasa. Suele estar en los huesos de la cara y bóveda craneana. Se encuentra, también, en cualquier hueso de animales bastante mayores o extremadamente delgados.

Terminología ósea -Eminencias: Superficie articular de forma cilíndrica uy ovoide. (Cóndilos femorales) -Cabeza: Superficie articular de forma esférica ( Cabeza del fémur) -Cotiloidea: Cavidad articular de forma esférica -Glenoidea: Cavidad articular de forma ovoidal. -Faceta: Superficie articular de pequeño tamaño y menos plana

Partes del hueso donde se insertan músculos y/o ligamentos: -Apófisis: término general aplicado a cualquier relieve óseo. -Tuberosidad: Relieve óseo de tamaño considerable. -Tubérculo: relieve óseo de menor tamaño.

Partes del hueso en contacto con otros órganos que dejan su huellan en la anatomía ósea: -Surco: Surco longitudinal dorsal. -Canal: Canal metacarpiano -Impresión: impresión vascular del fémur. -Agujero: Agujero nutricio

Los músculos Todas las células vivientes son capaces de algún grado de movimiento, pero esta habilidad se encuentra altamente desarrollada en los músculos. El tejido muscular comprende el 40% del peso del cuerpo humano. Los músculos consisten en "hilos", o fibras musculares, apoyadas en tejido conectivo, el cual actúa mediante la contracción de dichas fibras: las fibras pueden acortarse hasta 2/3 de su longitud en reposo. Hay dos clases de músculos:

lisos y estriados. Los lisos o "involuntarios" se encuentran en las paredes de todos los órganos cavernosos y tubos del cuerpo, tales como los vasos sanguíneos e intestinos. Éstos reaccionan lentamente al estímulo del sistema nervioso autónomo. Los músculos estriados, o "voluntarios" del cuerpo mayormente se unen a los huesos para mover el esqueleto, y bajo el microscopio sus fibras tienen una apariencia en bandas cruzadas. Los músculos estriados son capaces de rápidas contracciones. Las paredes del corazón están conformadas de un tipo especial de fibras musculares estriadas llamadas músculo cardíaco. Los músculos varían enormemente en estructura y función en diferentes órganos y animales: algunos invertebrados tienen sólo músculos lisos, mientras que todos los artrópodos sólo poseen músculos estriados.

Estructura y Función Todos los músculos tienen básicamente la misma estructura, desde los pequeños músculos que mueven y estabilizan los huesillos del oído medio hasta el enorme cuadriceps femoral ubicado al frente de la pierna. Cada músculo tiene un enganche en sus dos extremos, llamados origen e inserción, y la parte carnosa contráctil, el vientre muscular. El origen y la inserción usualmente están hechos de tendones no contráctiles, no obstante la disposición muscular y los enganches varían con las necesidades mecánicas en cada articulación específica. Por ejemplo, muchos músculos en los miembros poseen paquetes de fibras musculares dispuestas como las barbas de una pluma y salen de los bordes de los tendones, llamados arquitectura peniforme. Esta disposición incrementa considerablemente la fuerza, pero reduce la distancia a través del cual la inserción puede ser movida. Al tener muchos paquetes de fibras en el vientre muscular se da una fuerza enorme, mientras que paquetes más largos otorgan un amplio rango de movimiento.

Tipos de músculos Músculo liso o visceral. El músculo visceral o involuntario está compuesto de células con forma de huso con un núcleo central, que carecen de estrías transversales aunque muestran débiles estrías longitudinales. El estímulo para la contracción de los músculos lisos está mediado por el sistema nervioso vegetativo. El músculo liso se localiza en la piel, órganos internos, aparato reproductor, grandes vasos sanguíneos y aparato excretor. Las células del músculo liso tienen forma de huso y son mononucleadas. La contracción del músculo liso es bastante prolongada y menos rápida que la del músculo estriado esquelético. Las fibras del músculo liso se disponen en forma de láminas preparadas en dos capas, una externa longitudinal y otra interna circular, que se pueden contraer alternativamente. Esta capacidad de contracción alternativa provoca variaciones en el diámetro de los vasos sanguíneos y regula el paso de fluidos, ya que los vasos se constriñen cuando las fibras del músculo se contraen; de esta manera se regulan la presión

y la velocidad de flujo. En otros casos, como ocurre en algunas partes del tracto digestivo, esta contracción alterna se utiliza para impulsar materiales poco fluidos, como el alimento. Músculo cardíaco. Este tipo de tejido muscular forma la mayor parte del corazón de los vertebrados. Las células presentan estriaciones longitudinales y transversales imperfectas y difieren del músculo esquelético sobre todo en la posición central de su núcleo y en la ramificación e interconexión de las fibras. El músculo cardiaco carece de control voluntario. Está inervado por el sistema nervioso vegetativo, aunque los impulsos procedentes de él sólo aumentan o disminuyen su actividad sin ser responsables de la contracción rítmica característica del miocardio vivo. El mecanismo de la contracción cardiaca se basa en la generación y transmisión automática de impulsos. Músculo estriado o esquelético Los músculos estriados están formados esencialmente por células denominadas fibras musculares estriadas, que se agrupan en fascículos cuyo diámetro varía en función de su localización (las fibras periféricas son más finas), su longitud (cuanto más larga es la fibra más gruesa es) y su potencia (cuanto más potente es un músculo mayor es su diámetro Cada una de estas células posee dos regiones especializadas: una zona de unión miotendinosa correspondiente a una prolongación de los fascículos en fibras de colágeno, una parte de las cuales constituirá el tendón, y una zona de unión neuromuscular que permite la transformación de la información nerviosa, en contracción muscular Durante esta contracción, la célula disminuye su longitud en un 20 a un 50 %, utilizando la energía aportada por los vasos sanguíneos. El músculo está estrechamente está relacionado, por un lado, con el sistema nervioso y por el otro, con el sistema cardiorrespiratorio Por otra parte, según el esfuerzo solicitado, intervienen diferentes tipos de fibras musculares. Las "fibras I", de contracción lenta, son las más adaptadas a los esfuerzos de resistencia; grandes consumidoras de oxígeno, producen poco lactato, siendo los lípidos su principal sustrato. Las "fibras II", de contracción rápida, intervienen durante los esfuerzos de gran intensidad pero duración corta. Las "fibras II a", utilizan la energía obtenida a partir de la degradación de la glucosa por vía aerobia e intervienen en la carrera. Las "fibras II b" obtienen energía por vía anaerobia, con una producción elevada de ácido láctico y calor, siendo utilizadas sobre todo, en los "sprints" (aceleraciones) brevesflexores (diminución del ángulo formado por los rayos óseos asociados); extensores (aumento de este ángulo); abductores (acercan el miembro al cuerpo); aductores (aleja el miembro del cuerpo). A cada músculo le corresponde un antagonista. Los músculos flexores se encuentran por lo general en la cara palmar o plantar del miembro mientras que los músculos extensores son dorsales. La parte superior del miembro está compuesta esencialmente por masas

musculares, pero a medida que se desciende hacia los dedos los músculos se van reduciendo de tamaño, para dar lugar a los tendones.

Tejido conjuntivo Tiene dos componentes. Una trama conjuntiva que mantiene unidas las fibras musculares entre sí y los tendones que son las partes terminales del músculo y mediante el cual el músculo se inserta en los huesos: .Endomisio: Rodea directamente a cada célula muscular y las mantiene unidas entre sí. -Perimisio: rodea a un número variable de células musculares y constituye un fascículo muscular. -Epimisio: Rodea a todo el músculo acompañándolo en su contracción.

Tendones El tendón es una parte del músculo estriado, de color blanco perlado, de consistencia fuerte y no contráctil, constituido por fibras de tejido conectivo, que se agrupan en fascículos. Los tendones están formados por tejido conectivo denso, los haces de fibras que lo forman se encuentran entrelazados por tejido conectivo denso irregular no modelado recibiendo el nombre de peri tendón. Están ubicados a nivel de los músculos y tiene la función de hacer de nexo entre el músculo y el hueso. Pueden unir también los músculos a estructuras blandas como el globo ocular. Tienen la función de insertar al músculo en el hueso o a la fascia y trasmitirles la fuerza de la contracción muscular para producir un movimiento.

Articulaciones Es la unión de dos o más huesos entre sí. Según el tipo de tejido que existe entre los huesos que la forman diferenciamos 3 tipos de articulaciones: -Articulaciones fibrosas. La mayoría de las articulaciones fibrosas están en el cráneo y se conocen como suturas. Las estrechas bandas de tejido fibroso que delinean los márgenes de los huesos y los unen representan restos de una membrana continua original en la que habían aparecido centros de osificación aparte. Las suturas cumplen un papel importante en el animal joven porque permiten que el cráneo crezca mediante extensión de los huesos individuales en sus márgenes mientras la proliferación de la membrana continúa. Las suturas desaparecen poco a poco cuando la osificación se extiende a través de la membrana una vez que ésta ha dejado de crecer. Este proceso es lento y desparejo y no se completa ni siquiera en la senectud. La modificación gradual de las suturas se utiliza en antropología y medicina forense como guía, aunque no muy segura, para juzgar la edad del

individuo. Si bien no se requiere ni puede ocurrir movimiento entre los huesos del cráneo del adulto, las suturas más anchas del cráneo fetal permiten que se produzca cierta deformación pasiva, de utilidad durante el parto en ciertas especies, incluso la humana.

Las otras articulaciones fibrosas se conocen como sindesmosis. En ellas las áreas coincidentes de dos huesos están unidas por ligamentos de tejido conectivo. En algunas sindesmosis existen áreas de hueso relativamente anchas unidas por ligamentos cortos y es inevitable que el movimiento sea muy limitado; son ejemplos las articulaciones entre los huesos mayores y menores del metacarpo del caballo. En otras los ligamentos son más largos y sus inserciones son más estrechas, de manera que puede ocurrir un movimiento más apreciable; un ejemplo es la articulación entre las diáfisis del radio y una en el antebrazo del perro. La inserción del diente en el hueso de su alveolo podría incluirse entre las articulaciones fibrosas con el nombre de gonfosis. -Articulaciones cartilaginosas La mayoría de las articulaciones cartilaginosas se conocen como sincondrosis. Comprenden las articulaciones entre las epífisis y las diáfisis de los huesos largos juveniles y las respectivas articulaciones de la base del cráneo. La mayoría son temporarias y desaparecen una vez que cesa el crecimiento, en que el cartílago es sustituido por hueso. Las pocas sincondrosis permanentes comprenden la articulación entre el cráneo y el aparato hioideo, que permite que ocurra un movimiento apreciable en algunas especies. En la sínfisis, que es más complicada, los huesos articulados son divididos por una sucesión de tejidos; por lo general, existe cartílago aplicado contra los huesos y fibrocartílago o tejido fibroso en el medio. Esta categoría comprende las articulaciones situadas ente las mitades simétricas de la mandíbula, de la cintura pelviana y las articulaciones comprendidas entre los cuerpos de vértebras sucesivas. Cada una de estas articulaciones tiene sus propios rasgos, en ocasiones específicos.

-Articulaciones sinoviales En las articulaciones sinoviales los huesos articulados se hallan separados entre sí por un espacio ocupado por líquido, la cavidad articular. Los límites de este espacio son completados por un manguito de delicado tejido conectivo, la membrana sinovial. Esta membrana se inserta en la periferia de las superficies articulares, que están cubiertas por finas capas de cartílago. Aunque no existen otros rasgos esenciales, en la mayoría de las articulaciones sinoviales la membrana sinovial está reforzada por fuera por una capa fibrosa, en tanto que existen bandas fibrosas adicionales (ligamentos) situadas estratégicamente para unir los huesos y restringir el movimiento en las direcciones y grados debidos. La superficie articular se halla tapizada por un cartílago articular que suele ser hialino, aunque en algunos sitios se halla sustituido por fibrocartílago e incluso tejido fibroso

denso. El cartílago tiene más o menos un milímetro de espesor en las articulaciones del perro. Este cartílago acentúa la curvatura del hueso subyacente porque es más gruesa en el centro de las superficies convexas y en la periferia de las superficies cóncavas. Es un material plegable de aspecto vidrioso traslúcido que, aunque suele ser blanco y de tinte celeste o rosa en animales jóvenes, se torna amarillento con la edad, lo cual indica pérdida de elasticidad. La superficie es lisa al tacto y a simple vista, aunque muy irregular si se la observa con poco aumento al microscopio. -El cartílago posee una estructura compleja consistente en finas fibras dentro de su matriz, dispuestas en arcos cuyos vértices se aproximan a la superficie. Como la división del cartílago, que es común en las enfermedades articulares, tiende a seguir el trayecto de las fibras, las lesiones superficiales ocasionan desflecamiento superficial, en tanto que las más profundas ocasionan grietas más o menos verticales. -El cartílago articular es insensible y avascular. La insensibilidad explica por qué las lesiones articulares pueden progresar mucho hasta que el paciente adquiere noción de su existencia. Los requerimientos de oxígeno y nutrición se satisfacen mediante difusión proveniente de tres fuentes: el líquido que está en la cavidad articular, los vasos de los tejidos que se hallan en la periferia del cartílago y los vasos de los espacios medulares subyacentes. La difusión es ayudada por la porosidad de la matriz cartilaginosa, que capta líquido y lo libera al descargarse y comprimirse alternamente el cartílago durante los movimientos articulares. -La membrana sinovial, que completa el revestimiento de la articulación, es una lámina de tejido conectivo rosa brillante. Puede estar por completo sin sostén, puede descansar directamente sobre una capa fibrosa externa resistente o puede hallarse separada de ésta por la interposición de almohadillas de grasa; estas tres características pueden ocurrir en distintas regiones de la misma articulación. La membrana puede formar un saco en los sitios donde no se halla sostenida y estos divertículos pueden llegar muy lejos, lo cual puede revestir importancia porque explica cómo se pueden afectar a las articulaciones por heridas que aparentan ser remotas. La superficie interna de la membrana tiene gran cantidad de prolongaciones de diversos tamaños y grados de permanencia que acrecientan mucho su superficie. A diferencia de las membranas mucosas, la membrana sinovial carece de una cobertura celular continua; las partes más celulares, que sólo están en sitios relativamente protegidos, son responsables de la producción del componente lubricante (aminoglicanos) del líquido sinovial. Los otros componentes provienen del plasma sanguíneo. La membrana es vascular y sensible.

-La sinovia, líquido que está dentro de la cavidad, recibe su nombre de su semejanza con la clara de huevo. Se trata de un líquido viscoso y adherente cuyo color varía desde pajizo pálido hasta pardo. Suele decirse que existe en cantidades muy pequeñas, pero en realidad es muy abundante en las articulaciones más grandes, ya que en las articulaciones de las extremidades de los equinos y bovinos pueden aspirarse a veces 20 a 40 ml. La cantidad es máxima en los animales que pueden realizar ejercicio con libertad. La sinovia cumple funciones lubricantes y nutritivas. Aunque se discuten las maneras en que actúa como lubricante, no cabe duda de que es muy eficiente porque la fricción prácticamente no ocasiona ningún desgaste en las articulaciones sanas. El líquido contribuye a nutrir el cartílago articular, todas las estructuras intraarticulares y quizás el estrato superficial de la propia membrana sinovial. La cápsula suele completarse con una capa fibrosa externa. Esta cápsula se inserta en torno de los márgenes de las superficies articulares y presenta unos engrosamientos locales que se llaman ligamentos cuando están bien desarrollados y son individuales. Algunos, de los cuales los ligamentos cruzados de la rodilla son buenos ejemplos, aparentan correr de hueso a hueso dentro de la articulación. En ocasiones a estos ligamentos se los denomina intracapsulares para distinguirlos de la mayoría en posiciones extracapsulares, pero en realidad están excluidos de la cavidad por una cubierta de membrana sinovial. La capa fibrosa y los ligamentos cuentan con terminaciones nerviosas propioceptivas que registran la posición y la celeridad del cambio de posición de la articulación; también existen otros receptores que registran el dolor. Unas pocas articulaciones poseen discos o meniscos que en realidad son intracapsulados. El disco, como sucede en la articulación temporomandibular existente entre la mandíbula y el cráneo, se fusiona con la membrana sinovial en torno de su periferia y divide así la cavidad en compartimientos superior e inferior. En la articulación de la rodilla existe un par de meniscos, que son semilunares, como su nombre lo sugiere. Estos meniscos sólo se insertan en sus bordes convexos y, por ende, dividen a la cavidad en forma incompleta. Ambas estructuras consisten en cartílago hialino, fibrocartílago y tejido fibroso en proporciones que varían según la zona, la especie y la edad. Los meniscos y los discos imparten congruencia a las superficies articulares incompatibles, pero esto difícilmente podría ampliar su presencia porque en otras articulaciones la congruencia se consigue de manera más sencilla. La explicación alternativa más probable los considera un recurso para resolver movimientos complicados en componentes más sencillos que se asignan a distintos niveles de la articulación. Así, en la articulación temporomandibular el movimiento de bisagra requerido para abrir la boca ocurre en el nivel inferior (entre el disco y la mandíbula), mientras que los movimientos de traslación que avanzan, retraen o deslizan la mandíbula de costado, tienen lugar en el nivel superior (entre el disco y el cráneo).

-El labrum articular es un rodete u orla fibrocartilaginosa que rodea la circunferencia de ciertas superficies articulares cóncavas, entre ellas el acetábulo (cavidad profunda de la cadera). El labrum sirve para extender y profundizar la superficie articular, acrecentando el área de sustentación y contribuyendo a distribuir el líquido sinovial. Como el labrum es deformable, permite que la superficie se adapte a las disparidades en la curvatura del hueso con el cual está en contacto. -Las almohadillas sinoviales se forman en los sitios en que existen masas adiposas entre las capas sinovial y fibrosa de la cápsula articular. En ocasiones se interpreta que serían hisopos que diseminan la sinovia sobre la superficie, pero su finalidad principal es permitir que la membrana sinovial acomode su forma a la parte del hueso con la cual está en contacto momentáneamente:

Movimiento de las articulaciones Aunque muchos movimientos articulares aparentan ser complicados, siempre se pueden resolver en componentes simples. Además, muchas actividades son el resultado de un movimiento coordinado en varias articulaciones vecinas; la suma de cambios puede ser considerable cuando el movimiento en cada articulación individual es escaso. El movimiento más sencillo es la traslación. En su forma pura, la traslación consiste en una superficie plana que se desliza sobre otra, mientras que los cuerpos a los cuales pertenecen las superficies mantienen su orientación original. Es probable que nunca ocurran movimientos de traslación verdaderos porque los prerrequisitos son que las superficies sean perfectamente planas y no ocurra rotación. Sin embargo, se define una categoría de articulación (articulación plana) en la cual se presume que el movimiento es de este tipo. Estas articulaciones tienen unas superficies articulares pequeñas que parecen ser planas a primera vista, cuando en realidad las superficies articulares siempre son curvas.

Todos los otros movimientos entrañan cambios angulares. En algunos el hueso gira en torno de un eje perpendicular a su superficie en un movimiento que se describe como rotación. Como la rotación siempre se puede invertir, es necesario especificar su rotación. Por convención, la rotación interna de un miembro lleva la superficie craneal hacia medial y la rotación externa lo hace hacia lateral.

Otros movimientos consisten en la oscilación del hueso sobre un eje paralelo a su superficie articular en un movimiento pendular. Se trata de un deslizamiento entre superficies curvas que puede describirse como una oscilación. La mayoría de las oscilaciones entrañan cierta rotación, aunque a menudo esto pasa inadvertido.

Los movimientos pendulares en los planos sagitales predominan en las articulaciones de los miembros y se conocen como flexión y extensión. La flexión reduce el ángulo entre los dos segmentos del miembro, en tanto que la extensión, movimiento contrario, abre el ángulo y hace que ambos segmentos queden más alineados. Sin embargo, el movimiento de algunas articulaciones abarca desde la posición flexionada hasta la extensión completa (180º) y una segunda posición flexionada en dirección contraria. El menudillo del caballo es un buen ejemplo de una articulación que tiene un movimiento de excursión tan amplio. En estos casos las dos posiciones terminales pueden distinguirse como hiperextensión (o dorsiflexión), postura en que el animal permanece de pie en reposo, y flexión palmar, postura que adopta el pie al elevarlo pasivamente.

La aducción y la abducción son movimientos pendulares sobre un plano transversal al tronco. La aducción lleva la parte móvil hacia el plano mediano y la abducción lo aleja más de este plano. Aplicadas a los dedos, la aducción y abducción describen movimientos en relación con el eje del miembro e indican la convergencia o la separación de los dedos respectivamente.

La combinación de flexión y extensión, aducción y abducción, permite que el extremo del miembro describa un círculo o elipse en un movimiento que se conoce como circunducción. Los movimientos de las articulaciones están sometidos a ciertas limitaciones. Existen varios factores limitantes en potencia y no es fácil determinar su importancia relativa. Obviamente tiene importancia la forma de las superficies articulares. Es necesario cierto grado de incongruencia para mantener una cuña de sinovia lubricante entre las superficies. Esta cuña se reduce cuando el radio de curvatura de la superficie convexa aumenta hacia su borde para aproximarse al radio de la curvatura de la superficie cóncava oponente. De este modo las superficies adquieren congruencia en la posición terminal íntimamente apretada y todo movimiento adicional es detenido por esta compresión.

No cabe duda de que la tensión de los ligamentos extracapsulares puede detener el movimiento, aunque no se sabe con certeza si este método de frenado es necesario en circunstancias normales. Algunos ligamentos se mantendrían en moderada tensión durante toda la excursión del movimiento, mientras que otros suelen estar relajados y sólo se tensan cuando el movimiento amenaza con continuar más allá del límite normal. En algunas situaciones puede ser importante el contacto entre estructuras extraarticulares; obviamente el olécranon impide la hiperextensión forzada del codillo, en tanto que la aposición de los músculos caudales del muslo y la pantorrilla impide la hiperflexión de la rodilla humana. La tensión en los músculos y otras estructuras blandas de las cercanías de una articulación puede desacelerar el movimiento primero y detenerlo después; la

incapacidad para estirar más allá de cierto límite –insuficiencia pasiva- los músculos de la parte caudal del muslo humano impide que mucha gente se toque los dedos de los pies con la punta de los dedos de la mano. La contracción de los músculos antagonistas de un movimiento dado sería el factor más importante.