La vida del cristiano en las emociones

La vida del cristiano en las emociones Definitivamente este es el modelo de este tiempo para la iglesia del Señor, por eso se lo digo con toda certeza...
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La vida del cristiano en las emociones Definitivamente este es el modelo de este tiempo para la iglesia del Señor, por eso se lo digo con toda certeza, métase en esta locura de los hijos de Dios. Quisiera compartirles algo que ha sido parte de mi personal experiencia en El Señor, en esos altibajos formados por momentos en que se siente Su Presencia fuertemente y en otras temporadas se siente seco, sin ganas para nada, ni para servir al Señor. Si usted y Yo tenemos al Espíritu Santo en nuestro interior, y El es Dios. ¿Por qué parece que a veces estoy muy cerca de Dios y a veces muy lejos de El? Esta es la nueva etapa que como iglesia estamos viviendo, es una etapa de cambios, que nos afirmarán en nuestro llamado sin mirar hacia atrás. ¿Sabe porqué? Porque tengo una vida de emociones. Dios no se va, una vez que entra en tu interior por aceptar a Jesucristo, El no te deja, inclusive si hubieras pecado, te redarguye, te amonesta, pero no se va, El es tu Padre, y El siempre está contigo. Vamos a examinar esta situación real que pasa por nuestras vidas y que produce muchas veces un sentido de culpabilidad y no entiendes lo que pasa como si ya no experimentaras la presencia de Dios. Esto es una vida en el alma, en las emociones. Veamos cómo comienza esto: Son 1:3 Grata es también, de tus perfumes, la fragancia; tú mismo eres bálsamo fragante. ¡Con razón te aman las doncellas! Regocijémonos y deleitémonos juntos, celebraremos tus caricias más que el vino. ¡Sobran las razones para amarte! Morena soy, pero hermosa, hijas de Jerusalén; morena como las carpas de Cedar, hermosa como los pabellones de Salmá.

Son 1:4 ¡Hazme del todo tuya! ¡Date prisa! ¡Llévame, oh rey, a tu alcoba! Regocijémonos y deleitémonos juntos, celebraremos tus caricias más que el vino. ¡Sobran las razones para amarte! Morena soy, pero hermosa, hijas de Jerusalén; morena como las carpas de Cedar, hermosa como los pabellones de Salmá. El cantar de los cantares es un libro Profético que narra el crecimiento de un cristiano, y de la iglesia en sí, representa la amada que busca tener una relación de amor con su Rey, la amada es la iglesia y el amado es Dios. En estos primeros versículos, vemos el deseo de la novia de estar con el Rey. “hazme tuya” le dice, llévame a tu alcoba “rápido”, tengo muchas razones para amarte, aunque no soy hija de Jerusalen, te amo y deseo estar contigo. Le dice ¡acaríciame!, que bueno es tu perfume, ahora sé porque te aman, inclusive si leemos todo parece que el Rey provoca esta situación, aquí hay una intervención amorosa de Dios, que atrae los sentimientos de la novia. Y sigue: Son 1:7 Cuéntame, amor de mi vida, ¿dónde apacientas tus rebaños?, ¿dónde a la hora de la siesta los haces reposar? ¿Por qué he de andar vagando entre los rebaños de tus amigos? La novia le dice: Yo no quiero estar es otro rebaño, sólo quiero estar en el tuyo, dime dónde estás yo quiero estar allí. Esta es la experiencia cuando uno recién acepta al Señor, una vida nueva comienza y el amor que se experimenta es inigualable, solo se quiere estar en Su Presencia, y es una experiencia preciosa, pero este es el comienzo, con el tiempo esto tiene que transformarse de

una vida emocional a una vida espiritual, por eso le estoy diciendo que estamos entendiendo que hay que pasar a otra etapa. De lo contrario podemos ser sometidos a los altibajos del alma, y manejarnos por las emociones, una vez muy “conectados” y otra vez “desconectados” y no disfrutaremos de la vida en El Señor. Y aquí se aprovecha el enemigo para manipular nuestros sentimientos, mediante prédicas emotivas y “vibrantes” que dura lo que dura la emoción y luego se desvanecen como el polvo. Por eso el objetivo de estas enseñanzas es poder caminar en el Espíritu y no dejarse llevar e impresionar por cualquier charlatán emotivo y con otras intenciones. Cuando estás al inicio de la relación y adoras sientes la proximidad del Señor tan fuerte, su dulzura, es un amor intenso, el corazón está encendido de amor, el gozo es casi como si estuviéramos en el cielo, nos llenamos de un placer indescriptible, y esto nos acompaña a donde vamos, en el trabajo, en la casa, con los hermanos. Nos comenzamos a deleitar con la palabra, oramos de una manera muy fácil, es precioso y no hayamos el momento de derramar nuestro corazón ante El Señor, aquí le OFRECEMOS TODO AL SEÑOR, NO TENEMOS EL MAS MÍNIMO REPARO DE HACER UN COMPROMISO A MUERTE. Es como una de esas alabanzas que dice, que quisiera detener el tiempo, allí ya no existen las palabras que puedan expresar lo que sientes, todo es pequeño, y hasta buscas tener tiempo solo con Dios, no quieres las multitudes. Por eso dice el versículo: ¿para qué quiero estar en otros rebaños? Cuando hablamos a otros del Señor, nos deleitamos y si tenemos la oportunidad damos testimonio de El.

A veces compadeces a otros que no tienen estas experiencias, les da lástima que otros hermanos no sientan lo mismo, le molesta la frialdad con que sirven otros hermanos, como que tu andas en una nube y los demás arrastrándose en al tierra. Pero aquí viene una pregunta clave. ¿CUANTO DURA ESTA EXPERIENCIA? ¿SE PUEDE ESTAR ASÍ DE FELIZ EMOCIONADO TODA LA VIDA? Veamos en este libro y comparemos con la experiencia: Son 3:1 Por las noches, sobre mi lecho, busco al amor de mi vida; lo busco y no lo hallo. Son 3:2 Me levanto, y voy por la ciudad, por sus calles y mercados, buscando al amor de mi vida. ¡Lo busco y no lo hallo! Son 3:3 Me encuentran los centinelas mientras rondan la ciudad. Les pregunto: "¿Han visto ustedes al amor de mi vida?" Mire usted esta locura, estuvo en el lecho de su amado, entró en amores y ahora ya no lo encuentra. Se fue dice ella, me dejó sola, entonces comencé a buscarlo, para ver donde se ha ido, quizá algo hice mal, voy a las calles a los mercados, Y NO LO HALLO. Le pregunto a los guardias, y NO LO ENCUENTRO. ¿Qué raro verdad? Cómo si el amado, fuera un amante y no un esposo, de aquellos que entran y se van, pero El no es un amante, El es un esposo, y permanece junto a su amada, El es un Padre y está junto a sus hijos, no los abandona.

¿Sabe lo que pasó? La amada vivía una relación de emociones puras. El amado nunca se había ido, si el momento de amor intenso, pero ahora era el diario vivir, El amado no se había ido, pero ella no lo podía ver, porque no se lo ve con los sentidos, se lo ve espiritualmente. Ahora te pareces a los que antes criticabas que no eran apasionados. ¿Has pasado por esta experiencia? El Señor parece ahora muy remoto, parece que se ha ido, todo se seca, ¿hasta nos preguntamos que estoy haciendo mal? ¿En qué he pecado? Pero ves que las cosas son igual que antes, entonces te inventas faltas y te acusas y Satanás te acusa y te quita libertad. ¿Entonces sabes qué pasa? Comienzas a perder interés en todo, por más que oras nada pasa, ya no quieres leer la palabra, ya no quieres venir a la iglesia, no quieres verte con algunos hermanos, ya ni los soportas, como que se perdió el amor de Dios que tenías al inicio, la paciencia se fue para con los hermanos. Ahora ya no tienes compasión de otros sino de ti mismo. PARECE QUE TODO HA TERMINADO. Oiga uno mira a los otros en un éxtasis y dice, ¿estos comen potajes, y para mí las migajas? ¿Qué pasó aquí? Pero mire lo que pasa: Son 3:6 ¿Qué es eso que sube por el desierto semejante a una columna de humo, entre aromas de mirra e incienso, entre exóticos perfumes? Son 3:7 ¡Miren! ¡Es el carruaje de Salomón! Viene escoltado por sesenta guerreros, escogidos entre los más valientes de Israel. De pronto ¡aparece el Rey!, en un culto especial, lo vuelvo a ver brillante, una oración poderosa ferviente me hace como verlo de nuevo, parece que me perdonó, que vuelve ahora a entrar en amores conmigo. Ahora quiero volver a servir y me preocupo mucho de mi conducta externa, para que no se moleste el Señor y se vuelva a ir.

Escucho al Señor decir: Son 4:1 ¡Cuán bella eres, amada mía! ¡Cuán bella eres! Tus ojos, tras el velo, son dos palomas, que retozan en los montes de Galaad. Todo volvió como antes, mi pasión mi entrega mi búsqueda, la oración, la lectura de la palabra, todo se tornó hermoso otra vez. La pregunta es: ¿Se fue algún momento el Señor de nuestras vidas? Seguro que NO, la obra de Cristo está consumada y es inamovible, lo que sucede es que tenemos que llegar a la madurez espiritual y no vivir una vida de emociones. Porque luego volvemos a caer en estos momentos de sequedad, volviéndose nuestra vida inestable, en las cosas del Señor. ¿Qué es lo que pasa realmente? Que hemos ubicado nuestra relación espiritual con El Señor, en el plano de las emociones, como lo hacemos con nuestros seres amados y si estamos felices y con gozo, entonces decimos que estamos en la cúspide espiritual, pero si estamos tristes y secos, estamos en u bajón espiritual. O decimos que SOMOS ESPIRITUALES si sentimos ese fuego, y si no sentimos el fuego, estamos carnales. Escuche bien esta declaración: Si nosotros no aclaramos esto, vamos a ser derrotados TODA LA VIDA. Escuche esto. EL SENTIMIENTO ES EXCLUSIVAMENTE FUNCIÓN DEL ALMA. Si está gozoso está en un sentimiento de gozo, si está deprimido está en un sentimiento de depresión. En los dos casos está en un sentimiento, está en el alma.

Una vida espiritual no es dominada por el sentimiento, más bien el espiritual regula y gobierna el sentimiento. Luc 24:49

He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros; pero quedaos vosotros en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis investidos de poder desde lo alto.

Esta era la promesa del Señor, ellos estaban asustados por quedarse solos, ya Cristo había muerto en la cruz, antes eran gozosos con Su presencia, y ahora estaban temerosos por su partida, ahora estban otra vez gozosos porque lo habían visto resucitado, pero Jesucristo no los manda con esta emoción de verlo resucitado y subiendo al cielo, sino que les dice: Tiene que seguir en otro poder no puede ser por las emociones: Tienen que esperar el Poder del Espíritu Santo para poder continuar con la obra. Cuando recibieran ese poder podrían avanzar, sin temores, ya no serían controlados por los sentimientos, serían controlados por el Espíritu Santo y en medio de toda oposición seguirían adelante. Este es el espíritu de “poder de amor y de dominio propio” necesario para terminar la obra en nosotros, en la iglesia en la edificación de la casa. Esto te da estabilidad y continuidad en tu vida. Escuche esto, la vida en el espíritu, te dará más sabiduría para vivir. Las emociones te pueden confundir en la apreciación de los hechos. Me explico mejor: Ojo aquí. Si tu vida depende de las emociones felices, puedes vivir engañado, porque la cosa que te produjo la felicidad puede ser irreal. Tú puedes estar feliz basado en una apreciación equivocada de un hecho.

Ejemplo, yo termino un trabajo y me siento feliz porque creo que está bien hecho, y me voy lleno de gozo a entregarlo, pero cuando llego, el cliente me hace notar todas las fallas y me devuelve mi trabajo. entonces me siento derrotado, la emoción de felicidad de hace unos minutos se cambió por derrota. ¿Sabes qué pasó? perdí perspectiva y el enfoque, porque mi emoción me manejó, la felicidad de terminarlo me emocionó tanto que no pude ver los errores del objeto que me causaba la felicidad. En resumen los hechos son los hechos y no los puede ver el sentimiento con claridad, sino el espíritu, porque los hechos pueden estar en desacuerdo con los sentimientos, como en el caso anterior, el trabajo era malo pero yo estaba feliz. Es decir yo puedo estar triste, feliz o no sentir nada, y el trabajo estaba mal. El hecho no lo cambia el sentimiento. Peor en la vida espiritual, yo me emociono tanto y creo que estoy avanzando en la madurez espiritual cuando siento un fuego en mi corazón, cuando en realidad no he avanzado nada, y visciversa, cuando me siento derrotado siento que he retrocedido y pierdo la perspectiva de lo que he avanzado, y a lo mejor la realidad es otra distinta que lo que tu sientes. La emoción no determina si avanzo o retrocedo, es en el espíritu y en la calma que me doy cuenta que estoy avanzando espiritualmente, cuando mi espíritu gobierna mis sentimientos, entonces avanzo. Soy más confiable, para construir la casa.

¿Pero para que sirve saber todo esto? ¿Para qué todas estas enseñanzas? Para saber cómo somos, para dejar de ser menos criticones y conocer nuestros defectos, como hemos usado mal nuestros dones para ponernos por encima de otros.

Entonces descubres que no eres realmente humilde y que no eres mejor que otro. Pero creo que una de las cosas más importantes es que comenzamos a tomar control del mundo que nos rodea. Romanos 8:19 Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios. Debo de recordarle que hemos estado dando vueltas en Romanos 8, para determinar que ya no existe un viejo hombre, que este ya fue muerto con Cristo en la cruz, que lo que existen son los malos hábitos adquiridos en nuestra veja naturaleza, es decir la carne, y luego dice Pablo que los que son hijos tiene el Espíritu santo y no satisfacen los deseos de la carne, los cuentos, los chismes, los enredos, la crítica. Y entonces luego de todo esto dice: Romanos 8:19 Porque el anhelo ardiente de la creación es el aguardar la manifestación de los hijos de Dios. La pregunta del siglo es: ¿No existen ya millones de millones de hijos de Dios según la religión? Entonces el mundo tendría que ser diferente. ¿Por qué no es diferente? O porque no son hijos de Dios o porque los hijos de Dios como decía Pablo se dejan dominar por e medio ambiente y no lo afectan ellos sino que son afectados por el en sus emociones. Esta generación de hijos si afectará el mundo entero para la Gloria del Padre. Conclusión: estos que cambiarán el mundo son los del espíritu, son los que cambian el medio ambiente y no son cambiados por el, ni por las circunstancias, porque no son emocionales sino espirituales. Cuando tú tienes una experiencia profunda con Dios, las circunstancias no te mueven. El medio ambiente es influenciado por ti.

Cuando las emociones son dominadas, entonces podemos influenciar el el medio ambiente. Solo así puedo servir a Dios siempre, solo hay dos caminos: 1.- El medio ambiente me domina a mí. 2.- Yo domino al medio ambiente. Otro de los asuntos que comienzan a funcionar en mi vida es el dominio de la voluntad. Ahora no dependo de que estoy o no estoy con ánimo para hacer lo que sé que debo hacer por orden de Dios. Pero igual ejercito mi voluntad, no para animarme, sino para hacer lo que tengo que hacer, y que Dios se glorifique. La fuerza viene del espíritu. Yo antes de conocer a Cristo me animaba a tomar fuerzas, pero no es de esta que le hablo, sino la de hacer lo que se tiene que hacer, son mucha emoción o sin ella. Entonces los hijos comienzan a ejercer su voluntad y hacer lo que tienen que hacer, con ganas o sin ganas, estos son los que transformarán al mundo porque no dependen de su estado de ánimo ni de su cansancio.

A. La unión completa (3:6-11) El versículo 6 dice: “¿Quién es ésta que sube del desierto como columna de humo, sahumada de mirra y de incienso y de todo polvo aromático?” “La doncella gradualmente deja atrás la vida de desierto (una vida sin reposo) y entra en un descanso pleno. El desierto es un lugar donde se vaga. Ella gradualmente sale del desierto y poco a poco deja de vagar para entrar en el descanso del Señor. Esto no se produce instantáneamente, sino en un progreso gradual, dejando paulatinamente de vagar y abandonando toda influencia mundana, para llegar a la posesión que Dios dio a los creyentes. Ella comenzó este viaje por el desierto en la

casa de su madre. (Todas las experiencias que tuvo en el desierto las vivió por medio del amor y la gracia de Dios.) Ahora ella está a punto de iniciar una vida celestial. ¿Cómo es ella? Es como una columna de humo que ha pasado por el fuego (Jl. 2:30). Esto se refiere al poder del Espíritu. El humo se disipa fácilmente. Pero este versículo habla de una columna de humo, lo cual significa que ella es inconmovible. Ella viene del desierto y aunque es humo tiene forma de columna. Esto significa que está llena del poder del Espíritu Santo.

Ella ha llegado a ser una columna. Una columna es algo firme y seguro. Apocalipsis 3:12 Al que venciere, yo lo haré columna en el templo de mi Dios, y nunca más saldrá de allí; y escribiré sobre él el nombre de mi Dios, y el nombre de la ciudad de mi Dios, la nueva Jerusalén, la cual desciende del cielo, de mi Dios, y mi nombre nuevo. Este es el mensaje para la iglesia de filadelfia, sin reprensiones, puertas abiertas y llaves para abrir que no pueden ser cerrada, y le dice que tiene poca fuerza, pero está todo abierto, porque aprendió que no es en sus fuerzas no en sus emociones, sino en el poder del Señor. Ahora si se puede construir una casa confiable para Dios. ¿Se da cuenta del modelo para construir una casa para Dios? Seguiremos el domingo.