Introducción • En los días de conmemoración religiosa, en los cuales recordamos la pasión del Señor Jesucristo, la figura de la cruz asume un rol protagónico en el escenario de la historia que evocamos. • ¿Cuál es el significado de aquel santo madero? ¿Es tan solo un símbolo del cristianismo? ¿Tiene algún valor trascendental para nosotros? • Entregarnos a las celebraciones propias del ambiente religioso de estas fechas no valdría de nada sin haber antes descubierto la magnitud del poder que la Cruz encierra para nuestras vidas, y que por virtud de Cristo nos ha sido conferido.

El Calidoscopio de la Cruz “Y el pueblo estaba mirando” (Luc. 23:35)

“Cuan variados eran los pensamientos y sentimientos de la muchedumbre agrupada allí contemplando la cruz del calvario... ...“estaban mirando”. Y a través de todos los siglos, generación tras generación, ha dirigido sus ojos hacia esa cruz central que descuella grande y sublime sobre todo otro espectáculo ante la visión de la raza humana. Una vez más en el curso del año cristiano “Cristo es descrito como crucificado entre nosotros” y la fe y el amor vuelven a contemplarlo.”

El Calidoscopio de la Cruz “Al pensar en esta escena tan antigua, sin embargo siempre nueva, es como si la cruz apareciese en una visión calidoscópica, y con cada vuelta las Sagradas Escrituras muestran alguna luz nueva y algún aspecto distinto de su multiforme gloria y significado.” A. B. Simpson “La Cruz de Cristo” pp. 5-6

Isaías 53

Una Mirada Retrospectiva • Una “Perspectiva Profética de la Cruz” es, en buena cuenta, echar una mirada retrospectiva a las profecías que hablan del Mesías y hacer un esfuerzo por entender lo que Dios, desde antaño, quiso que comprendiéramos. • Tal esfuerzo sería no solo exigente desde el punto de vista bíblico, sino inevitablemente confrontacional, por cuanto las profecías, en su abundancia y exactitud, demandan de nosotros una toma de posición personal en relación a lo que Dios trata de comunicarnos por medio de ellas.

Profecías Cumplidas • “...hay en el Antiguo Testamento 332 distintas predicciones que fueron literalmente cumplidas en Cristo.” • “...29 profecías del Antiguo Testamento, que hablan de la traición, muerte y sepultura de nuestro Señor Jesucristo, fueron pronunciadas en diferentes oportunidades por muy diferentes voces durante los cinco siglos desde 1000-500 A.C., y sin embargo, todas ellas fueron cumplidas literalmente en Cristo en un período de veinticuatro horas de duración.” • Toda esta evidencia exige de nosotros un veredicto. Josh McDowell, “Evidencia que Exige un Veredicto”, pp. 175 y 161

La Profecía del Siervo Sufriente • El caso de la profecía de Isaías 53 (p.e.) nos presenta la figura del Siervo sufriente y nos confronta con la magnitud del dolor que Cristo llevó en carne propia para ofrecernos, por virtud de su sacrificio vicario en la Cruz, los beneficios de su obra redentora. • Procuremos entonces esforzarnos, tanto por entender, así como por responder a lo que Dios demanda de nosotros a través de este pronunciamiento dado hace 2700 años atrás.

“¿Quién ha creído a nuestro mensaje y a quién se le ha revelado el poder del Señor? Creció en su presencia como vástago tierno, como raíz de tierra seca. No había en él belleza ni majestad alguna; su aspecto no era atractivo y nada en su apariencia lo hacía deseable. Despreciado y rechazado por los hombres, varón de dolores, hecho para el sufrimiento. Todos evitaban mirarlo; fue despreciado, y no lo estimamos.”

Isaías 53 NVI

“Ciertamente él cargó con nuestras enfermedades y soportó nuestros dolores, pero nosotros lo consideramos herido, golpeado por Dios, y humillado. Él fue traspasado por nuestras rebeliones, y molido por nuestras iniquidades; sobre él recayó el castigo, precio de nuestra paz, y gracias a sus heridas fuimos sanados. Todos andábamos perdidos, como ovejas; cada uno seguía su propio camino, pero el Señor hizo recaer sobre él la iniquidad de todos nosotros.” Isaías 53 NVI

“Maltratado y humillado, ni siquiera abrió su boca; como cordero, fue llevado al matadero; como oveja, enmudeció ante su trasquilador; y ni siquiera abrió su boca. Después de aprehenderlo y juzgarlo, le dieron muerte; nadie se preocupó de su descendencia. Fue arrancado de la tierra de los vivientes, y golpeado por la transgresión de mi pueblo. Se le asignó un sepulcro con los malvados, y murió entre los malhechores, aunque nunca cometió violencia alguna, ni hubo engaño en su boca.” Isaías 53 NVI

“Pero el Señor quiso quebrantarlo y hacerlo sufrir, y como él ofreció su vida en expiación, verá su descendencia y prolongará sus días, y llevará a cabo la voluntad del Señor. Después de su sufrimiento, verá la luz y quedará satisfecho; por su conocimiento mi siervo justo justificará a muchos, y cargará con las iniquidades de ellos.”

Isaías 53 NVI

“Por lo tanto, le daré un puesto entre los grandes, y repartirá el botín con los fuertes, porque derramó su vida hasta la muerte, y fue contado entre los transgresores. Cargó con el pecado de muchos, e intercedió por los pecadores.” Isaías 53 NVI

“En ninguna otra parte del Antiguo Testamento, como en

este capítulo, se profetiza tan clara y plenamente que Cristo debía sufrir y luego entrar a su gloria. Pero a esta fecha pocos disciernen o reconocen el poder divino que va con la palabra. Se desecha el informe más importante y auténtico de la salvación a través del Hijo de Dios por los pecadores. La condición vil a que se sometió y su manifestación al mundo no concuerdan con las ideas del Mesías que los judíos se habían formado.” Matthew Henry, “Comentario de La Biblia”, p. 567.

• No solamente las ideas judías en relación al Mesías se ven confrontadas por las palabras del profeta Isaías, sino también el esquema occidental que el cristianismo mediático ha sembrado en nuestras mentes. • Cristo, acorde con las palabras del profeta, fue “varón de dolores, hecho para el sufrimiento”, y esta expresión es comúnmente entendida como la de un Mesías que se identificó con los padecimientos de su pueblo y sufrió grandes penurias en el desarrollo de su ministerio .

Precisión Interpretativa “Esta interpretación es posible pero cuestionable, porque trata de rehuir del significado [hebreo original] que, aunque chocante con la mentalidad occidental enseña que el siervo no fue puesto para certificar o verificar la existencia de enfermedad en esa situación, sino uno que fue “familiarizado” “experimentado” con la enfermedad de su pueblo como también RVR traduce consecuentemente.” Pedro Torres, “Sanidad en Isaías”, p. 82

Precisión Interpretativa “De modo que este pensamiento... debe traducirse: “hombre de dolores” “familiarizado con la enfermedad”

[’ish mac obot] [yadúa hóli]

Visto así, nos encontramos frente a una gran verdad, la cual no podemos evitarla buscando subterfugios, sino recibir su mensaje y aceptarlo como está, pues entre otros argumentos tal análisis tiene respaldo en el texto hebreo.” Pedro Torres, “Sanidad en Isaías”, p. 82

“Azotado y Herido por Dios” • “Y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido. (Is. 53:4 RVR)” • “En este versículo dos son los términos que sugieren que el Siervo sufrió de lepra o alguna enfermedad similar. El verbo nagúa, “tocar”, “herir” y el sustantivo relacionado con éste, negá, “golpe”, “plaga”, también enfermedad permitida por Dios mismo, tal como lo registra las Escrituras (Ex. 15:26).“ Pedro Torres, “Sanidad en Isaías”, p. 87

“Azotado y Herido por Dios” “Entre los creyentes judíos había una tradición según la cual el Mesías sería un leproso. Esta idea se encuentra también reflejada en algunas traducciones griegas como la de Aquila, Símaco, Teodocio quienes traducían el vocablo nagúa de Is.53:4c [herido] con la significación de ‘lepra’.” Pedro Torres, “Sanidad en Isaías”, p. 82

Realidad Confrontacional • Es indudable que tal posibilidad es por demás confrontacional, no por ser especulativa, sino por su carácter extremo en relación a lo que Cristo hizo a nuestro favor. • Cuando Jerónimo recibió el encargo de traducir la Biblia del hebreo y el griego al latín, en el s. IV, tradujo el vocablo de Is. 53:4c utilizando el término “quasíleprosum” (comp. Vulgata). • La Vulgata Latina fue el texto bíblico oficial de la Iglesia Católica hasta el año 1979.

• Así es que tenemos delante nuestro la figura de un Cristo que se identificó con nosotros en una manera extremadamente plena, para así poder llevar, en carne propia, todo el peso de la consecuencia de nuestros pecados. • “Ciertamente él cargó con nuestras enfermedades y soportó nuestros dolores, pero nosotros lo consideramos herido, golpeado por Dios, y humillado.”

La Sombra de la Muerte William Holman Hunt

“Él fue traspasado por nuestras rebeliones, y molido por nuestras iniquidades; sobre él recayó el castigo, precio de nuestra paz, y gracias a sus heridas fuimos sanados. Todos andábamos perdidos, como ovejas; cada uno seguía su propio camino, pero el Señor hizo recaer sobre él la iniquidad de todos nosotros.” Isaías 53: 5-6 NVI

• Los padecimientos que Jesús experimentó en carne propia los asumió voluntariamente por amor a nosotros, a fin de que por sus llagas fuésemos nosotros curados. • “Toda cabeza está enferma, y todo corazón doliente. Desde la planta del pie hasta la cabeza no hay en él cosa sana, sino herida, hinchazón y podrida llaga; no están curadas, ni vendadas, ni suavizadas con aceite. Vuestra tierra está destruida...” (Is. 1:5-7 RVR)

“Por lo tanto, ya que en Jesús, el Hijo de Dios, tenemos un gran sumo sacerdote que ha atravesado los cielos, aferrémonos a la fe que profesamos. Porque no tenemos un sumo sacerdote incapaz de compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que ha sido tentado en todo de la misma manera que nosotros, aunque sin pecado. Así que acerquémonos confiadamente al trono de la gracia para recibir misericordia y hallar la gracia que nos ayude en el momento que más la necesitemos.” Hebreos 4:14-16 NVI

“Cuando todavía estaba yo con ustedes, les decía que tenía que cumplirse todo lo que está escrito acerca de mí en la ley de Moisés, en los profetas y en los salmos. Entonces les abrió el entendimiento para que comprendieran las Escrituras.” Jesucristo

Lucas 24:44-45 NVI

• Las profecías divinas apuntan a la realidad y a la necesidad de un Cristo completamente identificado con la humanidad en toda la extensión de su miseria. • Lo único que se requiere para la comprensión de esta verdad es sencillez de corazón y humildad de espíritu.

ACM San Borja abril 2010 www.axisperu.org