Ayuntamiento de Bilbao

● Periódico Municipal “En mi casa he reunido juguetes pequeños y grandes, sin los cuales no podría vivir. El niño que no juega no es niño, pero el h...
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Periódico Municipal

“En mi casa he reunido juguetes pequeños y grandes, sin los cuales no podría vivir. El niño que no juega no es niño, pero el hombre que no juega perdió para siempre al niño que vivía en él y que le hará mucha falta”. Pablo Neruda

Bilboko Udala / Ayuntamiento de Bilbao

Juan Carlos Eguillor

N.º 188 Diciembre de 2004

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B i lbao

diciembre de 2004

2004.eko abendua

El centro comercial atrae a miles de visitantes en su primera semana de actividad

Zubiarte desembarca en Abandoibarra Daniel Bacigalupe

21.000 m2 de superficie comercial, 76 establecimientos entre tiendas de moda, complementos, deporte, alimentaci—n, restaurantes y cines, 840 plazas de aparcamiento... Estos son los poderes de Zubiarte, el nuevo centro comercial inaugurado el 26 de noviembre en uno de los espacios paradigm‡ticos del nuevo Bilbao, Abandoibarra. En una agitada primera semana, miles de personas procedentes tanto de la Villa como de otros municipios vizcainos ya han visitado esta gran superficie, situada a medio camino entre el gran interŽs que ha despertado en el pœblico y una cierta inquietud por parte de las asociaciones bilbainas de comerciantes. ÒLa respuesta ha sido muy positiva, quiz‡ un poco superior a lo que esper‡bamos. Ha venido much’sima gente, la mayor’a con la intenci—n de conocer el centroÓ, afirma la gerente de Zubiarte, Raquel Conejo. En efecto, durante el primer fin de semana los visitantes se agolpaban en el complejo dise–ado por Robert Stern. El arquitecto americano ha concebido su obra como si fuera una calle comercial m‡s de la ciudad compuesta por seis edificios, conectados entre s’ por pasarelas. Un techo acristalado cubre las calles centrales al tiempo que permite el paso de la luz natural. La ventaja de realizar las compras al abrigo de las inclemencias del tiempo es una de las mas apreciadas por los

Bilboko Udala/ Ayuntamiento de Bilbao

BILBAO en internet: www.bilbao.net Argitaratzailea / Edita: Bilboko Udala Ayuntamiento de Bilbao Hiritarrekiko Harremanen Zerbitzua Servicio de Relaciones Ciudadanas Pl. Ernesto de Erkoreka, n.¼ 1 48007 - Bilbao Erredakzio kontseilua Consejo de redacci—n: Mar’a As’s Fern‡ndez Artieta, Ibon Areso, JosŽ Luis Sabas, Isabel S‡nchez Robles, Jon S‡nchez Ibarlucea, JosŽ Manuel Uribarri, Julia Madrazo, Antonio Basagoiti, Goyo Zurro Tobajas Zuzendaritza eta koordinazioa Direcci—n y coordinaci—n: Elena Puccini Erredaktoreak / Redactoras: Zuri–e Hurtado de Saratxo y Luc’a Espinosa Legezko gordailua Dep—sito Legal: BI-2115-1987 ISSN 1133-5823

clientes, aunque tambiŽn ha habido alguna queja sobre la estrechez de los pasillos. ÒTenemos un buz—n de sugerencias, pero aœn no hemos podido mirarlo. Nuestra oferta es bastante completa, pero en estos casos siempre hay cosas que la gente echa de menos. Espero que haya m‡s agradecimientos que objecionesÓ, se–ala Conejo. La moda, gran protagonista Zubiarte dispone de cuatro plantas en las que se distribuyen 76 locales. Sus responsables han conseguido arrendar la totalidad de los establecimientos, y s—lo falta que las firmas de moda Punto Roma y G-Star levanten su persiana dentro de un par de meses para que el centro funcione a pleno rendimiento. La presencia de empresarios vizcainos es importante, pues regentan un 53% de los negocios, bien con sus propias empresas o como franquiciados. El supermercado Ercoreca, los cines gestionados por la cadena Circuito Coli-

El diseñador parisino aspira a crear “una máquina de generar vida”

José Ignacio (Estudiante) HEMOS venido para echar un vistazo; queremos ver los comercios, los bares... Ya vendremos otro d’a a comprar algo. Tiene much’simas tiendas, sobre todo para j—venes. A lo mejor escasean las dedicadas a gente mayor y a ni–os. La principal ventaja es que se encuentra en un lugar muy cŽntrico. Es como Artea, pero al alcance de la mano. Est‡ claro que se va a llenar de universitarios de Deusto.

Marian (Tapicera)

Javier (Comercial)

El complejo está concebido como una calle comercial más de la ciudad. Fotos Moreno Esquibel

Más de la mitad de los negocios están regentados por empresarios vizcainos seo, la cooperativa baracaldesa Bide Onera, For o Asador Indusi son algunos de los principales ejemplos de la inversi—n local. Algunas firmas comerciales estrenan tienda en Bilbao dentro de Zubiarte: el sal—n de peluquer’a Llongueras, la cristaler’a Swarovski o las marcas de moda Tommy Hilfiger, MarithŽ Francois Girbaud, Rip Curl, El Ni–o y Billabong son algunos ejemplos. Precisamente la ropa es la gran protagonista del centro y ocupa un 49% de la superficie comercial. Los grupos Inditex (Zara, Zara Home, Pull & Bear, Bershka, Massimo Dutti, etc.) e Induyco

¿Qué opina del centro Zubiarte?

ACABAMOS de entrar y, en primera instancia, lo veo un poco complicado. Es bonito, eso s’. El primer comentario que le he hecho a mi marido es el da–o que le puede provocar al peque–o comercio. Poder comprar bajo techo le asegurar‡ mucha clientela. Me sorprende para bien que exista una sala de lactancia, ya que suelo tener problemas para encontrar un sitio donde dar el pecho a mi hijo.

(Sfera, S’ntesis y Tintoretto) suman diez establecimientos, casi tantos como el espacio concedido a las tiendas de regalos y complementos como Accesorize, Sun Planet, Swatch y Oro Vivo. Restaurantes y cines Para quienes quieran acompa–ar sus compras con un bocado, la oferta fluctœa entre los locales de comida r‡pida ÐMc Donald«s, Burger King, Krunch, la helader’a Ben & Jerry«sÐ y las cafeter’as y restaurantes especializadas en pinchos, menœs o carta, como el mencionado Indusi, Tumbaollas o el CafŽ del Athletic. La mayor’a de estos negocios se sitœan en la ter-

cera planta, justo por debajo de la cuarta y œltima, en la que se encuentran los cines. Las 8 salas con capacidad para 1.800 espectadores constituyen un elemento de enganche para Zubiarte en una ciudad que hac’a una dŽcada que no inauguraba ningœna. Segœn V’ctor Villanueva, gerente de Circuito Coliseo, Òm‡s de 5.000 personas visitaron los cines el primer fin de semana, que no est‡ nada malÓ. Los numerosos clientes que han acudido a Zubiarte despuŽs de su estreno son unos pocos de los 9 millones de personas que se estima pasar‡n por el centro comercial de Abandoibarra anualmente. Los gestores de la gran superficie han calculado que las ventas se elevar‡n a 94 millones de euros y que se crear‡n 500 puestos de trabajo directos y 1.500 indirectos. La inversi—n total entre promotora y comerciantes ha sido de 115 millones para un complejo que ha tardado tres a–os en construirse.

Los datos ●

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Comienzo de las obras: noviembre de 2001. Inauguraci—n: 26 de noviembre de 2004. Superficie construida: 61.104 m2. Superficie comercial: 21.000 m2. Distribuci—n comercial: 76 locales. Moda (49%), Ocio y Cultura (22%), Restauraci—n (10%), Deportes (5,5%), , Alimentaci—n (5,5%), Hogar (4%) Regalos y Complementos (2%)... Aparcamiento: 840 plazas en tres plantas.

ES original y bonito, comparado con otras grandes superficies. Te da la oportunidad, como a m’, de comer, hacer las compras y algœn recado personal. Para los padres con ni–os esto es un chollo. Por contra, echo en falta firmas como Cortefiel y comercios especializados, que supongo que ya est‡n bien ubicados en Bilbao. He encontrado algœn peque–o defecto de construcci—n, pero es inevitable.

María (Jubilada) ES la primera vez que vengo. S—lo llevo unos pocos minutos pasaeando, pero creo que es una maravilla. Me parece m‡s grande de lo que imaginaba. Como vecina de Basurto, siempre que he tenido que salir de compras lo he hecho por las Siete Calles. Cada uno tiene su clientela, est‡ claro. La gente de las cercan’as puede seguir yendo al Casco Viejo, pero ante centros comerciales como Žste...

Philippe Starck “resucitará” la Alhóndiga D.B.

TRAS dŽcadas de inactividad, la Alh—ndiga, el antiguo almacŽn de vinos que en su d’a construyera Ricardo Bastida, sigue dando pasos decisivos hacia su futuro. El primero de ellos lo ha constituido la reciente inauguraci—n de su aparcamiento subterr‡neo, que el Ayuntamiento ha hecho coincidir con el anuncio de que, finalmente, ser‡ el prestigioso artista francŽs Philippe Starck el encargado de dise–ar el interior del edificio, concebido como un centro de ocio, cultura y deporte. Las gestiones para su contrataci—n se prolongaron desde junio hasta octubre. Cuatro entrevistas celebradas entre Par’s, Bilbao y Londres fueron necesarias para que los representantes municipales convencieran a este dise–ador polifacŽtico Ðsu experiencia se reparte en campos tan variados como el menaje, la decoraci—n,

El artista explicó con entusiasmo sus ideas

Starck construirá un edificio que combinará la cultura con el deporte y el ocio el mobiliario y la arquitecturaÐ de que se hiciera cargo del proyecto. ÒEn un principio no me apetec’a aceptar, pues sab’a que Bilbao tiene muchos emblemas culturales. Pensaba que todo estaba hecho ya. Sin embargo, estos se–ores me hicieron ver que ven’an de una ciudad viva con un muerto en el

parisino, quien s’ adelant— su intenci—n de Òcrear un bosque de mil columnas, todas distintas, para que se vea que todos somos diferentesÓ. ÒNo quiero gastar mucho dinero, ni realizar florituras arquitect—nicas. Haremos lo m’nimo, respetaremos al m‡ximo lo que ya est‡ construido. Este debe ser un lugar donde el coraz—n se fun-

“Tendremos que ponernos las pilas” D. B.

LA apertura de Zubiarte ha generado una cierta preocupaci—n en el sector del peque–o comercio de Bilbao. Las dimensiones y la localizaci—n del centro comercial en un punto tan estratŽgico de la Villa como es la ribera de Abandoibarra son las principales causas de los recelos del negocio local. Sin embargo, las asociaciones de comerciantes prefieren pensar m‡s en el futuro que en lamentaciones. ÒVa servir para que tengamos que ponernos las pilas, para que nos especialicemos un poquito m‡sÓ, dice la presidenta de la Asociaci—n de comerciantes de Deusto, Julia DiŽguez. Es en este punto donde los colectivos locales hacen m‡s Žnfasis cuando reivindican su posici—n dentro del mercado. As’ lo explica el gerente de la Agrupaci—n Co-

mercial Bilbao Centro, Jon Andoni Z‡rate: ÒNuestra oferta es inmensamente m‡s amplia en todos los campos. Aparte de los comercios, disponemos de buenos establecimientos hosteleros, de zonas de paseo envidiables, unos accesos para transporte pœblico y veh’culo privado adecuados... Adem‡s, contamos con la profesionalidad de los propios comerciantes, que son especialistas en su sectorÓ. Zubiarte no es Òel ogroÓ Ana Churruca, gerente de Bilbao Dendak, entidad que agrupa a las asociaciones de comerciantes de la ciudad, considera que ÒZubiarte es un operador m‡s; no ha venido el ogroÓ. Asimismo, afirma que la apertura de esta gran superficie Òpuede ser un elemento de anclaje del gasto en la Villa del que el resto de los negocios se puede beneficiarÓ. Es evidente

que ahora los bilbainos van a tener menos razones para acudir a centros comerciales como Artea, Max Center o Bilbondo. No obstante, Churruca se muestra Òm‡s preocupada por Mega Park, en Barakaldo, que genera un comprador m‡s endog‡mico, que van m‡s a una compra concretaÓ. Segœn JosŽ Carlos Ramos, jefe de relaciones externas de El Corte InglŽs, aœn es pronto para saber si Zubiarte funcionar‡, aunque puntualiza que Òtiene todas las caracter’sticas para hacerlo bienÓ. Los grandes almacenes han realizado Òuna apuesta de ciudadÓ, y han puesto una pica en Flandes al intervenir en la nueva ‡rea comercial con tres firmas de su filial Induyco. Ramos entiende que Òel comercio es un sector muy din‡mico dentro de un mercado de libre competencia, por lo que no se pueden poner puertas al campoÓ.

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Azkuna, satisfecho con la contratación de Starck

centro urbanoÓ, afirm— con entusiasmo Starck en su presentaci—n ante los medios de comunicaci—n locales a finales del pasado mes.

La estratégica situación de Zubiarte es una de sus principales bazas

Un ligero esbozo Pocos detalles se han podido conocer acerca del nuevo edificio, que contar‡ con una superficie edificable de 40.000 m2. ÒTengo muy claro lo que quiero hacer, pero no me pregunten c—mo, porque lo desconozcoÓ, asegur— el dise–ador

da con la mente, una m‡quina de generar vida, como las plazas de anta–o. Quiero que la gente diga dentro de diez, veinte o treinta a–os: aqu’ fue donde conoc’ a la mujer de mi vidaÓ. La gesti—n del proyecto quedar‡ en manos de la Alcald’a hasta que terminen las obras, cuya ejecuci—n ser‡ gestionada muy probablemente por Bilbao R’a 2000. Lo que s’ est‡ confirmado es que la sociedad urban’stica aportar‡ seis millo-

nes de euros de los 45 que conforman la inversi—n total, merced a un compromiso previo de destinar a la Alh—ndiga parte de las plusval’as generadas en Abandoibarra. Una vez se vayan inaugurando progresivamente las distintas partes del inmueble, una sociedad municipal reciŽn creada por el Pleno del Ayuntamiento se encargar‡ de controlar su actividad. Segœn anunci— el Alcalde, I–aki Azkuna, los usos deportivos, culturales y de ocio del proyecto de Philippe Starck se ver‡n complementados con Òtiendas de deportes, prensa, algœn restaurante...Ó.

Parking para 1.000 coches ÒSe ha acabado la primera faseÓ, record— Azkuna en referencia a la reciente apertura del aparcamiento subterr‡neo de la Alh—nidiga. Dos a–os de obras han dado como resultado un dep—sito de cinco plantas con capacidad para casi 1.000 plazas, 713 de las cuales est‡n destinadas a residentes y 285 tienen car‡cter rotatorio. El parking, que ha costado 20 millones de euros, cuenta con cuatro accesos para peatones situados en las esquinas del edificio. Adem‡s dispondr‡ de dos entradas independientes para veh’culos Ðuna para autom—viles de residentes y otra para los de rotaci—nÐ y una salida comœn. ÒAhora nos queda la segunda parte, la madre del cordero. Este es un proyecto para todos los bilbainos y requiere un esfuerzo importante por parte de todos. Pondremos todas nuestras ilusiones y mucho dinero con el fin de que tengamos Alh—ndiga para 100 — 200 a–osÓ, expres— el primer edil.

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Alumbrado, adornos, villancicos y la Feria de Santo Tomás, antesala de las vacaciones navideñas

Tradiciones ineludibles Lucía Espinosa

AUNQUE faltan todav’a unos d’as ya se deja notar el esp’ritu navide–o en Bilbao, no s—lo por el fr’o invernal sino porque paulatinamente la ciudad se est‡ transformando para estar a punto ante el aluvi—n de actos que se avecina. Como cada a–o el Alcalde I–aki Azkuna ejerci— de maestro de ceremonias durante el encendido oficial del alumbrado navide–o que, por primera vez, en respuesta a las demandas vecinales, decorar‡ e iluminar‡ todos los barrios de cada Distrito gracias a una inversi—n de 947.121 euros. Concretamente, se han instalado miles de bombillas y adornos en m‡s de 300 ‡rboles y casi 200 nuevos ornamentos en 21 rincones del municipio que en 2003 no tuvieron este tipo de iluminaci—n. El brillo y el colorido aparecer‡n cada d’a entre las 18 y las 23 horas, salvo domingos y festivos en los que el horario se ampliar‡ hasta la medianoche. Adem‡s, para que toda aquella persona que visite la ciudad se contagie del ambiente se han colocado siete letreros con el texto ÔZorionak-Urte Berri OnÕ junto con el escudo de la Villa en Enekuri, Juan de Garai, Miraflores, Sabino Arana, Zumalacarregui, Santo Domingo y Zorrotza. La ciudad tambiŽn cuenta. como es habitual, con decoraci—n ubicada por los propios comerciantes de cada zona en sus escaparates. Conciertos corales Y como no hay Navidad que se precie sin el sonido y la alegr’a de los villancicos, el Area de Cultura del Consistorio bilbaino ha organizado una completa programaci—n

de conciertos musicales tradicionales dirigida a todo tipo de pœblico. Por un lado, para los m‡s j—venes la Iglesia de los Jesuitas (alameda Urquijo) acoger‡ los Ô XI Conciertos Txikis de NavidadÕ organizados en colaboraci—n con la Federaci—n de Coros de BizkaiaBizkaiko Abesbatzen Elkartea (BAE) los d’as 10 y 17 de diciembre a las 20 horas. El primer d’a saldr‡n a escena las agrupaciones musicales de voces blancas, Berrizko Gazte-Iturriza Abezbatza (Berriz), el Coro Infantil Musika Eskola J. Arambarri (Bilbao) y Xemeingo Gazte Ahots Abesbatxa (Markina-Xemein). Una semana m‡s tarde actuar‡n los coros Lirain Txiki (Gorliz), Brioletak Abesbatza (Amorebieta) y Seber Altube Korala. Por otra parte, un total de 19 agrupaciones musicales participar‡n en los IV Conciertos Corales interpretando 100 composiciones de autores cl‡sicos como Ha‘ndel, Brahms y Mendelshon, cl‡si-

La Feria de Santo Tomás se remonta al siglo XIX. Foto Moreno Esquibel

El Ayuntamiento ha invertido 941.000 euros para adornar todos los barrios de Bilbao cos contempor‡neos como Irving Berlin, entre otros, autores vascos como FŽlix Zabala, Alberto Mitxelena y Gabriel Olaizola, as’ como villancicos y canciones populares. La cita ser‡ del d’a 10 hasta el 23 de diciembre en las parroquias de Mar’a Auxiliadora (Deusto), la Encarnaci—n (Atxuri), El Carmelo (Santutxu), Nuestra Se–ora del Rosario (Rekaldeberri), San Ant—n (Casco Viejo) y San Francisco de As’s (Abando).

Mœsica y manjares Siguiendo con las tradiciones, como antesala de las comidas y cenas familiares los bilbainos y por extensi—n los vizcainos tienen una cita ineludible el d’a 21 de diciembre de 9 a 22 horas para dar rienda suelta a la diversi—n y al buen comer en la 57» edici—n de la Feria de Santo Tom‡s organizada por la BBK. Animados por el son de las trikitixas, txalapartas, albokas o txistus

de los grupos de mœsica aut—ctona, los ciudadanos que se acerquen al Arenal, la plaza Nueva y la trasera del Teatro Arriaga podr‡n observar animales vivos, degustar el tradicional talo con chorizo acompa–ado por un txakoli, as’ como comprar los mejores productos de 150 expositores vizcainos: hortalizas, frutas, plantas ornamentales, conservas, miel, queso o pan artesano, entre otros. Adem‡s podr‡n asistir a la entrega de los galardones del concurso de explotaciones de los productos anteriormente citados y el ÔPremio mejor explotaci—n agraria de BizkaiaÕ de este a–o. Se trata de la feria rural por antonomasia, que a–o tras a–o bate rŽcords de asistencia desde finales

del siglo XIX, cuando los arrendatarios de los caser’os de la provincia acud’an a la Villa en esta fecha para pagar las rentas del a–o a los propietarios de sus hogares. Aprovechando la ocasi—n tambiŽn les presentaban sus m‡s preciados productos, mientras sus mujeres ofertaban otros similares en la antigua Plaza, junto a la Iglesia de San Ant—n y en diversos puntos de la Ribera y el Casco Viejo. Posteriormente, la Caja de Ahorros Vizcaina (ahora BBK), acept— la proposici—n de FŽlix Garc’a Arzeluz, ÔKlin KlonÕ y se encarg— de organizar el mercado con puestos y premios a los baserritarras anualmente hasta convertirlo en uno de los acontecimientos m‡s esperados por el gran pœblico.

El Ayuntamiento y Bilbao Dendak apuestan por la moda y el arte

Navidades de color rosa A partir del d’a 13 la ciudad cambiar‡ su imagen de tonos grises y met‡licos por el llamativo rosa ne—n gracias a ÔSheÕs in fashionÕ, la propuesta del Area de Empleo y Promoci—n Econ—mica del Ayuntamiento, en colaboraci—n con Bilbao Dendak, para Òtrasladar la moda a la calle y el arte a los escaparates Ó de una forma innovadora. Se trata de una muestra art’stica de grandes dimensiones, ideada por la dise–adora bilbaina Ana Laura Al‡ez, que conjugar‡ instalaciones de art public de gran tama–o con proyecciones, im‡genes, montajes de iluminaci—n en horario nocturno con cadencias programadas y m‡s de 100 escaparates comerciales especialmente decorados. El objetivo de esta iniciativa es Òcrear ambiente navide–o e impulsar la vida social y econ—mica, as’ como difundir imagen de Bilbao al pœblico for‡neo para atraer visitantes y generar nuevos nichos de actividad econ—micaÓ, segœn inform— el concejal delegado del Area de Empleo y Promoci—n Econ—mica, Ricardo Barkala. El proyecto se articula sobre un recorrido por el centro de la ciu-

XXII Feria de Artesanía de Bilbao del 18 de diciembre al 6 de enero

De primera mano

Sobre lel Teatro Arriaga se proyectarán diversas imágenes

dad, desde el Casco Viejo a travŽs de todo el Ensanche hasta la plaza Indautxu. Concretamente, en la fachada del Teatro Arriaga se colocar‡ una escultura flotante de grandes dimensiones (10x6 m.) en forma de boca de color fucsia con iluminaci—n interior, en clara referencia a las esencias de la femineidad, que ser‡ resaltada por proyecciones de luz. En la plaza Moyua, en cambio, se colocar‡ una figura de metacrilato en forma de robot de 4 m. de altura , tambiŽn ilumi-

nada desde el interior, que se completar‡ con haces de luz. Las intervenciones art’sticas tambiŽn se notar‡n en los escaparates y fachadas de comercios, instituciones financieras, hoteles y restaurantes a lo largo del recorrido. Los elementos que forman la imagen visual y estŽtica de esta iniciativa se incorporar‡n a varios materiales de merchandising, cuya venta generar‡ recursos econ—micos que se destinar‡n a proyectos solidarios de la capital vizcaina.

SI no sabe que regalar en Olentzero o Reyes los productos artesanales son una opci—n acertada. Del 18 de diciembre al 6 de enero los profesionales de la artesan’a se congregar‡n en la carpa situada en el lateral de la plaza del Teatro Arriaga con motivo de la ÔXXII Feria de Artesan’a de BilbaoÕ, organizada desde 1992 por Biartea, la Asociaci—n Artesana de Bizkaia, en colaboraci—n con el Area de Cultura del Ayuntamiento. Un total de 850 m2 dedicados a 46 stands repletos de productos creados con diferentes materiales: ca–a de bambœ, cer‡mica, madera o joyer’a, entre otros. Adem‡s, al igual que otros a–os se expondr‡n juguetes y marionetas. En conjunto participar‡n 32 expositores vizcainos y 14 de otras comunidades, que esperan superar los 50.000 asistentes registrados en 2003 en

este evento, organizado para Òpromocionar la artesan’a, los talleres y los productos que se realizan en BizkaiaÓ. Como es habitual el horario de apertura ser‡ de 11 a 14,30 horas y de 17 a 21,30 horas, salvo los d’as 25 de diciembre y 1 de enero en los que el recinto ferial permanecer‡ cerrado al pœblico.

J—venes artesanos Como actividad cultural la organizaci—n del evento apuesta de nuevo por Òdar a conocer las obras de artesanos noveles y j—venes con inquietudes creativasÓ por medio del III Concurso Villa de Bilbao para J—venes Artesanos. As’, dentro de la carpa se expondr‡n las piezas seleccionadas y durante la feria el jurado premiar‡ con 1.000 euros a los autores de la mejor obra presentada y la mejor obra realizada en Bizkaia.

diciembre de 2004

Olentzero eta Errege magoek ilusioz beteko dute Uria

Umeentzako egunik magikoenak Zuriñe Hurtado de Saratxo

GABONAK jadanik heldu dira eta bere lurrina usnatzeko Uritik paseatzea baino ez da egin behar: gabon-kantak, argiak, turroia, loteriaren iragarkiak... Dena den, garai hau sentimendu desberdinak eragiten ditu hiritarrengan, batzuentzat urteko egunik politenak dira, beste batzuentzat, berriz, nostalgikoenak. Dudarik gabe, azken finean, umeak dira gabonak alaitasun osoz bizi dituztenak eta, egia esan, zergatirik badaukate. Abenduaren 24an, urte osoa mendian lan egiten egon ondoren, Olentzero hirira jaitsiko da umeentzako opariz beteta. Goizez, funikularrez Artxandatik etorriko da eta zenbait kale zeharkatu eta gero, Bilboko Udaleko agintariek Udaletxeko eskaileretan harrera egingo diote. Hemendik Arriagarantz abiatuko da eta balkoitik ume guztiak agurtuko ditu. Hortik aurrera nahi duten guztiak edo, behintzat, urtean zehar ondo portatu diren guztiak, Olentzero agurtzera hurbil daitezke. Ondoren umeentzako jaia ospatuko da Arriaga plazan. Jakina! Erregaluren bat jaso nahi duten umeek aurretik eskutitz bat idatzi behar diote Olentzerori, honek zer nahi duten jakin ahal izateko. Horretarako, abenduaren 18 eta 23an ikazkinek hiriko hainbat auzotara hurbilduko dira umeei gutuna idazten laguntzeko. Olentzero gauez igoko da mendira datorren urtean berriro jaisteko baina oraindik umeentzako hainbat sorpresa daude. Urtarrilaren bostean Ekialde Urrunatik gabonetako beste pertsonaia magikoek, Melchor, Gaspar eta Baltasar errege magoek, arratsaldeko 6etan karrozan gurutzatuko dute

Erregeek umeen gurariak entzungo dituzte Udaletxean

Bilboko Kale Nagusia eta, alaitasunaz gain, opariak eta karameluak banatuko dituzte umeen artean. Gainera, desfilean erregeen karrozak ez ezik beste hainbat ekitaldi ere egingo dira: dantzariak, perkusioa, antzerkia... Geroago, Udale-txera hurbilduko dira eta bertan umeen eskaerak jasoko dituzte.

Gabonetako Umeentzako Parkea Gabonetan ilusioz gain diberti-tzeko aukera ere izango dute gaztetxoenek, abenduaren 14tik urtarrilaren 6ra bitartean Gabonetako Umeentzako Parkea ospatzen baita Bilboko Nazioarteko Erakustazokan. Urtero beza-

Urte osoan mendian lan egin ondoren, Olentzero Artxandatik jaitsiko da funikularrez Horrela, gurariak entzunda, gauez Bilboko neska-mutilen etxeetan erregaluak edo ikatza banatuko dituzte, txikien portaeraren arabera. Dena den, arratsaldekoa ez da errege magoen agerketa bakarra izango. Izan ere, goizean Basurtuko hospitalean dauden umeak ikustera joango dira. Hauen artean ere opariak, karameluak eta, batez ere, ilusioa eskainiko dute.

la, aurtengo edizioa arrakasta handikoa izatea eta Euskal Herriko eta beste hainbat erkidegoko 300.000 bizitatzaile inguru hurbiltzea espero dute antolatzaileek. Parkea goizeko 10:30etatik 19:30etara irekita egongo da, urtarrilaren 6an, 10:30etatik 15:00etara, eta abenduaren 25ean eta urtarrilaren 1ean, berriz, itxita egongo da.

The Pub Ibiltaria Egun berezi hauetan, musikak ere lekua izango du Bilbon antolatuko diren ekitaldietan. Ohitura denez, urtero-urtero Santo Tomaseko Ferian ÔKontzertu demokratikoaÕ egiten ohi da, hau da, ÔThe Pub IbiltariareÕ-ren bederatzigarren edizioa. Aurten ere, ihaz bezala Pio Baroja Plazan ospatuko da abenduaren 21ean, arratsaldeko 19:00 etan.. Jakina denez, kontzertu honen bidez antzinako kantu sorta polit bat aukeratu, ensaiatu eta nahi duten guztien artean jo, kantatu eta disko baterako errejistratu egiten da. Duela zortzi urte Oskorri taldeak abentura hau jarri zuen abian, ÔThe Pub IbiltariaÕ izenaz bataiatu zuten ikuskizuna, non artista Oskorriko partaideen batera edozein instrumentu jo eta kantatu egiten duen publikoa den, jendea protagonista nagusia bilakaturik. Kon-tzertu demokratiko honen helburuak dira, alde batetik, musika tresnaren bat jotzen dakien edo ikasten dabilen edozeinek bere abileziak praktikan jartzeko aukera pozgarria izatea. Beste alde batetik, kantatzen gustuko duen eta bere errepertorioa zabaldu nahi duenak aukera izatea eta, gainera, kantuen testuen bitartez, euskara ikasten dabilenak bere hizkera aberastu ahal izatea. Azkenengo helburua izango litzateke kantuen letrak eta partiturak biltzen dituen 9. kuaderno hori eskuratu eta etxeratzea. Bederatzigarren kontzertu honetan denetariko kantuak dituzte, oso zaharrak eta nahiko berriak, oso ezagunak eta guztiz ahantziak, dramatikoak eta umoretsuak, sakonak eta arin-arinak: Euskaldun desterratua, 1808 maiatzaren bia, Nuen Irungo plazan edo Jeiki, jeiki! izango dira entzungo diren kantu batzuk.

Actividades navideñas en el Mercado de La Ribera

Diversión en familia TRAS el Žxito alcanzado el a–o pasado el Mercado de La Ribera ha preparado mœltiples actividades para generar el esp’ritu navide–o entre su clientela y conseguir que los ni–os disfruten antes del per’odo vacacional. La principal novedad ser‡ el ÔI Concurso de OlentzeroÕ organizado para que los colegios Òden vidaÓ en forma de mu–eco al archiconocido personaje. La decisi—n del jurado se revelar‡ el d’a 10 a las 12 h. y se premiar‡ al centro vencedor. Posteriormente, se expondr‡ su mu–eco en la 2» planta del edificio hasta el d’a 24 junto a un buz—n para que los ni–os depositen sus cartas. El d’a 16 ser‡ el turno del ÔII Concurso de VillancicosÕ dirigido a ni–os de 6 a 10 a–os de los diferentes centros educativos. Cada grupo tendr‡ 15 minutos para interpretar su canci—n bien en castellano, bien en euskera. Una vez iniciadas las vacaciones, desde el d’a 21 hasta el 5 de enero de 10 a 14 h. y de 17 a

El día 16 se celebrará el ‘II Concurso de Villancicos’

20h. el ala derecha de la 2» planta del mercado se llenar‡ de actividades infantiles totalmente gratuitas: hinchables, toboganes, marionetas, talleres de manualidades, etc. Adem‡s, se acercar‡n las nuevas tecnolog’as al pœblico con la colocaci—n de 12 ordenadores y un recinto con videojuegos.

Belenes de gran formato DespuŽs de un a–o de intenso trabajo ha llegado el momento de que el pœblico dŽ su veredicto. Y es que desde el d’a 3 de diciembre hasta el 6 de enero de 11 a 13.30 h. y de 17 a 20.30 h. la Asociaci—n de Belenistas de Bizkaia ofrecer‡ su tradicional exposici—n de belenes de gran formato

en el ala izquierda de la 2» planta del mercado de abastos. Al precio de 1 euro para adultos y entrada libre para menores de 12 a–os, los asistentes podr‡n observar 9 belenes con diferentes pasajes de la vida de Jesœs de Nazareth y participar en el sorteo de un belŽn realizado por un miembro de la asociaci—n. ÒEste a–o nos hemos volcado en la preparaci—n de cada uno para que, se miren por donde se miren, haya diferentes detalles por descubrirÓ, asegura el presidente de la asociaci—n, Juan Miguel Ferrer. En estas mismas fechas de 10 a 13.30 h. y de 17 a 20.30h. la Sala de Exposiciones del BBVA acoger‡, con entrada libre, un gran belŽn popular realizado en corcho y musgo de alrededor de 30m2 que incorpora movimientos, efectos de noche y d’a, agua corrienteÉ Como en ediciones anteriores tambiŽn se expondr‡n diversos belenes en pueblos de Bizkaia como Basauri (Ermita de Ariz) o en Mungia (Hogar del Jubilado en Landesa Etxea,5).

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II Semana de Comercio Justo EL Servicio de Mujer y Cooperaci—n al Desarrollo del Ayuntamiento de Bilbao, en colaboraci—n con las tiendas de Comercio Justo y las ONGD Setem, Hegoari Adi y Adsis, ha organizado la II Semana de Comercio Justo, que se podr‡ visitar en el Arenal del 17 al 19 de diciembre. La actividad se desarrollar‡ en una carpa donde se podr‡ conocer, degustar y comprar productos de Comercio Justo a travŽs de las cuatro tiendas existentes en la actualidad en Bilbao: Mercadeco, Kidenda, Intermon Oxfam y Emaus. Adem‡s, se han programado talleres de cosido de cuero, una exposici—n de fotograf’a y exhibici—n de v’deos, animado con actuaciones musicales y bailes de diferentes zonas del mundo, entre otros eventos.

La cita será del 17 al 19 de diciembre en el Arenal A travŽs de esta iniciativa se quiere difundir la posibilidad que existe en Bilbao de comprar de forma diferente a la convencional, al atender, no solamente, al precio de los productos, sino tambiŽn al tener en cuenta todo el proceso productivo del producto que compramos. As’, la clientela tendr‡ la seguridad de que los productos que se compren cafŽ, cacao, chocolate, azœcar, ropa, art’culos para el hogar, cer‡mica, bisuter’a, marroquiner’a, juguetes- son de calidad y se han producido bajo condiciones sociales y ecol—gicas que cumplen con los criterios de comercio justo. Concretamente, los productores han recibido las necesidades unos salarios y condiciones de trabajo dignos, el pago de una parte del precio por adelantado, han mantenido una relaci—n comercial a largo plazo durante la que ha prevalecido la igualdad entre hombre y mujer, as’ como la ausencia de explotaci—n laboral infantil. Adem‡s cabe recordar que parte de los beneficios de las cooperativas productoras se destinan a las necesidades b‡sicas de sus comunidades. Cabe recordar que la primera tienda de comercio justo abri— sus puertas en Holanda en 1969 y que en la actualidad hay m‡s de 3.000, de entre ellas cuatro en Bilbao: EMAUS: c/ Santa Mar’a, 1 (Casco Viejo) INTERMON OXFAM: Alda. Urquijo 11 (Abando) KIDENDA: c/ Viuda de Epalza, 6 (Casco Viejo) MERCADECO: Plaza de San Felic’simo, 1(Deusto)

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2004.eko abendua

A su servicio El Ayuntamiento de Bilbao, a travŽs de diversos departamentos, trata de acercarse a los ciudadanos brind‡ndoles la oportunidad de resolver todas las cuestiones de ‡mbito municipal que les afectan en su quehacer diario. He aqu’ siete ejemplos representativos Texto: Luc’a Espinosa y Zuri–e Hurtado de Saratxo Fotos: Moreno Esquibel Departamento de Hallazgos de la Policía Municipal

“Hay que actuar con rapidez”

EN el Departamento de Hallazgos de la Polic’a Municipal de Bilbao situado en el Edificio Garellano (Luis Bri–as, 14) hay un continuo movimiento de 9 a 14 horas, ya que cada semana llegan bolsas cargadas de documentaci—n, carteras, mochilas, paraguas, llavesÉ Cualquier objeto perdido o decomisado recaba en este almacŽn, donde Patxi y Mari Carmen los organizan y almacenan, una vez catalogados y clasificados con su numeraci—n, fecha y caracter’sticas, hasta que sus propietarios aparecen. ÒTratamos de destruir lo menos posible y aprovechar al m‡ximoÓ, se–alan. Por eso, Òlos enseres sin identificaci—n se donan a asociaciones benŽficas y los productos alimenticios se reparten en comedores sociales

“Errolda auzokideen eskubide eta betebeharra da”

Bilboko udal errolda UDAL erroldaren datuen arabera, 2004 urtarrilaren 1ean 353.913 pertsona zeuden erroldatuta Bilbon. Izan ere, ziurtagiri hau eskubidea ez ezik auzokideen betebeharra ere bada. Hiritar guztiek normalean bizi diren udalerrian erroldatuta egon behar dute eta, horrela, hainbat auzotasun eskubideak lortzen dira: dirulaguntzak, lan-baimena, osasun edo gizarte-laguntzak, besteak beste. Askotan azken hauek izaten dira erroldatzeko udalerria aukeratzerakoan gehien eragiten dutenak. Erroldaketa funtsezkoa da trafiko eta poliziaren kontuetarako edo botoa emateko orduan baita ere, bestela, ziurtagiri hau ez duen auzokideak hauteskundeetan ez dauka botatzekorik. Horregatik, helbide aldaketaren bat dagoenean beharrezkoa da agiri berri bat eskatzea. Bes-

te alde batetik, etorkinei dagokienez, azken urte hauetan talde honen kopurua nabariki gehitu egin da eta, beraz, haientzat oso garrantzitsua da tramite hau egitea etorkizunean lan eta egoitza-baimena lor ditzaten. Beste hainbat gairako ere garrantzi handia dauka: bekak eskatzeko, Eusko Jaurlaritzako etxebizitzaren dirulaguntzak eskuratzeko, erregistro zibilarako... Hilabetero 12.000 ziurtagiri inguru luzatzen dira Bilboko Udalean edo Barrutien bulegoetan. Dena den, errolda lortzeko ez da beharrezkoa zentro horietara hurbiltzea, Internet-en bidez egin daiteke eta. Horretarako, www.bilbao.net web orriaren ÔUdala zure zerbitzuraÕ atalean sartu eta aginduak jarraitu baino ez da egin behar. Telefonoa: 94 420 5173/ 4341/4342

“En horas punta se reciben entre 700 y 900 llamadas”

PARA solicitar cualquier informaci—n relacionada con la ciudad o la actividad municipal s—lo es necesario recordar los d’gitos: 010, correspondientes al nœmero del Servicio de Atenci—n Telef—nica del Ayuntamiento. En 1987 se puso en marcha este proyecto y en la actualidad lo integran 13 personas que solventan las dudas de 1.500 ciudadanos cada d’a de 8 a 20 horas tanto en euskera como en castellano Òde forma r‡pida, sencilla y con un trato agradableÓ, afirma el director del servicio, Rafael Freijo. Para ello, realizan tareas de documentaci—n que permiten actualizar con frecuencia su base de datos inform‡tica compuesta Òpor m‡s de 7.000 registros sobre organismos pœblicos, equipamientos, servicios, transportes pœ-

“Tratamos de destruir lo menos posible y aprovechar al máximo” de la Villa. En cambio, los decomisos ilegales, como los cedŽs piratas, se destruyenÓ, aclaran. Pero, sin duda la labor principal de estos agentes es localizar a los due–os de los hallazgos utilizando principalmente el padr—n municipal como herramienta de trabajo. ÒSi la persona que ha perdido algo est‡ empadronada en Bilbao, tenemos muchas posibilidades de encontrarle, si no lo est‡ es algo m‡s dif’cil aunque tambiŽn se consigueÓ, afirman. Una vez incluso localizaron a un italiano para devolverle un telŽfono m—vil que hab’a extraviado y se lo enviaron por mensajer’a gracias a su ardua labor de investigaci—n y constancia. No obstante, reconocen que facilitar’a mucho su trabajo que la gente Òactuase con rapidez denunciando en cualquier comisar’a las pŽrdidas, de manera que se les pueda localizar en cuanto se encuentren los objetos. TambiŽn es importante que memoricen el telŽfono y acudan directamente a nosotrosÓ, subrayan. Sobre todo en Navidades y festividades como Aste Nagusia en las que se incrementan los robos y pŽrdidas Òpor el aumento de movimiento de genteÓ. Para recuperar los objetos s—lo hay que solicitarlos y demostrar la pertenencia mediante Òcomprobaciones o descripcionesÓ. TelŽfono: 944204981

010 y Oficinas de Información Ciudadana

Hiri-hondakin Solidoen Bilketa Zerbitzua ÒURIA egoera ezin hobeanÓ edukitzeko Bilboko Udalak zenbait enpresaren ardurapean utzi du herritarrek eta merkatariek sortutako zaborren bilketa. Alde batetik, astelehenetik zapatura edukiontzi grisetako hondakin organikoak batu eta hondakindegi kontrolatuetara eroaten dira; han, zenbait prozesuren ostean energia berreskuratzen da. Bestalde, maiztasun berarekin batzen dira birziklatzeko diren hondakinak: edukiontzi horietakoak (ontziak), urdinetakoak (papera eta kartoia) eta berde argietakoak (beirak). Gainera, Òpilak aldiro batzen dira establezimenduetan eta astean behin etxeetako ehunak eta hondakin toxikoak batzen dira Barruti guztietanÓ azaldu du Jesus Arestik, Garbiketa Sekzioko arduradunak. 4 Bilbogarbi ere badaude Zo-

blicos y la agenda cultural del municipio. ÒSe trata de una herramienta vital para evitar dar datos err—neos, sobre todo, en horas punta en las que pueden llegar a recibirse entre 700 y 900 llamadasÓ, se–ala. Por esta raz—n piden Òpaciencia a los usuarios mientras esperan ser atendidosÓ. Para los que prefieran utilizar internet pueden dirigir sus preguntas por correo electr—nico, ya que ser‡n contestados Òcon la misma rapidez que en el telŽfonoÓ. Adem‡s es posible solicitar informaci—n en la oficina emplazada en el edificio consistorial y en la oficina de cada Centro Municipal de Distrito con horario de 9 a 14horas de lunes a viernes y de 8,30 a 13 h en el per’odo estival. 010 y 944241700 (fuera de Bilbao) [email protected].

“Kalean zaborrik ez geratzea gure helburua da”

rrotzan, Larraskitun, Egirletan eta Elorrietan Òobretako hondakinak eta etxetresna elektrikoak botatzeko edo norbere etxeko atarian batu dezatela eskatzekoÓ. Zazpi Kaleetako auzotarrek bilketazerbitzu berezia dute egunero otsailaz geroztik, Òhirigintza arloko arazoak eta ostalaritzako lokal asko daudelakoÓ. Gainera, merkataritzako eta ostalaritzako lokalek Òaterik ateko zerbitzuaÓ dute beira, janarien hondakinak, papera eta kartoia batzeko. Zerbitzu honekin nabarmen gutxitu da kalean geratzen den zaborra. Hala ere, Òkalean zaborrik ez geratzeaÓ da helburua eta horretarako ezinbestekoa da jabeen lankidetza. Gau eta eguneko telefonoa: 944475056

diciembre de 2004

Servicio de Inspección Alimentaria

MAS de 5.900 establecimientos de la Villa son controlados peri—dicamente por el Servicio de Inspecci—n Alimentaria, dependiente del Ayuntamiento de Bilbao. Una entidad municipal que lleva desarrollando su funci—n en la ciudad desde hace m‡s de 100 a–os. ÒEste dato demuestra la sensibilizaci—n por parte del Consistorio para controlar los procesos alimentarios desde el punto de vista de la salud pœblicaÓ, se–alan los responsables del departamento. El fin de este servicio es vigilar el sector alimentario en su conjunto, es decir, el control de toda la cadena productiva y de distribuci—n de los alimentos en todo el municipio. Su marco de actuaci—n es verificar que se est‡ cumpliendo la normativa existente al respecto, que emana de reglamentos comunita-

rios, disposiciones estatales y auton—micas y ordenanzas municipales. ÒVenimos realizando a lo largo de los a–os inspecciones, tanto rutinarias como sorpresivas, en los comercios de Bilbao y en sus instalacionesÓ. Adem‡s, el Servicio de Inspecci—n Alimentaria realiza una toma de muestras, que posteriormente se analizan en el laboratorio municipal, dependiente del Servicio de Salud y Consumo. El ‡mbito de actuaci—n de este departamento incluye controles en establecimientos de diversas tipolog’as: 2.700 locales de hosteler’a, 400 empresas industriales, Mercabilbao, mercados municipales y de concesi—n, establecimientos de venta al detalle o comedores colectivos (escuelas, guarder’as, cl’nicas, geri‡tricos...), entre otros.

ÒAdem‡s de estas medidas de control y vigilancia actuamos sobre las denuncias relacionadas con: etiquetado incorrecto, ventas irregulares, alimentos en mal estado, etcÓ, a–aden. Participan tambiŽn en diversos programas en colaboraci—n con la Direcci—n de Salud Pœblica del Gobierno vasco, as’ como en acciones que se desarrollan en otras comarcas o en la CAV. Dentro de Inspeccion Alimentaria se ofrecen varios servicios complementarios para los ciudadanos. En esta Žpoca, por ejemplo, se pone en marcha el servicio de identificaci—n de setas que atiende las consultas que los aficionados plantean en relaci—n a la aptitud para el consumo de las setas recolectadas. TelŽfono: 94 420 4910

Perrera municipal LA perrera municipal es un servicio del Consistorio que tiene como objetivo controlar la fauna urbana, referida fundamentalmente a animales de compa–’a, como son los perros y los gatos, as’ como el control poblacional y sanitario de las palomas. Este servicio comenz— a funcionar como medida de lucha contra la rabia. ÒHoy en d’a Žsta es una enfermedad controlada que no causa problemas y, por tanto, nos hemos adaptado a las nuevas necesidadesÓ, indican desde el departamento. En cuanto a los c‡nidos, caben destacar dos aspectos, uno administrativo y otro relacionado con la salud pœblica. A nivel administrativo, el servicio es el encargado del cumplimiento de la legislaci—n espec’fica existente. As’ alguna de sus funciones principales consiste en realizar controles sobre el abandono y extrav’o de estos animales para devolverlos a sus propietarios, el censado canino, la implantaci—n del microchip o el registro de animales potencialmente peligrosos. Disponen, adem‡s, de un servicio de acogida de perros, para aquellas perso-

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Bidezaintza eta argikuntza, urak eta saneamendua, garbiketa eta lorategiak eta parkeak sail barnean daude

Mantentze-lanetako Zerbitzua MANTENTZE-Lanetako Zerbitzua Bilboko Udaleko Obra eta Zerbitzuen Saileko menpean dago eta hiriko zenbait eremutan lan egiten du: bidezaintza eta argikuntza, urak eta saneamendua, garbiketa eta, azkenik, parke eta lorategiak. ÒHau da, Bilboko leku publikoak mantentzeko behar diren tresna guztiak gure erantzunkizuna diraÓ, azaltzen dute Mantentze-Lanetako Zerbitzutik. Ildo honetatik, primeran biltzen eta azaltzen duen ekintza guzti hauek ÔTximistaÕ Plana da. Hau pasa den ekainean martxan jarri zen eta, guztira, urte bat iraungo du. Hamabi hilabete hauetan zehar hiriko barruti guz-

El control alimentario es fundamental para la salud pública

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na den, ÔTximistaÕ Plana martxan dagoen bitartean Bilboko gainontzeko lekuetan ohiko mantenimendu lanak egiten jarraituko dira. ÒZerbitzuaren arabera, eguneroko edo aldizkako azterketak egiten ditugu eta, horretaz aparte, zalaketa edo iradokuzunaren bat baldin badago hara joaten gara. Batzutan gertatzen dena da zalaketak egiten dituztela leku pribatu batean eta arlo horretan guk ezin dugu ezer egin, publikoetan besterik ezÓ. Azken finean, ÔTximistaÕ Planaren helburua da Bilbao osoari errepaso sakon bat ematea eta 2005. urteko maiatzaren 15erako 8. barrutiko lanak amaituta izatea. Plan hau Udaleko Obra eta

Lantalde berezi batek hiriko pintadak eta graffitiak garbitzen du

tiak hobetuko dira lantalde berezi izeneko laguntzaz, hauek hiri altzariak, urak saneamendua, argiak, bideak eta lorategiak konpontzen dituzten langileak dira. Guztira, 700 eserleku eta 73 ume-jolas begiratuko dituzte. Ur eta saneamenduei dagokienez, 201 ur-hartune ordeztuko dira, izan ere, lurpekoak jarriko dira eta, era berean, estolda-zuloak garbitu eta 254 arketa konponduko dira. Halaber, 246 argi-arketa konponduko dira eta lanpara, lu-

Zerbitzuen Sailak martxan jarritako ÔBilbao OsorikÕ ekintzaren barruan dago. Honen bidez, espazio publikoak sortu, zaindu eta hobetu nahi dira. Era berean, ÔAuzokideÕ izeneko plana azaroan martxan jarri zen, planifikazio, garapen eta barrutiko inbertsioak burutzeko asmoz. Ekintza hauetaz gain, Mantentze-Lanetako Zerbitzuak beste hainbat neurri hartu ditu hiriko kaleak garbiak mantentzeko. Esaterako, iaz Bilboko leku guz-

Udaleko ‘Tximista’ Planak ezin hobeto biltzen ditu mantentzelanetako ekintza guztiak Este servicio tiene como objetivo controlar la fauna urbana

nas que por distintos motivos no puedan continuar cuid‡ndolos. ÒEn este caso la perrera municipal se har’a cargo de la mascota y, tras un m’nimo de 30 d’as, entrar’a en el canal de adopcionesÓ, explican. En cuanto a los aspectos relacionados con la salud pœblica, se encargan de averiguar en que situaci—n sanitaria se encuentran estos animales, efectuando una serie de controles veterinarios para detectar posibles enfermedades que puedan trans-

mitir a las personas. Con los gatos se realiza una funci—n muy similar. Respecto a las palomas, realizan un control poblacional para disminuir el nœmero o mantenerlo mediante sistemas de capturas, Òya que hemos recibido denuncias vecinales por la suciedad que Žstas generanÓ, as’ como controles sanitarios para conocer el grado de salud en el que se encuentran. TelŽfono: 94 420 1470

minaria eta farolen euskarrietan konponketak egingo dira. Era berean, hiri guztiaren zehar pintadak eta graffitiak garbituko dira. ÒZenbait lekutan kaleak, oro har, garbituta daudela aurkitzen dugu baina alferrik da paretak zikinduta eta idatzita badaudeÓ, salatzen dute Mantentze-Lanetako Zerbitzutik. Obra eta Zerbitzuen sailak 8 barrutietan egingo ditu lanak elkarren segidan. Horrela, ekainaren 1ean hasi ziren 1. barrutian eta, apurka-apurka, besteetara helduko dira eta bakoitzean 5 edo 6 astean lan egingo dute. De-

tietan zaborrontziak jarri izan ziren. ÒKomertzialki indartsuenak diren guneetan atez ateko bilketa egiten dugu, hau da, egunero taberna edo saltegiek sortzen dituzten paperak, beirak, etabarrak biltzen ditugu, hondakinak zabor edukiontzietatik kanpo gera ez dadinÓ. Zaborrontzi hauek herritarrek soilik haien hondarrak botatzeko pentsatuta daude eta. TELEFONOAK: 94 424 9909 (Urak) 94 499 9999 (Argikuntza) 94 447 5056 (Garbiketa) 94 447 4159 (Saneamendua) 94 423 1111 (Bidezaintza)

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Bilboko eraikinak–Edificios de Bilbao

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La casa de la plazuela de Santiago (Carnicería Vieja, 29) Elías Mas Serra

HEMOS comentado, en otras ocasiones, que el Proyecto de Ensanche, dise–ado por Alzola, Achœcarro y Hoffmeyer, ten’a un alcance superior a lo que era la simple extensi—n, por las llanuras de Abando, de la Villa de Bilbao. Basta leer la memoria del citado proyecto de Ensanche para darnos cuenta de que sus autores plantearon una definici—n urbana general del Bilbao del siglo XIX. Dejando al margen los aspectos relativos al dimensionado del Ensanche y otras cuestiones te—ricas que conciernen a la filosof’a del Proyecto, creemos que es esencial fijarse en el hecho de que la ordenaci—n prevista, en modo alguno, pretende olvidar la realidad construida, ya sea en Abando, ya sea, lo que es m‡s importante, en las preexistentes Siete Calles y los ensanches sucesivos de las mismas, que es lo que hoy conocemos como Casco Hist—rico.

el œltimo tercio del siglo XIX, un cambio formal y visual, en primera instancia, y social, en cualquier caso, de toda la escena urbana y de la misma sociedad vinculada a aquŽlla. Los edificios del Casco Viejo ven regularizar sus situaciones parcelarias y alcanzan, con la nueva normativa, una altura Ðpr‡cticamente uniformeÐ de planta baja y cuatro pisos en toda la extensi—n de las Siete Calles y sus ensanches renacentistas y barrocos. Participan en esta transformaci—n el grueso de los arquitectos y maestros de obra que, habitualmente, trabajaban en la Villa. Nombres como Pedro Pel‡ez, Aramburuzabala, Hilario de Iturrioz, Narciso de Goiri, Lope de Uribe, entre los maestros de obras o el mismo Achœcarro, Pedro de Belauzar‡n, Gregorio Ibarreche, Atanasio de Anduiza, e incluso Mario Cami–a, entre los arquitectos, figuran en la n—mina de quienes proyectaron y ejecutaron una de las m‡s impotentes transforma-

El edificio fue ciudadosamente diseñado por Atanasio de Anduiza, autor también del Palacio Chávarri

El acceso al interior de la casa se produce por el cantón

Lo apuntan en la propia memoria, aquellos autores, en el sentido de plantear un estudio de las alineaciones y de otros aspectos puntuales relativos a la ciudad ya construida. Lo reflejan, adem‡s, al hablar de normativas y aprovechamientos y, lo que es m‡s definitorio: al plan del Ensanche se le acompa–—, a su vez, de un proyecto de revisi—n de alineaciones y atirantado de las calles del Casco Viejo bilbaino. Estos hechos y el contenido de las reflexiones que hacen Alzola, Achœcarro y Hoffmeyer, nos sitœan ante un planteamiento global de la ciudad y ante una filosof’a de la urbanizaci—n que comprende el hecho urbano como un dise–o œnico sin diferenciaci—n cualitativa Ðdejando aparte las cuestiones higiŽnicasÐ para el conjunto de los barrios que constitu’an la Villa y los que, adem‡s del nuevo Proyecto, se incorporaban en relaci—n a las ‡reas construidas de la vieja Anteiglesia de Abando.

La construcci—n de viviendas en el Casco Viejo De todas maneras, y al margen del proceso de redefinici—n de la ciudad, lo que hoy es el Casco Hist—rico y que anta–o Ðpreviamente al EnsancheÐ era el conjunto œnico, continente y contenido, de la urbe, se hab’a visto, ya, involucrado en diferentes procesos de redefinici—n normativa en relaci—n a la edificaci—n de todo su ‡mbito. De hecho en 1868, por ejemplo, se vino a dar un cuerpo ordenancista para el adecuado control de la edificaci—n en el municipio. Se produce, entonces, una significativa transformaci—n del parcelario y de la edificaci—n del Casco Viejo. Basta revisar los diferentes expedientes municipales para darse cuenta que las nuevas posibilidades urban’sticas generaron, en

Vista de los detalles ornamentales de la obra

ciones del Casco Viejo. Bien es verdad que el modelo a seguir fue sumamente parecido en todos los casos. La tipolog’a, en cuyo sustrato coinciden normativa, parcelario y necesidades sociales, gener— unos modelos de edificaci—n repetitivos que, a su vez, se hac’an coincidentes con los nuevos modelos aparecidos en el Ensanche de reciente promoci—n. Esta coincidencia forz—, adem‡s, el ajuste de diferentes aspectos normativos para la edificaci—n en el propio Ensanche. As’, mientras que en el Casco Viejo la edificaci—n se desarrollaba en un total de cinco plantas, incluida la baja, en el Ensanche la construcci—n prevista no superaba, en el mejor

Proyecto original del edificio

de los casos, las cuatro plantas edificadas. Esta situaci—n gener— una serie de conflictos y presiones hasta que, al final, para la edificaci—n en el Ensanche, se estableci— que, Žsta, pudiera alcanzar el mismo nœmero total de plantas que las que se permit’an para las casas a reformar o construir en la vieja Villa. Nos encontramos, pues, con una transformaci—n que hizo del Casco Hist—rico, con evidentes preexistencias g—ticas, renacentistas, barrocas o neocl‡sicas, un ‡mbito m‡s de la ciudad burguesa de finales del novecientos. En lo estil’stico, la edificaci—n particip— de las diferentes manifestaciones que se fueron dando a

finales del siglo XIX y comienzos del XX: eclecticismo, historicismo, modernismo e incluso, en los tiempos m‡s tard’os, los expedientes tradicionalistas. De todo ello surgi— un decorado urbano y un tejido morfol—gico que es el que, mayoritariamente, percibimos, hoy, al deambular por las Siete Calles y sus aleda–os.

La casa de la plazuela de Santiago Podr’amos escoger, de hecho, mœltiples ejemplos que ponen en evidencia todo lo que hemos anticipado. Entre todos ellos, nos hemos inclinado por esta modesta obra de Atanasio de Anduiza, que, situada en la plazuela de Santiago,

da fachada a la misma y al cant—n en el que termina Carnicer’a Vieja. Nos atrae la obra, de gran dignidad dentro de la normalidad en que se produce, y nos atrae el autor, de cuya proyecci—n pocas cosas m‡s se saben que la de que fue arquitecto, junto al belga Paul Hankar, del Palacio Ch‡varri (actual Subdelegaci—n del Gobierno). De Anduiza son, tambiŽn, trabajos tan significativos como el Ayuntamiento de Portugalete (1884), las Escuelas-Ayuntamiento de Galdames (1900), adem‡s de otros diferentes en el mismo Casco Viejo. En esta sencilla obra de la plazuela de Santiago, Anduiza recurri— a un lenguaje eclŽctico de evidente conexi—n con la iconograf’a propia de lo que frecuentemente denominamos ÒBeaux ArtsÓ. En la fachada proyectada inicialmente, que da frente a la catedral, prevŽ, el arquitecto, un ritmo sencillo en base a tres huecos que se repiten por igual en todas las plantas, las cuales, a su vez, se manifiestan con igual altura, salvo la planta baja que, como z—calo del edificio, presenta mayor dimensi—n libre hasta su techo. Los detalles ornamentales se corresponden con el diccionario habitual propio de la tem‡tica cl‡sico-eclŽctica y destacan, dentro de la elementalidad de la composici—n: la balaustrada-remate del cornisamiento y el tratamiento de la citada planta baja. El edificio, cuidadosamente dise–ado por Atanasio de Anduiza, sufri—, ya en obra, algunas alteraciones no sustanciales, en lo que a su decoraci—n hace referencia. Sin embargo, con el paso del tiempo, la disposici—n inicial se ha ido viendo alterada por supresiones y adiciones, frecuentes, por otra parte, en la evoluci—n de la construcci—n existente en el Casco Viejo. Estas adiciones y alteraciones son, en lo b‡sico, la supresi—n de la balaustrada de remate, la formaci—n de un mirador en los huecos de la esquina al cant—n y la modificaci—n de la disposici—n formal y estil’stica de los huecos en la primera planta y de la imagen y organizaci—n en la planta baja. Al igual que en otros supuestos de viviendas con fachada a calle y a cant—n, en la casa que nos ocupa el acceso a la escalera que conduce a las diferentes plantas de viviendas, se produce por la zona del cant—n. Este ser‡ un modelo tipol—gico comœn, en estas situaciones, en el proceso constructivo que se vivi—, entonces, en el contexto del Casco Hist—rico. En cualquier caso, la referencia y presentaci—n de esta modesta construcci—n, en la colecci—n de Edificios de Bilbao, responde al reconocimiento de una arquitectura comœn, realizada con mimo y calidad, que ha dado, en su momento, una imagen y una configuraci—n del paisaje urbano del Casco Viejo que, sin lugar a dudas, ha merecido, para el mismo, una preservaci—n, m‡s all‡ de las preexistencias urbanas hist—ricas y de los edificios emblem‡ticos, cualificando todo el paisaje ciudadano como un ‡mbito singular por sus condiciones de imagen y equilibrio.

diciembre de 2004

Centro de Acogida de Personas Sin Techo en Abando EL edificio situado en la calle Mazarredo 22 (Abando) acoger‡ a partir de este mes hasta el 30 de abril a unas 40 personas diariamente en aplicaci—n de la Norma de Fr’o del invierno 2004-05, tras el acuerdo alcanzado entre el Area de Acci—n Social del Ayuntamiento y la sociedad Bilbao R’a 2000, propietaria del local. La planta baja del edificio adem‡s acoger‡ el Servicio Unificado de Atenci—n de las Personas sin Techo, una oficina que centralizar‡ las demandas y ofertas de servicios sociales, y desde la que se coordinar‡n prestaciones de servicios b‡sicos de los usuarios. El servicio permanecer‡ abierto de 22:30 a 8:00 horas y contar‡ con camas, duchas, s‡banas desechables y mantas lavadas peri—dicamente para los asistentes. La Polic’a Municipal realizar‡ rondas peri—dicas con objetivos preventivos y ser‡ motivo de expulsi—n inmediata los comportamientos agresivos as’ como el deterioro voluntario de las instalaciones. El a–o pasado desde el 12 de enero hasta el 19 de abril 411 personas pernoctaron en el Front—n de la Esperanza, cien de ellas asiduamente mientras el resto lo hizo durante dos o tres noches.

Bilboko Herri Krosa 2004

Egonaldiak baserrieskoletan 2004/05

HERRI Krosa urtero Bilbon egiten den atletismoaren herriko jai ospetsua da. Aurten azaroaren 21ean ospatu zen eta bertan 8.500 atletak parte hartu zuten, 2003. urtean baino 1.500 korrikalari gutxiago. Parte-hartzaileek 10 kilometroko ibilbidea egin behar izan zuten helmuga iristeko. Gizonen-kategorian Jon Salvador eta Unai S‡inz de la Fuente izan ziren garaile (31 minutu eta 15 segundu), emakumeenkategorian Carmen Cacho kantabriarrak irabazi zuen lasterketa (37 minutu eta 01 segundu) eta Idoia Garc’a bizkaitarra bigarren postuan ailegatu zen helmugara (38 minutu eta 35 segundu). Dena den, Herri Krosa lehia bat baino gehiago izan zen eta, kirolaz gain, festa eta fanfarriak ere egon ziren.

BILBOKO Udaleko Euskara Sailatalak baserri eskoletako egonaldien programa antolatu du 2004/2005 ikasturterako, Euskara Biziberritzeko Plan Nagusiak ezarritako irizpideen haritik. Baserri-eskolak ikastetxeetako ikasleei zuzenduta daude eta helburu nagusia ikaskuntza prozesuan ingurune natural batean garatzea da eta, azken batean, euskara hobeto ezagutu eta erabiltzeko aukera. Programa honetan, guztira, hogeita hamar taldek hartuko dute parte, hau da, mila eta hirurehun ikasletik gora joango dira. Euskara Sailatalak egindako eskaintzan egun eta toki desberdinetako egonaldien artean aukera daiteke.

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Eskolako Agenda 21 BILBOKO Udalak bere egin ditu Eskolako Agenda programan jasotako helburuak: ingurumen eta garapen iraunkorrarekiko sentsibilitatea sustatzeko hezkuntzaren esparruan. I–aki Azkuna Bilboko alkateak sinatutako konpromiso honekin, beste zenbait tresnaz gain, parte-hartze foro bat jarriko da abian. Eskolako Agenda 21 programaren helburuak dira hezkuntza zentroak kokatuta dauden lekuko ingurumena eta egoera soziala aztertu eta ulertzea, zentro horietako ikasleei erabakiak hartzeko gaitasuna ematea eta garapen iraunkorrarekin koherenteak diren kudeaketa ereduak sustatzea. Programa honetan 4.580 ikaslek parte hartuko dute, Uribilduko 15 hezkuntza zentro publiko eta pribatutakoak.

¡sácate la roja!

Euskararen autobusa ABENDUAREN 3an Euskararen Eguna ospatzen da eta, hori dela eta, Bilboko Udaleko Euskara Sailatalak autobus ibiltaria antolatu du, geure hizkuntza sustatzeko daraman politikaren haritik. Ekitaldiak bezperan hasi ziren Udaletxeko Aretoan izan zen harrera ofizialean. Bertan Alkate jaunak, I–aki Azkunak, eta Euskara zinegotzi andreak, Ana de Castrok, aurtengo mezua azaldu zuten Bilbon euskararen berreskurapenean ari diren pertsona esanguratsu eta elkarteen ordezkarien aurrean. Abenduaren 3an autobusak Uriko plaza eta parkeak bisitatu zituen. 09:00etan Udaletxetik irten eta arratsaldeko 19:00 aldera Arriaga plazara heldu zen. Autobusetik ospakizunaren oroigarriak banatu ziren, Bilbao Euskaraz leloarekin.

Euskara ikasten duten gurasoentzako laguntzak BILBOKO Udaleko Euskara Sailatalak diru laguntzak banatzen ditu euskara ikasten duten ikasleen gurasoen artean, familiaren barruko harremanetan euskararen erabilera bultzatzeko asmoz. Oraingo ikasturtean laguntza hau hartuko duten ikasleak hirurehun inguru dira, Bilboko ikastetxe guztietako gurasoak eta beraiek, ordutegia eta hurbiltasuna kontuan hartuta, aukeratu duten euskaltegian ikasle direla. Laguntza jaso dutenek ikasturteko bi urrats gutxienez gainditu behar dute baina, egia esan, guraso gehienek betetzen dute baldintza hau ikasturtearen bukaeran. Laguntza honen onuraduna izateko, hainbat baldintza eskatzen zaie interesaturik dauden aita eta amei: seme-alaben irakaskuntzako komunikazio hizkuntza euskara izatea, edo lehen urratsetan hasten diren gurasoen seme-alabak Haur Hezkuntzan aritzea.

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Bilbao, fin de fiesta 2004 M. Josefa Marzo

BILBAO cierra 2004 en el plan din‡mico que ha caracterizado el a–o. A m‡s, a m‡s: obras emblem‡ticas y cotidianas, encuentros profesionales y sociales, proyectos de envergadura y de mantenimiento, iniciativas de apoyo laboral y asistencial, disfrutada por nativos y for‡neos, visitada por famosos y an—nimos, reflejada en los medios dentro y fuera con elogios Ðes por s’ sola una marca, se dijo en un acto de Lan EkintzaÐ a una trayectoria imaginativa. As’ est‡ Bilbao, que no siempre sus gentes, porque como toda sociedad mantiene luces y sombras. No todo son eventos y saraos, hay colectivos inquietos por su futuro, o insatisfechos con sus condiciones o lejanos a las macro cifras y al glamour medi‡tico. Pero la referencia es a Bilbao como estrategia y reconociendo la existencia de distintas realidades aqu’ queda la expresi—n de una parte, de quienes la comunican en datos y actividades. Y por supuesto, la pregunta sobre el balance, en este fin de fiesta tendr‡ respuestas a la carta.

segœn la Reserva Federal que constata la solidez de la recuperaci—n y el d—lar dŽbil, al que descarta socorrer y se supone porquŽ. Pero ‡nimo, porque resulta que la econom’a vasca est‡ a tono, segœn el Eustat crece al 3%, el ritmo m‡s elevado en tres a–os, por encima de Espa–a y de la UE. Aqu’ en Bilbao, estas cuestiones surgen en c’rculos profesionales cuando se traza presente y futuro de diversos sectores, que como es habitual han protagonizado un mes m‡s, cert‡menes, jornadas y congresos. El lehendakari Ibarretxe con los participantes en la III Conferencia E-Business Global

Solidaridad y Calidad Entre ellos hab’a un espacio para la solidaridad, ya que el Pa’s Vasco compromet’a su participaci—n en la Campa–a de la ONU Objetivos del Milenio 2015 y ya hay diez empresas vascas adheridas, entre otras 700 de 73 pa’ses Por su parte, Proma Ð visitada por m‡s de 8.000 personasÐ acog’a las œltimas novedades del medio ambiente, sector que gener— 1.064 millones de euros, un 2,44% sobre el PIB de la C. Aut—noma. De las 511 empresas participantes procedentes de 25 pa’ses, un 45% han sido extranje-

l—gica, en el que se hablaba de la consolidaci—n del sector, con un tejido actual de 30 empresas ÐGamesa, Sener, ITP, CTA y 26 pymesÐ que han alcanzado su m‡ximo de ventas y esperan un crecimiento este a–o del 4%.

La Semana de la Calidad concentró 60 actos

Distintos foros sobre Aeronáutica, Transporte, Medio Ambiente... animan a las empresas Liderazgo y Ciudadan’a Bilbao se renueva y hasta el Sagrado Coraz—n va a ser restaurado. Mientras esperamos que vuelva a la Gran V’a, una estrella del dise–o promete m‡s vida para la Alh—ndiga, vida que parece ya ha recuperado la R’a y que podr‡n disfrutar los miles que celebrar‡n congresos en el 2005. Los macro centros de comercio y ocio tambiŽn han elegido este Bilbao, que proyecta nuevos edificios y se beneficiar‡ del plan de carreteras m‡s ambicioso de los œltimos a–os, segœn la Diputaci—n foral y asimismo de la euroregi—n creada entre Euskadi y Aquitania. El Atlantic Logistic Forum convert’a el BEC en el epicentro de la log’stica y el transporte europeo. Estamos en el liderazgo de la ciudad, del que se hablaba en un encuentro de Metropoli 30, mientras Emakunde se ocupaba, en otro foro de reflexionar sobre los modelos de ciudadan’a. El esfuerzo queda patente, si se ha seguido la operativa de instituciones pœblicas y privadas durante el a–o y en concreto, en este cierre del 2004. Y ahora, las luces navide–as llevan a la puerta del 2005, con panor‡micas globales: un euro por las nubes, referŽndum europeo, petr—leo fluctuante, cautelas sobre el crecimiento, inquieto panorama internacional, vivienda, que no baja, endeudamiento e inflaci—n. Mientras, los EEUU del reelegido Bush han subido los tipos de interŽs por lo bien que les va,

ras. Se celebraba asimismo en m‡s de 60 actos, la Semana Europea de la Calidad con el objetivo, segœn el director de la Fundaci—n Vasca Euskalit de que Euskadi sea identificada por su excelencia. Han salido a colaci—n voluntades de mejorar y resultados en premios para empresas y grupos. En una jornada de APD se explicaba el camino hacia esa Q del reconocimiento. En el marco de la Semana, el Cluster del Conocimiento Ð160 organizacionesÐ presentaba un informe sobre la implantaci—n de las empresas vascas en los mercados exteriores, con el mensaje de que se pierda el temor a las deslocalizaciones, siempre que el centro neur‡lgico se mantenga en el Pa’s Vasco. Abundaba en que precisamente esa internacionalizaci—n, que est‡ siendo satisfactoria por sus oportunidades es una garant’a de pervivencia y expansi—n, aunque encuentre problemas si existen diferencias de cultura empresarial. Este Cluster, que tambiŽn organizaba el tercer encuentro de la Red de Agentes, ÒEtica, Responsabilidad Social Corporativa y Gesti—nÓ explicaba las l’neas de apoyo a la salida de las empresas vascas, que responden ya que desde 2002 la presencia en el extranjero ha crecido un 80%. Durante la Semana, la Confederaci—n Empresarial Cebek reun’a a m‡s de 100 empresarios para analizar la llamada Gesti—n Alianzas, donde acentuaba que la colaboraci—n inter-empresarial

La Fundación Escuela de Ingenieros entregó sus Premios

debe ser una prioridad en las pymes vascas. En otro contexto pero tambiŽn en esa l’nea, la Universidad de Deusto recib’a de la Comisi—n Europea el label de calidad, la œnica del Estado con este galard—n por la aplicaci—n del crŽdito europeo.

Innovaci—n y Competitividad Y si en busca de la excelencia es prioritaria la innovaci—n, el departamento de Industria dedicar‡ el 36% de su presupuesto a este objetivo, un 16% m‡s que el ejercicio anterior lo que explicaba la titular Ana Aguirre. Precisamente el Parlamento aprobaba la Ley de Industria del Pa’s Vasco, que persigue desarrollar pol’ticas de promoci—n y mayor simplificaci—n administrativa. A esta importancia de la innovaci—n y dirigida a la prosperidad social, el Foro de Competitividad de Euskadi dedicaba una jornada, con participaci—n de la consejera y entre otros, del rector de la UPV Juan Ignacio PŽrez, quien por cierto bien claro alertaba en otro ‡mbito, una comparecencia parlamentaria sobre la

cr’tica situaci—n de la Universidad. El reto de la I+D en Euskadi era abordado por diversos profesionales. En esa idea de promover la tecnolog’a se realizaba la jornada de Puertas Abiertas y el acto simb—lico de colocar la primera piedra del nuevo edificio multiempresas del Parque de Zamudio, operativo en el oto–o 2005 con inversi—n de 6 millones de euros, mientras asimismo la Red de Parques Tecnol—gicos del Pa’s Vasco y Eseune celebraban un ciclo de conferencias sobre gesti—n empresarial, con an‡lisis de estrategias de marketing, innovaci—n y competitividad para el comercio internacional ,en un mercado global. Una muestra de que las empresas vascas destacan por su avance tecnol—gico es la presencia de 18 punteras en Simo 2004. Gaia representaba al sector vasco de TIC, 106 asociados que emplean a 4.600 trabajadores y facturan 839 millones de euros. Por otra parte, el Cluster de Aeron‡utica y Espacio, Hegan organizaba el congreso Aerotrends, nuevas tendencias de fabricaci—n en la industria tecno-

Ingenier’a y Negocios M‡s de 150 representantes de empresas aeroespaciales de diez pa’ses, entre ellos ponentes de EEUU y Rusia han debatido sobre los avances tecnol—gicos aplicados a la fabricaci—n de estructuras, motores y sistemas de aeronaves, as’ como el empleo de nuevos materiales y otras experiencias de gesti—n Esta conferencia es la œnica de sus caracter’sticas celebrada en Espa–a con la oportunidad de escuchar a l’deres en esta especialidad. Ha servido tambiŽn de plataforma para conocer los œltimos datos del sector vasco: 680 millones de euros de facturaci—n, creciendo un 10% y previsi—n de 3,5 a 4% este a–o; 551 millones en ventas exteriores; inversi—n en I+D, 141 millones de euros; 4.769 empleos, que crecer‡n este ejercicio un 4%. Adem‡s de sus buenas perspectivas en producci—n de programas y clientes Hegan confirmaba el crecimiento de la industria auxiliar, sobrepasando los 1.000 puestos de trabajo y anunciaba un plan 2005-2008, para dar respuesta a los retos estratŽgicos del sector. Precisamente una de las empresas del Cluster, Sener recib’a el premio Ingenia de la Fundaci—n Escuela de Ingenieros, que reconoce su labor de investigaci—n y que recog’a su fundador Enrique de Sendagorta. Era premiado tambiŽn en esta III Edici—n 2004 Juan Celaya, fundador del Grupo Cegasa. Ambos galardonados son muy reconocidos por su trayectoria profesional y su perfil humano, capaz de crear empresas y equipos de trabajo honrando a la Ingenier’a que han ejercido. Expertos en su ‡mbito, como tambiŽn otros de rango internacional, una veintena que se daban cita en Bilbao para asistir a la III Edici—n de E-Business Global Conferencia. Bajo el lema, En la era del cliente e inaugurada por el lehendakari Ibarretxe presentaba experiencias y pr‡cticas avanzadas en la utilizaci—n de Internet por parte de las organizaciones empresariales. Promovida por SPRI, AETIC y PMP ha con-

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Bilboko kaleak–Calles de Bilbao tado con 500 participantes, ante los que, entre otros el estratega Don Peppers, un influyente gurœ de los negocios afirmaba que los clientes son el recurso m‡s escaso y, si se tienen se puede obtener el capital necesario para atenderlos.

Profesionales y Tecnolog’as Parece que en el Pa’s Vasco, aunque est‡ a la cabeza del Estado en conexi—n, s—lo el 30% de las empresas realiza compras v’a Internet y aœn est‡ retrasado en el uso del comercio electr—nico que tiene altas perspectivas de crecimiento.Y tambiŽn hay que avanzar en perfiles profesionales. Aunque segœn el INE la Comunidad Vasca es la tercera en empleos de alta tecnolog’a, el CES vasco ha realizado un estudio en el que se–ala que tres de cada cuatro trabajadores necesitar‡n en el 2005 algœn tipo de competencias en Tecnolog’as de la Informaci—n y la Comunicaci—n. Las actividades m‡s demandadas ser‡n las de e-comerce, analistas de Internet, arquitectos de sistemas y tŽcnicos en comunicaciones. Este Libro Blanco constata el inicio del acercamiento a la Sociedad del Conocimiento y apuesta por el Plan Euskadi en la Sociedad de la Informaci—n para alcanzar los niveles europeos. Por su parte el DZ de la Diputaci—n inauguraba la VII Edici—n del Master en Gesti—n de Dise–o Ðpatrocinado por el departamento foral de Empleo y Formaci—nÐ que segœn sus responsables viene demostrando la importancia que ha adquirido el dise–o en la estrategia de las empresas vascas. Otra entidad, Novia Salcedo impulsa la acreditaci—n del ECDL Ðun est‡ndar eu-

El País Vasco está a la cabeza de conexiones a Internet ropeo de reconocimiento mundialÐ como herramienta de certificaci—n de conocimientos inform‡ticos. Asimismo Garapen organizaba en Bilbao una jornada de autoempleo, redes y nuevas tecnolog’as. En el ‡rea laboral el indicador Adecco que analiza el mercado espa–ol destaca que el Pa’s Vasco es la œnica autonom’a con m‡s hombres desempleados que mujeres y con la productividad m‡s alta de las analizadas registrando un avance del 2,3%. Sobre derecho del trabajo y Seguridad Social Aranzadi, APD y Garrigues celebraban la segunda edici—n de su Foro Social explicando las novedades en estas materias. Y de momento sin novedades se hallan los trabajadores de La Naval aunque es positiva la creaci—n del Foro creado en Bilbao para ofrecer alternativas al plan de liquidaci—n de Izar y que cuenta con el apoyo de la comisi—n de municipios. A ellos y a cuantos sufren incertidumbres laborales, que el 2005 las resuelva. Entre tanto, Felices Fiestas, la enhorabuena a los distinguidos por el Ayuntamiento y el recuerdo a los que este a–o nos dejaron.

Gordóniz, el cordón umbilical con Rekalde Daniel Bacigalupe

DECIA Manuel Basas en su Diccionario abreviado de las calles de Bilbao que Gord—niz es una prolongada v’a de kil—metro y medio de longitud que nace en el coraz—n de Indautxu y llega hasta Rekalde. De ser exacta su medici—n Ðy a falta de los instrumentos necesarios para corroborarloÐ, hablamos de una de las m‡s prolongadas arterias de la Villa, nexo entre el acomodado centro urbano y el popular barrio de trabajadores. No disponemos de una referencia clara sobre el origen del top—nimo, aunque Basas apunta lo siguiente respecto a la calle en su citada obra: ÒPerteneci— a la extinguida anteiglesia de Abando, donde parece ser que existi— una casa del linaje Gord—niz, cuyo solar se hallaba en la loca-

El puente de la autopista A-8 se levanta sobre la calle. Fotos Moreno Esquibel

La plaza Bombero Etxaniz, con Gordóniz al fondo

lidad de Axpe de Busturia, en donde hubo una Torre de Gord—nizÓ. S’ sabemos, en cambio, que la v’a se incorpor— al callejero en 1926 y que cuenta con 99 portales, los cuales comienzan en la intersecci—n de Iparraguirre y alameda Urquijo, en vecindad con la Alh—ndiga y la plaza Bizkaia. La ligera pendiente ascendente que presenta el primer tramo de Gord—niz nos descubre una calle relativamente tranquila, por donde el tr‡fico s—lo circula en sentido descendente entre las dos hileras de coches aparcados. Llama la atenci—n Ðy no por su belleza, precisamenteÐ la sede de la Jefatura Superior de la Polic’a, con sus perpetuas colas en las oficinas del DNI, a las que se accede por la perpendicular calle Uhag—n. Puede ser que por este ambiente un tanto sosegado se hayan aglomerado nada menos que cuatro centros sanitarios en pocos metros: las cl’nicas Indautxu y San Francisco Javier, adem‡s del Sanatorio Bilbaino y el Ambulatorio Bombero Etxaniz, situados estos dos œltimos en la glorieta del mismo nombre que preside con su llamativa arquitectura el Hotel Indautxu. A partir del cruce con Autono-

Estación de Ametzola, antes de que la vía entre en Rekalde

m’a, al que se llega tras pasar por la peque–a plaza San Francisco Javier, Gord—niz cambia totalmente de aspecto. De la calma antes citada ya queda poco: la calzada se ensancha significativamente para apechugar con el tr‡nsito incesante de los veh’culos que van y vienen de Rekalde. Testigo mudo de esta guerra de decibelios es el busto de Gregorio Balparda, que reposa en una an—nima plaza triangular resultado de la intersecci—n de la propia Gord—niz con Labayru y Calixto D’ez. Recordar‡n nuestros lectores m‡s veteranos que este historiador y jurista, alcalde de la Vi-

lla en 1906, dio nombre durante el franquismo a Autonom’a. Rescatado por el callejero en 1983, Balparda cuenta con una v’a en su honor en el barrio de San Ignacio. DespuŽs de avanzar unos metros y dejar atr‡s la colorista fachada del Pabell—n de La Casilla y la Escuela de Ingenier’a TŽcnica de la UPV, el paseante topa con un paisaje impensable hace unos pocos a–os. Los rastros del nuevo Bilbao se han dejado sentir con fuerza en esta zona: desde la acera izquierda se observa el parque de Ametzola, con la espectacular entrada acristalada a

la estaci—n subterr‡nea de cercan’as; a la derecha queda la avenida del Ferrocarril, abierta al tr‡fico hace casi tres a–os, y de frente nos recibe una fuente circular de moderno dise–o, situada en la rotonda que pone fin a la mencionada calle. Todo esto ha sido resultado de la operaci—n Variante Sur ferroviaria, llevada a cabo por Bilbao R’a 2000 y que ha fundido el antiguo puente de Gord—niz con las nuevas construcciones. A partir de aqu’ comienza Rekalde. La calle se llena de peque–os comercios de todo tipo: establecimientos de alimentaci—n, bares, tiendas de fotograf’a, papeler’asÉ Las austeras fachadas de las viviendas, tiznadas por la contaminaci—n, cuentan la historia de un barrio obrero, que tambiŽn fue destino de la inmigraci—n industrial de los a–os 50 y 60. Los movimientos asociativos siempre han tenido importancia en la zona, motivados por el fuerte sentimiento de pertenencia de sus vecinos, quienes siguen demandando la desaparici—n del mastod—ntico puente de la autopista A-8 sobre la plaza de Rekalde. Gord—niz sigue su camino bajo la sombra del viaducto y llega poco a poco hacia sus œltimos nœmeros situados, a la altura de la calle Le—n de Uru–uela, desde donde se divisa el barrio de Uretamendi, all‡ en lo alto.

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El Servicio OTA regula el aparcamiento en superficie desde hace 18 años

Curiosidades

Aires de renovación del 30% antes de que se tramite el expediente final sancionador. Por esta raz—n, el alcalde de Bilbao, I–aki Azkuna, manifest— recientemente su voluntad de que el equipo de Gobierno revise el sistema tarifario de aparcamiento con el fin de simplificar los aspectos m‡s complejos para Òhacerlo m‡s c—modoÓ de cara a la ciudadan’a. Los cambios podr’an producirse una vez que el Area de Circulaci—n y Transporte presente un estudio realizado sobre el funcionamiento de la OTA desde la implantaci—n de la œltima ordenanza.

Lucía Espinosa

BILBAO es un punto de encuentro diario para miles de personas de diferentes municipios que acuden a trabajar, hacer compras, turismo... principalmente en sus veh’culos privados, a pesar de las diferentes campa–as en pro del transporte pœblico. Para evitar el caos circulatorio por las calles en busca de aparcamiento, desde hace 18 a–os viene funcionando el Servicio OTA como herramienta para regular el aparcamiento en superficie del municipio, limitar el tiempo de estacionamientos y cobrar una tasa por la utilizaci—n del suelo pœblico, con el fin de que se produzca rotaci—n de veh’culos. Sin embargo, a pesar de la existencia de 11 zonas y casi 17.000 plazas de aparcamiento las infracciones siguen siendo una constante diaria. Desde que la ordenanza vigente se aprob— en 2002 existen tres sectores con un color diferente dependiendo de su funci—n: naranja, de uso exclusivo para residentes; marr—n, destinado a la alta rotaci—n para residentes y no residentes con un l’mite de 2 horas de estacionamiento; y azul, el de m‡s amplia duraci—n con un l’mite de 4 horas para ambos pœblicos. ÒHemos hecho esta diversificaci—n para aumentar la rotaci—n y dejar claro a cada pœblico cual es su zona para tratar de reducir el tr‡fico que generan los que buscan aparcamientoÓ, explica el director del Area de Circulaci—n y Transporte, Fernando Gonz‡lez Vara. Sin embargo, los vigilantes de OTA han puesto 450.000 denuncias a los usuarios del servicio

147 empleados vigilan las 11 zonas OTA de la Villa

Se han creado 97 plazas de superficie de sector azul en la avenida Abandoibarra desde el segundo trimestre de 2002. De ellas el 10% se han cancelado en los parqu’metros y el mismo porcentaje de forma voluntaria a travŽs de las entidades bancarias colaboradoras, mientras que el resto, han seguido la tramitaci—n oportuna por la via ejecutiva de la Secci—n de Multas del Area de Econom’a y Hacienda, convirtiŽndose en sanciones que incluyen recargo. Concretamente hasta octubre de este a–o se han cancelado 41.396

denuncias y tramitado 40.311. Las denuncias cancelables en los parqu’metros tienen Òun importe de 6 — 12 euros en el caso de superar el tiempo permitido o no poseer el ticket en los veh’culos, respectivamenteÓ, se–alan desde Gertek, la empresa concesionaria del sistema OTA. En el caso del resto de infracciones, los propietarios de los veh’culos multados deber‡n abonar 30 — 60 euros, aunque cabe la posibilidad de que se aplique una reducci—n

Novedades En el mes de octubre el pleno del Ayuntamiento aprob— una propuesta de subida del 3,3%, por tŽrmino medio, en las tasas e impuestos municipales que tambiŽn afectar‡ sensiblemente al bolsillo de los usuarios de la OTA. Los nuevos precios se aplicar‡n durante todo 2005. ÒAjustaremos los cŽntimos y haremos una curva de manera que salga beneficiado el usuarioÓ, asegura el director del Area de Circulaci—n y Transporte. Por otra parte, como aspecto positivo cabe destacar la creaci—n de 97 plazas de superficie de sector azul en la Avenida Abandoibarra, desde la calle Lehendakari Aguirre hasta el Paseo Uribitarte y la calle Lehendakari Leizaola. Concretamente, 90 ser‡n para estacionamiento en l’nea y diecisiete en bater’a. Aunque la creaci—n ha dependido del Ayuntamiento los responsables de Gertek se muestran satisfechos con esta ampliaci—n ya que supondr‡ un mejor Òregulamiento del aparcamiento en la zonaÓ.

Fernando González Vara

“Hay que hacer un uso más racional del coche” L. E.

EL Servicio de la OTA se enmarca dentro del Area de Circulaci—n y Transporte del Ayuntamiento, como una pol’tica genŽrica de movilidad que sigue manteniendo la misma filosof’a desde su creaci—n en los a–os ochenta: Òrepartir y regular el espacio de aparcamiento en superficie en Bilbao y conseguir que el mayor nœmero de personas pueda utilizarlo gracias a la limitaci—n de tiempoÓ segœn el director del ‡rea, Fernando Gonz‡lez Vara. ÐÀCree que la gente se ha adaptado completamente al nuevo sistema de sectores de diferentes colores? ÐLa gente estaba habituada a utilizar un s—lo color, por lo que la ampliaci—n a tres colores ha supuesto un tiempo de aprendizaje, pero yo creo que en estos momen-

tos el sistema de colores y para quŽ se utiliza cada cual est‡ bastante establecido y asimilado por los usuarios habituales. Aunque creo que deber’a haber cierta coordinaci—n con otras ciudades para que cuando visitemos otros lugares o nos visiten, los colores y su significado sean comunes. ÐÀY para la gente que viene de ciudades en las que no hay sistema OTA o del extranjero, hay suficiente informaci—n en los parqu’metros? ÐNuestra m‡quina contiene informaci—n de c—mo pagar, obtener tickets, introducir matr’culas y cancelar las denuncias. Adem‡s, trabaja en varios idiomas: castellano, euskera, inglŽs y francŽs. ÐTras la incorporaci—n de las œltimas innovaciones, Àcree que el sistema se ha modernizado o queda mucho por hacer?

Fotos Moreno Esquibel

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El director del Area de Circulación y Transporte

ÐLa empresa que gestiona OTA-Bilbao ha puesto en marcha iniciativas como los paneles solares, el ÔVisual carÕ o la tarjeta monedero. Todos ellos han contado con el respaldo del Ayuntamiento porque cre’amos que el

servicio ten’a muy poca tecnificaci—n. Por eso, hemos apostado por la aplicaci—n de las nuevas tecnolog’as y a pesar de que se complique la sistem‡tica diaria, creemos que es el camino a seguir.

Ð Zonas OTA en Bilbao: Abando (1), Indautxu (2 y3), Ametzola (4), Basurtu (5), Errekaldeberri (6), Iralabarri (7), Deustu (8), Casta–os-Matiko (9), Casco Viejo (10), Bego–a (10A), Santutxu (11) Ð Sectores: Naranja: 3.911 plazas s—lo para residentes. Azul: 10.457 plazas para residentes y no residentes. ÐTarifas desde enero de 2005: 30 min.: 0,40 euros; 1h: 0,93 euros; 90 min.: 1,48 euros; 2h: 2,31 euros; 3h: 4,51euros; 4h: 6,93 euros. Marr—n: 2.586 plazas para residentes y no residentes. Ð Tarifas desde enero de 2005: 30 min.: 0,40 euros; 1h: 0,93 euros; 90 min.: 1,48 euros; 2h: 2,31 euros. Ð Horarios de zonas OTA: De lunes a s‡bado (excepto festivos) de 9:00 a 13:30 h y de 15:00 a 20:00. ÐNœmero de parqu’metros en la ciudad: 440. Ofrecen informaci—n en castellano, euskera, inglŽs y francŽs. ÐPlantilla: 147 empleados (15 m‡s desde que la empresa Gertek se hizo cargo de la gesti—n del servicio en 2002) ÐOficina de informaci—n de OTA-Bilbao: C/ PŽrez Gald—s, 5 con horario de atenci—n al pœblico de 9 a 13:30 horas y de 15:30 a 19:30 horas. ÐTelŽfono de informaci—n general : 902075828.

ÐSin embargo, algunos vecinos manifiestan problemas con el cont’nuo fallo de algunos parqu’metros... ÐEs cierto que los parqu’metros se estropean, pero se trata de repararlos lo antes posible. En el caso de que no devuelvan el dinero lo mejor es presentar una reclamaci—n a los vigilantes de la zona, que seguramente estar‡n muy cerca, o acudir a la oficina de informaci—n. Si no funcionan la recomendaci—n es acudir al m‡s pr—ximo dentro de la misma zona. ÐÀQuŽ consejos dar’a a la ciudadan’a para que se incremente el uso del sistema? ÐQuiero animar a los ciudadanos a hacer una movilidad sostenible, es decir, que aquellos viajes que se puedan hacer andando, en bicicleta por los bidegorris o en transporte pœblico tendamos a hacerlos por estos medios. Adem‡s propongo que hagamos un uso m‡s responsable del veh’culo privado ya que, aunque todos sabemos que es el medio de transporte m‡s c—modo, cada vez hay un nœmero mayor de veh’culos de este tipo y menor espacio. De lo contrario, vamos a provocar una congesti—n tremenda en los municipios.

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Teknologia berrien aplikazioak L. E.

BILBOKO Udalbatzarrak 2002ko otsailean Bilbo uriko Trafiko eta Aparkamenduari buruzko Ordenantza (TAO) onartu zuen. Harez geroztik, Gertek enpresak zenbait berrikuntza sartu ditu erabiltzaileei eskaintzen zaien zerbitzua hobetzeko. Lehendabizi, 5,5 milioi euroko inbertsioa egin zuen ÔTarjeta prepagoÕ izeneko sistema berrirako egokiagoak diren parkimetroak ipintzeko. Txartela hauetan ibilgailu bakoitzeko matrikularen zenbakia inprimatuta dago eta makinetan sartzean matrikula egiaztatzen dute. Horretaz gain, ordaintzeko sistema honek ahalbidetzen du aurreikusitako aldirako ordaindu ondoren, kontsumitu ez den denborari dagokion dirua atzera ere hartzea, baita uriko edozein parkimetroren bidez ibilgailura joan beharrik gabe aparkaldia luzatzea ere. Era berean, makina

rekin harremanetan jartzen daÓ dio TAOren arduradun batek. Uztailean, gainera, Abando, Indautxu, Ametzola eta Basurtuko kaleetan automobil bitxi bat zirkulatzen hasi zen. ÔVisual CarÕ da automobil hori eta momentuz egoiliarrek aparkatzeko diren lekuak (alde laranja) zaintzeko balio du, baina etorkizunean beste alde batzuetan edo beste gauzetarako erabilgarria izango litzateke. GPS hargailu bat, zenbait bideokamera, matrikulen irakurgailu bat eta konputagailu bat ditu. 60.000 euro inbertitu dira horretan. ÒEgoiliarrenak ez diren, egoiliar-txartela ordaindu ez dutenen edo identifikatu dutenen ibilgailuak identifikatzen laguntzen die jagoleei; izan ere, astero sartzen dira egoiliarren datuakÓ, azaltzen du TAOren arduradunak.

Eguzki-energia Aurten 100 eguzki-panel baino gehiago jarri dituzte uriko parkimetroetan eta hil honen amaieran

“Eguzki-energiari esker bateria arrunt batek hiru bider gehiago irauten du”

Hiri osoan banatuta 440 parkimetro daude

bakoitzak badauzka txartelen irakurgailua eta, eskudirutan ordaintzeko behar beharrezkoa izanik, ibilgailuaren matrikula sartzeko zenbakiak dituen teklatu bat. Satelite bidezko GPRS konexioa ere aipatu behar da berrikuntzen artean. Honen bidez ibilgailu bakoitza zein aldetan dagoen aparkatuta, zenbat diru ordaindu duten eta leku horretatik noiz kenduko duten edonoiz jakiteko aukera dago. ÒOso erabilgarria da; izan ere, gezurra badirudi ere, non aparkatu duten ahaztu zaielako, ibilgailua non duten jakiteko jende asko gu-

250 izatea aurreikusita dago. ÒUdal argi-sarea erabiltzea baino sistema merkeagoa, ekologikoagoa eta jasangarriagoa daÓ dio Fernando Gonz‡lez Vara Zirkulazio eta Garraio Saileko zuzendari jaunak. Horrez gain, makinen errendimendua hobea da, TAOren arduradunenen esanetan Òbateria arrunt batek hiru bider gehiago irauten duelakoÓ. Etorkizunean ere, Gertek enpresak jarraituko du ikertzen, beste enpresa batzuekin elkarlanean, beste sistema batzuk abian jartzeko.

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El Area de Obras y Servicios del Ayuntamiento presenta 32 proyectos urbanísticos que se acometerán en los distritos por medio del Auzokide Plana durante los años 2004-05

Reformas consensuadas

El plan contempla la peatonalización del paseo entre Olabeaga y Zorroza

L. E.

Momentuz, egoiliarrek aparkatzek o diren lekuak zaintzen du

B i l b ao

LOS responsables del Area de Obras y Servicios del Consistorio bilbaino se han propuesto Òdar mayor participaci—n a la ciudadan’aÓ en los trabajos de mejora urban’stica que se van a desarrollar en cada barrio del municipio. Para ello, por medio de Auzokide Plana se destinar‡n 1,5 millones de euros anuales a cada Distrito durante la presente legislatura, siendo el montante total 50 millones de euros, con el objetivo de fomentar la creaci—n de corazones peatonales, la mejora de urbanizaciones, nuevas ‡reas de esparcimiento y otras instalaciones necesarias, haciendo especial hincapiŽ en la accesibilidad y la seguridad en la ciudad. Se trata de un sistema de trabajo ÒinnovadorÓ en el que llevan colaborando de forma conjunta durante diecinueve meses el Servicio de Relaciones Ciudadanas y el Area de Obras y Servicios del Consistorio para la identificaci—n del estado y las necesidades de cada barrio como paso previo a la presentaci—n y debate de diferentes propuestas, basadas en las demandas vecinales, criterios urban’sticos y de ciudad, ante los representantes vecinales en los Consejos de Distrito, para lograr un consenso antes de materializar cada proyecto. En resumen, segœn explic— el concejal JosŽ Luis Sabas, Òlas personas aportan sus necesidades, vivencias y la parte tŽcnica el Area de Obras y ServiciosÓ. Actuaciones Para este a–o y el siguiente el Area de Obras y Servicios tiene prevista una inversi—n de 24 millones de euros que se gastar‡n por primera vez ÒcompletamenteÓ en 32 proyectos en los ocho distritos de la Villa, que ya han sido consensuados con los vecinos, y que podr‡n ser ejecutados a la vez. Aunque segœn informaron todav’a Òhay que ver su viabilidad y si son compatibles con

el Plan General de Ordenaci—n UrbanaÓ. Por el momento, para poner fin a la lista de espera de peticiones de legislaturas anteriores, ya se han iniciado 63 obras pertenecientes al programa relacionadas con el asfaltado, saneamiento e iluminaci—n, en las que todas las partes implicadas estaban de acuerdo ya que Òsu dificultad de ejecuci—n es menorÓ. ÒEs una forma de ganar la confianza de los ciudadanos, pero no un ceboÓ, asegur— el concejal, JosŽ Luis Sabas. Y es que obras de mayor entidad como la remodelaci—n de las escaleras de Santutxu o la creaci—n de escaleras junto al C.P. Juan Pastor en Masustegui ya se han iniciado. Para acercar a la ciudadan’a cada una de estas actuaciones en cada Centro Municipal de Distrito se expondr‡n paneles informativos con la fotograf’a del lugar y su colocaci—n en el mapa de la ciudad. Y una vez que los proyectos estŽn aprobados por el

parte, se realizar‡n obras aœn por concretar en Matiko, Ciudad Jard’n, Arabella y Zurbar‡n, adem‡s se crear‡n zonas de ocio y esparcimiento en la Plaza Moraza, se mejorar‡ el acceso en la calle Tutulu y se estrechar‡n las aceras de la calle Ricardo Arregi. En cuanto a Otxarkoaga y Txurdinaga (Distrito 3) los trabajos se centrar‡n en facilitar la accesibilidad a la Rotonda de Pau Casals y Doctor Ornilla, el talœd de la calle Jesœs Gal’ndez, la calle Zuatzu y el camino Zubisiku. En Bego–a (Distrito 4) los proyectos m‡s importantes afectan a la urbanizaci—n de la calle Santutxu, el Barrio Azurleku y las aceras de Particular de Allende. Los proyectos estrella en Ibaiondo (Distrito 5) ser‡n la renovaci—n de aceras en Zabalbide, el acondicionamiento del ascensor y las escaleras de Solokoetxe, la renovaci—n de redes y aceras en Bilbao La Vieja y otras mejoras aœn por determinar en los diferentes barrios.

Cada distrito recibirá 1,5 millones de euros anuales para acometer trabajos urbanísticos Consejo de Distrito correspondiente, se elaborar‡n tr’pticos para repartir entre los vecinos de las zonas a las que afecte el proyecto en los que se recoger‡n las actuaciones, plazos y dem‡s informaci—n. Al detalle En primer lugar, en Deusto (Distrito 1) se contempla mejorar la accesibilidad con la renovaci—n del entorno del Ascensor de Arangoiti y las escaleras de Botica Vieja, as’ como la urbanizaci—n mediante la semipeatonalizaci—n de Avenida Madariaga y la peatonalizaci—n de la calle Benidorm, Arbolagane y las aceras de la Ribera de Deusto. En Uribarri (Distrito 2), por su

Los vecinos de Abando (Distrito 6) ganar‡n una amplia zona de ocio y estancia con la nueva Plaza Indautxu y ver‡n renovadas y ensanchadas las aceras de diversas calles. En Rekalde (Distrito 7) se reordenar‡ el tr‡fico de Irala, se mejorar‡ el acceso a la calle Tolosa, el muro de la calle Amboto, se renovar‡n y ensanchar‡n diversas aceras y se acondicionar‡ el barrio del Pe–ascal. Por œltimo, en Basurto-Zorroza ser‡ clave la peatonalizaci—n del paseo entre Olabeaga y Zorroza, la reforma de las aceras de Basurto, la creaci—n de una zona peatonal en la calle Astillero, y diferentes obras en Masustegi, Monte Caramelo y Kobetas.

B i l b ao

¡Todos arriba! José Luis Merino

LAMENTO que en el Museo de Bellas Artes de Bilbao se ocupen exclusivamente del arte y se olviden de las personas. Ver‡n. Yo sab’a que ese olvido o desatenci—n hacia los visitantes al museo era una norma practicada con asiduidad. Mas quise comprobarlo por m’ mismo. Me acerquŽ al museo un miŽrcoles a la ma–ana. DespuŽs de presentar el tique de entrada preguntŽ, con cara de no haber estado nunca all’, por d—nde ten’a que ir para ver la colecci—n permanente de arte contempor‡neo. Me contestaron con rotunda determinaci—n: Òsubiendo por esas escaleras, lo encontrar‡ en el primer pisoÓ. En ese momento cambiŽ de expresi—n, puse cara de conocer el camino, y me dirig’ al ascensor que est‡ algo oculto, o poco visible, y a la derecha del acceso de entrada. Entonces, la rotundidez se abland— como por ensalmo: ÒtambiŽn puede subir en ascensorÓ. Pero la inutilidad de

la ayuda de poco val’a ya, salvo para dejar en evidencia un desaprensivo y calculado escamoteo... Por todo lo cual, y segœn dicta la norma, los visitantes que quieran ir al piso de arriba est‡n obligados a subir las escaleras, sin advertirles que lo pueden hacer a travŽs del ascensor. La pregunta que viene a continuaci—n deber’a grabarse en letras del color de la flebitis en la puerta principal del museo bilbaino: ÀA nadie de ustedes Ðen referencia especial a los m‡ximos responsablesÐ se les ha ocurrido pensar que habr‡ personas a las que el mŽdico les tiene prohibido subir escaleras? Del otro ascensor, que est‡ m‡s a la vista del pœblico, mejor no hablamos. Al poco tiempo de inaugurarse la remodelaci—n del nuevo museo pusieron delante un absurdo cordoncito y lo inutilizaron para siempre. Nunca un ascensor nacido para ser utilizado por personas tuvo tan poco uso. Deber’an presentarlo al rŽcord del mundo de ascensores en desuso... Aunque parezca incre’ble, t—mese esta historia tan de veras como los ojos del que ahora mismo la est‡ leyendo. Por lo dem‡s, lo salvable, esperanzador y alegre de todo esto es saber que los mŽdicos no tienen prohibido a sus pacientes acudir al museo.

2004.eko abendua

Etxetik mugitzeak sortzen dituen buruhausteak Iñaki Atxutegi

SARRITAN ikusi ditugu Estatu Batuetako pelikulatan pertsonak eta familiak maletak hartzen eta beste leku batera joaten. Emigranteek eraiki zuten gaurko herririk indartsuena. Munduko bazter guztietatik joan ziren bizimodu hobe baten bila. Estatu Batuetako kulturaren arabera arrakasta profesionalaren gakoa haren atzetik joatea da, baina Europan, eta batez ere gaurko Euskadin, kosta egiten zaigu etxea utzi eta gure kabuz bizitzera joatea. Estatubatuarrentzako ez da bat ere harrigarria estadu batean jaiotzea, beste batera ikastera joatea, lan egiteko harat-honat ibiltzea eta erretiroa hartuta besteren batera mugitzea. Ibilbide bakoitzean milaka kilometro egitera iristen dira. Burmuinean daukate sartuta bizimodu hobe baten bila joateko behar hori eta honelaxe isladatzen da beraien liburu eta pelikulatan. Kutsu atsegina dario bidaiatzeari. Zer dira, baina, bakeroen pelikula asko emigrazioaren epopeia baino? Azken bolada honetan frogatu egin dut pelikulen errealitatea ez datorrela bat bizitza normalarekin. Beste etxe batera bizitzera mugitu naiz eta bizitzan lehenengo aldiz nire liburu, paper, diska, arropa eta gainontzeko traste guztiak nirekin batera eraman behar izan ditut. ÒTrasladoa sute baten moduko trajedia daÓ baieztatu zidan Manu nire lagunak. Ez nintzen bere arrazoiaz jabetzen esperientzia pertsonalki bizi arte. Ez nuen sekula santan uste hainbeste traste metatu izan nituela nire bizitzan zehar. Etxe berriaren obrak hastera zihoaztenean kutxatan sartu nituen nire ondasunik gehienak. Etxearen konpontze lanak burutzen ziren bitartean ez nintzen gelditu: jarraitu nuen danetik erosten eta gordet-

Moreno Esquibelen argazkia

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Etxe berrira joaten traste guztiak atera eta gorde egin behar ziren

zen. Gero, etxe berrira joatean traste guztiak atera eta gorde egin behar ziren eta orduan hasi zen benetako komeria. ÒNon arraio erosi ote nuen pote itxusi hau?Ó. ÒZertarako arraio gorde ditut 1989ko errenta aitorpenaren paperak?Ó. ÒLiburu berdinaren hiru ale? Putza!Ó ÒNon arraio zegoen alkondara hau?Ó. Ispiluan begiratu eta harridura handiz somatu diot nire buruari nolabaiteko itxura xelebrea, Orson Wellesen itxura hain zuzen ere. Citizen Kane pelikula gogoan duzuela suposatzen dut. Kane aberatsa eta bihozgabea zen. Eta den dena gorde egiten zuen. Nik neuk ere makina bat gauza gordeta daukadala ikusi ahal izan dut. Eta zer egin ez dakidala nabil. Gorde ala ez gorde, horra nire dilema! Ez dakit nik zelofanezko azala kendu gabe dauden liburu hauek inoiz irakurtzeko denborarik izango ote dudan. Orain urte gutxi neukan gustu txarra nire la-

gun guztien aurrean geratuko litzateke Parisen erositako poster hauek etxe berriko hormatan eskegi egingo banitu. Bere garaian itxura ederra zeukatela edo hori iruditu zitzaidala hitz emango nuke. Hori erridikulua nirea! Badago, ostera, beste faktore bat gogoan hartu beharrekoa: badakizue beste leku batera joatean zenbat kamioi behar ditut nire traste guztiak mugitu ahal izateko? Inbidia apur bat ematen didate pelikuletako familiek, furgoneta batean beraien traste guztiak sartzen dituztenean. Zin dagizuet, ez dago Bilbo osoan nire traste guztiak sartzeko moduko furgonetarik. Ez naiz jaio ni amerikarrarena egiteko! Erabakia hartuta daukat. Hurrengo batean edozein jakintsu, guru edo azti etortzen bazait mugikortasunaren abantailak azaltzen, erronka bat botako diot aurpegira. Ezetz nire gauzak batu eta mugitu zoratu gabe. Apustua mahai gainean dago.

Calendarios Víctor Manteca Valdelande

ES momento de apear de la pared el viejo calendario cumplida su funci—n para colgar otro cuyo nuevo aroma y color nos promete un a–o de nueva compa–’a. Los primeros calendarios se hicieron a base de contemplar las estrellas y observar la duraci—n del d’a que regulaba el trabajo y reposo de la humanidad, contaban las duraciones por d’as pero este c—mputo fue abandonado al ser el d’a una unidad muy peque–a. Al constatar la periodicidad de las fases lunares el mes pas— a se r la unidad del calendario de modo que el a–o egipcio se correspond’a con el mes lunar lo cual explica la venerable edad alcanzada por Matusalem y otros patriarcas de la antigŸedad sagrada. Sin embargo, como los doce meses lunares no se ajustan al a–o solar, la diferencia se resolvi— de diversos modos: en los calendarios jud’os arcaicos, hab’a un a–o de trece meses cada dos

de doce, en los musulmanes hay a–os ÒcomunesÓ de 354 d’as y a–os ÒabundantesÓ de 365. Abandonado el c—mputo lunar, los egipcios adoptaron la periodicidad de las inundaciones del Nilo y as’ el a–o constaba de 3 meses: inundaci—n(julio-octubre), siembra (noviembre-febrero) y recolecci—n (marzo-junio). En el 230 antes de Cristo. Ptolomeo III tom— como c—mputo del calendario un a–o solar compuesto de 360 d’as ordinarios y 5 d’as epag—menos y un cuarto de d’a que se resolvi— intercalando en el calendario un d’a cada cuatro a–os. Siguiendo este criterio egipcio, Julio Cesar estableci— para el mundo romano un a–o de 365 d’as y un cuarto de d’a que dio origen al a–o bisiesto. El c‡lculo del edicto juliano ten’a un error por exceso de once minutos y quince segundos de m‡s al a–o. La acumulaci—n del error represent—, cada cuatro siglos, una diferencia de tres d’as. A fines del siglo XVI el Papa Gregorio XIII decret— la reforma

que lleva su nombre actualmente vigente ordenando que el viernes 5 de octubre de 1582 se convirtiese en el viernes 15 de octubre y para reducir los errores en el futuro propuso que los a–os 1701, 1800 y 1900 no fueran bisiestos y que el a–o 2001 si lo fuese. Aceptado el calendario gregoriano por toda la cristiandad europea, los ingleses, siempre tan reacios a los cambios no lo aceptaron hasta 1752. La revoluci—n francesa cambi— el nombre de algunos meses y su cronolog’a pero Žsto tuvo una duraci—n solo temporal. En la Žpoca actual se ha intentado en varias ocasiones llegar a un acuerdo internacional para concretar m‡s esta materia ajustando a la m‡xima perfecci—n el movimiento de translaci—n de la tierra con el calendario. En estos d’as en que comienzan a caer las hojas del nuevo calendario renovamos el esp’ritu de un nuevo ciclo vital en que debemos proseguir y mejorar dentro de lo posible.

El espejo José Serna Andrés

TAMBIEN en nuestra ciudad hay acoso en el colegio, pero Bilbao sabe que no se trata œnica y exclusivamente de un problema escolar pues la problem‡tica se encuentra dentro de un contexto m‡s amplio. Porque el acoso en el trabajo es una realidad, tambiŽn en austera ciudad, que no necesita m‡s explicaciones en estas l’neas. El acoso en las familias tampoco necesita recibir demasiadas y novedosas explicaciones. Adem‡s, no hay m‡s que ver con quŽ descaro se habla y se des-habla sobre las vidas privadas y pœblicas de determinadas personas en televisi—n, y no hay m‡s que ver los insultos, la falta de respeto, las manifestaciones groseras contra determinadas personas, el no dejarse hablar unas personas a otras, etc, para entender que cualquier propuesta de escuchar a las personas, de respetar su intimidad, de presionar desde un medioÉ no son ningœn ejemplo para proponer otro estilo de vida que el de marginar descaradamente a quien no comulga conmigo. Veamos c—mo la clase pol’tica presiona constantemente para desacreditar al grupo contrario, al grupo minoritario, a las personas que destacan, a quien realiza una propuesta. No se discuten los argumentos, sino que se desacredita, se acosa, se hacen campa–as de desprestigio, se margina. Y a veces sucede tambiŽn en el interior de los propios partidos. ÀPodemos seguir con el mundo del cine, el mundo del fœtbol o el editorial? ÀPodemos ampliar los campos? Vivimos en un mundo de islas rodeadas de n‡ufragos por todas partes. Esos n‡ufragos son, adem‡s, los marginados del sistema. Las personas que no encuentran trabajo, las personas que viven una existencia al margen de lo que parece que se est‡ obligado a vivir o a pensar. Y no hablemos ya del acoso dentro de los ejŽrcitos, sin mencionar el acoso a que someten algunos ejŽrcitos a determinados pueblos. Eso no es acoso, eso son da–os colaterales. La psiquiatr’a y la psicolog’a tienen muchos planes para ayudar a las v’ctimas, pero s—lo las pueden ayudar si pertenecen a las clases dirigentes del Primer Mundo. Nos queda por hablar de la marginaci—n del hambre en un mundo en el que hay comida suficiente. Ese espejo c—ncavo de nuestro mundo deforma la realidad y entra en el cerebro de nuestros alumnos y alumnas como una proyecci—n natural de la realidad. Hay que cambiar la escuela, s’, y sus circunstancias.

Arte plastikoak–Artes plásticas

diciembre de 2004

Begoña Zubero Espacio Marzana / Hasta el 7 de diciembre Galder Reguera

DECIA Lovecraft que algunas casas sobrecogen a quien las observa detenidamente, haciŽndole part’cipe de alguna manera de los acontecimientos tr‡gicos que han sucedido en ella. As’, las estancias, los escenarios, tendr’an un modo de ser, un esp’ritu, nacido de lo que en ellos ha transcurrido. Un registro cercano a esto es lo que ha inspirado la œltima exposici—n de la fot—grafa Bego–a Zubero (Bilbao, 1962), colgada en el Espacio Marzana hasta el d’a 7 de diciembre. Se trata de seis fotograf’as en blanco y negro, de un mismo formato Ð100 x 150 cm., en horizontal o verticalÐ realizadas en el œltimo a–o. Tres de ellas retratan diferentes estancias del edificio de la sede central de la Stasi Ðservicios secretos de la extinta RDAÐ en Berl’n. Las otras tres son fotograf’as del hist—rico aeropuerto de Tempelhoff. En todas ellas la mirada de Zubero se muestra en extremo respetuosa con lo fotografiado, traducido esto en unas obras que se ubican en un territorio a mitad de camino entre lo expresivo y lo documental. El tema principal de las fotograf’as de

Wer Wo Wenn / Quién dónde cuando

Zubero es la Historia Ðla historia del ser humanoÐ, de ah’ la elecci—n de dos edificios relevantes en este sentido. Pero la Historia con mayœsculas se compone de una red de millones de peque–as narrativas, que configuran el gran relato final. Bego–a Zubero se–ala en sus obras estas peque–as historias Ðlo cotidianoÐ, a travŽs sobretodo de un elemento: el telŽfono. El gran invento de Antonio Meucci Ðno del Graham BellÐ, es recurrentemente retratado por Zubero para evocar las miles de millones de palabras que a travŽs de Žl viajaron, formando, poco a poco, la gran his-

toria de Berl’n, algunos de cuyos escenarios, reconoce la artista, es como si Òhubiesen almacenado durante todo este tiempo el dolor y lo hubieran ido transformando en una especie de vibraci—n an’micaÓ. Esta Òvibraci—n an’micaÓ se expresa en las obras de Zubero en un silencio sobrecogedor que ha logrado expresar con efectividad a travŽs de elementos como telŽfonos mudos Ðentre ellos el cŽlebre telŽfono rojoÐ, salas de reuniones vac’as, etcŽtera. Es el silencio ÐinevitableÐ que sucede a la tragedia Ðque parad—jicamente nos recuerda que algo ha sucedidoÐ.

La gente Aula de Cultura de la BBK / Hasta el 8 de diciembre

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Ixone Sádaba / Alberto Palomera LA sala de exposiciones de la Fundaci—n Bilbaoarte acoge hasta el 4 de diciembre una muestra del trabajo de la joven artista bilbaina Ixone S‡daba (1977). Bajo el t’tulo ÔMorir de Žxito en BilbaoÕ Ðque hace ir—nica referencia a una ciudad que S‡daba reconoce de doloroso recuerdoÐ, la artista presenta un conjunto de tres series de fotograf’as de gran formato, compuestas a su vez por tres obras cada una. En total, pues, nos encontramos con nueve obras en las que S‡daba ofrece un recorrido por su particular universo visual de paisajes inquietantes habitados por seres de corte mitol—gico en una ce-

UPV en la calle Banco Espa–a hemos podido disfrutar, hasta el 30 de noviembre, de una selecci—n de los œltimos trabajos del artista baracaldŽs Alberto Palomera (1962). Se trata de una serie de obras que Palomera, como es habitual en Žl, aborda de modo narrativo, de tal modo que cada uno de los elementos que las componen est‡ ubicado ah’ de forma consciente, con la intenci—n de que sirva al espectador de clave interpretativa desde la que descubrir el significado total de la pieza Ðy de la serieÐ. Es por esta raz—n por la que las obras de Palomera est‡n habitadas por todo tipo de elementos y objetos Ðtro-

Sádaba presenta en esta exposición la serie Phlegmone

lebraci—n de su condici—n de tales. La artista apunta que el tema de las fotograf’as es una reflexi—n en torno a la condici—n misma del ser humano, explicitada en nuestra imposibilidad fundamental de olvidar Ðante todo somos pasadoÐ esto es, los monstruos de S‡daba no son m‡s que la personificaci—n Ðm‡s bien Òmonstruizaci—nÓÐ de lo pasado vivido, que retorna, como en una tragedia shakesperiana, a saldar cuentas debidas. Ya lo dijo el poeta tr‡gico Agat—n cinco siglos antes de nuestra era: Òni siquiera Dios puede cambiar el pasadoÓ. En la Sala de Exposiciones de la

zos del mundoÐ que el artista va recopilando y que no duda en sumar a sus piezas, formando as’ lo que se podr’a denominar un Òcollage de significantesÓ. Nos encontramos as’ con obras en las que el artista ha incluido un trozo de una mand’bula de un animal, un texto propio, cuerdas, partes de alguna maquinaria, la recreaci—n de un detalle de otra obra, etcŽtera. Tampoco faltan las referencias a la propia historia del arte o a la iconograf’a religiosa, en unas obras que pretenden servir a modo de reflexi—n sobre el lugar que el hombre (la especie humana) ocupa en el universo.

Bilbao Ideal Pic-Nic Allée, 2000

CADA d’a de mi vida me he debatido en la tensi—n entre sentirme uno m‡s y pensarme uno menos. A veces Ðtantas veces cantando un golÐ he sentido con plenitud la sensaci—n de ser uno m‡s entre tantos, un ladrillo de un muro, una puntada de una gran bandera. Sin embargo, las m‡s de las ocasiones he mirado a mis iguales con fundamental desconfianza y cuando todos estaban de acuerdo, cuando todos se asent’an unos a otros, en mon—tono gesto, yo, para mis adentros, negaba con la cabeza y me afirmaba en mi radical diferencia, pensando, ay, Ác—mo es la gente! Es precisamente Òla genteÓ Ðese impreciso ente del que podemos decir cualquier cosaÐ lo que el fot—grafo italiano Massimo Vitali (Como, 1944) ha elegido como el gran tema de sus trabajos. Las obras de Vitali retratan la multiforme mancha en el paisaje que somos los humanos

cuando desplegamos nuestra actividad en grupo. Son fotograf’as tomadas desde una perspectiva en altura Ðall’ desde donde nos observan los diosesÐ, en las que Vitali, a travŽs del retrato de multitudes en playas, discotecas, supermercados o pistas de esqu’, realiza una reflexi—n en torno a lo que somos, en cuanto a grupo -especie o cultura, tanto da-. Pero las obras de Vitali no se agotan en esta lectura, ya que en ellas tambiŽn se observa una detenida atenci—n al tiempo Ðsobre todo en los d’pticos y tr’pticosÐ. En este sentido, cada una de las fotograf’as de Vitali pretenden dar el efecto de ser instantes, fotogramas de la interminable pel’cula que narra la historia de lo humano. Esto se logra con el retrato conjunto de decenas de conversaciones, juegos, besos, caricias, abrazos, discusiones o bailes que habitan las obras de Vitali y que en los d’pticos y tr’p-

ticos se muestran Ðen el espacio en que las fotograf’as convergenÐ en dos movimientos. Adem‡s Ðy se–alo esto expl’citamente como una virtudÐ, las obras de Vitali poseen una belleza de corte narrativo que no es f‡cil de lograr. Ante ellas se tiene la sensaci—n de poder estar horas observando, en un ejercicio de desentramado de la red de miles de historias que cada uno de los retratados insinœan y que, en conjunto, forman la gran escena que cada fotograf’a de Vitali es. Ese movimiento de observaci—n literaria, de generar historias en tormo a cada personaje que habita las obras del fot—grafo italiano puede ayudarnos a conjugar ÐÒimplicarÓ, en el sentido del tŽrmino que le da el fil—sofo Ortiz-OsŽsÐ las dos narrativas opuestas que nos hablan del ser humano como individuo o como simple parte de algo mayor, el Hombre.

Galería Aritza Hasta el 11 de diciembre LA Galer’a Aritza acoge hasta el 11 de diciembre los trabajos del pintor bilbaino Eduardo G. Villarroel (1970). Se trata de veintiœn obras de corte figurativo ÐdiecisŽis oleos sobre lienzo y seis dibujosÐ en las que el pintor muestra, a travŽs de un gran despliegue tŽcnico, su visi—n ideal de nuestra ciudad. En este Bilbao idealizado aparecen edificios y zonas emblem‡ticas y f‡cilmente reconocibles, como el Museo de Bellas Artes, el Teatro Arriaga, la plaza Nueva, la PŽrgola, una boca de metro, etcŽtera, pero descontextualizadas Ðm‡s bien re-contextualizadasÐ en la medida en que Villarroel cambia aquello que nos rodea para crear un ambiente m‡s clasicista (por ejemplo, el Teatro Arriaga aparece precedido por unos geomŽtricos jardines). Con esta excusa, Villarroel realiza un recorrido por la geograf’a bilbaina en el que se muestra una ob-

sesi—n por el pincel diminuto, el detalle Ðno siempre realÐ. En este sentido, su trabajo se inscribe en la mejor tradici—n figurativa vasca, en la que destacan los Jesœs Mari Lazkano, Javier Ria–o, I–aki Bilbao o el desaparecido Raœl Urrutikoetxea, aunque probablemente su referente m‡s cercano sea el de Agunst’n Reche. En el Bilbao ideal de Villarroel no hay personas, parece no haber sitio para el hombre (en la plaza Nueva no hay ni–os jugando a la pelota, nadie sale ni entra de la boca del metro, ninguna caravana de actores o mœsicos hay en la parte trasera del Arriaga). As’, el Bilbao ideal de Villarroel solo est‡ habitado por la vegetaci—n, las plantas. All’ el ser humano, como en las ruinas de civilizaciones pasadas, s—lo es un recuerdo, una evocaci—n pretŽrita, un soplo de viento que ha pasado.

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2004.eko abendua

La pinacoteca bilbaina presenta sus principales exposiciones para 2005

Un verano surrealista en el Bellas Artes Daniel Bacigalupe

EL Museo de Bellas Artes ha presentado recientemente su programa de exposiciones para el a–o que viene, del que se puede destacar su intento por abordar los movimientos art’sticos de vanguardia desde diferentes expresiones y perspectivas. De hecho, se trata de un recorrido cronol—gico que va desde la pintura de transici—n a las nuevas corrientes practicada por Daniel V‡zquez D’az hasta el arte pop brit‡nico, pasando por un profundo an‡lisis de los fundamentos que inspiraron a autores como Breton, Duchamp, Dal’ o Mir— a travŽs de la muestra ÔPar’s y los surrealistasÕ. Ser‡ Žsta sobre la que gire la oferta de la pinacoteca en los meses veraniegos, que en los œltimos a–os han sido propicios en cuanto a visitantes. ÔDaniel V‡zquez D’az 18821969Õ constituye la primera muestra de la pr—xima temporada. Entre el 21 de febrero y el 29 de mayo, el pœblico bilbaino podr‡ acercarse a la obra del artista onubense, figura clave en la cultura art’stica espa–ola de la primera mitad del siglo XX. El director del Museo de Bellas Artes, Javier Viar, se refiri— a V‡zquez D’az como un pintor Ònunca reivindicado como vasco, pero que desarroll— una relaci—n profunda con los acontecimientos y con la estŽtica de nuestro arteÓ. Sus contactos con Zuloaga, Durrio, Echevarr’a y los hermanos Zubiaurre, junto con los veranos que disfrutaba en Fuenterrab’a calaron hondo en su obra, como puede apreciarse en algunos cuadros del centenar que compondr‡n la exposici—n, Òenorme en dimensiones y calidadÓ, segœn Viar. Actualmente, la paleta de V‡zquez D’az Ðsimple en el trazo y discreta en el uso del colorÐ est‡ cosechando un gran Žxito en el madrile–o Museo Reina de Sof’a, coproductor de la retrospectiva.

La gran apuesta La llegada del est’o traer‡ a Bilbao ÔPar’s y los surrealistasÕ, una vasta compilaci—n de obras en los m‡s variados formatos: pintura, fotograf’a, escultura, pel’culas, documentos, objetos encontradosÉ Este heterogeneidad nos habla de un movimiento efervescente, an‡rquico y multidisciplinar que tuvo en el Par’s de entreguerras su perfecto caldo de cultivo. La muestra Ðco-producida con el Centro de Cultura Contempor‡nea de BarcelonaÐ realizar‡ un especial hincapiŽ el contexto art’stico e intelectual que viv’a la capital francesa en los a–os veinte y treinta, pero ofrecer‡ tambiŽn un recorrido hasta los estertores de un movimiento superviviente hasta la dŽcada de los sesenta. A partir del 20 de junio y hasta el 18 de septiembre, obras de Breton, Man Ray, De Chirico, Giacometti, Jean Arp, Marcel Duchamp, Magritte, Dal’ y Joan

Mir—, entre muchos otros, nos mostrar‡n una amplia selecci—n en la que quedan patentes la transgresi—n, la interrelaci—n de disciplinas art’sticas y el compromiso pol’tico consustanciales al Surrealismo. Con semejante n—mina de creadores, los gestores del Museo dejan clara su apuesta por las grandes exposiciones veraniegas, como ya sucediera este a–o con ÔDe Ingres a CŽzanneÕ.

Fábrica dormida, de Vázquez Díaz

The Hand, 1930. Salvador Dalí

Le muse inquietanti. Giorgio De Chirico

Programa de exposiciones ●





ÔV‡zquez-D’az 1882-1969Õ. Del 21 de febrero al 29 de mayo de 2005. ÔPar’s y los surrealistasÕ. Del 20 de junio al 18 de septiembre. ÔBritish PopÕ. Del 17 de octubre al 12 de febrero de 2006.

Para el oto–o el Bellas Artes ha optado por una muestra de producci—n propia, titulada ÔBritish PopÕ y cuyo comienzo est‡ fijado para el 17 de octubre. Comisariada por el historiador y miembro de la Comisi—n Art’stica Asesora del Museo, Marco Livingstone, la exposici—n est‡ enfocada a los or’genes del pop-art, cuyos or’genes tienen lugar en Gran Breta–a, a pesar de que el gran pœblico identifique esta corriente con las obras de artistas estadounidenses como Andy Warhol y Roy Lichtenstein. Livingstone, responsable tambiŽn de la reciente ÔKitaj. Retrato de un hispanistaÕ y uno de los principales estudiosos de este movimiento,

seleccionar‡ obras de David Hockney, el propio Kitaj, Patrick Caulfield, Richard Hamilton, Peter Blake, Allen Jones y Peter Phillips, por citar algunos. El centenar de piezas reunidas para la muestra entre pinturas, esculturas y obra gr‡fica diversa estar‡ abierta al pœblico hasta el 12 de febrero de 2006. Los responsables del Museo no anunciaron, sin embargo, quŽ piezas se incluir‡n en el apartado ÔLa obra invitadaÕ, programa que actualmente exhibe A la toilette, una pintura emblem‡tica dentro de la producci—n de Toulouse-Lautrec. Permanecer‡ hasta el 16 de enero. Por otra parte, Javier Viar adelant— parte de la actividad del Museo al margen de la programaci—n expositiva. A comienzos de 2005, concretamente entre el 12 de enero y el 2 de marzo, la pinacoteca retomar‡ sus habituales ciclos de conferencias relacionadas con temas, autores o episodios significativos de la historia del arte. ÔTiziano y el legado veneciano en el Museo del PradoÕ ser‡ el asunto que centrar‡ las charlas, en las que colaborar‡ la Fundaci—n Amigos del Museo del Prado. En lo que a la Cinemateca se refiere, entre este mes y el primer trimestre del a–o pr—ximo tendr‡n lugar ciclos dedicados al cine rumano y la literatura, al melodrama americano de los 50 y a los directores Roberto Rossellini y Orson Welles.

For men onlyStarring MM and BB, 1961. Peter Phillips

136.000 visitantes EL Museo de Bilbao ya ha superado el nœmero de visitantes registrado en 2003. En lo que llevamos de a–o han pasado por sus salas 136.000 personas, una cifra que permitir‡ llegar a las 150.000 que se hab’an fijado como objetivo para el presente ejercicio. El diputado general de Bizkaia, JosŽ Luis Bilbao, que acudi— a la presentaci—n de la nueva programaci—n de la pinacoteca junto a la diputada de

Cultura, BelŽn Greaves, se–al— la importancia de los meses de verano en el flujo de visitas, Òalgo impensable hace a–os, cuando la ciudad se quedaba vac’a por esas fechasÓ. Asimismo, Bilbao dio a conocer la distribuci—n de los asistentes en cuanto a su procedencia: el 21% es pœblico local, el 56% viene de otras comunidades aut—nomas y un 23% corresponde a los visitantes extranjeros.

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Homenaje a Vázquez Montalbán

Zezen torturatua

Teléfonos de interés Peri—dico Bilbao: 94 420 44 45/48 80 Fax: 94 420 44 39 Peri—dico en Internet: www.bilbao.net E-mail: [email protected] SERVICIOS MUNICIPALES: Centralita: 94 420 42 00/45 00 Informaci—n municipal: 010/94 424 17 00 O.M.IC. 94 420 49 71 Albergue de Bilbao: 94 427 00 54 Hallazgos: 94 420 49 81 Dep—sito Mun. Veh’culos: 94 420 50 98 Biblioteca de Bidebarrieta: 94 415 69 30 Fundaci—n Bilbao 700: 94 679 04 88 OFICINAS MUNICIPALES DE DISTRITO: Deustu: 94 476 23 31 Uribarri: 94 446 75 11 Txurdinaga: 94 411 46 96 Bego–a: 94 411 68 72 Ibaiondo: 94 416 31 88 Abando: 94 424 29 84 Errekalde: 94 444 73 39 Basurtu: 94 420 49 57 Zorrotza: 94 482 09 78 URGENCIAS: SOS DEIAK: 112 Polic’a Municipal: 092/94 420 50 00 Bomberos: 080 Ambulancia municipal: 94 441 00 81/09 49 Osakidetza: 94 410 00 00 Igualatorio: 902 20 21 60 DYA: 94 410 10 10 Sanitas: 902 10 36 00 Cruz Roja: 94 422 22 22 Unidad recogida de indigentes: 629 77 35 37 629 43 50 38 Ayuda en carretera: 94 415 67 89

GUZTIOK ezagutzen dugun, edo behintzat, ezaguna dugun euskal talde famatu bat dago, Latzen izenekoa, argitaratutako bere 2. eta azkenengo diskan zezenketei buruzko zalaketa gogorra egiten duena, oso ondo landu-tako kanta baten bitartez. Kitarra espainolaren doinu labur baten bidez, entzulea egoeran sartzen du, zezen minduaren ikuspegitik narratutako zezenketa baten deskribapena-ri sarrera eginez. Ikuspunu latza eta amorruz bea, hain zaharra den espai-niar ohitura torturatzaile honen aurrean. Gutun honen egileok abestia arretaz entzutea gomendatzen diogu inte-resa daukan edozeini, kantuak zezenaren sufrimenduaz kontzientziatzea baitauka helburutzat, diskaren izena ÒKontzientzia ala infernuaÓ delarik. Era berean, espetxeratutako presoen torturaren metaforatzat hartzen dute batzuk. Bai azken planteamenduari buruz, bai zezenketei buruz, bai kantari buruz... Zer uste duzue zuek?

LA Fundaci—n Idi Ezkerra rindi— un homenaje p—stumo en el Museo Mar’timo R’a de Bilbao al escritor catal‡n Manuel V‡zquez Montalb‡n, con motivo del primer aniversario de su muerte. Durante el acto se entreg— una placa conmemorativa a la viuda del autor, Anna Salles, e intervinieron el presidente de la fundaci—n, Antton Karrera, el escritor Bernardo Atxaga y el profesor de Literatura de la Universidad de Dartmouth, Txetxu Aguado, estudioso de la obra del polifacŽtico escritor.

Esperanza para el fondo marino

Izaskun eta Loreain. Bilbo-Getxo

Goteras en El Fango VEMOS con dolor y resignaci—n como sigue habiendo goteras en el Aula de Yoga del Polideportivo El Fango. Y todo esto a pesar de las recientes reformas que se han realizado en el mismo. Creo recordar que tuvimos que remover cielo y tierra para conseguir que se realizaran dichas reformas. Y ahora resulta que en la parte que nos toca todo sigue igual... perd—n, peor que antes porque tras las molestias de las obras y el gasto del dinero pœblico no hemos avanzado nada. Pagamos cada mes doblemente: la cuota del I.M.D. y la cuota de Yoga. Exigimos, porque lo merecemos, unas condiciones optimas para el desarrollo de la actividad. Abonad@s al I.M.D.

GREENPEACE trajo el pasado mes a Bilbao su campa–a para la preservaci—n de los fondos marinos y contra la pesca de arrastre. La campa–a comenz— hace dos a–os para exigir a la ONU una moratoria que impida la utilizaci—n de estas agresivas artes de pesca. Su buque ÔEsperanzaÕ atrac— en los muelles del Museo Mar’timo escasamente durante dos d’as, tiempo en el que todo el que subi— a bordo tuvo ocasi—n de contemplar una exposici—n sobre las profundidades marinas y un v’deo sobre el trabajo realizado por la organizaci—n ecologista.

AVERIAS: Aguas: 94 424 99 09 Iberdrola: 901 20 20 20 Bilbogas/Naturgas. 900 40 05 23 HOSPITALES: Basurtu: 94 400 60 00 Cruces: 94 600 60 00 Galdakao: 94 400 70 00 Gorliz: 94 400 66 00 Santa Marina: 94 400 69 00 San Eloy: 94 400 67 00 TRANSPORTES:

Elías Amezagari omenaldia MARRODAN Olerki Elkarteak El’as Amezaga euskal idazleari omenaldi bat eskaini zion pasa den hilabetean. Inaugurazio egunean, azaroaren 3an, afari bat ospatu zen non egon ziren Amezagaren inguruan egon den eta dagoen jende gehiena, besteak beste, Emilio Mœgica Enecotegui, Bizkaiko RSBAP-en zuzendari ohia. Bestalde, omenaldiko beste ekitaldietan, azaroaren 9, 10 eta 11n, Pedro Bareak eta Jose Angel Askunzek, EHU-eko irakasleek, edo Mario Angel Marrodan olerkariak parte hartu zuten. Erakusketa azaroaren 3tik 30era bitartean irekita egon da.

Bilbobus: 94 448 40 80 Bizkaibus: 902 22 22 65 Metro Bilbao: 94 425 40 00/25 Aeropuerto: 94 486 96 63/64

Servicio de Relaciones Ciudadanas

El secreto mejor guardado EL pasado mes Alfonso Carlos Saiz Valdivielso entr— en los salones de la Sociedad Bilbaina para asistir a una cena familiar y se encontr— con m‡s de cien personas que, puestas en pie, le rend’an tributo por su labor en pro de la cultura y, en concreto por los a–os dedicados a la exaltaci—n de la Fiesta de los Toros a travŽs de la entrega de sus premios ÔClar’n TaurinoÕ. Al acto acudi— lo m‡s granado de nuestro Bilbao y varios de los galardonados por Clar’n como el maestro Angel Luis Bienvenida, Roberto Dom’nguez, Pedro Romero de Solis, Jean Pierre Hedoin, y Araceli Guillaume. Por v’a telef—nica quisieron estar presentes en el acto, los maestros Manolo V‡zquez y JosŽ Miguel Arroyo ÔJoselitoÕ. Gracias a las telecomunicaciones, el pianista Joaqu’n Achœcarro hizo llegar su afecto a Alfonso a travŽs de unas im‡genes grabadas en v’deo, y por carta llegaron emotivas adhesiones del Alcalde I–aki Azkuna, la soprano Teresa Berganza, el acadŽmico Pablo Lucas Verdœ y la viuda de JosŽ M» Requena, entre otras. Fue una noche de emociones, una noche de familia rodeada de amigos para decirle a una persona lo mucho que le admiran, lo mucho que le quieren. Seguramente ese d’a marcar‡ un antes y un despuŽs en su vida. Claridades

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Tres agrupaciones analizan el consumo de droga entre la juventud

Drogamenpetasunei buruzko III. Udal Plana abian dago Maribel Suarez

Drogen prebentzioa, guztion erantzunkizuna

Moreno Esquibelen argazkia

Askagintza

Orientazio zerbitzuak aholkuak eta laguntza ematen die hiritarrei

Zuriñe Hurtado de Saratxo

AZKEN hamar edo hamabost urte hauetan gazteek kontsumitzen dituzten droga motak nahiko aldatu dira: anfetaminak, speed edo kannabisa dira, besteak beste, gaur egun ezagunenak. Aldaketa horrek eragin du gurasoek edo hezitzaileek askotan ez jakitea drogen arazoari nola aurre egin. ÒAuzoko batek gure semearen lagun-taldekoak porroak erretzen ikusi dituela esan digu baina semeak hori gezurra dela dio. Kontua da beste egunean txina bat topatu genuela poltsikoan eta, egia esan, nahiko kezkatuta gaudeÓ. Hau bezalako egoerak ohi jasotzen ditu Bilboko Udaleko Osasun eta Kontsumo Sailaren Drogamenpekotasunen Zerbitzuak, Gaztetxoak dituzten familiei drogei buruzko orientabideak emateko izeneko zerbitzuak, hain zuzen. ÒNagusiek gehienetan ez dituzte substantzia horiek ezagutzen, beraz, guregana etortzen dira laguntza eskeÓ, azaltzen dute. Ildo horretatik eta gertakari aldakor honi erantzuna emateko, 2004-2008 Drogamenpetasunei buruzko III. Udal Plana abian jarri da. Dokumentu hau osatzen eskumena duten administrazioek ez ezik, gizarte-erakundeek, profesionalek eta komunitateak berak ere hartu dute parte. ÒHirugarren plan hau egiteko zeintzuk diren azkenengo hartzaileak kontutan hartu dugu eta horiei zuzendu egin ditugu gure ekintzak. Horrela, plana lau kolektibotan banatuta dago: haurrak, nerabeak, gazteak eta hiritar guztiakÓ, azaltzen dute Drogamenpekotasunen Negoziatutik. Udal planak kolektibo

hauetan arrakasta izateko zenbait esparrutan jardungo du: heziketa, famili eta esparru komunitarioan. Orientazio Zerbitzua Esparru komunitario horren barruan Orientabideak emateko Zerbitzu bat dago non hiritarrei telefonoz nahiz pertsonalki aholku eta laguntza emango zaien. ÒDrogen kontsumoak aldatu dira, esate baterako, kannabisarena. Orain dela urte batzuk porroak erretzen zituztenek ezkutuan egiten zuten baina gaur egun substantzia hau normaltzat hartzen da. Guraso askok ez daukate nahiko informazioa honen gainean eta bere semealabak kontsumitzen duela susmatzen dutenean kezkatzen diraÓ. Dena den, askotan kezka horrek ez du esan nahi arazo la-

rria dagoenik. Kasu horretan egoera aztertu behar da, gaztea esperimentatzen ari den, asteburuko kontsumoa egiten duen edo egunero erretzen duen ikusteko. Analisia egiteko arrisku edo, ostera, babespen faktoreak kontutan hartzen dituzte: familia, eskola, lagunen arloan... ÒEgoera larria ez bada, gehienetan, guk antolatutako saio batzuekin nahikoa izaten da arazoa konpontzeko. Bestela, gazteak zerbait sakonagoa behar duela ikusten badugu, konbenio bat daukagu zenbait zentroekin eta hara bidaltzen duguÓ. Horrez gain, beste atal bat dago irakasleei zuzenduta. Horretan Drogamenpetasunen Zerbitzuak azaltzen die nola landu behar duten drogen arazoa geletan. Horretaz aparte, zerbitzuak hezitzaile, aisialdiko edo gauez lan egiten duten taberneroentzat zuzenduta dauden beste zenbait ikastaro dauzka. Dena den, nahiz eta gizarteak informazio gehiago eduki, estatistikek diotenez, gazteak gero eta lehenago hasten dira drogak kontsumitzen eta gizarte baldintzak, ekonomikoak edo kulturalak ez dute zerikusirik. Substantziei dagokienez, hatxisa da gehien igo dena. Hala ere, alkoholak jarraitzen du kolektibo honen ÒgogokoenaÓ izaten. ÒPrebentzioaren emaitza onak ikusteko denok lan egin behar dugu: gurasoak famili esparruan, irakasleak heziketan, politikoak esparru komunitarioan... Askotan drogei ez diegu ematen behar den garrantzia eta eratorpenak egoten dira. Azken finean, drogak guztion arazoa dira eta bakoitzak bere ardurak hartu behar duÓ, azpimarratzen dute.

EL problema del consumo excesivo entre los j—venes no se puede solucionar si analizamos la droga como una sustancia aislada. Es necesario trabajar esta cuesti—n de una forma global, analizando cu‡les son los fen—menos culturales y sociales que nos relacionan con esas sustancias, cu‡les son los factores de riesgo o los de protecci—n... Desgraciadamente, vivimos en una sociedad que funciona de modo individual y consumista. Se est‡ potenciando cada vez m‡s el valorar a las personas a travŽs de lo que tienen, de lo que demuestran y no por lo que realmente son. Esta percepci—n est‡ provocando unos problemas de autoestima y ansiedad tremendos en la sociedad. En este sentido, uno de los pilares fundamentales ser’a la prevenci—n. Los j—venes deben recibir una informaci—n estructurada, objetiva, real y, en la medida de lo posible, cient’fica sobre quŽ son realmente las drogas y c—mo pueden afectar. Ser’a recomendable, adem‡s, no trabajar en funci—n de las alarmas sociales que surgen en momentos puntuales, porque es la peor forma de hacerlo, hay miedo entre la sociedad y para paliar el problema se toman medidas precipitadas.

Eduardo de la Sota Fundación Etorkintza EN los œltimos a–os han cambiado los tipos de drogas, as’ como la forma de consumo. Si hace 20 a–os eran prevalentes sustancias como la hero’na, el cannabis o el alcohol, es decir, sustancias depresoras del sistema nervioso, hoy en d’a se han puesto de moda las estimulantes: anfetaminas, coca’na... que se toman en combinaci—n y, por tanto, lo que hay es una politoxicoman’a, al mezclar drogas estimulantes con tranquilizantes. Esta conducta ha provocado, a su vez, que m‡s del 50% de los consumidores abusivos de estas sustancias tengan problemas psiqui‡tricos, como depresiones, ansiedad, episodios psic—ticos... Es cierto que existe una mayor preocupaci—n social sobre el consumo de drogas entre los j—venes pero, por otro lado, vivimos en un mundo m‡s interconectado, m‡s relacional, m‡s abierto en tŽrminos de comunicaci—n, que hace que el acceso a este tipo de sustancias sea m‡s f‡cil. Para acabar con esta situaci—n es importante abordar esta problem‡tica de modo integral, a todos los niveles: familiar, educativo, jur’dico... Evidentemente, la prevenci—n es un recurso b‡sico pero no podemos olvidar cuestiones como la asistencia o la reinserci—n.

Estíbaliz Barrón Fundación Gizakia UNA de las claves para acabar con los consumos excesivos de drogas por parte de los j—venes estar’a en clarificar determinados mensajes que Žstos reciben, es decir, en evitar transmitir informaciones confusas y dif’ciles de asimilar. Por ejemplo, en la actualidad muchos adolescentes vanalizan el consumo de cannabis escud‡ndose en su uso terapŽutico. Esta afirmaci—n es cierta, sin embargo, ser’a lo mismo que decir que como los analgŽsicos tienen un uso terapŽutico, cualquier persona puede consumirlos, a pesar de no necesitarlos. Este es un ejemplo simple, pero demuestra c—mo los j—venes reciben mucha informaci—n, de distintos ‡mbitos, y que necesitan datos que acompa–en esos procesos de conocimiento de las sustancias. En este sentido, nosotros defendemos profundamente las campa–as de prevenci—n pero quiz‡ tendr’amos que replantearnos algunos de sus contenidos, ya que en ocasiones Žstas no atinan directamente sobre la poblaci—n a la que deben ir dirigidas. A veces no tienen por quŽ estar espec’ficamente orientadas a los sujetos de riesgo y puede ser m‡s œtil centrarse en agentes relacionados con ellos.

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Bilbao La Vieja se transforma

El nuevo paseo de Los Caños une Atxuri y La Peña

Modernidad e historia junto a la Ría

La desaparición de fachadas ciegas ha sido prioritaria

Zuriñe Hurtado de Saratxo

BILBAO La Vieja est‡ sufriendo una significativa transformaci—n a travŽs de las diferentes acciones que la sociedad municipal Surbisa est‡ llevando a cabo en la zona. De esta forma, desde el a–o 2001 la entidad viene trabajando en la limpieza de graffitis y pintadas as’ como en la intervenci—n estratŽgica de fachadas. La finalidad de este programa es, por un lado, conseguir la limpieza y uniformidad de los tratamientos arquitect—nicos del edificio y, por otro, intentar disuadir a quienes llevan a cabo este tipo de pintadas. Adem‡s de estas medidas, Surbisa ha procedido a la intervenci—n estratŽgica en fachadas de gran impacto visual, en su mayor’a ciegas, para llevar a cabo la apertura de ventanas y convertirlas en fachadas principales para que de esta forma queden integradas debidamente en el paisaje urbano. Muchas de ellas estaban ocultas por edificios pero tras su derribo han quedado a

comunes del edificio. Estas viviendas estar‡n destinadas al alquiler a personas de menores de 35 a–os. A travŽs de este tipo de medidas Surbisa quiere intervenir activamente en la pol’tica de rehabilitaci—n integral de la zona, mediante la compra de edificios en mal estado de conservaci—n. ÒEl objetivo principal es que los nuevos inquilinos ayuden a lograr la regeneraci—n sociol—gica necesaria en esta zona, adem‡s de contribuir a paliar el problema de la viviendaÓ, afirma Julia Madrazo, concejala de Urbanismo y Medio Ambiente del Ayuntamiento de Bilbao y presidenta de la sociedad municipal Surbisa.

Premios de Rehabilitaci—n de Edificios Adem‡s de todas estas medidas que se est‡n llevando a cabo en Bilbao La Vieja, el Area de Urbanismo y Medio Ambiente ha convocado recientemente la novena edici—n de los premios Surbisa de Rehabilitaci—n, que tienen como objetivo valorar el trabajo realiza-

El edificio de Cortes 16 estará destinado al alquiler de personas menores de 35 años la vista. Para llevar a cabo la conservaci—n de las fachadas, la entidad municipal ha protegido elementos arquitect—nicos de interŽs como son, por ejemplo, la madera de ventanas y miradores o las puertas de portales.

Edificio de la calle Cortes Por su parte, Viviendas Municipales de Bilbao ha adquirido recientemente el edificio de la calle Cortes 16, un conjunto de diez viviendas que ha sido rehabilitado ’ntegramente por Surbisa. Para reformar cada una de las cinco plantas se ha realizado una obra de intervenci—n integral, que ha afectado tanto a la consolidaci—n de la estructura como a los elementos

do por promotores, constructores, arquitectosÉ en las reformas de edificios, viviendas y locales comerciales del Casco Viejo y Bilbao La Vieja. Estos premios estar‡n divididos en cuatro modalidades: vivienda, comercio, edificio completo y de uso equipamental con valor arquitect—nico monumental. La rehabilitaci—n urban’stica de la zona se ver‡ premiada con el galard—n ÔLa ColumnaÕ, una escultura creada por el artista Luis Gueilburt. La entrega de premios se celebrar‡ el pr—ximo 20 de diciembre en la Biblioteca de Bidebarrieta y contar‡ con la participaci—n del mœsico vasco Kepa Junkera que ofrecer‡ un recital.

LAS peticiones de los vecinos de Atxuri y La Pe–a se han hecho realidad, ya que desde hace unos d’as pueden transitar a lo largo de los 750 metros de extensi—n del rehabilitado paseo de Los Ca–os. Las obras acometidas por el Ayuntamiento en esta ‡rea gracias a una inversi—n de 2,12 millones de euros han permitido recuperar este emblem‡tico paraje del siglo XIX, transformado en una serie de huertas periurbanas tras la Guerra Civil, y convertirlo en una nueva zona de paseo y esparcimiento. Ese nuevo espacio es fruto de la apuesta municipal por crear una red de infraestructuras que faciliten la movilidad respetuosa con el medio ambiente por lo que se funden un dise–o y funcionalidad adaptados a los tiempos actuales sin olvidar el gran valor hist—rico de Los Ca–os como patrimonio historico de la Villa. En este sentido, se han utilizado materiales naturales para la creaci—n de c—modos senderos para los usuarios en los que se han incorporado farolas y bancos para que se pueda circular a cualquier hora del d’a, as’ como un bidegorri de 2 metros de ancho que discurre por todo el paseo. Desde la avenida Miraflores y la plataforma que constituye el paseo se extiende una zona verde compuesta por casta–os de indias rojos y blancos y robles americanos, entre otras especies vegetales.

Fotos Moreno Esquibel

Lucía Espinosa

A lo largo de todo el paseo discurre un nuevo bidegorri

Equipamientos Las nuevas instalaciones tambiŽn cuentan con una plaza edificada sobre los talleres de Euskotren de Atxuri en la que se ha colocado una zona de juegos infantiles y paneles informativos con referencias hist—ricas sobre el camino. Asimismo,

se ha equipado la vereda con una red de abastecimiento para el riego que da servicio a las diferentes bocas de riego e hidrantes instaladas, as’ como con una red de pluviales que recoge el agua procedente de las lluvias por medio de una canaleta central.

Etxebizitzari buruzko udalaren lehenengo plana Z. H. de S.

BILBOKO Udaleko Hirigintza eta Ingurumen Sailak Ikei kontsultore-enpresari eman dio Bilboko etxebizitzari buruzko Udalaren lehenengo plana idazteko lana. 2004-2007 Plana honen helburua beharrizana dutenei etxebizitza emateko ekintzak planifikatzea da. ÒHauxe da etxebizitza publikoa agenda politikoan sartzeko aurreneko urratsa. Plan honen bidez, etxebizitza eskaini nahi zaie premia duten guztieiÓ, adierazten du Julia Madrazok, Hirigintza eta Ingurumen Saileko zinegotziak. Lanak hiru fasetan banatuta dago. Lehenengo fasea izango litzateke Bilboko etxebizitzaren egoerari buruzko diagnostiko bat egitea. Honetan etxebizitza pu-

blikoaren arloan dauden premiak, eskariak eta eskaintzak jakingo dira. Horretarako, zenbat lagunek behar duten etxebizitza, bilakaera demografikoa, etxebizitza berriak egitea, migraziomugimenduak, eskatzaileen tipologia ekonomikoa, soziala edo familiarra, besteak beste, kontutan hartuko da. Hirigintza eta Ingurumen Saileko zinegotziak azaldu zuenaren arabera, Udal Gobernuaren itunean udal lurzoruaren ondarea gehitzeko eta babestutako 3.000 etxebizitza sustatzeko konpromisoa dago jasota, Òbaina frogatuta dago eskaria handiagoa dela eta eskaintza, ordea, ez dela nahikoaÓ. Fase hau 2004ko abenduan amaituko da. Ondoren, bigarrena burutuko da. Fase honen helburua izango da Udalaren jarduna eta antolaketa aztertzea etxebizitzaren ar-

loan. Hau 2005eko urtarrilean amaituko da . Dena den, ordurako, Udalaren etxebizitza arloko antolaketa eta baliabideak finkatuta egon behar dira udal enpresen jarduerekin eta eginkizunekin, inplikazioak Tokiko Agenda 21ean, ekonomi eta finantza egoera eta beste udalerri batzuetan burututako praktika onen aipamenak. Azkenik hirugarren fasea egingo da eta honetan etxebizitzari buruzko Udal Plana egingo da. Hau martxoan amaituko da, Bilbon etxebizitza behar dutenei emateko zer egin behar den aurkezten dutenean. Aurretik, besteak beste, hutsik dauden etxebizitzak baliatzeko, etxebizitzak egiteko espazioak doitzeko edo merkataritzako lokalak etxebizitza bihurtzeko aukerak aztertuko dira.

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‘Emprendedoras del s. XXI’

CENTRO DE FORMACION DE MONTAÑO.– El alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, acompañado de varios miembros de la corporación municipal, inauguró un nuevo centro de formación en el antiguo colegio público Montaño en Uribarri, una herramienta dependiente de la sociedad municipal Lan Ekintza-Bilbao al servicio de la formación y el empleo de colectivos con dificultades para acceder al mercado laboral. En concreto, se impartirán módulos de fontanería, carnicería, pastelería, cocina, camarero, camarera de planta y limpieza de superficies. Las obras de remodelación, que han supuesto una inversión de 906.000 euros, han dado la primera oportunidad de trabajo a 100 personas

LA sociedad municipal Lan EkintzaBilbao y BBK convocan el tercer programa ÔEmprendedoras del s. XXIÕ con el fin de apoyar la creaci—n de empresas dirigidas por mujeres. Las destinatarias son fŽminas cuyo proyecto estŽ liderado en m‡s de un 50% por mujeres, preferentemente mayores de 30 a–os, y que quieran ubicar su negocio en Bilbao. Adem‡s del asesoramiento habitual se realizar‡n 2 talleres anuales sobre informaci—n econ—mica y de mercado de Bilbao y otro sobre inform‡tica como ayuda para realizar el plan de negocio y la gesti—n de la futura empresa. Como novedad, el ÔProyecto MentoringÕ brindar‡ el apoyo de un mentor de gran experiencia empresarial a las promotoras cuyo plan de negocio estŽ en una fase muy avanzada de estudio.

Tranbiaren bidaiarien kopurua

Mugikortasunaren Jardunaldiak

Bizkaiko Erakusleihoen XXI. lehiaketa

UZTAILAREN 22tik Bilboko tranbiak ibilbidea luzatu zuenetik, Basurtu auzoraino, bidaiarien kopurua nabariki igo da eta, gaur egun, milioi eta erdi erabiltzaile inguruk bidaiatzen du garraio publiko honetan. Horrela, Euskotran-en arabera, 2003ko lehenengo hamar hilbateko bidaiariak aurtengoenkin koparatzen badira, kopurua %137tan igo egin da. Izan ere, 2003an 738.000 lagunek erabili zuten garraio hau eta aurten, berriz, 1.753.000 erabiltzailek tranbia hartu dute hirian zehar mugitzeko. Gainera, konpainiaren arduradunek Zubiarte merkataritza-zentroaren inaugurazioarekin bidaiariak are gehiago igotzea espero dute.

PASA den hilabetean ÔIII Encuentro Ciudadano con la MovilidadÕ, izeneko jardunaldiak ospatu ziren Bilbon. Ekitaldi honetan Ibone Bengoetxeak, Zirkulazio eta Garraio Saileko zinegotziak, RAC-en zuzendaria den Joaquin Arevalok eta zenbait hirigile eta arkitektok, besteak beste, parte hartu zuten. Ateratako ondorioen artean, nabarmenena, Bilbon egunero 130.000 auto sartzen direla eta gehienek okupatzaile bat baino ez daukatela. Datu horiek %63tan murrizteko ibilgailu bakoitzak 3 pertsona eroatea nahiko izango litzateke.

BILBOKO Merkataritza Ganberak antolatzen duen Bizkaiko Erakusleihoen Lehiaketaren XXI. edizioa abian jarri da, Ô La clave para ganarÕ izenburuarekin. Honen helburua lurraldeko hiri, herri edo auzoen irudi komertziala bultzatzea da. Aurtengo lehiaketa honetan, 54 sari banatuko dira, aurreko urtean baino 2 gehiago. Beraz, nahi duten merkataldegiek bere izena eman dezakete abenduaren 8ra arte. Pasa den urtean, Bizkaiko 36 udalerriko 537 dendak parte hartu zuten lehiaketan. Guztira, azken 5 urte hauetan txapelketak 2000 saltegi inguru bildu ditu.

VARGAS LLOSA Y VALDES EN BILBAO.– El Alcalde Iñaki Azkuna recibió en el Ayuntamiento al escritor Mario Vargas Llosa y al escultor Manolo Valdés, acompañados por sus respectivas esposas, y al director general de Bilbao Ría 2000, Angel Nieva, como acto previo a la visita oficial a La exorcista, la escultura de bronce elaborada de forma conjunta instalada en la Plaza Cantalojas. Los autores de la obra coincidieron en que es la primera de la “estatuas habladoras” que se dirige directamente a los ciudadanos incorporando un texto poético del literato peruano: “conformando un todo, no un añadido, ni un acompañamiento”

Plan Integral de Rehabilitación 2005-09 LA Mesa por la Rehabilitaci—n de Bilbao La Vieja conformada desde hace diez a–os por las administraciones vascas junto con colectivos y asociaciones vecinales, pondr‡ en marcha a comienzos de 2005 la tercera parte del Plan Integral de Rehabilitaci—n en los barrios de Bilbao La Vieja, San Francisco y Zabala que se prolongar‡ hasta 2009 para equipar esta zona al resto de barrios del municipio. El nuevo plan dar‡ continuidad al desarrollado entre 2000 y 2004 centr‡ndose en el ‡mbito urban’stico, social, econ—mico, laboral, educativo y cultural. Adem‡s, recoger‡ las propuestas en 24 ciudades europeas que fueron presentadas en el foro ciudadano internacional organizado el pasado mayo por la Mesa por la Rehabilitaci—n. Una vez que estŽ concluido y tras la financiaci—n del Gobierno vasco a travŽs del Plan Izartu, se presentar‡ a los diferentes grupos pol’ticos para que aporten las alegaciones oportunas.

Acuerdos de Bilbao Ría 2000 LA sociedad Bilbao R’a 2000 aprob— recientemente en su Consejo de Administraci—n el borrador de un Acuerdo Marco entre el Grupo Iberdrola y el Ayuntamiento de Bilbao para adquirir la totalidad de los aprovechamientos de la parcela 204 del PERI de Abandoibarra, en la que est‡ prevista la construcci—n de una torre de oficinas de 50.000 m2, que a partir de ahora pasar‡ a llamarse Torre Iberdrola, y de dos edificios anexos de uso residencial de 20.000 m2. Adem‡s, se adjudicaron las obras de las ÔInfraestructuras de Basurto-1» Fase, Soterramiento de la l’nea de FEVEÕ, las obras de la Estaci—n de Miribilla, los trabajos de urbanizaci—n del Parque de Ribera del R’o Galindo y la asistencia tŽcnica correspondiente a la realizaci—n de un estudio general de las actuaciones a realizar en Basauri. TambiŽn cabe destacar la ratificaci—n de los tŽrminos de un Convenio entre el Consistorio bilbaino, FEVE y Bilbao R’a 2000, para acometer la peatonalizaci—n de la calle JosŽ M» Olabarri, as’ como la remodelaci—n del vest’bulo y la fachada posterior de la estaci—n de la Concordia. El delegado del Gobierno en la CAV, Paulino Luesma se incorpor— al Consejo de Administraci—n de esta entidad en representaci—n de la Sociedad Estatal de Promoci—n y Equipamiento del Suelo (SEPES).

Tokiko Agenda 21 BILBOKO Udaleko Hirigintza eta Ingurumen Sailak abian jarri du Tokiko Agenda 21, beronen ekin-tzaplana, uriko ingurumen, ekonomi eta gizarte mailako baldin-tzak hobetzeko. Proiektu hau zenbait fasetan egingo da. Lehenengoa zazpi hilabete barru amaituko da. Tokiko Agenda 21 jasangarritasuna tokiko ekintzetara ekartzeko hausnarketa, partaidetza eta adostasun prozesua da. Proiektua aurrera joateko herritarren partaidetza handia behar, erabakiak har-tzeko bidea emango duten fase guztietan esku hartuta, hala nola, baliabide naturalen kontsumoa gutxitzen, energia berriztagarriak jartzen edo enplegu berriak sortzen.

Oficina de información de CTB LA estaci—n intermodal de San MamŽs contar‡ tras su inauguraci—n con la primera oficina de atenci—n al pœblico del Consorcio de Transportes de Bizkaia (CTB), la entidad que acomete la construcci—n del Metro y gestiona el Creditrans. En este espacio una persona por la ma–ana y otra por la tarde informar‡n y recibir‡n las quejas de los usuarios sobre los servicios de la estaci—n intermodal y sus operadores, as’ como del resto de transportes del territorio. En las instalaciones se colocar‡n adem‡s paneles informativos on-line con los horarios de llegada, retrasos o incidencias de los transportes. El emplazamiento de la oficina ser‡ el vest’bulo comœn de acceso al Metro, Termibœs, Renfe y Tranv’a y la entrada estar‡ junto a la parada de este œltimo.

Nuevos cines Renoir Deusto LA cadena de cines Renoir cuenta con nuevas instalaciones en Bilbao, una vez finalizadas las obras de reforma iniciadas en agosto en los antiguos cines Avenida sitos en Lehendakari Agirre, 23 del barrio de Deusto. Bajo el nombre Renoir Deusto el d’a 10 se inaugurar‡n seis salas de cine que disponen de un aforo de aproximadamente 650 butacas y pantallas de dimensiones superiores a las anteriores, en las que se exhibir‡ cine independiente y de alta calidad vasco, espa–ol, europeo, asi‡tico y americano, as’ como filmes en versi—n original, dejando a un lado las grandes producciones norteamericanas.

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‘Santurtzitik Bilbora’ XVI. Lasterketa AZAROAREN azken igandean ÔSanturtzitik BilboraÕ errepideko lasterketaren XVI. edizioa ospatu zen. Hau Bizkaian dauden nazioarteko herri lasterketatik partaidetzarik handiena duena da. Aurten 3.000 pertsona inguruk parte hartu zuten, denak sexuaren eta adinaren araberako kategoriatan banatuta. Lasterketara Bizkaiko parte-hartzaile ez ezik zenbait herrialdetako atleta ugari ere etorri ziren: Kantabria, Errioxa, Asturias, Galizia, Katalunia edo Madrid, besteak beste. Gainera, atleta minusbaliatuen talde batek urtero parte hartzen du gurpildun aulkietan.

Artigaseko hondakindegiaren ingurumen gela UDALEKO Obra eta Zerbitzu Sailak Artigaseko hondakindegian Ingurumen Gela bat martxan jarriko du, gazteenak hiri hondakin solidoen arazoei buruz sentsibilizatzeko asmoz. Sailaren helburu nagusia da ekimen honetan parte hartzen dutenek hondakinen arazoa ulertzea eta, bestalde, gai honen inguruan duten erantzunkizunaz jabetzea. Programa honen barruan zenbait jarduera egingo dira, besteak beste, bisita gidatuak hiri hondakinen kudeaketarekin eta Bilboko kaleen garbiketarekin zerikusia duten azpiegituretara, baita Artigaseko hondakinen biltegira ere, Ingurumen Heziketako Gela eta bisita Erakusketa Interaktibora.

‘Concurso Relatos de Mujer’ LA Biblioteca de Bidebarrieta acogi— la entrega de los premios del IX ÔConcurso de Relatos de MujerÕ organizados por el Ayuntamiento de Bilbao. Carmen Garc’a, concejala del Servicio de la Mujer y la escritora francesa, Marie Darrieusecq entregaron los m‡ximos galardones dotados con 1.202 euros a Iratxe Esnaola y Silvia Colmenero por sus obras Begira Dezatela y Tras la colina blanca como vencedoras en las categor’as de euskera y castellano respectivamente. Por primera vez se entreg— el accŽsit de relato negro por valor de 451 euros a Asun Blanco con La Playa, mientras que Elo’sa Mart’nez Santos hizo lo propio con Como la seda en la categor’a de mejor relato er—tico.

Boluetako ‘7 Calles’ proiektua Ô7 CallesÕ, Idom Ingenier’a y Consultor’a enpresak aurkeztutako proposamena izango da, azkenean, Boluetako 70.000 metro karratuetan egingo den proiektua. Horrela, orain arte beheraldian zegoen industriagune hau, urbanizazio berri bat bihurtuko da eta bertan 1.100 etxebizitzak, hauetatik 700 babespekoak, ibilguneak eta parkeak eraikiko dira. Ikuspegi guztiak kontutan hartuz, lau proiektuen artean, hau izan da hiritarrek aukeratu dutena, hiriko leku publikoak eta etxebizitzak primeran batzen duelako.

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Celebración del ‘Día del maestro’ UN a–o m‡s en conmemoraci—n del ÔD’a del maestroÕ el Consistorio bilbaino rindi— un homenaje a 31 profesores de Colegios de Ense–anza Pœblica y de Institutos de Ense–anza Secundaria jubilados en el presente curso acadŽmico e hizo entrega de las becas municipales Viuda de Epalza, a 10 alumnos de 4¼ de ESO del municipio. Tras el aurresku de honor que dio inicio al acto, el alcalde de Bilbao, I–aki Azkuna, acompa–ado por el Concejal del Area de Educaci—n, Juventud y Deporte, Jon Aritz Bengoetxea y dem‡s miembros de la corporaci—n municipal, hicieron entrega en primer lugar de una pluma simb—lica en reconocimiento a la importante labor desempe–ada a lo largo de su carrera Òcomo transmisores de conocimientosÓ, a los 31 profesores de 22 centros de ense–anza pœblica. Posteriormente, fue el turno de los diez colegiales que obtuvieron en el curso 2003-04 las Becas Viuda de Epalza, una ayuda econ—mica instituida en 1902 por obra del legado de D» Casilda Iturrizar, Viuda de Epalza, que se mantiene hasta que finalicen sus estudios de Bachillerato o Ci-

El Ayuntamiento homenajeó a treintaiún maestros

Diez alumnos recibieron las becas Viuda de Epalza

clos Formativos y, en su caso, Universitarios de T’tulo Medio o Superior. ÒNo desaprovechŽis la ocasi—n porque ahora es el momento de ad-

quirir metodolog’a y disciplinaÓ, aconsej— el m‡ximo edil bilbaino a los estudiantes, a lo que a–adi— Ònunca perd‡is el interŽs por el aprendizajeÓ.

VEINTICINCO AÑOS DE AYUNTAMIENTOS DEMOCRATICOS. TODA UNA VIDA.– La Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), presidida por Francisco Vázquez, entregó en el Palacio Euskalduna los premios que reconocen la labor que seis alcaldes han hecho por la democracia y la transformación de los Ayuntamientos. En esta gala, en la que el alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, actuó como maestro de ceremonias, fueron galardonados, entre otros, el ex alcalde de la Villa José Luis Robles, la alcaldesa de Lasarte, Ana Urchueguía; la alcaldesa de la localidad madrileña de San Fernando de Henares, Montserrat Muñoz de Diego; el primer alcalde democrático de Málaga, Pedro Aparicio; el regidor de Gúdar en Teruel y primer edil más joven de toda España, Alberto Izquierdo; y, finalmente, el alcalde de Villanueva de la Cañada en Madrid, Luis Partida

ASOCIACION CULTURAL HERMES SAIBIGAIN.– El alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, recibió en el Consistorio a los señores Rekagorri, Líbano y Córdoba, miembros de la Asociación Cultural Hermes Saibigain, quienes hicieron entrega de un talón de 3.000 euros a Begoña Salinas, directora de la Fundación Bilbao 700 como donativo para la celebración del tradicional Concierto de Navidad

Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres CON motivo de la celebraci—n del D’a Internacional para la Eliminaci—n de la Violencia contra las Mujeres, el pasado 25 de noviembre, el Servicio de la Mujer y Cooperaci—n al Desarrollo del Ayuntamiento de Bilbao organiz— una serie de actividades para condenar estos abusos. Para ello durante los d’as previos se colocaron m‡s de 7.000 carteles de denuncia por las calles de Bilbao y se ley— una declaraci—n institucional, aprobada en pleno, tras un acuerdo previo alcanzado por todos los grupos pol’ticos con representaci—n municipal. ÒQueremos que quede patente la posici—n municipal en contra de la violencia que se ejerce hacia las mujeres. Violencia que en Bilbao, en lo que va de a–o, se ha cobrado la vida de dos mujeres y ha obligado a otras 27 a abandonar su hogar para trasladarse a pisos de acogidaÓ, afirma Carmen Garc’a, concejala del Servicio. Adem‡s, el d’a 25, m‡s de mil personas recorrieron las calles de la Villa para denunciar los malos tratos que sufren las mujeres. Un acto en el que los manifestantes exigieron que no se tenga que lamentar ni una v’ctima m‡s. Previamente, el alcalde de Bilbao, I–aki Azkuna, ley— un manifiesto en el que recordaba que Òla violencia de gŽnero oculta en realidad abusos de poder y una terrible discriminaci—nÓ.

Concurso de carteles Carnavales 2005 UNA votaci—n popular a travŽs de la p‡gina web del Ayuntamiento de Bilbao, la radio y de forma presencial en la Casa de Cultura de Barrainkua decidir‡ el cartel ganador de los Carnavales Bilbao 2005 entre los seis trabajos elegidos por un jurado. Para participar los autores deber‡n entregar hasta un m‡ximo de dos obras elaboradas con colores y tŽcnicas libres que deber‡n estar montadas sobre cart—n pluma y sin cristal con tama–o no apaisado de 70 x 50 cm. Los trabajos se presentar‡n en sobre cerrado, sin firma del autor con el lema: ÒBilbao 2005, Aratusteak / Carnavales, Otsailak 3-8 FebreroÓ y bajo Žste los datos para la identificaci—n del autor. El plazo de entrega en la Casa de Cultura de Barrainkua (C/ Barrainkua, 5 ) finaliza el d’a 15 de este mes a las 14:00 horas.

diciembre de 2004

BILBO ZAHARREKO GABONETAKO ARGIAK.– Pasa den hilabetean gabonetako argiak piztu ziren Bilbo Zaharrean, Bilbao Zaharreko Merkatarien Elkarteak urtero antolatzen duen ekitaldi tradizionala. Ospakizun honetan Idoia Zenarruzabeitia, Eusko Jaurlaritzako lehendakariordea, Bilboko alkatea, Iñaki Azkuna, eta Udaleko hainbat ordezkari egon ziren. San Antoneko orfeoiak bilbainada eta gabon-kantekin ekitaldia girotu zuen. Horrela, berrehun txirikordak Uriko erdialdea argiztatuko dute urtarrileko 6ra arte

Bilbao gestionará 415 millones de euros en 2005 El pleno aprueba los presupuestos para el próximo año y acepta dos enmiendas del PP y ninguna del PSE-EE Olga Sáez

BILBAO aprob— en un pleno extraordinario los presupuestos para el a–o 2005, cifrados en 415 millones de euros y que suponen un incremento del 5,5% con respecto al pasado ejercicio. El Pleno admiti— dos enmiendas sobre empleo y centros de jubilados presentadas por el PP que a su vez retir— la enmienda a la totalidad, pero no aprob— ninguna de las planteadas por los socialistas, 13 enmiendas parciales y una a la totalidad. Bilbao comenzar‡ el a–o con sus cuentas aprobadas, es el segundo ejercicio que el equipo de Gobierno consigue aprobar los presupuestos antes de que comience el a–o. Segœn valor— el Alcalde, I–aki Azkuna, Òes un presupuesto importante y progresistaÓ. Asegur— que ÒBilbao mejora y los responsables municipales pretendemos hacer una ciudad de progreso, social y donde mejoren los barriosÓ.

Isabel S‡nchez Robles, delegada de Hacienda, explic— que los 415 millones de euros Ðun 20% de los cuales se dedican a inversi—nÐ Òservir‡n para mejorar los barrios, para abastecimiento y saneamiento y para promover la justicia social, basada en el empleo y el fomento de la educaci—nÓ. Adem‡s, segœn indic— se potenciar‡ la vivienda protegida, se mejorar‡n los servicios de emergencia, bomberos y polic’a y los equipamientos deportivos, adem‡s de continuar su-

fragando la Alh—ndiga y el Teatro Campos y se modernizar‡ y agilizar‡ el Consistorio. El PP en su intervenci—n destac— la bondad de los presupuestos que tratan de acabar con la deuda y con los cap’tulos diversos pero sin embargo critic— que Òse est‡ construyendo un Bilbao bonito pero poco habitableÓ. Por ello, el PP present— una enmienda a la totalidad y ocho parciales, Òcon el objeto de mejorar las cuentas y reservar una partida la L’nea 3 del MetroÓ, entre propuestas. Dos

de ellas, relativas a programas de empleo y a los centros de jubilados, fueron admitidas. Por este motivo el PP acab— retirando la enmienda a la totalidad. En alusi—n al PP, Azkuna asegur— que cuando Òhay buen tono y no se dicen barbaridades las cosas pueden salirÓ. En ese sentido dijo que las enmiendas de los populares fueron Òmucho m‡s l—gicas que las del PSE-EEÓ. Ha sido imposible aceptar sus enmiendas porque Òpretende cambiar la espina dorsal del presupuestoÓ. El portavoz socialista, Txema Oleaga, subray— que los socialistas mantienen Òdiscrepancias de ra’z con el presupuestoÓ. Aseguraron a este respecto, que se trata de una cuentas continuistas y obsesionadas por el dŽficit cero y que llevan a un Bilbao Òde dos velocidadesÓ. La concejala de Hacienda rebati— este aspecto porque Òdos de cada 10 euros son para inversiones fundamentalmente para barriosÓ. Azkuna por su parte dijo que Òes continuista pero en lo buenoÓ.

Diputación seguirá gestionando los centros de jubilados O. S.

DIPUTACION continuar‡ con la gesti—n de los centros de jubilados de Santutxu, Deusto y San Ignacio en enero de 2005 si para entonces no han consensuado el traspaso de los mismos a la Diputaci—n. El Ayuntamiento de Bilbao asumir‡, presumiblemente en 2006, la gesti—n de estos locales de jubilados segœn lo ase-

gur— el alcalde, I–aki Azkuna, en el Pleno celebrado el œltimo jueves del mes donde indic— que la Diputaci—n mantendr‡ la gesti—n hasta que el Consistorio pueda asumir el control Òen las mejores condicionesÓ. Azkuna pidi— a los ediles de la Corporaci—n que Òno se meta miedoÓ a los usuarios de estos servicios sobre su permanencia, porque tal y como subray—, Òest‡ garantizadaÓ.

PSE-EE y PP hab’an presentado dos mociones relacionadas con estos centros, aunque el PP retir— su iniciativa con el compromiso del delegado de Acci—n Social, Jon Sustatxa, de que se mantendr‡ informados a los representantes de la oposici—n a travŽs de una comisi—n. Azkuna pidi— que se Òdeje negociarÓ a Jon Sustatxa y asegur— que la Diputaci—n se comprometi— a mantener el control

de los centros si el Ayuntamiento no pod’a asumir la competencia. En ese sentido, asegur— que la Instituci—n Foral abrir‡ los centros el 1 de enero. Azkuna manifest— que el diputado de Acci—n Social, Juan Mar’a Aburto, se comprometi— a ello en Juntas Generales, aunque el Alcalde asegur— que Òel Ayuntamiento acabar‡ asumiendo la gesti—n de esos centrosÓ.

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Plaza Morazako hobekuntza lanak BILBOKO Udalak hobekuntza lanak egingo ditu funikularraren goiko aldeko plazan, plaza Morazan, ingurunea hobetzeko eta auzokideentzako atseden gune berri bat eraikitzeko. Obra eta Zerbitzuen Sailak egingo dituen lanak, besteak beste, hauek izango dira: plaza hobetu umeentzako jolasak hobeto banatuz, iturri bat jarri, kirol inguruaren zorua berritu, argikuntza hobetu edo horma-txapelak egokitu. Lanak 6 hilabetez luzatuko dira eta proiektuak 347.574 euroko aurrekontua izango du.

Zentzu bikoitzako bideunea BILBOKO Udaleko Garraio eta Zirkulazio Sailak 2005eko lehenengo hiruhilekotik Arenal Zubiaren eta Nafarroa kalearen arteko ibilgailu pribatuen zirkulazioa debekatuko duela iragarri zuen. Horrela, bideune hau autobus eta taxilarientzat soilik izango da. Orain arte, zentzu bakarrekoa zen baina datorren urtetik aurrera zentzu-bikoitza izango du errepideak. Neurri honekin, Kale Nagusi edo Hurtado Amezagatik datozen ibilgailu publikoak Bilboko Alde Zaharreraino jaitsi ahal izango dira eta, horrela, gaur egun ematen duten zeharkako bidea saihestuko dute.

Conclusiones de ‘Barik’ LAS 700 personas que participaron en la prueba piloto de la tarjeta sin contacto, ÔBarikÕ, para acceder a Bizkaibus, Euskotran, Bilbobus y metro han valorado con un 8,7 sobre 10 puntos esta experiencia. Los usuarios destacaron la comodidad y la rapidez de este sistema, que entrar‡ en funcionamiento en 2006, sugirieron su aplicaci—n en otros servicios como los aparcamientos u OTA. El Consejero de Transportes, Alvaro Amann, dio a conocer adem‡s el interŽs de su departamento por utilizar el ÔCreditransÕ, la forma de pago œnica, en las l’neas no urbanas para comprobar si es viable a travŽs de una prueba piloto en el trayecto Bilbao-Lezama.

Estudio comercial del Casco Viejo LA Asociaci—n de Comerciantes del Casco Viejo ha elaborado una serie de estudios con el objetivo de conocer la oferta y la demanda comercial de este ‡rea. As’, segœn estos datos, el Casco Viejo bilbaino cuenta con una oferta comercial cercana a los 1.000 negocios a pie de calle y recibe m‡s de diez millones de visitas anuales, lo que supone una media semanal cercana a las 200.000 personas, por lo que se sitœa como una de las Areas Comerciales Urbanas m‡s importantes del Arco Atl‡ntico. ÒA todo ello habr’a que a–adir el atractivo tur’stico y monumental del Casco Viejo y las mœltiples actividades que se desarrollan en su entornoÓ, se–al— Alberto Egu’a, presidente de la Asociaci—n. La oferta comercial, de ocio y de servicios de esta zona ofrece posibilidades para todos los gustos, a travŽs de 511 comercios, con una alta especializaci—n en sus art’culos, 167 establecimientos hosteleros que ofrecen una oferta abundante y variada, y otros 113 negocios de diversa ’ndole (actividades financieras, compa–’as de seguros, agencias de viajeÉ), adem‡s de los 163 negocios de alimentaci—n instalados en el Mercado de la Ribera. Este variado espacio comercial hace que Òen el Casco Viejo se pueda tomar desde el primer cafŽ hasta la œltima copaÓ, afirma el presidente de la Asociaci—n.

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Celedonio Otaño (1912-2003)

El artista poliédrico

Franco con Truman

Félix Maraña

BILBAO reconoce ahora la obra del pintor, caricaturista, dibujante y arque—logo vasco Celedonio Ota–o Madinabeitia (1912-2003), cuya personalidad representa a un tiempo al artista, el intelectual y el ciudadano vasco que vivi—, en un mismo compromiso, la guerra civil, el exilio y el silencio, en una densa cuanto discreta biograf’a. En la vida y obra de Ota–o Ðcuyo desconocimiento de su existencia en su propio Pa’s Vasco, se debe tanto al gran tajo de la guerra como a la desidia de sus contempor‡neosÐ se reœne a la vez su decidida y excelente calificaci—n art’stica, como su consecuencia moral y ciudadana. Ota–o, bilbaino, hijo de una familia de mŽdicos guipuzcoanos, alguno de cuyos antepasados atendi— a la reina Isabel II en el parto del heredero, aprendi— la pintura en el estudio de D’az de Olano, en Vitoria, donde a la saz—n viv’a su padre, prohombre de la ciudad, que dej— la medicina para dedicarse a la mœsica, entre otras tareas, la fabricaci—n de armonios.

Educaci—n en BŽlgica Ota–o, estudiante de jesuita, tuvo la suerte de educarse en BŽlgica, tras la expulsi—n decretada por la Repœblica de esta confesi—n re-

ligiosa. En aquel pa’s tuvo la oportunidad de conocer de cerca la pintura, no s—lo en los museos de Europa que pudo visitar, sino en los excelentes libros de cuatricrom’a que encerraban sus bibliotecas. Ota–o ten’a una excelente condici—n como dibujante y pintor, pero, ante todo, era un hombre con un sentido de la vida y un conocimiento de la naturaleza llenos de vitavirilidad y condici—n cr’tica. Aprendi— pronto que nada de cuanto el saber acumulado pudiera ense–arle le era ajeno a la propia naturaleza, sobre todo desde que recal— en Venezuela, en los a–os treinta del siglo XX. En el subcontinente, mientras se dedicaba a la ense–anza de la filosof’a, pudo ensayar en la pr‡ctica todas aquellas cuestiones que ven’a plante‡ndose sobre el pasado, la esencia y la verdadera entidad de la cultura americana. Este hecho cambiar‡ su vida y la determinar‡ para siempre.

Adhesi—n a la causa republicana Bien es verdad que la guerra civil har’a un parŽntesis en su historia personal, pero, sobre todo, en su conciencia. Al declararse la guerra en 1936, decidi— venir al Pa’s Vasco, poniŽndose a las —rdenes del Gobierno vasco en la defensa de la causa republicana. En

El autorretrato de Celedonio Otaño sirve de portada al catálogo de la exposición

su adhesi—n a la causa Ðno siendo pol’ticoÐ, en su querencia por AmŽrica y su cultura precolombina, en su ocupaci—n y esmero como arque—logo, en su sentido hist—rico, que le lleva a recoger una importante colecci—n de arte precolombino œnica en Europa. Hay en la vida de Ota–o un paralelo constante con la del tambiŽn bilbaino Juan Larrea. Incluso, en su sentido de la generosidad, pues si Larrea don— al pueblo espa–ol, en plena guerra civil, toda la colecci—n de arte que trajo de Perœ Ðque ser’a la base de lo que hoy es el Museo de AmŽrica en MadridÐ, Ota–o tambiŽn quiso donar a la ciudad en que vivi— en el œltimo cuatro de siglo toda su colecci—n de cer‡mica, œnica en Europa. La diferencia es que la ciudad de San Sebasti‡n no quiso, no supo, no entendi— del valor y excelencia de aquella colecci—n de arte precolombino, œnica, no s—lo por ser tal, sino por provenir de Nicaragua. Un d’a de 1939, perdi— la gue-

rra, fue condenado, como son condenados los perdedores, y sufri— prisi—n. Su condici—n de artista le liber— de la sentencia fatal, al pintar por encargo un motivo religioso para la c‡rcel de Estella. No obstante, al alcanzar la libertad, sigui— atendiendo a la causa de la Repœblica, trabajando para la red de refugiados y evadidos del Gobierno vasco, falsificando, con su excelente calidad para el dibujo, todos los pasaportes que pudo. Hasta que le lleg— la persecuci—n y hubo de regresar a Venezuela, pa’s en el que cre— revistas, escribi— art’culos, y public— caricaturas las m‡s celebradas en los principales peri—dicos y, particularmente, en la prestigiosa e influyente revista Elite.

Pasi—n secreta En la cultura americana, y en la interpretaci—n del arte precolombino, que fue la pasi—n secreta de su vida, vio Ota–o todos aquellos enigmas que le acercaban cada vez

m‡s a la voz profunda de AmŽrica, cuyo eco quiso conciliar el pintor vasco con la tradici—n cl‡sica. No se consideraba Ota–o un cient’fico, pero lo era. El supo interpretar, descifrar el c—digo y el lenguaje de aquellas construcciones cer‡micas que hablaban m‡s del pasado que todas las enciclopedias formales. Como, por dem‡s, Ota–o era mœsico, y no menos excelente dibujante, dio nombre y lenguaje a esos c—digos, en los que estŽ todo su saber antropol—gico y arqueol—gico. Vivi— un cuarto de siglo en San Sebasti‡n, en el silencio y en la evocaci—n de sus grandes amigos del exilio, como Juan Larrea, al que tanto admiraba. Pint— muchos cuadros, discurri— en silencio tantas horas. Y, aunque no figura en las enciclopedias, ni, es, ni pretendi— serlo, persona de fama y poder, la figura de Ota–o deber‡ considerarse en el tiempo como uno de los artistas vascos m‡s poliŽdricos, consecuentes y singulares del siglo XX.

Exposición en Barrainkua EL Ayuntamiento de Bilbao ha querido recuperar la memoria de Celedonio Ota–o, programando la exposici—n ÔAprender a ver (Ikusten ikasi)Õ, abierta en la casa de Cultura Barrainkua, del 29 de noviembre al 10 de diciembre. En la exposici—n se recoge una amplia muestra de la obra gr‡fica del pintor, grabador y caricaturista vasco, as’ como una representaci—n de la cer‡mica precolombina nicaragŸense. Esta funci—n acredita a Ota–o como un arque—logo de primer orden, que supo interpretar esta cultura desde sus amplios conocimientos de la mœsica y el dominio extraordinario del dibujo, con el que pudo reproducir e interpretar todos y cada uno de sus motivos jero-

gl’ficos o lenguajes figurativos. Con motivo de la exposici—n, organizada con la colaboraci—n principal de la Asociaci—n Profesional de Ilustradores de Euskadi Ðy del empe–o del caricaturista ZuletÐ, se ha publicado un libro cat‡logo, en el que se hace una aproximaci—n a la polifacŽtica personalidad de Ota–o. Una mesa redonda sobre su figura intelectual Ða cargo de Sara Ota–o, pintora e hija del artista, Zulet y el escritor FŽlix Mara–aÐ, complet— el programa cultural de vindicaci—n del artista vasco: una figura del exilio cultural desconocida e ignorada por su propio Pa’s Vasco, al que quiso volver y en el que muri— en 2003.

Sukaldaritza–Gastronomía

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Guía de alta cocina con precios de baja alcurnia J. L. I.

Quizá fueron éstas las últimas sardinas asadas por Currito, en febrero del 2002, en su restaurante de Santurtzi, frente a la Ría. Foto Oskar

Orfandad en la cocina vizcaina con las muertes de Currito y Genaro Pildain un cami—n diario de sardinas, inmejorables las pescadas entre las dos v’rgenes, desde la patronal Virgen del Carmen, en julio, a la septembrina Virgen del Mar. Entre ferias y pailas con brasa, monta un restaurante en Capit‡n Mendizabal. Morros y callos, los guisados de la t’a Cecilia, sin que faltaran las sardinas que le compraba en su lonja a la t’a Nerea. Se empe–a en conquistar Madrid y lo consigue a travŽs de la brecha abierta en la Casa de Campo. Maniobra de despiste sardinero al principio, un desembarco en toda regla despuŽs, con pescados y chuletas a la brasa, pimientos fritos y alubias de Gernika con morcillas de AndrŽs, m‡s cazuelitas en salsa vizcaina, miles de ristras de choricero comprados en el lunes ferial. Con tiempo y humor para alzarse con la txapela en el campeonato de Euskadi de Marmitako, en la Consti donostiarra, territorio rival, con Salo–a, Uribe Echevarria, Busca Isusi y Juanito Kojua como jueces. Siempre Juli a su vera y el nido familiar, las dos hijas y Emilio.

José Luis Iturrieta

SE nos fue Currito en el tr‡nsito nocturno entre el 19 y 20 de noviembre. Sereno, rodeado de su familia, sobre la mesilla cl’nica su inseparable txapela, mucho m‡s que un solideo, equiparable a una mitra vaticana. La noticia se expandi— con dolor por geograf’as dispares, para Žl tan queridas, abierto como una flor al roc’o de la amistad. Una muerte no por esperada menos sentida, huŽrfanos Santurtzi y el coraz—n de Mamariga, sin una paila donde calentarse las ateridas sardinas del Abra, a las que JosŽ Mar’a Gonz‡lez Barea lanz— al estrellato con apoyo de Las Pichinas. Al d’a siguiente, domingo, se despide otro personaje irrepetible, de recio car‡cter y alta presencia en los fogones, un mariscal de campo de inmaculado uniforme frente a unas cazuelas de bacalao, desde el pil pil, a la vizcaina, el Club Ranero y el Guria, adornado con tiras de pimientos asados del pa’s. Un hombre, Genaro Pildain, forjado a s’ mismo, a la sombra de dos mujeres que le dedicaron todos sus desvelos: la madre guisandera, Isabel Arruza y la esposa sol’cita, Nati Lazpita, suma de detalles y elegancia en los salones del Guria. El gent’o que se congreg— en ambos funerales, el lunes 22 en Santurtzi y el martes 23 en la Bas’lica de Bego–a, fue la mejor muestra del cari–o que levantaban ambos personajes: remeros de La Sotera rodeando a su mentor, mientras la Coral de Sestao intepretaba el Agur, Jaunak; el todo Bilbao rojiblanco y la Bizkaia cocineril en Bego–a.

Genaro Pildain, emocionado por el homenaje que se le rindió en el Ercilla, se funde en un abrazo fraternal con Agustín Martínez Bueno

Sardinas y marmitakos La vida de Currito fue la de un corredor de fondo, saltador de obst‡culos con vocaci—n maratoniana. No un camino de rosas, sino el bregar diario desde su infancia, a la vera de su madre Elvira en la tienda familiar de Mamariga. Capaz de movilizar a un equipo de sesenta personas y poner cierto orden en la galerna de las sardineras, aromatiz— las romer’as de media Euskadi asando

Maestros de la sardina y el marmitako, del bacalao y las tostadas, se despidieron en dos tristes días

Rey del bacalao Se le conoc’a como el Rey del Bacalao. En un local emblem‡tico, en Barrencalle Barrena, donde recalaban todos los gourmets; un Guria que ensalz— Savarin en sus cr’ticas. En la cocina su madre Isabel y Fernando Robledo, en la barra Josetxu, ‡ngel de la guarda Nati, omnipresente Genaro. Convirti— el nuevo Guria, en la Gran V’a, en la meca del buen gusto con el apoyo de Tom‡s Razquin en los fogones y el discreto buen hacer de Carlos del Rey, todo un ejemplo para maitres y sumilleres.

NO s—lo la Catedral rojiblanca Ðcuyo vestuario cuasi litœrgico lucir‡ esta semana en su camiseta una publicidad institucionalmente internacionalÐ y el centenario Arriaga; el clasicismo del Museo de Bellas Artes y el titanio gal‡ctico del Guggenheim, los gorgoritos sopranos del Euskalduna y aromas pilpileros por doquier a orillas de una R’a renacida de sus antiguos lodos de belena. La Villa chacolinera por antonomasia cuenta con una publicaci—n gratuita: Bilbao, Gu’a, gida, guide, donde el visitante guiri y comunitario puede recabar informaci—n no s—lo muse’stica, sino tambiŽn los atajos de las compras y la senda de los txikiteros con apuntes de ricos pinchos, sin el fondo cantar’n de las bilbainadas, pena... Hasta cuenta el viajado visitante con una ruta de iniciados para el buen comer. No tanto por las agradecidas mesas del menœ del d’a, saludable y econ—mico, casi siempre satisfactorias. La gu’a gastron—mica de Bilbao, municipal y sabrosa, incurre en un error de bulto. El de incluir una n—mina de restaurantes con muchos posibles y precios de crisis. En las ant’podas del car‡cter bilbaino, tan dado al farol, de cuando los reales eran duros alfonsinos... Llegar‡n turistas m‡s dados al arte que al derroche sin sentido, conformes con un bokata y un pincho de tortilla, rendidamente conquistados por unas alubias sacramentinas y una falda al horno en el I–akiren Taberna, como ejemplo asequible. Pero si lo que pretendemos es que un turista con posibles Ðtras dialogar con la obra de Jorge de Oteiza y rendirse ante la voz de Mar’a BayoÐ, pruebe lo m‡s exquisito del acervo guisandero bilbaino, no se le puede despistar, menos enga–ar. Se ensalzan las virtudes de cada cocina, distintas aunque complementarias, pero sin inducir al equ’voco. En el restaurante de uno de los hoteles de lujo, tras resaltar Òsu cocina vasca con toques de autor, espectacular decoraci—n, elegante y distinguidoÓ, no se puede a–adir que el precio medio en carta es de 39 euros. Nadie de los aut—ctonos se lo va a creer. Si la Gu’a resalta de una casa Òsu especialidad en bacalaos, chulet—n de Berriz a la brasa y reposter’a caseraÓ, se puede enga–ar afirmando que el precio medio es de 33 euros... Frente al Museo de Bellas Artes podemos acceder a un local cuya especialidad son los mariscos vivos. ÀA 33 euros? Ustedes se lo creen...

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Tentaciones para el paladar P. Ortiz del Portillo

ACABA el a–o con celebraciones y un merecido descanso, el BelŽn, los villancicos y los tradicionales mercados, donde adquirir los mejores productos vegetales o animales del mar y la tierra, que enriquecen nuestra gastronom’a. En mi librito Trilog’a del txakoli, escrito con Gochi y K-To–o, recojo en el pr—logo una frase t’pica muy apropiada para estas fechas: ÒEuskaldun bat, bihotz bat; bi, lapiko ta txakoli–ak; hiru, orfeoi batÓ. Traducido al castellano quiere decir: ÒUn vasco, un coraz—n; dos, una cashuelita con txakoli; tres, un orfe—nÓ. Este dicho relativo a la comida me sirve para introducir lo que grandes autores dijeron sobre los placeres de la buena mesa. Por ejemplo, Cervantes, protagonista de este pr—ximo 2005 con el cuarto centenario del Quijote, escribi—: ÒEntre las sensaciones gratas que experimenta el hombre est‡ el placer del buen yantar condumios y libaciones, que deleitan sus facultades sensorialesÓ. En el Lazarillo de Tormes, se puede leer lo que sigue: ÒEl pan de hogaza, alimento base para el hombre [...] desmigado lo com’ y me consolŽ de gustoÓ. Nuestro gran don Miguel de Unamuno tampoco era reacio a ensalzar las bondades gastron—micas: ÒEl hombre, tanto en las vicisitudes como en lo grato de la vida, busca en la mesa alivio palatial a su tristeza como la alegr’a natural y festiva, por todo lo bueno que recibeÓ. Julio Camba, en La casa de Lœculo o El Arte de Buen Comer, defin’a este œltimo concepto como Òel tentador conjunto de sensaciones, colores, aromas, sabores, texturas t‡ctiles y matices sutiles al comer y beber, entretenidas y placenterasÓ, propias de su gastron—mica Arousa. Por su parte, el costumbrista Clar’n, autor de La Regenta, ironizaba sobre el tema: ÒPaladear consiste en el disfrute, con fruici—n, de lo que se ve, palpa, come y bebeÓ. Otro autor con seud—nimo, Azor’n, se refer’a a la cocina como Òel arte maestro de hacer guisos y pringotes, de sabrosos mojesÓ. Tantas atinadas apreciaciones resumen hoy nuestras sensibilidades para valorar y discernir las propiedades de los alimentos que consumimos, ya sea tal cual o procesados por la mano del hombre. La calidad de estos productos depende en buena medida de la Fundaci—n Kalitatea, que nos record— a todos en su fiesta recientemente celebrada en el Kursaal donostiarra que podemos continuar disfrutando de nuestros manjares gracias a los esfuerzos de quienes componen el sector agroalimentario. Entre estos productos se encuentran las alubias, los pimientos de Gernika, la patata de Alava, el tomate, las guindillas de Ibarra, la carne de vacuno con Eusko Label y el pollo de caser’o. Del mar, el bonito del Norte y, como postre, queso de Idiazabal, leche del d’a y miel. Todo ello podremos disfrutarlo estas navidades con la compa–’a de un buen Rioja Alavesa o un txakoli. Zorionak!

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Pescados y mariscos, los reyes magos del paladar Jesús Llona Larrauri

RESPECTO al bolsillo de los consumidores, no es tanto el aumento general de precios como nuestra inclinaci—n por los pescados m‡s caros Ðbesugo, lubina, merluza, mero, rodaballo, lenguado, etc.Ð, o los mariscos m‡s exclusivos Ðalmejas, ostras, langostinos, gambas, quisquilla, cigalas, langostas, bogavantes, buey, nŽcoras, centollos, percebes, etc.Ð, con las angulas de estrellas invitadas si podemos llegar a ellas, sin olvidar en muchos casos los congelados de buen tama–o y calidad. Las fiestas y los precios sirven para confundir la gastronom’a con la astronom’a.

Coordinar ideas Para aprender a reconocerlos, si uno es urbano, deben verse uno por uno, en su forma, color y dimension. ContentŽmonos con una descripci—n somera que sirva para coordinar las ideas, tanto visuales como palatiales. El besugo es uno de los pescados m‡s apreciados en la cocina vasca y forma parte de la tradici—n navide–a, lo mismo que la coliflor, el cap—n o el turr—n. De arrastre o de anzuelo, el primero es de menor calidad debido a que muere ahogado en la red, mientras que el de anzuelo se desangra a veces al quitarle el enganche. La mejor Žpoca para consumirlo va de Santa Catalina (25 noviembre) a San Blas (3 de febrero), aunque los besugos agoste–os de anzuelo son deliciosos. La lubina est‡ considerado como uno de los mejores pescados por su sabor y delicadeza de carne magra. Hervida, con aceite y lim—n, a la parrilla o al horno, e incluso frita, sin excesivos aromas, es exquisita. La merluza es seguramente el g‡dido m‡s popular y conocido, de carne blanca y magra. Las refrigeradas son de arrastre mientras que las de anzuelo o pincho se descargan a las pocas horas de su captura. La merluza congelada, constituye una buena forma de preparaci—n para salsas y pasteles. El mero, pescado de carne blanca y delicada, consistente y arom‡tica, es —ptimo a la parrilla y hervido aunque nuestras costumbres lo prefieren tambiŽn asado. El rodaballo es un pescado blanco muy apreciado en nuestra cocina que lo traen los arrastreros y se vende entero o en rodajas, muy utilizado tambiŽn en la cocina internacional; requiere preparaciones sencillas, horno, vapor o parrilla, acompa–ado de salsas suaves. El lenguado, el bizco de los mares, plano de forma curiosa, blanco por un lado y jaspeado por el otro. La frescura de los lenguados no se aprecia en el color de las agallas ni en la viveza de los ojos, como en otras especies, sino en el tacto baboso de la piel, aspecto que desaparece con los d’as. El salm—n esbelto, delgado y comprimido, es un pescado azul, rey de las especies de r’o, y se–or de las del mar, que abunda en nuestras pescader’as procedente de los mares de Noruega.

La de los pescados y mariscos es una parcela muy gratificante de las mesas navide–as, aunque de dif’cil seguimiento ya que los precios dependen mucho de las calidades, aun dentro de la misma especie

Pescados y mariscos serán los protagonistas de las mesas

La alegr’a de la mesa Los mariscos, moluscos y crust‡ceos son la alegr’a de la mesa, adorno inevitable y siempre por las nubes. Los crust‡ceos llegan casi siempre de las aguas marinas y si exceptuamos las gambas y quisquillas, que viven en el litoral, otros como las langostas, centollos y bogavantes son carne de lujo que habitan las profundidades del mar. El bogavante y la langosta, son mariscos de gran resistencia que conviene comprar vivos y enŽrgicos. Si se adquieren cocidos conviene que presenten

la cola recogida bajo el cuerpo, y cuando se estira se recoge ella misma. El bogavante vivo es de color negro azulado y sus pinzas son mayores. Cigalas, langostinos, gambas y quisquillas no se encuentran en el comercio vivos, por lo que es imprescindible elegirlos con cierta pericia; su color debe ser intenso, olor a mar, la carne compacta y las cabezas bien adheridas al cuerpo. La carne de las colas de cigalas, gambas o langostinos decapitados debe ser firme y transparente. Las cigalas tienen la mayor parte de la

carne en el cuerpo, y se venden crudas y frescas; los langostinos, tambiŽn crudos si son frescos, deben ser atigrados, de color pardo, y ojo todav’a vivo, y cuando son congelados no deben tener ennegrecida la uni—n cabeza cuerpo, su cabeza no se desprende f‡cilmente y no se aprecia viscosidad alguna interior del caparaz—n; las quisquilla vivas son casi transparentes y cocidas adquieren un color rojo vivo, de carne blanca con rayas rojizas, muy apetitosa. De los braquiuros son interesantes el buey, que se consume cocido y a veces pasa por txangurro, la nŽcora de carne muy fina, que se toma cocida como aperitivo, y el centollo, seguramente el œnico que tiene una f—rmula culinaria t’picamente vasca en forma de txangurro. El caparaz—n es m‡s grande en la hembra que en el macho, siendo la primera menos sabrosa. Los percebes son marisco de lujo, para muchos el mejor de todos, nœmero uno en el gotha del marisqueo, que tienen cuando son frescos olor a espuma de mar; los mejores son los de tama–o mediano y muy gordos. No deben comerse los que se cr’an en los puertos y zonas contaminadas. Los bivalvos como el mejill—n, las ostras, chirlas, almejas y b’garos deben venderse vivos, las valvas ofrecer‡n gran resistencia a la separaci—n, y una vez abiertas el l’quido interior ser‡ claro y transparente. Las valvas deben cerrarse con cierta rapidez al menor est’mulo y si cierran lentamente es se–al de vejez, mientras los muertos permanecen con las valvas abiertas. Caros, car’simos, a los mariscos no hay quien los desplace.

Brindar con burbujas CUANDO tengamos en nuestras manos una botella de champ‡n, expresi—n popular de procedencia francesa, no importa quŽ marca, fijŽmonos si en la etiqueta figura la palabra cava. Si es as’, quiere decir que el vino de esa botella se ha elaborado por el tradicional mŽthode champanoise, patentado por los franceses, que consiste en la segunda fermentaci—n, la que transforma el vino en cava, o en el caso francŽs en champagne. Es muy posible que esta botella proceda de alguna de las 220 cavas de la comarca del PenedŽs, de donde sale m‡s del 97% del cava espa–ol, cuya producci—n se ha multiplicado por cuatro en los œltimos seis a–os. Una peque–a cantidad del cava se produce en La Rioja con la tradicional elabo-

raci—n del Royal Carlton de Bodegas Bilba’nas (Haro); Muga-mart y Conde de Haro de Faustino Martinez (Oy—n); Brut Reserva, de Benito Escudero (Gr‡valos); y Brut Nature y Rosado Ondarre de Bodegas Ondarre (Viana). Todos ellos tienen de la Denominaci—n de Origen Rioja. TambiŽn existen otros espumosos, que no consiguen la bendici—n de la palabra cava, en Arag—n, Extremadura y Valencia. El crecimiento extraordinario de la producci—n y exportaci—n de cavas, y la mejora constante de su calidad con unos precios ajustados, vienen alarmando a nuestros vecinos. La calidad del cava, es un hecho, puede competir ventajosamente con el champagne. Hay que decir que ha-

ce a–os era muy dif’cil elaborar un champagne que se conservara, por dos razones b‡sicas: la falta de un envase lo suficientemente estanco hasta que apareci— el vidrio; y la segunda tener un tap—n bastante hermŽtico, hasta que lleg— el corcho. Por eso, las tŽcnicas de elaboraci—n del vino espumoso dejaron de ser patrimonio francŽs, para extenderse por todo el mundo. Recomendamos buscar cavas de bodegas peque–as donde se encuentran algunos excepcionales. Se debe dejar constancia de que no estamos de acuerdo con los bodegueros y las rotulaciones historiadas que no ayudan nada al consumidor, como Gran Cru, Crut Especial o Reserva, que no sabemos lo que quieren decir.

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El establecimiento deustoarra moderniza su oferta sin renunciar a la tradición

Aire fresco para la Casa Vasca Daniel Bacigalupe

CORREN nuevos tiempos en la Casa Vasca. El restaurante situado en la avenida Lehendakari Aguirre, uno de los m‡s populares de Bilbao ya desde sus comienzos, all‡ por los a–os sesenta y setenta, no ha querido quedarse atr‡s en el competitivo mundo de la hosteler’a. Con la bodega inaugurada a principios de junio, adem‡s de una carta renovada y el replanteamiento del servicio de banquetes de boda, sus responsables cambian la forma sin variar el fondo con el fin de ampliar su pœblico y mantener la clientela de toda la vida. La primera evidencia de este giro lleg— en marzo con la elecci—n de un nuevo equipo de cocineros, compuesto por Ibon Salaberria y el argentino Gustavo Ficoseco, en cuyos curr’culos figuran experiencias con Paul Bocuse, Pedro Subijana e Hilario Arbelaitz. A ellos se uni— el pasado mes Juan Manuel Salvado, cuyos comienzos en los fogones tuvieron lugar en la propia Casa Vasca cuando s—lo contaba quince a–os. Su misi—n ha consistido en Òdarle una vueltaÓ a la carta, apartado que la direcci—n del restaurante quiere cuidar especialmente. Se trata de aportar un toque de modernidad a los platos de siempre. As’ por ejemplo, las recetas cl‡sicas de la cocina vasca conviven con platos como Ensalada de Tomate Raf, cristal de cebollino y Pil-Pil de bals‡mico o Lubina confitada con salsa de

Juan Manuel Salvado y Gustavo Ficoseco son dos de los nuevos cocineros. Fotos M. Esquibel

piparras y vinagreta de cacahuete. Para la temporada invernal se han incluido ensaladas templadas y platos de caza en lugar de carpaccios, sopas fr’as, etc. ÒSin embargo Ðadvierte SalvadoÐ, no se trata de hacer cosas raras que puedan ir contra el gusto del clienteÓ. Los responsables del negocio est‡n satisfechos de la acogida que la carta ha tenido entre la clientela. Segœn el director general, Tom‡s S‡nchez, este servicio se mueve Òen cifras del 97, lo que supone un 50% m‡s con res-

“Queremos alejarnos de la opinión de la gente que nos ve como un macro-restaurante” pecto a hace algunos meses. Hemos trabajado para tener una carta barata, procurando, por ejemplo, que los pescados no superen los 15 euros y que se pueda almorzar o cenar perfectamente sin tener que pagar m‡s de 30Ó.

La importancia de la bodega La segunda apuesta de Casa Vasca la constituye su bodega, inaugurada a principios de junio. Este nuevo espacio, que aœna elementos cl‡sicos y modernos de decoraci—n, ofrece la posibili-

dad tanto de comer y cenar a la carta como de disfrutar de un vino a mediod’a o por la tarde acompa–ado por un aperitivo. En los botelleros est‡n presentes las principales denominaciones de origen nacionales y tambiŽn internacionales, de pa’ses como Sud‡frica, Argentina, Chile, Australia y Estados Unidos. La bodega servir‡ adem‡s como eje sobre el que pivoten otros servicios del restaurante. De hecho, a partir de ahora jugar‡ un papel importante durante los aperitivos previos a las bodas, otro de los campos que se van a reestructurar. La dura competencia en este sector ha obligado al establecimiento deustoarra a moverse. ÒTenemos claro que las parejas buscan exclusividad. Muchos novios se alejan de la ciudad y celebran sus enlaces en caser’os o establecimientos situados en un paisaje bonito. Esto ha restado un buen nœmero de clientes a los negocios bilbainos, es indudableÓ, opina Tom‡s S‡nchez. ÒQueremos afinar nuestra oferta, reducir el nœmero de banquetes hasta un m‡ximo de dos o tres al mismo tiempo, ofrecer todo el servicio emplatado... En definitiva, se trata de alejarnos de la opini—n de la gente que nos ve como un macro-restauranteÓ, a–ade JosŽ Angel Reyero, que lleva m‡s de veinte a–os trabajando en la casa. Y es que las dimensiones del local son considerables: 5.700 m2 en los que se concentran ocho salones, una cafeter’a-pasteler’a, un bingo, la sala de fiestas Garden y un parking propio, Òun lujo en el centro de BilbaoÓ, apostilla S‡nchez.

Javier Aransay de la Asociación Osea Mendizale Taldea

“Somos un club de barrio” “Organizamos actividades para acudir en familia”

Zuriñe Hurtado de Saratxo

EL barrio de La Pe–a se encuentra en un enclave propicio para alejarse del bullicio de la ciudad e ideal para ÒperderseÓ por la monta–a. En este contexto surgi— all‡ por los a–os 50 el grupo alpino Osea Mendizale Taldea. ÒNos hemos encontrado con una serie de problemas a la hora de determinar el a–o del nacimiento y de recopilar la historia de la asociaci—n porque la mayor parte de los fundadores ya han fallecido. Adem‡s, las inundaciones del 83 se llevaron gran parte del materialÓ, explica Javier Aransay, miembro del club. El œnico dato oficial del que disponen es que en el a–o 1964 el grupo qued— constituido legalmente. Desde entonces Osea Mendizale Taldea ha ido evolucionando y hoy en d’a son ya alrededor de 250 — 300 las personas que participan, en mayor o menor medida, dentro del este club alpino. ÒSin embargo, en las salidas y actividades que organiza la asociaci—n habitualmente participamos unas 50 personas, ya que en

Javier Aransay en la XVIII exposición micológica

la actualidad la gente prefiere realizar las excursiones por su cuenta y no por medio del clubÓ. Con el objetivo de que acuda el mayor nœmero de personas, los responsables del grupo organizan normalmente sus actividades los domingos Òpara que as’ los vecinos puedan acudir en familia, con los ni–osÓ. La llegada del invierno es, a menudo, una desventaja para que los aficionados se

animen a salir a la monta–a y, por ello, durante este periodo el nœmero de excursionistas se reduce considerablemente. ÒAfortunadamente, en esta Žpoca comienza la temporada de setas, por lo que adem‡s de ir al monte, aprovechamos para recogerlasÓ, a–ade Aransay. Osea Mendizale Taldea forma parte, a su vez, de la asociaci—n Nervi—n-Ibaizabal (ANI) dentro

de la cual se encuentra tambiŽn el grupo Ganguren de Galdakao, Padura de Arrigorriaga y Zornotza de Amorebieta. Puntualmente, todos los clubes organizan de manera conjunta Òsalidas m‡s fuertesÓ, cuyo coste no podr’an cubrir de forma individual. Por otro lado, desde hace 18 a–os vienen organizando exposiciones micol—gicas que habitualmente se celebran en los meses de octubre o noviembre. Concretamente, la edici—n de este a–o se celebr— el d’a 7 del pasado mes y un a–o m‡s resulto todo un Žxito. De cara al futuro el club pretende seguir en la misma l’nea que ha mantenido hasta ahora, es decir, excursiones puntuales durante los fines de semana y la organizaci—n de exposiciones micol—gicas una vez al a–o. Adem‡s de estas activi-

dades, Osea Mendizale Taldea colabora en ocasiones con la ikastola del barrio o en las fiestas patronales. En el a–o 2001 particip— tambiŽn en la organizaci—n del Ibilaldia, celebrado en el barrio de La Pe–a. ÒSomos un club de barrio y, por tanto, no podemos establecer grandes planes de futuro. Nuestro œnico objetivo es lograr que la asociaci—n no desaparezca y poco a poco continuar hacia adelante. Nos conformamos con que cada domingo una docena de aficionados a la monta–a acudan a las actividades que se organizan. Para nosotros su participaci—n supone una emoci—n enormeÓ. La œnica asignatura pendiente para el futuro ser’a lograr una mayor participaci—n de los j—venes dentro del club. ÒFormar parte del grupo supone trabajar mucho y la mayor’a de los j—venes, hoy por hoy, no est‡n dispuestos a involucrarse tantoÓ. A pesar de todas las dificultades, desde este grupo alpino seguir‡n luchando por aportar su granito de arena para que una afici—n tan arraigada en nuestra tierra no desaparezca.

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Ya llegó la Navidad... en unos grandes almacenes Noviembre de 2004. En el centro de Bilbao se baten marcas hist—ricas en cuanto a temperaturas m‡ximas, sin embargo cerca de los term—metros, unos grandes almacenes ya comienzan su decoraci—n navide–a y cuelgan los primeros Òcopos de nieveÓ de sus escaparates Carlos Cuervo Múgica (*)

ESTAS escenas muestran la punta del iceberg consumista en el que nos veremos imbuidos los pr—ximos tres meses. Segœn las encuestas, en el mes de diciembre de 2003 las familias espa–olas se gastaron una media de 845 euros, un 5% m‡s que en el mismo mes del a–o anterior. Una de las causas de este aumento es la publicidad en televisi—n que subi— un 12% con respecto a las navidades anteriores. Navidad era en su origen una fiesta vivida desde la austeridad y la sencillez pero se ha ido transformando en la fiesta por excelencia del consumo. Mucha gente no celebra en estos d’as la fiesta religiosa segœn la cual Dios se hizo hombre, sino m‡s bien que el ser humano se ha hecho para consumir. Mientras en los pa’ses del sur (o como le gusta decir a un amigo, los que est‡n Òal otro lado de la vidaÓ) la mayor’a de la poblaci—n se pregunta d—nde puede encontrar algo para comer, otra minor’a nos preocupamos por buscar ÒquŽ le regalo, si tiene de todoÉÓ y unos pocos se frotan las manos pues para estos es la Žpoca de las grandes ganancias y sus ventas se incrementan entre un 12 y un 15% con respecto al resto del a–o.

Vinculados a la explotaci—n Muchas personas no tendr‡n el privilegio de festejar la navidad, sino que trabajar‡n bajo unas lamentables condiciones para llenar los escaparates y estanter’as de las grandes superficies en nuestros nuevos Òobjetos de cultoÓ. La explotaci—n laboral se da en la confecci—n de ropas de muchas marcas de ÒprestigioÓ, juguetes, calzados, productos electr—nicos, cosmŽticos, perfumes, tabaco... que muchas veces compramos de manera compulsiva sin detenernos a preguntarnos de d—nde vienen y bajo quŽ condiciones han sido fabricados. Nos guste o no, vivimos en una sociedad de consumo y en ella como consumidores/as tenemos el poder suficiente para cambiar el mundo. Por eso debemos ser conscientes de ese papel activo y ejercitarlo en nuestra vida cotidiana. A pesar de toda la publicidad, de la presi—n por la importancia de tenerlo todo ahora, sigue estando en nuestra mano la opci—n de decidir quŽ queremos consumir y c—mo vamos a hacerlo. Es necesario que seamos personas cr’ticas ante las propuestas que nos hacen, consumamos de modo consciente y reflexionado, comprendiendo la repercusi—n que tienen nuestras decisiones de consumo en el resto del mundo. El acto de consumir puede y debe convertirse en un modo de protesta y lucha contra situaciones injustas y al mismo tiempo de coherencia con nuestros propios planteamientos Žti-

tos, pero para las grandes multinacionales, la pŽrdida de s—lo un 5% de sus beneficios supone un golpe muy duro.

cos: ÀquŽ sentido tiene ir a una manifestaci—n contra la guerra y luego comprar todos los d’as productos de empresas vinculadas a la industria armamentista? Merece la pena que dediquemos algo de tiempo a identificar entre los productos que compramos cu‡les tienen v’nculos con las guerras, con la explotaci—n laboral o con el deterioro ambiental. Si no hay opci—n, pensemos en otro producto diferente aunque a veces

signifique algo m‡s de dinero. Una opci—n es apoyar las iniciativas de consumo alternativo o comercio justo; consumiendo productos elaborados en los pa’ses empobrecidos, con salarios dignos, sin explotaci—n laboral de los ni–os y ni–as, sin discriminaci—n sexual y con respeto ecol—gico. Seguramente sea ilusorio esperar que todo el mundo deje de comprar determinados productos o en determinados establecimien-

La brecha norte-sur Evidentemente no toda la poblaci—n en nuestra sociedad podr‡ permitirse grandes lujos navide–os puesto que aqu’ tambiŽn hay gente con enormes necesidades, ni toda la poblaci—n de los pa’ses empobrecidos tendr‡ que buscarse la vida en navidad ya que all’ tambiŽn hay Žlites con alto poder adquisitivo y pautas de consumo similares a las nuestras. A pesar de ello la brecha en cuanto a volumen de gasto, consumo, generaci—n de basuras, etc. entre las sociedades ricas del norte y las empobrecidas del sur se vuelve insultante en la recta final de cada a–o. A finales del a–o pasado, un equipo de televisi—n se desplaz— a visitar un proyecto de medicusmundi bizkaia en Cuyamel, Honduras. El objetivo del programa era ver si Òel dinero llega a su destinoÓ. Al final del reportaje la periodista, aprovechando las fechas navide–as, pregunt— a varias personas quŽ le ped’an ellos a Òlos Reyes MagosÓ. Un campesino de unos sesenta a–os, con una profunda mirada y una enorme sonrisa le dio una respuesta inesperada: NADA. Dicen que no es m‡s rico el que m‡s tiene sino el que menos necesita... Àrealmente somos una sociedad tan rica? Recomendaciones Ante la imparable euforia consumista de Navidad, las asociaciones de usuarios hacen una serie de recomendaciones que pasan por distribuir equilibradamente el presupuesto o adquirir s—lo lo necesario. Estos son algunos consejos:

¿Somos pobres? UNA vez el padre de una familia muy rica llev— a su hijo a pasear por el campo, con el prop—sito de que su hijo viera cu‡n pobres eran esos campesinos. Pasaron un d’a y una noche completos en la destartalada casita de una familia muy humilde. Cuando regresaban a su casa en su lujoso autom—vil, el padre le pregunt— a su hijo: ÐHijo, ÀquŽ te ha parecido el viaje? ÐÁMuy bonito, papi! ÐÀViste quŽ pobre puede ser la gente? ÐS’Ð, respondi— el ni–o. ÐÀY... quŽ aprendiste, hijo?Ð insisti— el padre. ÐVi Ðdijo el peque–oÐ que nosotros tenemos

un perro en casa, ellos tienen cuatro. ÐNosotros tenemos una piscina que llega hasta la mitad del jard’n, ellos tienen un arroyo que no tiene fin. ÐNosotros tenemos unas l‡mparas importadas en el patio, ellos tienen las estrellas. ÐEl patio de nosotros llega hasta la pared junto a la calle, ellos tienen todo un horizonte de patio. ÐEllos tienen tiempo para conversar y estar en familia; mam‡ y tu tenŽis que trabajar todo el tiempo y casi nunca os veo. El padre se qued— mudo... y su hijo agreg—: ÐGracias, papi, por ense–arme lo pobres que somos y lo ricos que podemos llegar a ser.

● En lo que respecta a la compra de alimentos, se recomienda hacer una lista detallada de lo que realmente se necesita antes de salir a comprar, para evitar as’ los gastos compulsivos. ● Recurrir a los menœs tradicionales (pavo, besugo, cordero, etc) para evitar un gasto adicional en productos que se encarecen en este per’odo como el salm—n, el caviar y los mariscos. ● A la hora de comprar juguetes se debe tener en cuenta que el exceso de publicidad influye considerablemente en los usuarios. Por ello se recomienda escoger juguetes que estimulen la destreza y habilidades del ni–o. En ocasiones, los juegos m‡s complicados son los m‡s caros y los que se rompen con mayor facilidad. Hay que tener en cuenta las indicaciones que hacen referencia a la edad. ● Los consumidores deben ser precavidos si efectœan compras en cadenas de Òtodo a cienÓ, pues en algunos de estos comercios se ofrecen productos de baja calidad y sin garant’as que pueden resultar peligrosos. ● En lo que respecta a la fiesta de Nochevieja, se recomienda tambiŽn ser muy selectivo la hora de elegir el local o la sala donde se acudir‡. Esta debe estar debidamente autorizada y contar con la respectiva licencia. La Confederaci—n Espa–ola de Organizaciones de Amas de Casa, Consumidores y Usuarios (CEACCU) tambiŽn recomienda adelantar las compras, pues as’ el consumidor podr‡ comparar precios en distintos establecimientos y sufrir‡ menos las consecuencias de las prisas. Aun a riesgo de tirar una piedra sobre nuestro propio tejado, creo que es necesario hacer un comentario m‡s. La Navidad es tambiŽn la fecha m‡s propicia para despertar los sentimientos m‡s tiernos del ser humano y por ello proliferan los anuncios televisivos de las ONG sobre todo tipo de causas encaminadas a solucionar la pobreza en el mundo, telemaratones, rifas ÒsolidariasÓ, etc, haciendo muchas veces part’cipes en estos eventos a muchos famosos. No podemos convertir la solidaridad en un objeto m‡s de consumo. La solidaridad debe ser una actitud ante la vida, no puede consistir œnicamente en regalar un apadrinamiento por Navidad o en mandar un SMS con la palabra m‡gica al programa de moda para que autom‡ticamente un ni–o tenga un plato para comer.

(*) Medicusmundi bizkaia

Elkartasun orrialdea–Hoja solidaria

diciembre de 2004

El Centro Xochilt Acalt, de Malpaisillo (Nicaragua), es una revolución en marcha

No hab’a ni quŽ comer Haciendo historia, la Xochilt se puso en marcha en 1991. Un a–o muy particular. El Sandinismo hab’a perdido las elecciones. Hab’a comenzado una fuerte migraci—n hacia Costa Rica y Guatemala y, por si fuera poco, desaparec’a el cultivo algodonero. La Xo-

Mertxe, Pilar e Inés, soñadoras del futuro. Transformadoras del presente. Foto Moreno Esquibel

da Nicaragua. Ah’ surge el primer programa de Atenci—n Ginecol—gica, favoreciendo el acceso de todas la mujeres del campo, poniendo en marcha una cl’nica m—vil y una de atenci—n fija. Ese fue el primer programaÓ, dice Mertxe. Ah’ se dieron cuenta de una realidad m‡s amplia que no termina-

En Malpaisillo hay once volcanes, y 1.000 mujeres organizando la vida con dignidad: 1.011 volcanes en total de Larreynaga, regi—n de occidente donde viven 53 comunidades rurales. Nos lo cuentan Pilar Alonso, la guipuzcoana Mertxe Brosa Ðque lleva 21 a–os en Nicaragua, donde march— despuŽs de formar parte de la Asamblea de Mujeres de Bizkaia y del grupo de Mujeres de PortugaleteÐ y la tambiŽn nicaragŸense InŽs Garc’a Rojas, cuya historia personal es conmovedora. ÒEl problema del c‡ncer uterino lo viv’an las mujeres con mucho miedo, por el gran nœmero de mujeres que estaban muriendo en to-

ba con las cuestiones de salud. ÒViv’an en una situaci—n ca—tica, ya que no encend’an los fuegos porque no hab’a ni quŽ comerÓ. Estaba la emigraci—n a Costa Rica y a Guatemala, desde donde llegaba dinero para sobrevivir. ÒAs’ que durante un a–o hicimos un diagn—stico participativo, con todas las mujeres que se hab’an organizado en torno a la cl’nica. Encontr‡ndonos con otros problemas: analfabetismo, falta de autoestima, desconocimiento de derechos...Ó.

Soñadoras del futuro EN las tareas del hogar, InŽs recuerda que antes dec’a ÔElwin me ayuda a hacer tal cosaÕ. ÒHoy sŽ que es una obligaci—n de Žl igual que m’a. La verdad es que hemos cambiado. Pero primero ha de cambiar la mujer para ponerlo en pr‡ctica. Yo he aprendido a leer y Žl ha tenido que aprender a cocinar y a saber que un huevo se fr’e con aceiteÓ. Al principio estaba pendiente de que a Elwin no lo vieran sus padres haciendo las cosas del hogar, pero en la actualidad Òsi yo estoy hablando con mi suegro y Žl est‡ haciendo tal cosa, ya nadie se percata de eso. Hemos cambiado todos. Y ah’ vamos en ese procesoÓ. Antes estudiaban m‡s los ni–os que las ni–as... hab’a una depreciaci—n de las ni–as,

y por tanto de la mujer, a la que desde ni–a se la ven’a sometiendo, cont‡ndole que iba a ser madre, que esa era su funci—n. ÒSi yo tuve a mi primera hija con 14 a–os, mi madre tuvo a mi hermana mayor con 15. Hoy mi madre dice que le da su pena no haber tenido estos conocimientos. Que igual como puso a estudiar a los hijos varones, ten’a que haber hecho lo propio con las hijas. Y de esta manera yo no hubiera parido a los 14 a–osÓ. ÀQuŽ sue–as para el futuro?, InŽs. ÒYo nunca so–Ž con vivir tal como ahora vivimos. Ahora tengo mi mente abierta a seguir aprendiendoÓ. Mertxe, Pilar e InŽs, y otras mil mujeres m‡s. So–adoras del futuro. Transformadoras del presente.

Tranvía XXI

J. F.

Julio Flor

chilt se pregunt—, desde el punto de vista de las mujeres Àcu‡les eran los problemas que m‡s acuciaban en el municipio? Y es ah’ donde aparece el c‡ncer ginecol—gico, del que mor’an muchas mujeres. Por aqu’ arranca la historia de la Xochilt en Malpaisillo, cabecera

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Athletic XXL

Un huracán de mujeres SOIS, en Nicaragua, un oasis en medio del desierto?Ó, les pregunto. ÒNi m‡s ni menos. As’ es. Hay gente que dice a nivel del movimiento de mujeres nicaragŸense: ÔAy, yo vengo a refrescarme aqu’ a Malpaisillo con ustedes, a reciclar ideasÕ. Vienen tambiŽn desde Guatemala, y desde el Salvador. Nos hemos convertido a nivel centroamericano en un referente positivoÓ. Me llama la gente de Mugarik Gabe para contarme lo que parece un cuento: ÒEn un pedacito de Nicaragua surcado por volcanes, maltratado por los pesticidas usados anta–o por el cultivo algodonero, azotado por huracanes y sequ’as, un grupo de mujeres se empe–aron en demostrar que se pod’a establecer una relaci—n diferente con la tierra y que se pod’an organizar para mejorar sus vidasÓ. C—mo resistirse a contar una historia que muestra con emoci—n lo que escribi— el poeta Rimbaud. Que ÒLa vida est‡ en otra parteÓ. En el mismo lugar, en el mismo sitio, pero de otra manera. Un vida transformada. Una revoluci—n pac’fica, de abajo arriba. La tierra ‡rida es ahora un huerto fŽrtil. El hambre y la enfermedad, es comida y cl’nicas. Las mujeres adultas han aprendido a leer, escribir, pensar, a relacionarse en pie de igualdad con los hombres. A construir casas, a soldar hierros, a controlar la natalidad y planificar la familia. La vida es otra vida. Es lo que se viene llam‡ndose el empoderamiento de las mujeres. No se trata s—lo de no da–arlas, de no instrumentalizarlas. Si no de mucho m‡s. De potenciarlas. De hacer lo posible para que lleven adelante el tipo de vida que juzguen digno de ser vivido. Se trata de algo enormemente valioso, de descubrir con ellas las metas que le dan sentido a la existencia. De aumentar la libertad. La inspiraci—n la encontraron en el nombre de una ind’gena que tuvo fuerza y coraje frente a la colonia, Xochilt Acalt, que ha dado nombre al Centro Xochilt-Acalt de Malpaisillo. Significa Ôflor de ca–aÕ, un nombre que indica que los seres humanos son m‡s fuertes que la adversidad. Porque ellas viven en el pa’s m‡s pobre de CentroamŽrica. En una regi—n en la que est‡n la mayor parte de los volcanes de Nicaragua. Once volcanes. ÒAs’ que las fuerzas del universo est‡n con nosotras, la madre tierra, la madre Naturaleza, y eso nos imprime car‡cter, no es casual que nos digan la repœblica independiente de MalpaisilloÓ, dice en una hermosa interpretaci—n la maestra y psic—loga nicaragŸense Pilar Alonso, coordinadora del Programa de Salud.

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Aprender a leer y a vivir Estaba el puntal de la salud. Y r‡pidamente pusieron en marcha huertos y ganader’a, una escuela para adultos, la participaci—n ciudadana, las defensoras populares... ÒEs un movimiento de mujeres, y a medida que la mujer se empodera va estableciendo un tipo de reglas distintas en su familia. Es un empoderamiento en todos los aspectos de la vida, no s—lo en el econ—mico, sino en la visi—n del d’a a d’a, tanto a nivel familiar como socialÓ. Antes su visi—n de vida era parir y servir al hombre. A partir de este cambio Ðcon todas las mejorasÐ el hombre se ha ido vinculando pero siempre la protagonista ha sido ella. ÒLa mujer en el tercer mundo es la promotora del desarrollo. Porque la mujer no se queda los conocimientos, sino que los socializa, con una visi—n mucho m‡s digna y placentera. Y eso ha posibilitado que muchas mujeres que no sab’an ni leer ni escribir, ahora estŽn cursando el bachillerÓ. El apoyo econ—mico llega desde Euskadi en un 50% (Gobierno, Diputaciones, Ayuntamientos) y el resto es europeo (Alemania, Italia y la UE). ÒLa diferencia de la intervenci—n est‡ en generar procesos de desarrollo: esa es la madre del corderoÓ, puntualiza Mertxe. Y lo han conseguido. Mil mujeres est‡n hoy organizadas en la Xochilt. InŽs era una Òmujer paridoraÓ desde los 14 a–os, que a los 19 ya ten’a 3 ni–as... Hace ya 10 a–os que se integr— en la Xochilt, formando parte del equipo de Producci—n, cuando con 19 a–os no sab’a ni leer ni escribir. Pues bien, diez a–os despuŽs se encuentra, al igual que su hija mayor, de 13 a–os, en segundo curso de secundaria. Habiendo protagonizado un gran cambio en su vida y la de los suyos. A sus 29 a–os InŽs recuerda que hace tan s—lo diez sent’a que su vida estaba en funci—n de su marido y sus hijas. ÒIba camino de tener entre 6 y 9 hijos y apenas ten’a derecho a opinar, pues se trataba de obedecer las —rdenes de mi marido. Hoy todo ha cambiado, y puedo decir que he llegado a compartir con mi marido lo inimaginable, con Žl y con toda la comunidad. He aprendido a leer, s’, y tambiŽn a vivirÓ.

DIGAMOS que en cientos de miles de corazones, el Athletic es un sentimiento que se pasa latiendo toda una vida, desde la m‡s tierna infancia hasta esa adolescencia que perdura cien a–os. Y la bola sigue rodando. Es el Athletic XXL. Talla grande. Donde cabe todo el mundo mundial. No hace falta inscribirse, ni ser socio o pe–ista, tampoco necesitas ponerte una bufanda rojiblanca, o prepararte un bocata de lomo que viaje en tu bolsillo por la Alameda hasta San MamŽs... Ni hacer cola para sacarte esa entrada de los grandes acontecimientos deportivos. Tampoco precisas papeles que acrediten un permiso de residencia. Puedes haber nacido tan lejos como sea, incluso en el planeta del Principito. Nadie pone l’mites al campo por donde navegan los colores del Arco Athletic. Porque el club de la Catedral es amor libre en estado puro. De igual manera puedes querer a la Real, al AlavŽs, al Osasuna, al Getxo o al San Pedro de Sestao. Que si quieres al Athletic y le deseas lo mejor, salud y triunfos venideros, con eso es m‡s que suficiente. Que los afectos tambiŽn se suman. Menudo triunfo es Žste. Navegando y sumando gente, abrazando culturas, nuevas amistades, otras voces, acentos distintos. Un comod’n. Un as en la manga del futuro. Un campo al se suman a mares cientos de inmigrantes del mundo a nada que empiezan a querer a esta tierra y a entender y a compartir las emociones de quienes aqu’ vivimos so–ando en mil historias, tambiŽn en volcarnos un d’a de estos a la R’a para ver al un’sono subir camino del Ayuntamiento la gabarra txapeldun, un rito que volveremos a vivir con la devoci—n de los grandes momentos. No exagero. Aœn hay m‡s. Una palanca de integraci—n. Un puente, como el de Portugalete, o como todos los puentes de Bilbao, para unir todas las orillas, un lugar de encuentro de ortodoxos y heterodoxos, de disidentes y exiliados. De vegetarianos y taurinos, de gays y lesbianas. Nadie sobra, al contrario. Una se–a de identidad que se multiplica. Una manera de concebir la vida que acoge. Una alegr’a que admite debates, ideas, nuevas canciones, viajes para pasearse por la luna, con destino en todos los campos del mundo, con vocaci—n deportiva, aspirando a todas las copas, a todos los triunfos, incluido el de la derrota del que tanto se aprende, para tomar impulso, para intentarlo de nuevo. Siempre habr‡ una camiseta lo suficientemente amplia para ti. Cargada de nobleza, de buenos sentimientos. En ella entran todos los sue–os. Sobre ella se puede volar como en la alfombra de Aladino.

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2004.eko abendua

Alfredo Hurtado de Saratxo, director del Orfeón San Antón

“El futuro del coro depende de los jóvenes” Karmelo Errekatxo

LA gran mœsica coral vasca y sus intŽrpretes han representado un papel fundamental en la cultura de nuestro pa’s durante el œltimo siglo. Muchos orfeones nacieron para dar realce al culto religioso, aunque, obligados por las nuevas directrices en la pr‡ctica musical de las iglesias, tuvieran que continuar despuŽs por caminos diferentes. Otros vieron la luz con el fin de difundir el euskera a travŽs de la mœsica, como sucedi— con una de las formaciones m‡s populares de Bizkaia, el Orfe—n San Ant—n, desde hace dŽcadas dirigido con orgullo por Alfredo Hurtado de Saratxo. El coro, formado por 45 voces mixtas ha grabado obras muy representativas como

mantenido hasta nuestros d’as. La vida del coro se ha ido adaptando a los nuevos tiempos a medida que se han sucedido los cambios pol’ticos, nos hemos ido dando cuenta de que hab’a que dar paso a todas las dem‡s posibilidades que ofrece la mœsica. Aun as’, el Orfe—n sigue y seguir‡ cantando en euskera, aunque tambiŽn lo hagamos en espa–ol, lat’n, inglŽs, alem‡n y otros muchos idiomas. ÐÀC—mo se mantiene el interŽs de los coralistas en estos tiempos en que la sociedad est‡ dominada por el consumismo y la cultura del ocio? ÐEste es un problema que venimos viendo desde hace tiempo. Tenemos que enfrentarnos a Žl y ver de quŽ modo se puede resolver. Los que nos mantenemos ya vamos haciŽndonos mayores, y

“En Bizkaia deberían programarse conciertos a lo largo de todo el año” la Euskal Meza, del padre Barturen. Sus buenas relaciones con agrupaciones del extranjero le han permitido actuar en lugares tan emblem‡ticos como la Bas’lica de San Marcos de Venecia, la Catedral de Santiago de Compostela o la sede de la UNESCO, en Par’s. ÐAlrededor de Galarraga, el primer responsable del coro, surgi— un grupo de j—venes que quisieron dar a conocer al pueblo las canciones escritas en lengua vasca. ÀQuŽ queda de aquellos inicios? ÐEs una tendencia que se ha

entendemos que los j—venes tienen otros problemas y actividades, por lo que no es f‡cil encontrar gente dispuesta a comprometerse dos o tres d’as a la semana, m‡s los d’as de concierto. ÐÀSe presta la atenci—n debida a las formaciones, el apoyo que demanda el mantenimiento de la vida coral? ÐS’, existe, pero hace falta m‡s. Entiendo que en lugares que no sean Bilbao cada ayuntamiento pueda mantener uno o, quiz‡, dos coros. En la Villa existen muchas formaciones, y las ayudas m‡s importantes se destinan a la So-

XXIV Festival Músicas Actuales FIEL a su cita anual desde hace 24 oto–os, la BBK durante el mes de noviembre ha presentado su siempre interesant’simo Festival de Mœsicas Actuales. Por el auditorio del Guggenheim ha pasado el grupo LIM (Laboratorio de Interpretaci—n Musical) en cuatro sesiones y, en el resto de audiciones, el Spanish Brass, Aurora Ensemble-Trio Aedon y diferentes intŽrpretes bien conocidos en la actividad y difusi—n de las nuevas mœsicas. Se han interpretado 39 composiciones de cl‡sicos contempor‡neos, como Petrassi, Milhaud, Martinu y Stravinsky, entre otros. TambiŽn se ha ofrecido mœsica de los compositores vascos Bernaola, Villasol y Franciso Ib‡–ez. De casi todos los mœsicos programados se conmemoraban efemŽrides, bien por su centenario, bien por su setenta y cinco, setenta o cincuenta aniversario. De las 39 obras, trece eran de estreno en Bilbao y seis interpretadas por vez primera en Espa–a. Durante los conciertos entre el pœblico se encontraban mœsicos, j—venes estudiantes y aficionados interesados en las nuevas corrientes musicales. Paralelo al XXIV Festival BBK se ha presentado un nuevo disco de la interesante serie Compositores Vascos Actuales. Esta colecci—n representa una importante contribuci—n a la discograf’a de autores vascos que la entidad bancaria viene ofreciendo como extensi—n de sus festivales. En este nuevo disco, interpretado por el grupo LIM, figuran obras de Garc’a de la Torre, Fern‡ndez Guerenabarrena, Erkoreka, Villasol, Ib‡–ez y Barrio.

Fotos M. Esquibel

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El Orfeón ha cumplido ya sus 75 años de existencia

ciedad Coral y al Coro de la Opera de Bilbao. El resto tenemos que conseguir ayudas, pero nos las tenemos que arreglar por nuestra cuenta ya que no hay mucho dinero. En cualquier caso, el apoyo, adem‡s de econ—mico, puede ser log’stico, y ah’ deber’amos estar un poco m‡s respalda-

dos. Creo tambiŽn que en Bizkaia deber’a existir una programaci—n seria de mœsica coral, conciertos a lo largo de todo el a–o, en lugar de restringirla a fechas muy determinadas como la Semana Coral de Bego–a. ÐÀCu‡l ha sido, en su opini—n, la principal aportaci—n del Or-

fe—n al desarrollo musical del pa’s? ÐEl trabajo diario en una programaci—n bien pensada, siempre asequible a las caracter’sticas del coro, dando a conocer la mœsica de la mejor manera para que llegue f‡cilmente a todos. Pienso que esto es lo mejor que puede ofrecerse al pœblico. ÐÀExiste la armon’a deseable entre tantas formaciones como tenemos? ÐS’, la normal, aunque en el fuero interno creo que cada uno piensa que es el mejor del mundo. A veces, el simple orden de actuaciones puede crear alguna diferencia, pero normalmente no se crean tensiones. TambiŽn es cierto que deber’amos abrir barreras y, en ocasiones, si hace falta, solicitar alguna colaboraci—n entre uno y otro coro. Sin embargo, es dif’cil porque cada orfe—n es como un feudo inexpugnable. ÐÀDe quŽ manera vive su coro su vinculaci—n a la actividad musical? ÐSiendo responsable en sus actuaciones. Entre nuestros componentes hay voces que cantan en la ABAO y otros miembros son socios de la Orquesta sinf—nica de Bilbao. ÐÀC—mo ve el futuro del Orfe—n San Ant—n? ÐTendr‡ futuro si damos con la gente que quiera interesarse por la vida coral, especialmente los j—venes. En caso contrario, el coro desaparecer‡. Este es un problema comœn a todos. Nosotros ofrecemos tŽcnicas de canto y otras disciplinas relacionadas con el hecho coral. Falta s—lo gente dispuesta que diga: vamos a hacer un coro.

‘Nabucco’ triunfa una vez más

Representación de Nabucco en el Palacio Euskalduna

LA ABAO obtuvo un nuevo Žxito en su actual temporada de —pera con las cuatro representaciones ofrecidas en el Palacio Euskalduna de Nabucco de Verdi los d’as 13, 16, 19 y 22 del pasado mes. Considerada como su primera gran —pera, este t’tulo brinda al coro la oportunidad de lucirse, como as’ hizo bajo la batuta de Boris Dujin. Seguro, afinado, se movi— en escena con gran eficacia, lo que fue correspondido con la entusiasta reacci—n del pœblico. En el apartado escŽnico la be-

ll’sima producci—n del Teatro San Carlo de N‡poles result— esencial para imprimir el car‡cter de gran espect‡culo que mostraron las representaciones. Del elenco, bastante equilibrado, destacaron dos voces que tejieron una de las m‡s completas interpretaciones de entre las 19 que, hasta hoy, ha ofrecido ABAO a lo largo de su historia de esta —pera. El georgiano Lado Ataneli (Nabucco), de voz rotunda, hermosa, dio a su personaje la grandeza con la que Verdi visti— a su hist—rico primer gran perso-

naje de bar’tono. Por su parte, la neoyorquina Susan Neves, reconocida internacionalmente como una de las sopranos verdianas m‡s caracter’stica, encant— con el poder’o de su voz, oyŽndosela en su plenitud vocal y car‡cter dram‡tico. Un elenco adecuado, buenas intervenciones de la Orquesta Sinf—nica de Euskadi y un trabajo muy profesional en la direcci—n de Antonello Allemandi redondearon musicalmente la tercera de las —peras escritas por el compositor italiano.

diciembre de 2004

Navidad con Bilbao 700 LA Fundaci—n Bilbao 700 presentar‡ su ya habitual concierto de Navidad el viernes 17 de este mes en la Bas’lica de Bego–a. En esta ocasi—n ha invitado a una de las mejores agrupaciones vocales de Europa, los Madrigalistas de Praga. Desde su fundaci—n en 1956 por el maestro Miroslav Venhoda, ilustre mœsico checo

dedicado a las interpretaciones originales de la antigua mœsica vocal, la formaci—n fue reconocida como una de las m‡s destacadas en su especialidad, aunque m‡s tarde el coro incluyera en su repertorio mœsica nueva. Acompa–ados por un peque–o grupo instrumental y con la direcci—n de Damiano Benetti, inter-

pretar‡n un amplio programa que, partiendo del antiguo maestro checo Frantisek Ignˆc Antonin Tœma (1704-1774), a travŽs de Monteverdi, Vivaldi en una obra instrumental y Mozart, finalizar‡ con una selecci—n de diez melod’as navide–as del repertorio tradicional checo, espa–ol, italiano, alem‡n y francŽs.

Opera y recitales con la AMAK LA Asociaci—n Musical Alfredo Kraus (AMAK) prosigue su serie de actividades relacionadas con el mundo de la —pera. De cara al pr—ximo d’a 11 ha organizado un viaje a Oviedo para asistir al recital que la Asociaci—n L’rica Asturiana Alfredo Kraus ofrece. En el Teatro Campoamor el tenor venezolano Aquiles Machado, acompa–ado de orquesta, ofrecer‡ un con-

cierto l’rico. Para el d’a 30 de este mes, a las 8 de la tarde, la propia AMAK presentar‡ en el Palacio Euskalduna un concierto protagonizado por el tenor JosŽ Luis Sola, el Orfe—n Donostiarra y la Orquesta Sinf—nica de Bilbao, dirigidos por JosŽ A. Sainz Alfaro. El atractivo programa est‡ compuesto de coros de —pera, temas populares y navide–os.

Igualmente la AMAK, organizadora de un viaje al Liceu de Barcelona para mayo de 2005, ofrece tambiŽn la oportunidad de asistir a Òalguna representaci—n oper’stica de la renovada temporadaÓ del Teatro San Carlos de Lisboa con un descuento del 30 % en las entradas. Los interesados pueden comunicarse con la organizaci—n a travŽs del telŽfono 94.424.15.80.

Concurso Internacional de Canto de Bilbao COMO cada dos a–os, por estas fechas, la capital vizcaina se ha inundado de j—venes voces aspirantes a ocupar un puesto en el mundo oper’stico. Gracias al Concurso Internacional de Canto de Bilbao, en el que este a–o ha tenido mayor’a de participaci—n femenina, entre los d’as 18 y 27 de noviembre hemos podido escuchar voces interesantes, evidentemente unas mejores que otras, pero todas cargadas de ilusi—n por llegar a la final. DespuŽs de tres sesiones eliminatorias celebradas en la Sociedad Filarm—nica, una semifinal y la gran final en el Teatro Arriaga, el jurado, compuesto por destacadas personalidades musicales concedi— el 1¼ pre-

xausti fue la ganadora de la Beca de Estudios y premio del Pœblico. Cristina Nassif (EE.UU) obtuvo el premio de la Cr’tica.

ca que a Mozart inspir— el estupendo libreto de Lorenzo da Ponte. El pœblico disfrut— con la calidad de un trabajo en el que lo puramente teatral se sumaba a la perfecci—n creada por el mœsico y el libretista. Adem‡s de cantar muy bien, con voces adecuadas a las nada f‡ciles demandas mozartianas, teatralmente rindieron co-

mo muy pocas veces se ve en el mundo oper’stico. El coro Ente Art’stico LÕOpera di Bari, la buena Orchestra Societa« dei Concerti di Bari y el director, Arnold Bosman, redondearon los aciertos musicales de la muy art’stica embajada l’rica italiana. Sin duda, un acontecimiento en la programaci—n del Arriaga.

El diciembre musical de la Banda LA Banda Municipal de Bilbao prosigue con su actividad, que en la presente temporada est‡ dando nuevos e interesantes resultados. Con la presentaci—n del estreno mundial de Euskal Dantzak (7-11-04), del mœsico americano Gregory Fritze, el primer concierto del ciclo (310-04) con el estupendo maestro Enrique Garc’a Asensio y la

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Garikoitz Mendizabal, Udal Txistularien Bandaren zuzendaria

“Txistulariok emozioak sortzen ditugu” Zuriñe Hurtado de Saratxo

URIKO historia eta txistua oso gertu egon dira betidanik, eta bere soinua, Udal Txistularien Banda dela medio, urteetan zehar Bilboko gertaerarik garrantzitsuenetan presente egon da eta, horrela, bilbotarrentzat sinbolo bihurtu da. Talde hau jaio zenetik hainbat lagun izan dira txistuaren musikaz hiriko kaleak animatu dituztenak: Boni, Tom‡s Alzibar, Mikel Bilbao... Gaur egun, 2004ko urtarriletik hain zuzen ere, Idoia Kareaga, Gorka Zabaleta, Asier Garc’a eta Txistularien zuzendaria den Garikoitz Mendizabal, Banda osatzen duten lau gazteak dira. ÒDena den, nahiz eta urte asko igaro betiko esentzia mantentzen daÓ, esaten du zuzendariak.

besteekin konparatuta beste era batera planteatuta dagoela. ÒDonostian, adibidez, udal txistulariek haien lana egiteaz gain, musika eskoletan klaseak ematen dituzte. Guk, ordea, ez ditugu klaserik ematen eta egun osoa daukagu, batez ere, entseatzekoÓ. Izan ere, musika eskolaren barruan irakasle talde bat dago txistu jotzen irakasteko. ÒGuztiok, bai irakasleak bai txistulariak, egoitza berean gaude eta horrek erreztasunak ematen ditu. Esate baterako, abenduaren 22an egingo den Gabonetako kontzertu berezian eskolako irakasleek laguntza emango diguteÓ, dio zuzendariak. Etorkizunari begira, Udal Txistularien Bandaren proiekturik garrantzitsuena kalitate handiko talde bat lortzea izango litzateke. ÒOrain arte txistulariak

Naroa Intxausti, Mª José Siri y algunos miembros del jurado

mio en Voces femeninas a Mar’a JosŽ Siri (Uruguay), el 1¼ premio en Voces masculinas qued— desierto. Asimismo Naroa Int-

Retorno al mejor Mozart DE sensacional se puede calificar el espect‡culo oper’stico presentado en el Teatro Arriaga los d’as 17 y 18 de noviembre por Piccolo Teatro di Milano Cosi fan tutte. Las representaciones fueron un puro placer estŽtico; una avalancha de arte con mœsica genial en un desfile continuo de aciertos teatrales rendidos a la magia de la mœsi-

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presentaci—n (28-11-04) del maestro armenio Eugenio Djalavov, este mes de diciembre presenta otros dos acontecimientos: el d’a 5, con BernabŽ Sanchis, titular de la Banda Municipal de Alicante ofrece, con la colaboraci—n del saxo soprano Juan Antonio Ram’rez, un programa muy cinematogr‡fico dedicado al Festiva Inter-

nacional ZINEBI; el domingo 19, como en anteriores ocasiones a las doce del mediod’a en el Teatro Arriaga (entradas al precio simb—lico de 2 euros) bajo direcci—n de su tititual Rafael Sanz Espert ofrecer‡ un concierto de Navidad. Ser‡n los invitados la cantante holandesa Astrid Crone y el trikitrilari Kepa Junkera.

“Nahiz eta urte asko igaro betiko esentzia mantentzen da”

Banda honek bi funtzio nagusi dauka. Alde batetik, Udaletxeko protokoloaren arduradunak da, hau da, Udal Bandak inaugurazio, ongi etorri edo politikoei egiten diren harreretan, besteak beste, parte hartzen du. Bestetik, Bilbao Musikan, Bilboko Udalpean dagoen Udal Erakunde Autonomiadunean, zenbait kontzertu egiten ditu. ÒBerrikitan kontzertuak eskaintzen hasi gara Euskalduna Jauregian ÔAsteazkenetan, txistua benetanÕ izenburuarekin. Kontzertu bakoitza musika arlo desberdinei eskainita dago: folk, musika tradizionala, ganbarazko edo garaikideari eskainitakoa, etabarÓ, dio Garikoitz Mendizabalek. Hauetaz gain, larunbatero kale animazioa egiten dute Uriko Alde Zaharrean. Bilbon ez ezik, Udal Txistularien Bandak Euskal Herri osoan baita kanpoan ere jotzen du. ÒAzaroan Asturiasen egon ginen eta hurrengo urterako badauzkagu kanpoan aritzeko zenbait proposamenÓ. Dena den, Bilbokoa ez da Euskal Herrian dagoen Txistularien talde bakarra baina esan daiteke, berriz, hemengoa

pixka bat baztertuta egon gara. Horregatik, Udaletxeko protokolotik eta Bilbao Musikatik aparte, kontzertu gehiago antolatu nahi dituguÓ. Hau da, kanpora joateko eta era guztietako musikariekin konpetitzeko eta kolaboratzeko moduko banda bat sortu. ÒAgian haizetiegia izango da baina nik uste dut pixkanakapixkanaka helburu hau lortzen ari garelaÓ, baieztatzen du Mendizabalek. Ildo horretatik, datorren hilabetetan muestrario bat grabatuko dute, ondoren, bideoklip bat egiteko eta, horrela, hemendik aurrera saiatuko dira promozioa egiten. Izan ere, diskak, promozioak edo kontzertuek ez dute inoiz txistuarekin zerikusia izan. ÒDena den, bilbotarrek oso harrera ona egin digute eta kontzertuak eskaintzen ditugun bakoitzean aretoak bete egiten dira. Udal Txistularien Bandak ez du jende asko mugiarazten, David Bisbal bezala, baina emozioak sortzen ditu, behintzatÓ, gaineratzen du Garikoitzek. Argi dagoena da musika estilo askok modaz pasatzen direla baina txistuaren soinua inoiz ez.

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BIL

El cuarteto deustoarra publica un segundo disco con versiones de Itoiz, Joy Division y Nico

Split 77: “Nuestra filosofía es el cambio continuo” Javier Corral López de Alda

JOVENES e inquietos. Euskaldunes y urbanos. Rockeros y universitarios. El cuarteto deustoarra Split 77 se asienta en su posici—n de esperanza aventajada de la mœsica vasca de este principio de siglo. Publican ahora un segundo disco, Mentura, que es medio y fin, transici—n y destino. Un disco donde las guitarras casan con la electr—nica, los ecos de Itoiz con los de Joy Division, la energ’a con la reflexi—n, y el divertimento con la experimentaci—n. Aritz Aranburu, Ekaitz Hern‡ndez, Iskandar Rementeria y Natxo Carmona. Casi pod’an ser los nombres inventados de un relato sobre cuatro j—venes veintea–eros de clase media del Bilbao de hoy mismo. TrilingŸes, bien educados y seguramente mejor alimentados. Chicos que han pasado por la ilustre universidad de su no menos ilustre barrio, y que conocen que la historia del rock tiene un antes y un despuŽs de 1977, de ah’ el nombre que eligen, ese Split 77; y que la Velvet Underground es uno de los pocos grupos que nunca se har‡ viejo Tras un primer ‡lbum de guitarras furiosas y ritmos contundentes, giran hacia su tendencia m‡s bailable y electr—nica, sin por ello tener que renegar de las seis cuerdas en estado de vibraci—n. Quien mejor que ellos mismos para explicarse. ÐMentura, vuestro segundo, disco publicado por Noizpop, re-

Tras un primer álbum de guitarras furiosas, giran hacia su tendencia más bailable

presenta un cambio con respecto al anterior. ÐS’, compar‡ndolo con Antenna, nuestro primer disco, s’ ha sido un cambio bastante importante, sobre todo en concepto, porque nos hemos aproximado a ritmos

bailables y a una historia m‡s lœdica. ÐComo licenciados en Filosof’a por Deusto, algœn tipo de filosof’a habr‡ que pedirle tambiŽn al grupo. ÐNuestra filosof’a est‡ basada

en el cambio y en la transformaci—n continua, en el hecho de que es precisamente la tensi—n con uno mismo o entre nosotros, a la hora de hacer mœsica, lo que nos hace seguir avanzando, el hecho de no estar del todo a gusto en algœn mo-

mento. Y esto es lo que representa este disco, un cambio y una direcci—n. ÐAsemeja tambiŽn una transici—n, trat‡ndose de un disco con varias versiones y remezclas. ÐHemos marcado la pauta a seguir para el grupo. Es un disco bastante casual, como hemos querido reflejar en el t’tulo, est‡ relacionado con el azar, y quer’amos ver hacia donde vamos y donde nos encontramos en este momento. Y quiz‡ afronta cosas que de otra manera no hubiŽramos podido afrontar, quiz‡ movernos en ambientes m‡s electr—nicos. Nos gu’a en lo que vamos a hacer, y en ese sentido s’ podemos decir que es un disco de transici—n. ÐÀConocŽis cual ha sido la reacci—n de Itoiz, en concreto de Juan Carlos PŽrez, sobre vuestra versi—n de Espaloian? ÐNo hemos hablado directamente con ellos, pero sabemos, a travŽs de Gotzon Uribe de Noizpop, que Juan Carlos est‡ muy contento con la versi—n. ÐInfluy— algo en todo este cambio vuestra participaci—n en el festival escocŽs. ÐDesde el punto de vista del idioma y lo que de apertura del grupo significa con respecto a los l’mites que est‡n m‡s all‡ de Euskadi. Fu’mos all’, y sucedieron una serie de cosas que nos hicieron afrontar la forma de hacer cambios y el tema del inglŽs sin ningœn prejuicio. Pero hemos querido dejar bien claro que somos un grupo que hace canciones en euskera. ÐPor ah’ os llaman modernos. ÐVamos a empezar a preguntar quŽ es ser moderno y entonces daremos una respuesta afirmativa o negativa.

Berriak / Novedades

NEW YORK DOLLS. Live from Royal Festival Hall 2004 Tiene su cosa que haya que haber esperado al nuevo siglo para ver sobre un escenario a algunas de las glorias del-mejor-rock-de-todos-los-tiempos. Este incierto presente y festivales como el Azkena Rock, lo hicieron posible. Agrupados por su ilustre fan Morrissey, aqu’ est‡n los pellejos mejor conservados de ese rock que algœn d’a fue vicioso, inici‡tico y peligroso. El mism’simo Johnny Thunders hubiera dado su aprobaci—n. KINGS OF CONVENIENCE. Riot on an empty street Observo la lista de las 500 mejores canciones de la historia de Rolling Sto-

ne. Ganan por goleada los a–os 60-70, mientras que del 90 a hoy apenas hay nada. No es justo, pero s’ explicable. Los noruegos Kings Of Convenience son mejores que Simon & Garfunkel, pero a buen seguro que ninguna de sus excelentes canciones tendr‡ la originalidad ni la transcendia social de Puente sobre aguas turbulentas. Da igual, este es un ‡lbum paladeable de principio a fin para cualquier amante del folk etŽreo. NEAL CASAL. Leaving traces: Songs 1994-2004 Neal no es Neil, siguiendo con ese juego de entrelazar artistas y Žpocas, pero es tambiŽn uno de los grandes del rock americano. En diez a–os de carre-

ra ha dejado siete ‡lbumes y un pu–ado de muy buenas canciones que no entran en un pu–o. Dieciocho de ellas s’ que condensan este CD antol—gico que se complementa con un DVD con varias demos y una gira que el otro d’a desemboc— en Donosti. La pegatina no enga–a: para fans de Ryan Adams, Wilco y The Jayhawks. JAMES YORKSTON AND THE ATHLETES. Just beyond the river Un segundo disco de James Yorkston encaminado a acrecentar su prestigio. Just beyond the river, que se publica junto al EP Fearsome fairytale lovers, se empapa de la quieta belleza de su autor, un creador de melanc—licos cuadros sonoros de neo-folk. Su voz ani-

ma, es un decir, a prolongar momentos de buscada soledad, mientras una tenue instrumentaci—n de acordeones, banjos o violines recorre el matiz. BART DAVENPORT. Game preserve Y ahora que Love y Arthur Lee est‡n m‡s de actualidad que nunca, aqu’ llega su aventajado seguidor Bart Davenport. El chico, que tambiŽn tiene cosas de Van Morrison, Jonatham Richman, McCartney o Morrisey, ha hecho un segundo disco en solitario repleto de instantes recordables. Habr‡ que quedarse con el nombre de Davenport, mientras nos dejamos sorprender por su facilidad para deslizarse por distintos estilos y formas sin perder la compostura.

diciembre de 2004

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El musical ‘We will rock you’ y ‘Spider-Man’ pasarán un mes en Bilbao

El hombre-araña, telonero de Queen Daniel Bacigalupe

FEBRIL Navidad. No, no nos hemos vuelto locos; s—lo estamos calificando la actividad que espera al Teatro Arriaga durante las pr—ximas pascuas. Por las ma–anas, el pœblico infantil se adue–ar‡ del patio de butacas durante la representaci—n de Spider-Man. El espect‡culo, la adaptaci—n teatral de las trepidantes las aventuras del hombre-ara–a. Ya en sesi—n de tarde Ðe incluso noche, en determinadas fechasÐ los numerosos admiradores de los brit‡nicos Queen, tendr‡n la ocasi—n de recordar temas cl‡sicos de la banda gracias a We will rock you, un musical que actualmente se representa con notable Žxito en seis pa’ses, incluido Espa–a. Procedente de Barcelona, primera ciudad que visita en su gira por el Estado, el montaje llegar‡ a Bilbao el pr—ximo d’a 17 y permanecer‡ hasta el 16 de enero, fecha en la que tambiŽn se despedir‡ Spider-Man, cuyo estreno en la Villa est‡ fijado para el 18 de diciembre. ÒEste es el œnico musical en el que durante los œltimos diez minutos todo el pœblico permanece de pie en el patio de butacasÓ, dice al respecto de We will rock you su productor en la versi—n espa–ola, Luis Alvarez, quien qued— prendado del espect‡culo cuando

Spider-Man es un show para toda la familia fue a verlo a Londres. No par— hasta conseguir que el representante de Queen, Jim Beach, le concediera el permiso para hacer el montaje en Madrid, donde se estren— en 2003. Incluso logr— que los mecenas del proyecto original (Brian May y Roger Taylor Ðguitarrista y bater’a del grupo, respectivamenteÐ junto con el actor Robert de Niro) lo co-produjeran.

Una historia orwelliana La acci—n transporta al espectador al lœgubre a–o 2300, en el que la œnica mœsica que se permite escuchar es la que programan las autoridades. La poblaci—n tampoco tiene la libertad de componer sus propias melod’as ni tocar instrumentos. Sin embargo, algunos grupos de ciudadanos que viven bajo tierra, los llamados ÒbohemiosÓ, se oponen a esta tiran’a y hacen mœsica con todos los materiales que encuentran. Su situaci—n cambia cuando llega Galileo, una especie de Mes’as, quien, sin saber por quŽ, todo lo que dice son frases de canciones. La historia, con inequ’vocos ribetes orwellianos se desarrolla a golpe de los temas de Queen, Òla mayor’a de ellos traducidos al castella-

no, salvo los sagrados: Bohemian Rapsody, We will rock you y We are the championsÓ, adelanta Alvarez. Todas las adaptaciones del musical que se han realizado para Alemania, Rusia, Estados Unidos o Australia han sido supervisadas personalmente por May y Taylor. ÒSin embargo, han querido que cada una mantenga las se–as de identidad del pa’s en el que se representa, de manera que todos los montajes sean diferentesÓ, afirma el productor.

ÒVuelosÓ por el escenario El propio Alvarez es el responsable de que Spider-Man haya saltado el charco: ÒVi la funci—n que se hac’a en Chicago y pensŽ que a los chavales les encantar’aÓ. El reto tŽcnico era en esta ocasi—n mayor que en el caso de Queen, puesto que el espect‡culo procura mantenerse fiel a la estŽtica del c—mic mediante avanzados ele-

mentos tŽcnicos que permiten que el personaje ÒvueleÓ como en la efectista versi—n cinematogr‡fica protagonizada por Tobey Maguire. ÒEstoy muy contento. Creo que hemos hecho una adaptaci—n bastante buena. Lo hemos probado en Madrid y el pœblico parece que sale encantadoÓ. Spider-Man es un show para toda la familia, con especial atenci—n para los ni–os entre 4 y 12 a–os. Como en la pel’cula, el argumento se centra en las aventuras de Peter Parker, fot—grafo de prensa y superhŽroe a tiempo parcial, a quien la picadura de una ara–a radiactiva le otorga una fuerza y un instinto para detectar el peligro fuera de lo normal. Aparte de neutralizar las fechor’as de su enemigo el Duende Verde, Spider-Man se debate entre el amor que siente por su amiga Mary Jane y las responsabilidades que su peculiar oficio le acarrean.

El musical se representa actualmente con éxito en seis países

Programación para el primer semestre de 2005 Zarzuela y —pera

D.B.

28 espect‡culos conforman el adelanto de los espect‡culos que ofrecer‡ el Teatro Arriaga durante el primer semestre del pr—ximo a–o. Con las representaciones teatrales como nœcleo de la nueva temporada, el coliseo bilbaino ha querido mimar a los aficionados a la danza mediante los siete montajes programados entre enero y junio. Asimismo, habr‡ espacio para la zarzuela, la —pera y los conciertos tanto de mœsica cl‡sica como de tendencias pop-rock. En lo que a teatro se refiere, el mes de enero nos acercar‡ dos espect‡culos: Ultimas palabras de Copito de Nieve, que representar‡ la irreverente compa–’a Animalario, y El Rey Lear, una producci—n dirigida por el no menos polŽmico Calixto Bieito, con JosŽ Mar’a Pou como protagonista de este drama de Shakespeare. Ya en febrero, llegar‡ la adaptaci—n teatral del popular programa emitido por Radio Euskadi, Cocidito madrile–o. M‡s adelante, los amantes del teatro del dramaturgo estadounidense Arthur Miller tendr‡n una con la obra El precio, protagonizada por Juan Echanove. Uno de los principales atractivos de la programaci—n teatral de la primera mitad de a–o levantar‡ el tel—n entre el 12 y el 20 de marzo. Se trata de La Celestina, el universal personaje encarnado esta vez por Nuria Espert. Y de cl‡sico a cl‡sico, en abril llegar‡ Do–a Rosita la soltera. Un reparto de lujo, compuesto por Ver—nica ForquŽ; Julieta Serrano y Alicia

La Celestina contará con un reparto de lujo

Hermida, representar‡ este t’tulo lorquiano bajo la direcci—n de Miguel Narros. Cerrar‡ el mes el montaje a cargo del Centro Dram‡tico Nacional de Roberto Zucco, obra dirigida por el nuevo asesor art’stico del Arriaga, Llu’s Pasqual. Los montajes Ezetz lepoa jarri y Tramankuluak, destinados al pœblico vascoparlante Ðadulto e infantil, respectivamenteÐ se representar‡n en mayo, al igual que L’nea de fuga, con la Compa–’a de Philip Genty, que visitar‡ Bilbao los d’as 6 y 7. A estos espect‡culos les seguir‡ el cuento fant‡stico de Lindsay Kemp El œltimo baile de Elisabeth, del 1 al 4 de junio y El zoo de cristal, de Tenesee Williams, que tendr‡ a Luis Tosar y Mar’a Botto como cabeza de cartel.

Danza El primero de los siete t’tulos previstos llegar‡ en enero de la

mano del Ballet de Biarritz con La sangre de las estrellas, en coproducci—n con el Teatro Arriaga. Los meses de febrero y marzo estar‡n cargados de sabor andaluz con las visitas del bailaor flamenco Rafael Amargo y su Enramblao y del Ballet de Lyon, que llevar‡ Carmen a los escenarios. Para el pœblico infantil est‡ programado el espect‡culo Alicia, de la compa–’a valenciana Ananda Dansa. Podr‡ verse entre el 31 de marzo y el 3 de abril. Casi dos semanas despuŽs, el Ballet Nacional de Pek’n presentar‡ su œltimo montaje, La estrella roja, y dar‡ el relevo al grupo Momix Ðdel 22 al 24 de abrilÐ con The Best of Momix. El programa de danza para el primer semestre finalizar‡ el 13 y 14 de mayo con Romeo y Julieta, interpretado por el Ballet Prejocaj con mœsica de Sergei Prokofiev.

Siguiendo la tendencia de las œltimas temporadas, el Arriaga seguir‡ programando zarzuela, un gŽnero que cuenta con un pœblico fiel. Los aficionados podr‡n abrir boca en febrero con La eterna canci—n, del maestro Pablo Soroz‡bal, cuya direcci—n musical correr‡ a cargo de Manuel Gas. La segunda cita, el 8 de mayo, tendr‡ el inequ’voco sabor bilbaino de la Masa Coral del Ensanche, que ofrecer‡ una Antolog’a de la zarzuela. Por œltimo, el 24 y 25 de junio llegar‡ el plato fuerte de este sector de la programaci—n con La verbena de la Paloma. La compa–’a catalana Els Comediants ser‡ la encargada de una espectacular puesta en escena que incluye la celebraci—n de una verbena en el exterior del teatro. Los aficionados al bel canto podr‡n acudir los d’as 20 y 21 de mayo a ver la —pera g—spel inspirada en el texto de Flaubert La tentaci—n de San Antonio. Asimismo, el coliseo bilbaino proseguir‡ con los conciertos de mœsica cl‡sica de la Orquesta Sinf—nica de Euskadi y la Banda Municipal, adem‡s de los que se celebren en marzo dentro del ciclo Musika-Mœsica. Y en cuanto a las actuaciones previstas dentro de ÔEscena abiertaÕ, cabe destacar las citas con artistas locales como Doctor Deseo (18 de enero) y Gari (25 del mismo mes), adem‡s de las visitas de Carlos Go–i y Adriana Varela. El espect‡culo de percusi—n japonesa El latido del esp’ritu cerrar‡ el programa del primer semestre entre el 8 y el 11 de junio.

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Hablemos del dispensario Ledo La Historia de este dispensario es un reflejo de las caracter’sticas por las que atravesaba la vida de las personas en Bilbao durante los fascinantes a–os de finales del siglo XIX y todo el siglo XX Javier Martín Alvarado

EN la bilbaina calle de Licenciado Poza, en el nœmero 13 se encuentra ubicado el Dispensario Antituberculoso Ledo. El motivo de este escrito no es el sacralizar su imagen, ni hacer reliquias de sus restosÉ m‡s bien es un homenaje al Dr. Ledo en su impulso de luchar contra la que fue la autŽntica peste de finales del siglo XIX y comienzos del XX en Bizkaia: la tuberculosis. En esta Žpoca era habitual leer art’culos de los mŽdicos en la prensa bilbaina solicitando la soluci—n pol’tica al problema. No era esta la œnica enfermedad, la viruela tambiŽn hac’a sus estragos a pesar de existir la vacuna muchos a–os antes y suministrarse de forma gratuita entre la gente pobre; y entre los ni–os destacaban las diarreas y el sarampi—n. El Dispensario antituberculoso en Bizkaia tiene unos antecedentes en la construcci—n de Sanatorios del Gorbea, en las campas de Arraba, all‡ por el 1899 por parte del Dr. Madinabeitia y con el apoyo de gentes adineradas de Bilbao. Tras tres a–os de dificultades, termin— fracasando. La sociedad en la Bizkaia de 1900 afrontaba graves y complejos problemas en su conjunto. En algunas zonas como las m‡rgenes de la R’a, zonas mineras, barrios de Bilbao; las condiciones de vida eran extremas: hacinamientos de personas, realquileres, chabolismo, barracones; todo ello rodeado de una higiene m’nima, sin servicios en las casas, escasez de agua potable... era un marco de miseria, junto a largas jornadas laborales de 12 horas, pagadas con salarios ’nfimos. La falta de salubridad y las enfermedades contagiosas abundaban. Todo esto adem‡s de ser un problema sanitario, lo era social y pol’tico. Pero este Bilbao que tiene su patio trasero, va a ser el Bilbao de la modernizaci—n econ—mica, y Žsta no va a suponer s—lo humo y chimeneas, va a ser una operaci—n econ—mica de envergadura que va a erigir a Bilbao en ciudad emblem‡tica de un proceso de transformaci—n industrial que tiene aqu’ sus rasgos particulares. La alfabetizaci—n toma un papel relevante, encontramos tambiŽn movimientos respecto a la higiene pœblica, y en los partidos pol’ticos el germen de la iniciativa sabiniana y de la ra’z ideol—gica del socialismo. En 1902 en su discurso de inicio del a–o en la academia de Ciencias MŽdicas de Bilbao, el Dr. Ledo, que era en aquel momento su presidente, habl— de las nefastas consecuencias de la tuberculosis que podr’a diezmar la poblaci—n. En los posteriores a–os no se logra crear la Junta antituberculosa en Bizkaia pese a los notables esfuerzos del Dr. Ledo en conseguirlo, aunque s’ hay un primer esbozo siendo Gobernador civil de Bizkaia el Sr. Brava, pero no sigue adecuadamente y desaparece. Aqu’ las cosas cambian en 1913, en el que a travŽs de una Junta

compuesta por personas de la burgues’a y de los mŽdicos m‡s relevantes de Bilbao se consigue convocar una cuestaci—n. Esto se hace en la fiesta de la Flor y en la que a pesar de ser un d’a lluvioso, se reparten numeros’simas flores y se recaudan 99.413,50 pesetas, suficientes para crear el Dispensario. Se buscan unos terrenos en Bilbao y con el apoyo de Echevarrieta y de Larrinaga se consigue el solar de la calle Licenciado Poza, el arquitecto Enrique Epalza se pone manos a la obra con el dise–o del mismo. El 7 de Mayo de 1915 se inaugura el Dispensario al que se le pone el nombre del Dr. Ledo. En los a–os posteriores los servicios ofrecidos se van ampliando con un peque–o hospital de d’a y

ma Sanitario dejan sin contenido al Dispensario, que actualmente carece de actividad. Todo esto es un ejemplo m‡s de una contextualizaci—n de iniciativas que van encaminadas a dar respuesta social, no siendo un elemento aislado. Hay una serie de acciones que son una exigencia que se vive desde esta sociedad, que est‡ recibiendo el impacto de la transformaci—n y la modernizaci—n, pero que ya tiene una conciencia ciudadana y una exigencia de encontrar como en el acto diario se dŽ satisfacci—n a sus propias necesidades. Bilbao actualmente est‡ transform‡ndose, en el entorno de Ledo, la plaza Bizkaia y la Alh—ndiga son un ejemplo. Prontamente el Dispensario Ledo ser‡ derribado

Su director y promotor, el Dr. Ledo falleció en 1926

Biografía de Ledo Francisco Ledo Garc’a nace en la Habana en 1858. Se forma profesionalmente en las Universidades de Madrid y Santiago de Compostela. Fue director mŽdico de diversos establecimientos hidrol—gicos. En 1900-1901 fue presidente de la Academia de Ciencias MŽdicas de Bilbao. En 1915 inaugura y dirige el Dispensario al que se le pone su nombre. Fallece en 1926.

Bibliograf’a 75 aniversario del Dispensario Ledo-Arteche de Antonio Villanueva Edo, publicado en la colecci—n de temas vizcainos publicado por la BBK en Septiembre de 1990 con el nœmero 189. El 7 de junio de 1915 se inauguró el Dispensario

se crea la atenci—n domiciliaria por parte de un grupo de enfermeras. En el a–o 1926, fallece el Dr. Ledo, sin llegar a ver cumplido su deseo de construir el hospital del que en aquel momento aœn no hay ni planos ni terrenos. A su muerte le sustituye en la direcci—n del dispensario el Dr. Luis Herr‡n que era el subdirector y que fallece tambiŽn tres a–os despuŽs. Ya en 1930 se inaugura el Pabell—n Bri–as, de lo que ser’a posteriormente el Hospital de Santa Marina, desde ese momento el Dispensario se convierte en la puerta de entrada del nuevo Hospital. Se transforma en el Dispensario que actualmente conocemos en 1943, ejerciendo de mecenas el Sr. Arteche y pas‡ndose a llamar Ledo-Arteche; en 1944 con la creaci—n de la Seguridad Social y cuando Žsta en 1965 asumi— los ingresos en medicina general, la situaci—n sanitaria evoluciona hacia una mejora tangible. En 1982 el Servicio Vasco de Salud Osakidetza, asume los centros de la hasta entonces Junta Antituberculosa que son Santa Marina, el Dispensario Ledo y el de Ortuella. Ya en los a–os posteriores las distintas reubicaciones del Siste-

para construir en su lugar una nueva Sede Sanitaria dise–ada por el arquitecto Juan Coll-Barreu que albergar‡ la nueva sede de la sanidad pœblica en Bilbao. De la misma forma que la construcci—n de Ledo supuso para el Bilbao de comienzos del siglo XX un avance muy importante en lo referente a la salud, en este siglo XXI la creaci—n de esta nueva sede, seguro que supondr‡ una actualizaci—n en los sistemas sanitarios para dar respuestas a las necesidades que la poblaci—n actualmente requiere. En el fondo realmente esta nueva etapa ser‡ un œltimo homenaje al Dispensario Ledo, ya que sus terrenos seguir‡n albergando instituciones relacionadas con la mejora de la calidad sanitaria de los vizcainos. Agradecimientos Jose Antonio Villanueva Edo. MŽdico e Historiador. Juan Gondra Rezola. MŽdico y Escritor. Maria Jesœs Cava Mesa. Catedr‡tica de Historia en la Universidad de Deusto. Julen Ocharan. MŽdico y Director de la Gaceta MŽdica de Bilbao. Pedro Miguel Lizarraga. MŽdico y escritor de la biograf’a de Ledo.

Proyecto que albergará el departamento de Sanidad

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Elena Vecino, catedrática de Biología Celular de la UPV/EHU

“Queremos descubrir los mecanismos celulares de la ceguera por glaucoma” EL glaucoma es una de las enfermedades oculares con mayor incidencia entre la poblaci—n mundial, con m‡s de dos millones de casos nuevos diagnosticados anualmente. Se trata de una dolencia que puede producir una ceguera irreversible y, el problema, es que los pacientes no presentan s’ntomas hasta que la enfermedad est‡ muy avanzada. Para tratar de solucionar esta situaci—n, resulta indispensable desarrollar metodolog’as que permitan el diagn—stico precoz. Precisamente en este sentido intenta avanzar el proyecto de investigaci—n del equipo de la Facultad de Medicina de la UPV que dirige la catedr‡tica de Biolog’a Celular Elena Vecino, premiado recientemente por la Fundaci—n Americana del Glaucoma que, por primera vez, concede el galard—n a un proyecto europeo. Y es que el Estudio de la neuroprotecci—n de las cŽlulas ganglionares de la retina en un modelo de glaucoma experimental en cerdo no s—lo pretende detectar la enfermedad en sus inicios, sino que adem‡s tiene como objetivo desarrollar terapias que permitan detener el avance de la ceguera derivada de la dolencia. ÐÀQuŽ supone recibir un premio como el de la Fundaci—n Americana del Glaucoma? ÐEl reconocimiento a 5 a–os de trabajo muy duro, con muchas dificultades que hemos tenido que ir sorteando y que, finalmente, especialistas en el campo han sabido apreciar. ÐÀQuŽ tipo de dificultades se han encontrado? ÐDurante los a–os que hemos trabajado en este proyecto, los miembros del equipo nos hemos tenido que desplazar con mucha frecuencia a la Universidad de Salamanca, donde ten’amos estabulados los animales, ya que en la Universidad del Pa’s Vasco no hab’a animalario preparado para ellos. Adem‡s,

Foto Moreno Esquibel

Ainhoa Iglesias

“Debería potenciarse la inversión en investigación”

“El premio de la Fundación Americana de Glaucoma reconoce cinco años de trabajo muy duro” presentamos nuestro proyecto a varias empresas farmacŽuticas que, a pesar de evaluar nuestro trabajo positivamente, no se arriesgaron a financiarlo. Hemos trabajado por tanto con una financiaci—n muy por debajo de lo que hubieramos deseado, aunque me gustar’a destacar que tambiŽn hemos contado con el apoyo y entusiasmo del equipo y colaboradores. ÐSupongo entonces que, despuŽs de tanto esfuerzo, adem‡s de reconocimiento el premio les ha reportado satisfacci—n. ÐAs’ es, sobre todo al pensar

que desde nuestro peque–o laboratorio estamos haciendo una investigaci—n competitiva a nivel mundial. ÐÀDeber’a haber m‡s premios internacionales para potenciar los trabajos de investigaci—n? ÐSiempre es un aliciente ver premiado el esfuerzo y el trabajo, pero lo que sinceramente creo que deber’a potenciarse es la inversi—n en investigaci—n, y en particular en la biomŽdica. ÐÀEn quŽ consiste el proyecto de investigaci—n que han desarrollado? ÐPara conocer las causas de

cualquier enfermedad es necesario poder estudiarla en modelos animales, ya que como es de imaginar, no se puede experimentar en humanos. Por ello, el haber desarrollado un modelo de glaucoma en un animal que tiene un sistema visual muy similar al humano es un gran avance para poder estudiar la enfermedad. Adem‡s hemos comprobado que en nuestro modelo animal, las cŽlulas ganglionares de la retina, que son las responsables de enviar el mensaje visual del ojo al cerebro, se mueren siguiendo un patr—n muy similar al observado indirectamente en humanos. ÐSupongo que haber podido desarrollar este modelo ya es un avance importante pero, Àcu‡l es el siguiente paso? ÐAhora nos proponemos descubrir quŽ mecanismos moleculares desencadenan la muerte de estas cŽlulas y dilucidar por quŽ unas son susceptibles de morir y otras no. En el glaucoma no todas las cŽlulas ganglionares mueren a la vez, es decir, la ceguera no es total al principio, sino que es una muerte paulatina siguiendo un patr—n desde la periferia al centro. Es por ello que se pierde visi—n primero en la periferia y con el paso del tiempo la visi—n queda relegada a una zona central, produciŽndose lo que se conoce como visi—n tipo tœnel. Nosotros queremos saber que caracter’sticas tienen las cŽlulas que mueren y las que sobreviven, con el objetivo final de desarrollar terapias que impidan la muerte de las cŽlulas m‡s dŽbiles y por lo tanto nos permitan detener la ceguera. En la actualidad, todos los tratamientos contra el glaucoma se dirigen a disminuir la presi—n intraocular, pero ninguno tiene como objetivo la neuroprotecci—n, que es en lo que nosotros estamos trabajando. ÐÀCree entonces que es posible erradicar el glaucoma, sino del mundo, al menos s’ de buena parte de Žl? ÐDesde luego ese es nuestro objetivo y reto.

Los niños vascos dedican poco tiempo a las principales comidas del día LA encuesta C—mo comen nuestros hijos: percepciones de las madres vascas ha desvelado que los ni–os de la CAV dedican poco tiempo a realizar las principales comidas del d’a. Segœn el estudio, promovido por el Instituto Omega 3 de la Fundaci—n Puleva, el 21% de los ni–os dedica menos de cinco minutos al desayuno, el 45% tarda s—lo entre un cuarto de hora y media hora en comer y un 20% de los menores pasan menos de quince minutos

sentados a la mesa para cenar. Los datos revelados por el informe son preocupantes, puesto que el poco tiempo que se dedica a la alimentaci—n puede incidir negativamente en el crecimiento del menor. Segœn la doctora Lourdes PŽrez Olleros, Profesora de la Facultad de Farmacia de la Universidad Complutense de Madrid, las prisas pueden dar lugar a no incluir en la dieta Òtodos los nutrientes que los ni–os necesitan para su perfecto desarrollo

f’sico e intelectualÓ. En opini—n de la doctora, el desayuno es la comida m‡s importante del d’a, por lo que deben incluirse en Žl leche o derivados l‡cteos, fruta y cereales. Sin embargo, aunque el 92% de las madres encuestadas afirman que sus hijos toman leche, s—lo un 24% refiere dar a los peque–os zumos o fruta al comenzar el d’a. La comida y la cena parecen estar mejor equilibradas ya que, segœn el informe, la mayor’a de las ma-

dres consideran ÔadecuadaÕ la alimentaci—n de sus hijos. La encuesta C—mo comen nuestros hijos: percepciones de las madres vascas, tambiŽn revela otros datos de interŽs, como por ejemplo el hecho de que muchos ni–os ven la televisi—n mientras se alimentan. Concretamente el 16% de los chavales cena con la televisi—n encedida, aunque el porcentaje disminuye hasta el 5% cuando se trata del desayuno.

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Día Mundial del SIDA COMO cada a–o, el 1 de diciembre se celebra el D’a Mundial del SIDA, una iniciativa que fue promovida por la Organizaci—n de Naciones Unidas y que en la actualidad se celebra pr‡cticamente en todo el mundo con diversos actos encaminados a prevenir y comprender la enfermedad. Aunque los primeros casos se diagnosticaron hace algo m‡s de veinte a–os, el virus del VIH crece anualmente a una velocidad alarmante y, de momento, ha sido imposible encontrar una cura eficaz. Adem‡s, si bien es cierto que se han logrado avances importantes con el desarrollo de nuevas terapias para tratar el virus, son muy pocas las vacunas o medicamentos que llegan a los pa’ses pobres, precisamente los m‡s afectados. Para informar sobre esta y otras situaciones, las tres asociaciones de lucha contra el SIDA que existen en Bizkaia (Comisi—n Ciudadana Anti-Sida de Bizkaia, Itxarobide y T-4 - Asociaci—n Ciudadana de lucha contra el SIDA y Auto-Apoyo) han decidido aœnar fuerzas y organizar una exposici—n que tendr‡ lugar en el Centro Municipal San Francisco el propio d’a 1. La muestra, segœn Nerea Garaizar, de la asociaci—n Comisi—n Ciudadana Anti-Sida de Bizkaia, es una recopilaci—n de las diferentes campa–as de sensibilizaci—n que se han realizado a lo largo de los œltimos veinte a–os. ÒHemos habilitado un gran panel en blanco, en el que los visitantes deber‡n ir depositando los carteles que m‡s les hayan llamado la atenci—nÓ, explica Garaizar, quien matiza que la idea es hacer entre todos una especie de mosaico enorme que resuma los aspectos m‡s importantes de la enfermedad. Adem‡s, como es habitual, en el Arenal se repartir‡n preservativos y folletos informativos. Por su parte, el Teatro Arriaga ser‡ una vez m‡s uno de los puntos clave del d’a, con diversas actividades programadas por Hegoa.

Prevenir la Diabetes COMBATE la obesidad, prevŽn la diabetesÓ ha sido el eslogan que ha dado nombre a la campa–a informativa que el pasado 14 de noviembre pusieron en marcha el Grupo Eroski y la Fundaci—n para la Diabetes, con motivo del D’a Mundial de la enfermedad. Para conciencia a la poblaci—n de la necesidad de tener unos buenos h‡bitos alimenticios y de evitar llevar una vida sedentaria, en los supermercados de la Cooperativa Mondrag—n se repartieron m‡s de 100.000 folletos informativos por toda Espa–a. Asimismo, para sensibilizar a la sociedad y los poderes pœblicos sobre la necesidad urgente de contener el crecimiento de la diabetes y sus complicaciones, m‡s de 140 pa’ses de todo el mundo celebraron una caminata para lanzar un mensaje claro: Òla diabetes es un problema mundial que puede afectarnos a todosÓ. Segœn la Federaci—n Internacional de Diabetes, se calcula que m‡s de 190 millones de personas padecen la enfermedad a nivel internacional, aunque se estima que la cifra llegar‡ casi a duplicarse para el a–o 2025 debido a las actuales condiciones de vida.

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Harmailetan igeri Joseba Arredondo

GIZENTZEN ari garen egun hauetan, gorputza nahi baino azkarrago desitxuratzen ari zaigunean, kirola egiteko beharraz jabetuta, osasungarria delakoan eta aisialdia bete guran, igeri egitera joatea erabaki dut. Semeak lagunduta astean behin edo birritan joaten naiz. Bera piletara eta neu, ahal izan ezkero, igerilekura. Erreza izango zela uste nuen hasiera, baina ezin pentsatu zenbat arazo dagoen hain gauza xinplea egiteko. Hasteko lekua. Jantziak kendu, eskegitokia hartu eta bat-batean, biontzako poltsa sartzeko lekurik ez. Zapatak barruan ipini, jakeak ondoren, eta poltsa sartu nahi izan nuenean, lekurik ez. Barrukoa atera eta berriko saiatu nintzen, baina bai zera. Zutik, etzanda, albora... ezinezkoa era guztietan. Jakin ahal daiteke nola demontre sar daitekeen poltsa arrunt bat hain armairu txiki batean? Bultzaka, eta gogoz gainera. Izerdi patsetan igerilekurantz abiatu ginen. Eskuoihala harmailetan laga eta uretaratzean igerilekuko herena baino ez geneukala jabetu ginen. Eta piletan beste horrenbeste. Beste bi herenetan hamar bat neska-mutil, ikastaro bat egiten ari ziren. Ez pentsatu ordea bazkideentzako zati txiki horretan bakarrik geundenik. Beste hiru aita, ama bat eta amona bat zeuden, bakoitza bere seme, alaba edo bilobarekin, elkarren aurka talka eginez Ðbarkatu, barkatu, sentitzen dutÐ... Gurekin dozena ginen ezer egin ezinean. Aldameneko ikaslearengana joan nintzen, gustura egoteko noiz joan gintezkeen galdezka. ÐIkastaroak egunero egiten dira, astelehenetik ostiralera, arratsaldeko bostetatik, zortziak arte. Hobe zenuke asteburuetan etortzeaerantzun zidan. Asteburua heldu zenean, larunbatean kiroldegira itzuli ginen egun egokia zelakoan. Bagenekien armairu madarikatuak arazoak emango zizkigula, baina ez zen gatazkaren arrastorik izan. Eta ez armairuak handitu zituztelako, sartzeko aukerarik izan ez genuelako baizik. Txartela eskuan geneukala, sarbideko leihatilatik ahots gozoa atera zen. ÐBarkatu jauna, ezin da sartu. ÐNola ezin dela sartu. Zergatik? Ðgaldetu nion. ÐWater polo partidua dago eta igerilekuak itxita daude. ÐOndo, gu piletara goaz. ÐEz, ez, barkatu. Pileta ere itxita dago. ÐBaina zergatik? Waterpoloan igerileku handian egiten da, ezta? ÐBai, bai, baina segurtasunagatik. ÐNoren segurtasunagatik? Berdin zion. Segurtasun beraren segurtasunagatik ez zegoen sartzerik. Ahaztu bainua eta eguraldi petrala kontuan hartuta partidua ikusi genuen. Beharbada ez da hain osasungarria, gorputzak desitxuratzen jarraituko du eta gero eta lodiago egongo gara, baina aisialdia bete genuen, ez nahi bezala, baina beteta zegoen. Udaletxeak (Getxokoak kasu honetan) eskaintzen duen zerbitzua tamalgarria da, baina urtarriletik aurrera, euro bat kobratu nahi dute igeri (À?) egitera joaten den bakoitzean.

2004.eko abendua

Carmen Torres Ripa

FUIMOS muchos-as los que entramos en la fascinaci—n de la literatura de la mano de Carmen Laforet. Ocurri— hace muchos a–os y, como somos olvidadizos, hicimos un parŽntesis en el pre‡mbulo de nuestra vida. Extraviamos el principio. El primer signo que nos hab’a ense–ado el camino de este abecedario complicado, como un laberinto, que es unir letras, decir palabras, delatar sentimientos. En suma: desnudar el alma. Carmen Laforet con Nada cambi— todo mi mundo. Era una ni–a cuando le’ el primer Premio Nadal. Pero, cuando terminŽ la œltima l’nea de la novela de Carmen Laforet, decid’ que yo quer’a ser escritora. Hab’an pasado muchos a–os desde que le’ Nada, pero, aunque tarde, lleguŽ a mi sue–o infantil. Cuando muri— Carmen Laforet a los 82 a–os, me sent’ huŽrfana, sin haberme dado cuenta de que hac’a tiempo hab’a olvidado a mi ÒmadreÓ literaria. No fui fiel al recuerdo de una mujer que se asust— del mundo y de su propia capacidad para crear. ÒEl artista Ðdijo un d’aÐ es un prisionero de su propia necesidad de comunicarseÓ. Carmen naci— en Barcelona, vivi— en Canarias y muri— en Madrid hace menos de un a–o. Abri— lo ojos al mundo cuando regres—, con 18 a–os, a Barcelona para estudiar Filosof’a y Letras y Derecho. La Barcelona de la posguerra le embruj— con su extra–a melancol’a: ÒEl olor especial, el gran rumor de la gente, las luces siempre tristes, ten’an para m’ un gran encanto, ya que envolv’an todas mis impresiones en la maravilla de haber llegado por fin a una ciudad grande, adorada en mis sue–os por desconocidaÓ. Carmen cont— as’, suavemente, su intimidad en Nada y se sorprendi— de su propia fama (un premio y tres

Anjel Lobera Revilla

ELKARTE-SENA oso sustraiturik dago Euskal Herrian eta, horrenbestez, Bizkaian. Horretara, bada, eta premiarik gorriena gertatzen denetan elkarri laguntasuna emateko asmoz, gizartearen bizimoduak dakartzan beharrizanei aurre egin nahi izan zaie betidanik, bai eta biziaz harantzagoko premiei erantzun ere. Elkartasunak bide bi egiten izan ditu Euskal Herrian: alde batetik, izan dira kontratuzkoak, berbarako, arrantzaleen kofradiak; eta, bestetik, izan dira kontratuz kanpokoak, esaterako, hileta-elkarteak. Elkartasun hori aurrekoek irakasten diete euren atzekoei, eta belaunez belaun iraun duten horrelako ekanduek batasun eta sendotasuna eman diete euskaldunei, bai euren artean, bai eurek kanpokoekin dituzten harremanetan ere. Hori ez ezik, elkartasun horiek bazuten beste helburu pragmatikoago bat, sarritan herritar guztien aurrean eraginik handiena zekarrena: aberatsaren hiletan beste jende egon ahal izatea behartsuaren hiletan, eta modu horretara, gizartearen barruko

De Nada a Todo

La escritora catalana Carmen Laforet

ediciones en un a–o). Entr— por la puerta grande de la narrativa espa–ola sin ser consciente de su poder. T’midamente sigui— escribiendo. La isla de los demonios (1952), La mujer nueva (1955) Ðcon otro premio, el mayor que pod’a imaginarse, el Nacional de LiteraturaÐ, La insolaci—n (1963) yÉ Carmen desapareci— en la nada. Pienso que debi— de sentirse muy sola y desilusionada cuando, en los a–os 70, decidi— dejar de escribir y abandonar el mundo literario. ÒTodo aquello que un novelista vive o siente Ðhab’a repetido como quien medita en altoÐ sirve de combustible

para la hoguera insaciable que es su mundo de ficci—nÓ. Decididamente, ese mundo no le gust—. Carmen Laforet no conoci— el ordenador. Quiz‡s, si lo hubiera tenido, no hubiera ganado el primer Premio Nadal de la Editorial Destino y tampoco, en 1944, hubiera escrito Nada. Carmen no hubiese sido escritora porque le daban miedo los sentimientos plasmados en un papel. Le daba miedo hablar de ella misma y, gracias al ruido de la m‡quina de escribir, fue consciente de que estaba lanz‡ndose a un mundo sonoro. Un mundo donde las palabras gritaban. ÀFue eso lo que la asust— o

Hileta-elkarteak bilbadura ehotzen zen, eta gizarteko kide guztien elkarren kide zuten euren burua. Halako elkarteak egiten direnean, Alonsotegiko elizatean jazo antzo, herriko biztanle guztiak dira haien bazkide, eta horrek argi uzten du zein den halako elkarteen xederik behinena. Hileta-elkartearen ardura maiordomo biri dagokie, eta ho-

malau urtetik gorakoak badira. Hori guztia prozedura zurrun baten arabera eratuta dago, eta anaia edo nebaren batek ezin badu joan, aurretik eman behar die horren berri maiordomoei, eta albiste hori anaia nagusiak egin behar du, beranduen segizioa elizapera heltzen denean. Joan ezinaren berri ematen ez bada, orduan isuna ezartzen zaie anaiei. Nebak

Bizkaiko Lurralde Historikoan XX. gizaldiaren hasieran, Alonsotegikoa zen indarrik handiena zuena rien ardura da kuotak kobratzea, eta isunak ezartzen dituzte, baldin eta hildakoaren anaia edo nebaren bat joaten ez bada hiletara, zentzuzko arrazoi barik (gaur egun, harrigarria begitantzen bazaigu ere!). Izan ere, hiletara joatea neba eta anaientzat derrigorrezkoa da, baldin eta eurak ha-

eta anaiak joaten ziren ala ez jakiteko, maiordomoek zerrenda irakurtzen dute ahoz gora, eta joan behar izan baina hara azaltzen ez diren anaia edo nebetarik bakoitzeko isun bat ezartzen dute maiordomoek. Prozedura horrezaz gainera, hileta-elizkizun osoa atontzen dute elkartearen ardura-

lo que la salv—? Nunca lo sabremos. Este verbo ÒhubieraÓ, eterna negaci—n del ÒhaberÓ, se qued— sin sentido. Felizmente Carmen Laforet no utiliz— un ordenador. No puedo imaginarla posando los dedos sobre un teclado silencioso. Una m‡quina que no dice nada cuando el texto ha concluido. El ordenador no hace compa–’a, el escritor es quien debe darle vida y aguantar la angustia de su mutismo. Carmen no lleg— a la purificaci—n del silencio, porque le dio suficiente miedo el murmullo de su alma, hecho palabras, en Nada. S—lo escribi— tres novelas m‡s y se hizo el definitivo silencio en su m‡quina de escribir. Carmen Laforet, hermosa, con la cara angulosa y atractiva, desapareci— y no nos dimos cuenta de su ausencia hasta que ahora somos conscientes de que su presencia tambiŽn ha huido al m‡s all‡. Dicen que muri— despuŽs de una larga enfermedad. Perdi— la cabeza y vivi— hasta los 82 a–os en un eterno pasado, presente y futuro. Una estancia donde nunca sabremos si estaba poblada por monstruos, por demonios isle–os o por el fuego intenso del calor de Canarias. Carmen Laforet se llev— al m‡s all‡ la llama ardiente de su fantas’a y no nos explic— por quŽ su creatividad apasionada no pudo soportar vivir encuadernada dentro de las p‡ginas de un libro. Ella siempre estuvo Tres pasos fuera del tiempo, como el nombre de la trilog’a que nunca termin—. Pero los dioses decidieron devolverla a la literatura, como InŽs de Portugal, para reinar despuŽs de muerta. En junio, la Editorial Destino sac— al mercado una novela inŽdita de la escritora catalana: Al volver la esquina. Hace 30 a–os que la escribi— y no la quiso publicar porque no estaba suficientemente corregida. Pienso que quiz‡s, sentada en una nube azul, supervis— las galeradas.

dun horiek. Berbarako, eurek ordaintzen dute hileta eta dirua eman andak daramatzatenei. Gauza horiekin batera beste hainbat zertzelada ere zehazten ziren, berbarako, norberaren anaiari egiten bazitzaion hiletaelizkizun handiagoa ohikoa baino, orduan zio horrek zekarren kopurua gaineratzen zen betiko gastuez gainera. Horiek guztiak zorrotz arautzen ziren, bai eta beste hainbat xehetasun ere, zelan diren kontu hauek: adingabeak hilez gero zelan jokatu behar zen, edo zer egin behar eta nola jokatu behar zen ume bat hilik jaioz gero; edozelan ere, bakoitzak garbi zuen zein zen beraren eginkizuna. Maiordomoaren kargua urteangoa da, derrigor bete behar dute anaiek eta nebek, eta diru-kopuru bat hartzen zuten hileta bakoitzeko. Horiekin batera, maiordomoek urtean-urtean aldatu behar izaten zuten, eta liburuak batzuek besteei ematen zizkieten anaia eta neben batza nagusian. Horrelako elkarteak ugari izan ziren Bizkaiko Lurralde Historikoan, eta XX. gizaldiaren hasieran, Alonsotegikoa zen indarrik handiena zuena.

Bilbotik...–De Bilbao a...

diciembre de 2004

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El París de los ‘Gourmands’ La impresionante oferta gastronómica de la capital francesa atrae a miles de bilbainos Juan de Arana

UN encuentro internacional de periodistas especializados nos permiti— disfrutar hace pocas semanas del Par’s de los gourmands, es decir, de los golosos y, en general, de quienes somos devotos de la buena y bien surtida mesa. Son incontables los encantos que han convertido a la capital francesa en la principal ciudad tur’stica del mundo Ðen 2003 la visitaron 8,1 millones de personasÐ y entre ellos merece la pena destacar los atractivos culinarios. No debemos olvidar que fue en la Òciudad luzÓ donde se invent— el concepto de restaurante, y por ello cuenta con buen nœmero de establecimientos de reconocido prestigio. Par’s posee una oferta tan amplia en lo gastron—mico que puede satisfacer el gusto de cualquier paladar. Los restaurantes se cuentan por miles, hay bistrots, brasseries, cafŽs, bares, salones, bodegas y tiendas especializadas en queso,

Ladurée tiene fama por sus exquisitos ‘macarrons’

edici—n en el recinto ferial de la Porte de Versailles y al que tuvimos la oportunidad de asistir. Centenar y medio de expositores se dieron cita en este Òchocolate showÓ, procedentes de Estados Unidos, Italia, Suiza, BŽlgica, MŽxico, Jap—nÉ y, por supuesto, Francia.

Jóvenes ‘chefs’ parisinos elogian la cocina vasca, y subrayan lo apetecible de nuestros ‘pintxos’ vino, champagne, foie-gras, cognac y aceite, entre otros productos. Un buen nœmero de bilbainos se desplazan cada a–o a orillas del Sena para disfrutar de esta ciudad cosmopolita, culta Ðtiene nada menos que 149 museosÐ, rom‡ntica y bohemia a la vez que moderna; festiva y muy concurrida incluso en pleno oto–o, sobre todo cuando la meteorolog’a es favorable. S—lo una hora y veinte minutos separan los aeropuertos de Loiu y Charles de Gaulle a travŽs de los vuelos diarios operados por Air France, as’ que los amantes de la buena mesa ya tienen una excusa menos para visitar una urbe donde se come tan bien y con tanta variedad.

Del chocolate a los ÔmacarronsÕ Si el calendario parisino est‡ repleto de desfiles de moda, festivales, congresos, exposiciones, cumbres, etcŽtera, uno de los acontecimientos de relieve, a caballo entre octubre y noviembre, es el Sal—n del Chocolate, un autŽntico para’so para los Òchoco-adictosÓ chicos y grandes que celebr— su dŽcima

Artesanos de la especialidad ejercieron cara al pœblico y hubo espect‡culos y exhibiciones de objetos con referencias al producto: cuadros, vestidos e incluso chocolates-joya. La muestra registr— m‡s de cien mil visitantes en los cinco d’as que dur—. Pudimos deleitarnos con gourmandises similares en el delicabar de los almacenes Bon MarchŽ, y en LadurŽe con sus famosas pastas rellenas denominadas macarrons.

Elogios a la cocina vasca Tuvimos ocasi—n de conocer in situ el quehacer de cocineros j—venes sobresalientes porque, entre otros mŽritos, saben lo que demandan los comensales y llevan la imaginaci—n a sus fogones. Dos de ellos, Martial Enguehard (Len™tre) y Gilles Choukroun (AnglÕ OpŽra) elogiaron la cocina vasca, que conocen, y hasta subrayaron lo apetecibles que son nuestros pintxos. Estimaciones parecidas recogimos en lugares como el Market, el restaurante de moda del famoso chef Jean-George Vongrichten; en la brasserie t’pica Le Vaudeville y

Un artesano prepara ‘gourmandises’ chocolateras

en el renovado restaurante del Hotel Warick. Aœn nos qued— tiempo para ver cuadros del Louvre relacionados con el yantar, para conocer el Museo del Vino, recorrer el mercado al aire libre de la Place Monge, pasear por la gastron—mica Rue Mouffetard, contemplar la Torre Eiffel o presenciar la navegaci—n de los bateaux-mouches por el Sena. Otros telŽfonos de interŽs: Office de Tourisme: 08 92 68 30 00 Maison de la France: 906 34 36 38 Air France (info. y reservas): 901 11 22 66.

Bakio

La Torre Eiffel, símbolo característico de la ciudad

Pausu batera–A un paso

J. de A.

EN la zona costera de la comarca de Uribe, a 25 kil—metros de Bilbao, en un valle rodeado de peque–os montes y atravesado por el r’o Estepona, se encuentra el municipio de Bakio. Tiene como poblaciones cercanas a Bermeo, Mungia, Maruri, Armintza y Lemoiz. Su censo de dos mil habitantes, se multiplica en verano, cuando miles de vizcainos escogen su amplia playa como destino para sus d’as de vacaciones, lo que queda patente en las construcciones del pueblo, en el que abundan las residencias veraniegas. La imagen del Bakio actual dista bastante de la que ofrec’a hace algunas dŽcadas cuando era un caracter’stico municipio rural de poblaci—n dispersa. En cuanto a los or’genes de la localidad costera, las primeras referencias hist—ricas sobre esta anteiglesia, como B‡sigo de Bakio, datan de la alta Edad Media. En 1927 se ampli— el municipio con la incorporaci—n de los barrios de San Pelayo y Zubiaur, que pertenec’an a Bermeo. Entre los monumentos de este pueblo destaca la Parroquia de La Asunci—n, levantada en el siglo X por los labradores censuarios de los se–ores de

La playa es su mayor atractivo. Foto Victor Goikoetxea

Bizkaia. Resalta asimismo la Ermita de San Pelayo, un ejemplo del rom‡nico rural del siglo XII. Situada sobre la ladera del monte Burgoa, se trata de un edificio de una sola nave y ‡bside rectangular. Como construcciones civiles cabe citar a los palacios de Hormaza y Elexpuru, as’ como algunos caserones de estilo indiano. En el calendario festivo local

sobresalen las fechas del 19 de marzo, San JosŽ; 15 de agosto, Nuestra Se–ora de la Asunci—n y, a finales de ese mismo mes, San Juan Degollado. Los concursos de txakoli y marmitako y su importante feria agr’cola imprimen un sabor especial a Bakio e incrementan el nœmero de visitantes a este municipio costero y tur’stico. www.bakio.org

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Las mayores catástrofes de Bizkaia (3)

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La destrucción del Arriaga Hace 90 años Bilbao vivió la noche más trágica de su historia viendo cómo peligraban las vidas de dos adultos y dos niños ma de monta–ero. Tom— en brazos a uno de los ni–os traslad‡ndolo hasta el pie de la escalera donde, envuelto en una manta, fue llevado al Hotel Antonia para su asistencia mŽdica. Inmediatamente se repiti— la operaci—n con el otro ni–o y la criada. El œltimo ocupante del Arriaga, el conserje que hab’a intervenido en los rescates, cual capit‡n de nav’o se neg— a abandonar el edificio. Tras discutir con los bomberos en la azotea y salirse con la suya, les condujo por la parte del edificio aœn no consumida por las llamas para intentar atajarlas desde all’. Se marcaron como objetivo salvar el Club N‡utico y el CafŽ Arriaga situados en la fachada principal, as’ como las lonjas donde hab’a un almacŽn de muebles, unas oficinas del Tranv’a de Arratia, un bar, una peluquer’a y una sastrer’a, entre otros negocios. Todo qued— en intento. Los bomberos abandonaron la idea llev‡ndo-

Alberto López Echevarrieta

LAS Navidades de 1914 no fueron ciertamente felices para la sociedad bilbaina. Pocos d’as antes vio c—mo desaparec’a uno de sus m‡s emblem‡ticos edificios, el Teatro Arriaga. Fue en la noche del 22 de diciembre hace ahora 90 a–os. El coliseo m‡s sobresaliente de la Villa qued— reducido a cenizas. A la pena enorme de aquella sensible pŽrdida se unieron los comentarios que giraron en torno al hero’smo de unas gentes que, desafiando a las llamas envolventes, consiguieron poner a buen recaudo al conserje, a sus dos hijos y a la criada, œnicos ocupantes del edificio.

Zarzuela en llamas La cartelera de aquel 22 de diciembre de 1914 anunciaba en el Arriaga la representaci—n de la zarzuela Alma de Dios a cargo de la compa–’a de Salvador Videgain. Una de las primeras figuras del elenco era el actor Valeriano Le—n, esposo que fue de Aurora Redondo y que m‡s tarde alcanzar’a notable relevancia en el cine espa–ol de los a–os 50 al protagonizar las pel’culas El padre Pitillo y El Piyayo. Un inesperado suceso inmediato rest— importancia a la representaci—n. Eran las 4,20 de la madrugada cuando el sonido de una gran explosi—n alert— a Antonio Bilbao, conserje del teatro, cuando se encontraba en la vivienda que ten’a adjudicada en la parte alta del edificio. Inmediatamente se produc’an enormes llamaradas que, procedentes al parecer del guardarrop’a,

El Teatro Arriaga hacia 1910

Federico de Ugalde fue el encargado de su reconstrucción que culminó el 5 de junio de 1919 Accidentada salvaci—n

El siniestro ocurrió la madrugada del 22 de diciembre de 1914 convirtieron el interior de la sala en una inmensa hoguera. El fuego hizo saltar por los aires la gran cristalera de la fachada posterior, permitiendo que el aire lo azuzara vivamente. Las primeras llamas prendieron en los telares de la parte derecha del escenario para extenderse inmediatamente por el patio de butacas. Al o’r la explosi—n, Antonio baj— a localizar en el transformador de electricidad lo que Žl cre’a que era el foco del siniestro. Las llamas eran tan voraces que el conserje ya no pudo regresar a su vivienda por la misma escalera, pasto ya de las llamas.

Así quedó el Arriaga después del incendio

Como un volc‡n en erupci—n Los bomberos llegaron a los pocos minutos comprobando c—mo el coliseo era insalvable. Testigos presenciales aseguraron que el espect‡culo era inenarrable: Las llamas se elevaban al cielo como si emergieran de un cr‡ter limitado por los nobles muros de piedra de las fachadas. Las aguas de la R’a reflejaban el dantesco espect‡culo. Los rostros de aquellos bilbainos que se hab’an echado a la calle para contemplar impotentes la tragedia, quedaron petrificados cuan-

Interior del teatro antes del incendio. Archivo ALE

do vieron, entrecortadas por el fuego, las siluetas de varias personas en la parte m‡s alta del edificio. Espantados, reconocieron al conserje, a sus dos hijos de 10 y 8 a–os y a su criada, œnicos habitantes del teatro. Los cuatro estaban refugiados en una parte de la terraza a la que aœn no hab’an llegado las llamas, justamente en el ‡ngulo que mira a la calle Bidebarrieta.

A los gritos de socorro que lanzaban los afectados desde la altura se unieron los de curiosos que ped’an escaleras para salvarles, pero los bomberos carec’an de ellas en aquel momento. Ten’an que salvar una altura de unos 20 metros donde el conserje, desesperado, trataba en vano de buscar una salida para Žl y los suyos descolg‡ndose por la fachada.

El pœblico, enloquecido, empez— a pedir colchones a los inmediatos hoteles Arana y Antonia y a casas particulares en un intento de cubrir el pie de aquella azotea y as’ amortiguar la ca’da de las cuatro personas. Los m‡s serenos advert’an de la peligrosidad de tal acto porque sus cuerpos tropezar’an con los salientes de la fachada y la gran altura tampoco lo aconsejaba. Y todo ello con el trasfondo del edificio en llamas. ÒÁLa escalera grande! ÁLa escalera grande!Ó, ped’an los bomberos. Un equipo march— a por ella al dep—sito de Mena. Tres cuartos de hora hab’an pasado cuando apareci— por el puente del Arenal la tan ansiada escala. Cuando se aplic— a la fachada se vio que œnicamente llegaba a la mitad del trayecto. Hubo que esperar a que llegara Òla grandeÓ. Pronto se vio que aquello tampoco era la soluci—n porque, al extenderla, topaba con los cables del tranv’a de Arratia a su paso por la calle Ribera. El nuevo inconveniente pensaba salvarse avisando a la central elŽctrica suministradora para que cortara el suministro, pero a esa hora nadie contestaba al telŽfono. Durante aquellos momentos de incertidumbre se dieron casos de autŽntico hero’smo. Un bombero, subido a lo alto de la escalera, intent— cortar una de las sujeciones del bastidor de los cables para desviarlo con tan mala fortuna que el grueso alambre le golpe— en la boca. Todos creyeron que le hab’a dado una descarga elŽctrica. Cuando su cuerpo se balanceaba, un compa–ero le sujet— impidiendo una ca’da mortal. Los bomberos necesitaron media hora para romper a hachazos dichas sujeciones del tendido elŽctrico y permitir que la escalera llegara hasta su objetivo. El primero en alcanzar la cima fue Antx—n BandrŽs, con gran fa-

se consigo al conserje que accedi— a rega–adientes.

Un perro, œnica v’ctima mortal Al d’a siguiente s—lo quedaban en pie las paredes del Teatro Arriaga. La œnica v’ctima mortal fue un perro que vigilaba el edificio. Todo Bilbao se pas— por el lugar para ver las consecuencias del siniestro. El protagonista de la jornada fue Antonio Bilbao, el emocionado conserje que no hac’a m‡s que repetir que hab’a tenido que luchar a brazo partido con la criada para evitar que se lanzase al vac’o con los ni–os, presa de p‡nico como estaba. ÒIntentŽ escapar por una escalera interior, pero estaba en llamas. Por eso subimos a la azoteaÓ, dec’a. ÁY aœn le quedaron fuerzas al hombre para ayudar a los bomberos en la infructuosa labor de extinci—n del incendio! El edificio estaba tasado en 1.800.000 pesetas, cantidad que fue reclamada por el Ayuntamiento de la Villa, propietario del edificio, a las compa–’as aseguradoras con el fin de iniciar inmediatamente la reconstrucci—n. Nunca se supo cu‡l fue el detonante de aquel siniestro que conmocion— a Bilbao. S—lo pudieron salvarse varios tomos de la Biblioteca de los Museos, una monumental obra literaria de gran valor que se guardaba en dos estanter’as, y un bronce representando una cabeza de toro, obra de Mariano Benlliure. El nuevo Teatro Arriaga, el que hoy podemos ver, abri— sus puertas el 5 de junio de 1919 gracias a los trabajos del arquitecto bilbaino Federico de Ugalde que tard— cuatro a–os y medio en llevar a cabo la f‡brica. Quienes acudieron a la sesi—n inaugural estuvieron m‡s pendientes de las comparaciones ornamentales de la nueva sala que de la —pera Don Carlo que se representaba. [email protected]

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Con más de 2.300 filmes recibidos, la 46 edición del Festival Internacional de Cine Documental y Cortometraje de Bilbao consolida ZINEBI y la bonanza del género, también en las salas

Del ‘armario’ del cine al circuito comercial Ainhoa Gondra

275; los procedentes de Estados Unidos, 231; Canad‡, 107; y Gran Breta–a, 94. Euskadi ha participado con 49 t’tulos. Se han recibido 195 pel’culas latinoamericanas, frente a las 178 de la pasada edici—n, y la mayor participaci—n ha sido, un a–o m‡s, la de MŽxico, con 71 filmes; seguido de Argentina, con 40; Brasil, 21; Chile y Perœ 12; y Cuba, con 11. Cabe destacar la presencia de producciones del sudeste asi‡tico y, a las habituales china, japonesa y coreana, hay que a–adir la de Camboya, Indonesia, Filipinas, Hong Kong, Malasia, Singapur, Thailandia y Vietnam. De entre todos los filmes recibidos, el ComitŽ de Selecci—n de Zinebi ha elegido un centenar de

Una secuencia del cortometraje Maricón de Roberto Castón

Roberto Castón, Premio del Jurado al Mejor Cortometraje en Madrid A. G.

EL director de Zinegoak, Festival Internacional de Cine Gay-LesboTrans de Bilbao, Roberto Cast—n, ha sido galardonado con el Premio del Jurado al Mejor Corto Espa–ol por su pel’cula Maric—n en la novena edici—n del Festival Internacional de Cine Gay y LŽsbico de Madrid. Se trata del primer trabajo del director en 35mm y cuenta, en ocho minutos, la historia de falsas apariencias, hipocres’a y autorechazo de los personajes e historias que centran el relato, protagonizado por Joaqu’n S‡nchez y Carles Cuevas.

Cast—n aludi— a las dificultades del rodaje y agradeci— el apoyo a su equipo. ÒHa sido muy duro realizar esta pel’cula con tan bajo presupuesto, pero, si en el primer certamen que participa ya la premian, eso significa que el esfuerzo de todo el equipo ha merecido la penaÓ, sentenci—. Maric—n ha sido rodada en Barcelona y es un producci—n de Grup Cinema-Art. En Bilbao, Òsi es que tengo la suerte de que sea seleccionado entre los cortometrajes a concurso, se podr‡ ver en el ZinebiÓ, comentaba el director de Zinegoak, antes de conocer el veredicto del Festival bilbaino.

Foto Moreno Esquibel

COMO salido de la gran pantalla, el vaquero Roy Rogers cabalga hasta el 4 de diciembre por todo Bilbao desde el cartel anunciador de la 46 edici—n del Festival Internacional de Cine Documental y Cortometraje de la capital vizcaina, que bate su rŽcord de participaci—n con m‡s de 2.300 filmes recibidos. Zinebi, el festival m‡s importante del Estado en esta categor’a, da cumplida cuenta de la bonanza que experimenta el gŽnero, reciŽn salido del ÔÔarmarioÕÕ y directo al circuito comercial. ÒUn referente en EuropaÓ. Con estas palabras resum’a Zinebi el concejal de Cultura del

Teatro Arriaga, Multicines, Ideales, Auditorium del Museo Guggenheim, Auditorio del Museo de Bellas Artes y Sala Bilborock, adem‡s de emplazamientos adicionales de proyecci—n como Getxoko Kultur Etxea, Aula Magna de la EHU/UPV y festival Kortada de Gasteiz, son los diferentes escenarios de Zinebi, que, adem‡s de las pel’culas a concurso, cuenta con veinte secciones informativas y retrospectivas. Algunas de Žstas fijas, como ÔZineskolaÕ, ÔInfo Euskadi e Info SpainÕ, ÔEl documental, de largoÕ y ÔKlip ClubÕ. En esta 46 edici—n, el festival bilbaino Zinebi ha homenajeado al guionista Tonino Guerra y al realizador Walter Salles.

El concejal de Cultura, Jon Sánchez y el director de Zinebi, Ernesto del Río

Ayuntamiento de Bilbao, Jon S‡nchez, durante la presentaci—n de la 46 edici—n del certamen, a la que asistieron su director, Ernesto del R’o, quien destac— los nombres de Saura, Regueiro o Jord‡, entre muchos otros, para la ocasi—n, y el corresponsable del festival, Luis Iraun, que calific— de ÒexcelenteÓ la calidad de los filmes a concurso, as’ como el programa de 2004. Desde el pasado 29 de noviembre, cinŽfilos y cada vez mayor nœmero de inquietos por probar los placeres del cine documental y del cortometraje disfrutan de una variada selecci—n de ciclos. Y es que a falta de rostros conocidos, Zinebi insiste, un a–o m‡s, en lo que mejor sabe hacer: acercar el cine experimental que se est‡ llevando a cabo en todo el mundo.

Incertidumbres del Realismo. Selecci—n de trabajos de los 50 y 60 firmados por Saura, Regueiro, Eceiza y Jord‡. Un coloquio entre ellos analiza el embri—n del Ònuevo cine espa–olÓ.

Una ÔventanaÕ al mundo Como si de una gran ÒventanaÓ abierta al mundo cinematogr‡fico se tratara, la 46 edici—n del Festival Internacional de Cine Documental y Cortometraje de Bilbao, organizado por el ‡rea de Cultura del Ayuntamiento de la capital vizcaina, ha recibido m‡s de 2.300 filmes procedentes de 91 pa’ses, lo que supone superar, un a–o m‡s, el rŽcord alcanzado en la anterior edici—n, 1.945 pel’culas de 76 pa’ses. El aumento representa un incremento del 18%. Este a–o, ha predominado la presencia de la ficci—n, con 1.218; seguida del documental, con 650; y la animaci—n, con 221, siendo el resto t’tulos de car‡cter experimental. Por procedencia, han destacado los filmes franceses, con 304 pel’culas; seguidos de los espa–oles, con

Tonino Guerra. Homenaje al genial guionista, que sigue en activo a sus 84 a–os. Clip Klub. Repaso a la historia del videoclub, que emitir‡ Euskal Telebista.

pel’culas a concurso, que compiten a diferentes premios y en distintas categor’as: Gran Premio del Festival (6.010 euros), Gran Premio del Cine Vasco y Gran Premio del Cine Espa–ol (4.207 euros, respectivamente), Mikeldi de Oro en los apartados de Animaci—n, Documental y Ficci—n (3.005 euros), Mikeldi de Plata en los tres mismos apartados (1.803 euros) y Carabela de Plata a la Mejor Pel’cula Latinoamericana (3.005 euros). Los premios paralelos son el Premio del Pœblico, de ETB (1.503 euros), Premio SGAE Fundaci—n Autor al Mejor Gui—n de Cine Vasco (1.503 euros) y Premio AISGE a la Mejor Interpretaci—n (1.202 euros). (Nota: al cierre de esta edici—n no se hab’a fallado aœn el concurso, de aqu’ la ausencia de palmarŽs).

Walter Salles. Ciclo en colaboraci—n con el Festival de Sao Paulo sobre el director de Diarios de motocicleta y otros j—venes sudamericanos.

‘Luna de Avellaneda’ EL director argentino Juan JosŽ Campanella present— el pasado noviembre en Bilbao su œltima pel’cula, Luna de Avellaneda, con el genial Ricardo Dar’n al frente de un reparto en el que destacan nombres como los de Mercedes Mor‡n, Eduardo Blanco y Valeria Bertuccelli. El realismo que destila la pel’cula, ambientada en el caos financiero argentino, cuenta la historia de un emblem‡tico club de barrio

Mikro Zinebi. Minisala en la plaza Arriaga. Under Hollywood. Cl‡sicos de Hitchcock, los mejores westerns y cine de Warhol se ÒdesmontanÓ en trabajos cr’ticos.

Empieza la pel’cula. Ciclo que reivindica la labor an—nima de los creadores de los t’tulos de crŽdito de las pel’culas. Jane Birkin, broche final. El festival ha

que ha vivido en el pasado Žpocas de esplendor y que en la actualidad se encuentra inmerso en una crisis que pone en peligro su propia existencia. Al parecer, la œnica salida posible es que se convierta en un casino, nada m‡s alejado de los ideales y de los fines de sus fundadores en la dŽcada de los 40: un club social, deportivo y cultural; el film ha supuesto todo un Žxito en su pa’s natal.

inclu’do dentro de su programaci—n un concierto de la cantante y actriz anglofrancesa el d’a 4 como broche final, con la colaboraci—n de la Fundaci—n ÔBilbao 700Õ.

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Zortzigarren kalea–La octava calle

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Bilbao calza las botas de siete leguas Jon Múgica

FUE la m’tica Marlene Dietrich quien dijo aquello tan dram‡tico de Áojal‡ pudieras marcharte ahora y volver hace diez a–os! Pero no se puede dar marcha atr‡s a los relojes y estamos ÒcondenadosÓ a vivir el tiempo que nos toca. En esta ocasi—n, Bilbao ha dado un paso de gigante en el campo del comercio, como si calzase la bota de siete leguas, con la inauguraci—n del centro comercial Zubiarte, en pleno coraz—n de Abandoibarra. Dos columpios como met‡fora de los puentes entre los que florece el nuevo palacio de mercaderes, flores para los invitados, la soprano Marta G. Urbieta sentada en un trapecio mientras regalaba al auditorio una hermosa aria, Antonia Ruiz y M—nica Alsina descolg‡ndose, en un bello ejercicio de acrobacia, entre telones de terciopelo rojo y la marchosa mœsica de Javi Pez, con go-g—s descoyunt‡ndose en el baile... La apertura de Zubiarte se convirti— ayer en un espect‡culo de primera magnitud, con la presencia de la vicelehendakari, Idoia Zenarruzabeitia, Rodrigo Garc’a Azurmendi, el Alcalde I–aki Azkuna, Jan Eijkemans, Alvaro Portela, Julio Artetxe, Ibon Areso, Julia Madrazo, Txema Oleaga, Antonio Basagoiti, el director del proyecto, Joaqu’n Cubillo, el gerente de Bilbao R’a 2000, Angel Nieva, Ricardo Barkala, el director de comercio del Gobierno vasco, JosŽ Luis Montalb‡n, el arquitecto del proyecto, Robert A. M. Stern, Blanca Uriarte, la gerente de Zubiarte, Raquel Conejo, Fernando Oliveira, Iluminada Olivares. Mar’a JosŽ Garc’a, Inocencio GutiŽrrez OyagŸe, Angel Serna, Roberto Marcos, Julen Sordo, Patricia Gonz‡lez, Antonio PŽrez del Pulgar, Nerea Zubiri o Juan Carlos Guilabert, entre otros, todos ellos bien guiados por Isabel Vicente entre los pasadizos y calles de la gran avenida del comercio... No fueron los œnicos presentes en un acto presentado por Jorge Fern‡ndez. A la cita acudieron tambiŽn la ciclista Joane Somarriba, acompa–ada por Ramontxu Gonz‡lez Arrieta, Juan Luis Laskurain, el presidente de CECOVI, Juli‡n G—mez, el director de DEIA, Juan JosŽ Ba–os, el director general de EITB, Andoni Ortuzar, Octavio Pantale—n, Ana BelŽn L‡zaro, M—nica Pinto, Luc’a Marzo, Fernando Maura, Santos Navas, To–o Foraster, Mar’a Loizaga, Jon Aldeiturriaga, acompa–ado por Arantza AndrŽs, el alcalde de Barakaldo, Tontxu Rodr’guez, Pedro Campo, Andoni Pascual, la arquitecta Celia Fulcher, Mario Esteban, Ana Churruca, Jon Ortuzar, ÔÔvecinoÕÕ del centro, y un buen nœmero de invitados que se pasearon por toda una galer’a de tiendas que, desde el punto de vista del comercio, asemeja a las florentinas galer’as

de arte de los Uffizi. Dir‡n algunos de ustedes, no sin un ‡pice de raz—n, que quiz‡s peque el cronista de exagerado, pero eran muchos a–os ya, como la enigm‡tica y poderosa Marlene, de esperar la llegada de algo as’ al coraz—n de la VillaÉ

kari, Juan JosŽ Ibarretxe, Bernardo Igartua, Manuel Mœgica, Pedro V‡zquez, Javier S‡nchez-Beaskoetxea, CŽsar Izco, Imanol Zarraga, Ander Guaza, Jaime Belamendia, Jesœs Alvarez o Roke Mar’a Zugaza entre otros.

Oro, diamantes y esmaltes y el hombre que no cant—É La Sociedad Coral de Bilbao celebr— la festividad de Santa Cecilia, patrona de los mœsicos. Un concierto homenaje al socio en el Palacio Euskalduna, con la interpretaci—n del Stabat Mater de Dvorak, encendi— la jornada en la que se entregaron la insignia de esmalte y diamantes al lehendakari del Gobierno vasco, Juan JosŽ Ibarretxe, las insignias de oro de la entidad a Pilar Aresti, Joseba Zubia e I–igo Oriol, presidente de Iberdrola, en cuyo nombre recogi— la distinci—n, Federico San Sebasti‡n. Bajo el manto de un espectacular mandato de Cecilio Gerrikabeitia, el maestro Od—n Alonso, Jon Ortuzar, la presidenta de las Juntas Generales Ana Madariaga, BelŽn Greaves, diputada de Cultura, el concejal de Cultura Jon S‡nchez, Mari Carmen Mart’nez, Alzane L—pez, Cristina Hecht, Gorka Sierra, director de la Coral, JosŽ Bustamante, JosŽ Alberto Pradera, Bego–a Lerchundi, JosŽ Ignacio Berroeta y Mar’a JosŽ Aurrekoe-txea, Santos Txakartegi, Garbi–e Urdampilleta, Antonio Barandiar‡n, JosŽ Luis Contreras, Luis Go–i, Jon Mancisidor, Pedro Azpiazu, Francisco Pontes, Eduardo Andrade, Koldo Narbaiza, Octavio Pantale—n, Marisa Benavides, Gonzalo M‡rquez, Camino Mart’nez Ca–avate, Alberto Garay, Javier de Juana, Marisa Alvarez, JosŽ Angel Iribar, el hombre que menos cant— en toda su trayectoria profesional, Txomin Bereciartua, Carlos L‡zaro, JosŽ Gurrea, Mari Asun Belamendia, Juan Ignacio Gomeza, Marta Larrea, Nicol‡s S‡ez, Ram—n Muro, Alvaro S‡ez y Argi–e Izaguirre, entre otros.

Buenos vientos de oto–o para la navegaci—nÉ En este tiempo de encuentros en el que vivimos se celebraron tambiŽn los ilustrados almuerzos de la C‡mara de Comercio Brit‡nica que preside Javier Bicarregi, en lo que tanto Xabier de Irala como Jon Ortuzar dejaron caer sobre el tapete el as de oros de sus conocimientos. Hubo, tambiŽn, una cena que brill— por encima de todas, la de oto–o en favor de la Fundaci—n Esclerosis Mœltiple que preside Bego–a Rueda, celebrada entre girasoles, disfraces circenses y un mundo de fantas’a que sirvi— para ahuyentar, siquiera por un d’a, al terrible dogo

Fotos Moreno Esquibel

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Inauguración de Zubiarte

Nostalgia navide–a de aquella primera noviaÉ A un paso de la llegada de la Navidad Ðen realidad ya est‡ entre nosotros, semicamufladaÉÐ se acerc— al BEC el espect‡culo de Walt Disney sobre el hielo. TambiŽn se detuvo en esta ribera Anton Hurtado, quien expuso en la galer’a de Juan Manuel Lumbreras, una exposici—n sobre el Camino de Santiago a cuya cita acudieron Alberto Ipi–a, Fernando Mirantes, I–aki Lejarreta, Mar’a Victoria Ca–as y un largo etcŽtera de invitados. Habla el artista de un camino de relaciones y de inmediato viene a la imaginaci—n aquella primera ÒnoviaÓ, delgada y atlŽtica, llamada bicicleta. Quiz‡s lo haga porque la Sociedad Ciclista Bilbaina que preside Jose Miguel Amor present— el libro S.C. Bilbaina.1904-2004. Un siglo en la vida de Bilbao ante el lehenda-

Autoridades en la apertura del nuevo centro comercial

La Sociedad Coral celebró la festividad de Santa Cecilia

Presentación de la VI Semana Olímpica

de la enfermedad. Marta Fern‡ndez Rivera coordin— el trabajo de los actores y actrices Maribel Salas, Maider Rubio, Ohiana Vicente, David Valdeveira, Idoia Merodio, Jorge Santos, Sol Maguna, Yolanda Prieto, Aitor Gonz‡lez, Yannik Bergara, Mar’a Goiricelaya y Rafael Mat’as, la magia de Jon Zabal, el baile de I–igo Fidalgo y Kepa de la Fuente y la mœsica del cuarteto Quod Libet, todo ello dirigido por Txetxu Ugalde y Yolanda Alzola, y con la presencia del diputado de Acci—n Social, Juan Mari Aburto, Andoni Rekagorri, Pedro Fern‡ndez de Larrinoa, Gualber Atxurra, Gaizka

Sola, JosŽ Ram—n Elorriga, director territorial de Sanidad, Rafa Puntonet, Alicia Pastor, Pedro Doistœa, Juan JosŽ Zarranz, Ana Van-Koningsloo, Marian y Susana L—pez, de la Asociaci—n Alegr’a de Muskiz, Joseba Ruiz de Loizaga, Mitxel Unzueta, Carlos Santos, Mari Asun Gonz‡lez, Pedro Palma, Jesœs Mat’a, Anuska Zabala, Mar’a Jesœs Yarza, Mariapi Alza y un largo y solidario etcŽtera. Fue una noche de vientos suaves, los mismos que se reclaman para la navegaci—n desde el Museo Mar’timo de Bilbao, donde Patxi Garai y los suyos celebraron el D’a del Navegante, en una fiesta popular.

Dulzor en los paladares y luto carb—nÉ La apertura del curso de Hosteler’a de Artxanda cont— con el saludo de bienvenida de Tom‡s S‡nchez, presidente del Patronato de la Escuela, y Kepa Olabarrieta, director de la misma, as’ como con la despedida de Juan Bautista Mendiz‡bal, director de Promoci—n Tur’stica del Gobierno vasco y la lecci—n magistral, titulada Tengan cuidado ah’ afuera, de Angel Gago y lleg— d’as antes de que los fogones de Bizkaia se ti–iesen de luto carb—n por el adi—s definitivo de JosŽ Mar’a Gonz‡lez, ÒCurritoÓ y Jenaro PildainÉ ÁC—mo se estar‡ poniendo San Pedro, all‡ en el Cielo, de sardinas y bacalao! Aqu’, en la tierra, la inauguraci—n de Bodega Palacio Pradera, all‡ en Bertendona, repleta de jam—n y ambiente andaluz e invitados (desde Jon Aspiazu a Javier de Juana, pasando por Javier Barroeta, Juan Carlos Mu–oz, Carla Alegr’a, Juanan Zaldua y un interminable etcŽteraÉ) que disfrutaron de la actuaci—n de ÒPollito de CaliforniaÓ y la celebraci—n del I sal—n de vinos Montilla-Moriles y homenaje a Pedro XimŽnez en el Hotel Carlton, organizado por Manu Mart’n y los suyos para dejarnos en el paladar el dulce recuerdo de los vinos de aquella zona, fueron los protagonistas culinarios del mes. Lluvia de merecidas medallasÉ Hubo, adem‡s, una lluvia de medallas. Las entregadas por los colegios oficiales de mŽdicos y enfermer’a a sus jubilados (Anton Scheifler y Cosme Naveda entre los galenos y Mar’a JosŽ Garcia Etxaniz en el campo de la enfermer’aÉ) y las que se colg—, como reina de la belleza de Bizkaia, la nueva miss, Naroa Marroqu’n, la mujer del pelo en llamas. TambiŽn se las merecen Manu Vitoria, De la Cuadra

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Salcedo y todos cuantos participaron en la VI Semana Ol’mpica de Bilbao o quienes acudieron a la exposici—n Miguel Angel y su tiempo que mont— al Guggenheim en la m‡quina del tiempo para llevarnos hasta el pa’s de los cl‡sicos. No fueron los œnicos. Los premios Ingenia 2004, concedidos por la Fundaci—n de la Escuela de Ingenieros de Bilbao. Enrique de Sendagorta, ingeniero naval y fundador de Sener y Juan Celaya, patr—n de Cegasa, fueron los galardonados, al igual que Mikel Urizarbarrena, Aitor Cobanera, Luis Zum‡rraga, Ignacio S‡enz Gorbea, Juan JosŽ Rold—s, de Iberdrola Santiago CortŽs, Carlos Esteve y JosŽ Mar’a Losada, se llevaron el homenaje de Softec o los toreros Salvador Vega y JosŽ Mar’ Manzanares los que concede el Grupo Faustino. Otras recompensas que han de consignarse son para la gente de ÒNuevo FuturoÓ y su tradicional rastrillo o para Est’baliz e Idoia Benavente, que acaban de inaugurar Akari, una tienda de art’culos japoneses en BilbaoÉ

100 años de la SCB

Cantaron con las botas puestasÉ Ha llegado por Navidad, como si fuesen villancicos rojiblancos, pero lo cierto es que el pack ÐCD. DVD y libro en un solo loteÐ creado por Kepa Junkera y editado por la Fundaci—n Athletic que preside Fernando Lamikiz y gerencia Ricardo Mart’n Ari–o es algo m‡s, es un punto de encuentro entre civilizaciones. A su presentaci—n, organizada en el Hotel Carlton, acudieron Amany Ndiaye, Jatabi Latif, de la asociaci—n de Inmigrantes Marroqu’es, Celina Pereda, de MŽdicos de Mundo, Ernesto Valverde, Jon Aspiazu, Walter Junhans, Manolo Delgado Ðbuen director de orquestaÉÐ, jugadores como Aitor Karanka, Joseba Etxeberria, I–aki Lafuente y Javi Gonz‡lez, las futbolistas del Athletic femenino Eli Ibarra, Nerea Onaindia, Irune Murua, Arrate Orueta, Irantzu Castrillo, Nerea Uriagereka y Amaia Olabarrieta, Ana Urquijo, Pedro Campo, Eukeni Olabarria, Juan Carlos Erkoreka, Kosme Bibanko, Juan Manuel Delgado, Pello Salaburu, Ferm’n Palomar, I–aki Villanueva y FŽlix Izquierdo, viejos leones de todos los tiempos y un nutrido grupo de aficionados del Athletic. Todos ellos cantaron con las botas puestasÉ

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Compras navideñas en el Botxo

Begoña Rodríguez Urriz

NAVIDAD, Nacimientos que recuerdan al Ni–o que Nace; Noche de Dios, Noche de paz; Noche que no es de dormir; Nostalgia de las Navidades pasadas y de quienes nos acompa–aron en ellas; para Nadie la soledad, la tristeza, la marginaci—n, la ÒNÓ de la Negaci—n de sus derechos; que quede fuera lo Negativo en nuestras vidas. Que Nadie se sienta apartado ni deprimido; que Nadie quede excluido de la alegr’a general; que todas las Naciones vivan en justicia, en paz y en concordia. ADVIENTO, tiempo de preparaci—n para estas fiestas; Angel que Anuncia la Buena Nueva a los pastores; Amor, Alegr’a, Amistad, Acogida, Afecto...; para nadie la ÒAÓ de Aburrimiento, Amargura, Angustia o Ansiedad. VIDA que se siente latir con m‡s fuerza; Villancicos que se escuchan por doquier; Voluntad, buena para que se haga realidad el mensaje de paz que se escuch— en BelŽn; Vacaciones esperadas, deseadas y anheladas; Viajes al sol, a la nieve o para reencontrarnos con los seres queridos; Velas, con su nota c‡lida que aporta luz y calor a nuestros corazones y nuestras familias. Viandas escogidas y Vino a–ejo en nuestras mesas. Para nadie la ÒVÓ de la Venganza o de la VergŸenza. ILUSION en los ojos de todos, especialmente de los ni–os; Iluminaci—n en las calles y en los hogares; InterŽs en hacer felices a los que nos rodean; Intriga, la que encierran los paquetes de regalos; Imaginaci—n e Ingenio de las amas de casa para hacer frente al trabajo extra; ÒIÓ... esperamos que nunca sea la de la Injusticia, la Insolidaridad o la de la Indiferencia ante el sufrimiento ajeno. DESEOS de felicidad para todos, repetidos una y otra vez; D’as de reencuentros y de reuniones familiares y festivas; D‡divas, Dones generosos y alegres; Darse a los Dem‡s, por entero y sin esperar nada a cambio; Decoraci—n esmerada, de mesas y casas, escaparates y comercios, calles y plazas; Destellos luminosos; Diversi—n a raudales; Dinero, el que siempre se espera que toque en la loter’a... y que nunca toca. ARBOL, Abetos y Acebo; Adornos navide–os; Ajetreo de compras y de preparativos; Alivio, el que sienten algunos cuando pasan estas fiestas; Almendras, elemento base de nuestros turrones; Angulas con Ajo y Aceite... aunque debido a su precio quiz‡ pasen a ser im‡genes para el recuerdo en la mitolog’a compartida de los bilbainos. DE lo que no est‡ permitido en Navidad: Dolor, Disgustos, Disputas, Discriminaci—n Divisiones, Derroche, Despilfarro... ÀSer‡ acaso este el mensaje que nos deja la palabra NAVIDAD?

K-Toño Frade Villar

HACE medio siglo, cuando el clan de los Villar y sus ÒapegadosÓ, que ocup‡bamos tres pisos de la casa de Ercilla 38 (hoy 40) nos reun’amos para celebrar los banquetes navide–os. L—gicamente las compras, en nuestro caso, las circunscrib’amos al barrio de Indautxu, salvo por algunas visitas al Casco Viejo. Compras que no se hac’an el mismo d’a, pero si a–o tras a–o en los mismos establecimientos. Era tradici—n acompa–ar a la amatxu para ayudarle a acarrear las compras en aquellas bolsas cuadradas de rombos de color negro y crema. Sal’amos temprano a comprar los caracoles donde Caridad, los higos, orejones y ciruelas para la compota donde Ibeas y junto a Žl en Ercilla en la Licorer’a de Abaitua compr‡bamos a granel los ÒanisadosÓ o ÒquitapistasÓ porque el co–ac Barbier y el champ‡n Royal Carlton de Bodegas Bilbainas se lo regalaban unos amigos a mi padre. En la misma calle, pero en la acera de enfrente, compr‡bamos en Balbino los quesos GruyŽre y Emmental, en la calle Aguirre las latas de aceitunas El Serpis, las anchoillas El Velero y las sardinas de Garavilla donde Sim—n Orueta, las latas de esp‡rragos La Carretilla de Muerza donde AndrŽs Estebaranz en Licenciado Poza junto a Gregorio de la Revilla y frente a la antigua gasolinera. TambiŽn en ÒPozasÓ compr‡bamos la carne, haciendo grandes colas, a Gainza y el cordero en alameda de Urquijo a Manzarbeitia. De toda la vida hemos ido a comprar los embutidos Ðchorizo de pamplona, cabeza de jabal’, salchich—n, mortadela, lengua escarlata o morcilla de fšie grasÐ donde los Thate, tanto en su despacho del Ensanche, como frente a la Quinta Parroquia, pero el jam—n de ÒbrilloÓ, que era extraordinario, era indispensable comprarlo en La Vi–a junto a la Diputaci—n. El

pescado se sol’a dejar para el œltimo d’a y lo compr‡bamos en Las Capotinas y el marisco en los bajos del Mercado de La Ribera donde Epi. Pero para bajar a las Siete Calles hab’a que coger el tranv’a, concretamente el Cinco (Atxuri-Indautxu) que paraba como final de trayecto en la alameda de San MamŽs frente al

bar Sagarna. Nos ape‡bamos en la Ribera, frente a San Ant—n y all’ mismo en Ajuria y Gorriti compr‡bamos unas enormes latas ondarresas de bonito en escabeche y unas riqu’simas aceitunas tanto negras como verdes. De all’ pas‡bamos a la ÒPlazaÓ, en el puesto de Martina nos surt’amos de chorizos y de txintxorta. En la œltima planta, donde Abilia, adquir’amos los huevos de aldea y la mantequilla, all’ mismo nos acerc‡bamos a las aldeanas, generalmente bego–esas, que como Agueda ofrec’an su extraordinaria vendeja y donde ama compraba la coliflor y las hortalizas para componer una menestra exquisita. No, no me olvido de los mazapanes y de las glorias, as’ que nos dirig’amos al portal de la calle del Correo donde se ubicaba todos los a–os, hasta hoy, Iva–ez turronero alicantino de gran prestigio. El turr—n lo tra’a a casa un t’o m’o que trabajaba en la f‡brica de lej’a El Conejo, junto a nuestra casa y recuerdo que hab’a uno Òdel duroÓ marca El Torero envuelto en celof‡n rojo que, a–o tras a–o, era imposible partir, por muchos artilugios que usara mi familia. Y si se olvidaba alguna compra o para las de œltima hora recurr’amos a los ultramarinos de debajo de casa, Marina Lapeyre y Ballesteros, y si era queso manchego lo que faltaba, pues nada, donde Tom‡s el quesero, que viv’a en la escalera interior. Con tanta comida Áos pondr’as moraos! dir‡n ustedes, pues s’, todos los a–os pasaba igual, que despuŽs de los entremeses, me met’a entre pecho y espalda, tres platos de la ensaladilla rusa que hac’a la t’a Emilia, y ya no pod’a m‡s, la tradici—n es la tradici—n. ÁQuŽ cosas!

Castañeras y castañeros www.punto.com Olmo

VAMOS a realizar hoy juntos, usted lector y este humilde servidor, un curioso estudio sobre las casta–as asadas que son los autŽnticos heraldos del invierno aunque su sabroso aroma llegue a nuestras calles en oto–o. A las casta–as asadas les ha ocurrido lo mismo que al resto de los servicios comerciales, que con el transcurso del tiempo se han ido transformando sustancialmente, tanto en su sistema de asado como en su precio gracias a la documentaci—n que conservo y a mi memoria de bilbaino. Los lectores veteranos recordar‡n aquellos puestos de las casta–eras con su chabolita de tablas, su asador, su badila, su candil de carburo y su cestito con el saco para guardar las asaditas calientes. Del precio de las casta–as asadas de los a–os cuarenta guardo tres documentos que dan fe de su tarifa. Uno de ellos es, precisamente una historieta de Don Celes publicada en el a–o 1946, en un invierno que le dio por ser soleado y Don Celes, al ver que con aquella temperatura no vend’a una escoba se fue con su ÒlocomotoraÓ (ya hab’an comenzado a aparecer las maquinitas de trŽn) al Polo Norte donde ofrec’a asaditas calientes al precio de Òveinte, una pesetaÓ. Corroborando esta tarifa podemos encontrar en La colmena de don Camilo JosŽ Cela dos citas de casta–as asadas. Una de ellas aparece en el cap’tulo II donde el personaje llamado Paco (copio) Ò...siente un escalofr’o y compra veinte de casta–as Ðcuatro casta–asÐ en la boca del

metroÓ. La otra cita aparece en el cap’tulo V cuando la se–orita Elvira (copio) Ò...hab’a cenado una peseta de casta–as asadas, veinte casta–as asadas y una naranja de postreÓ. Esta segunda cita habr‡ hecho recordar a m‡s de un lector de mi quinta (la de la posguerra infantil) que en m‡s de una ocasi—n las casta–as asadas calentitas, nos resolv’an el problema de la cena y el de la calefacci—n manual para combatir en lo posible los temidos Ðhoy por fortuna olvidadosÐ saba–ones. El mismo autor (me refiero a don Camilo) incluye en su libro Nuevas escenas matritenses un cap’tulo, titulado ÒLos solitarios, la marihuana y las casta–as asadasÓ en el que aventura este original punto de vista. (copio): ÒLas casta–as asadas son mas baratas que la marihuana y tambiŽn sirven para combatir la soledad y otros males endŽmicosÓ. En este mismo cap’tulo confirma lo que acabo de escribir so-

bre la utilizaci—n que hac’amos los bilbainos y bilbainas de la posguerra de las casta–as asadas, como sistema de calefacci—n manual. Copio: Ò...las casta–as las toma no m‡s que por vicio, puro vicio, y tambiŽn para calentarse un poco las manos que suelen quedar heladas...Ó. Si pasamos ahora al tema del precio unitario de la casta–a asada, no poseo datos anteriores a la guerra, pero con los que dispongo hay m‡s que suficiente para darse cuenta de su evoluci—n desde aquel a–o cuarenta en que se cotizaba cada casta–a a cinco cŽntimos, hasta este a–o cuarto del siglo XXI y del III milenio en que se venden a diez cŽntimos de euro, es decir a 16, 63 cada unidad. Haciendo un divertido juego de equivalencias podemos decir que con el euro con el que hoy compramos diez casta–as asadas, en el a–o 40 nos hubiesen dado 3.327 casta–as equivalentes a casi 42 kilos. Han pasado setenta a–itos sin darnos cuenta. Aquel oficio de las cl‡sicas casta–eras, con dominio casi total del gŽnero femenino lo han conquistado tambiŽn los hombres. Y aquellos puestecitos de tablas hoy son modernas locomotoras con cub’culo incluido y para estar a tono con los tiempos de la inform‡tica, tienen hasta su pagina web en Internet. La pueden encontrar ustedes tecleando www.casta–ero.com. El progreso hace evolucionar lo mismo los veh’culos espaciales que los p•estos de asar casta–as. No me extra–ar’a nada que en el Bilbao del futuro se vendan las casta–as asadas con ordenador.

diciembre de 2004

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Fernando Lamikiz, Athleticen presidente berria

“Athletic jaio zen txapeldun izateko” Gaizka Eguskiza

AZKENEAN lortu du Bilbao aldizkariak Athleticen presidente berriarekin hitz egitea. Ehun egun daramatza Fernando Lamikizek talde zuri-gorriaren lehendakaritzan eta tarte honetan argi eta garbi aztertu ditu Athleticen premiak, Òelkartasuna berreskuratzeaÓ eta Òdiru sarrera areagotzeaÓ, besteak beste. ÐZure ustez, zergatik eman zuten bazkideek euren botoa zure alde? ÐLehenik eta behin, nire ustez, gure proiektua oso ona da Athleticentzat, baita gure taldea ere. Hemendik aurrera, bazkideek aukeratu dute Athleticentzako onena. ÐZer berri ekarriko diozu Athletici? ÐNik ustez dut oso garrantzitsua dela gauzak argitasunez adieraztea. Halaber, bazkide guztiak batzarra izatea eta eurekin egotea ditugu helburu. Beste aldetik, uste dugu gauzak era ezberdin batean egin behar direla: ez orain arte egin diren moduan, hau da, goitik behera, baizik eta behetik gora. ÐZein da zure ustez momentu honetan Athleticek pairatzen duen arazorik nabarmenena? ÐLehenengoan, ekonomia arloan, joera aldatu behar da. Diru sarrerak, irteerak baino handiagoa izan behar du. Bigarrenez, Athleticen gerra moduan bizi izan da eta gure ustez, aldiz, Athletic bakarra dago; aurrean egoteko, danok batera joan behar dugu. Horretarako, badakit zaila izango dela eta denbora behar izango dugula. Hirugarrenez, Athletic irabaz-

Hitz laburretan ● ● ● ● ●



Izena: Fernando Lamikiz. Adina: 45 urte. Jaioterria: Gernika. Lanbidea: Abokatua. Athleticen 27. presidentea da Lamikiz. Egitasmoak: ÐKirol arloan: euskal futbol osoa menpean hartu eta Athleticen filosofia indartu. ÐEkonomia arloan: diru sarrera areagotu eta zorra gutxitu. Karneten prezioak IPC-rekin batera igoko dira. ÐGizarte arloan: Bazkideekiko komunikazioa ahalik eta gehien zabaldu.

lea den arren, azkenengo urteotan ez dugu ezer irabazi. Azken hiruzpalau belaunaldiek ez dute Athletic txapeldunik ikusi. Gazteek Txapeldunen Liga ikusten dituzte astero telebistaz; maila honetara heltzea nahi dugu. Hori lortzeko, elkartasuna behar da. ÐMintza gaitezen orain ekonomiaz. Zeintzuk izango lirateke ondorioak abalak burutuz gero? ÐGure proposamena izan zen kontu guztiak argi eta garbi azaltzea, eta horrelakorik egin zen lehengo asanbladan. Abalei dagokienez, guk uste dugu ez zela

Athleticen zorra “36 milioi eurokoa da”, dio Lamikizek. Moreno Esquibelen argazkia

ona burutzea, Athleticentzat txarra baitzen. Ondorioz, abal hauek defenditu egin ditugu Madrilen Ligako batzarrean. Azkenean ez dira burutuko aho bateko akordioa dela eta. Orain egin behar duguna gure abalak jartzea da eta horretarako hiru hilabeteko epea daukagu. Ez da inolako arazorik egongo. ÐHala ere, bazkideek ez dute zure aurrekontua onartu... ÐEgia esan onartu ez zutena aurreko kudeaketa izan zen. Aurrekontua beste gauza bat da: onartu ezean, aldatu beharko da. ÐZer iritzi diozu Ignacio Ugartetxe presidente ohiak asanbladan adierazitako atxikimenduari? ÐAthleticen transizioak ez dira ondo egin azken ureteotan eta garrantzitsua da batzar baten lana gogora ekartzea; ziur nago presidente guztiok Athleticen alde lan egiten dugula. Beraz, batzar berriak lehenaren lana profita dezake... Berdin da nor den presidentea baizik eta kluba bera da benetan garrantzia daukana.

“Sería bonito inaugurar el nuevo San Mamés en cinco años” EL campo nuevo es una de las prioridades de la Junta Directiva que preside Fernando Lamikiz, pero su llegada al cargo le obligar‡ a enfrentarse a una serie de asuntos m‡s o menos peliagudos: ÐZubizarreta. ÒEl acuerdo de rescisi—n ha sido bueno para ambas partes. Pensamos que el ‡rea deportiva debe funcionar de otra manera a la que Žl opina. Le propusimos acabar su contrato y hacer una transici—n ordenada pero Andoni ve’a que lo mejor era dar paso a la gente nueva. Le agradecemos sus servicios al club y nuestra idea es que todos los que hayan formado parte del Athletic, lo sigan siendo, desde los mejores jugadores hasta el œltimo de los aficionados. De hecho pretendo contar con su asesoramiento puntualÓ. ÐJulen Guerrero. ÒEs un gran profesional y si juega o no es cosa del entrenador. Por el momento, no se contempla ningœn traspasoÓ. ÐFernando Otxoa. ÒNo trabaja para el Athletic aunque siempre est‡ a disposici—n de aconsejarnos en momentos pun-

tuales. Los sueldos vitalicios eran costumbre en el club: el Athletic redondeaba el dinero de la jubilaci—n. Esto ya ha terminado. Hay que analizar la medida en su contexto: se ide— hace m‡s de 30 a–os, los empleados se jubilaban aqu’ y eran muchos menos...Ó. ÐLezama. ÒHay que potenciarlo, as’ como el fœtbol base vizcaino en general. Si queremos ser fieles a nuestra filosof’a lo consecuente es cuidar la cantera, de manera que en Bizkaia se juegue al fœtbol y, a partir de ello, se sea competitivo en Primera Divisi—nÓ. ÐEquipo femenino. ÒDebe seguir los pasos que en su d’a diera el equipo masculino. Fuimos pioneros entonces y lo somos ahora. Queremos potenciar el fœtbol femenino en BizkaiaÓ. ÐClubes convenidos. ÒEl Athletic siempre ha sido diferente: en Bizkaia, incluso al que no le gusta el fœtbol, el domingo se interesa por el resultado del Athletic. Forma parte del sentimiento de un pueblo, una tradici—n que pasa de padres a hijos. Convenir clubes nos permite ahon-

“Berdin da nor den Athleticen presidentea, baizik eta kluba bera da benetan garrantzia daukana” ÐHain txarra al da Athletic egoera ekonomikoa? ÐHain txarra ez da, baina ez da ona. Athleticen kontuak Ligako onenetarikoak izango dira. Nik uste dut ez dagoela urtero-urtero dirua galtzerik. Joera aldatu behar da eta horretarako xehetasuna ezinbestekoa da. Pentsa ezazu zelai berri bat eraiki nahi dugula; hortaz, lehenik eta behin, gure kontuak ondo egon beharko dira. Bestela, nola joango gara bankura, Forura edota Udalera? ÐZein da Athleticen zorra? ÐGutxi gorabehera, 36 milioi eurokoa da. ÐZer egingo duzu diru sarrera areagotzeko? ÐLehendabiziz, gutxiago gastatu behar da. Pentsatzen dut langile gehiegi dagoela Athleticen. Ez da

dar en nuestra filosof’a deportiva y, al mismo tiempo, tenemos la posibilidad de fomentar el fœtbol baseÓ. ÐGurpegi. ÒTengo confianza en que la condena sea absolutoria y creo que hay elementos de juicio que indican que el jugador es inocente. El hecho de la Asociaci—n Mundial contra el Dopaje entienda que la 19 de nandrosterona es una sustancia que pueda producirse end—genamente y que los an‡lisis tradicionales no valen para detectar un positivo, refuerzan las tesis de Sabino Padilla. Si la sentencia no es favorable, el Athletic va a agotar todos los recursos. Nos interesa mucho la persona tras el jugadorÓ. ÐNuevo campo. ÒLa ordenaci—n urbana de Bilbao corresponde al Ayuntamiento y creemos que podemos construir un campo nuevo que albergue no s—lo fœtbol sino eventos que beneficien a la ciudad y a la provincia. Hay que aprovechar la oportunidad que se presenta en Basurto y, desde luego, no va a ser un elemento distorsionador en la zona. Con buena voluntad con las instituciones, los socios tendr‡n la palabra. El Athletic no es promotor inmobiliario, ni hostelero; es un equipo de fœtbol, as’ que lo que queremos es un campo de fœtbol; si adem‡s entran los museos, palcos VIP y tiendas, mejor que mejor. Ser’a bonito que el nuevo San MamŽs estuviese inaugurado en cinco a–osÓ.

izan hori Athleticen ibilbidea. Etxe bat egiteko arkitekto bat kontratzen baduzu ez diozu geroago zure etxean bizitzen uzten, ezta? Munduan egitura txikiak daude eta gehiagorik behar izatekotan, kanpotik erosten da. Horretaz aparte, futbola normalizatu egin da eta diru gutxiago dago. Kontratuak berritzeko orduan, egunean-eguneko baldintzak aztertu behar izango dira. Guk uste dugu kontratuen luzerak txikiagoa izan behar duela. ÐKirol arloan, zein da Athleticen helburua? ÐAthletic jaio zen txapeldun izateko, ez jolasteko soilik. Era berean, gure jendea baino ez dugu erabiltzen eta hainbeste urte hauetan lortu egin dugu. Pentsa ezazu, bestela, duela gutxi Athletic txapelduna izan dela Maradonaren Bartze-

“Elkartasuna lortzen duen presidentea izan nahiko nuke nik” lona eta Stilikeren Erreal Madrilen kontra. Helburua lortu ahal izateko, jokalarien aro on bat atera behar da eta txapeldunen kontzientzia barneratu behar dugu; elkartasuna ere garrantzitsua da. Momentu honetan futbolari onak ditugu, atzetik ere jokalari onak daude eta nire ustez Athleticek Europan urtero jokatu behar du. Gero lortzen ez bada, ez dago inolako problemarik, baina denboraldiaren hasierahasieratik pentsatu behar dugu gauza izango garela. Pentsatzen ez baduzu gero ziur nago ez duzula ezer lortuko. ÐNolako presidentea izango da Fernando Lamikiz? ÐAthleticen presidentea izatea ardura handia da eta nik ilusio osoz egiten dut. Proiektu on bat izateaz aparte, elkartasuna lortzen duen presidentea izan nahiko nuke. Bazkideekin gertu sentitu nahi dut.

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Kirol botxoa El bocho deportivo

La camiseta de Euskadi Carlos Ballesteros

CON casi un tercio de Liga disputada, el Athletic parece haber encontrado el camino correcto para abandonar las peligrosas posiciones con las que ha coqueteado desde el comienzo de la campa–a. La victoria en San MamŽs frente al Racing parece haber catapultado al equipo que adem‡s mantiene intactas sus opciones tanto en la Copa del Rey, que se reanudar‡ en febrero con los octavos de final, como en la UEFA donde se enfrentar‡ el primer d’a de diciembre al Steaua de Bucarest en Bilbao y al Standard de Lieja en tierras belgas quince d’as despuŽs. Las cuatro jornadas que se disputar‡n en diciembre junto al tradicional partido navide–o de la selecci—n de Euskadi Ðque en esta ocasi—n se celebrar‡ en Anoeta frente al combinado de HondurasÐ cerrar‡n el a–o 2004. As’ el domingo d’a 5, los leones se desplazar‡n al siempre dif’cil S‡nchez Pizju‡n para enfrentarse al Sevilla. Un conjunto el andaluz que ocupa puesto europeo y en el que destaca sobremanera el punta brasile–o Baptista. Siete d’as despuŽs visitar‡ Bilbao el AtlŽtico de Madrid. El lesionado Ibagaza y Fernando Torres son sus principales baluartes. El viaje a Zaragoza el d’a 19 y la visita del Mallorca de Cœper a La Catedral el miŽrcoles 22 despedir‡n la Liga hasta el 9 de enero. Punto y aparte merecen por un lado la injusta ratificaci—n de la sanci—n de dos a–os impuesta a Gurpegi. El de Andosilla recibi— el apoyo y calor de la afici—n de San MamŽs cuando se mostraron cartulinas con su nœmero tanto al comienzo del encuentro como cuando el nœmero 18 del Athletic consigui— el segundo gol ante el Racing de Santander. Por otro lado la UEFA ha dado el visto bueno al equipo para que luzca en sus partidos europeos la marca ÔEuskadiÕ en su camiseta. Supone un hito en la historia del club y una inyecci—n econ—mica que aliviar‡ en parte las estrecheces de las arcas rojiblancas, como œnico condicionante est‡ el de que Žsta sea la equipaci—n que tambiŽn se utilice en la competici—n de Copa.

Lagun Aro se reivindica El Lagun Aro Bilbao a pesar de rondar los dos œltimos puestos que le condenar’an de nuevo a la LEB, est‡ realizando una Liga m‡s que aceptable. El cuadro rojillo debe aprovechar la caldera de La Casilla para asegurar los encuentros como local porque, la verdad cuando viaja no desentona en absoluto y se permite incluso obtener valiosas victorias como las conseguidas frente al Joventut y Pamesa. Los de Vidorreta est‡n compitiendo a buen nivel y la recuperaci—n definitiva de Savovic deber’a ayudar al equipo a asentarse definitivamente en la categor’a. Los partidos del Lagun Aro en diciembre ser‡n los siguientes: en La Casilla los d’as 4, 12 y 29 contra Lleida, Manresa y Tenerife, y como visitante se desplazar‡ a la cancha del F—rum Valladolid el d’a 18.

2004.eko abendua

Venancio, entrenador de fútbol-sala

“Habría clasificado a Guatemala para el Mundial” Gaizka Eguskiza

SU nombre no es muy conocido por la mayor’a de los aficionados al deporte, pero a los que les gusta el fœtbol-sala saben que Venancio es una referencia. El ex-entrenador, entre otros, del Bilbo o el Caja Segovia Ðdonde cosech— sus mayores Žxitos, coincidiendo con la explosi—n de fœtbol-salaÐ, prepara ahora al Lobelle de Santiago, a quien ya ha clasificado para disputar la Copa, en la que s—lo compiten los ocho mejores clasificados en la primera parte de la temporada. ÐÀC—mo va la temporada? ÐEstamos haciendo una gran campa–a teniendo en cuenta que se trata del Lobelle, que s—lo lleva dos temporadas en Divisi—n de Honor. Adem‡s, hemos cumplido un objetivo que ni siquiera el club se planteaba, que es clasificarse para la Copa del Rey; nuestra meta, por contra era formar una plantilla competitiva y situarnos en la mitad de la tabla, sin m‡s aspiraciones, as’ que es como para estar muy contentos. En Santiago se est‡ creando una afici—n en torno al fœtbol-sala y puede ser una ciudad donde este deporte tenga arraigo. Hay que seguir trabajando, y en los dos a–os m‡s que me quedan de contrato, espero que el equipo crezca estructural y deportivamente. ÐÀC—mo se presenta la Copa, que se celebrar‡ del 19 al 23 de enero en Iru–a? ÐPara nosotros s—lo acudir es un premio, as’ que tenemos mucho que ganar y poco que perder. Sabemos que pasar una eliminatoria va a ser muy, muy dif’cil porque nos emparejar‡n an-

“Tan sólo participar en la Copa ya es un premio para el Lobelle” te alguno de los cuatro equipos m‡s fuertes (El Pozo de Murcia, el Interviœ-Boomerang, Playas de Castell—n y Cartagena), cuyo potencial est‡ muy por encima del del resto de equipos. ÐUsted ha sido tambiŽn seleccionador de Guatemala. H‡bleme de esa experiencia... ÐDebo decir que en los seis meses que pasŽ en Guatemala, la experiencia fue buen’sima pero el problema fue que la FIFA sancion— a la federaci—n de este pa-

Venancio entrena al Lobelle de Santiago. Foto M. Esquibel

base de trabajo con respecto al fœtbol-sala muy importante y esperemos que tenga continuidad, porque a las federaciones peque–as, como es el caso, cuando sufren un traspiŽ, luego les cuesta remontar el vuelo.

“El fútbol-sala se ha abierto mucho gracias a Argentina e Italia, pero las favoritas son España y Brasil” ’s y ni el equipo de fœtbol, ni el femenino, ni el de fœtbol-sala pudieron participar en competiciones internacionales. Ahora, la de fœtbol puede disputar por entrar en el pr—ximo Mundial pero estos castigos han influido en mi trabajo. La federaci—n guatemalteca fue intervenida y tuve que rescindir mi contrato. Fue una l‡stima porque creo que en condiciones normales nos habr’amos clasificado para el Mundial que se acaba de celebrar. El recuerdo es muy bueno. DejŽ una

ÐAl realizar esta entrevista el Campeonato del Mundo no se ha celebrado aœn, pero, ÀquŽ opini—n le merece? ÐEstamos ante un gran Mundial. El abanico se ha abierto con la irrupci—n de Italia y Argentina, respectivas campeonas continentales, aunque yo apuesto por una final entre Espa–a y Brasil, que ha convocado a todos sus mejores jugadores. Creo que primar‡ el aspecto f’sico porque son muchos partidos, hasta ocho en dos semanas.

Su ficha ÐNombre: JosŽ Venancio L—pez Hierro, m‡s conocido por Venancio. ÐFecha de nacimiento: 27 de junio de 1964. ÐEstado civil: casado y tiene una hija. ÐPalmarŽs: 1 Campeonato del Mundo de clubes, 1 Copa de Europa, 1 Liga, 2 Copas y 3 Supercopas. ÐEquipos: Bilbo, Caja Segovia (con quien consigui— sus mayores Žxitos), selecci—n nacional de Guatemala, Caloto y Lobelle de Santiago, de quien se ha hecho cargo este a–o. Tiene otros dos a–os m‡s de contrato. ÐAdem‡s de entrenador de fœtbol-sala, Venancio es instructor de la FIFA y ofrece charlas y cursillos por todo el mundo.

“La ciudad necesita que el Bilbo suba” AL final de la temporada pasada Venancio entren— durante diez partidos al Muebles Caloto, de la Puebla de San Mill‡n, en Galicia, cuya poblaci—n es de 600 habitantes. ÐÀC—mo surgi— esta experiencia? ÐFirbi (el due–o) y Pulpis, (el actual entrenador), me pidieron este favor y no pude negarme. Fue un reto muy bonito para m’. El equipo hab’a hecho un gran esfuerzo por ascender pero hab’an comenzado las dudas. Necesitaban un revulsivo para los œltimos partidos de la Liga regular y las eliminatorias de ascenso. IntentŽ aportar mis conocimientos y al final, con un gran equipo y mucha experiencia en Divisi—n de Honor pudimos con-

seguirlo. ÐY ascendieron a Divisi—n de Honor, precisamente, frente al BilboÉ ÐEvidentemente no te deja un buen sabor de boca eliminar al equipo de tu ciudad, por el que adem‡s, siento un cari–o especial, pero en el deporte son cosas que pasan. Me hubiese gustado no tener que cruzarnos con el Bilbo pero cada cu‡l debe defender lo suyo y al final ascendimos en detrimento de ellos. Les falt— suerte y, por otro lado, el factor cancha y nuestra mayor experiencia en este tipo de partidos, decant— la eliminatoria de nuestro lado. ÐÀC—mo ve al Bilbo este a–o? ÀLes ha visto? ÐConozco el equipo y aun-

que apenas he podido seguirles en directo, lo hago desde la distancia. Ya el a–o pasado hicieron una gran campa–a. Tienen un buen equipo y han empezado titubeantes pero hay que tener confianza en la planificaci—n de la temporada. Creo que el Bilbo volver‡ a entrar en play-off y espero que suba a Divisi—n de Honor, algo que se necesita en Bilbao. ÐÀPor quŽ hay tanta afici—n al fœtbol sala en Galicia o en Levante y tan poca en Euskadi? ÐNo dir’a que falta de afici—n. La afici—n se crea a travŽs de los Žxitos y en este sentido el Bilbo es la referencia en Bizkaia, territorio de mayor potencial de Euskadi: el Bilbo est‡ creciendo como club, lo

que significa que la estructura deportiva y de gesti—n va a m‡s. A esto hay que unir que cada vez va m‡s gente a La Casilla a ver fœtbol-sala. Incluso se han llegado a reunir 1.000 personas, algo impensable hace a–os. Estamos dando pasos importantes, gracias en parte a su jefe de prensa, Juan Luis Ibarretxe, quien hace que la presencia del Bilbo en los medios sea cada vez mayor, lo que tambiŽn contribuye al crecimiento. El salto de calidad, pues, del Bilbo ha sido muy importante. Soy optimista pero hay que tener paciencia en el trabajo, ascender o intentarlo hasta conseguirlo y mientras tanto fortalecer la estructura de club, a partir de la cual aspirar a cotas mayores.

Athletic eta bere istorioak-El Athletic y sus historias

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El retorno de ‘Pichichi’ Alberto Bacigalupe

SUELE ser as’. El inesperado fallecimiento de Rafael Moreno Aranzadi, dot— al personaje de una superlativa aureola, siquiera sospechada durante sus mejores momentos como futbolista. De pronto pasaron al olvido las mœltiples cr’ticas Ðaceradas, incompasivas, cruelesÐ que recibiera en v’speras cuando San MamŽs, casi a coro, solicitaba su retirada. Censura que no remiti—, incluso, durante la postrera pirueta futbol’stica que le convirti— en ‡rbitro. ÒPichichiÓ ten’a carisma, si; pero de haber muerto en la cama con setenta y tantos a–os, valga el ejemplo, su recuerdo correr’a parejo con el de otros contempor‡neos. Sin embargo, pas— a ser patrimonio de la leyenda rojiblanca, tras su prematuro e inesperado fallecimiento, acaecido el 2 de marzo de 1922. Existen varias versiones sobre la causa. La m‡s admitida apunta a un proceso tifoideo, como consecuencia de haber ingerido ostras en mal estado Ten’a treinta a–os y un estimable palmarŽs: cuatro Copas (1914, 1915, 1916 y 1922) y una medalla de plata ol’mpica, lograda en Amberes, tras haber disputado los cinco encuentros que jug— la selecci—n espa–ola en aquellos Juegos Ol’mpicos de 1920. Defin’a a ÒPichichiÓ una personalidad indiscutible, tanto dentro como fuera del campo. De f‡cil regate y bien dispuesto para el gol, en la calle era un tipo chirene que no pasaba inadvertido. Sus pocos recursos f’sicos los compensaba con una tŽcnica desacostumbrada por entonces. Hasta que fue llegando su declive y la afici—n pas— a censurar cada una de sus acciones, sin considerar los mŽritos pretŽritos contra’dos. Todo fue olvidado en el instante en que se conoci— su —bito y Bilbao entero asisti— al entierro, embargado por la emoci—n y el recuerdo de quien fuera un ’dolo singular. Hubo diversos homenajes, encaminados a aliviar la precaria econom’a familiar. Gestos que, poco a poco, se fueron difuminando hasta casi, casi, derivar en un profundo olvido. No fue el caso de Ricardo de Irezabal Goti, presidente del club durante los per’odos 1919-1921 y 1923-1926 (este œltimo a–o con car‡cter de honor’fico), quien propuso en junta general que fuera erigido un monumento a su memoria, iniciativa aprobada por unanimidad. De la obra qued— encargado Quint’n de Torre Ber‡stegui (Bilbao 1877), artista de tem‡tica variada, que primero como dibujante y despuŽs como escultor, fue uno de los hombres m‡s interesantes de su generaci—n. Destac— como autor de imaginer’a religiosa, con varios pasos de Semana Santa en su copiosa producci—n.

Inusitado interŽs Quint’n de Torre realiz— en bronce un busto del futbolista en el que pueden apreciarse sus caracter’sticas faciales con absoluta perfecci—n: larga nariz y rostro se-

reno, en el que se deja entrever un rictus a medias entre la seriedad y la iron’a. Concluido el trabajo, todo fue organizado para que el domingo, 5 de diciembre de 1926 fuera descubierto el monumento en San MamŽs. Las v’speras marcaron una febril actividad en la sede del Athletic. En principio se apalabr— con el Arenas un partido amistoso, que concit— no poco interŽs. Los rojinegros eran entonces m‡ximos rivales de los rojiblancos y estaban situados a tan s—lo dos puntos de ellos en el campeonato vizcaino. La venta de localidades se ampli— a diferentes puntos, lleg‡ndose a vender en las propias taquillas de Ibaiondo. La meteorolog’a, empero, dio al traste con el empe–o. Un temporal de agua, que asol— la provincia en

Dos magos del gol, Hugo Sánchez y Zarra, posan junto a la figura en bronce de su predecesor

Quintín de Torre expresó en la escultura los rasgos más característicos del genial delantero centro, fallecido en marzo de 1922

El busto en su primer emplazamiento en San Mamés

las horas previas al acontecimiento, decidi— su suspensi—n. San MamŽs qued— convertido en una laguna, aunque fueran otros lugares los m‡s castigados por la inundaci—n. Una de las rampas del puente de la Merced result— engullida por la riada y cuentan las cr—nicas que se hundieron veinte gabarras, muchas de ellas con su carga correspondiente. El embalse de Zollo recogi— cien mil metros cœbicos en veinticuatro horas. As’ las cosas, se pospuso la cita al miŽrcoles siguiente, fecha en que, por cierto, ten’a apalabrada su visita el Real Sporting de Gij—n.

Hechas las pertinentes diligencias, el equipo asturiano aplaz— viaje. Los imponderables impidieron que pudieran participar dos de las figuras m‡s destacadas de la Žpoca, Carmelo Goyenechea y Perico Vallana, en principio comprometidos. Junto al seleccionador JosŽ Mar’a Mateos, hubieron de salir un d’a antes hacia Zaragoza para cumplir un compromiso con el equipo espa–ol. Otros motivos justificaron la ausencia de Cecilio Ibarreche, que iba a oficiar de ‡rbitro. Al cŽlebre ex-portero, sustituy— con el silbato Juan Arzuaga.

Esta vez el tiempo fue clemente y a las tres menos diez de la tarde dieron comienzo los actos. Directivos y jugadores de ambos equipos se dirigieron desde la tribuna hacia la grada de Misericordia, en uno de cuyos costados estaba enclavado el monumento, cubierto por la bandera del Athletic y rodeado por infinidad de copas y trofeos propiedad del club. Manuel de la Sota, el presidente, dedic— sentidas palabras en recuerdo de Rafael y uno de sus m‡s fervientes amigos, Germ‡n Echevarr’a, descubri— el busto en medio de una cerrada y prolongada ovaci—n. En lo futbol’stico el homenaje no pudo salir mejor. Ganaron los ÒleonesÓ por 7-2 con goles de Germ‡n ÐÒManerasÓ dribl— a cuantos contrarios le salieron al paso para batir a JaureguiÐ Egu’a (3), Travieso (2) y Legarreta, por parte local. Rivero marc— los dos tantos del Arenas. Ostentaron las capitan’as Legarreta y La–a. Conclu’da la contienda, protagonistas e invitados participaron de un lunch en los locales del anfitri—n.

En competici—n, todo distinto No deja de ser curioso que siete d’as despuŽs, ambos contendientes corrieran distinta suerte. El Athletic perd’a por 2-0 frente al colista Acero en Chimbo Ibarra, mientras el Arenas obten’a en su campo un incontestable triunfo, al vencer por 10-1 al Erandio. En las filas bilbainas se dej— notar la ausencia de Travieso. Los de Getxo, por su parte, alinearon el once de gala, del que sobresalieron especialmente, Vallana y Yermo. Han pasado, pues, setenta y ocho a–os. El busto de ÒPichichiÓ sigue presidiendo los encuentros de Òla CatedralÓ, aunque sea otro su emplazamiento. Una vez construida la tribuna principal (1953), se traslad— al lateral izquierdo de la misma, bajo los palcos habilitados entonces. Con la reforma obligada por el Campeonato del Mundo de 1982, se decidi— situarlo junto a la presidencia, lugar en el que permanece. Es tradici—n que todos los equipos que visitan por vez primera San MamŽs, depositen un ramo de flores como testimonio de respeto y admiraci—n a Rafael Moreno Aranzadi, ÒPichichiÓ. Tengo grabadas dos escenas que me acompa–ar‡n

siempre: Puskas y Gainza dirigiŽndose en 1956 al lugar en los previos del inolvidable AthleticHonved, imagen que, a despecho de los a–os discurridos, bien puede enlazar con la de Josu Urrutia y Aldair, con ocasi—n de participar la selecci—n brasile–a en el centenario del club. Puede que las j—venes generaciones de aficionados ignoren quiŽn fue ÒPichichiÓ, pese a desear que sus delanteros favoritos sean m‡ximos goleadores y se lleven un trofeo que tiene tal nombre. El olvido de los mayores propicia la ignorancia de sus descendientes en no pocas ocasiones. Recuerdo que cierta emisora de radio convoc— a sus fieles para que compusieran el mejor equipo del Athletic a lo largo de la historia. Hecha la selecci—n, me llevŽ las manos a la cabeza. Sin entrar en otros detalles ruborizantes, dirŽ que como extremo izquierdo se hab’a elegido a Estanis Argote. Con todo el aprecio que tengo por el zarauztarra, lleguŽ a escandalizarme. Gorostiza y Gainza no exist’an en el ‡nimo Ðni, por supuesto, el conocimientoÐ de tales electores. ÁQuŽ pena!

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B i l b ao

2004.eko abendua

Guggenheim Museoa ÐColecci—n Permanente: Bill Viola: temporalidad y trascendencia. Hasta el 9 de enero de 2005. Arte Pop. Hasta el 17 de abril de 2005. Arte desde 1945: evoluci—n, diversidad y di‡logo. Hasta el 30 de enero de 2005. Del impresionismo al arte abstracto. Hasta el 30 de enero de 2005. ÐExposiciones temporales: Un Picasso escondido. Hasta el 16 de enero de 2005. Oteiza: mito y modernidad. Hasta el 23 de enero de 2005. Miguel Angel y su tiempo. Hasta el 13 de febrero de 2005. III Certamen infantil de dibujo Disney: Del 1 de diciembre al 9 de enero de 2005. Campo Cu‡ntico X3. Hiro Yamagata. Hasta abril de 2005. ÐCiclo de documentales: La realidad inventada: Jorge Oteiza. S‡bados: 11 y 18 de diciembre.

Museo Marítimo Ría de Bilbao ÐExposici—n Permanente: Colecci—n permanente del Museo. ÐExposiciones Temporales: Puerto de Bilbao, una memoria visual. Hasta enero de 2005. Expofaros. Hasta marzo de 2005. ÐPINN (Parque Infantil Naœtico de Navidad): Del 3 de diciembre al 10 de enero.

Teatro Arriaga Antzokia ÐDel 9 al 12: La retirada de Moscœ. Teatro. ÐDel 17 de diciembre al 16 de enero: Quen, ÒWe Will Rock YouÓ. Musical. ÐDel 18 de diciembre al 16 de enero: Spider-Man, El Espect‡culo. Teatro.

Euskal Museoa Museo Vasco ÐHasta el 16 de Enero: Piratas. Los Ladrones del Mar: *Proyecci—n del documental Piratas Legendarios (Discovery Channel). *S‡bados a las 11,30h.: Proyecci—n de la pel’cula La isla del cangrejo.

XIII Escuela de Feminismo PROGRAMA DE ESTUDIO Y DEBATE: ÐD’as 2 y 9 de diciembre: A las 19:30h. en el local de LANBROA (Hurtado de AmŽzaga, 11-1¼ izda). Tel. 944.125.553

Abendurako agenda-agenda para diciembre

Museo de Bellas Artes

Euskalduna Jauregia ÐD’a 1: Concierto de la Orquesta Sinf—nica de Euskadi. A las 20 h. ÐD’a 2: El Consorcio. A las 20 h. ÐD’as 9, 10, 16 y 17: Conciertos de la BOS. A las 20 h. ÐD’as 11 y 12: Multiplicidad: Formas de Silencio y Vac’o. Compa–’a Nacional de Danza. A las 20 h. ÐD’a 12: Concierto de Organo. Daniel Oyarzabal. A las 12 h. ÐD’a 13: Recital de Ainhoa Arteta. A las 21 h. ÐD’a 14: El Mes’as de Haendel. Concierto. A las 20,30 h. ÐD’a 18: Concierto de las Juventudes Musicales de Bilbao. ÐD’a 19: Bizkaiko Bertsolari Txapelketa. A las 17 h. ÐD’a 19: Tucanas. A las 20,30 h. ÐD’a 20: Concierto de C‡mara de la BOS. A las 20 h. ÐD’a 21: Oh happy day!. Gospel. A las 20,30 h. ÐD’as 22 y 23: La verbena de la paloma y Gigantes y Cabezudos. Zarzuela. A las 20 h. ÐD’as 25, 26, 27 y 28: Gabonak 2004: La leyenda de Cascanueces. ÐD’a 29: Woody Allen & His New Orleans Jazz Band. A las 21 h. ÐD’a 30: IV Concierto Homenaje a Alfredo Kraus. A las 20 h.

ÐHasta el 12 de diciembre: Exposici—n Gustave DorŽ: Obras de la colecci—n del MusŽe dÕArt moderne et contemporain de Strasbourg. ÐHasta el 23 de enero de 2005: John Davies. Esculturas y dibujos desde 1968. ÐZINEMATEKA: De jueves a s‡bado a las 18 y a las 20 h.

Azkena Ordua: 21:30 ÐHilak 2: Racing Slab + Soul Breaker Company. ÐHilak 3: House of Shakira + JosŽ de Castro + Razze. ÐHilak 4: La Excepci—n. ÐHilak 9: Liars. ÐHilak 10: De la rosa. ÐHilak 11: Circus. ÐHilak 16: Q and Not U. ÐHilak 17: The Unfinished Simphaty. ÐHilak 23: Telemen live + Dj Good Groove + No Data Djs. ÐHilak 30: Steve Barnes live + Frank Matinq Dj + No Data Djs.

Arte gida / Guía del arte Akros Gallery

Catálogo General

(C/ Juan de Ajuriaguerra, 16) Angel Ca–ada. Acuarela. Del 2 al 30 de diciembre.

(C/ Santa María, 11) Mar’a Gimeno. Mapa personal. Dibujos. Hasta el 3 de diciembre.

Aritza (C/ Marqués del Puerto, 14) Eduardo Villarroel. El Bilbao so–ado. Pintura. Hasta el 11 de diciembre. Liliane Caumont. Obra gr‡fica original y escultura. Desde el 14 de diciembre hasta el 15 de enero.

Colón XVI (C/ Henao, 10) Antoni Tˆpies. Hasta el 7 de enero.

Ederti (Alda. Recalde, 37) Regalo de Navidad. Colectiva. Del 13 de diciembre al 15 de enero.

BilbaoArte

Espacio Marzana

(C/ Urazurrutia, 32) Ixone S‡daba. Morir de Žxito en Bilbao. Fotograf’a. Hasta el 4 de diciembre.

(Muelle Marzana, 5) Bego–a Zubero. Fotograf’a. Hasta el 7 de diciembre. Julio Pardo. Pintura. Desde el 10 de diciembre hasta el 18 de enero.

Bilkin

Euro Galería Llamas

(C/ Heros, 22) Cristina Gutierrez-Meurs. gents,gentis. Hasta el 17 de diciembre. Carmelo Camacho. Pintura. Desde el 23 de diciembre.

(C/ Máximo Aguirre, 10) Oscar Borr‡s. Pintura. Hasta el 2 de diciembre. JosŽ Lull. Pintura. Desde el 3 hasta el 16 de diciembre.

Caledonia (C/ Ercilla, 11) NavascuŽs. Oleos. Hasta el 28 de diciembre.

Juan M. Lumbreras (C/ Henao, 3) Antonio Rojas y Colectiva. Pop Art obra gr‡fica. Hasta el 30 de diciembre.

Sala BBK (Gran Vía, 32) Miradas sobre las vanguardias rusas. Hasta el 12 de diciembre. Pintura navide–a en la colecci—n del Museo de Bellas Artes de Bilbao. Desde el 20 de diciembre hasta el 15 de enero.

(Elcano, 20) Massimo Vitali. Fotograf’a. Hasta el 8 de diciembre. Sue–os del Sahara. Desde el 22 de diciembre hasta el 9 de enero. La Monta–a, V’nculo de Solidaridad. Felix I–urrategi. Desde el 23 de diciembre hasta el 9 de enero.

Sala BBVA (Pz. San Nicolás) XVII Exposici—n de Facultad de Bellas Artes de la UPV. Del 1 al 22 de diciembre. Exposici—n de Belenes 2004. Desde el 3 de diciembre.

Sala Rekalde (Alda. Recalde, 30) Doug Aitken. Estaremos seguros mientras todo se mueva. Instalaci—n. Hasta el 5 de diciembre. BESTE BAT! Reflexi—n sobre el rock radical vasco. Hasta el 5 de diciembre. Mientras tanto en otro lugar... Colectiva. desde el 21 de diciembre hasta el 20 de febrero.

Sala UPV-EHU/BBK (C/ Banco España, 2) Txaro Arrazola. Hasta el 16 de diciembre. Clandestine. Desde el 14 de diciembre hasta el 26 de enero.

Tavira (C/ Juan de Ajuriaguerra, 12) Evencio Cortina. Pintura. Hasta el 3 de noviembre. Luzuriaga. Oleos. Desde el 14 de diciembre hasta el 7 de enero.

Uranga (C/Mitxel Labegerie) Hening von Gierke. Pintura. Hasta el 8 de enero.

Vanguardia (Alda. Mazarredo, 19) Joan Fontcuberta. Fotograf’a. Desde el 16 de diciembre hasta el 23 de enero.

Windsor Kulturgintza (C/ Juan de Ajuriaguerra, 14) Carlos Franco, Xavier Grau, V’ctor Mira y Santiago Serrano. Di‡logos. Colectiva. Hasta el 12 de diciembre. Iratxe Larrea. Lugares personales. Escultura. Desde el 15 de diciembre hasta el 12 de enero.

Abendurako agenda-agenda para diciembre

Bilborock ÐD’as 1, 2 y 3: ZINEBI 2004. A las 21 h. ÐD’as 10 y 11: Festival MEM. Danza. A las 21:00 h. ÐD’a 14: Recital poŽtico de la Asoc. Art’stica Vizcaina. A las 20 h. ÐD’a 17: Concierto coral. Euskeria Abesbatza. A las 20 h. ÐD’a 18: Cuentos para ni–os. Cuentos de sabores. A las 12 h. ÐD’a 19: Cuentos para adultos. Si yo te contara... A las 20 h. ÐD’a 22: Concierto de Inma Serrano A las 20 h. ÐD’a 23: FIBI 2004. A las 20 h.

Barrainkua Kultur Etxea ÐHasta el 10 de diciembre: Aprender a ver. Celedonio Ota–o. ÐDesde el 14 de diciembre: Crisis olvidadas: Vidas ignoradas. Colectiva de fotograf’a.

C.M. San Francisco C.C. Otxarkoaga EXPOSICIONES: ÐDel 2 al 15: I–aki Alvarez Angulo. Pintura. ÐDel 20 de diciembre al 6 de enero: Belenes. Asociaci—n Belenista de Bizkaia. ÐDel 15 al 26: Floro y Portillo. Pintura. ZINEBICLUB: A las 19:45 h. ÐD’a 11: Bailando en la oscuridad. ÐD’a 13: Good bye Lennin. ÐD’a 20: La cena de los idiotas. ÐD’a 27: Buscando a Nemo. ÐD’a 28: Hermano Oso. ÐD’a 29: El Rey Le—n 3. ÐD’a 30: El Cid, Kondaira. III SEMANA DE TEATRO PARA MAYORES: ÐDel 13 al 18 de diciembre: A las 19:30 h.

ÀDE QUIEN SE TRATA? Pista: su profesi—n es periodista y recientemente ha iniciado el m‡s importante reportaje de su vida. Enviar la respuesta a peri—dico Bilbao, Plaza Ernesto Erkoreka, n¼ 1, 48007 Bilbao, haciendo constar en el sobre ÒLa pista del personajeÓ. El plazo finalizar‡ el 26 de diciembre y se sortear‡ una reproducci—n en miniatura del Teatro Arriaga. La ganadora del concurso del pasado mes fue ESPERANZA OLARRETA ORMAETXEA, domiciliada en Bilbao, avda. Zumalacarregui. La respuesta correcta era ÒMARIVI BILBAO-GOYOAGAÓ.

ÐDel 3 al 15 de diciembre: De profesi—n ciudadano. Asamblea de Cooperaci—n por la Paz. Paneles. ÐDel 30 de noviembre al 2 de diciembre: Testimonios del SIDA. Organizaciones ANTISIDA. Paneles.

C.M.D. Palacio Yohn ÐHasta el 4 de diciembre: Exposici—n Concursos Personas Mayores. Fotograf’a, pintura y maquetas. ÐDel 13 al 18: ÀC—mo lo ves? / Eta zuk... nola ikusten duzu? Dibujos. C’rculo Solidario. ÐDel 20 de diciembre al 5 de enero: Palestina quiere vivir / Palestinak bizi nahi du. Fotograf’as. PTM Mundu Bat.

HITZ GURUTZATUAK 1 2 3 4 5 6 7

Zeharretara 1. Harramantza. Iskanbila 2. Bigarren hizkia. Latoi, burdin-hori. 3. Taka, maka. Oxigenoa. 4. Mendi inguruko lantada. (atz) Modu atzizkia. 5. Kzkabar, txingor. 6. at. Pirineoko gailur. Umedun izor. 7. Azken bokala. Lerro, lerrokada. 8. (atz) Bake gentza. 9. Jakiak, janariak.

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Goitik behera 1. Zabaldu, barratu. Bigarren hizkia. 2. Nitrogenoa. Kabu. Gutxi falta. 3. Gurasoen neskato. Bizkaieraz, ele, berba. 4. Begi estalkiak, bgi azalak. 5. Laket, irrits. Nagusi, buruzagi. 6. Zerbait erretzen denean. Aloza, azpil. 7. (atz) Bakan. bana. Jesœs Zabala

LOS OCHO ERRORES

C.M.D. Deusto ÐHasta el 10: Kemenak. Fotografias. Fundaci—n Saiatu. ÐDel 13 al 18: Exposici—n de labores. Ropero de Uretamendi. ÐDel 20 al 24 de diciembre: Est‡ en nuestras manos. Artesania. ONG Pueblos Hermanos.

C.M.D Begoña ÐD’as 9 y 10: Exposici—n sobre Historia y Cultura Gitana. Kale Dor Kayiko. ÐDel 13 al 24: Enrique Frances. Pintura.

C.M. Zabala

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SOLUZIOA

A B A S L E T U A T S I B A A Z U Z A Z U I L A R T A B Z K A K

La Fundición Todas las actuaciones a las 20:30h. ÐD’a 4: Body safe(er) parte V_ serie fron bondage to freedom. Semolina Tomic. Teatro. ÐD’a 5: Nutritivo. Sergi FŠustino. Danza Teatro. ÐD’a 6: Quiero ser normal Joan Sim—. Teatro.

N B A K N A A B T O U I B A

ÐD’as 2: El Polvor’n, Goran Paskaljevic. ÐD’a 9: La Vie Nouvelle, Philippe Grandieux. ÐD’a 10: Senderos de Gloria. Stanley Kubrick. ÐD’a 14: Un tranv’a llamado deseo. Elia Kazan. ÐD’a 16: Los abajo firmantes, Joaqu’n Oristrell. ÐD’a 21: El oficio de las armas, Ermanno Olmi. ÐD’a 28: Pinocho 3000, Daniel Robicaud.

ÐDel 14 al 17: Exposici—n sobre Historia y Cultura Gitana. Kale Dor Kayiko.

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Cine-Club FAS

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LA PISTA DEL PERSONAJE

Kafe Antzokia MUSIKA: Ordua: 22:00 ÐHilak 2: Bide Ertzean / Quique Gonz‡lez. ÐHilak 3: David Holmes / Dj Birdy. (22:30). ÐHilak 5: Billy Bao, Act, Alan Vega. (20:00). ÐHilak 6: Tactica 44 / Noriko Tujiko / Donna Summer, Aka Jackson forrest (21:00). ÐHilak 10: Fundaci—n Tony Manero. ÐHilak 16: Hiru Truku. ÐHilak 17: De La Soul. ÐHilak 23: Benito Lertxundi. OLGETAN HAUR JAIA: ÐHilak 12: Popi eta Zaratrako pailazoak. Bat eta bi. (17:00). ÐHilak 14: Olentzaro haur Jaia. (17:00). BESTEAK: ÐHilak 1: Urbeltzen Dantza Ganbara. (20:00). ÐHilak 9: Lagun Artean Kantari. (20:00). ÐHilak 13: Hamaika koloretan dantzan. (12:00). ÐHilak 15: Kafe Antzokiaren IX. Urteurren Jaia. (19:30). ÐHilak 21: Santo Tomas Jaia. (21:00).

B i l b ao

diciembre de 2004

188. zenbakia



2004.eko abendua

Udal aldizkaria



Bilboko Udala

Javier Muniozguren, director de la Escuela de Ingenieros

Uriko leihoa

“La ingeniería está detrás de casi todo”

Superlatiboak

JAVIER Muniozguren, director de la Escuela de Ingenier’a de Bilbao desde 1999 y Catedr‡tico de Dibujo, cuenta los meses para la inauguraci—n en la primavera de 2005 del nuevo edificio que dotar‡ a la Escuela de instalaciones que permitir‡n reforzar el aspecto pr‡ctico de la formaci—n. Un paso m‡s en la historia de un centro que a lo largo de un siglo no ha dudado en crecer, aunque sea de un modo eclŽctico, para atender las nuevas necesidades. No en vano, cada a–o se matriculan en las distintas ingenier’as cerca de 4.000 estudiantes, con especial tir—n en los œltimos tiempos de las ramas de Aeron‡utica, Energ’a y Medio Ambiente. Dice Muniozguren que la carrera exige mucha dedicaci—n y esfuerzo, aunque con una clara recompensa final: un ingeniero industrial no tarda m‡s de tres meses en encontrar trabajo. ÐÀC—mo vive el inevitable desbarajuste que ha rodeado las obras del nuevo edificio? ÐLos ingenieros estamos educados para gestionar situaciones complejas y como nos ense–an desde el principio a maniobrar con muchas variables simult‡neamente, lo abordamos como un reto. L—gicamente, alejados de lo que ser’a el ideal de una programaci—n perfecta, con un total suministro de medios y de recursos, no nos queda m‡s remedio que movernos en la realidad, es decir, pisar suelo y jugar con lo que tenemos. ÐLo que pasa es que esta obra ha sido muy complicada. ÐPues s’, y sobre todo ha tenido mucho retraso y no porque tŽcnicamente fuera dif’cil, sino porque nos encontramos en una zona en expansi—n que no se acababa de definir. Ha cambiado todo en el entorno y nosotros nos hemos movido y nos movemos en ese cambio. ÐLo importante es que ahora la Escuela cuenta con 10.000 m2 m‡s para laboratorios, talleres y aulas. ÀSe solucionan s—lo los problemas del presente o tambiŽn del futuro? ÐNos metemos un poco en el futuro, nada m‡s.

Foto Moreno Esquibel

María Arana

“Un ingeniero no tarda más de tres meses en colocarse”

ÐÀS—lo un poco? ÐEl mundo, y en el especial la tecnolog’a y la educaci—n, est‡ evolucionando muy r‡pidamente. Lo que significa que no tenemos capacidad para proyectar lo que va a ocurrir dentro de 20 a–os. Tenemos unas ideas, unos ejes de actuaci—n, pero esa veloz transformaci—n tampoco nos permite construir ahora lo que va a ser determinante en 2035. Nuestra mira est‡ m‡s bien en los pr—ximos cinco a–os. ÐÀLa modernizaci—n del edificio es reflejo del tir—n de las carreras de ingenier’a en la sociedad? ÐLos ingenieros de esta escuela llevamos ya 107 a–os asentados. Siempre hemos estado muy c—modos y nos hemos sentido demandados por nuestro entorno dentro de lo que ha sido el desarrollo del Pa’s Vasco y de Espa–a. Tenemos ingenieros en todo el mundo. Por lo tanto, para nosotros esto es continuo desde que se fund— la Escuela. ÐPero da la sensaci—n de que el ingeniero ha perdido algo de

proyecci—n social. ÐYo creo que nada es lo que era. Todas las profesiones han evolucionado: ni todos los arquitectos son Ricardo Bastida, ni todos los ingenieros son Churruca. La tecnolog’a se ha extendido, por lo tanto el nœmero de ingenieros ha aumentado. Cuantos m‡s licenciados hay, menos se nota su aspecto diferenciador respecto a otras profesiones. De la primera promoci—n de esta escuela salieron seis o siete ingenieros. Ahora estamos hablando de promociones de 600 alumnos. Todo ha cambiado. Evidentemente un ingeniero de hace 50 a–os no puede ser lo que es hoy. ÐÀNo le ha ganado la partida el arquitecto? ÐEs cierto que los grandes arquitectos estrella son ahora mismo unos profesionales con una gran influencia en la sociedad y una gran capacidad de comunicaci—n. Pero son muy pocos. ÐÀAcaso se nos olvida que son los ingenieros los que dise–an los puentes y las carreteras?

ÐPor ejemplo, y se nos olvida tambiŽn que Frank Gehry proyect— unos planos explicando c—mo quer’a que fuera el Museo Guggenheim en su parte exterior, pero correspondi— a una ingenier’a vasca (IDOM) desarrollar todo el proyecto, decidir si se iba a construir en met‡lica o en hormig—n armado, plantear todas las estructuras primarias, secundarias, terciarias, decidir c—mo iban a ser la sujeciones del titanio, etc. Eso fue ingenier’a. Lo que pasa es que los ingenieros nos quedamos siempre en el plano secundario donde se resuelven los problemas, y unos pocos arquitectos estrella se llevan la fama. ÐMe imagino que tiene que fastidiar. ÐBueno, no en exceso. En cualquier caso, es una vieja discusi—n. Incluso hay libros que hablan de la polŽmica ingenieros-arquitectos en la Espa–a del XIX. Pero esto s—lo sucede en ingenier’a civil y construcci—n, porque efectivamente, las c‡scaras de muchas cosas, lo que se ve y lo que se vende, es arquitectura. Sin embargo, todo lo dem‡s es ingenier’a: el mundo de la aeron‡utica, la automoci—n, las comunicaciones... La ingenier’a est‡ detr‡s de la arquitectura pero tambiŽn est‡ detr‡s de gran parte de la sociedad, en un mundo cada vez m‡s tecnol—gico. ÐÀSigue siendo la Escuela de Ingenieros de Bilbao una de las m‡s exigentes de Espa–a? ÐS’. Nosotros no hacemos directamente el escalaf—n, lo hacen otras instituciones, pero nos suelen situar muy bien. Nos movemos en los tres primeros puestos en funci—n de las especialidades. Primeros en ingenier’a industrial, terceros en ingenier’a de telecomunicaciones... Y esa situaci—n s—lo la consigues manteniendo unos est‡ndares de calidad determinados. ÐÀY sigue siendo su asignatura, el dibujo, uno de los huesos? ÐTen’a su fama y la sigue teniendo, pero ello se debe a que el dibujo exige una cierta capacidad personal de visi—n espacial y si no la tienes es muy dif’cil adquirirla. Y sufres, claro, con todo lo que tenga que ver con la proyecci—n en el espacio.

Pili Kaltzada

MASSIMO Vitali argazkilari italiarrari argazki-kamerak ostu zizkioten bere autotik. Milanen, arratsaldez. Bertan zituen argazki-kamera guztiak eraman zituzten lapurrek; bakarra utzi zioten, neurriz handiegia zelako. Geroztik, argazki-makina erraldoia besterik ez du erabili, eta hamar urtetan, formatu handiko argazkilaritzako izarra bihurtu da. Zoriak bihurtu du puntako argazkilaria. Egun hauetan, Bilbon izan da, BBK-k ekarri duen atzera begirako erakusketaren bidez. Hark ekarriak, hirietako pertsonaiak islatzen dituzten irudi handiak bisitari izan ditugu gure artean. Dena da handia bere lanean: hiria bera, eta baita hirietako jende-multzoak. Duela gutxi, hiri handi batean bizitzeak dakartzan arazoez berbetan elkartu ginen, mahai baten inguruan. Horrelakoetan gertatu ohi den legez, topikoak nagusitu ziren. Trafikoak sortzen dituen kalapitak gero eta jasanezinagoak direla zioen urliak; auzoko bizilagunak nor diren ere ez dakiela zioen sandiak, eta kaletik ibiltzea gero eta arriskutsuagoa dela gaineratu zuen berendiak. Berehala pasa ginen hizketarako bide probetxugarriagorik eman zezakeen bideetara. Bitxia da gero. Hiriak gorroto ditugu hirietan bizi garenok, baina gero eta gehiago dira hiriguneetara itzultzen garenok. Horixe omen da mende berri honetako fenomeno demografikorik deigarrienetakoa; uste zenaren kontra, hiritartze fenomenoak ez dira apaldu, indartu baizik. Gorrotoak berez duen erakartzeko gaitasuna izango da, nonbait. Desatsegina egiten zaigu hiria, bizi-kalitatea galarazi egiten digula aitortzen diogu elkarri, baian hiriari atxikirik bizi gara, hark egiten baikaitu hiritar. Zer pentsatua eman dit Vitali-ri jazotakoak, hiri honen metaforatzat har zitekeela otu zait eta. Handitasunean trebatu gura du Bilbok. Azken belaunaldiko herritarrok ezagutu dugun hiriak superlatiboa du ezaugarri behiena. Guggenheim Museo ikusgarriak hasitako bidetik, beste guztiak etorri dira, errenkan. Erakustazoka berria, handiena. Ibaiaren hertzak elkarbiltzen dituzten zubiak, ikusgarrienak. Hiriaren airetrafikoa gidatzen duen aireportua modernoena. Zenbat eta superlatiboagoa, orduan eta egokiagoa Bilborako. Oreka ez da inoiz erraza izaten. Orekariek zirkoan eragiten diguten xarma horretan datza: alanbrea tenkatu egiten da bere oinetan, eta ahaleginak egiten ditu ez erortzeko; gu guztiok, noiz eroriko den zain garen bitartean, hari begira. Gure hiri ditxoso honek jakin behar baitu, handitasunaren ertz-ertzean datzala handikeria ere.

ÒLuzatzen den esperantzak nekhatzen du gogoaÓ. (Axular ÔGeroÕ)

de la Cultura

4. CENTENARIO DE ALEJO CARPENTIER TRES HERENCIAS CULTURALES

Kultura gehigarria 6. ENTREVISTA A ANDRES TRAPIELLO POESIA EXPERIMENTAL

NUEVO LENGUAJE POETICO

7. GOMA E INNERARITY, EN PRIMERA LINEA DE LA REFLEXION CONTEMPORANEA

N¼ 146



8. DURANGOKO LIBURU AZOKA 39. EDIZIOA, ABENDUAREN 4TIK 8RA ARTE

Diciembre de 2004

9. MUSEO GUGGENHEIM ‘DEL IMPRESIONISMO AL ARTE ABSTRACTO’

Auster: ensayos con la ficci—n A lo largo de las dos œltimas dŽcadas, el escritor neoyorquino ha conseguido dibujar sobre el ceniciento paisaje de la literatura contempor‡nea una trayectoria repleta de originalidad y misterio. Sus novelas constituyen complejos artefactos capaces de tensar hasta el l’mite los mecanismos de la ficci—n narrativa. Dentro de ellas, la realidad (esa palabra que, segœn Nabokov, deber’a ir siempre entre comillas) pasa a convertirse en un gŽnero literario m‡s. Abrir cualquiera de sus libros es abrir un cofre lleno de enigmas. Han pasado los a–os y Paul Auster sigue corriendo riesgos. p‡ginas 2 y 3

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El regreso del ilusionista

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L ilusionista ha vuelto. Lo primero que pensamos al verle es que se ha equivocado de especialidad: sus ojos se asemejan m‡s a los de un hipnotizador. Se apagan las luces del teatro. Los cuchicheos del pœblico van dejando paso a un silencio lleno de expectaci—n. El artista coloca una vieja maleta sobre la mesa que ocupa el centro del escenario, la abre con parsimonia y comienza a extraer algo de ella. Lo hace lentamente, con mucho cuidado. Cuando al fin lo consigue, un foco le ilumina y (alehop) muestra al pœblico lo que tiene entre las manos: una historia. Un solemne redoble de tambor consigue apaciguar el entusiasmo de los espectadores. Ahora parece que el ilusionista est‡ intentando sacar algo de dentro de la historia. Es una operaci—n delicada. Tras unos segundos de minucioso forcejeo, el foco vuelve a envolverle y da un paso al frente. El pœblico se levanta de las butacas y aplaude asombrado el nacimiento de una nueva historia... Pero abramos un parŽntesis. Todos los escritores (todos los escritores honrados, al menos) aspiran a escribir un gran libro, uno de esos t’tulos que merecen la imprecisa etiqueta de obra maestra. Por

ÔLa Trilog’a de Nueva YorkÕ y ÔEl palacio de la lunaÕ le convirtieron en uno de los escritores m‡s influyentes de la dŽcada de los noventa. Paul Auster publica ahora ÔLa noche del or‡culoÕ, una novela sobre el misterioso poder de la ficci—n

Auster es uno de los escritores m‡s influyentes de la dŽcada de los noventa

La moneda que circula en el mundo de Paul Auster es la moneda del asombro y la fascinaci—n supuesto son muy pocos los que lo consiguen. Y son menos aœn los que logran sobrevivir a ello. Las cosas son as’: los escritores persiguen grandes libros y los grandes libros se alimentan de escritores. En 1987 Paul Auster era un autor pr‡cticamente desconocido. Hab’a publicado algunos poemas, alguna obra en prosa (una novela polic’aca editada bajo seud—nimo, por ejemplo) y algunas traducciones del francŽs. Daba clases en la Universidad de Princeton, estaba divorciado de su primera mujer y ten’a un hijo de nueve a–os, Daniel. Ese a–o public— dos novelas Fantasmas y La habitaci—n cerrada con las que completaba un ciclo narrativo que pronto se conocer’a como La trilog’a de Nueva York. Entonces, como si los diosecillos del azar estuviesen leyendo una novela de Paul Auster, todo cambi— radicalmente. Los lectores descubrieron en Auster una generosa fuente de fascinaci—n e hicieron lo que suelen hacer los lectores fascinados: reproducirse. La cr’tica, por su parte, mostr— una infrecuente unanimidad: La Trilog’a de Nueva York era un gran libro, uno de esos que merecen ser etiquetados como obras maestras.

Materiales delicados Dos a–os despuŽs, Paul Auster publicaba una nueva novela titulada El palacio de la luna. Era el momento de comprobar si su gran libro lo hab’a devorado, si iba a convertirse en uno de esos autores Òde una œnica obraÓ. Hemos de reconocer que resolvi— el embrollo

sin muchas sutilezas: escribi— otra obra maestra. A ra’z de la aparici—n de El palacio de la luna, la cr’tica, siempre aficionada a la taxonom’a creativa, le declar— hijo de Samuel Beckett y de Thomas Bernhard, sobrino de Borges y nieto de Kafka. Con semejante ‡rbol geneal—gico, no resulta extra–o que se convirtiese en uno de los escritores m‡s importantes de la dŽcada de los noventa. Su rostro comenz— a aparecer con insistencia en las portadas de los suplementos literarios, sus libros conocieron numerosas traducciones (Francia y Espa–a se rindieron al instante a su literatura) y su influencia, su peligros’sima influencia, empez— pronto a advertirse en las obras de tres o cuatro centenares de colegas. No se nos ocurre un autor de nuestros d’as m‡s imitado que Žl. Su rastro (un reguero francamente fluorescente) es detectable en las p‡ginas de un nœmero incalculable de escritores contempor‡neos. La mayor’a de las veces su influjo es, cuando menos, pernicioso. Auster trabaja con unos materiales que son muy atractivos pero tambiŽn muy delicados. Su obsesi—n por ensamblar historias, su confianza en al azar (Žl prefiere hablar de Òcadenas de contingenciasÓ) para atar cabos narrativos, el modo en que utiliza materiales autobiogr‡ficos, su fe en las casualidades o su uso (a veces abusivo) de la metaficci—n son recursos que hay que saber administrar con maestr’a. No todos son capaces de hacerlo, claro, y a los imitadores el com-

obra maestra. Algo peor ocurri— en 1994, con Mr. VŽrtigo. El libro (una sombr’a novela de iniciaci—n) fue capaz de decepcionar hasta a sus seguidores m‡s irreductibles y se–al— el inicio de un periodo que signific— para muchos el fin de Auster. Fueron ocho a–os en los que s—lo public— recopilaciones de textos breves (algunas notablemente odiosas como Cre’ que mi padre era Dios), que ofrec’an cierto interŽs pero que no eran capaces de satisfacer a los lectores m‡s exigentes.

Un mundo en tensi—n

puesto suele estallarles entre las manos. Incluso al propio Auster le ha ocurrido alguna vez. En 1990, por ejemplo, con la publicaci—n de La mœsica del azar, novela intensamente fallida cuyo recuerdo se esfum— en 1992, cuando apareci— la magn’fica Leviat‡n, su tercera

La situaci—n volvi— a cambiar (y quiz‡ ahora debiŽramos ponernos en pie) en 2002. Auster regresaba a la novela con un t’tulo sencillamente extraordinario: El libro de las ilusiones. No es descabellado afirmar que se trata del mejor de sus libros: su cuarta obra maestra. Inquietante, sabia, certera, elegante, conmovedora, sugestiva, asombrosa... La historia protagonizada por David Zimmer y el actor de cine mudo Hector Mann constituye una especie de foco magnŽtico dispuesto a acaparar adjetivos laudatorios. Todos los que la leyeron recuperaron al instante su fe en el neoyorquino y comenzaron a preguntarse: Ày ahora quŽ?, ÀquŽ va a ser lo pr—ximo? La respuesta a esa pregunta lleg— a nuestras librer’as hace unas semanas. La noche del or‡culo constituye un compendio de lo mejor y lo peor de la narrativa aus-

teriana (en una de las magn’ficas entrevistas que le realiz— GŽrard de Cortanze en 1995, el autor se re’a ante la perspectiva de que su narrativa propiciase un tŽrmino similar a ÒkafkianoÓ, pues bien ya esta aqu’, saludŽmoslo: austeriano). Quiz‡ lo m‡s valioso del libro sea que nos sirve para visitar de nuevo el universo literario del autor: un mundo en tensi—n donde el destino se disfraza de accidentes, de encuentros fortuitos, de casualidades. S—lo en las cincuenta primeras p‡ginas asistimos al espect‡culo de ver c—mo la historia principal se desglosa en tres narraciones independientes. Los fragmentos en los que el protagonista, el escritor Sidney Orr, garrapatea en su cuaderno el comienzo de una nueva novela son un ejemplo de tŽcnica y un derroche de talento. Por otro lado, a medida que el texto avanza, los conocedores de la obra del estadounidense advertir‡n que vuelve a incurrir en una cierta desmesura a la hora de acumular episodios secundarios o que le siguen perdiendo ciertas escenas algo efectistas y melodram‡ticas. Aunque probablemente nada de esto importe demasiado. La moneda que circula en el mundo de Paul Auster es la moneda del asombro y la fascinaci—n. Basta con comenzar a leer La noche del or‡culo para cerciorarse de que est‡bamos en lo cierto y (es hora de cerrar cierto parŽntesis) el ilusionista que acaba de terminar su actuaci—n y se despide de nosotros con una reverencia, es en realidad un consumado hipnotizador. Pablo Mart’nez Zarracina

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El poder de las palabras

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IDNEY Orr se recupera de una enfermedad que casi acaba con Žl. Es novelista y, desde que cay— enfermo, no ha escrito una sola l’nea. Una ma–ana, mientras da uno de sus paseos terapŽuticos por Nueva York, descubre una peque–a tienda llamada El palacio de papel. Sin saber muy bien por quŽ, entra y compra un bonito cuaderno azul. Esa misma ma–ana se encierra en su estudio y comienza a escribir en el nuevo cuaderno. Escribe la historia de Nick Bowen, un editor de Žxito que una noche cualquiera est‡ a punto de morir aplastado por una g‡rgola que se desprende de un edificio. DespuŽs de sufrir ese accidente, Nick Bowen comprende lo fr‡gil que es la vida humana y lo abandona todo. Sin ni siquiera regresar a su casa, va al aeropuerto y sube al primer avi—n. Durante el viaje, Nick saca de su bolsa un manuscrito que esa misma ma–ana hab’a llegado a su oficina. Se trata de La noche del or‡culo, un texto inŽdito de Sylvia Maxwell, una escritora de los a–os veinte. El libro trata de Lemuel Flagg, un militar inglŽs que se queda ciego durante la Primera Guerra Mundial. Al regresar a Londres, descubre que la ceguera le ha conferido el don de la profec’a... Como otras veces, Paul Auster ha construido su œltimo libro a la manera de las mu–ecas rusas. En el interior de la novela hay al menos otras dos novelas. Dos novelas que llegan a interferir en la vida del protagonista hasta el punto de que Žste se pregunta si escribir no consistir‡ en proporcionarle argumentos a la realidad.

Incidiendo en uno de sus temas recurrentes, Auster se plantea si son capaces las palabras de alterar el curso de las cosas Incidiendo una vez m‡s en uno de sus temas recurrentes (la relaci—n entre lo real y lo ficticio), Auster se plantea si son capaces las palabras de alterar el curso de las cosas, si puede la ficci—n inmiscuirse en el devenir de los acontecimientos. Alguien le cuenta a Sidney Orr la historia de un poeta que escribi— sobre un ni–o ahogado y que, a–os despuŽs, vio c—mo su hijo se ahogaba en el Canal de la Mancha. Quiz‡ Auster no llegue a creer en hip—tesis tan delirantes sobre el poder de las palabras, pero s’ se dir’a que cree en su capacidad para conjurar los peligros de la vida real. En la novela aparece un personaje que casi pasa desapercibido y que termina jugando un papel de gran importancia. Se trata del hijo de un amigo de Sidney Orr, un joven inteligente y rebelde que est‡ metido en asuntos de drogas. Los que conozcan la biograf’a de Auster no tardar‡n demasiado en identificar al personaje. Se trata de Daniel, el hijo mayor del novelista, que fue condenado en 1998 por robarle trescientos d—lares a un traficante de drogas que hab’a sido asesinado. La sombra de ese hijo, por cierto, tambiŽn aparece en Todo cuanto amŽ, una de las novelas de Siri Hustvedt, la segunda mujer del escritor neoyorquino. La noche del or‡culo es tambiŽn una reflexi—n fantasmag—rica sobre el arte de escribir. Sidney Orr es el prototipo del literato austeriano: obsesivo, inseguro y disciplinado. El cuarto en el que trabaja es uno de esos estudios m’nimos y despojados de cualquier adorno que abundan en los relatos del autor. Hasta su interŽs por los cuadernos de espiral le asemeja a Quinn, el protagonista de Ciudad de cristal. Cuando Orr comienza a escribir se introduce tanto en su trabajo que llega a abolir el mundo exterior. Lo complicado, parece querer decirnos Auster (que ha reconocido escribir siete horas diarias en un estado de absoluta concentraci—n), es lograr recomponer ese mundo sin que se produzcan demasiados desperfectos.

El hombre que remov’a el azar

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E gusta Auster?,Ó me pregunt— un amigo. No, le dije. El verbo gustar implica algo voluntario, una aceptaci—n, cuando en realidad sus libros me hechizan. Me van deglutiendo poco a poco, despuŽs de haber sido capturado por los imperceptibles dientes de sus primeras p‡ginas. Eso le dije. Un libro puede satisfacer por su originalidad o su calidad literaria, pero Auster se presenta aparentemente desarmado al duelo autor-lector. Porque hay un duelo, un perverso intento de seducci—n. El primero intenta cautivar al segundo, mientras que Žste intenta mostrar firmeza, una armadura de la que s—lo se desprende si prevŽ que ser‡ part’cipe voluntario del encuentro, confidente, espectador deleitoso de primera l’nea, casi co-protagonista, en una especie de acompa–amiento ’ntimo de los personajes. El engarza el estilo a los bastidores y las bambalinas. Relega el artificio verbal, con maestr’a de prestidigitador, a una falsa apariencia de sencillez. Su estilo genuino reside debajo de un minucioso entramado, una estructura de hilos invisibles que sostienen las palabras por debajo, como si estuvieran escritas con precisi—n de punto de cruz. El resultado son largos p‡rrafos que imantan. Sus armas son secretas, e intuyo que entre ellas est‡ esa sutil habilidad para situar a personas normales (cualquiera de nosotros podr’a ser un personaje suyo) en el l’mite circunstancial, en los vŽrtices de lo humano, en los bordes de lo comprensible, lo imaginable o lo azaroso. Para ello no teje aparatosas ficciones. Simplemente deja que los personajes se adentren en esos senderos que en la vida real desechamos y nunca tomamos: por contenci—n, por miedo o por un supuesto c—digo del deber. ÀQuŽ hay en esos bordes de la realidad? Auster nos sitœa en ellos para incitarnos a una pregunta que, m‡s all‡ de la filosof’a, parece proscrita: quiŽnes somos. Bajo una apariencia normal, dibuja escenarios que se tornan desconcertantes. Logra que el temor desdibuje todas nuestras inercias. Nos desnuda y deja nuestra entidad al descubierto. ÀQuŽ hay m‡s all‡ de nuestra apariencia sumisa, bajo nuestra conciencia amaestrada, bajo la rigurosa m‡scara de eso que llamamos personalidad? Esa pregunta es la base que soporta todo su proyecto literario, proyecto que en las dos œltimas dŽcadas, desde que en 1986 se public— La ciudad de cristal, se ha convertido en un referente literario indiscutible.

Las p‡ginas de Auster consiguen hacer de nuestras vidas posibles novelas, porque nos enredan en una especie de lujuria de lo posible Vivimos en los estratos de la prosperidad y olvidamos que un efecto de embudo, de reloj de arena, nos hace vulnerables, susceptibles del terror. El m‡s m’nimo desencadenante nos puede hacer caer en el abismo. Las p‡ginas de Auster consiguen hacer de nuestras vidas posibles novelas, porque nos enredan en una especie de lujuria de lo posible, la implacable atracci—n de los abismos. Nos sitœa ante los bordes, nos obliga a sentir el aire y el vac’o, nos arrima a herrumbrosas barandillas de hierro. Sus historias impactan, no por originales heroicidades o el artificio lingŸ’stico en s’, sino porque nos rozan la piel, son susceptibles de te–irnos o, simplemente, de suceder. Nos recuerda que aœn somos capaces de so–ar, tras poner una marca en uno de sus libros, con sucesos que nos cambiar’an la vida. Disfrutamos, desde la seguridad de nuestras butacas, leves aventuras que de pronto se truncan, convertidas en v—rtices de inercia incontenible. Al d’a siguiente todo sigue igual. El mundo continœa girando al ritmo de un progreso tecnol—gico abrasivo, y nuestra vida es la misma que ayer. Pero al menos podemos coger de nuevo su libro, abrirlo por la p‡gina donde lo dejamos, y zambullirnos en la inquietante realidad de cualquiera de sus personajes, alguien que nos recuerda, vagamente, a nosotros, o a una remota semilla de valent’a que llevamos dentro... Ese l’mite humano se dibuja as’ con una escalofriante nitidez ante nosotros, mientras nos sentimos a salvo de un error nefasto, una desgracia irreparable, una miseria voraz... Paul Auster nos reconstruye a cada p‡gina. Convierte nuestra monoton’a en una cortina, que corre sutilmente para que vivamos momentos inciertos: un hecho fortuito; un error que desencadena una tumultuosa sucesi—n de acontecimientos; una bœsqueda que se torna obsesiva; una respuesta contenida en la mente de alguien que, inesperadamente, formula casi de modo involuntario y le cambia la vida... En nuestro mundo todo esto lo evitamos por prudencia o ignorancia, pero de sus p‡ginas emerge con una fuerza inesperada que nos atrapa de forma irremisible. Tanta que, a veces, yo dudo de que Paul Auster sea real. Podr’a ser una ficci—n, un personaje ideado por alguna mente prodigiosa y oculta que ha desdoblado su identidad tal y como hac’a Daniel Quinn. Podr’a ser parte de un juego de espejos ante la realidad, el resultado de un experimento, un ser imaginario al que se le ha atribuido una apariencia y una biograf’a, pero que oculta una entidad pensante, alguien que est‡ m‡s all‡ de los par‡metros normales con los que medimos a las personas que aparecen en las solapas de un libro. Por todo esto no puedo hablar de que sus novelas me gusten. Eso implica una voluntad que, ante sus armas, yo descubro no tener. Simplemente obedezco. Tomo aire, abro su libro y me dejo caer, confiando en su habilidad como quien conf’a en la prudencia de un gu’a, o en el piloto de un avi—n a 9.000 metros de altitud, en sus conocimientos, en su pericia. Sabe que posar‡ el aparato en tierra. Uno sabe, quiere saber, que todo volver‡ a la normalidad... A no ser, claro est‡, que el azar se filtre por alguna fisura, por un poro de iron’a, y todo se desencadene, como en los fascinantes libros de Auster, y nos arrastre m‡s all‡ de nosotros mismos.

P. M. Z. Fernando Palazuelos

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Carpentier y el se–uelo barroco

Obras fundamentales de Carpentier Narrativa: ● Ecue-Yamba-O (Dios sea loado) (1933) ● El reino de este mundo (1949) ● Los pasos perdidos (1953) ● Guerra del tiempo (1956) ● El acoso (1956) ● El Siglo de las Luces (1962) ● El derecho de asilo (1972) ● El recurso del mŽtodo (1974) ● Concierto barroco (1974) ● La consagraci—n de la primavera (1978) ● El arpa y la sombra (1979)

La obra del cubano, representaci—n del eclecticismo mestizo de la cultura de AmŽrica

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O recuerdo ahora d—nde pude escuchar por vez primera la mejor opini—n sobre lo que significa el conjunto de la obra de Alejo Carpentier (1904-1980), cuyo centenario se convoca obligadamente ahora, a–o en que se rememora a su vez otra de las voces cuya obra tambiŽn aspira a ser representaci—n de AmŽrica: Pablo Neruda. AquŽlla opini—n ven’a a decir que en Carpentier se coagulaban tres herencias culturales aparentemente dispares: el castellano cl‡sico, el surrealismo o vanguardia y el barroco americano. Posiblemente, habr‡ quien vea en la vieja Europa la trenza de ese se–uelo barroco, que viene asociado casi como latiguillo de encomienda, a la hora de hablar de Carpentier. El escritor franco-cubano naci— en La Habana y muri— en Par’s, signo del di‡logo alternativo que alent— su vida y obra: AmŽrica-Europa-Africa. En el trayecto compuso una obra narrativa escasa, lo que explica su criterio exigente, aunque dej— una obra period’stica, en parte reunida en libros, de una gran intenci—n y valor hist—rico, que no se suele rese–ar al hablar del escritor que abraz— la revoluci—n cubana en 1959. Esta le encarg— la direcci—n de la Editora Nacional, as’ como le eligi— para el Parlamento. Comienza ah’ una de las tareas menos comentada del papel hist—rico del escritor: su decisi—n primera en su calidad de promotor de la difusi—n de la cultura fue editar El Quijote. Tir— 100.000 ejemplares de la novela, y, al poco tiempo, no s—lo por esta acci—n, sino por c—mo encar— la lucha contra el analfabetismo, el diputado Carpentier, como cabeza visible de la revoluci—n castrista, logr— erradicar el analfabetismo de la Isla en tiempo rŽcord: un a–o. Habr’a que destacar que toda la obra de Carpentier Ðy ah’ radica su gran valor en el tiempoÐ es una bœsqueda del di‡logo entre la vieja Europa, conquistadora, con la cultura de la AmŽrica Antigua y la voz africana de Žsta, que le hizo mestiza, criolla y profundamente vital. Posiblemente su educaci—n francesa, de la que bebi— tanto, pero no todo, le llev— en el tiempo a trenzar una literatura menos barroca de lo que se dice, tanto por quienes la ensalzan, como por quienes la desfiguran o ignoran. Hay en la obra de Carpentier una dialŽctica sostenida que se hace di‡logo y discurso: la relaci—n de oposici—n y entra–a a la vez entre la historia individual y la social, la personal y la colectiva. A algunos de sus compa–eros de viaje les extra–aba que un marxista pudiera ser barroco, como si

en buena medida la literatura no sea un ejercicio elemental de barroquismo. Pero fue precisamente este barroquismo el que cautiv— en cambio a algunos escritores espa–oles, como Caballero Bonald, que tambiŽn era militante comunista. En buena medida, toda la generaci—n de los cincuenta, s’ llamada, como el caso de Carlos Barral, uno de sus editores e introductores en Espa–a, celebraron la literatura del cubano, no s—lo porque le vieran como hombre de izquierdas, sino como novelista sin concesiones. Pero tambiŽn en la generaci—n de los nov’simos, Carpentier fue elevado al trono. As’ era menos considerado quien, asomado al plano de la literatura, no diera muestras de haber le’do, juntas o por separado, estas novelas, excelentes, sin duda, de Carpentier: El Siglo de las Luces (1962), El recurso del mŽtodo (1974), Concierto barroco (1974) o La consagraci—n de la primavera (1978). Muchos no terminaron ninguna de las cuatro, pero estaba bien visto afirmar lo contrario. Los m‡s rigurosos de nuestros escritores reconocieron en el cubano una construcci—n narrativa, con todas sus variaciones y recovecos, en la que aprender a hacer de la novela, no s—lo una invenci—n de memoria o delirio, sino una construcci—n de lenguaje. Acaso por esto œltimo, Carpentier ha dejado de ser para la siguiente generaci—n elemento de referencia.

Ensayos: La mœsica en Cuba (1946) ● Tientos y diferencias (1964) ● Letra y solfa (1975) ● Bajo el signo de Cibeles (1979) ● La novela latinoamericana en v’speras del nuevo siglo y otros ensayos (1981) ●

Alejo Carpentier (1904-1980)

que ejerci—, fundamentalmente en sus a–os de Par’s y Venezuela. No es incompatible. El escritor de narrativa, que era su verdadero oficio, por el que siempre apost—, se liberaba del cronista, del cr’tico, del autor de reportajes, que exig’an un discurso, un lenguaje y un tono obligado de concreci—n y realismo, espantando a ese mismo lenguaje en sus excursiones por la novela. Pero hizo una obra period’stica a la vez muy exigente, incluso cuando escrib’a art’culos de circunstancia menor, que casi siempre era circunstancia pol’tica. Porque Carpentier era un hombre de conciencia e ideolog’a marxista, pero su obra period’stica, in-

Toda su obra es una bœsqueda del di‡logo entre la vieja Europa, con la cultura de la AmŽrica Antigua y la voz africana de Žsta No dejar‡ nunca de ser, en cambio, un narrador de estilo, que no s—lo es elemento de representaci—n simb—lica de la cultura mestiza del Caribe, sino una conciencia vigilante, desde que se puso al lado de la Repœblica espa–ola en la guerra civil. Posiblemente, Žl aspir— a ser todo eso, aunque otros escritores de su tiempo, como Neruda, le despach— cr’ticas muy severas sobre su supuesta falta de compromiso. Ciertamente, es dif’cil discutir el compromiso de Carpentier con la revoluci—n cubana, se estŽ de acuerdo o no con ella.

Un periodista con sentido hist—rico Hay quien ha se–alado en cambio que no se compadece bien la escritura barroca de Carpentier, cuando se sabe que durante m‡s de tres dŽcadas, el escritor cubano se dedic— de lleno al periodismo,

cluida la realizada en Cuba tras la revoluci—n castrista (1959), no es precisamente un dechado de construcci—n ideol—gica. Parece como si el rastreo por el pensamiento pol’tico francŽs, de cuya cultura participaba por formaci—n y entendimiento el cubano (hijo de francŽs y rusa), le hubiera curado de tentaciones de fervor sectario, que parece ser consustancial al militante de las causas definitivas. Por eso, a uno le han interesado mucho m‡s algunos de sus libros de ensayo que la mayor’a de sus novelas, tan invocadas, y no sabemos si le’das, por tantos. Hubo un tiempo que por estos pagos estaba bien ÐdŽcadas del setenta y ochenta del pasado sigloÐ decir que Carpentier era libro de cabecera, pero no sabemos si era para apoyar la testa. Lo importante es que, como tambiŽn se puede percibir en alguna de sus novelas,

con s—lo acercarse a su t’tulo ÐEl siglo de las luces, El recurso del mŽtodoÐ, hemos de considerar a Carpentier como un hombre de pensamiento. Un hombre con discurso y sentido cr’tico, como podemos comprender en ensayos como Tientos y diferencias, Letra y solfa Ðcon art’culos del periodo en que vive en Venezuela (19461959)Ð o Bajo el signo de Cibeles. En este œltimo volumen se compendian los art’culos period’sticos escritos acerca de la guerra civil espa–ola de 1936. Libro Žste muy importante, particularmente por el breve pr—logo que aporta Carpentier, en el que quedan bastante claros algunos comportamientos de ciertos intelectuales en ese momento. El escritor cubano estuvo en Valencia, en el segundo Congreso de Escritores Antifascistas o Segundo Congreso de Escritores en Defensa de la Cultura. En el viaje de 1937 a Valencia, el novelista cubano se acompa–a de CŽsar Vallejo, AndrŽ Malraux y Marinello, entre otros. Hay pues, en Carpentier un sentido hist—rico, una visi—n de conjunto de una realidad, que se estaba desarrollando en directo, pero que, sin tener la perspectiva del tiempo, como no ten’a el escritor, uno percibe que todo el libro desprende un aroma y una visi—n de entendimiento de una realidad, que s—lo es dado a las mentes de visi—n amplia y no sectaria. Esto tiene m‡s valor porque el tiempo de la guerra invitaba precisamente a todo lo contrario. Hay otro libro de ensayo del escritor franco-cubano que es herramienta importante para conocer la narrativa del propio Carpentier: La novela latinoamericana en v’speras del nuevo siglo y otros ensayos. Aunque no es un libro de historia, sino de cr’tica, en el mismo encontramos excelentes reflexiones sobre quŽ entiende el escritor por novela, que piensa de la poe-

s’a, quŽ sabe, siente y piensa de la mœsica, de las artes, singularmente la pintura, as’ como el sentido social que, a su entender, debe tener toda novela. De entre todos los ensayos, el m‡s famoso, el m‡s conocido y el m‡s singular, sin duda, es La mœsica en Cuba, ensayo basado en investigaciones rigurosas y directas, de gran valor etnogr‡fico y antropol—gico, libro del que se han hecho cientos de ediciones, y en el que se percibe c—mo el arquitecto frustrado, venido a escritor, devino en mœsico. No se puede comprender la estŽtica de su literatura sin considerar previamente el conocimiento y sentido musical de este escritor, que no s—lo explic— la historia de la mœsica cubana, sus ra’ces afro, sino que, una vez m‡s, nos hace comprender el valor que como historiador tiene toda su obra, incluso la novel’stica. Todos sus libros, tambiŽn los narrativos, son documentos del tiempo, trazos y trozos de memoria coagulada, que sitœan al escritor y su obra entre las voces m‡s densas y a la vez m‡s lœcidas de la narrativa del siglo XX. En esto su personalidad se asemeja a la de Germ‡n Arciniegas, en Colombia, o incluso Emerson, para toda AmŽrica. Esa concepci—n documental de la escritura se percibe en muchos pasajes de su obra, como el que aparece en la novela La consagraci—n de la primavera, al hablar de la defensa de la ciudad de Madrid durante la guerra. Carpentier echa mano en este caso del testimonio que el escritor Gonz‡lez Tu–—n da de la heroica defensa del pueblo republicano durante el asedio, y que public— en la revista Hora de Espa–a. Es una nota de rigor entre tantas, con las que compuso su escasa pero exigente y exquisita obra literaria. FŽlix Mara–a

5 Ultimo libro de Vargas Llosa El œltimo libro de Mario Vargas Llosa (Perœ, 1936), titulado La tentaci—n de lo imposible y publicado por Alfaguara, es un ensayo sobre Los Miserable, una de las grandes novelas del escritor francŽs Victor Hugo (1802-1885). A lo largo de las p‡ginas de La tentaci—n de lo imposible, su autor lleva a cabo un estudio de la novela de Victor Hugo (un estudio de lector apasionado de dicha obra): escribe, por ejemplo, sobre la caracterizaci—n de los personajes que aparecen en ella y sobre la estructura social descrita en la misma. Entre otras cosas, Vargas Llosa escribe lo siguiente: ÒEn Los Miserables los principales personajes antes que personas de carne y hueso son hŽroes en el sentido homŽrico, semidioses que trascienden las limitaciones humanas y, en sus proezas f’sicas o morales, y en su conducta rectil’nea Ðgenerosa o ferozÐ se acercan a los dioses o a los demoniosÓ.

Alfaguara cumple cuarenta a–os ALFAGUARA cumple en 2004 cuarenta a–os de actividad editorial. Para celebrarlo, los responsables de esta editorial han puesto en marcha la colecci—n Cl‡sicos Modernos, destinada a englobar reediciones de t’tulos imprescindibles del fondo editorial de dicho sello, casi todos ya descatalogados. Dicha colecci—n se inaugur— en septiembre con Jacques el fatalista, de Denis Diderot, Los novios, de Alessandro Manzoni, Victoria, de Joseph Conrad, y El custodio, de Anthony Trollepe, a las que han seguido las siguientes obras: Toda pasi—n apagada, de Vita Sackville-West, Vida de Henry Brulard, de Stendhal, Ll‡malo sue–o, de Henry Roth, El maleficio, de Jean Lorrain, Moravagine, de Blaise Cendrars, y La profec’a de Cloostedd, de Joseph Sheridan Lefanu. En 2005, esta colecci—n se enriquecer‡ con diez t’tulos m‡s.

Nueva obra de Ernesto S‡bato SEIX Barral ha publicado la œltima obra del escritor argentino Ernesto S‡bato (1911). Se titula Espa–a en los diarios de mi vejez y se trata de un volumen surgido a partir de la estancia del autor en Espa–a entre abril y septiembre de 2002. S‡bato cuenta en el libro las experiencias vividas en los diferentes lugares de Espa–a en los que estuvo en esos meses (entre otros, Toledo, Barcelona, Madrid y Santander). El libro reœne tambiŽn una serie de reflexiones del escritor sobre temas diversos, como, por ejemplo, la creaci—n literaria, la globalizaci—n y la naturaleza humana. Como anexo, el volumen incluye los textos le’dos en el homenaje que el C’rculo de Bellas Artes (Madrid) dio al escritor, un texto de Claudio Magris sobre su obra, una conferencia del propio S‡bato y las palabras pronunciadas por JosŽ Saramago en la recepci—n del Honoris Causa que la Universidad Carlos III (Madrid) otorg— a Ernesto S‡bato.

Temblores de poes’a

DRIVE-IN

Marlene, caricia y latigazo

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N sus muy elusivas y decepcionantes memorias, Marlene Dietrich nos cuenta c—mo su madre le anudaba, all‡ en la ni–ez, los botines con una ferocidad que interrump’a el flujo de la sangre en sus pies. ÒCuando seas mayor Ðle dec’aÐ, tendr‡s los tobillos finos; por el momento, hay que procurar que no engordenÓ. Y tiraba de los cordones hasta casi romperlos, para que los huesos del pie cedieran a las constricciones de tan severa c‡rcel. De aquella condena diaria saldr’an los tobillos m‡s esbeltos del mundo, y tambiŽn un car‡cter fieramente disciplinado. Quienes han escrito sobre Marlene Dietrich, quienes se han atrevido a glosar su belleza de p—mulos patricios y mirada altiva, han coincidido en un extremo: su proximidad estimulaba la pleites’a y el sometido deslumbramiento, pero muy raramente otras pasiones m‡s humanas. Muchos hombres Ðy tambiŽn algunas mujeres, si consentimos los chismorreos que perturban su memoriaÐ trataron de conjurar y vencer ese hechizo amedrentador, pero s—lo obtuvieron a cambio la amargura, la contrici—n y, a la postre, el cansancio: algunos, como su Pigmali—n, el director Josef von Sternberg, ardieron en un incendio destructivo; otros m‡s prevenidos o vitalistas, como Ernest Hemingway o Jean Gabin, prefirieron, tras unos primeros tanteos aturdidos, amarla en la distancia. Y es que Marlene Dietrich estaba predestinada, como todas las criaturas que han bebido de la fuente de Narciso, a amarse a s’ misma, no tanto por ego’smo como por fatalidad. Mientras vivi—, intent— rectificar este designio; pero cuando la muerte la visit— en su apartamento de Par’s s—lo estaba acompa–ada de sus espejos. Jean Cocteau, que perteneci— a la secta de sus adoradores, dijo que su nombre se iniciaba con una caricia, para rematarse con el chasquido de un latigazo. Frente al mito de la mujer que estimula la festiva lujuria de sus admiradores, el siglo XX nos ha legado tambiŽn el mito de Marlene Dietrich, la esfinge habitada de misterios que no osamos desvelar. Creo no equivocarme si afirmo que las mujeres nunca han aspirado a imitarla (incluso la honran con una turbia antipat’a); los hombres la hemos amado, pero nuestro amor hacia ella Ðo, mejor dicho, hacia su imagenÐ no ha sido un amor efusivo, sino m‡s bien reverencial y medroso, como suele ser el amor que se profesa a las criaturas m‡s hura–as; un amor que reclama la lisonja de una caricia y recibe la ofensa de un latigazo, pero que, en lugar de huir escarmentado, insiste moh’no en su vasallaje. Quiz‡ nuestro amor por Marlene Dietrich sea la expresi—n de una fantas’a masoquista: hemos creado su fantasma de ilesa blancura, y, en un exceso de optimismo, hemos llegado a creer que se trata de un fantasma de carne y hueso. Pero cuando por fin nos atrevemos a rozarlo sentimos en la piel un ara–azo gŽlido que nos amilana y retrae. As’ es Marlene Dietrich, caricia y latigazo a la vez. Juan Manuel de Prada

ÔEl hombre sin atributosÕ SEIX Barral ha publicado, en dos volœmenes, la que dicha editorial considera la edici—n definitiva de El hombre sin atributos, la gran novela, aunque inacabada, del escritor austriaco Robert Musil (18801942). La obra (novela gigante y una de las grandes creaciones literarias del siglo XX) se inicia con los preparativos para una importante celebraci—n en Kakania (se trata del imperio austro-hœngaro), para cuya organizaci—n se invita a participar al protagonista, Ulrich. La novela, en la que se plasman las reflexiones de los personajes sobre gran cantidad de asuntos y se cuenta el encuentro entre Ulrich y su hermana Agathe tras a–os de vidas separadas, da una amplia descripci—n de la decadencia del imperio austro-hœngaro poco antes de su desaparici—n, e incluye la narraci—n de la extra–a atracci—n que sienten entre s’ los dos hermanos.

Pero El hombre sin atributos es mucho m‡s que eso: es una novela vast’sima, casi un universo en s’ misma. Puede entenderse como la descripci—n cr’tica de una sociedad vac’a, el despojo ca—tico de siglos de historia, donde la realidad tiene mucho de irreal pues ha perdido su esencia. Esa sociedad ser’a, ampliamente, la de una Europa ya decadente, asolada por una Žpoca de gran crisis, de la que estaba surgiendo otra m‡s moderna pero aœn por descubrir. Y como la novela busca el absoluto, el objeto œltimo de la misma es descifrar la vida y el mundo. No se puede saber c—mo pretend’a Musil terminar El hombre sin atributos, pero tiene fundamento la opini—n de los que consideran que esta novela no es s—lo inabarcable sino tambiŽn inacabable. R. R. H.

LA editorial Atenea Centro de LingŸ’stica Aplicada ha presentado el sexto volumen de la colecci—n ÔBiblioteca Vasca BilingŸeÕ. Esta iniciativa trata de facilitar la asimilaci—n de textos breves en dos lenguas Ðen este caso euskera y castellanoÐ garantizando su comprensi—n a travŽs de la traducci—n. Este volumen titulado Dardaren interpretazioa / Interpretaci—n de los temblores del escritor donostiarra Harkaitz Cano recoge una selecci—n de poemas, traducidos al castellano por Žl mismo y cuenta con una ilustraci—n de Brooklyn de Jesœs Mari Lazcano en su portada y pr—logo de Ibon Ega–a. Al acto de presentaci—n en la sede de Euskaltzaindia en Bilbao acudieron el propio autor y el director de la colecci—n Jon Kortazar.

Tres premios de relato EL escritor Oscar Alonso Alvarez ha obtenido tres nuevos galardones que lo reivindican como uno de los autores bilbainos que mejor se mueven en las distancias cortas. Recientemente le fue entregado el XVIII Premio del Concurso Literario Lasarte-Oria 2004, con la obra DialŽctica del olvido. Y acaba de recoger el galard—n que le acredita como finalista en el prestigioso Concurso de Cuentos Ciudad de Marbella 2004, con la obra La soledad de las palmeras, y cuyo primer premio ha ido a parar al gaditano Felix J. Palma con El hombre que no sab’a mirar las estrellas. Asimismo, hace pocos d’as le fue concedido el X Premio de Cuentos Ateneo de La Laguna con la colecci—n de relatos La l—gica de los planetas. Esta colecci—n, que ser‡ publicada en breve, ya hab’a logrado una menci—n como finalista en el III Concurso Alfonso de Coss’o del Ateneo de Sevilla.

Nueva colecci—n de Seix Barral SEIX Barral acaba de inaugurar una nueva colecci—n, denominada ÔUnicosÕ. Se trata de una iniciativa que pondr‡ al alcance del lector textos selectos e inencontrables, en muchos casos inŽditos, junto con materiales nunca vistos, como facs’miles y fotograf’as, entre otros. Los dos primeros t’tulos de esta colecci—n reciŽn estrenada son Condenada belleza del mundo, un relato corto de Luis Mart’n-Santos (1924-1964), en una edici—n que incluye una reproducci—n facsimilar con dos finales distintos, y El Jefe T. A. Odutola: el Ogbeni Oja de Ijebu-Ode, un texto inŽdito de Paul Bowles (1910-1999) en el que Žste practic— la Òescritura autom‡ticaÓ bajo los efectos del consumo de hach’s, en una edici—n bilingŸe que reproduce el texto en inglŽs de forma facsimilar. La colecci—n, en edici—n limitada, se enriquecer‡ con cuatro nuevos t’tulos cada a–o.

ÔCuentos de los d’as rarosÕ ALFAGUARA acaba de publicar el œltimo libro de JosŽ Mar’a Merino (La Coru–a, 1941). Se trata de un volumen que, con el t’tulo de Cuentos de los d’as raros, reœne quince narraciones cortas sobre lo raro en la existencia humana como algo habitual. Son cuentos sobre las fantas’as de la infancia, sobre los recuerdos y sobre la apertura a otros mundos, que narran historias fant‡sticas, inquietantes llenas de misterio y a veces ir—nicas. Segœn el propio escritor, estos quince cuentos (fruto del trabajo que ha dedicado al gŽnero durante los œltimos diez a–os) Òmuestran diversos registros de mi labor de cuentista Ðlo fant‡stico, lo simb—lico, el realismo quebradizoÐ, y tienen como ‡mbito el tiempo contempor‡neo y tambiŽn ciertas Žpocas de mi primera juventudÓ.

6 En ÔAl morir don QuijoteÕ, AndrŽs Trapiello retoma la figura de Alonso Quijano para relatar la historia de muchos de los personajes que rodearon su vida

ÒLa cordura de don Quijote s—lo interesa cuando se vuelve locoÓ

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NDRES Trapiello es uno de esos escritores con los que podr’as estar hablando durante horas. Si le escuchas con atenci—n llegas a percibir el latido de un autor comprometido con su trabajo, volcado en unas obras en las que cree y que es capaz de asumir riesgos en su literatura, hasta el punto de enfrentarse a un personaje como don Quijote. Pocos autores habr’an podido sacar un aprobado en este enfrentamiento. Trapiello lo ha hecho, y con buena nota, y ha logrado en Al morir don Quijote (Destino) una obra compleja en la que se aprecia una enorme pasi—n por los libros y la literatura. ÒEs una novela que s—lo se puede escribir por amor. Cualquiera que se acerque a don Quijote se enamora del personaje: un hombre que lo f’a todo a su libertad, que quiere ser libre para llevar a cabo un ideal de justicia, de proteger a los desamparadosÓ. ÐÀNo es una osad’a retomar los personajes de El Quijote? ÐEs un doble riesgo. Habr‡ quienes busquen compararme con Cervantes, cosa que no he pretendido, aunque si me han de comparar con alguien prefiero que sea con Cervantes. No he buscado contar lo que Cervantes no cont— ni enmendarle la plana al autor, no

saco a los personajes de manera grotesca, sino que es una novela hecha muy en serio. Y cuando se entiende esto, se concibe que los personajes no se han pasado de moda, y que El Quijote est‡ por encima del tiempo. Por otro lado, tambiŽn para los lectores entra–a un riesgo. El Quijote es una obra que ha derrotado a muchos lectores, porque es una novela escrita en la lengua de Cervantes, que no es la nuestra aunque se le parezca, y que se estudia pero no se lee. ÐSu novela me sugiere un profundo amor a la vida, a los librosÉ ÐEs una novela de amor y de aventuras, en la que dos mujeres llevan las riendas de la historia, que son las œnicas que conocen la intimidad de don Quijote. Antonia, su sobrina, y Quiteria que est‡ enamorada de Žl y le prefiere vivo y loco que muerto y cuerdo. Pero tambiŽn es un homenaje al libro, tanto es as’ que Sancho Panza aprende a leer porque ya no se f’a ni de su propia memoria ni de lo que le cuentan. ÐHay referencias constantes a la cordura y la locura. ÀCree en un don Quijote cuerdo? ÐLa cordura de don Quijote interesa tan s—lo cuando se vuelve loco, porque su ideal s—lo puede

El escritor AndrŽs Trapiello

llevarlo a cabo una persona que estŽ un poco loca. De no ser as’ no sales en defensa de los menesterosos, de las viudas, no te expones a los molinos sabiendo que son gigantes. Eso es lo bello del personaje de Cervantes, que ataca a los molinos sabiendo que son gigantes.

ÐEn su novela dice que don Quijote deseaba no morirÉ Ðƒse es un ideal leg’timo muy de la Žpoca de Cervantes. Todos tenemos conciencia de que la vida es breve y fr‡gil, y que la œnica manera de darle sentido es trascender el tiempo, conseguir la inmortalidad. Don Quijote se da cuenta

de que la felicidad se consigue a travŽs de acciones notables y rigurosamente nobles, siendo recordado como un hombre que trajo un poco de orden a este mundo desajustado. ÐHay una escena en la que se habla de otros quijotes, como si todos los personajes quisieran parecerse a Žl. ÐPorque todos quieren ser famosos. Y se dan cuenta de que lo son como parasitarios de la fama de don Quijote. Pero llega un momento en que comprenden que quieren vivir otras vidas y asumen el ideario de Alonso Quijano de que s—lo se puede ser justo si se es libre. ÐEn su anterior novela, Los amigos del crimen perfecto tambiŽn recurr’a a una novela de gŽnero, como si quisiera recuperar una forma de entender la literatura. ÐY era asimismo muy cervantina, un homenaje a las novelas de serie negra, de serie B. En las novelas de caballer’a el quijote era el caballero con armadura y escudero. En las de serie B, el quijote es un detective solitario al que todo el mundo apalea. Son lo que podr’amos definir como novelas populares. Pero el escritor es el mismo y hay cosas en comœn, como el problema de la ausencia de libertad y justicia. A. J. Oviedo

Mikel J‡uregui, finalista del Premio Ciudad de Badajoz de Poes’a Experimental

Poes’a experimental: una actitud frente a la vida

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ABLAR de poes’a experimental o visual es adentrarse en un mundo complejo de tŽrminos que se entrecruzan y de artes que se mezclan. La imagen, el texto, la escultura, la pintura, todo parece formar parte de este concepto que en Bilbao ha logrado cierta trascendencia gracias a la labor de difusi—n del artista Francisco Aliseda, organizador hace dos a–os de una gran muestra poŽtica en El Arenal y a la que acudieron creadores de la talla de Fernando Mill‡n. Desde hace tres a–os, la Diputaci—n de Badajoz selecciona en un concurso a los mejores creadores de esta poes’a de todo el Estado. En esta edici—n, cuatro autores vascos, Charo Sierra, Fausto Grossi, Julia Otxoa y Mikel J‡uregui, han sido seleccionados y sus obras formar‡n parte de un gran archivo que se est‡ creando para dar a conocer este nuevo lenguaje poŽtico. En el caso de Mikel J‡uregui es la tercera ocasi—n que una de sus obras es elegida entre las mejores. El primer problema que plantea un concepto como el de poes’a visual es su propia indefinici—n. Mikel J‡uregui, por ejemplo, prefiere hablar de ella como poes’a experimental, Òporque es como un experimento en el que atrapo el hecho poŽtico. Una forma vanguardista que mezcla pintura, fotograf’a, esculturaÉ, lo que Ricardo Ugarte defini— como Òla proa de la poes’aÓ. Y realmente, si

intentaras explicar quŽ es poes’a tambiŽn hallar’amos un sinf’n de significados, desde el Òpoes’a eres tœÓ de BŽcquer hasta una forma de lenguaje. Todo es poes’a. Cuando Pepe Hierro estuvo en Bilbao dijo que nuestra ignorancia se demostraba en que aœn no hab’amos definido el concepto de poes’a, pero que sin embargo existeÓ. La experimentaci—n poŽtica surge a partir de una Žpoca en la que identifica el discurso tradicional como algo caduco que necesita una revisi—n. ÒLa poes’a nace como una forma de comunicaci—nÓ, explica J‡uregui. ÒY es a partir de los surrealistas cuando se buscan otras formas de expresi—n que en poes’a da lugar a lo visual. De ah’ evoluciona hacia una serie de autores como Joan Brossa, Fernando Mill‡n o Julio Campal que pretenden dejar de lado las estructuras de la poes’a discursiva, al darse cuenta de que la imagen cobra cada d’a m‡s fuerza dentro del lenguajeÓ. Una evoluci—n que en la pintura dio lugar al arte abstracto y que en poes’a alcanza cotas de experimentaci—n uniendo diferentes tipos de lenguaje: escrito, pl‡stico, musicalÉ La uni—n hace surgir un nuevo gŽnero, marcadamente visual, repleto de sugerencias. ÒEl lenguaje experimental es una actitud frente a la vida y frente a la publicidad, frente al marketing. Y es curioso porque muchos de los trabajos de estos creadores han dado lugar a grandes anuncios publicitarios.

Carnada, de Mikel J‡uregui

Son la esencia de la publicidad. Detr‡s de un gran anuncio hay un gran poeta visual capaz de sugerirnos multitud de significados poŽticos, que atraen con mucha fuerza, y cuyo objetivo en este caso es venderÓ. Los poetas visuales que no se adentran en la publicidad se hallan con un gŽnero puramente social, cuyas obras, los poemas, no se venden, Òson im‡genes que no tienen la categor’a de un cuadro, que carecen de valor

de mercadoÓ. Para Mikel J‡uregui, Žsta es una de las razones de que la poes’a experimental no se haya difundido en su justa medida. ÒEl mercado es un devorador de cultura. Y los poemas visuales no han adquirido aœn el valor de arte. Y no nos damos cuenta de que en el arte desaparece toda la sinceridad y valor art’stico cuando se pliega al mercadoÓ. Considera, sin embargo, que uno de sus grandes aciertos es que se trata de un gŽnero abierto a gente con sensibilidad incluso aunque no domine los c—digos art’sticos. ÒHay personas que al no dominar un c—digo prefieren callar. Y ese silencio es una frustraci—n. La poes’a visual abre una puerta a esta gente. No hace falta saber dibujar porque puedes recoger im‡genes de la calle, de una revista. S—lo necesitas ser creativo, tener imaginaci—n. Y adem‡s puedes contar con otra persona que maneje los c—digos, las herramientas, y que plasme lo que tœ tienes en la cabeza. Brossa se aliaba con un zapatero o un chamarilero y a partir de ellos creaba las obras que ideaba. Y de esa uni—n, de la habilidad del artesano y el artista surg’an muchas de las obrasÓ. Incluso a veces hasta el mismo azar se aliaba con ellos para sus creaciones. No en vano Òla vida es vida porque existe el azarÓ. A. J. O.

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La imitaci—n en tiempos confusos Dos pensadores bilbainos, Javier Gom‡ y Daniel Innerarity, ganan el Premio Nacional de Ensayo y el Espasa, respectivamente, y se colocan en la primera l’nea de la reflexi—n contempor‡nea

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quiŽn imitamos? A personas de Žxito, no importa c—mo hayan llegado a Žl ni tampoco las caracter’sticas de su ejemplaridad. Cantantes con o sin voz, deportistas m‡s o menos h‡biles, mujeres delgadas, bien parecidas, bien vestidas, actores lejanos e intocables, de los que s—lo sabemos algunas cosas que vienen con el sello inconfundible de la promoci—n. No pocos padres, si pudieran elegir, preferir’an que su hijo fuera un gran tenista a una gran persona. Si esto œltimo ocurre, pues mejor que mejor; ahora, que no interfiera en el logro de una buena posici—n, del dinero, de la fama. Parece que es m‡s pr‡ctico o mundano imitar al piloto de coches que al buen tipo, cuando lo prime-

construye en su obra toda una teor’a de la imitaci—n en la que con una admirable erudici—n, nada pesada, recorre la historia del pensamiento occidental. Desde la AntigŸedad hasta el siglo XVIII, argumenta el ensayista, la imitaci—n era una cuesti—n m‡s pr‡ctica y tŽcnica que moral. En Plat—n la imitaci—n tiene una connotaci—n negativa, ya que es una realidad como de segunda divisi—n, basada en sombras y reflejos de las Ideas o Arquetipos, y fuente por tanto de mentiras. Tampoco le parece muy apropiado imitar a los dioses, al menos si son tal y como los pintan Hes’odo y Homero, gente muy poco seria que se pasaba el d’a luchando, riŽndose y disfrutando de la buena mesa. Arist—teles, por contra, resalt— la pericia

Gom‡ construye en su obra toda una teor’a de la imitaci—n en la que recorre la historia del pensamiento occidental ro suele quedarse en un sue–o muy poco brillante y lo segundo lo tengamos al alcance de la mano. El pensador bilbaino Javier Gom‡ (1965), director-gerente de la Fundaci—n Juan March, se ha tomado en serio el tema de los modelos y a Žl ha dedicado su imponente obra Imitaci—n y experiencia (Pre-textos), con el que acaba de ganar el Premio Nacional de Ensayo. Gom‡ viene a decirnos que a lo largo de nuestra vida nos fijamos en unos modelos encarnados en personas a las que admiramos por su excelencia moral, entendida como la capacidad de actuar de una forma justa, bella y buena. Ejemplos tan redondos, nos advierte, no existen. S—lo podemos acercarnos a aproximaciones y tomar lo mejor de cada uno, porque no se trata de copiar como primates sino de intuir esas cualidades en los otros y de desearlas en nosotros. La tesis de Gom‡ est‡ planteada pues a contracorriente, sabedor de que esos ejemplos escasean y que apenas son conocidos, aunque nada indica que hayan desaparecido por completo y que no haya gente todav’a dispuesta a dejarse seducir por el valor de una humanidad imperfecta, pero capaz de poner en pr‡ctica la dignidad. Otro fil—sofo bilbaino, Daniel Innerarity (1959), estar’a cerca de estas ideas de Gom‡, si bien se dedica a plantear los elementos que contribuyen a ocultar esos modelos positivos. La pregunta de su libro La sociedad invisible, con la que ha ganado el Premio Espasa de Ensayo 2004, podr’a formularse as’: ÀC—mo podemos conocer esos modelos en una sociedad compleja, heterogŽnea, desordenada, ambivalente, que nos produce sensaciones de opacidad, de incertidumbre y de inseguridad? Vayamos por partes. Gom‡

de la tŽcnica Ðpor ejemplo, en las artesÐ para imitar a la Naturaleza, una teor’a realista que tuvo una mayor influencia que la plat—nica: hasta el Romanticismo Ðy aœn ahoraÐ, se valora un cuadro, o un retrato, por su fidelidad con la realidad. Ya en el Renacimiento aparecen las primeras fisuras de esta clase de imitaci—n. Segœn Cortese, hab’a que imitar la sabidur’a y la elocuencia cl‡sica, llevada al cl’max por Cicer—n. ÒYo prefiero la figura del toro o del le—n que la del mono. Todos los que no componen m‡s que por imitaci—n son como loros o cotorrasÓ, le respond’a en una carta el moderno Poliziano, parece que con el bestiario a la vista. En efecto, la personalidad del artista empieza a sobresalir sobre los modelos a imitar. El creador debe ser libre para dar a luz algo original, nuevo. No valen imitaciones. El genio no necesita en quiŽn fijarse, le vale con escuchar y plasmar su inimitable yo interior. El espectador de las obras de arte tampoco precisa compararlas con la naturaleza, con la realidad, para saber si son buenas o malas. Como ilustr— Kant en la Cr’tica del juicio, Žl es tan libre como el creador para decir si le gustan o no en funci—n de sus propios criterios, si los tiene. El naturalismo de Zola volvi— a fijarse en la realidad y quiso fotografiarla con la m‡xima precisi—n. Pero en lo real Ðen lo socialÐ no abundaba lo modŽlico, sino lo contrario, lo miserable. Gom‡ explica todo este recorrido, que empieza con los presocr‡ticos, de un manera ‡gil y seductora. Imitaci—n y experiencia es una suerte de tratado a lo anglosaj—n: no renuncia a proponer una teor’a, empe–o extra–o en la actualidad, mientras que el autor se exige m‡xima coherencia con-

Daniel Innerarity en la presentaci—n de su libro en Bilbao

Javier Gom‡, director de la Fundaci—n Juan March

ceptual y claridad estil’stica. Por eso es un libro llamado a perdurar. Adem‡s, pretende intervenir en el debate social, una intenci—n que se muestra con br’o cuando llegamos al siglo XX. Segœn Gom‡, hasta el siglo pasado no se hab’a planteado, en toda la historia del pensamiento, lo que Žl llama la imitaci—n de prototipos. Un prototipo se compone de un una serie de cualidades que nos gustar’a te-

dividuo libre y creador se fija en otro individuo al que admira en raz—n de su postura ante la vida y porque encarna unos valores deseables. Su ejemplo significa para Žl una gu’a para afrontar las situaciones novedosas que a diario nos ofrece la existencia. La imitaci—n es as’ un factor de progreso personal, no una forma de quedarse est‡tico copiando la tradici—n de los cl‡sicos, y supone Òla capacidad

Innerarity afirma que todo se ha vuelto ambiguo, cambiante, intercambiable, destinado a desaparecer enseguida ner y que, por tanto, deber’amos imitar. Esas cualidades son abstractas, por ejemplo la generosidad, pero nosotros las percibimos en personas generosas, sobra decir que concretas, aunque por esto ese valor no pierde su universalidad (pensamos que toda la gente deber’a ser generosa). La imitaci—n adopta pues en el siglo XX un car‡cter Žtico. El in-

de entusiasmarse con lo —ptimoÓ, como escribi— Ortega y Gasset, un autor al que Gom‡ profesa su abierta simpat’a. Pero elegir un modelo Žtico no es f‡cil en los tiempos actuales. El propio Ortega ya daba fe del advenimiento de la nueva realidad de las masas, en las que el yo individual se disuelve en un colectivo amorfo y caprichoso que se esca-

bulle ante los principios y obligaciones, que exige derechos pero no atiende a sus deberes. En vez de imitar ejemplos morales, la masa cae presa del Òcontagio colectivoÓ, segœn Gom‡, de las modas ef’meras e interesadas, de los personajes de las nuevas realidades, como el cine, ya patente en los miles de mujeres estadounidenses que en los a–os cuarenta copiaron la melena ca’da sobre media cara de Veronica Lake. Aqu’ ya entramos en las tesis expuestas por Daniel Innerarity en La sociedad invisible. El fil—sofo bilbaino aduce que ya no podamos agarrarnos o fijarnos en perfiles claros. Todo se ha vuelto ambiguo, cambiante, intercambiable, destinado a desaparecer enseguida, a quedarse viejo en muy pocos a–os, con lo cual el prototipo de Gom‡, que requiere cierto tiempo y permanencia, encuentra serias dificultades para hacerse visible. Sospechamos que detr‡s de lo que vemos siempre se esconde algo que no podemos llegar a ver, porque a cierta gente que no sabemos quiŽnes son le conviene el ocultamiento. Sabemos que la televisi—n es mentira, puro simulacro, pero nos hacemos adictos a los reality-shows: pura nostalgia de la realidad perdida. ÀPodr’amos fijarnos como modelos positivos en aquellos que, en apariencia, se posicionan en contra de este estado de cosas? Innerarity se muestra m‡s que precavido ante una respuesta positiva: ÒLas opiniones cr’ticas y las conductas asociadas con la transgresi—n resultan algo normal, que ni revelan algo oculto, ni provocan o alteran. Donde todo el mundo quiere ser cr’tico y diferente, la cr’tica se convierte en evidencia, y la diferencia, en normalidad. Es tremendamente dif’cil ser cr’tico y heterodoxo cuando lo que todo el mundo quiere es, precisamente, ser cr’tico y heterodoxo, o sea creativo, distinto y originalÓ. Innerarity cita a Hirschman para hablar del compromiso cr’tico como forma de consumo y a Luhmann para decir que con las provocaciones ya no se puede provocar. En un mundo donde la banalidad lo engulle todo resulta muy dif’cil divisar modelos positivos con fuerza suficiente como para incorporarlos a un proyecto de vida que vaya un poquito m‡s all‡ de todas las chucher’as que nos ofrece el grandioso hipermercado en que se ha convertido la sociedad. La crisis es el pan nuestro de cada d’a. Y, sin embargo, tampoco hay que perder toda esperanza. Porque tiene raz—n Gom‡ al insinuar que siempre nos fijamos en alguien, en los padres cuando somos ni–os, en los amigos despuŽs, en los maestros (como apunt‡bamos con Steiner el mes pasado), en las personas por las que sentimos admiraci—n. Tener modelos de esta clase es una manera de hacernos fuertes. I–aki Esteban

Angel Ruiz de Azuaren argazkia

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Egitaraua ABENDUAK 4, larunbata. 12:30ean: Sarrera hitzaldia. Agirre eta Monzonen mendeurrena dela eta, ideologien bilakaera. Xabier Apaolaza. 18:00etan: Euskal Pen Klub-aren aurkezpena. 19:00etan: Supertramps filmaren aurkezpena. 20:30ean: ÒGauean argiÓ IV. edizioa San Agustin Kultur Gunean. 04 Durangoko Argizaiola saria Jose Luis Alvarez Enparantza ÔTxillardegiÕ. ABENDUAK 5, igandea. 12:30ean: Hitzaldia. Huntaz eta hartaz: errealitatearen eta ametsen geografia. Jose Luis Alvarez Enparantza ÔTxillardegiÕ. 12:30ean: Emanaldia. Kiko, Koko eta Moko pailasoak. Kafe Antzokian. 18:00etan: Hitzaldia. Lekuak literaturan. Bernardo Atxaga. 19:00etan: Hitzaldia. Emakumea eta literatura aztergai. ABENDUAK 6, astelehena. 11:30ean: Euskal Herrian Euskarazen 25. urteurrena. 12:30ean. Hitzaldia. Irudimenaren gereizpean. ÔTxilikuÕ. 18:00etan: Hitzaldia. Tranbiaren leihotik begirada bat. Unai Elorriaga. Kantaldia San Agustin aretoan. Chillida-Lekutik. Joserra Senperena, Jose Inazio Ansorena, Andoni Ega–a, Jon Maia eta Kirmen Uribe. ABENDUAN 7, asteartea. 12:30ean: Hitzaldia. Pentagramaren geografia. Mikel Markez. 17:30ean: Mahai-ingurua. Euskal Zinemaren egoera eta EiTBren erantzukizunak. J. B. Berastegi (IBAIAko lehendakaria), EPE/ APVko, Gidoigileen Elkarteko, Aktoreen Batasunako eta Zuzendari Berrien Plataformako ordezkari bana. Moderatzailea: Fito Rodriguez. 18:30ean: Aurkezpena. OAI: estandar ireki bat, Interneten liburuen datuak libreki trukatzeko proiektua. 22:00etan: Kantaldia. Nafarroako kantu zaharrak. Hiru Truku taldea. San Agustinen. ABENDUAK 8, asteazkena. 13:00etan: Omenaldi ekitaldia. Harrizko herriko oroi harri biziak. 17:30ean: Mahai ingurua. 25 urte eta gero... euskararen normalizaziorako erronkak.

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AKIGULA, 1545. urtean kaleratu zen lehenbiziko euskal liburua, Linguae Vasconum Primitae, Bernard Etxeparek idatzia, amod,iozko eta erlijiozko olerkiek osatzen duten lana. Ordudanik gaur arte hogei milatik gora dira argitaratu diren tituluak, gehiengoa XX. mendeko bigarren partean. Durango Merinaldeko Adizkideen Gerediaga Elkartearen altzora biltzen zen lagun taldeak eta hainbat promotorek, JosŽ Luis Lizundia, Leopoldo Zugaza, Francisco Amorrortu, Gabriel Aresti, Mikel Zarate, Ju‡n San Mart’n, Angel M. Ort’z Alfau, besteak beste, 1965. urtean, Santu Guztien egunean, Andra Mari elizpean, Durangoko Euskal Liburu eta Disko Azoka aurrenekoz antolatu zutenetik 39. edizioa betetzen da aurten. Landako erakustazoka iaz inauguratua, orain, aro berriko bigarren azoka izango dugu disfruta gai. Irribarre maite–oaz hartu dezakegu gaurko egoera berri gozoa hastapen harekin alderatuz. Ordu hartan, diktaduraren aldapan gora, liburu eta disko-sortak eskuetan Durangoraino etorri ziren parte hartzaileek hemeretzi stand bete zituzten. Han izan ziren Bizkaiko, Arabako, Nafarroako eta Gipuzkoako Aldundiak, eta orduko agintariek susmopean zituzten editorialak ere bai, Jakin, Itxaropena, Au–amendi, eta abar. Hala ere, jendeak eman erantzun gogotsuari kasu eginez, Gerediaga Elkarteak azoka urtero antolatzea erabaki zuen, eta honekin hogeita hemeretzigarrena da ospatuko dugun edizioa. Hobe izaten da beti konfiantza gehiegizkoan ez erortzea, baina gauza gara egun Durangoko Euskal Liburu eta Disko Azokak azoka hitzak merezi duen izaera edo ideia bera gainditu eta kultur erakusleiho ez ezik, euskal literaturaren eta diskogintzaren bizi taupadaren termometro ere bihurtu dela esateko. Eta jakina, beste ezer baino nabarmenagoa den egia, kultur antolakuntza horri eutsiz sortzaileak daude, gizonezkoak eta emakumezkoak, zibil, politiko, gizarte, giro eta ekonomi mailako aldaketa eta gora behera askoren ispilu izan den herri gunea Kultur Hiria bihurtzeraino bihotz bete lan egin zuen eta lan egiten ari den jendea.

Stand bai Durangoko Euskal Liburu eta Disko Azoka, aurten ere, sortzaile, editore eta hitzaren lagun guztien nahitaezko elkargune bizia izanen da

(Arantzazu), Paddy Rekalderen bigarren poesia liburua Bilbo dub kronikak (Susa), Felipe Juaristiren berriena Begi-ikarak (Erein) eta Galeusca poesia antologia, Luigi Anselmi Gau er-tzekoak eta Jon Gerediaga Fitola balba, karpuki tu Pamiela argitaletxearen eskutik. Xabier eta Martin Etxeberriak road-movie tankerako eleberria idatzi dute elkarrekin Itxoidazu CafŽ de Passy-n (Elkar). Narrazioak elkarrekin lotuz nobela idatzi du Pablo Sastrek Elurretan hotsak (Susa). Narrazioaren neurri luzera egin digu jauzi Juango Olasagarrek Ezinezko maletak (Susa). Urtzi Urrutikoetxeak Auzoak (Susa), Xabier Montoiak Elektrika (Susa) eta Patxi Ezkiagak Munduaren amaierako kalea (Kutxa) nobelak ekarriko dituzte. Zazpi ipuinez osatutako liburua argitara eman du Bertol Arrietak Txikira beti hordago! (Erein). Ipuin erotikoen bilduma egin du Juan Martin Elexpuruk Lehenengo aldia (Txalaparta). Elkarrek Ipuin izugarriak aurkeztu du, joan den hamarkadan kaleraturiko ipuinen antologia. Karmele jaioren estreinako liburua Hamabost zauri (Elkar). Iban Zalduak Itzalak (Erein), Karlos Linazasorok Glasolaliak eta beste (Alberdania) eta Mendekuaren graziaz (Erein), Eider Rodriguezek Eta handik gutxira gaur (Susa) eta Pako Aristik Gauza txikien liburua (Erein).

Itzulpena eta saiakera

Elkar gogoen lantegia

Narrazio adina poesia

Euskal Liburu eta Diskoen azokak karpa zuriari agur esan zionetik 271 stand biltzen ditu herdoil koloreko eraikin berri dotorepean. Garai batean Landakon egondako galdategiaren tximiniari zutik eutsi diote erakustazokaren aldamenean, eta gune berriak fabrika itxura hartzen du. Hor erakutsiko dituzte argitaletxeek, diskoetxeek, erakunde publiko zein pribatuek eta kultur talde zein gizarte arloko elkarteek euren ekoizpenak azokak iraun bitartean. Honela bada, aurten ere gaizki ibiliko gara esku hutsik itzuli nahi ez, baina patrika hutsik hurbiltzen bagara azokara. Ez ditugu, ez, diren denak aurkituko han, eta aipatu ezin ere ez hemen, baina pozteko moduan dago bisitariari eskaintzeko.

Literaturako labeak aurten eman duen nobedadeen zerrendan, batez ere, poesiaren alorra da azpimarratzekoa. Izen berrien artean izango ditugu Jon Aiastui Biolinaren jatorria (Elkar), Xabi Borda Birika zatiak (Susa) eta Gotzon Barandiaran Arrakalak (Susa), esaterako. Betaren eskutik hiru, Juan Ram—n Makuso Bizitzeak hil egiten du, J. Aldamizetxebarria Bihotzaren lautadak eta D. Tejero Izarrrak itsasoan hiltzen dira. Azken urteotan zendu diren bi idazleren olerki liburuak ere bai: Andolin Eguzkitzaren Arimaren ondoko ezkien artetik ibilki (Susa) eta Bitoriano Gandiagaren Adio (Elkar). Xabier Olasok Pupuan trapua haurrentzako olerki lana aurkeztu du. Horiez gain, Patxi Ezkiagaren Jaunarekin supazterrean

Coeetzeren Lotsaizuna kaleratu du Elkar argitaletxeak. Ereinek, berriz, Anna Franken Egunkaria. Natalia Ginzburgen Gure etxeko kontuak eta Agatha Christieren Orient Expresseko hilketa eta Roger Ackroyden hilketa Igela argitaletxearen eskutik. Euskararen inguruan Txillardegiren artikulu bilduma Euskararen aldeko borrokan (Elkar) eta komunikazio esparrua trinkotzeko ahaleginei buruz Aitor Zuberogoitiaren Bidegorriak hizkuntzetan (Elkar). Aitor Aranak 11 gay euskaldun elkarrizketatu (Txalaparta). Gizarteaz orokorrago hausnartu dute Bixente Serrano Izkok Bakezale gerlari horiek (Pamiela) eta Asier Blasek Atzoko eta gaurko harresiak (Txalaparta). Bere gogoetak plazaratu ditu, halaber, Filipe Bidart euskal presoak Bakartasunaz bi hitz (Txalaparta). JosŽ Luis Padr—n

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Del impresionismo al arte abstracto D

ESDE el pasado mes y hasta febrero de 2005, el Museo Guggenheim ofrece la oportunidad de disfrutar de una selecci—n de su Colecci—n Permanente en dos muestras complementarias: ÔDel impresionismo al arte abstractoÕ y ÔArte desde 1945: evoluci—n, diversidad y di‡logoÕ. En la sala 202 de la segunda planta del museo se propone el recorrido a travŽs de los cambios m‡s representativos producidos en el surgimiento de las vanguardias de la primera mitad del siglo XX. As’, una destacada selecci—n de los fondos de la Colecci—n Thannhauser nos acerca a las claves de los artistas m‡s destacados del impresionismo y posimpresionismo. Obras representativas de Renoir, Seurat, Van Gogh, etc. evidencian la diversidad de bœsquedas de artistas, hoy considerados ya cl‡sicos, que participan de la efervescencia creadora del Par’s de finales del XIX. En sus inicios la superaci—n del realismo se centra en la representaci—n de la realidad m‡s din‡mica, m‡s cambiante, m‡s borrosa, m‡s all‡ de la apariencia de las cosas. Centran sus investigaciones en la relaci—n de la luz y el color, rompen las composiciones cl‡sicas multiplicando los puntos de fuga, obligando al ojo a realizar recorridos sucesivos, y creando mœltiples puntos de vista. Un nuevo camino en la historia del arte es el que se inicia en Se–oritas de Avignon, de Pablo Picasso, expuesta en 1907 y considerada como los primeros pasos del cubismo. Picasso y Braque revolu-

Fernande con mantilla negra. Pablo Picasso

Algunos c’rculos (Einige Kreise). Vasily Kandinsky

Una cuidada selecci—n de obras nos acerca a las claves de los artistas m‡s destacados del impresionismo y posimpresionismo cionar‡n la pintura con el an‡lisis de la realidad expresado por medio de geometrizaciones. La multitud de posibilidades del cubismo se nos muestra en obras de Fernand LŽger, Robert Delaunay, Juan Gris y Frantisek Kupka. No faltan en esta exposici—n opciones de tendencia m‡s emocionales como Marc Chagall.

Los planteamientos pl‡sticos de Paul Klee, Piet Mondrian y Vasily Kandinsky, determinantes en el camino hacia la abstracci—n, tienen un importante lugar en esta exposici—n, y se muestran como el perfecto broche para engarzar la exposici—n que se desarrolla en las salas 203 a 209, dedicada a la segunda mitad del siglo XX.

ÔArte desde 1945: evoluci—n, diversidad y di‡logoÕ es una muestra de los fondos de la Colecci—n Permanente centrada en los m‡s importantes movimientos y corrientes del arte a partir de 1945. El final de la Segunda Guerra Mundial tambiŽn traslad— el centro de interŽs art’stico de Par’s a Nueva York, donde esta escuela aglutin— los que ser’an los protagonistas del panorama art’stico: los expresionistas abstractos. Esta muestra nos acerca algunos de los m‡ximos representantes de este movimiento, en su diversidad, desde las propuestas expresivas de Jackson Pollock m‡s pr—ximas al action painting, hasta las de Mark Rothko o Robert Motherwell m‡s pr—ximos a utilizar el color en su aspecto m‡s emocional y evocador. En este lado del Atl‡ntico, los

artistas europeos centran sus esfuerzos en el intento de superaci—n de la abstracci—n geomŽtrica, de donde surgi— el conocido como arte informal, en el que la libertad art’stica, el predominio de las tŽcnicas experimentales y la diversidad de medios ser‡n sus caracter’sticas m‡s genŽricas. Obras de Antoni Tˆpies, Antonio Saura, Pierre Soulages son expresivas de estos lenguajes pl‡sticos. De los a–os sesenta obras de Ellsworth, Frank Stella, Pablo Palazuelo muestran las bœsquedas de americanos y europeos en esa importante dŽcada, mientras toda una sala, la 209 se dedica a la obra de Anselm Kiefer de los a–os ochenta y noventa, artista representativo del movimiento neoexpresionista alem‡n. Celia Rodr’guez

Las vanguardias rusas en la BBK

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ASTA el 12 de diciembre la sala de exposiciones de la BBK en Gran V’a nos acerca ÔUna visi—n sobre las vanguardias rusasÕ, en la que obras que van desde los inicios del siglo XX en la Rusia Imperial hasta la Revoluci—n SoviŽtica nos muestran algunas de las claves de la gŽnesis del arte contempor‡neo. Martine Soria, comisaria de la exposici—n, ha seleccionado una treintena de obras representativas de las vanguardias rusas, acompa–adas de diversos objetos y bibliograf’a que contextualizan desde una estricta perspectiva historicista la significativa trascendencia de las vanguardias rusas. Artistas como El Lissitsky, Exter, Gontcharova, Klioune, Leporskaya, Malevitch, Pevsner, Popova, Zuperman, Rodtchenko, Filonov, Archipenko, Shevtchenko, Ermilov, FŽrat, Klucis, Kogan, Pu-

ni o Vassilief evidencian la diversidad de posicionamientos y lenguajes en la gŽnesis de la Uni—n SoviŽtica, en la que la revoluci—n triunfante entusiasm— a grupos de artistas que se plantearon la renovaci—n de los lenguajes en estrecha conexi—n con las tareas de la revo-

idea de artista-artesano, creador de un arte minoritario y restringido. La Segunda Guerra Mundial cierra el ciclo de las vanguardias hist—ricas en los pa’ses socialistas donde se impone un arte oficial, realista en lo formal e idealizado en el contenido, sin relaci—n con la eclosi—n de

La Segunda Guerra Mundial cierra el ciclo de las vanguardias hist—ricas en los pa’ses socialistas donde se impone un arte oficial luci—n. Es el momento en el que surge una nueva forma del llamado arte œtil que le da un car‡cter diferenciador, a pesar de las semejanzas, al arte soviŽtico con respecto al de los pa’ses capitalistas. El artista de la revoluci—n relaciona su trabajo a la industria para elaborar un arte de masas, en oposici—n a la

experiencias anteriores a 1930. Muchos de estos artistas tendr‡n el punto de conexi—n en la capital del arte, Par’s, en el que sus experiencias pl‡sticas se ver‡n impulsadas y favorecidas por el comœn deseo de construir un nuevo lenguaje, un nuevo arte. C. R.

Le Pont de S•vres et le village de S•vres, Alexandra Exter

10 MIRADOR

EQUIPAJE DE MANO

Poes’a en su punto

E A prop—sito de vampiros RAMON siente debilidad por Dr‡cula, el Pr’ncipe de las Tinieblas. Volvi— a confes‡rmelo ayer, primera noche de plenilunio. ÐS’, s’ lo sŽ muy bien Ðme dijo tratando de justificarseÐ, Dr‡cula es cruel, s‡dico, rebelde, violento, vengativo y, por si todo eso no fuese suficiente, un rijoso de tomo y lomo. Pero cuando la gente le ve en la pantalla se siente liberada de extra–as y misteriosas tendencias. ÁAh, no, no me lo discutas! Dr‡cula viene a ser entonces una especie de psicoanalista que recibe de forma pasiva las descargas de todos los reprimidos que vamos a verle al cine. Lo que a mi amigo le gustan son los vampiros de verdad, es decir, los vampiros que no pueden recibir en su cuerpo la luz del sol sin desintegrarse y no soportan la visi—n de una simple cabeza de ajos. ÐPor cierto Ðme dice ahoraÐ lo del ajo me ha intrigado siempre ÀPor quŽ crees tœ que repugna tanto a los vampiros? Le digo que el ajo va muy bien contra la arterioesclerosis, porque estimula la circulaci—n de la sangre. Le digo, tambiŽn, que es muy eficaz contra el asma, la bronquitis y la tuberculosis. ÐPuede que no resulte muy apropiado para el delicado paladar de las damas Ðsigo explic‡ndoleÐ, y puede, asimismo, que tampoco convenga a los caballeros que las cortejan pero te aseguro que no hay nada m‡s sano que un buen ajo. Todas estas explicaciones no satisfacen a mi amigo. Lo œnico que quiere saber es por quŽ ahuyenta a los vampiros. Sigo sin darle la respuesta que espera y le digo que el ajo, segœn Plinio, aleja a las serpientes y que los pastores de los C‡rpatos todav’a se frotan las manos con ajos para que las serpientes no ataquen al ganado. ÐPero dime: Àpor quŽ ahuyenta a los vampiros? Ðsigue pregunt‡ndome. No tengo m‡s remedio que dec’rselo. Le explico que el ajo impide la formaci—n de co‡gulos en la sangre y que, por ello, protege de los accidentes cardiovasculares. ÐLo m‡s f‡cil, amigo m’o Ðle digo finalmenteÐ, es que Dr‡cula no sienta, en realidad, ninguna aversi—n por los ajos, pero que hiciese correr la voz de que le repugnaban, para fomentar as’ su consumo y asegurar que la sangre fluyese de sus v’ctimas suavemente, sin co‡gulos, como un exquisito manantial de vida. Javier Tomeo

STANDO el se–or Don Peri–—n empe–ado en seducir un d’a a la semana a su mujer, Do–a Veva Tinto, para mantener encendida la llama de la pasi—n en el matrimonio, decidi— que no estar’a mal dedicar un jueves al mes a la poes’a. As’ pues, invit— a su esposa a cenar en el restaurante La Ambros’a, famoso por sus platos y sus caldos, y por la medida y cadencia con los que eran servidos, en un ambiente que conjugaba magistralmente la mŽtrica del espacio disponible con el nœmero de mesas, decoradas en funci—n de la l’rica que iban a saborear: una solitaria vela, encendida junto a una œnica rosa que florec’a en un minœsculo jarr—n de cristal. Como la se–ora no ve’a nada sin sus gafas, que el se–or Peri–—n hab’a escondido antes de salir para potenciar a sus ojos el efecto on’rico del convite, su marido se apoder— de la carta con adem‡n delicado. ÒCari–oÓ, le dijo, entonando la voz: ÒCreo que deber’as probar el Salto de cabello de ‡ngel con quisquillas tiernas sobre lecho de pŽtalos de camelia en salsa del para’so aderezada a la BaudelaireÓ. Emocionada por el reciŽn descubierto talento de su marido para la declamaci—n de versos largos, la se–ora Ve-

va, apret‡ndose el pecho con ambas manos y no pudiendo contener una arrebatada salivaci—n, contest—: ÒLo que tœ quieras, RubŽn Dar’o m’oÓ. DespuŽs de escoger a su vez, el se–or llam— al escu‡lido camarero y le repiti— escrupulosamente los nombres de los platos elegidos, enfatizando en los acentos y las pausas. La cena fue un recital de sabores exquisitos, servidos con cierto spleen por parte del macilento gar•on. A los postres, y

aprovechando que Veva estaba un poco bebida, el se–or Peri–—n le susurr—, llam‡ndola por su nombre completo: ÒGenoveva, quiero que esta noche me cubras con tus besos, besos de color rojo rub’, suavemente afrutados, con aroma a mora salvaje y sotobosque, redondos en boca, con cuerpo y persistentes en el paladar, tal y como s—lo tœ sabes d‡rmelosÓ. La se–ora, sin poder contenerse, se levant— de su silla y le propin— al se–or un morreo tal y como

s—lo ella sab’a d‡rselo, lo cual provoc— el desplome de la botella de vino que hab’a inspirado a su marido, con orgi‡stico estrŽpito y subsiguiente charco carmes’ en el suelo (suceso que fue aplaudido por el resto de los Ðhasta entoncesÐ aburridos comensales). Huelga decir que, aquella noche, el se–or Don Peri–—n am— a su mujer como s—lo saben amar los poetas. Enrique Mochales

S’ndromes fatales ÒNo soy culturalista, lo que pasa es que soy culto y se me nota.Ó Guillermo Carnero

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IGAMOS para empezar bien que la columna se remonta al ret—rico siglo XIX. Que es eso que se publica en un envidiado recuadro y ostenta firma. Dentro del recuadro, el titular propenso a escribir m‡s sobre lo humano que sobre lo divino puede poner que un tal Nacho Vidal, actor porno, ’dolo de masas en Catalu–a, confiesa haber le’do El Principito, y lo mucho que le emociona ese hecho. Pla dice que el periodista debe dejar a un lado emociones, ver el mundo como una lucha entre ara–as y moscas. Pero al columnista le est‡ permitido hacer lo contrario, escribir a partir de sus emociones, lanzarse sin objetividad a hablar, por ejemplo, sobre lo que espera a los reto–os en el mercado laboral si no tienen un miembro que despierte tanta admiraci—n como el de Nacho Vidal: temporalidad, endurecimiento de las condiciones laborales, salarios bajos, paro. Aunque no sirva de nada. Antes los columnistas ten’an m‡s poder, lograban alterar criterios: Hay quienes afirman que Ortega, Žl solito, consigui— cargarse la Monarqu’a y traer la Repœblica (que luego tampoco le gust—).

Uno no s—lo no es capaz de modificar una sola intenci—n de voto, sino que ni siquiera lo es de conseguir que se ponga a secar, colg‡ndolos un ratito de los pies, a los que repiten tontamente punto y final o emplean vergonzante en lugar de vergonzoso. La columna es el serm—n rencoroso o el an‡lisis desapasionado, el panfleto falaz, la opini—n solemne, el veneno de seiscientas palabras que se publica con regularidad y ocupa un espacio predeterminado en los peri—dicos. Quiz‡ est‡ trufada de citas. No faltan individuos que se proclaman enemigos de Òlas frasesÓ, que las emplean poco en sus columnas did‡cticas y como pidiendo perd—n por la osad’a. Acusan de culturalistas y aun cosas peores a los usuarios desinhibidos. ƒstos, como se saben muchas frases, probablemente murmuren, con una sonrisa malŽvola, la de Sacha Guitry: ÒSi los que hablan mal de m’ supieran lo que yo pienso de ellos, hablar’an de m’ quinientas veces peorÓ. Recordemos que Walter Benjam’n dec’a que a Žl lo que de verdad le gustar’a es hacer un libro de citas. Tœ, ay, confiesas tener el s’ndrome de Godard, lo que sig-

nifica que soliviantas innecesariamente a tus contrarios metiendo varias citas en unos art’culos de intenci—n poco orientadora, como hac’a el cineasta francŽs en sus pel’culas. Seguramente crees, con tus fans incondicionales, que las citas prestan un especial magnetismo hasta a un discurso sobre los jueces que embargan por un euro al infeliz pero se muestran poco diligentes a la hora de perseguir el dinero sucio de algunos pajarracos, dando por buenos ciertos alzamientos de bienes. Consideras que una frase de diamante puede resumir perfectamente varios p‡rrafos de gacetillero corriente sobre la columna como reflexi—n intima o entretenimiento literario y sobre la palabra misma, neologismo tomado de una metonimia. Leopoldo Mar’a Panero, consciente de su imagen de pirado integral, afirma que cita para que le tomen en serio. ÒTodo se ha dicho ya, y uno no hace sino llegar tardeÓ, dijo a su vez el cuerdo moralista La BruyŽre acechado por Òoiseaux lugubres de cris continuelsÓ. Existen autores que prefieren pasar por modestos plagiando que por pedantes citando. A Enrique Vila Matas, sin duda, algo pro-

fundo le impulsa a preferir lo segundo y le va estupendamente. El Žxito de la columna reside en su poder de convocatoria. Uno se pregunta a veces si le leer‡n los que piden esos indultos que sacan de quicio, los obsesos de la bicicleta est‡tica, los creadores de virus inform‡ticos, los payasos que alguna vez ha pasado por el chino... Por supuesto, hay diferencia entre los columnistas que citan, con calzador o sin Žl. Unos sacan la frase m‡s o menos lapidaria de sus nobles lecturas y otros, en cambio, emplean unos manuales tirando a cutres (con t’tulos algo as’ como Las mejores m‡ximas de todos los tiempos) para este menester. Los buenos lectores lo notan enseguida, lo mismo los que recitan a Neruda en las tabernas de las Siete Calles que quienes padecen el s’ndrome de Elfriede Elinek, f—bicos sociales que temen las presentaciones de libros, las lecturas pœblicas, las conferencias, y toda org’a de conversaci—n tanto como Joyce tem’a las tormentas o Dostoiewsky la posibilidad de ser enterrado vivo. Antonio Otero Garc’a-Tornel

11 Luis Mateo D’ez

ÒEscribo para vivirÓ En la œltima novela de Luis Mateo D’ez (Villablino, Le—n, 1942), ÔFantasmas del inviernoÕ (Alfaguara), hay una ciudad cubierta por la nieve, lobos que acuden a ella desde los montes y un ni–o asesinado en el hospicio. La historia que cuenta, desarrollada durante la posguerra espa–ola, tiene un car‡cter legendario: segœn su propio autor, se trata de Òuna leyenda oscura, terrible. Una leyenda que no estar’a mal olvidar pero que ser’a una desgracia perderÓ

L

UIS Mateo D’ez pronuncia cada palabra que dice con rotundidad y sumo cuidado, como un pintor empe–ado en lograr la m‡xima nitidez en cada uno de los trazos que componen su pintura. ÐCreo que usted escribe obras de creaci—n desde los doce a–os. ÀC—mo recuerda aquellos tiempos de iniciaci—n a la escritura literaria? ÐUna infancia como la m’a, marcada sobre todo por el af‡n de que me contasen cosas, es como una infancia marcada por el alimento de la imaginaci—n y de la fantas’a. Y, derivado de ese interŽs por escuchar cosas, comencŽ enseguida a escribir. Como recuerdo lejano me queda el haber hecho el aprendizaje de lo imaginario en la oralidad. Y un elemento un poco determinante de aquello es que a m’ no me gustaba nada que la gente me contara las cosas que le pasaban, y a m’ no me interesaba nada contar lo que a m’ me suced’a, sino que hab’a un camino mucho mayor de invenci—n. Es una huella lejana, puramente casi humor’stica o ir—nica, y yo creo que eso tampoco marca nada. ÐLa suya es una narrativa muy personal, alejada de las modas. ÐYo siempre he tenido unas convicciones muy fuertes sobre lo que me gustar’a hacer, que es escribir buscando la intemporalidad y la universalidad, que lo que escriba tenga un destino m‡s all‡ de la cercan’a de la lectura. Esto no tiene nada que ver con las modas. Si tu reto literario es hondo, profundo, y las f‡bulas que quieres escribir intentan comprometer y emocionar, conturbar a quien las lee, tu convicci—n est‡ por encima de cualquier moda. ÐEn las historias que narra, tiene mucha importancia el azar o la casualidad. ÐYo tengo una conciencia gran-

de de nuestra fragilidad. Una parte de esa fragilidad, que nutre mucho las historias que cuento, tiene mucho que ver con el azar, con la casualidad. Siempre digo que cuento historias que narran aventuras a la vuelta de la esquina, y que en la vida, cuando uno trasvasa una esquina, est‡ siempre predispuesto a que suceda algo incontrolado, algo azaroso. Normalmente, cuando pasa algo de eso, arranca una historia de las que a m’ me gusta contar. Generalmente, no suelo escribir f‡bulas sobre grandes cosas, grandes viajes y grandes aventuras sino sobre peque–as cosas, porque hay peque–as cosas en la vida que te cambian. ÐUno de los grandes cimientos de sus obras son los di‡logos. ÐEl aprendizaje que contaba antes de lo imaginario en lo oral era una manera, primero, de escuchar y, luego, de leer. Yo creo que tengo buen o’do, y de ah’ proviene una propensi—n razonable hacia la voz de los personajes. Me interesa mucho el mundo interior de ellos, porque mis personajes tienen un mundo interior muy profundo, pero yo les conozco a travŽs de lo que dicen. C—mo se expresan y quŽ dicen tiene primac’a sobre lo que yo pueda contar sobre ellos. ÐEn sus narraciones, hay una mirada hacia lo oculto, hacia el otro lado de las cosas. ÀLo que no est‡ a simple vista es tan real como lo visible? ÐYo creo que la aventura de escribir es la aventura de descubrir, y la aventura de descubrir es la capacidad que uno tiene de llegar a ese lado oscuro, a ese interior insondable, hondo y profundo, donde hay parte de los secretos de lo que somos. Yo creo que el arte, en general, hace ese tipo de incursi—n, desde el interior de uno mismo o en la bœsqueda del interior de los dem‡s. Me parece que es un terreno bueno, donde lo oculto es siempre m‡s apasionante que lo aparente.

ÒComo recuerdo lejano me queda el haber hecho el aprendizaje de lo imaginario en la oralidadÓ

ÐUsted es un escritor muy imaginativo, de gran inventiva. ÀLa imaginaci—n es una forma de indagaci—n? ÐYo creo que imaginaci—n, memoria y palabra son los tres elementos sustanciales del escritor, y la imaginaci—n es el dispositivo que pone en marcha todo lo dem‡s. S’, yo creo que imaginar es indagar. Con la imaginaci—n se descubren ‡mbitos distintos de los reales, y esos ‡mbitos distintos de los reales, que son los ‡mbitos imaginarios, suelen ser, cuando se acierta con ellos, un espejo complejo de lo que somos. ÐÀCelama es el sentido de la vida cont‡ndose a s’ mismo? ÐS’. Celama, m‡s all‡ de un territorio de ficci—n, es la pesquisa sobre un sentido de la vida, una manera de vivir y una filosof’a de la vida, o un pensamiento sobre

c—mo se vive y por quŽ se vive o por quŽ se ha vivido as’, una inquisici—n a lo largo de los siglos, a travŽs de lo que pueden ser las culturas rurales. Y la verdad es que la pretensi—n, en las novelas, era buscar el que la vida se contara a s’ misma. ÐÀLas par‡bolas son autŽnticos malabarismos? ÐLas par‡bolas suelen proponer muchas significaciones. No dir’a yo que sean necesarios malabarismos, pero lo que s’ hace falta para construir una buena par‡bola es una conciencia fuerte de la historia que vas a contar, para que esa historia ofrezca muchas posibilidades, muchos espejos, muchas significaciones y todas la sugerencias posibles. Que no sea una historia que se cierra en s’ misma. ÐDice JosŽ Mar’a Merino que Òno creo demasiado en los gŽnerosÓ. ÀCree usted en ellos? ÐLos gŽneros sirven para estratificar las distintas posibilidades narrativas. Lo que est‡ claro es que el tiempo ha multiplicado mucho la contaminaci—n entre todos los gŽneros, y, al final, hoy d’a, se hace un uso m‡s inmoderado de ellos, tanto que, a veces, se les hace que pierdan sus relieves. ÐAlguna vez ha dicho usted que Òel que m‡s lee es el que m‡s viveÓ. ÐEl que se nutre del arte, en general, le da intensidad a la vida. El que se nutre del arte literario, de las novelas, adem‡s de darle intensidad a la vida, vive en ese otro ‡mbito que est‡ en la ficci—n, que es otra manera de vivir. Si adem‡s de vivir la vida real vives la vida imaginaria, a travŽs de las novelas,

vives mucho m‡s. Porque, adem‡s, la ficci—n siempre le devuelve a la vida grados de conocimiento, de sabidur’a y de experiencia. ÐGran nœmero de escritores reconocen que dejar’an de escribir pero no de leer. ÐYo tambiŽn. Escribir es ese alimento intenso y apasionante de vivir, y yo podr’a decir que escribo para vivir, pero, ante la disyuntiva de leer o escribir, que espero que no se plantee nunca, elegir’a leer antes que escribir. ÐÀTodas las narraciones que un escritor escribe son, en el fondo, la misma? ÐTodas son la misma con notables variantes en la manera de ser desarrolladas. El pintor pinta el mismo cuadro, el compositor compone la misma pieza y el escritor

ÒLa aventura de escribir es la aventura de descubrirÓ escribe la misma novela. Esto es una gran verdad, y, como bien sabemos, por suerte, una gran mentira. Porque uno puede estar sobre unas determinadas claves, pero no todos los cuadros son iguales ni las novelas del escritor son las mismas ni las sinfon’as que se componen son parecidas. ÐÀLa locura de Alonso Quijano demuestra que los libros tienen algœn tipo de veneno? ÐS’. Tienen un veneno que se inocula en el alma y que es el mejor veneno posible. Es, de todos los venenos que existen en el mundo, aquŽl que de verdad paga el tiro. O sea, que merece la pena. Roberto Ruiz de Huydobro

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Dos d«Ors S E dice que hay dos Eugenio d«Ors: el d«Ors de Barcelona y el d«Ors madrile–o, el nacionalista catal‡n y el nacionalista espa–ol. En ninguna de estas dos categor’as se hallaba Xenius c—modo del todo, y muestra de ello es que cincuenta a–os despuŽs de su muerte se le siga considerando un traidor en Catalu–a y un intruso en Madrid. En los a–os diez del siglo pasado un d«Ors treinta–ero se hab’a convertido en icono de la vida pœblica catalana, con su glosa diaria en el regionalista La Veu Ðfirmadas con el seud—nimo que le har’a popular: XeniusÐ y ostentando puestos destacados en la Mancomunidad, a la que le llev— su valedor, el pol’tico Prat de la Riba. Pero a la muerte de Žste, el nuevo director, Puig I Cadafalch, acusa a d«Ors de malversaci—n de fondos (el asunto fue que un orgulloso Xenius se neg— a presentar un presupuesto posterior a la fundaci—n

de una biblioteca). Se ve obligado a dimitir, en un episodio que ser‡ conocido como Òla defenestraci—n de XeniusÓ y que marca en su vida un punto de inflexi—n. ÒSin demasiado esfuerzo abandono la fiesta de las sardanas privadasÓ, escribe, poco antes de iniciar su acercamiento a Madrid. A–os atr‡s, d«Ors ya hab’a intentado instalarse en el Foro, present‡ndose a una c‡tedra de Psicolog’a, que le arrebat— un bur—crata que ten’a m‡s contactos. Cuentan que d«Ors demostr— saber m‡s que los miembros del tribunal y que Žstos no se lo perdonaron. ÒYo soy el que no hace oposicionesÓ, dir’a en adelante, aunque se quedara con las ganas... El caso es que en 1923 encontramos al fil—sofo ya viviendo en Madrid Òen un oto–o de secretas melancol’as y pesadumbresÓ. En un primer momento es muy bien recibido por Azor’n, por la Residencia de Estudiantes, la Revista de Occidente, aunque posteriormente ten-

dr’a sus piques y su rivalidad con Ortega. Sigue con sus glosas que ahora publicar‡ en espa–ol en ABC (en Madrid a las glosas les llamaban ÒlosasÓ). Primo de Rivera le nombra ÒacadŽmico regionalÓ... Pero d«Ors no acaba de entrar en Madrid y se traslada a Par’s, donde publica en francŽs sus libros. En Par’s le sorprender‡ la guerra civil, y sin pensarlo mucho pasa a Espa–a a la zona nacional, y ocupa la direcci—n del reciŽn creado Instituto de Espa–a. Simplificando, podr’a decirse que d«Ors lleg— al falangismo refundiendo su sindicalismo y su catolicismo estŽtico. Lo mismo que hay dos d«Ors en lo pol’tico los hay en lo personal. Por una parte era un elitista y un estirado (ÒEste hombre, no podr‡ pedir dos huevos fritos con naturalidadÓ, escribi— de Žl Josep Pla); por otra tiene rasgos de payasis-

Quiso convertirse en un divulgador de la filosof’a, llevarla a la vida cotidiana mo, como cuando se presenta vestido de Goethe en la casa de una marquesa o cuando en Pamplona jura las armas de falangista como don Quijote. Lo que importa de d«Ors es su obra, la creaci—n de un nuevo gŽnero literario: la glosa, en el que, con el formato de art’culo period’stico, caben todos los gŽneros: poes’a, relato, cr’tica, ensayo, autobiograf’a. D«Ors escribi— unas 18.000 glosas que luego refund’a en libros en torno a un tema.

El Glosario

D«Ors, Dal’ y Lidia de CadaquŽs

A

L poco de morir d«Ors, se public— una novela p—stuma, Lidia de CadaquŽs, con ilustraciones de Salvador Dal’. En este libro, d«Ors recupera la figura de Lidia NoguŽs de Costa, una pescadora de CadaquŽs, en cuya casa se hosped— un verano. Xenius era un veintea–ero huŽrfano de madre y Lidia, que tendr’a unos cuarenta, hizo las veces de madre para Žl. Lidia era una comadre pero con gran influencia; una justiciera muy respetada en el pueblo. Su madre hab’a sido la vieja Sabana, la œltima gran bruja de CadaquŽs. CadaquŽs era entonces una sociedad matriarcal, era un pueblo perdido al que no se pod’a llegar por carretera. Un caminito por la costa la comunicaba con Figueres. Los hombres se hac’an a la mar durante meses y las mujeres eran las que dominaban en el pueblo. Tanto que a los hombres se les llamaba por el nombre de sus mujeres. El marido de la Lidia era el Lidio. Lidia se convirti— en una verdadera protectora para Xenius. Le preparaba langostas y bogavantes, moluscos, meros, lubinas... Quiz‡ estuviera enamorada de Žl. Le’a los peri—dicos y gacetas que llegaban al pueblo y se indignaba con las campa–as period’sticas que orquestaban contra Xenius. Una noche d«Ors se hizo a la mar con uno de los hijos de la Li-

dia, y volvi— mareado y vomitando. Lidia le ech— la bronca a su hijo, y Žste le recrimin— que se preocupara m‡s de los extra–os que de su propia familia. ÒLa miel es m‡s dulce que la sangreÓ, le contest— Lidia enigm‡ticamente. Cuando d«Ors abandona CadaquŽs, Lidia sigue sus escritos en la prensa y empieza a creer que d«Ors se comunica con ella por medio de la escritura. Entra en una especie de delirio paranoico. Se cree que ÔLa bien plantadaÕ, personaje de una novela de Xenius, ser’a una encarnaci—n de ella misma. Ve mensajes ocultos en todas las frases de d«Ors. Por ejemplo d«Ors publica su ensayo Poussin y El Greco, y Lidia dice que Poussin es El Pusa, un pescador de CadaquŽs, y El Greco es un griego que buscaba coral por las calas de la zona. La suerte de Lidia empieza a cambiar cuando hay un incendio en la casa de la madre de el Lidio, a la que llamaban la Rata, porque era muy avariciosa. La Rata, que muere en el incendio, guardaba todo el dinero en el forro de un colch—n. Pero ese colch—n desaparece y nadie sabe quien ha cogido el dinero. La polic’a toma declaraci—n a el Lidio (el pueblo cree que ha sido Žl el causante), que entra en un estado de atontamiento y se ahorca a los pocos d’as. Ya Lidia entra en una crisis paranoica total, abandona su casa, aquejada por las deudas, y se va a vivir a una cueva, con sus dos hijos, Honorio y Ulises, los cuales se han dado a la bebida.

Al final acab— zaf‡ndose de puestos y honores (siempre ostent— alguno, o varios simult‡neamente: la biograf’a de d«Ors parece m‡s que una biograf’a un curr’culum vitae) y cambi— su caser—n madrile–o del barrio de los Austrias por una ermita en Vilanova i la Geltrœ; all’ pas— sus œltimos a–os, su particular retorno a los or’genes. D«Ors, bas‡ndose en S—crates y los enciclopedistas franceses, quiso convertirse, con sus glosas y su pensamiento fragmentario, en un divulgador de la filosof’a ÐÒuna metaf’sica de andar por casaÓÐ, llevar la filosof’a a la vida cotidiana y hacerla comprensible, a pesar de lo que una vez le dijera a una secretaria suya a la que dictaba una glosa. ÒÀSe entiende bien? Pues vamos a oscurecerlo un pocoÓ.

Eugenio d«Ors. Foto Muller

Lidia y sus hijos creen que han dado con un yacimiento de radio y piden asesoramiento por carta a Xenius, a diversos abogados, ingenieros, etc, para garantizar el monopolio, pero todo con unos tŽrminos tan delirantes que no les contestar‡ nadie. Lidia se ha convertido en una bruja y los ni–os del pueblo le tiran piedras (aunque hay otros ni-

nero para que pudiera ir a Par’s por primera vez. A–os m‡s tarde le vender’a su peque–a caba–a Ðapenas cuatro metros cuadradosÐ que luego Dal’ transform— en la famosa casa de Port Lligat. Pero sobre todo Lidia le ense–— a realizar las m‡s incre’bles asociaciones de ideas, es inspiradora del famoso ÒmŽtodo paranoico cr’ticoÓ en que se basa la pintura

Durante su estancia en CadaquŽs, d«Ors se hosped— en casa de Lidia, una pescadora con gran influencia y muy respetada en el pueblo –os, los hijos de los veraneantes, como el peque–o Salvador, que van a hablar con ella).

Dal’ Dal’ alucinaba con Lidia de CadaquŽs y se la presenta a Bu–uel y a Lorca como si fuera un bicho raro. Pero Lidia escribe a Dal’: ÒEstoy content’sima de ustedes que no os avergonz‡is de estar en medio de las brujas que muchos se dan vergŸenza de tener relaciones con ellas porque tienen falta de culturaÓ. Lidia le prest— a Dal’ algœn di-

de Dal’. ÒLidia pose’a el cerebro paranoico m‡s magn’fico, aparte del m’o, que nunca haya conocidoÓ. ÒLidia, Lorca y Gala son mis dioses tutelaresÓ, dijo Dal’, que titul— uno de sus cuadros La miel es m‡s dulce que la sangre. Hacia 1920 Ðquince a–os despuŽs de su estancia en CadaquŽsÐ Eugenio d«Ors es invitado a unos juegos florales en la zona. En compa–’a de unos j—venes poetas se trataba de subir a un monte muy escarpado (Sant Pere de Roda, donde hab’a ruinas de un monasterio y se divisaban tierras y mares,

D«ORS es el creador de un nuevo gŽnero literario: la glosa. En la glosa, bajo la apariencia de art’culo period’stico o columna, entran todos los gŽneros: poes’a, novela, cr’tica, ensayo. D«Ors escribi— unas 18.000 glosas que luego refund’a en libros en torno a un tema. Se le ha comparado mucho con Ortega, pero d«Ors es m‡s creador que Ortega: en las glosas parte de peque–os relatos, poemas en prosa, vivencias personales, para Òelevar la anŽcdota a categor’aÓ. D«Ors, bas‡ndose en S—crates y en los enciclopedistas franceses, quiere ser un divulgador de la filosof’a, Òuna metaf’sica de andar por casaÓ, Òuna filosof’a de batallaÓ. ÒFilosof’a es contemplaci—n inscrita en la acci—nÓ. ÒFilosof’a es adolescencia renovadaÓ... parte de Espa–a y parte de Francia) en el Ampurdan. Lidia, que segu’a por la prensa los avatares del escritor, se presenta all’ tambiŽn y tiene lugar un m’tico reencuentro. D«Ors sube la monta–a a caballo, en un d’a de fuerte tramontana (la tramontana dicen que es la causa de que haya tantos locos en CadaquŽs), y Lidia le sigue, no quiere subir al caballo, aun con las alpargatas rotas. ÒYa hemos llegado al monte CarmeloÓ, dice cuando alcanzan la cima. Luego desaparece. Esto impresiona fuertemente a d«Ors para quien su carrera literaria Ðsobre todo tras la defenestraci—n de XeniusÐ era una especie de Calvario. El caso es que d«Ors, lo mismo que Dal’, no quiere considerar a Lidia una simple paranoica. D«Ors escribi—: ÒLo malo de los que sufren man’a persecutoria es que tienen raz—nÓ. El libro de d«Ors termina con un reencuentro en las regiones celestiales... ÒFill meuÓ exclama la pescadora. ÒPax madrinaÓ, contesta el escritor. Episodio que se entiende como la absoluci—n que recibe d«Ors en el cielo de su defenestraci—n en Catalu–a. Lidia de CadaquŽs es la madre tierra. As’s Lazcano

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Ipuin bat irakurtzeko

M

ODAN dagoelako gurasoak arduraturik agertzea semealabek irakurtzeko duten zaletasun urriagatik (eurak irakurzaleak izan zein ez); frogatu digutelako irakasleek zailtasunak dituztela umeen eta liburuen arteko elkarraldia luzatzeko, hezkuntza-sisteman gora egin ahala (nahiz eta hezitzaileek horren erantzukizuna izan, neurri batean); liburuei destaina egiten dioten axaleko ikus-entzunezko materialen eta material digitalen (kritikagarri baina miresgarrien) kontsumoa orokorra delako; ez irakurtzeko eskubidea aldarrikatzea jarrera snob baina erresultoia delako (gehiegi irakurtzen ez den gizarte batean); liburutegi esatea hauxe esatea delako: Òdoako zerbitzu publikoa, non biztanleriaren erdia inoiz ere sartzen ez denÓ; argitaletxeak didaktismo grisaren narrua argitzera zetozen liburu modernoak kaleratzen hasi ziren urte baikorrak igaro zirelako; saturazio hirukoitza badelako (merkatuaren saturazioa, ikuspegien saturazioa eta erosleen poltsikoaren saturazioa, euroei tentuz fereka egin beharrean baitaude, hila bukatu orduko ihes egin ez diezaieten); irakurzaletasuna sustatzeko argudio guztiak usaturik daudelako, eta norberak ere ez dakielako ez errezetarik,

E

ez magiarik haiek berriztatzekoÉ (eta gainera, ni neu konforme eta esker oneko nagoelako irakurle gaztetxoenganako)É tarte honetaz baliatuko naiz, adin guztietako umeentzako ipuin baten bidez, lehen pertsonan (bakoitzak bere izena eta bere ezaugarriak egokitu ahal izan arren) uste hau adierazteko: irakurtzea hautu pertsonala da, hiru urratsetan egin beharrekoa. Hiru urrats horiek honako hauek dira: hurbiltzea, ezagutzea eta esperimentatzea. ÒOrain dela aspaldi-aspaldi, txikitan, etxe handi batean bizi nin-tzen. Etxe hartan sala handi bat zegoen, eta salan armairu handi bat, eta armairuan liburuak, baina nik ez nien kasu txintik egiten. Gau batean, zarata batek iratzarri ninduen. Salatik zetorren. Argia piztu, eta hormako zulo batean bizkor ezkutatzen ari zen zerbait ikusi nuen. ÐSagutxo batÉ Noski! Liburu artean beti ibiltzen da saguren bat. Harrapatu egin behar dut: andere–ok esaten du sagu horiek sekretu asko jakiten dituztelaÐ pentsatu nuen neure artean. Saguaren ahotsak harrituta utzi ninduen, pentsamendua irakurri zidala ematen zuen eta: ÐMiren Agur, Miren Agur, sekretu polit bat dakit nik.

L pasado mes de agosto adquir’ la entrega nœmero 38 de Bone de Jeff Smith. S—lo es un nœmero m‡s, pues la serie suma 50. La publica en castellano Dude, una modesta editorial de AvilŽs. El primer nœmero, all‡ por 1998, dijo que Bone ser’a mensual, prop—sito que el tiempo ha defraudado: 38 nœmeros en seis a–os y cada uno sale cuando le sale, supongo que cuando hay tiempo para aprestarlo o fondos con que pagar la imprenta. Una muestra m‡s del desbarajuste editorial de la historieta aqu’. Pero aprovecho este nœmero cualquiera para llamar la atenci—n sobre la serie, que ha concluido hace nada en su edici—n original norteamericana. Bone es obra de un solo autor, Jeff Smith, que ha dedicado una porci—n de a–os a imaginar y dibujar las mil trescientas p‡ginas en blanco y negro que componen la historia, y a editarla por su cuenta, al margen de las grandes compa–’as yanquis, las de los superhŽroes y los colorines. Ni en el mercado norteamericano ni en el europeo abundan las historietas de esas dimensiones, si exceptuamos los mangas traducidos del japonŽs. Hace falta saber lo que se quiere hacer y saber hacerlo para rematar semejante obra. Por eso o por un azar, el Žxito le ha acompa–ado desde fecha temprana, ha ganado lectores como yo en muchos lugares, premios y no poca consideraci—n en el mundillo del c—mic. La historia que cuenta Bone es un batiburrillo simp‡tico y emocionante de gŽneros, pues combina unos seres un poco a lo Disney, los Bones, con un valle perdido bastante a lo Tolkien, con su princesa que no sabe que lo es, con su malvado se–or de las langostas que quiere apoderarse del

Zeuk ere jakin nahi baduzu, hiru froga egin behar dituzu aurretik. Eta ohartxo bat bidali zidan zulotik. Hauxe zeukan idatzita: Lehen froga: igarkizuna ÒIsilik dagoenean zain duzun laguna; zabalik dagoenean eguna poztuko dizunaÓ. Protestaka hasi nintzen: ÐEz ditut gustuko igarkizunak! ÐEgun bat daukazu. Bihar, gaueko hamabietan, erantzuna esan beharko didazu. Pentsatu eta pentsatu eman biharamuna. Eta gauerdian, etxekoak lo zeudela, inguratu nintzen zulora etaÉ ÐBadakit erantzuna; liburua da. ÐEderto Ðadoretu ninduen saguakÐ. Bigarren frogarako prest? Ðeta beste ohartxo bat bidali zidan.

Bigarren froga: liburu bat irakurtzea. Purrust egin nuen berriz: ÐEz dut gustuko irakurtzea! ÐEgun bat daukazu. Bihar, gauerdian, zer irakurri duzun kontatu beharko didazu. Irakurri eta pentsatu. Horixe egin nuen biharamunean. Eta gauerdian, zulora inguratu etaÉ ÐIrakurri dut liburua. Ea zure sekretua esaten didazun baÉ! Ðeta istorioaren laburpena egin nion. Berak bazekien istorio hura, liburutegietako saguek liburutegiz liburutegi ematen baitituzte oporrak, eta, halase, munduko liburu guztiak ezagutzen dituzte. Galdera asko egin zizkidan: pertsonaiak zirela, denbora eta tokia zirela, gaia zela, argumentua zela, egilea

DE TEBEO

Bones, monstrorratas y dragones mundo manipulando a los muertos y a las monstrorratas Ðuna especie de ratas monstruosas, feroces y de cuando en cuando risiblesÐ, con sus dragones que no son siempre tan malvados como los hombres acostumbran a creer. Mitad historieta fant‡stica de aventuras y m’stica ecol—gica, mitad comedia de enredo, la serie se desenvuelve con paso seguro y Smith demuestra en cada entrega y en el conjunto su astucia para tramar el relato y su habilidad para ritmarlo, para desplegarlo al paso que conviene, reforzando el efecto de sus momentos dram‡ticos, graduando informaciones y secretos, intercalando bromas. Los Bones que dan t’tulo a la obra son tres, aunque en su Boneville de origen debe de haber m‡s. Son criaturas peque–as, de cocos mondos y grandes narices de caricatura, que no precisan de otra indumentaria que las escuetas camisolas o chalecos que los distinguen. El verdadero protagonista es Fone Bone, o Bone a secas, que pese a su aspecto es el hŽroe de la serie, serio y generoso, y lo acompa–an Smiley Bone, el ingenuo y payasete, y Phoncible P. Bone, el avaricioso y enredador, que son los que habitualmente apor-

tan la nota de humor, complicaciones y embrollos. Los tres Bones llegan al valle huyendo de Boneville por culpa de alguna trastada de Phoncible, y en el valle se encuentran un mundo en conflicto, donde los seres humanos, labriegos o guerreros, se enfrentan a fuerzas siniestras que ame-

zelaÉ baina, batez ere, zera jakin nahi zuen: ea zer gustatu zitzaidan gehien, eta zer gutxien. ÐPrimeran! Ðesan zidanÐ. Egin dezagun hirugarrena! Hirugarren papertxoan, hauxe: Hirugarren froga: ipuin bat idaztea. Eta ni kexaka: ÐEz dut gustuko idaztea! ÐEgun bat daukazu. Bihar, gauerdian, zeuk idatzitako ipuin bat ekarri beharko didazu. Idatzi, irakurri eta pentsatu. Horixe egin nuen biharamunean. Eta gauerdianÉ ÐBadakart. Entzun: ÒBazen behin Erraldoi Aspertuen Herrialdea. Toki hartan, neska txiki-txiki bat jaio zen, hain txikitxoa, beldurrez zegoen ea zapalduko ez ote zuten. Orduan, bururatu zitzaion txilintxo bat erostea denek ikus zezaten. Apurka-apurka, jendea ohitu egin zen neskatxoarekin hitz egiten. Eta hitz eginez eta hitz eginezÉ dibertitzen hasi ziren. Aurrerantzean, herria ez zen aspergarria izan. Nola zuen izena txilintxoa joz handikoteak erne jarri zituen neska txiki hark? IrudimenÓ. Saguak bibaka hartu zuen: ÐZorionak! Hiru frogak gainditu dituzu. Agur ba! Oihuka hasi nintzenÉ ÐBaina ezin duzu alde egin zure sekretua esan gabe! Saguak serio-serio bota zidan, buztanarekin agur egin bitartean: ÐMiren Agur, Miren Agur, hauxe da sekretua: konturatu gabe hartu diezula liburuei gustua. Eta egia, gustua hartu nienetik, asko pentsatu nuen, asko irakurri nuen eta asko idatzi nuen (eta, batzuetan, asko pentsatu, asko irakurri eta asko idazten dutenek, idazle bihurtzeko zori ona izaten dute)Ó. Miren Agur Meabe

nazan con destruir todo lo que merece la pena. Bone echa una mano a la princesa Thorn, por la que siente un amor tan plat—nico como imposible, y a su tit‡nica abuela Ben, una viejecita que no se quita nunca su delantal pero que pelea y arrea estacazos como un guerrero mitol—gico, pues resulta ser la antigua reina escondida del valle. Al tiempo que se enfrentan a peligros y maldades, van descubriendo las verdades ocultas del valle y el papel que la familia real, la de la abuela Ben y Thorn, los dragones, monstrorratas y otras criaturas tuvieron y tendr‡n en la historia de ese lugar. Se suceden las peripecias amenazadoras y las bufonadas. Esta entrega œltima en castellano, por ejemplo, nos introduce a los c’rculos fantasma, un nuevo peligro m‡s terrible que todos los que hemos conocido. Escalofriante. El argumento es entretenido y absorbente, pero me interesa menos Ðahora que ya he le’do toda la obraÐ que el hecho de que Bone es una historia bien contada y que puede ser adecuada para cualquier lector, como un buen cuento tradicional. Yo me he propuesto completar la colecci—n en castellano pensando en que pueda leerla un d’a mi hija. (Entre parŽntesis: quien quiera imitarme podr‡ conseguir sin dificultades lo ya publicado, creo yo). Calculo que aœn se alargar‡ la edici—n aqu’ un par de a–os al menos. Para entonces Nora tendr‡ cinco y me place imaginarme leyŽndole la historia por entregas, para entretenerla durante la merienda o acaso al concluir el d’a. Pues la historieta tambiŽn deber’a ser capaz de fascinar a los ni–os. ÀO no? Juan Manuel D’az de Guere–u

14 Toti Mart’nez de Lezea, publica su œltima novela ÔEl verdugo de DiosÕ

ÒEscribo historias de gente corrienteÓ

L

A editorial Maeva acaba de publicar la œltima novela de Toti Mart’nez de Lezea. El libro, ambientado en el siglo XIII, narra la hu’da de un maestro constructor francŽs a lo largo del Camino de Santiago. Una vez m‡s, la escritora gasteiztarra engancha al lector y se lo lleva de paseo por la Historia. ÐExisten multitud de libros ambientados en el Camino de Santiago. ÀQuŽ hace diferente a El verdugo de Dios de otros t’tulos? ÐQue no tiene esoterismo. No aparecen misterios templarios, ni tesoros c‡taros, ni santos griales. Que conste que los he buscado, pero soy incrŽdula por naturaleza y no puedo escribir sobre algo de lo que no estŽ convencida. Esta es una historia de gente corriente. Adem‡s, creo que es la normalidad lo que atrae a mis lectores. ÐEn esta historia se mezclan agotes y c‡taros. ÀQuŽ relaci—n real existi— entre ellos? ÐHay diferentes teor’as. Una de ellas, por ejemplo, dice que los agotes y los c‡taros son los mismos porque, al desaparecer los primeros, se dio constancia de la existencia de los segundos. No es del todo cierto. Los agotes ya exis-

ro yo no lo creo. Jam‡s morir’a por una idea. Mis ideales son vivir y dejar vivir, que ya es bastante. ÐHa explicado en m‡s de una ocasi—n que Navarra es un lugar privilegiado de la historia. ÀTambiŽn lo es para ambientar una novela como Žsta? ÐAbsolutamente. A nada que rascas en la historia del Pa’s Vasco Navarra sale por todas las esquinas. No hay comparaci—n entre la historia de Navarra y la de Bizkaia, por ejemplo. Bizkaia aparece sobre el s. XIV o XV con Sancho III el Mayor como zona repoblada por navarros, mientras el Reino de Navarra est‡ ah’ desde la Žpoca de los romanos, y ello permiti— que se establecieran comunidades de francos y de jud’os, que se organizara la parte econ—mica y comercial del reino... Este es un escenario incre’ble para una novela. ÐMuchos aspectos de la Navarra del siglo XIII ya los conoc’a. Aœn as’, Àha debido documentarse en profundidad para esta novela? ÐToda novela hist—rica que se precie lleva una tarea de documentaci—n importante. Una vez sabes quŽ tipo de vida llevaban los personajes desde el punto de vista econ—mico, oficial, religioso o pol’tico, que sabes quiŽn reinaba, si hab’a peste o si se pasaba hambre, el libro

La escritora Toti Mart’nez de Lezea

t’an antes de que los c‡taros huyeran de Francia por la ruta de Santiago o por Catalu–a y se instalaran en la pen’nsula. No hay constancia de ellos porque s—lo se escrib’a sobre individuos importantes, sobre obispos, reyes, monasterios..., no acerca de la gente cotidiana. ÐLos cronistas no escrib’an sobre gente ÔvulgarÕ pero usted s’. ÀCree que en la normalidad de sus personajes radica el Žxito de sus novelas? ÐCreo que s’. Bueno, a lo mejor resulta que ahora escribo sobre un personaje fant‡stico y vendo Ôa porrilloÕ, pero creo que s’, que es la normalidad de mis personajes lo que atrae a los lectores. ÐSu libro comienza con la quema de herejes en el monte AimŽ. ÀMerece la pena morir por una creencia? ÐHabr‡ quien piense que s’, pe-

sale solito. ÐEn el libro planea la sombra de la Inquisici—n. Si tuviera que escribir una novela contempor‡nea con los mismos rasgos de El verdugo de Dios, ÀquiŽnes ser’an los inquisidores de hoy? ÐCualquiera que le busque cinco patas al gato. Cualquiera que ejerza la censura o que persiga a otros por sus ideas tanto pol’ticas como religiosas o sociales. La censura no es algo exclusivo del siglo XIII, la hemos conocido y la seguimos conociendo a veces. No todo lo que se escribe es aceptado por la parte pol’tica del pa’s, por ejemplo. La censura existe, la Inquisici—n existe, pero sin los rasgos salvajes de anta–o. Ahora no se quema a las personas vivas, por lo menos no por aqu’. Y menos mal porque sino estar’amos ardiendo la mitad de la poblaci—n. A. I.

El autor colombiano visit— Bilbao. Fotos Moreno Esquibel

Juan Gabriel V‡squez

ÒSomos seres pol’ticos, aun a nuestro pesarÓ

H

AY novelas buenas, novelas para pasar un rato entretenido, novelas poco o nada interesantes, novelas que despiertan una cierta curiosidad formal. TambiŽn existen esas otras novelas que llegan al mercado editorial con cuentagotas, esas que poseen una voz propia y un tono original, Žsas capaces de conmover, de provocar, Žsas que contienen la complejidad del mundo en unas pocas p‡ginas cuya lectura resulta adem‡s sencilla. Pues bien, dentro de las poqu’simas novelas que se podr’an calificar como magn’ficas, puede incluirse Los Informantes, de Juan Gabriel V‡squez. El autor colombiano, calificado como Ôescritor precozÕ o Ôni–o prodigioÕ, logra con esta obra editada por Alfaguara conquistar la madurez literaria y se reafirma como un escritor brillante. ÐÀQuiŽnes han sido sus ÔinformantesÕ para escribir esta novela? ÐB‡sicamente uno, una mujer jud’a y alemana con la que hablŽ en 1999, que me cont— la historia de su padre, uno de los tantos jud’os que emigraron de Alemania perseguidos por el nazismo y que, al llegar a Colombia, estuvo a punto de ser recluido en un campo de concentraci—n para ciudadanos enemigos por el hecho de ser alem‡n. Esta paradoja fue el punto de partida de la novela. Adem‡s, fue la conversaci—n que me condujo a hablar con otra gente, a buscar durante tres a–os a otros informantes. ÐLa novela se basa en una parte olvidada de lo acontecido en Colombia durante los a–os 40. ÀQuŽ importancia tiene recuperar la memoria hist—rica? ÐCreo que es importante, sobre todo, narrar la memoria hist—rica. Recuperarla nos indica quiŽnes somos y de d—nde venimos, por lo que de alguna manera evita repetir los mismos errores del pasado, pero es que con-

tarla es fundamental, porque los seres humanos somos criaturas hechas de historias. Creo que por eso la novela ha sobrevivido, porque es capaz de iluminar zonas de tu experiencia que hasta el momento han permanecido oscuras. ÐÀHeredamos los errores de nuestros antepasados? ÐUna de las preguntas importantes que hace el libro es precisamente esa. Una novela es, entre otras muchas cosas, una especie de carta largu’sima que el novelista se escribe a s’ mismo para saber quŽ piensa sobre ciertos temas. El resultado final es que nunca llega a saberlo. Si un novelista alcanza una certeza absoluta sobre algo, seguramente la novela ser‡ mala.

ÐUno de sus personajes, Peter Guterman, cre’a que la Guerra Mundial en Europa no podr’a afectar a la gente que viv’a en AmŽrica. ÀPor quŽ se equivoc—? ÐPorque en cierta modida somos seres pol’ticos, aun a nuestro pesar. Entonces, el hecho de pretender que un da–o moral tan grave como el del nazismo, que fue tan contaminador que lleg— a corromper la condici—n humana misma, no te afecte porque un ocŽano te separa del sitio donde est‡ ocurriendo, es inocente. La paradoja de la novela es que parece estar muy justifi-

cada la persecuci—n del ciudadano procedente de pa’ses enemigos y, sin embargo, esa persecuci—n acab— destruyendo la vida de mucha gente que hab’a salido de Alemania dos y tres dŽcadas antes sin ninguna relaci—n con el III Reich, o que hab’a llegado a Colombia huyendo directamente de Žl. ÐÀHasta quŽ punto puede distanciarse la ficci—n de la novela de lo que realmente sucedi—? ÐTodo lo que ocurre en la novela est‡ basado directamente en relatos, en experiencias. La situaci—n pol’tica evidentemente est‡ tomada de la realidad, pero tambiŽn las reacciones de los personajes que se enfrentan a esta situaci—n est‡n inspiradas en lo que yo percib’ del contacto directo con quienes lo vivieron. Creo que es por eso que otras personas se han acercado a pedirme que ahora cuente su historia, a decirme que tienen un padre o un abuelo que ha vivido aquella Žpoca y que sus memorias probablemente se van a morir cuando ellos desaparezcan. ÐÀPodr’a haber entonces una segunda parte del libro? ÐEsa es mi gran duda. Tengo una especie de Žtica de escritor que me prohibe repetirme. Me gustan los autores que toman riesgos constantemente, que nunca se aprovechan de lo aprendido, pero al mismo tiempo est‡ el peso de estas historias que claman por ser contadas. Probablemente, si encuentro una manera de contarlas de una forma completamente distinta a Los Informantes, lo harŽ. ÐTodos los personajes de su novela buscan su lugar en el mundo. ÀHa encontrado usted el suyo? ÐMi lugar en el mundo es el lugar donde tengo mis libros y donde puedo dedicarme a hacer otros libros. Me lo puedo llevar a cualquier parte, y eso es una especie de bendici—n particular. Ainhoa Iglesias

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Tono vital

Tradici—n y cambio

ANTOLOGIA TRADUCIDA MAX AUB VISOR MADRID, 2004 241 PAGINAS

VERDES VALLES, COLINAS ROJAS. LA TIERRA CONVULSA RAMIRO PINILLA TUSQUETS BARCELONA, 2004 752 PAGINAS

EL escritor, nacionalizado espa–ol en 1914, Max Aub (Par’s, 1903. MŽxico, 1972), exiliado despuŽs de la guerra civil durante muchos a–os en la capital azteca, es autor de novelas, teatro y cr’tica literaria. TambiŽn prob— fortuna en el campo de la poes’a. Este es su libro capital en esa especialidad. Lo presenta como si Žl fuera s—lo y œnicamente el traductor de otros poetas, alrededor de setenta, de diversas Žpocas y nacionalidades. Uno de los logros m‡s se–alados del libro se cifra en las breves descripciones biogr‡ficas de esos autores inventados. Ah’ su prosa se mueve con singular gracia y una fertil’sima imaginaci—n. Trae a la p‡gina tanto a poetas de siglos anteriores a Cristo, como a poetas antiqu’simos chinos, o bien rusos, ingleses, italianos, franceses y ‡rabes (muy en especial), entre otras razas y rostros geogr‡ficos. Poseedor de una vasta cultura, Max Aub trata de

ACABA de publicarse la primera de las tres partes que forman Verdes valles, colinas rojas, novela monumental de Ramiro Pinilla (Bilbao, 1923). La obra tiene como marco espacial a la localidad vizcaina de Getxo, donde vive el propio autor, y gira en torno a varias generaciones de dos familias de diferente rango social, los Baskardo y los Altube. La narraci—n, que se desarrolla entre 1889 y parte del siglo XX, se inicia con el anuncio, por parte de una criada de los Baskardo, de que su patr—n la ha dejado embarazada. A partir de ah’, la obra se enriquece con otros cauces narrativos: por ejemplo, la frustraci—n de la relaci—n que uno de los hijos Baskardo pretend’a establecer con una Altube. A partir de diversos avatares familiares, esta obra densa y bien escrita, en la que se alternan las leyendas y mitos fundacionales del pueblo vasco con la historia,

escribir en el tono vital de cada uno de ellos. Escribe para divertirse. El libro se lee f‡cil y resulta venturosamente ameno. En tŽrminos poŽticos quiz‡ le pierden determinados pasajes, aunque breves, de dudoso gusto en lo concerniente a aspectos escatol—gicos y burda sexualidad. Pero no por los temas en s’, sino por haberlos insertado a destiempo o sin venir a cuento. Parecen un tanto forzados, de tal suerte que de repente dejamos de pensar en esos poetas, y en el aura de su envolvente encantamiento, para fijarnos demasiado en el propio Max Aub.

Giza harremanak HAMABOST ZAURI KARMELE JAIO ELKAR DONOSTIA, 2004 136 ORRIALDE

recrea un mundo en el que se enfrentan la tradici—n y lo nuevo (los verdes valles representan las viejas esencias y privilegios, y las colinas rojas representan los cambios, como los que traen consigo la inmigraci—n de mineros y la sociedad industrial). Se trata de una obra que, m‡s all‡ de retratar la evoluci—n de la sociedad vasca desde finales del siglo XIX hasta casi el presente, tiene una vocaci—n muy amplia. No en vano, su autor asegura que ÒŽsta no es una novela con voluntad vasca sino universal, una novela en la que se vuelca mi visi—n del mundo a travŽs del Pa’s VascoÓ.

CONVERSACION EN SICILIA ELIO VITTORINI GADIR. MADRID, 2004 232 PAGINAS

LOS DEMONIOS FIODOR DOSTOIEVSKI CIRCULO DE LECTORES BARCELONA, 2004 800 PAGINAS

ADIOS A LOS HOMBRES ANTONIO GOMEZ RUFO EDITORIAL PLANETA BARCELONA 2004 261 PAGINAS

GERMINAL EMILE ZOLA VALDEMAR MADRID, 2004 552 PAGINAS

GADIR ha recuperado para el lector espa–ol Conversaci—n en Sicilia, (publicada originariamente en 1941), una de las grandes novelas de la literatura italiana del siglo XX, de Elio Vittorini (1908-1966). El narrador es Silvestro, que, tras muchos a–os lejos de sus padres, emprende un viaje para visitar a su madre, que acaba de ser abandonada por su marido. A lo largo de la narraci—n, se entremezcla el presente con el pasado, el presente con la memoria (en gran parte, con los recuerdos de la infancia de Silvestro: su padre recitando Machbeth, el ruido de las cigarras en verano, las casas de los guardabarreras). Pero m‡s all‡ del reencuentro de Silvestro con su madre y con su infancia, a lo largo del libro, est‡ muy presente el aplastante orden social imperante y las ofensas que sufre el mundo, como alusi—n a la germinaci—n del fascismo en media Europa. Conversaci—n en Sicilia es un bello alegato contra el fascismo y a favor de unos valores totalmente opuestos a Žl.

EN la Žpoca en que Rusia se debat’a entre la conservaci—n del sistema establecido y la introducci—n de cambios nacidos de ideas llegadas de Europa occidental, F’odor M. Dostoievski (1821-1881) era profundamente conservador, y estaba totalmente en contra de esas ideas progresistas occidentales, con las que otros intelectuales rusos estaban de acuerdo, entre ellos Iv‡n S. TurguŽniev. Los demonios, que ahora publica C’rculo de Lectores, constituye un ataque contra los revolucionarios violentos rusos (tambiŽn contra el propio Iv‡n S. TurguŽniev), y, en general, un rechazo a las ideas provenientes de fuera de Rusia, que, segœn su autor, eran una amenaza contra Rusia, ya que, segœn Žl, pod’an deformarla y corromperla. Los revolucionarios eran para Dostoievski como demonios, infectados demoniacamente por ideas extranjeras. Dostoievski no es un escritor f‡cil, pero el lector no debe rendirse ante esta novela con tramos de suspense, vertiginosa en muchas de sus p‡ginas y no exenta de s‡tira.

EN Adi—s a los hombres el amor es el elemento catalizador de tres personajes perdidos en s’ mismos. Un amor que se entrega con pasi—n y se pierde cuando el roce lo convierte en un sentimiento romo lleno de convencionalismos. Un amor que no se quiere olvidar aunque haya desaparecido malgastado por la costumbre, al que nos aferramos cuando creemos no tener nada m‡s y por el que podr’amos hacer cualquier cosa para no alejarlo de nuestras vidas. Incluso aunque no se parezca a la idea que nosotros mismos tenemos de Žl. Pero sobre todo, un amor de personas que se arrastran para escapar de su desidia, que prefieren ser infelices a sentirse solas. Antonio G—mez Rufo ha sabido mostrar a travŽs de sus p‡ginas a ese hombre incapaz de exteriorizar sus sentimientos, de mostrarse sensible, un hombre silencioso que se deja llevar sin saber a quŽ clase de mujer podr’a amar.

DENTRO de una colecci—n de reciente creaci—n, denominada Letras cl‡sicas, Valdemar ha publicado Germinal, una de las grandes obras del creador de la novela naturalista, el escritor francŽs ƒmile Zola (1840-1902). Germinal describe los abusos y las miserias que padec’an los trabajadores de la miner’a. A lo largo de la historia que narra, el lector asistir‡ a la puesta en marcha de una huelga y a la posterior rendici—n y reincorporaci—n de los mineros al trabajo, lo que supone no abandonar sus miserables condiciones de trabajo. Germinal es una obra, con tramos Žpicos, sobre la injusticia y a favor de un ideal social. Mauro Armi–o, encargado de la edici—n, recuerda, en el pr—logo, unas palabras claves del propio Zola sobre esta obra: ÒMi libro es una obra de piedad, no otra cosa, y si alguien leyŽndola tiene esa sensaci—n, me sentirŽ feliz, habrŽ alcanzado la meta que me propon’a. ÀHabrŽ logrado hacer comprender, en mi novela, las aspiraciones de los miserables hacia la justicia?Ó.

INTERNET eta teknologia berriko telefono mugikorren garaian, gizon-emakumeok inoiz baino inkomunikatuagoak gaude. Konpromisoa eta maitasuna beste planeta batera bidali ditugula dirudi, interes pertsonal eta berekoiaren erruz. Gizon eta emakumeon arteko harremanak krisi sakonean daude eta jadanik bikote gehienak ez dira ÒbetirakoÓ, urte gutxi batzuetarako baizik. Karmele Jaio (Gasteiz, 1970) bikote harremanei buruz aritu da bere lehenengo ipuin liburuan, Hamabost zauri, hamabost kontakizun, non denetarik egongo baita: ezkontzaz kanpoko abentura duen senarra; emaztea utzi duena, erantzunik gabeko maitasunaÉ Elkarrizketa gutxi ageri da liburu honetan, Òesaten dena baino esan gabe geratzen dena eta barruan zauria sortzen duena gehiago interesatzen zaidalakoÓ, aitortu du egileak. Istorio hauek istorioak dira, fikzioa, baina gure inguruko edozein herri edo hiritan aurki dezakegun errealitatera eramateko indarra dute. ÒNire helburua gehiago izan da bi pertsonaren artean esan gabe geratzen diren esaldi horiek azalarazteaÓ, esan du Jaiok; kontzienteki sentitzen duguna baina esaten ausartzen ez garena, beldurragatik. Zeren askotan, nahiz eta bikotearekin ondo ez egon, bakardadeari sekulako beldurra baitiogu... Igartza Saria irabazi ondoren, Karmele Jaio, kazetaria lanbidez, nobela bat idazten hasi da, Amaren eskuak, bi emakumeen arteko istorio bat. Gustokoen dituen ipuin-idazleen artean, Medardo Fraile, Raymond Carver eta Katherine Mansfield, besteak beste, ageri dira.

R. R. H.

R. R. H.

A. J. O.

R. R. H.

A. A. Z.

JosŽ Luis Merino

Roberto Ruiz de Huidobro

AKABUKO ORRIALDEA

Margolari itsua LEHENGO egunean ipuin klasiko baten bertsio urbanoa entzun nuen ile-apaindegian, batere dirdirarik gabe egia esan. Norbait zegoen kontatzen, horrelakoak dira beti istoriook, ezagun baten lagunaren lagunari gertatutakoa. Kontua izan zen lagun horrek, neska zenak, irabazten zuela bizitza margolari eta argazkilarientzako poseak eginez. Modeloa zen, baina. hala moduz moldatzen zen aurrera egiteko, eta mutilekin ligatzeko arazoak baino ez zituen. Sarriro itzultzen zen lanetik pintura, oleo eta berniz kiratsa gorputzari pega-pega zekarrela. Mutilek, lurrin hura igartzean, berehala egiten zuten atzera. Eta gainera neska hark bazuen beste arazo handi bat, ikaragarri lotsatia zen eta biluzik paratu behar zuenean gorriak pasatzen zituen. Ahal guztietan uko egiten zion margolari eta argazkilarien aurrean biluzteari. Beti ezin izaten zuen baina, beti ez zuen lanik eta eskaintzen ziotena derrigorrean hartu behar izaten zuen. Behin margolari baten deia jaso ei zuen, modelo gazte bat behar zuen estudiorako. Neskak hitzetik hortzera pentsatu gabe biharamunean azaldu zen margolariarenera. Sartu zenean gela ilun batean ikusi zuen bere burua, ez zen estudio normala, argitsuak izaten dira eta. Erdian harrizko oinarri bat zegoen eta alboan seta gardenezko zapi handi bat. Margolariak ebitatu zuen momentu guztietan neskaren aurrean agertzea. Ilunpetik berba egiten zion neskak. Oinarriaren ondoan paratzeko esan zion eta zapia hartu eta biluzten hasteko ere agindu zion. Neskak nahigabe keinua marraztu zuen aurpegian eta deseroso sentitzen hasi zen. Hala ere, ez zen joan eta gelaren mutur batetik indartsu zetorren foku bate argipean biluzteari ekin zion. Astiroastiro egin zuen, lotsak ematen zion patxada urduriaz. Horrela egon zen hiru ordu luzez, erabat biluzik edo bakarrik seta gardenezko zapiaz apur bat estalita harrizko oinarrian bermatuta. Estatua baten koadroa egiten egongo zela pentsatu zuen neskak. Halako batean janzteko eta joateko agindu zion ikusezina zen ahotsak. Joatean ere ez zuen margolaria ikusi baina bai honek egindako lana, kolore iluneko zirriborro desitxuratu bat. Han ez zen neska biluziaren arrastorik sumatzen, zirriborro bat baino ez. Neska harriduraz joan zen, ez zuen ulertu zertarako behar izan zuen modeloa. Gerora jakin zuen lagun baten ahotan margolari hura itsua zela. Neska orduan bere buruaz lotsatu zen, hainbeste komeria margolari itsu baten aurrean biluzik paratzeko. Azken hori ile-apaindegian gehitu zuten. Baina ez ile-apaindegikoek ez eta istorioko neskak ere ez zekiten ipuinaren bertsio klasikoan margolariak ondo baino hobeto ikusten zuela. Behintzat neuk ezagutzen dudan bertsioan. Alvaro Rabelli

Carta abierta

Roberto Bola–o en el Purgatorio

LA œnica prueba real de que existe la otra vida es que dicen que Roberto Bola–o ha muerto. Hace ya m‡s de un a–o de todo esto, y continœan afirm‡ndolo. De ser as’, no me cabe duda de que Bola–o ha muerto para demostrarnos que existe el M‡s All‡ y que ahora habita en el Purgatorio y no en el Cielo, donde confes— que le hubiera gustado apuntarse a cualquier curso que estuviera impartiendo Pascal. No, Bola–o no ha llegado al Cielo aœn, y dudo mucho que lo haga: siempre tuvo claro que el valor no resid’a en ser santo, sino en intentar serlo. De ah’ que ahora se haya salvado del curso de Pascal Ðdonde le habr’an tocado en suerte condisc’pulos tan execrables como el barbero del

Ahora tememos que Bola–o haya muerto de verdad; porque su vida, de tan verdadera, nos resulta inveros’mil Quijote y hay un pupitre reservado a PinochetÐ y de la maldici—n del Infierno, que no es sino una cabina de telŽfono averiada por cortes’a de Telef—nica. En el Purgatorio, Bola–o ahora se contenta con largas tertulias donde asisten Arqu’loco, Monterroso, Rimbaud, Sterne y Borges, y donde todos se dedican a contarse el libro que jam‡s pudieron escribir. En el Purgatorio no hay estilogr‡ficas, ni papel, ni m‡quinas de escribir, ni bi-

bliotecas, ni mucho menos ordenadores, y no les queda m‡s opci—n que decirse lo primero que les viene a la mente, mientras Julio Cort‡zar sirve el tŽ, y repite hasta la saciedad un viejo aforismo del pintor Braque: ÒHay que escoger: una cosa no puede ser verdadera y veros’mil al mismo tiempoÓ. Por eso mismo ahora tememos que Bola–o haya muerto de verdad; porque su vida, de tan verdadera, nos resulta in-

veros’mil. Cuando estuvo en el Reino de los Vivos, Bola–o se neg— a casi todo: se neg— a ser un exiliado, a pesar de salir de su pa’s natal dos veces Ðcon 16 y 20 a–os, respectivamenteÐ, y morir lejos de Chile, tras haber deambulado por medio mundo para acabar encontrando su lugar en el mundo en Blanes, Girona. Anteriormente se hab’a negado a tener una muerte joven y gloriosa, por mucho que jugara a vagar, beber, follar y hacer la revoluci—n como quien juega la ruleta rusa con una pistola autom‡tica. Como escritor de lengua espa–ola, tuvo la desfachatez asimismo de negarse a una fama provinciana Ðla œnica a la que un escritor en espa–ol parece querer aspirarÐ y compuso una obra con tantos registros lingŸ’sticos que, a su lado, cualquier ventr’locuo palidecer’a asustado. Se neg— a separar literatura y vida, pero nos leg— una literatura testiga de un caos tan atroz que parece salida de una novela de su admirado Philip K. Dick. Compuso miles de p‡ginas, pero siempre se neg— a dejar de escribir la misma novela, una novela sobre una generaci—n de latinoamericanos que invierten todo su valor en una empresa vol‡til, en una empresa tan inveros’mil que s—lo ha podido ser real. Aunque, por negarse, fue un novelista que se neg— a ser nada salvo un poeta. Eso s’, como poeta tuvo mujer y dos hijos. Pero tambiŽn se neg— a admitir esto œltimo de cara a la galer’a, confesando que lo que de verdad le habr’a gustado ser era detective de homicidios, Òalguien que puede volver solo, de noche, a la escena del crimen, y no asustarse de los fantasmasÓ. Claro que tambiŽn confes— que, de serlo, habr’a podido por fin volverse loco, y, como ya dije, siempre tuvo claro que el valor no resid’a en ser santo, y todo loco no es sino un santo. De Žl se puede decir lo que le’ hace poco en un pr—logo sobre Bertrand Russell: Ò... nunca perdi— la esperanza, ni la inteligencia, ni el sentido del humorÓ. Siempre admir— el valor, aunque jam‡s dej— de concebirlo sino como ese juego tabernario que se inventa Lichtenberg en el que nada se puede ganar y nada se puede perder. Ya se lo dijo Vila-Matas: ÒTu escepticismo, Bola–o, es el principio de la feÓ: ahora que has muerto, nadie puede pretender ignorar que existe el M‡s All‡, y que Arturo Belano se ha mudado al Purgatorio. Un sitio que en casi nada se diferencia de la Tierra, salvo que aqu’ tenemos papel, estilogr‡ficas y ordenadores, pero ya no nos queda ningœn Bola–o para hablar de lo que es verdadero. I–igo Garc’a Ureta