sesión 1 segunda parte

participante

El conocimiento de nuestros adolescentes

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Prueba para conocer el temperamento de tu hijo El contenido de este test fue tomado del “Diagnóstico caracterológico inicial. Paul Grieger”, consultado el 10 de febrero 2014. Resolver el test, pensando en las reacciones naturales de tu hijo: Calificar con: Nunca = 0, A veces = 1, Casi siempre = 2 Emotividad

Calificación

1. ¿Se altera fácilmente por acontecimientos de poca importancia? 2. ¿Expresa sus opiniones y defiende sus ideas con entusiasmo? 3. ¿Cambia con facilidad de parecer, de conducta o de humor? 4. ¿Reacciona con muchos gestos o ademanes? 5. ¿Se emociona fácilmente con la lectura o el relato de algo emocionante? Total: 0 a 5 = No emotivos (Ne); 6 a 10 = Emotivo (E)

Actividad

Calificación

1. ¿Está generalmente ocupado en alguna actividad, incluso en sus tiempos libres? 2. ¿Es perseverante en las tareas que emprende, y las dificultades son más bien un estímulo? 3. ¿Decide fácilmente, aún en momentos difíciles? 4. ¿Recobra pronto sus fuerzas después de un arduo trabajo? 5. ¿Lleva a la práctica lo que decidió hacer sin aplazamientos? Total: 0 a 5 = No activo (Na); 6 a 10 = Activo (A)

Resonancia 1. ¿Es previsor? (prepara con detalle un plan para administrar su tiempo; se disgusta ante acontecimientos imprevistos). 2. ¿Es difícil de consolar después de un disgusto o fracaso? 3. ¿Recuerda frecuentemente las cosas que le han pasado? 4. ¿Es dócil? 5. ¿Es reservado? (no le gusta dar a conocer sus gustos, amistades, etc.). Total: 0 a 5 = Primario (P); 6 a 10 = Secundario (S)

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Calificación

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Se tabulan los resultados de cada elemento en la columna “Calificación” y se suma el resultado en la última fila de cada tabla. Luego se comprueba si el resultado va de 0 a 5 o de 6 a 10, para conocer el nivel de aplicabilidad de cada elemento. Se remplazan las sumas de cada una de las tablas por las letras correspondientes. Posteriormente, se combinan de acuerdo con la siguiente tipología caracterológica según Le Senne. De la combinación de estos factores resultan ocho tipos básicos de carácter: Elementos fundamentales

Carácter

Valor dominante

E,A,P

Colérico

La acción

E,A,S

Apasionado

La obra a realizar

E,Na,P

Nervioso

La diversión

E,Na,S

Sentimental

La intimidad

Ne,A,P

Sanguíneo

El éxito social

Ne,A,S

Flemático

La ley

Ne,Na,P

Amorfo

El placer y la pasividad

Ne,Na,S

Apático

La pasividad, tranquilidad y tradicionalismo

De estos caracteres no se concluye que unos sean mejores que otros; eso depende de cómo se encauce y aproveche cada uno. Nuestros hijos nacen así y, aunque no pueden cambiar su carácter, éste se puede moldear a través de la educación.

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Conozcamos la etapa de desarrollo que viven nuestros hijos Nuestros hijos desde la escuela secundaria viven los siguientes cambios:

Desarrollo de la inteligencia Han llegado al pleno uso del razonamiento lógico, pueden comprender y formular argumentos racionales, elaborar y trabajar con hipótesis. Tienen una mayor capacidad de reflexión y de sentido crítico. Sin embargo, el pensamiento del adolescente sigue siendo fuertemente condicionado por una intensa afectividad (sentimientos, emociones) lo que lo lleva a que, a menudo, le resta objetividad a sus juicios. Por ello se explica el dogmatismo al que acude a veces para defender sus opiniones. “El adolescente y el adulto son capaces de pensar acerca de abstracciones y conceptos hipotéticos y razonar en forma analítica y no sólo emocionalmente. Pueden incluso pensar en forma lógica ante hechos que nunca experimentaron” (Berger, 2006: 47).

Desarrollo del cuerpo Su cuerpo ha cambiado, han crecido y ha adquirido las características internas y externas que los hacen hombres o mujeres. Durante la adolescencia, los jóvenes atraviesan por muchos cambios a medida que pasan de la niñez a la madurez física. Los cambios prepuberales precoces ocurren cuando aparecen las características sexuales secundarias. “Los cambios corporales de la adolescencia son como los del primer año de vida en velocidad y transformación, pero con una diferencia fundamental: los adolescentes están conscientes […] observan con fascinación, horror y emoción los cambios que se desarrollan” (Berger, 2006: 431).

En lo psicológico Los cambios físicos y fisiológicos produjeron una inestabilidad en su estado de ánimo. Se ha producido el despertar de la sexualidad y el interés por las experiencias sexuales. Uno de los rasgos de la madurez afectiva es la necesidad de amar y de ser amado, lo que da lugar al nacimiento de la amistad y del primer amor. En ocasiones los cambios suelen ser rápidos y súbitos a nivel físico que experimentan los adolescentes que los lleva incluso a ser tímidos, sensibles y a estar preocupados respecto a los propios cambios corporales. Muchos adultos cuando están asombrados o exasperados por algo que hace un adolescente, “culpan al -descontrol de hormonas- como si estas sustancia químicas invisibles pero potentes produjeran

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todas las conductas inesperadas, sobre todo los estallidos de ira, la tristeza súbita o las pasiones románticas” (Berger, 2006: 434). Están pasando por un periodo de introversión y de timidez en la tarea de encontrar su forma de ser, de saber quiénes son. La timidez tiene su origen en la desconfianza de sí mismo y hacia los demás. Tienen miedo a la opinión que se formen de ellos quienes les rodean. Este fenómeno se explica comparando la seguridad casi inconsciente del niño, que prácticamente se limita a actuar siguiendo las ideas de sus padres, con la inseguridad del adolescente a quien no le bastan o no le satisfacen plenamente aquellas ideas.

En lo social Aun cuando disminuye el problema de la integración social, en algunos adolescentes sigue presentándose. En esta etapa el grupo de amigos pasa a segundo término, ahora puede ser un amigo o dos con los que tiene estrecha relación y coincidencia en cuestiones íntimas, es decir, solo con ellos tiene la confianza de compartir pensamientos o deseos únicos. Aunque se observa en los adolescentes una conducta de mutismo cuando se encuentran en el ámbito familiar, esto sucede con frecuencia en este círculo porque suponen nadie comparte sus pensamientos e ideales. Son capaces de pasarse horas sin decir nada. No debe tomarse como síntoma de intimidad familiar, ya que en muchos casos, no tienen nada que decir o no están dispuestos a ello, debido al bloqueo afectivo que padecen. “La adolescencia a menudo es caracterizada como un tiempo de declinación de la influencia de los adultos, un periodo en el que los valores y las conductas de los individuos jóvenes se van haciendo cada vez más distantes de aquellas de sus padres y otros adultos […] cuando los jóvenes sienten que su comunidad los valora, sus maestros confían en ellos y mantienen vínculos con los adultos es mucho menos probable que tengan problemas de cualquier tipo” (Berger, 2006: 505), aunque se debe considerar que en algunas familias, la rebeldía del adolescente puede conducir a conflictos a medida que los padres tratan de mantener su autoridad y control sobre ellos.

Encontrar una identidad y una “forma de ser” satisfactoria La principal tarea de la adolescencia desde el punto de vista psicológico, quizás es responder a la preguntas ¿quién soy?, ¿qué lugar ocupo en el mundo? o ¿qué sentido quiero darle a mi vida? Esta búsqueda de identidad se relaciona con distintos aspectos de la vida de todas las personas, como por ejemplo definir una ocupación o una actividad laboral, lo que implica que descubra sus intereses, sus talentos, sus necesidades, sus aspiraciones y valores. Se espera que esta decisión le permita en el futuro cercano ser un individuo realizado, socialmente productivo y económicamente autosuficiente. De igual manera, el adolescente debe asumir su identidad psicosexual. La búsqueda de identidad es un proceso que en realidad nunca termina por completo. En la búsqueda de su identidad, el adolescente suele orientarse en dos direcciones:

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–– Mira hacia afuera para encontrar modelos con los cuales identificarse. –– Mira a sí mismo para tratar de averiguar quién es. Paulatinamente, a medida que va explorando el mundo exterior, adopta nuevas formas de pensar, de sentir y de comportarse. Muchas veces también opta por nuevas formas de vestir y de expresarse. Le gusta considerarse excepcional, único, original, diferente del resto de las personas; ser objeto de admiración y de ejemplo para lograr la aceptación y reconocimiento de sus amigos. Y es habitual que exprese rasgos de su identidad a través de emociones, más que con ideas o razonamientos. Se da también un proceso de autoafirmación, esto es, de querer valerse por sí mismo, estimulando rasgos y cualidades que lo lleven a reafirmar o conformar su identidad, empezando a desarrollar su sentido de pertenencia, participando en diversas actividades dentro de su grupo social y comunidad. Así logra desarrollar comportamientos tales como:

1. Un espíritu de independencia total. No quieren ser ayudados. Quieren ser capaces de valerse por sí mismos para resolver sus problemas, en vez de recurrir siempre a los padres en busca de ayuda. 2. Afán de contradicción. Obstinación, terquedad. El adolescente puede cerrarse a las razones y aferrarse a sus puntos de vista atrevidos y decisiones imprudentes. 3. Búsqueda de la emancipación del hogar. 4. Deseo de ser reconocido. 5. Rebeldía ante las normas establecidas. Llega a manifestar cierta agresividad. 6. Experimenta sentimientos de inferioridad al descubrir su yo y conocer sus posibilidades, pero también sus debilidades, al enfrentarse a los obstáculos y no obtener buenos resultados. Cabe preguntarse si la búsqueda de la independencia hace necesaria la rebelión. Esto dependerá de las características de los adolescentes, de sus padres y del grupo familiar en que se relacionen. Cuando las familias son suficientemente flexibles y cuando los padres ejercen su autoridad de manera firme pero fundada en razones y valores, con una actitud participativa, las relaciones entre padres e hijos van cambiando progresivamente sin que haya conflictos. Por el contrario, las tensiones se hacen sentir con los padres que no dejan a sus hijos un espacio para crecer en responsabilidad, en autonomía, para ser tomados en cuenta en las decisiones que les afectan en la familia y para tomar sus propias decisiones. Es entonces cuando puede presentarse una reacción negativa de rebeldía si no se siente escuchado.

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La búsqueda de la madurez Durante este proceso se desenvuelve en medio de una desorientación social, los cambios en su cuerpo son evidentes y los cambios hormonales influyen tanto que no logra entenderlos, etapa de adolescencia temprana (11-13 años), regularmente este proceso lo lleva a lograr tres objetivos principales:

1. Lograr una personalidad responsable. 2. Alcanzar su independencia: pensar, decidir y actuar por iniciativa propia. Entender que los padres son seres humanos que pueden equivocarse, que no siempre saben todo y que no siempre tienen las respuestas correctas; empiezan a dejar de verlos como héroes o como seres ideales. 3. Busca ser El Yo mismo, de ser independiente como persona y en definitiva ser un individuo único y especial, descubrirse a sí mismo y no sólo por lo que dicen o piensan los demás. En contraste, los adolescentes presentan muchas conductas inmaduras, parte de las cuales son necesarias para el desarrollo de su personalidad, la cual no se logra solamente con los aciertos y los éxitos, sino también con los errores y fracasos. Siendo la adolescencia una etapa de inmadurez, es conveniente saber lo que es la madurez, la Real Academia de la Lengua Española la define como la “edad de la persona que ha alcanzado su plenitud vital y aún no ha llegado a la vejez”; es el momento del desarrollo cuando se alcanza una personalidad responsable y disciplinada que convierte al adolescente en un adulto capacitado para tomar decisiones, ante los problemas cotidianos y le ayuda a relacionarse con los que le rodean. Los adolescentes piden y defienden su libertad, pero no se trata necesariamente de una independencia en el pensar, decidir y actuar por sí mismo, sino puede ser el rechazo a la dependencia de los adultos. Entienden la libertad como ausencia de limitaciones y condicionamientos externos. No han descubierto que la libertad no es carencia de ataduras, sino la capacidad de elegir las ataduras por las cuales se quiere vivir la vida. No han descubierto tampoco que las peores limitaciones a su libertad son las propias e internas como la ignorancia, la pereza, la falta de iniciativa, el egoísmo, el pesimismo, el dejarse llevar por las pasiones.

Relaciones sociales A partir de los quince o dieciséis años no les satisface la relación de varios compañeros, por el contrario se identifica con uno o dos como máximo y estos se convierten en sus mejores amigos, confidentes y cómplices, donde se da una comunicación muy estrecha con capacidad de responder a un sentimiento de amistad y lealtad. Los grupos adolescentes se caracterizan por su adhesión y dependencia.

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Primero surge de la necesidad del adolescente de ocultar su mundo de dudas e incertidumbres, nuevas sensaciones y vivencias diversas ante el mundo adulto, que se le manifiesta como contrario en la medida que parece tener respuestas para todo. Segundo, la elección libre de unos amigos es una necesidad afectiva. El adolescente se integra en un grupo porque necesita: –– Ampliar los vínculos familiares. El grupo se convierte en otra “familia”. En su círculo de amigos siente que tiene sus propios pensamientos y que son valorados. –– Compartir sus problemas y preocupaciones. –– Alejarse de los adultos y crear su propio mundo donde ellos no intervengan. La necesidad de pertenencia a un grupo es fundamental para el desarrollo del individuo. Cuando la personalidad es débil, el grupo puede arrastrarlo a una confusión mayor al influirlo y manipularlo, de tal manera que se crea una falsa personalidad. Como padres hay que considerar ese riesgo. También son comunes los grupos de dos amigos inseparables que pasan juntos todo el día, y cuando se separan físicamente siguen en contacto por teléfono o internet. Estas amistades pueden servir para impulsarse uno al otro, pero también si uno domina sobre el otro o hay demasiada dependencia entre ellos, puede ser en menoscabo de su desarrollo personal. Se ha dicho que el grupo llega a tener mayor influencia que los padres, aunque esto depende de cada caso y no es una verdad absoluta. Ambas influencias tienden a complementarse. En las decisiones que afectarán su futuro, los adolescentes suelen reproducir esquemas de sus padres. En aquello que afecta solamente su presente, sus deseos y necesidades actuales, siguen el criterio de sus amigos. El adolescente desarrollará posteriormente la necesidad de brindarse por completo a los demás, llegando a tener su propia relación personal que lo hace conocerse en actitudes y capacidades de una manera profunda. Al sentirse distinto a los demás, surge su deseo de encontrar un amigo que lo comprenda y que comparta su proyectos, sus ideales, sus deseos y que a la vez compartan éxitos y fracasos, esto lo lleva a idealizar al amigo o amigos con los que interactúa de manera cotidiana.

Los cambios específicos de esta etapa Adolescencia media (14-16 años)

1. Comienzan a entenderse y encontrarse a sí mismos, se van integrando mejor al mundo que los rodea, van de manera significativa venciendo su timidez. 2. Su conducta es más serena, se muestran menos frágiles ante las contrariedades. 3. Tienen un mayor autodominio, controla mejor sus impulsos, logrando cambios positivos en su personalidad.

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4. Es la época de tomar decisiones, por lo que aparecen los intereses profesionales. El sentido de la responsabilidad ante el propio futuro los lleva a trazarse un plan de vida. 5. Se observa un mayor interés por cuestiones sexuales lo que, unido a la capacidad para salir de sí mismos, les permite establecer relaciones más profundas con personas del sexo opuesto y de su mismo sexo.

Los ideales y valores en la adolescencia El adolescente necesita ideales pues la maduración de la personalidad es el resultado del balance que logre establecer entre sus sueños y frustraciones, “conciencia de sus propios valores, creencias y necesidades” (Puerta, 2006:3) El idealismo, la creatividad y el coraje que tienen los adolescentes son la materia prima perfecta para emprender proyectos y forjar metas altas. Los padres deben ayudarlos a encauzar hacia allá esta energía. Frecuentemente los padres de adolescentes se quejan de que no saben qué hacer para que sus hijos despierten, refieren que andan como zombies por la vida o se la pasan soñando. Cuando se observa la reacción del joven ante situaciones de pobreza, daño a individuos o injusticias, puede percibirse su reacción en su lenguaje no verbal, es decir denota rabia y frustración ante esos hechos. Esto se observaría en la mayoría de los jóvenes, pues la incomodidad apasionada con lo establecido y el deseo de corregirlo es una de las características de la adolescencia. Los adolescentes no deben de verse como seres frágiles o débiles e incluso egoístas. En realidad son individuos que transitan por una etapa natural de crecimiento y desarrollo que los conduce a la madurez, como todos tienen sus ideales, aspiraciones, objetivos y metas. Son luchadores y defensores ante hechos de injusticia y protegerán aquello que consideran correcto. Si bien es cierto que les causa un desgaste físico, recuperan rápidamente su energía para muchas actividades. Regularmente experimentan cambios de humor y que pierden el interés de un momento a otro y lo que los puede entusiasmar desaparece rápidamente. El papel de los padres será el de orientarles para lograr estabilizar sus emociones. Para tomar decisiones correctas ante situaciones difíciles y que son importantes para el adolescente, éste debe buscar valores morales y normas de conducta que le orienten en su vida, le pongan orden y le den sentido. Cuando el adolescente amplía sus relaciones sociales, se percata de que existen opiniones y creencias contrarias a las aprendidas en su hogar, por lo que puede comenzar a cuestionarlas. El adolescente puede cambiar sus valores morales, influido por sus experiencias, nuevas informaciones o personas que admira. Es decisivo el proceso de formación de la conciencia moral, es decir, del criterio que le permite distinguir lo que es bueno y lo que es malo; lo que es bueno y lo que es mejor. En la formación de los ideales intervienen los adultos que son estimuladores que saben despertar el entusiasmo, que contagian con su estilo de vida e invitan a la reflexión y a emplear el sentido crítico a los adolescentes.

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Los primeros adultos en transmitir los ideales suelen ser los padres, siempre y cuando sepan contagiar a sus hijos con sus ganas de vivir y su forma de asumirla. Luego será algún profesor que además de saber impartir su materia, sabe conectar con sus alumnos, sabe hacerles buenas preguntas y guiarlos a descubrir buenas respuestas. La motivación de una persona en la vida está constituida en gran parte por ideales. ¿Qué es un ideal? Es una idea de futuro hecha afectividad. Es decir, es algo que se quiere y se ama. Lo que nos hace luchar y dar nuestro mayor y mejor esfuerzo. Los ideales mueven a las personas y en especial a los adolescentes y es preciso potenciarlos, ya que son un elemento poderoso de crecimiento y maduración personal. Cuando los adolescentes ven frustrados sus ideales en el corto plazo y de una manera repetida tienden a convertirse en insolentes, indiferentes retadores de la autoridad y escépticos. Si algo actúa en contra del idealismo juvenil es el materialismo en el cual vive la sociedad actual, el consumismo, la corrupción, el cinismo con que se actúa aún en contra de los principios morales y de la ley. Por ello es común encontrar jóvenes que viven en la inmediatez, sin ilusión por el mañana, en la búsqueda de diversión y placer. Pero también están los jóvenes que son atrapados por grupos radicales ideológicos (políticos, criminales, religiosos, entre otros) que aprovechan su generosidad e idealismo para reclutarlos en sus filas. Y existen los jóvenes que igualmente bien encaminados por sus padres, sus maestros o amigos, invierten sus energías y tiempo en labores socialmente importantes, el deporte, la salud, la cultura, la educación, la solución de los problemas de la comunidad o de la sociedad.

Rasgos no comunes en la adolescencia En algunos adolescentes el desarrollo del sentido crítico les lleva a la duda sistemática de la autoridad intelectual de los adultos. Sus nuevos mitos pueden ser los amigos, los escritores, los actores de televisión o los cantantes de moda, además de surgir la necesidad de generar sus propias ideas. A veces, y en algunos jóvenes, la agresividad de esta fase se radicaliza, dando lugar a transgresiones del orden social de forma intencionada. Esto se debe a que desearía lograr la admiración de los demás por lo que hacen, pero cuando no se lo toma en serio, entonces se puede comportar de manera agresiva: hacer groserías, brutalidades, excesos, transgresiones. Pero todo ello no es sino una defensa y protección de sus propias ideas.

La personalidad Es el patrón de sentimientos, pensamientos y conducta que presenta una persona y que persiste a lo largo de su vida, a través de diferentes situaciones. La personalidad está integrada por el carácter y el temperamento.

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El carácter Carácter es el modo en que un individuo siente, piensa y reacciona de acuerdo a su entendimiento y voluntad, de acuerdo con Aceves (2000: 220) “el carácter es el tipo de reacción que el individuo ha adquirido, con base en el temperamento, pero modificado por la razón, la voluntad, la educación y la experiencia”. Dicho de otro modo, es el conjunto de peculiaridades psíquicas adquiridas de la persona. Depende de la actividad del individuo y de sus condiciones de vida, y se manifiesta en lo que la persona hace. El carácter controla el temperamento.

Temperamento Es la manera del ser humano de actuar de forma natural en el medio ambiente con el que interactúa, “el temperamento es una tendencia innata; es el resultado de la constitución corporal” (Aceves, 2000: 220). El temperamento es innato y el carácter es modificado por varios factores y elementos, que en conjunto definen la personalidad de los individuos.

Factores y elementos del carácter

a) Factores: Biológicos: temperamento, sexo. Sociales: educación, ambiente. Físicos: apariencia, constitución física, simetría del cuerpo, “defectos”. b) Elementos: Dependen más bien del individuo que del ambiente. La actividad psíquica: entendimiento, voluntad. Las condiciones de adaptación, su reacción al medio. Los valores o ideales de cada individuo, frutos de la educación, del ambiente familiar y social y de las propias ideas religiosas o estéticas.

El estudio del temperamento y del carácter El carácter es el conjunto de peculiaridades psíquicas adquiridas de la persona. Depende de la actividad del individuo y de sus condiciones de vida, y se manifiesta en lo que la persona hace. El carácter controla el temperamento. En cambio, el temperamento es la manera natural y espontánea que tiene cada persona para reaccionar ante los estímulos internos y externos. Es un rasgo hereditario y congénito de la persona; su base es biológica. En realidad es más importante descubrir el propio temperamento porque es básico, la primera naturaleza. El temperamento, aunque esté “educado” y en parte dominado, tiende

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a imponerse y saltar en la conducta cuando el individuo pierde el propio control quizá por un estímulo muy fuerte o inesperado. Esto es lo que expresamos cuando decimos: “me saltó el temperamento” (Aceves, 2000: 221) No podemos hablar de temperamentos buenos o malos; sencillamente son disposiciones innatas que pueden tomar un rumbo bueno o malo.

Tipología de Heymans-Le Senne El estudio fue empezado por los holandeses Heymans, médico y psicólogo, y Wiersma, psiquiatra. En Francia siguió el estudio Le Senne y Paul Grieger. Este último ha publicado varias obras ya traducidas al español. “De acuerdo a la escuela francesa iniciada por Heymans y continuada por Le Senne, el carácter parte de tres propiedades; emotividad, actividad y resonancia. Así, el carácter de una persona puede ser: emotivo o no emotivo, activo o no activo y primario o secundario”.

Resumen de los elementos y los tipos caracterológicos de estos autores Elementos del carácter Disposiciones energéticas: 1. Emotividad 2. Actividad

Emotividad (E): Es la capacidad de conmoción psicológica (impresionabilidad ante los estímulos interiores y exteriores) Actividad (A): capacidad de pasar rápidamente a la acción, a la realización de ideas y proyectos. Disposiciones modales: 1. Retentividad. 2. Amplitud del campo de conciencia.

1. La retentividad: Es una propiedad mixta con base fisiológica y expresión caracterológica. Las representaciones (imágenes, ideas) pueden tener una acción inmediata (primaria) o continuada (secundaria). En los tipos “primarios” las impresiones son fugaces y las reacciones inmediatas. En los “secundarios” las impresiones subsisten y las reacciones son retardadas o inhibidas. (Aceves, 1981: 222) 2. Amplitud del campo de conciencia: El sujeto tendrá un campo estrecho o amplio según la capacidad de retener en la conciencia un número de representaciones diferentes. La emoción, la sorpresa, estrechan el campo; el descanso, la imaginación, la amplían.

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Disposiciones tendenciales: indican la dirección hacia dónde se dirige el interés del Yo. a) Hacia sí mismo: es el egocentrismo que tiene a centrarlo todo en la propia persona; falta de desprendimiento y generosidad. b) Hacia los demás: alocentrismo o tendencia a ocuparse de los demás para servirles. Es un tipo sociable. c) Hacia los valores: espirituales (religiosidad), materiales. En el alocentrismo debemos considerar la agresividad en un sentido especial, como el deseo, la tendencia a “agradar”, o de luchar; es el contrario del indiferente o conciliador. Disposiciones auxiliares: inteligencia (analítica o sintética), pasión intelectual, aptitudes mentales. Tipos caracterológicos según Le Senne Carácter

Fórmula

Aspectos positivos

Aspectos negativos

Colérico

EAP

Activo, enérgico, práctico

Impulsivo, poco ordenado, orgulloso, poco amable

Apasionado

EAS

Tenaz, constante, generoso, responsable

Susceptible, desconfiado, crítico, exigente, indócil

Nervioso

EnAP

Sensible, generoso, imaginativo

Excitable, inconstante, imprevisor, falto de dominio

Sentimental

EnAS

Sentimientos profundos, perseverante

Indeciso, susceptible, egoísta, melancólico

Sanguíneo

nEAP

Activo, locuaz, compasivo, práctico, dócil

Superficial, inconstante, egoísta

Flemático

nEAS

Tenaz, tranquilo, prudente, responsable

Apático, autosuficiente, poco sensible

Amorfo

nEnAP

Optimista, bondadoso, tranquilo, sociable

Inactivo, impuntual, desordenado

Apático

nEnAS

Equilibrado, dócil

Egoísta, poco sensible, busca la soledad

Para cada tipo de carácter o temperamento, hay normas educativas para mejorar los aspectos positivos, los valores y educar o modificar los aspectos negativos.

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Resumen: Tipos caracterológicos, sus cualidades y su educación (El contenido de este cuadernillo así como sus tablas, está basado en el capítulo “Psicotipología de Heymans y Le Senne” publicado en el libro de Quintanilla Madero, Beatriz (2003), Personalidad Madura: Temperamento y Carácter, Publicaciones Cruz O., México. pp. 31-40)

Nervioso (E, Na, P)

Cualidades positivas Podemos señalar que entre las cualidades más positivas que posee el nervioso están la sensibilidad y la generosidad, lo que le hace muy apto para valorar cualquier manifestación artística. Entre los nerviosos se encuentra el mayor número de poetas. La curiosidad, la imaginación vivísima y la capacidad creadora son también resortes positivos de este carácter. Le llevan a vivir y sentir todo lo que pasa a su alrededor. Su vida es un constante rosario de emociones. Aspectos negativos Su extraordinaria emotividad le suele llevar a una constante variabilidad de sentimientos, lo que hoy le hace feliz, mañana puede ser un sufrimiento. La excitación y la falta de dominio es otro de los aspectos que le pueden hacer fracasar en muchas ocasiones. El desorden, fruto de una actividad movida muchas veces por las emociones e impulsos, más que por la razón, es otra característica que le hace poco rentable en su trabajo. Son personas que van y vienen veinte veces al mismo sitio en busca de una cosa y vuelven sin ella al final. Está tan ensimismado con su excesiva imaginación, que pierde el interés por lo que tiene entre las manos. La improvisación y la chapuza son los sistemas a los que acude para salir de los atolladeros, en los que se mete por su falta de organización. Las diversiones, el juego y en ocasiones los estupefacientes son vicios en los que puede caer el nervioso, en su búsqueda constante de emociones nuevas. El “mariposeo” afectivo es otra de sus debilidades. Es el eterno romántico que en la mayoría de las ocasiones se enamora por pequeñeces o tonterías que le llaman la atención. Otros defectos importantes del nervioso son su falta de puntualidad y de objetividad al enjuiciar. Tampoco suele rendir demasiado en el trabajo, a pesar de que se mueve mucho y arma el ruido de cuatro; porque su falta de orden y constancia le lleva a dejar las cosas a medias. La inclinación a la melancolía y a la tristeza se convierte en arma de doble filo para el nervioso. Por un lado le hace fascinante y sugestivo, por otro lo encierra en la pasividad e inactividad.

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Objetivos educativos El objetivo educativo fundamental para este carácter es conseguir el dominio de sí, de su imaginación y su emotividad que suelen ser los puntos que más le pueden traicionar. Para ello ocuparle el tiempo en actividades constructivas, vigilar las novelas y películas que sean formativas y no le agranden su fantasía y su irrealismo. El otro campo por cultivar es el del orden y la constancia. Será bueno plantearle cada día pequeños objetivos, exigiéndole que los cumpla. Ayudarle a archivar sus papeles, a ordenar sus libros. El hacer fichas de sus lecturas, usar con frecuencia la agenda o una libreta donde apuntar horarios, metas, logros y fracasos, etc., le puede ser útil para controlarse. Estimularle a que razone y medite sus impulsos; que empiece una tarea y la termine antes de iniciar otra. Campos donde desarrollar bien su personalidad Las actividades artísticas o que requieran sensibilidad e imaginación son las más adecuadas para este tipo. La moda, la literatura, la pintura, la música, la cerámica, la poesía, cualquier trabajo que requiera capacidades creativas. El gusto por la novedad y la curiosidad también le hacen sentirse a gusto en los campos del periodismo o de los negocios; aunque en estos últimos debe controlar su desorganización y su tendencia a gastar sin control. La elegancia innata y sus buenas formas le llevan a desempeñar un buen papel en las relaciones públicas; pero aquí deberá dominar sus impulsos y anarquía neuróticos, que le llevarían al fracaso y a las discusiones.

Sentimental (E, Na, S)

Cualidades positivas Entre las cualidades de este carácter están la sencillez, la perseverancia y la generosidad. Es bastante caritativo y con sentimientos profundos y firmes; cuando se agrede su persona lo siente más que otro carácter. La meditación y el llegar a los más profundos porqué de los problemas, también son cualidades propias de él. Es cumplidor y perseverante por lo que suele tener pocos, pero grandes amigos, a los que no abandona fácilmente. Aspectos negativos La tendencia a la melancolía y la susceptibilidad le llevan en muchas ocasiones a cerrarse en sí mismo y a la introversión. El sentimental se duele por todo y de todo. La indecisión y los escrúpulos, de tanto rumiar y rumiar las cosas, producen inactividad en este carácter. El gusto por la soledad le hace arisco y poco comunicativo, dificultándole las relaciones con los demás y llevándole a posturas egoístas y poco enriquecedoras.

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Objetivos educativos No dejar que el sentimentalismo y la melancolía le dominen. Para ello fomentarle el deporte y la actividad que le ayudarán a no estar rumiando las cosas y evitar las susceptibilidades, fomentándole la sinceridad y el diálogo. Ayudarle a abrirse a los demás y a valorar sus cualidades, ampliando su sentido de la amistad. Abrir el círculo de amistades le ayudará a combatir la timidez y los complejos. Apuntarse en clubs deportivos, asistir a charlas, conferencias, reuniones, etc., puede ser un buen sistema para estimular su sensibilidad y combatir su introversión. Ayudarle a que “no busque los tres pies al gato”, ni a que se pare en pequeñeces como: “me han dicho” “me han mirado de una forma”, “su voz no era agradable”, etc. Campos donde desarrolla bien su personalidad Dada su tendencia a profundizar en los “porqués” de todo y en su gran capacidad de lógica y razonamiento. Todas las actividades que requieran reflexión y serenidad son las más apropiadas para él. La medicina también es buen terreno para desarrollar sus cualidades y energías. Debe vigilar sus escrúpulos que le pueden jugar una mala pasada y convertirle en mártir de su propia conciencia moral. Como tiene gran riqueza interior, donde vuelca su actividad suele dejar huella. No son personas de masas, pero sí de pocas amistades selectas y duraderas. También tienen un profundo amor por los animales, lo que hace que se desenvuelvan bien en profesiones que estén en contacto con éstos: veterinarios, criadores de perros, cuidadores de caballos, etc.

Colérico (E, A, P)

Cualidades positivas El colérico es sociable por naturaleza, tiene una gran capacidad oratoria y una elocuencia arrebatadoras; conquista al auditorio con su energía y decisión. La alegría, el espíritu de servicio y ayuda a los demás, así como el gusto por las novedades y los cambios, le hace caer simpático y tener multitud de amistades. Se hace amar y suele ser popular, arrastrando a los demás detrás de sí. Tiene gran confianza en el porvenir y en los hombres, es futurista. No suele ser rencoroso ni crítico con los demás. Es generoso con una piedad activa. Ha nacido para actuar y actúa. Ante un accidente, un percance, una pelea, etc., será el primero en intervenir aportando ayuda y soluciones. No se acobarda ni retrocede ante dificultades o críticas. Se enfrenta a la vida con todo corazón, por lo que es el carácter mejor constituido para la felicidad, ya que manifiesta una espontánea alegría de vivir. La improvisación y la rapidez son también cualidades suyas. Suele ser rápido en el trabajo y tiene facilidad para solucionar problemas o dificultades imprevistas.

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Aspectos negativos La falta de reflexión y la impulsividad primaria le pueden acarrear dificultades y problemas. Con la ira y las reacciones violentas se puede canjear enemigos que su alegría y sociabilidad no lograrán conquistar de nuevo. El desorden y la falta de docilidad son también peligrosos para este carácter. El orgullo y la vanidad ante sus iniciativas y éxitos lo llevan en ocasiones a menospreciar y a humillar a los demás. A veces este orgullo es un recurso que utiliza para tapar sus debilidades. Objetivos educativos La reflexión sobre sus actos es un hábito que tiene que conseguir el colérico. Después de un arranque de ira o de una reacción violenta le conviene apuntar en un papel los pros y los contras de su actuación. Al ver las dos columnas —de resultados positivos y negativos— él mismo se dará cuenta de que tiene que aprender a controlarse. Es muy importante ayudarle a lograr el dominio de sí mismo, ya que cuando se deja llevar por sus instintos surgen la mayoría de sus problemas y fracasos. La humildad y la obediencia le son muy necesarias para doblegar su orgullo y su indocilidad. También es importante frenar su activismo arrollador, enseñándole a organizar y planificar sus actividades. En ocasiones, por desorden y exceso de abarcar mucho, puede caer en la ineficacia y resultar informal. Campos para desarrollar su personalidad La oratoria, que es uno de sus fuertes, le introduce bien en el terreno de la abogacía, la política o las actividades misioneras. El periodismo, las relaciones públicas, la publicidad, las ventas, también le encajan, dada su capacidad enorme de convencimiento. Su sentido práctico y su enorme activismo le impulsan a los negocios, las operaciones financieras, etc.

Apasionado (E, A, S)

Cualidades positivas El apasionado es un carácter de sentimientos fuertes, con una extraordinaria fuerza de voluntad cuando se propone algún objetivo. Tiene también estupendas dotes de mando y organización. Muchos generales y directores de empresa se encuentran enmarcados en este tipo. Napoleón es un vivo exponente de estas cualidades. Es idealista y ama el montar y organizar siempre cosas nuevas. Cuando hace suyo un ideal, y lo siente como propio, no existen dificultades ni problemas para lograrlo.

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Es autoritario, activo e impulsivo. También tiene una gran capacidad de trabajo y no se cansa nunca. Por ejemplo, se comenta que R. Poincaré “reventaba” a sus secretarias y que Pasteur “hacía la vida muy difícil” a sus colaboradores. El apasionado es generoso, tiende más a las personas que a las cosas. Su trabajo suele tener una finalidad social preeminentemente. También son familiares y les gusta la vida de hogar, donde se encuentran a gusto y pueden enriquecer a los demás. Este carácter apoyado en sus aspectos positivos puede llegar a metas muy altas, pues el liderazgo y el triunfo van con él. Aspectos negativos A pesar de sus grandes cualidades, este carácter puede cosechar estruendosos fracasos si no vigila sus aspectos negativos, que también los tiene. El desorden es una de sus notas negras. La vanidad y el orgullo le llevan a sobrevalorarse y confiar en unas capacidades personales muy por encima de la realidad. Grandes jefes han perdido su autoridad y sus éxitos al dejarse llevar por esta vanidad y este sobrevalorar las posibilidades personales. Si seguimos observando el ejemplo histórico de Napoleón, veremos cómo sus cualidades positivas le llevaron a grandes triunfos, pero las negativas a estrepitosos fracasos. La impulsividad ciega y la falta de reflexión le llevan a perder, por una decisión mal tomada, todo el esfuerzo del trabajo hecho con anterioridad. La dureza de juicio es otra de sus notas negativas. Lo mismo que se conmueve profundamente ante la desgracia, se inclina a juzgar con crueldad. Objetivos educativos Al apasionado es necesario proponerle ideales altos y nobles en los que verterá toda su energía. Después de ejecutar una acción, hacerle reflexionar, examinando las causas y fines. Fijar una jerarquía de valores dentro de sus acciones y un horario que le ayuden a vencer su desorden natural. Organizarle sus actividades es importante, para que no dilapide energías y logre alcanzar sus objetivos, previamente delimitados. Inculcarle la humildad que contrarreste su orgullo, y la dulzura y suavidad, que frene su impulsividad y dureza. La comprensión con este carácter es importante para que adquiera él también dicho patrón de conducta. Campos donde puede desarrollarse bien El apasionado ha nacido para realizar grandes obras, no admite quedarse en mediocridades. Si concreta su actividad en alguna tarea artística llegará adonde se proponga. Ahí está la obra de Miguel Ángel como ejemplo. En trabajos de dirección y organización, también se encontrará a punto. Así como en actividades que requieran la relación pública y el contacto con los demás: sociología, periodismo, medicina, etc.

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Para los negocios tiene gran facilidad, dado su espíritu de iniciativa y de búsqueda de novedades, así como su gran capacidad de trabajo.

Sanguíneo (Ne, A, P)

Cualidades positivas Entre las cualidades positivas de este tipo podemos apuntar su gran sentido práctico de la vida. Es realista y positivo ante los hechos. Al guiarse por la reflexión, más que por el instinto, suele tener un buen sentido de la objetividad. Es activo, locuaz y divertido; con un profundo sentido de la ironía y una gran capacidad de improvisación. También es dócil y no suele guardar rencor a quien le juega una mala pasada. El sanguíneo suele ser correcto y educado; las intemperancias o reacciones bruscas no van con él. Aspectos negativos La fanfarronería y la ironía mordaz suelen llevarle a crearse enemistades; suele rehuir el esfuerzo y el sacrificio personal, lo que le lleva a tener una enorme tendencia a la comodidad y a la búsqueda de lo fácil. Esta comodidad es la que le hace ser egoísta, con un egoísmo utilitario que busca su beneficio personal y su “tranquilidad”. También suele tener tendencia a buscar las apariencias externas y a ser oportunista y calculador. Objetivos educativos La educación del sanguíneo hay que basarla en sus cualidades positivas. Por ejemplo, para combatir su tendencia a la fanfarronería y a las apariencias externas, apelar a su enorme sentido práctico, haciéndole ver la poca rentabilidad de ambas posturas. El espíritu de mortificación y la constancia son cualidades que hay que inculcarle. Así se pueden combatir sus tendencias egoístas, y su sentido oportunista y calculador del trabajo y la actividad. Campos donde puede realizarse En las relaciones humanas tiene un buen terreno para el éxito, si consigue dominar algunos defectos como el egoísmo. Son grandes diplomáticos, por lo que todos los trabajos que tengan relación con el público le agradan (ventas, relaciones públicas, asistentes sociales, etc.). También tiene aptitudes políticas. Maquiavelo y Mazarino, dos de los políticos más sagaces de la historia, pertenecían a este tipo. En general, el sanguíneo tiene gran habilidad con los demás hombres, de ahí sus grandes posibilidades en puestos políticos. No es social

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como el apasionado a quien gusta dirigir, ni popular como el colérico que arrastra multitudes, es más bien político y mundano. La capacidad de oratoria y el talento de la improvisación, le hacen ejercer buenos papeles en asambleas parlamentarias o en tertulias intelectuales.

Flemático (Ne, A, S)

Cualidades positivas La tranquilidad y el equilibrio son cualidades importantes en este tipo de carácter. Habla reposadamente y en los momentos de crisis para otros caracteres, éste permanece calmo y sereno; por ello suele mantener una igualdad de humor, las estridencias no van con él. También entre estas cualidades podemos señalar el orden. Normalmente suele ser metódico en sus costumbres y ordenado en sus actividades. Franklin, el inventor del teléfono y del telégrafo, en un viaje que realizó a América decidió no perder el tiempo en el trayecto; durante la travesía fue programando todos sus ideales y aspiraciones. Después a lo largo de su vida, cumplió rigurosamente cada uno de los objetivos que se había marcado en aquel viaje. Este sentido del orden, unido a su enorme perseverancia, que en ocasiones llega a la tenacidad, hace que consiga resultados satisfactorios, donde otros caracteres hubieran tenido fracasos. Darwin, con gran paciencia elaboró la doctrina de la selección natural de las especies, lo que le llevó treinta y tres años, desde le expedición del Beagle hasta la publicación de El origen de las especies (1836-1859). El flemático es justo el reverso del apasionado; la paciencia, el equilibrio y la tranquilidad son sus mejores aliadas. Aspectos negativos La frialdad y la apatía son los grandes defectos del flemático. Con frecuencia aparece con poco “calor humano”, lo que le suele crear antipatías. A veces su prudencia resulta exagerada, así como su meticulosidad, pasando de virtud a defecto. En la convivencia con los demás, esta meticulosidad exagerada puede crear un clima desagradable a su alrededor ya que exige a los otros con minuciosidad. Objetivos educativos Al flemático es preciso fomentarle la capacidad de decisión y el entusiasmo por las cosas y las personas. Así se puede vencer su frialdad y apatía. La valentía y el espíritu de sacrificio es otra de las cualidades que hay que inculcarle. Que cada día se fije unas metas para ayudar a interesarse por los demás. Es bueno explotar su constancia y perseverancia, para que alcance los objetivos que le hayamos planteado. Estos, si lo estimulan suficientemente, los llevará a la práctica sin dudarlo.

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La entrega a los demás y la generosidad son muy necesarias a este carácter, para salir de su introversión y apatía. Apuntarle en clubs y asociaciones con fines altruistas, es una buena forma de que ocupe su tiempo y desarrolle sus energías. Campos donde desarrolla bien su personalidad Todas aquellas actividades que requieren orden y método son las más apropiadas para él. Tareas administrativas o de laboratorio. El campo de la investigación y la filosofía, que requieren paciencia y objetividad, también le ofrecen múltiples posibilidades. Los archivos y las bibliotecas le suelen agradar. En general, todos aquellos trabajos que requieren paciencia, meticulosidad y orden. Al flemático no le importará estar horas y horas ante una probeta, hasta conseguir el resultado deseado; trabajo que la superactividad del apasionado no aguantaría.

Amorfo (Ne, Na, P)

Cualidades positivas Este carácter, junto con el apático, es de los menos emprendedores y de los más pasivos. La bondad natural es una de sus cualidades principales; difícilmente se contraría y suele ser condescendiente con los demás. Esta bondad, unida a su optimismo natural (nada les parece malo o triste) le hace mantener buenas relaciones con los demás. Aunque se debe tener en cuenta que la sociabilidad que manifiesta es más bien fruto de su tolerancia que de su interés por los demás. También es dócil y obediente. Se somete fácilmente a la disciplina y a la autoridad. Aspectos negativos El amorfo está caracterizado fundamentalmente por la pasividad y el reposo. La pereza y la negligencia son sus peores enemigos. En muchas ocasiones pierde muchas de sus cualidades intelectuales por la extremada pereza. Los intereses materiales (comida, bebida, sexo) predominan en él, teniendo una gran tendencia a dar todas las satisfacciones a su cuerpo. Esto le lleva en ocasiones a la bebida y a los bajos fondos. La falta de sentido práctico es otro de sus aspectos negativos y le conduce en ocasiones a la ruina y a dilapidar los bienes que posee. La impuntualidad y el desorden también les suele acompañar. Es el eterno incumplidor, no por malicia, sino por pereza y falta de interés. Objetivos educativos Al amorfo hay que imponerle una actividad inmediata y concreta, exigiéndole que la cumpla con puntualidad y orden. “Imponer” porque realmente hay que estar encima de él, para lograr resultados positivos.

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Si se le deja actuar por sí solo, es posible que su falta de interés le lleve a abandonar las actividades al menor descuido. El deporte y todo lo que le mantenga en movimiento le va muy bien como terapia educativa. Es necesario evitarle la rutina y estimularle constantemente, para que no se quede inactivo. Suele ser goloso y comedor, por lo que será interesante controlarle esos placeres gastronómicos para que no caiga en una excesiva obesidad y con ella disminuya también su actividad. Como no suele ser compasivo ni generoso con los demás, es importante inculcarle valores de compañerismo, servicio a los demás y altruismo. Campos donde puede desarrollar su personalidad Al ser de entre todos los caracteres el menos emprendedor y trabajador, realmente triunfa en pocas actividades. Entre amorfos y apáticos se encuentran pocos personajes que hayan aportado algo a la marcha del mundo. Cuando han aparecido en la historia, ha sido más bien por razones ajenas a su actividad: herencia, trasmisión de poder, etc. Por ejemplo, el rey Luis XV, pasó a la historia por el puesto que ocupó en la dinastía francesa y el trono que heredó de sus padres. De todas formas, cuando se le estimula y se consigue vencer su pasividad, el amorfo tiene un gran talento escénico y musical. Tiene facilidad para la mímica y gran flexibilidad para adaptarse a papeles artísticos. Puede ser buen músico y actor.

Apático (Ne, Na, S)

Características positivas El apático es también un carácter pasivo y tranquilo. El equilibrio, la docilidad y la continuidad, se pueden señalar entre sus rasgos más positivos. Sin embargo, necesita una fuerte disciplina educativa para ponerle en acción. Aspectos negativos El apático es el carácter más sombrío y melancólico, el más introvertido y cerrado; habla muy poco, a veces puede estar horas y horas sin abrir la boca, aunque se encuentre en medio de una reunión animada. Cuando adopta una idea se empecina en ella y llega a la terquedad. El egoísmo, la crueldad y la avaricia le pueden llevar en ocasiones hasta el delito. Es frío e inmutable, ninguna desgracia ajena le conmueve. Su gran egocentrismo le conduce en muchas ocasiones a los trastornos mentales. Objetivos educativos Como se puede ver por sus aspectos negativos, el apático es de los caracteres que requiere mayor ayuda del exterior ante su carencia casi total de entusiasmo e iniciativa, hay que vencer con la educación su enorme tendencia a la inercia.

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Para ello planificarle numerosas actividades, ocuparle todo su tiempo para evitar que se encierre en sí mismo. Fomentarle las amistades, que le ayudarán a salir de su Yo y a participar más en la actividad social. Que participe en excursiones, deportes de equipo, clubes de exploradores, etc., le puede venir muy bien. Inculcarle sentimientos de piedad y estimularle a que preste algunos servicios a los que le rodean, es también importante. Al ser el más pasivo de todos los caracteres su campo de actividad se ve muy limitado. Requiere fuertes dosis de disciplina para incorporarse a cualquier trabajo y no abandonarlo. La educación le puede ayudar a no convertirse en un parásito social.

Resumen Se observa que todos los tipos caracterológicos tienen sus pros y sus contras. El valor y el triunfo de un carácter sólo depende de la utilidad que el sujeto sepa obtener de sus cualidades. En este sentido, es importante a la hora de educar, conocer el carácter del niño y saber qué tácticas y objetivos es preciso plantearse con él, para lograr con su carácter una personalidad rica y madura. De hecho, a lo largo de la historia vemos personajes de casi todos los caracteres que triunfaron en los diversos campos de la actividad humana: filosofía, arte, ciencia, investigación. Su éxito está en que supieron dominar sus defectos y explotar sus cualidades. También se puede oír a muchos padres lamentarse, “los hemos educado a todos igual”, ante hijos rebeldes o que fracasan en los estudios o se comportan diferente a sus hermanos; el error está en muchas ocasiones en haber seguido las mismas pautas educativas para todos, sin percatarse de que cada hijo tiene sus exigencias personales y sus características propias.

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Formato de evaluación de sesión 1 (segunda parte) Plantel__________________________________________________ Turno______________________ Evaluación de la sesión núm. __________________________ realizada el día __________________ Aspecto/ calificación

Excelente (4)

Bueno (3)

Regular (2)

Insuficiente (1)

Deficiente (0)

Me resultó interesante Obtuve aprendizajes valiosos La exposición fue clara Las actividades me ayudaron La sesión me hizo reflexionar Los materiales fueron Mi opinión global de la sesión Nombre y firma del participante___________________________________________________________ Grado de escolaridad ___________________________________________________________________ Comentarios y sugerencias _______________________________________________________________

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