Semana del Semana del 05 al 11 de Octubre 2015

Semana del Semana del 05 al 11 de Octubre 2015 [E. Libro] [E.M.T] [R. Servicio] [Atalaya] Recuerda que haciendo clic en alguno de los anuncios donde...
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Semana del Semana del 05 al 11 de Octubre 2015

[E. Libro] [E.M.T] [R. Servicio] [Atalaya]

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[Canción 13][E. Libro] [Inicio] [ 13 ][ 14 ][ 15 ][ 16 ][ 17 ][ 18 ][ 19 ][ 20 ] cl cap. 31 párrs. 13-20 13, 14. ¿Qué implica adorar a Jehová, y por qué es propio que lo hagamos? [ 13 ] [Textos] Ahora bien, la comunicación con Jehová no es un simple diálogo, como el que sostendríamos con un amigo o un familiar. Es un medio por el cual lo adoramos y le tributamos la honra reverencial que tanto merece. Nuestra vida entera se rige por la adoración verdadera, la cual nos permite expresar a Dios amor y devoción incondicionales, al tiempo que nos une a todas sus criaturas fieles, tanto en el cielo como en la Tierra. En una visión, el apóstol Juan oyó a un ángel que proclamaba este mandato: “Adoren al que hizo el cielo y la tierra y el mar y las fuentes de las aguas” (Revelación 14:7). [ 14 ] [Textos] ¿Por qué debemos adorar a Jehová? Pensemos en las cualidades que hemos analizado, como su santidad, poder, autodominio, justicia, valor, misericordia, sabiduría, humildad, amor, compasión, lealtad y bondad. Hemos visto que Dios es el máximo exponente y la norma más elevada de todas las

virtudes. Cuando las examinamos en conjunto, percibimos que él es mucho más que una Persona grandiosa y admirable. Es inmensamente glorioso e infinitamente superior a nosotros (Isaías 55:9). Sin duda, es nuestro legítimo Soberano y merece que lo adoremos. Pero ¿cómo hemos de hacerlo? 15. ¿De qué manera adoramos a Jehová “con espíritu y con verdad”, y qué oportunidad nos brindan las reuniones cristianas? [ 15 ] [Textos] Jesús dijo: “Dios es un Espíritu, y los que lo adoran tienen que adorarlo con espíritu y con verdad” (Juan 4:24). Para adorar a Dios “con espíritu”, debemos contar con su espíritu y dejarnos guiar por él. Además, nuestra adoración debe estar en armonía con la verdad, o sea, con el conocimiento exacto que transmite en su Palabra. Las reuniones con los hermanos cristianos constituyen una magnífica oportunidad de adorar a Jehová “con espíritu y con verdad” (Hebreos 10:24, 25). Juntos le cantamos alabanzas, le oramos y realizamos un examen de su Palabra en el que somos tanto oyentes como parte activa. De este modo participamos en la adoración pura y le manifestamos nuestro amor. 16. ¿Cuál es un importantísimo mandato que han recibido los cristianos verdaderos, y por qué no podemos menos que obedecerlo? [ 16 ] [Textos] También lo adoramos cuando hablamos de él y lo alabamos públicamente (Hebreos 13:15). Sin lugar a dudas, el mandato de predicar las buenas nuevas de su Reino es uno de los más importantes que han recibido los cristianos verdaderos (Mateo 24:14). Lo obedecemos de todo corazón por amor a Jehová. Cuando pensamos en la forma en que “el dios de este sistema de cosas”, Satanás, “ha cegado las mentes de los incrédulos”, difundiendo terribles mentiras acerca de nuestro Dios, ¿acaso no sentimos vivos deseos de ser Testigos suyos para exponer la falsedad de tales calumnias? (2 Corintios 4:4; Isaías 43:10-12.) Y al reflexionar sobre las maravillosas cualidades de nuestro Padre celestial, ¿no nace en nosotros el ferviente anhelo de hablar de él con nuestros semejantes? En efecto, no hay mayor privilegio que ayudarlos a conocerlo y amarlo como nosotros.

17. ¿Qué abarca la adoración a Jehová, y por qué hemos de adorarlo con integridad?

podemos conseguir. Pensemos en cuántas cosas buenas lograremos de este modo.

[ 17 ] [Textos] La adoración que rendimos a Dios abarca aún más. En realidad, no excluye ningún aspecto de nuestra existencia (Colosenses 3:23). Si de verdad aceptamos a Jehová como Soberano, procuraremos hacer su voluntad en todos los campos: la familia, el trabajo, las relaciones personales y el ocio. Además, nos esforzaremos por servirle “con corazón completo”, con integridad (1 Crónicas 28:9). Esta adoración no deja lugar para tener un corazón dividido o llevar una doble vida, es decir, para las conductas hipócritas de quienes fingen servir a Dios y cometen graves pecados en secreto. La integridad impide tal hipocresía, y el amor la repudia. Otro freno es el temor piadoso, reverencia que, según indica la Biblia, permite mantener una estrecha relación con Jehová (Salmo 25:14).

20. ¿Qué nobles objetivos lograremos si imitamos a Jehová? [ 20 ] [Textos] Complaceremos al Padre celestial y regocijaremos su corazón (Proverbios 27:11). Llegaremos a ‘agradar plenamente’ a Jehová, pues él comprende nuestras limitaciones (Colosenses 1:9, 10). Y al seguir cultivando buenas cualidades en imitación de nuestro amado Padre, disfrutaremos del grandioso privilegio de ser iluminadores en un mundo sumido en tinieblas y alejado de Dios (Mateo 5:1, 2, 14). Así contribuiremos a difundir en la Tierra reflejos de la gloriosa personalidad de Jehová. ¡Qué honor tan grande!

Imitar a Jehová 18, 19. ¿Por qué es realista pensar que simples personas imperfectas pueden imitar a Jehová Dios? [ 18 ] [Textos] Cada sección de este libro termina con un capítulo que explica la forma de ser “imitadores de Dios, como hijos amados” (Efesios 5:1). Es fundamental recordar que, aun siendo imperfectos, podemos copiar el modelo que nos da Jehová al hacer uso de su poder, ejercer justicia, actuar con sabiduría y demostrar amor. ¿Cómo sabemos que realmente nos es posible hacerlo? Recordemos que el significado del nombre divino es que él hace que él mismo llegue a ser lo que elija para cumplir sus propósitos. Esta capacidad nos llena de asombro, y con razón; pero ¿escapa por completo a nuestro alcance? No. [ 19 ] [Textos] Los seres humanos estamos hechos a la imagen de Dios (Génesis 1:26). Por consiguiente, nos distinguimos de las demás criaturas del planeta. No somos esclavos del instinto, la genética o el medio ambiente en que crecemos. Disponemos de un maravilloso don divino: el libre albedrío. A pesar de nuestras limitaciones e imperfecciones, tenemos la libertad de escoger qué vamos a ser. ¿Queremos ser personas amorosas, sabias y justas que hacen buen uso de su poder? Pues gracias al espíritu de Jehová lo

[E.M.T] [Inicio] [P.S] [Nº1] [Nº2] [Nº3] [P.S] Lectura de la Biblia: 1 Crónicas 1 a 4 | Puntos Sobresalientes Respuestas a preguntas bíblicas: 1:18. ¿Quién fue el padre de Selah: Cainán o Arpaksad? (Lucas 3:35, 36.) El padre de Selah fue Arpaksad (Génesis 10:24; 11:12). El nombre “Cainán”, citado en Lucas 3:36, bien pudiera ser una distorsión del término “caldeos”. Si así fuera, el texto original diría “el hijo del caldeo Arpaksad”. Otra posibilidad es que los nombres Cainán y Arpaksad aludan a la misma persona. Cabe mencionar que la expresión “hijo de Cainán” no aparece en algunos manuscritos (Lucas 3:36, nota). 2:15. ¿Fue David el séptimo hijo de Jesé? No, no lo fue. Jesé tuvo ocho hijos, de los cuales David era el menor (1 Samuel 16:10, 11; 17:12). Al parecer, uno de ellos murió sin dejar descendencia. Por cuanto no tenía ninguna relevancia en la genealogía, Esdras omitió su nombre. 3:17. ¿Por qué se refiere Lucas 3:27 a Sealtiel, hijo de Jeconías, como el hijo de Nerí? El padre de Sealtiel fue Jeconías, y según parece, Nerí fue su suegro. Lucas se refiere al yerno de Nerí como si fuera hijo de este, del mismo modo que alude a José como el hijo de Elí, el padre de María (Lucas 3:23). 3:17-19. ¿Qué parentesco había entre Zorobabel, Pedaya y Sealtiel? Zorobabel fue hijo de Pedaya, y

Pedaya era hermano de Sealtiel. Sin embargo, hay veces que la Biblia llama a Zorobabel hijo de Sealtiel (Mateo 1:12; Lucas 3:27). Esto pudiera deberse a que Pedaya murió y fue Sealtiel quien crió a Zorobabel; o quizá Sealtiel murió sin hijos y Pedaya se casó con la viuda, según la ley del levirato, y de esa unión nació Zorobabel, el primogénito (Deuteronomio 25:5-10). Lecciones para nosotros: 1:1–9:44. Las genealogías de personas de la vida real prueban que todo el sistema relacionado con la adoración pura se basa en hechos y no en mitos. 4:9, 10. Jehová concedió la ferviente petición de Jabez de ensanchar pacíficamente su territorio para poder albergar a más personas temerosas de Dios. Nosotros también debemos rogarle de corazón que nuestra participación entusiasta en la obra de hacer discípulos produzca fruto.

[Nº1] Núm. 1: 1 Crónicas 1:28-42 28

Los hijos de Abrahán fueron Isaac e Ismael.

29

Estos son los orígenes de sus familias: El primogénito de Ismael, Nebayot, luego Quedar y Adbeel 30 y Mibsam, Mismá y Dumá, Masá, Hadad y Temá, 31 Jetur, Nafís y Quedemá. Estos fueron los hijos de Ismael. 32

En cuanto a los hijos de Queturá, la concubina de Abrahán, ella dio a luz a Zimrán y Joqsán y Medán y Madián e Isbaq y Súah. Y los hijos de Joqsán fueron Seba y Dedán. 33

Y los hijos de Madián fueron Efá y Éfer y Hanok y Abidá y Eldaá. Todos estos fueron los hijos de Queturá. 34

Y Abrahán llegó a ser padre de Isaac. Los hijos de Isaac fueron Esaú e Israel. 35

Los hijos de Esaú fueron Elifaz, Reuel y Jeús y Jalam y Coré. 36

Los hijos de Elifaz fueron Temán y Omar, Zefó y Gatam, Quenaz y Timná y Amaleq. 37

Los hijos de Reuel fueron Náhat, Zérah, Samah y

Mizá. 38

Y los hijos de Seír fueron Lotán y Sobal y Zibeón y Anah y Disón y Ézer y Disán. 39

Y los hijos de Lotán fueron Horí y Homam. Y la hermana de Lotán fue Timná. 40

Los hijos de Sobal fueron Alván y Manáhat y Ebal, Sefó y Onam.

Y los hijos de Zibeón fueron Ayá y Anah. 41

Los hijos de Anah: Disón.

Y los hijos de Disón fueron Hemdán y Esbán e Itrán y Kerán. 42

Los hijos de Ézer fueron Bilhán y Zaaván y Aqán.

Los hijos de Disán fueron Uz y Arán.

[Nº2] Núm. 2: Elí, I. Tema: La permisividad deshonra a Dios (it-1 págs. 789, 790) ELÍ, I (Ascendido; Elevado). Sumo sacerdote de Israel, quizás descendiente de Itamar, el cuarto hijo de Aarón mencionado por nombre. (Compárese con 2Sa 8:17; 1Re 2:27; 1Cr 24:3; Éx 6:23.) Juzgó a Israel en calidad de sumo sacerdote por cuarenta años, y durante su vida Samuel dio comienzo a su labor de profeta. (1Sa 4:18; 3:10-13, 19-21.) Los días de Elí se caracterizaron por hambre espiritual en Israel, puesto que la “palabra de Jehová se había hecho rara en aquellos días; no se diseminaba visión alguna”. (1Sa 3:1.) La primera vez que se menciona a Elí es en el capítulo 1 de Primero de Samuel. Elí estaba sentado afuera, junto al poste de la puerta del tabernáculo, y reprendió a la justa Ana pensando que estaba borracha, cuando, en realidad, ella había estado orando largamente a Jehová enfrente del tabernáculo. Ana respondió que no estaba borracha y dijo: “Es por la abundancia de mi preocupación y mi irritación que he hablado hasta ahora”. Ante esto, Elí la despidió en paz. Jehová contestó la oración de Ana, quien dio a luz un hijo, al que puso por nombre Samuel. Tan pronto como fue destetado, Ana cumplió con su voto y entregó al niño para que sirviese en el tabernáculo. (1Sa 1:9-18, 20, 24, 28; 2:11, 18.) Negligente en disciplinar a sus hijos. Elí fue negligente en aplicar la disciplina de Jehová, no solo como padre, sino también como sumo sacerdote de Israel. Sus dos hijos, Hofní y Finehás, oficiaban de sacerdotes, pero eran “hombres que no servían para nada”, interesados solamente en satisfacer su vientre y sus deseos sexuales inmundos. No estaban contentos con la porción del sacrificio que la ley de Dios les asignaba, e incluso se servían ellos mismos antes de dar atención a Jehová, de modo que enviaban a un servidor que exigía carne cruda al que presentaba la ofrenda antes de hacer humear la grasa sobre el altar. Los hijos de Elí, codiciosos y sensuales, practicaron el vicio y el robo en la tienda de reunión a expensas de la adoración pura de Jehová. Elí no los destituyó del cargo ni siquiera cuando tuvieron relaciones sexuales inmorales con las mujeres que servían a la entrada del tabernáculo, sino que tan solo los reprendió con suavidad. Honraba a sus hijos más que a Jehová. (1Sa 2:12-17, 22-25, 29.)

Con el transcurso del tiempo, un profeta de Dios fue con un mensaje de calamidad: el poder y la influencia de la casa de Elí serían cortados, de manera que ya no llegaría a haber un viejo en su casa. Además, se anunció que sus hijos corruptos morirían en un mismo día. (1Sa 2:27-36.) Cabe resaltar que Jehová corroboró su juicio sobre la casa de Elí a través del joven Samuel. (1Sa 3:11-14.) Samuel temía explicar el mensaje, pero lo hizo por petición de Elí, quien se resignó con humildad, diciendo: “Es Jehová. Lo que sea bueno a sus ojos, que lo haga”. (1Sa 3:15-18.) Jehová juzga a la casa de Elí. La retribución llegó según la palabra de Dios: Israel perdió unos 4.000 hombres en la batalla contra los filisteos. Luego, los israelitas decidieron transportar el Arca desde Siló al campamento, pensando que esta acción resultaría en victoria sobre sus enemigos, pero los filisteos atacaron con más fuerza. Como resultado, 30.000 israelitas murieron, el Arca fue tomada y Hofní y Finehás, que estaban con el Arca, murieron. Un benjamita se apresuró desde las líneas de batalla para llevar el informe a Elí. Ciego y débil, Elí, que para entonces contaba con noventa y ocho años de edad, estaba “sentado en el asiento al lado del camino”, y “su corazón se había puesto tembloroso a causa del arca del Dios verdadero”. Al oír que esta había sido tomada, cayó hacia atrás “y se le quebró la nuca, de modo que murió”. (1Sa 4:2-18.) Con el tiempo, la casa de Elí sufrió otro castigo, en este caso por medio del rey Saúl, cuando este ordenó sin piedad el asesinato de los sacerdotes de Nob, que eran descendientes de Elí por medio de Ahitub, hijo de Finehás. (1Sa 14:3; 22:11, 18.) Solo escapó de la masacre Abiatar, un hijo de Ahimélec, que siguió siendo sacerdote durante el reinado de David. (1Sa 22:20; 2Sa 19:11.) Sin embargo, Salomón destituyó a Abiatar como sacerdote debido a haber apoyado al conspirador rebelde Adonías. (1Re 1:7; 2:26, 27.) Así pues, el juicio de Jehová sobre la casa de Elí se cumplió, y se desposeyó a sus descendientes del sumo sacerdocio para siempre. (1Sa 3:13, 14.)

[Nº3] Núm. 3: ¿Quién es “el anticristo”? (it-1 págs. 143, 144) ANTICRISTO Significa “contra (o en lugar de) Cristo”. Aparece cinco veces en las Escrituras tanto en singular como en plural, todas ellas en dos de las epístolas de Juan. Este tema no era nuevo para los cristianos cuando Juan escribió sus cartas (alrededor del año 98 E.C.). En 1 Juan 2:18 se lee: “Niñitos, es la última hora, y, así como han oído que el anticristo (gr. an·tí·kjri·stos) viene, aun ahora ha llegado a haber muchos anticristos; del cual hecho adquirimos el conocimiento de que es la última hora”. La declaración de Juan muestra que hay

muchos anticristos individuales, aunque todos juntos podrían formar una persona compuesta designada como “el anticristo”. (2Jn 7.) El uso de la expresión “hora” para referirse a un período de tiempo relativamente breve o de duración indeterminada se encuentra en otros escritos de Juan. (Véanse Jn 2:4; 4:21-23; 5:25, 28; 7:30; 8:20; 12:23, 27.) De modo que no limita la aparición, existencia y actividad del anticristo a algún tiempo futuro, más bien, dice que ya está presente e indica que seguirá existiendo. (1Jn 4:3.) Identificación. Aunque en el pasado en repetidas ocasiones se ha intentado identificar al “anticristo” con un individuo, como pudiera ser Pompeyo, Nerón o Mahoma (este último a instancias del papa Inocencio III en 1213 E.C.), o con una organización específica — según la opinión de los protestantes “el anticristo” aplica al papado—, las declaraciones inspiradas de Juan muestran que el término tiene una aplicación amplia y abarca a todos aquellos que niegan que “Jesús es el Cristo” y el Hijo de Dios que vino “en carne”. (1Jn 2:22; 4:2, 3; 2Jn 7; compárese con Jn 8:42, 48, 49; 9:22.) El negar a Jesús como el Cristo e Hijo de Dios incluye necesariamente la negación de algunas o de todas las enseñanzas bíblicas sobre él: su origen, su lugar en el propósito de Dios, su cumplimiento de las profecías de las Escrituras Hebreas como el Mesías prometido, su ministerio, sus enseñanzas y sus profecías, así como cualquier forma de oposición a él o cualquier esfuerzo por reemplazarlo de su posición de Sumo Sacerdote y Rey asignado por Dios. Esto se ve en otros textos, que, si bien no usan el término “anticristo”, expresan en esencia la misma idea. Así, Jesús declaró: “El que no está de mi parte, contra mí está, y el que no recoge conmigo, desparrama”. (Lu 11:23.) En 2 Juan 7 se muestra que estos podrían actuar como engañadores, así que el “anticristo” incluiría a los que son “falsos Cristos” y “falsos profetas”, así como a aquellos que realizan obras poderosas en el nombre de Jesús pero que él clasifica como “obradores del desafuero”. (Mt 24:24; 7:15, 22, 23.) Además, en vista de la regla dada por Jesús en el sentido de que cualquier cosa que se hiciese contra sus verdaderos seguidores sería como hacérsela a él (Mt 25:40, 45; Hch 9:5), el término también debe incluir a quienes los persiguen, lo que significa que deberían quedar comprendidos en él tanto “Babilonia la Grande” como el “esclavo malo” mencionado en la parábola de Jesús. (Lu 21:12; Rev 17:5, 6; Mt 24:48-51.) Juan menciona específicamente a los apóstatas como parte del anticristo cuando hace referencia a aquellos que “salieron de entre nosotros”, al abandonar la congregación cristiana. (1Jn 2:18, 19.) Por lo tanto, incluye al “hombre del desafuero” o “hijo de la destrucción” del que habla Pablo, así como a los “falsos maestros” que Pedro denuncia por formar sectas destructivas y que „repudian hasta al dueño que los compró‟. (2Te 2:3-5; 2Pe 2:1; véase HOMBRE DEL DESAFUERO.) En la descripción simbólica de Revelación 17:8-15 y 19:19-21 se muestra que también son parte del

anticristo tanto reinos como naciones y organizaciones. (Compárese con Sl 2:1, 2.) Las Escrituras muestran que todas las partes integrantes del anticristo antes mencionadas se encaminan hacia su venidera destrucción a causa de su derrotero de oposición.

por qué permite Dios que suframos. Si pudiera preguntárselo a Dios, ¿cree usted que eso sería una falta de respeto? [Permita que la persona responda.] Job, un hombre que era fiel, quiso hacerle preguntas a Dios. [Lea Job 23:3-5.] Esta revista contiene tres preguntas que muchas personas quisieran hacerle a Dios y las respuestas que da la Biblia.”

[R. Servicio] [Inicio] 10 min. Necesidades de la congregación. Reunión de Servicio

Tema del mes: Demos “testimonio cabal de las buenas nuevas” (Hechos 20:24). Canción 82

10 min. Ideas para ofrecer las revistas en octubre. Análisis con el auditorio. Comience con dos demostraciones de cómo ofrecer las revistas utilizando las sugerencias de esta página. Analice las presentaciones de principio a fin. Algunas presentaciones La Atalaya 1 de octubre “Estamos mostrando a todos los vecinos este número de La Atalaya. [Muéstrele la portada de la revista.] Muchas personas creen que orar es una pérdida de tiempo, que nadie las oye. Otras creen que Dios sí escucha sus oraciones. ¿Qué piensa usted? [Permita que la persona responda.] Mire lo que la Biblia dice sobre la oración. [Lea Isaías 30:19.] Esta revista nos da pruebas de que Dios oye y contesta las oraciones que se hacen de la forma correcta y por las cosas apropiadas.”

¡Despertad! Octubre “Estamos visitando brevemente a las personas del vecindario y hemos notado que muchas se preguntan

10 min. ¿Cómo nos fue? Análisis con el auditorio. Pregunte a los publicadores cómo les ha beneficiado poner en práctica las sugerencias del artículo “Mejore sus habilidades en el ministerio: en territorios de negocios”. Pida a los presentes que relaten experiencias animadoras. Mejore sus habilidades en el ministerio: en territorios de negocios Por qué es importante. Como la mayoría de las personas trabajan durante muchas horas cada día, lo mejor es llevarles el mensaje del Reino a su lugar de empleo. Predicar en territorios de negocios suele ser ameno y productivo, pues siempre encontramos a las personas y, además, quienes trabajan allí reciben bien a los que ven como posibles clientes. Para que la predicación en este tipo de territorios sea eficaz, los publicadores deben ser prudentes y ejemplares en su forma de vestir y arreglarse (2 Cor. 6:3). El superintendente de servicio tiene que supervisar con atención con cuánta frecuencia se predica en los territorios de negocios y quién lo hace. Cómo hacerlo: Prepare una presentación breve. Si habla demasiado tiempo con un trabajador, quizás esté cerrando la puerta a futuras conversaciones con él. Visite los negocios durante las horas de menos trabajo, por ejemplo, al comienzo de la jornada laboral. Trate de hablar primero con el encargado y sea amable. Podría decirle algo así: “Estamos visitando

brevemente a las personas en sus lugares de trabajo porque es más fácil contactar con ellos así”. En unos pocos minutos, presente un tratado, las revistas u otra publicación. Es mejor no mencionar el sistema de donaciones a menos que nos pregunten cómo se financia nuestra obra, pues no queremos que nos confundan con vendedores. Si el encargado es amable, pídale permiso para hablar de manera breve con los demás trabajadores. En algunos lugares de empleo, quizás sea buena idea preguntar si podemos dejar algunas publicaciones en la sala de descanso. Sea prudente y flexible. Por ejemplo, si alguien está hablando con un cliente o está ocupado, es mejor que esperemos a que esté libre antes de presentarnos. Intente esto durante el mes: En la Noche de Adoración en Familia, ensaye una presentación que pudiera utilizar si predica en territorio de negocios. Canción 98 y oración

[Atalaya] [Inicio] [ 1 ][ 2 ][ 3 ][ 4 ][ 5 ][ 6 ][ 7 ][ 8 ][ 9 ][ 10 ][ 11 ][ 12 ][ 13 ][ 14 ][ 15 ][ 16 ][ 17 ][ 18 ][ 19 ][ 20 ][ 21 ][ 22 ][ 23 ][ 24 ][ 25 ] ¿Estamos preparados para el fin?

CANCION 128 CANCION 45

¿QUÉ RECUERDA? ¿Qué razones tenemos para confiar en que estamos viviendo en los últimos días? Aunque el tiempo siga pasando, ¿por qué debemos seguir alerta? ¿Qué debemos hacer para mantenernos pendientes del fin?

1, 2. ¿Qué tienen en común los siervos de Jehová de diferentes épocas? [ 1 ] [Textos] DURANTE mucho tiempo, los siervos de Jehová han estado pendientes del cumplimento de las profecías. Por ejemplo, Jeremías estuvo a la expectativa de la destrucción de Judá a manos de Babilonia, la cual ocurrió en el año 607 antes de nuestra era (Jer. 25:8-11). Isaías, quien profetizó que Jehová traería de vuelta a los judíos a su tierra, dijo: “Felices son todos los que se mantienen en expectativa” (Is. 30:18). Miqueas, que también esperaba el cumplimiento de las profecías de Jehová, aseguró: “Por Jehová me mantendré vigilante” (Miq. 7:7). Y por siglos, los siervos de Dios vivieron esperando que se cumplieran las profecías que se habían hecho sobre el Mesías o Cristo (Luc. 3:15; 1 Ped. 1:10-12).* nota: Encontrará una lista de profecías que se cumplieron en el Mesías en la página 200 del libro ¿Qué enseña realmente la Biblia?

[ 2 ] [Textos] Los siervos de Dios del día moderno también estamos vigilantes, pues esperamos el cumplimiento de las profecías relacionadas con el Reino. Mediante ese Reino, Jehová acabará con el sufrimiento, eliminará a la gente mala y liberará a su pueblo del terrible mundo de Satanás (1 Juan 5:19). Así que debemos mantener los ojos bien abiertos y reconocer que el fin está más cerca que nunca. 3. ¿Qué pregunta es probable que se hagan quienes llevan más años esperando el fin?

“Aun si tardara, manténte en expectación.” (HAB. 2:3)

[ 3 ] [Textos] Los siervos de Jehová estamos deseando ver el día en que la voluntad de Dios se haga “como en el cielo, también sobre la tierra” (Mat. 6:10). Sin embargo, a los que llevan más años

esperando con ilusión el fin de este mundo tal vez la espera se les esté haciendo muy larga. Por eso, quizás se pregunten por qué deben seguir alerta. Veamos. ¿POR QUÉ DEBEMOS SEGUIR ALERTA? 4. ¿Cuál es una de las principales razones que tenemos para no bajar la guardia? [ 4 ] [Textos] La Biblia explica con claridad cómo debemos esperar el fin de este sistema. Jesús mandó: “Manténganse alerta” y “manténganse despiertos” (Mat. 24:42; Luc. 21:34-36). El simple hecho de que Jesús nos haya dado este mandato es razón suficiente para no bajar la guardia. La organización de Jehová nos ha puesto el ejemplo. Vez tras vez nos ha recordado lo importante que es seguir “esperando y teniendo muy presente la presencia del día de Jehová” y lo necesario que es mantener la mirada bien fija en el nuevo mundo que Dios ha prometido (lea 2 Pedro 3:11-13). 5. ¿Por qué es más importante que nunca mantenerse alerta? [ 5 ] [Textos] Los cristianos del siglo primero tenían buenas razones para mantenerse alerta, pero nosotros tenemos muchas más. ¿Por qué? Porque estamos viviendo en la época de la presencia de Cristo. ¿Y cómo lo sabemos? Porque desde 1914 se ha estado cumpliendo la señal que él mismo dio: la situación mundial es cada día peor y las buenas nuevas del Reino se están predicando por todas partes. Está claro que vivimos en los últimos días, o “la conclusión del sistema de cosas” (Mat. 24:3, 7-14). Y en vista de que Jesús no dijo cuánto duraría este período, es indispensable que nos mantengamos bien alerta. 6. ¿Por qué debemos esperar que las cosas se pongan peor de lo que ya están? [ 6 ] [Textos] Pero tal vez alguien se pregunte: “¿Y si todavía falta mucho para que llegue el fin? ¿No será que las cosas tienen que ponerse mucho peor de lo que están ahora?”. Es cierto que la Biblia dice que la maldad aumentaría muchísimo en “los últimos días” (2 Tim. 3:1, 13; Mat. 24:21; Rev. 12:12). Por eso, aunque las cosas ya están mal, debemos esperar que se pongan peor.

7. ¿Qué nos enseña Mateo 24:37-39 sobre la situación del mundo cuando llegue “la gran tribulación”? [ 7 ] [Textos] Ahora bien, ¿cuánto tiene que empeorar la situación para que llegue “la gran tribulación”? (Rev. 7:14.) Por ejemplo: ¿cree usted que todos los países tienen que estar en guerra, que todas las personas tienen que pasar hambre o que en todas las familias tiene que haber alguien enfermo? Si eso fuera así, todo el mundo se vería obligado a reconocer que las profecías de la Biblia se están cumpliendo y que el fin está cerca. Sin embargo, Jesús dijo que la mayoría de la gente no haría caso a la señal de su presencia y que seguiría con su vida como si nada hasta que fuera demasiado tarde (lea Mateo 24:37-39). Como vemos, la Biblia muestra que la situación mundial no será tan extrema (Luc. 17:20; 2 Ped. 3:3, 4). 8. ¿Qué tienen claro quienes obedecen el mandato de Jesús de mantenerse alerta? [ 8 ] [Textos] En realidad, el cumplimiento de la señal solo necesita ser lo suficientemente claro como para que puedan reconocerlo quienes están siguiendo el mandato de Jesús de mantenerse alerta (Mat. 24:27, 42). Desde 1914 se han cumplido todos los detalles de la señal que dio Jesús. No hay duda de que ya vivimos en “la conclusión del sistema de cosas”, un período limitado que acabará cuando el mundo de Satanás sea destruido. 9. ¿Por qué nos mantenemos pendientes de la llegada del fin? [ 9 ] [Textos] Como vemos, los cristianos nos mantenemos pendientes de la llegada del fin porque así lo ha mandado Jesús y porque reconocemos la señal de su presencia. Si estamos tan seguros de que el fin vendrá pronto no es porque necesitemos algo en lo que creer, sino porque tenemos pruebas sólidas, basadas en la Biblia. Por eso nos mantenemos vigilantes. ¿HASTA CUÁNDO? 10, 11. a) ¿Por qué dijo Jesús a sus discípulos que debían estar listos? b) ¿Qué dijo Jesús que debían hacer sus discípulos si el fin no llegaba tan pronto

como esperaban? (Vea la ilustración del principio.) [ 10 ] [Textos] Muchos de nosotros hemos estado pendientes de la llegada del fin por décadas. Sin embargo, no podemos dejar que el paso del tiempo haga que nos durmamos en sentido espiritual. Llegue cuando llegue Jesús a destruir este mundo malvado, tenemos que estar listos. Recordemos lo que él dijo: “Sigan mirando, manténganse despiertos, porque no saben cuándo es el tiempo señalado. Es como un hombre que, al viajar al extranjero, dejó su casa y dio la autoridad a sus esclavos, a cada uno su trabajo, y mandó al portero que se mantuviera alerta. Por lo tanto, manténganse alerta, porque no saben cuándo viene el amo de la casa, si tarde en el día o a medianoche o al canto del gallo o muy de mañana; para que, cuando él llegue de súbito, no los halle durmiendo. Pero lo que les digo a ustedes, a todos lo digo: Manténganse alerta” (Mar. 13:33-37). [ 11 ] [Textos] Cuando nuestros hermanos comprendieron que la presencia de Jesús había comenzado en 1914, se dieron cuenta de que el fin podía llegar pronto y se prepararon. ¿Cómo? Predicando el Reino con más energía. Claro, Jesús dijo que era posible que llegara más tarde de lo que sus discípulos pensaban: “a medianoche o al canto del gallo o muy de mañana”. ¿Qué debían hacer en ese caso? Él mismo dijo: “Manténganse alerta”. De modo que, aunque la espera sea larga, no debemos tomarnos las cosas con calma o pensar que el fin nunca llegará. 12. a) ¿Qué le preguntó Habacuc a Jehová? b) ¿Qué le contestó Jehová? [ 12 ] [Textos] Pensemos en el profeta Habacuc, quien fue enviado a Jerusalén para advertir a sus habitantes de que la ciudad sería destruida. Otros profetas de Dios llevaban ya muchos años prediciendo aquella destrucción. La situación había llegado al punto en el que los malvados tenían oprimidos a los buenos y por todas partes había injusticia. Como es lógico, Habacuc le preguntó a Jehová: “¿Hasta cuándo clamaré a ti por socorro[?]”. En vez de decirle cuándo llegaría la destrucción, Jehová lo tranquilizó con estas palabras: “No llegará

tarde” y le mandó que se mantuviera alerta (lea Habacuc 1:1-4; 2:3).

13. a) ¿Qué hubiera podido pensar Habacuc? b) ¿Por qué hubiera sido un grave error pensar así? [ 13 ] [Textos] Imagínese que Habacuc se hubiera desanimado y hubiera pensado: “Llevo años oyendo que Jerusalén va a ser destruida. ¿Y si todavía falta mucho? ¿Por qué tengo que seguir advirtiendo a la gente como si la destrucción fuera a llegar mañana? Ahora les toca a otros”. Si hubiera pensado así, el profeta habría perdido su relación con Jehová, y tal vez habría muerto durante la invasión de los babilonios. 14. ¿Por qué nos sentiremos agradecidos de que Jehová haya insistido tanto en que nos mantengamos alerta? [ 14 ] [Textos] Ahora imagínese que usted ya está en el Paraíso. Las cosas han ocurrido tal y como Dios había predicho. Cuanto más piensa en ello, más crece su confianza en que se harán realidad las promesas que faltan por cumplirse (lea Josué 23:14). Jehová, el Dios que tiene control absoluto sobre el tiempo, ha traído el fin en el mejor momento. ¡Qué agradecido se siente usted de que le haya insistido tanto en que se mantuviera alerta! (Hech. 1:7; 1 Ped. 4:7). ADEMÁS DE ESPERAR HAY QUE ACTUAR 15, 16. ¿Por qué debemos esforzarnos más que nunca en la predicación? [ 15 ] [Textos] Podemos estar seguros de que la organización de Jehová seguirá recordándonos la urgencia de los tiempos. Pero no lo hará simplemente para mantenernos ocupados, sino para que no olvidemos que la señal de la presencia de Cristo se está cumpliendo y que debemos tener los ojos bien abiertos. ¿Qué es lo mejor que podemos hacer en vista del tiempo en que vivimos? ¡Pues buscar primero el Reino y la justicia de Dios, y predicar las buenas nuevas con entusiasmo! (Mat. 6:33; Mar. 13:10.) [ 16 ] [Textos] Hace años, una hermana dijo: “[Predicando] las buenas nuevas del reino de Dios [...]

podemos ayudar a rescatar a personas de la muerte segura en la venidera catástrofe mundial”. Y si alguien sabe algo de rescates es ella, pues en 1945 sobrevivió junto con su esposo al hundimiento del barco de lujo Wilhelm Gustloff, uno de los peores accidentes marítimos de la historia. Curiosamente, aun en una situación tan grave como esa, hay quienes pierden de vista lo que es realmente importante. La hermana recuerda a una mujer que no paraba de decir entre lágrimas: “¡Mis maletines! ¡Mis maletines! ¡Mis joyas! Todas mis joyas están abajo en el camarote. ¡He perdido todo!”. En cambio, otros pasajeros arriesgaron sus vidas tratando de rescatar a las personas que habían caído a las aguas heladas. Tal como aquellos pasajeros, nosotros nos esforzamos por rescatar a cuantas personas podamos. Para nosotros es urgente predicarles, pues se acerca el desastre más grande de la historia y queremos que sobrevivan.

deseo de llevar a cabo ese ataque, lo que puede ocurrir en cualquier momento y sin previo aviso (Rev. 17:17). Así es, el fin no está lejos. Por eso debemos obedecer la advertencia de Jesús: “Presten atención a sí mismos para que sus corazones nunca lleguen a estar cargados debido a comer con exceso y beber con exceso, y por las inquietudes de la vida, y de repente esté aquel día sobre ustedes instantáneamente como [una trampa]” (Luc. 21:34, 35; Rev. 16:15). Sirva a Jehová y no olvide que los tiempos son urgentes. Puede estar seguro de que él actuará “a favor del que se [mantenga] en expectación de él” (Is. 64:4).

17. ¿Por qué decimos que el fin puede llegar en cualquier momento? [ 17 ] [Textos] Las cosas que vemos hoy día demuestran sin lugar a dudas que las profecías de la Biblia se están cumpliendo y que el fin está a punto de ocurrir. No piense que tiene que pasar mucho más tiempo para que Babilonia la Grande, el imperio mundial de la religión falsa, sea atacada por “los diez cuernos” y “la bestia salvaje” (Rev. 17:16). Recuerde que será Dios quien plantará en sus corazones el

1. Un Testigo se queda hasta tarde viendo la televisión y a la mañana siguiente no se despierta a tiempo; 2. Un Testigo ve la televisión pero se acuesta temprano; a la mañana siguiente se levanta a tiempo para ir a predicar ¿Toma decisiones que lo ayuden a no distraerse y mantenerse alerta? (vea el párrafo 17)

18. ¿Qué pregunta analizaremos en el próximo artículo? [ 18 ] [Textos] El fin de este mundo malvado llegará. Mientras esperamos que eso suceda, actuemos y sigamos el consejo del discípulo Judas: “Amados, edificándose sobre su santísima fe, y orando con espíritu santo, manténganse en el amor de Dios, mientras esperan la misericordia de nuestro Señor Jesucristo con vida eterna en mira” (Jud. 20, 21). Ahora bien, ¿cómo podemos demostrar que estamos preparados para vivir en el paraíso que Dios ha prometido y que de verdad queremos que llegue? Lo veremos en el próximo artículo.

(Hebreos 13:15) Mediante él ofrezcamos siempre a Dios sacrificio de alabanza, es decir, el fruto de labios que hacen declaración pública de su nombre. (Mateo 24:14) Y estas buenas nuevas del reino se predicarán en toda la tierra habitada para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin. (2 Corintios 4:4) entre quienes el dios de este sistema de cosas ha cegado las mentes de los incrédulos, para que no pase [a ellos] la iluminación de las gloriosas buenas nuevas acerca del Cristo, que es la imagen de Dios. (Isaías 43:10-12) “Ustedes son mis testigos —es la expresión de Jehová—, aun mi siervo a quien he escogido, para que sepan y tengan fe en mí, y para que entiendan que yo soy el Mismo. Antes de mí no fue formado Dios alguno, y después de mí continuó sin que 11 lo hubiera. Yo... yo soy Jehová, y fuera de mí no hay 12 salvador.” “Yo mismo he anunciado y he salvado y he hecho que sea oído, cuando no había entre ustedes [dios] extraño. De modo que ustedes son mis testigos — es la expresión de Jehová—, y yo soy Dios.

Párrafo 17 Textos del Libro

Párrafo 13 (Revelación 14:7) y decía con voz fuerte: “Teman a Dios y denle gloria, porque ha llegado la hora del juicio por él, de modo que adoren al que hizo el cielo y la tierra y [el] mar y [las] fuentes de [las] aguas”.

Párrafo 14 (Isaías 55:9) Porque como los cielos son más altos que la tierra, así mis caminos son más altos que los caminos de ustedes, y mis pensamientos que los pensamientos de ustedes.

Párrafo 15 (Juan 4:24) Dios es un Espíritu, y los que lo adoran tienen que adorarlo con espíritu y con verdad”. (Hebreos 10:24, 25) Y considerémonos unos a otros 25 para incitarnos al amor y a las obras excelentes, sin abandonar el reunirnos, como algunos tienen por costumbre, sino animándonos unos a otros, y tanto más al contemplar ustedes que el día se acerca.

Párrafo 16

(Colosenses 3:23) Cualquier cosa que estén haciendo, trabajen en ello de toda alma como para Jehová, y no para los hombres, (1 Crónicas 28:9) ”Y tú, Salomón, hijo mío, conoce al Dios de tu padre y sírvele con corazón completo y con alma deleitosa; porque todos los corazones Jehová los está escudriñando, y toda inclinación de los pensamientos la está discerniendo. Si tú lo buscas, él se dejará hallar de ti; pero si lo dejas, él te desechará para siempre. (Salmo 25:14) La intimidad con Jehová pertenece a los que le temen, también su pacto, para hacer que lo conozcan.

Párrafo 18 (Efesios 5:1) Por lo tanto, háganse imitadores de Dios, como hijos amados,

Párrafo 19 (Génesis 1:26) Y Dios pasó a decir: “Hagamos [al] hombre a nuestra imagen, según nuestra semejanza, y tengan ellos en sujeción los peces del mar y las criaturas voladoras de los cielos y los animales domésticos y toda la tierra y todo animal moviente que se mueve sobre la tierra”.

Párrafo 20

(Proverbios 27:11) Sé sabio, hijo mío, y regocija mi corazón, para que pueda responder al que me está desafiando con escarnio. (Colosenses 1:9, 10) Por eso nosotros también, desde el día en que [lo] oímos, no hemos cesado de orar por ustedes y de pedir que se les llene del conocimiento exacto de su voluntad en toda sabiduría y comprensión 10 espiritual, para que anden de una manera digna de Jehová a fin de que [le] agraden plenamente mientras siguen llevando fruto en toda buena obra y aumentando en el conocimiento exacto de Dios, (Mateo 5:1, 2) Cuando vio las muchedumbres, subió a la montaña; y después que se sentó, vinieron a él sus 2 discípulos; y él, abriendo la boca, se puso a enseñarles, diciendo: (Mateo 5:14) ”Ustedes son la luz del mundo. No se puede esconder una ciudad cuando está situada sobre una montaña.

Textos Atalaya Párrafo 1 (Jeremías 25:8-11) 8 ”Por lo tanto, esto es lo que ha dicho Jehová de los ejércitos: ‘“Por la razón de que ustedes no obedecieron mis palabras, 9 miren, voy a enviar y ciertamente tomaré a todas las familias del norte —es la expresión de Jehová—, hasta [enviar aviso] a Nabucodorosor el rey de Babilonia, mi siervo, y ciertamente las traeré contra esta tierra y contra sus habitantes y contra todas estas naciones en derredor; y ciertamente los daré por entero a la destrucción y haré de ellos objeto de pasmo y algo de qué silbar y lugares devastados hasta tiempo indefinido. 10 Y ciertamente destruiré de entre ellos el sonido de alborozo y el sonido de regocijo, la voz del novio y la voz de la novia, el sonido del molino de mano y la luz de la lámpara. 11 Y toda esta tierra tiene que llegar a ser un lugar devastado, un objeto de pasmo, y estas naciones tendrán que servir al rey de Babilonia setenta años”’. (Isaías 30:18) 18 Y por lo tanto Jehová se mantendrá en expectación de mostrarles favor a ustedes, y por lo tanto se levantará para mostrarles misericordia. Porque Jehová es un Dios de juicio. Felices son todos los que se mantienen en expectativa de él.

(Miqueas 7:7) 7 Pero en cuanto a mí, por Jehová me mantendré vigilante. Ciertamente mostraré una actitud de espera por el Dios de mi salvación. Mi Dios me oirá. (Lucas 3:15) 15 Ahora bien, estando el pueblo en expectación, y todos razonando en sus corazones acerca de Juan: “¿Acaso será él el Cristo?”, (1 Pedro 1:10-12) 10 Respecto a esta misma salvación, los profetas que profetizaron acerca de la bondad inmerecida que había de ser para ustedes hicieron una indagación diligente y una búsqueda cuidadosa. 11 Siguieron investigando qué época en particular, o qué suerte de [época], indicaba respecto a Cristo el espíritu que había en ellos cuando este de antemano daba testimonio acerca de los sufrimientos para Cristo y acerca de las glorias que habían de seguir a estos. 12 A ellos les fue revelado que, no para sí mismos, sino para ustedes, ministraban las cosas que ahora han sido anunciadas a ustedes mediante los que les han declarado las buenas nuevas con espíritu santo enviado desde el cielo. En estas mismas cosas los ángeles desean mirar con cuidado. Párrafo 2 (1 Juan 5:19) 19 Sabemos que nosotros nos originamos de Dios, pero el mundo entero yace en el [poder del] inicuo. Párrafo 3 (Mateo 6:10) 10 Venga tu reino. Efectúese tu voluntad, como en el cielo, también sobre la tierra. Párrafo 4 (Mateo 24:42) 42 Manténganse alerta, pues, porque no saben en qué día viene su Señor. (Lucas 21:34-36) 34 ”Mas presten atención a sí mismos para que sus corazones nunca lleguen a estar cargados debido a comer con exceso y beber con exceso, y por las inquietudes de la vida, y de repente esté aquel día sobre ustedes instantáneamente 35 como un lazo. Porque vendrá sobre todos los que moran sobre la haz de toda la tierra. 36 Manténganse despiertos, pues, en todo tiempo haciendo ruego para que logren escapar de

todas estas cosas que están destinadas a suceder, y estar en pie delante del Hijo del hombre”. (2 Pedro 3:11-13) 11 Puesto que todas estas cosas así han de ser disueltas, ¡qué clase de personas deben ser ustedes en actos santos de conducta y hechos de devoción piadosa, 12 esperando y teniendo muy presente la presencia del día de Jehová, por el cual [los] cielos, estando encendidos, serán disueltos, y [los] elementos, estando intensamente calientes, se derretirán! 13 Pero hay nuevos cielos y una nueva tierra que esperamos según su promesa, y en estos la justicia habrá de morar. Párrafo 5 (Mateo 24:3) 3 Estando él sentado en el monte de los Olivos, se acercaron a él los discípulos privadamente, y dijeron: “Dinos: ¿Cuándo serán estas cosas, y qué será la señal de tu presencia y de la conclusión del sistema de cosas?”. (Mateo 24:7-14) 7 ”Porque se levantará nación contra nación y reino contra reino, y habrá escaseces de alimento y terremotos en un lugar tras otro. 8 Todas estas cosas son principio de dolores de angustia. 9 ”Entonces los entregarán a tribulación y los matarán, y serán objeto de odio de parte de todas las naciones por causa de mi nombre. 10 Entonces, también, a muchos se les hará tropezar, y se traicionarán unos a otros y se odiarán unos a otros. 11 Y muchos falsos profetas se levantarán y extraviarán a muchos; 12 y por el aumento del desafuero se enfriará el amor de la mayor parte. 13 Pero el que haya aguantado hasta el fin es el que será salvo. 14 Y estas buenas nuevas del reino se predicarán en toda la tierra habitada para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin. Párrafo 6 (2 Timoteo 3:1) 3 Mas sabe esto, que en los últimos días se presentarán tiempos críticos, difíciles de manejar. (2 Timoteo 3:13) 13 Pero los hombres inicuos e impostores avanzarán de mal en peor, extraviando y siendo extraviados.

(Mateo 24:21) 21 porque entonces habrá gran tribulación como la cual no ha sucedido una desde el principio del mundo hasta ahora, no, ni volverá a suceder. (Revelación 12:12) 12 A causa de esto, ¡alégrense, cielos, y los que residen en ellos! ¡Ay de la tierra y del mar!, porque el Diablo ha descendido a ustedes, teniendo gran cólera, sabiendo que tiene un corto espacio de tiempo”. Párrafo 7 (Revelación 7:14) 14 De modo que le dije inmediatamente: “Señor mío, tú eres el que sabe”. Y me dijo: “Estos son los que salen de la gran tribulación, y han lavado sus ropas largas y las han emblanquecido en la sangre del Cordero. (Mateo 24:37-39) 37 Porque así como eran los días de Noé, así será la presencia del Hijo del hombre. 38 Porque como en aquellos días antes del diluvio estaban comiendo y bebiendo, los hombres casándose y las mujeres siendo dadas en matrimonio, hasta el día en que Noé entró en el arca; 39 y no hicieron caso hasta que vino el diluvio y los barrió a todos, así será la presencia del Hijo del hombre. (Lucas 17:20) 20 Pero cuando los fariseos le preguntaron cuándo vendría el reino de Dios, les contestó y dijo: “El reino de Dios no viene de modo que sea llamativamente observable, (2 Pedro 3:3-4) 3 Porque ustedes saben esto primero, que en los últimos días vendrán burlones con su burla, procediendo según sus propios deseos 4 y diciendo: “¿Dónde está esa prometida presencia de él? Pues, desde el día en que nuestros antepasados se durmieron [en la muerte], todas las cosas continúan exactamente como desde el principio de la creación”. Párrafo 8 (Mateo 24:27) 27 Porque así como el relámpago sale de las partes orientales y resplandece hasta las partes occidentales, así será la presencia del Hijo del hombre. (Mateo 24:42) 42 Manténganse alerta, pues, porque no saben en qué día viene su Señor.

Párrafo 9

de todas las buenas palabras que Jehová su Dios les ha hablado ha fallado. Todas se han realizado para ustedes. Ni una sola palabra de ellas ha fallado.

Párrafo 10

(Hechos 1:7) 7 Les dijo: “No les pertenece a ustedes adquirir el conocimiento de los tiempos o sazones que el Padre ha colocado en su propia jurisdicción;

(Marcos 13:33-37) 33 Sigan mirando, manténganse despiertos, porque no saben cuándo es el tiempo señalado. 34 Es como un hombre que, al viajar al extranjero, dejó su casa y dio la autoridad a sus esclavos, a cada uno su trabajo, y mandó al portero que se mantuviera alerta. 35 Por lo tanto, manténganse alerta, porque no saben cuándo viene el amo de la casa, si tarde en el día o a medianoche o al canto del gallo o muy de mañana; 36 para que, cuando él llegue de súbito, no los halle durmiendo. 37 Pero lo que les digo a ustedes, a todos lo digo: Manténganse alerta”. Párrafo 11

(1 Pedro 4:7) 7 Pero el fin de todas las cosas se ha acercado. Sean de juicio sano, por lo tanto, y sean vigilantes en cuanto a oraciones. Párrafo 15 (Mateo 6:33) 33 ”Sigan, pues, buscando primero el reino y la justicia de [Dios], y todas estas [otras] cosas les serán añadidas. (Marcos 13:10) 10 También, en todas las naciones primero tienen que predicarse las buenas nuevas. Párrafo 16

Párrafo 12 (Habacuc 1:1-4) 1 La declaración formal que contempló en visión Habacuc el profeta: 2 ¿Hasta cuándo, oh Jehová, tengo que gritar por ayuda, sin que tú oigas? ¿[Hasta cuándo] clamaré a ti por socorro contra la violencia, sin que tú salves? 3 ¿Por qué me haces ver lo que es perjudicial, y sigues mirando simple penoso afán? ¿Y [por qué] hay expoliación y violencia enfrente de mí, y [por qué] ocurre la riña, y [por qué] se lleva la contienda? 4 Por lo tanto, la ley se entumece, y la justicia nunca sale. Porque el inicuo cerca al justo, por esa razón la justicia sale torcida. (Habacuc 2:3) 3 Porque [la] visión es todavía para el tiempo señalado, y sigue jadeando hasta el fin, y no dirá mentira. Aun si tardara, manténte en expectación de ella; porque sin falta se realizará. No llegará tarde. Párrafo 13

Párrafo 14 (Josué 23:14) 14 ”Ahora, ¡miren!, hoy me voy por el camino de toda la tierra, y ustedes bien saben con todo su corazón y con toda su alma que ni una sola palabra

Párrafo 17 (Revelación 17:16) 16 Y los diez cuernos que viste, y la bestia salvaje, estos odiarán a la ramera y harán que quede devastada y desnuda, y se comerán sus carnes y la quemarán por completo con fuego. (Revelación 17:17) 17 Porque Dios puso en sus corazones llevar a cabo Su pensamiento, aun llevar a cabo el solo pensamiento [de ellos] al dar ellos su reino a la bestia salvaje, hasta que se hayan realizado las palabras de Dios. (Lucas 21:34-35) 34 ”Mas presten atención a sí mismos para que sus corazones nunca lleguen a estar cargados debido a comer con exceso y beber con exceso, y por las inquietudes de la vida, y de repente esté aquel día sobre ustedes instantáneamente 35 como un lazo. Porque vendrá sobre todos los que moran sobre la haz de toda la tierra. (Revelación 16:15) 15 “¡Mira! Vengo como ladrón. Feliz es el que se mantiene despierto y guarda sus prendas de vestir exteriores, para que no ande desnudo y la gente mire su vergüenza.”

(Isaías 64:4) 4 Y desde tiempo muy remoto ninguno ha oído, ni nadie ha prestado oído, ni ningún ojo mismo ha visto a un Dios, fuera de ti, que obre a favor del que se mantiene en expectación de él.

3. A todo el mundo le quiero contar

Párrafo 18

las bendiciones que pronto traerás:

(Judas 20-21) 20 Pero ustedes, amados, edificándose sobre su santísima fe, y orando con espíritu santo, 21 manténganse en el amor de Dios, mientras esperan la misericordia de nuestro Señor Jesucristo con vida eterna en mira.

Tu santo Reino jamás pasará, tu voluntad en la Tierra se hará.

bajo tu Reino no habrá ya dolor, ni muerte ni llanto ni más clamor. Todos los males Jesús quitará, la creación de placer saltará. Gracias te doy con mi humilde oración

Canción 13 Acción de gracias

por ser mi Padre, mi Rey y mi Dios. (Véanse también Sal. 65:2, 4, 11; Fili. 4:6.) volver

Vista alternativa del documento (Salmo 95:2)

Canción 82 Seamos humildes como Cristo

1. Gran Soberano, bendito Creador, digno eres tú de alabanza y canción.

Vista alternativa del documento (Mateo 11:28-30)

Desde los cielos escuchas la voz del que te ora con el corazón. Ante tus ojos mis faltas están, mas no por eso la espalda me das. Cristo su sangre por mí derramó; tú me compraste, soy tu posesión. 2. ¡Oh, qué dichoso me siento al morar bajo tu sombra de amor y de paz! Haz que conozca tus sendas, Señor, líbrame con tu verdad del error. Tu fuerte brazo, ¿quién puede doblar? Con él sostienes al débil mortal.

1. En la Tierra nunca vivió un hombre igual, su alma jamás supo de vanidad. Si bien era el Hijo amado de Dios, paciente y humilde fue de corazón. 2. Al alma agobiada ofrece el Señor consuelo y alivio en su tribulación. El yugo de Cristo no es opresor; es suave y liviano, refleja su amor. 3. “Son todos hermanos”, lo dijo Jesús; por eso, sirvamos con solicitud. Si somos humildes, Jehová nos dará

la Tierra en herencia por siempre jamás.

podrás corazones abrir.

(Véanse también Mat. 5:5; 23:8; Pro. 3:34; Rom. 12:16.) volver

En ellos el grano germinará, y a su tiempo fruto verás. Mas no todos rinden igual cantidad; eso sí, gloria a Dios todos dan.

Canción 98

(Véanse también Mat. 13:19-23; 22:37.) volver

Sembremos las semillas del Reino Vista alternativa del documento (Mateo 13:4-8)

Canción 128 “La escena de este mundo está cambiando”

1. Oh, vengan, esclavos de Cristo que sirven con todo su ser,

Vista alternativa del documento (1 Corintios 7:31)

trabajen en la obra del Amo y sigan los pasos de él. Esparzan semillas de la verdad, sabiendo que algunas caerán en la tierra blanda de un buen corazón y seguro fructificarán. 2. Habrá corazones cerrados, tan duros como el pedernal; aun si la palabra aceptaran, su gozo será temporal. A otros, los cardos oprimirán, y fruto al final no darán. Su amor al dinero y a lo mundanal puede más que su amor a Jehová. 3. El éxito de tus labores en parte depende de ti. Con mucha paciencia y cariño

1. La muerte, el mal y el pecado al hombre han esclavizado, mas Dios su amor ha mostrado al darnos al Redentor. (ESTRIBILLO) La escena del mundo ya cambia, Dios colmará nuestras ansias de una vida mejor. 2. El mundo está agonizante, su fin se avista adelante. El Reino de Dios triunfante nos traerá bendición. (ESTRIBILLO) La escena del mundo

ya cambia,

Busca dar lo mejor de ti a Jehová,

Dios colmará nuestras ansias

solo así serás feliz.

de una vida mejor.

Por amor ve a buscar con afán

(Véanse también Sal. 115:15, 16; Rom. 5:15-17; 7:25; Rev. 12:5.) volver

al que quiera escuchar la verdad. Con tu ayuda podrá madurez lograr y la vida conseguir.

Canción 45

(Véanse también Fili. 1:27; 3:16; Heb. 10:39.) volver

¡Adelante! Vista alternativa del documento

1 Crónicas 1 a 4

(Hebreos 6:1)

1. ¡Adelante, adelante a la madurez!

El Primero de las Crónicas 1 Adán, Set, Enós, 2

Quenán, Mahalalel, Jared,

3

Enoc, Matusalén, Lamec,

4

Noé, Sem, Cam y Jafet.

Crece cada vez más en conocimiento y fe. Trata de mejorar siempre tu quehacer, y Dios te bendecirá. El mandato que nos dio el Señor, cumplirás con gran dedicación. Pide a Dios que te dé fuerzas y valor, él no te abandonará. 2. ¡Adelante, adelante, sin desmayar!

5

Los hijos de Jafet fueron Gómer y Magog y Madai y Javán y Tubal y Mesec y Tirás. 6

Y los hijos de Gómer fueron Askenaz y Rifat y Togarmá. 7

Y los hijos de Javán fueron Elisá y Tarsis, Kitim y Rodanim. 8

Buenas nuevas eternas anuncia en todo hogar.

Los hijos de Cam fueron Cus y Mizraim, Put y Canaán. 9

A Jehová, nuestro Rey, debes alabar, su mensaje difundir. No sucumbas jamás al temor, nunca aflojes en tu comisión. Deja oír la verdad con potente voz, fiel mantente hasta el fin. 3. ¡Adelante, adelante! ¡Ni un paso atrás! La labor grande es, hazte hábil y capaz.

Y los hijos de Cus fueron Sebá y Havilá y Sabtá y Raamá y Sabtecá. Y los hijos de Raamá fueron Seba y Dedán. 10

Y Cus mismo llegó a ser padre de Nemrod. Él fue quien dio comienzo a lo de hacerse un poderoso en la tierra. 11

En cuanto a Mizraim, él llegó a ser padre de [los] 12 ludim y [los] anamim y [los] lehabim y [los] naftuhim y [los] patrusim y [los] casluhim (de entre quienes procedieron los filisteos) y [los] caftorim. 13

En cuanto a Canaán, él llegó a ser padre de Sidón 14 su primogénito y de Het y del jebuseo y el amorreo y 15 16 el guirgaseo y el heveo y el arqueo y el sineo y el arvadeo y el zemareo y el hamateo.

17

Los hijos de Sem fueron Elam y Asur y Arpaksad y Lud y Aram, y Uz y Hul y Guéter y Mas. 18

En cuanto a Arpaksad, él llegó a ser padre de Selah, y Selah mismo llegó a ser padre de Éber. 19

Y a Éber le nacieron dos hijos. El nombre de uno fue Péleg, porque en sus días se dividió la tierra; y el nombre de su hermano fue Joqtán. 20

En cuanto a Joqtán, él llegó a ser padre de 21 Almodad y Sélef y Hazarmávet y Jérah y Hadoram y 22 23 Uzal y Diqlá y Obal y Abimael y Seba y Ofir y Havilá y Jobab; todos estos fueron los hijos de Joqtán. 24

Sem, Arpaksad, Selah,

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Éber, Péleg, Reú,

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Serug, Nacor, Taré,

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Abrán, es decir, Abrahán.

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Los hijos de Abrahán fueron Isaac e Ismael.

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Estos son los orígenes de sus familias: El primogénito de Ismael, Nebayot, luego Quedar y Adbeel 30 y Mibsam, Mismá y Dumá, Masá, Hadad y Temá, 31 Jetur, Nafís y Quedemá. Estos fueron los hijos de Ismael. 32

En cuanto a los hijos de Queturá, la concubina de Abrahán, ella dio a luz a Zimrán y Joqsán y Medán y Madián e Isbaq y Súah. Y los hijos de Joqsán fueron Seba y Dedán. 33

Y los hijos de Madián fueron Efá y Éfer y Hanok y Abidá y Eldaá. Todos estos fueron los hijos de Queturá.

41

Y los hijos de Disón fueron Hemdán y Esbán e Itrán y Kerán. 42

35

Los hijos de Esaú fueron Elifaz, Reuel y Jeús y Jalam y Coré. 36

Los hijos de Elifaz fueron Temán y Omar, Zefó y Gatam, Quenaz y Timná y Amaleq. 37

Los hijos de Reuel fueron Náhat, Zérah, Samah y

Mizá. 38

Y los hijos de Seír fueron Lotán y Sobal y Zibeón y Anah y Disón y Ézer y Disán. 39

Y los hijos de Lotán fueron Horí y Homam. Y la hermana de Lotán fue Timná. 40

Los hijos de Sobal fueron Alván y Manáhat y Ebal, Sefó y Onam. Y los hijos de Zibeón fueron Ayá y Anah.

Los hijos de Ézer fueron Bilhán y Zaaván y Aqán.

Los hijos de Disán fueron Uz y Arán. 43

Y estos son los reyes que reinaron en la tierra de Edom antes que reinara rey alguno sobre los hijos de Israel: Bela hijo de Beor, el nombre de la ciudad del cual 44 fue Dinhabá. Con el tiempo Bela murió, y Jobab hijo de Zérah de Bozrá empezó a reinar en lugar de él. 45 Con el tiempo Jobab murió, y Husam de la tierra de 46 los temanitas empezó a reinar en lugar de él. Con el tiempo Husam murió, y Hadad hijo de Bedad, que derrotó a Madián en el campo de Moab, empezó a reinar en lugar de él. Y el nombre de su ciudad fue Avit. 47 Con el tiempo Hadad murió, y Samlá de Masreqá 48 empezó a reinar en lugar de él. Con el tiempo Samlá murió, y Shaúl de Rehobot junto al Río empezó a reinar 49 en lugar de él. Con el tiempo Shaúl murió, y Baalhanán hijo de Acbor empezó a reinar en lugar de él. 50 Con el tiempo Baal-hanán murió, y Hadad empezó a reinar en lugar de él; y el nombre de su ciudad era Paú, y el nombre de su esposa era Mehetabel, hija de 51 Matred, hija de Mezahab. Con el tiempo Hadad murió. Y los jeques de Edom llegaron a ser el jeque Timná, 52 el jeque Alvá, el jeque Jetet, el jeque Oholibamá, el 53 jeque Elah, el jeque Pinón, el jeque Quenaz, el jeque 54 Temán, el jeque Mibzar, el jeque Magdiel, el jeque Iram. Estos fueron los jeques de Edom. 2 Estos fueron los hijos de Israel: Rubén, Simeón, 2 Leví y Judá, Isacar y Zabulón, Dan, José y Benjamín, Neftalí, Gad y Aser. 3

Los hijos de Judá fueron Er y Onán y Selah. Los tres le nacieron de la hija de Súa, la cananea. Y Er el primogénito de Judá llegó a ser malo a los ojos de 4 Jehová, de manera que él le dio muerte. Y Tamar su nuera fue quien le dio a luz a Pérez y Zérah. Todos los hijos de Judá fueron cinco. 5

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Y Abrahán llegó a ser padre de Isaac. Los hijos de Isaac fueron Esaú e Israel.

Los hijos de Anah: Disón.

Los hijos de Pérez fueron Hezrón y Hamul.

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Y los hijos de Zérah fueron Zimrí y Etán y Hemán y Calcol y Dará. Hubo cinco de ellos en total. 7

Y los hijos de Carmí: Acar, el acarreador de extrañamiento a Israel, que cometió un acto de infidelidad respecto a la cosa dada por entero a la destrucción. 8

Y los hijos de Etán: Azarías.

9

Y los hijos de Hezrón que le nacieron fueron Jerahmeel y Ram y Kelubai. 10

En cuanto a Ram, él llegó a ser padre de Aminadab. Aminadab, a su vez, llegó a ser padre de 11 Nahsón, el principal para los hijos de Judá. Nahsón, a su vez, llegó a ser padre de Salmá. Salmá, a su vez, 12 llegó a ser padre de Boaz. Boaz, a su vez, llegó a ser padre de Obed. Obed, a su vez, llegó a ser padre de 13 Jesé. Jesé, a su vez, llegó a ser padre de su

primogénito Eliab, y de Abinadab el segundo, y Simeá el 14 15 tercero, Netanel el cuarto, Radai el quinto, Ozem el 16 sexto, David el séptimo. Y las hermanas de ellos fueron Zeruyá y Abigail; y los hijos de Zeruyá fueron 17 Abisai y Joab y Asahel, tres. En cuanto a Abigail, ella dio a luz a Amasá; y el padre de Amasá fue Jéter el ismaelita. 18

En cuanto a Caleb hijo de Hezrón, él engendró hijos de Azubá su esposa y de Jeriot; y estos fueron los 19 hijos de ella: Jéser y Sobab y Ardón. Con el tiempo Azubá murió. De manera que Caleb tomó para sí 20 a Efrat, que con el tiempo le dio a luz a Hur. Hur, a su vez, llegó a ser padre de Urí. Urí, a su vez, llegó a ser padre de Bezalel. 21

Y después Hezrón tuvo relaciones con la hija de Makir el padre de Galaad. Y él mismo la tomó cuando él tenía sesenta años de edad, pero ella le dio a luz a 22 Segub. Segub, a su vez, llegó a ser padre de Jaír, que llegó a tener veintitrés ciudades en la tierra de Galaad. 23 Más tarde Guesur y Siria tomaron de ellos a Havotjaír, con Quenat y sus pueblos dependientes, sesenta ciudades. Todos estos fueron los hijos de Makir el padre de Galaad. 24

Y después de la muerte de Hezrón en Calebefrata, siendo Abías la esposa de Hezrón, ella entonces le dio a luz a Asjur el padre de Teqoa. 25

Y los hijos de Jerahmeel el primogénito de Hezrón fueron Ram el primogénito y Buná y Orén y Ozem, 26 Ahíya. Y Jerahmeel llegó a tener otra esposa, cuyo 27 nombre fue Atará. Ella fue la madre de Onam. Y los hijos de Ram el primogénito de Jerahmeel llegaron a ser 28 Maaz y Jamín y Équer. Y los hijos de Onam llegaron a ser Samai y Jadá. Y los hijos de Samai fueron Nadab y 29 Abisur. Y el nombre de la esposa de Abisur fue Abiháil, y con el tiempo ella le dio a luz a Ahbán y Molid. 30 Y los hijos de Nadab fueron Séled y Apaim. Pero 31 Séled murió sin hijos. Y los hijos de Apaim: Isí. Y los 32 hijos de Isí: Sesán; y los hijos de Sesán: Ahlai. Y los hijos de Jadá el hermano de Samai fueron Jéter y 33 Jonatán. Pero Jéter murió sin hijos. Y los hijos de Jonatán fueron Pélez y Zazá. Estos llegaron a ser los hijos de Jerahmeel. 34

Y Sesán no llegó a tener hijos, sino hijas. Ahora bien, Sesán tenía un siervo egipcio cuyo nombre era 35 Jarhá. De manera que Sesán dio su hija a Jarhá su siervo por esposa, la cual con el tiempo le dio a luz a 36 Atai. Atai, a su vez, llegó a ser padre de Natán. Natán, 37 a su vez, llegó a ser padre de Zabad. Zabad, a su vez, llegó a ser padre de Eflal. Eflal, a su vez, llegó a ser 38 padre de Obed. Obed, a su vez, llegó a ser padre de Jehú. Jehú, a su vez, llegó a ser padre de Azarías. 39 Azarías, a su vez, llegó a ser padre de Hélez. Hélez, a 40 su vez, llegó a ser padre de Eleasá. Eleasá, a su vez, llegó a ser padre de Sismai. Sismai, a su vez, llegó a ser 41 padre de Salum. Salum, a su vez, llegó a ser padre de Jeqamías. Jeqamías, a su vez, llegó a ser padre de Elisamá. 42

Y los hijos de Caleb el hermano de Jerahmeel fueron Mesá su primogénito, que fue el padre de Zif, y

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los hijos de Maresah el padre de Hebrón. Y los hijos de Hebrón fueron Coré y Tapúah y Réquem y Sema. 44 Sema, a su vez, llegó a ser padre de Raham el padre de Jorqueam. Réquem, a su vez, llegó a ser padre de 45 Samai. Y el hijo de Samai fue Maón; y Maón fue el 46 padre de Bet-zur. En cuanto a Efá la concubina de Caleb, ella dio a luz a Harán y Mozá y Gazez. En cuanto 47 a Harán, él llegó a ser padre de Gazez. Y los hijos de Jahdai fueron Réguem y Jotán y Guesán y Pélet y Efá y 48 Sáaf. En cuanto a Maacá la concubina de Caleb, ella 49 dio a luz a Séber y Tirhaná. Con el tiempo ella dio a luz a Sáaf el padre de Madmaná, a Sevá el padre de Macbená y el padre de Guibeá. Y la hija de Caleb fue 50 Acsá. Estos llegaron a ser los hijos de Caleb. Los hijos de Hur el primogénito de Efrata: Sobal el 51 padre de Quiryat-jearim, Salmá el padre de Belén, 52 Haref el padre de Bet-gader. Y Sobal el padre de Quiryat-jearim llegó a tener hijos: Haroé, la mitad de los 53 menuhot. Y las familias de Quiryat-jearim fueron los itritas y los putíes y los sumatitas y los misraítas. Fue de estos de quienes salieron los zoratitas y los estaolitas. 54 Los hijos de Salmá fueron Belén y los netofatitas, Atrot-bet-joab y la mitad de los manahatitas, los zoritas. 55 Y las familias de los escribanos que moraban en Jabez fueron los tirateos, los simeateos, los sucateos. Estos fueron los quenitas que vinieron de Hammat el padre de la casa de Recab. 3 Y estos llegaron a ser los hijos de David que le nacieron en Hebrón: el primogénito Amnón, de Ahinoam la jezreelita; el segundo, Daniel, de Abigail la carmelita; 2 el tercero, Absalón hijo de Maacá hija de Talmai el rey 3 de Guesur; el cuarto, Adonías hijo de Haguit; el quinto, Sefatías, de Abital; el sexto, Itream, de Eglá su esposa. 4 Hubo seis que le nacieron en Hebrón; y continuó reinando allí siete años y seis meses, y por treinta y tres años reinó en Jerusalén. 5

Y estos le nacieron en Jerusalén: Simeá y Sobab y Natán y Salomón —cuatro de Bat-seba hija de Amiel— 6 7 e Ibhar y Elisamá y Elifélet, y Noga y Néfeg y Jafía, 8 9 y Elisamá y Eliadá y Elifélet, nueve, todos los hijos de David además de los hijos de las concubinas, y Tamar la hermana de ellos. 10

Y el hijo de Salomón fue Rehoboam, Abías su hijo, 11 Asá su hijo, Jehosafat su hijo, Jehoram su hijo, 12 Ocozías su hijo, Jehoás su hijo, Amasías su hijo, 13 Azarías su hijo, Jotán su hijo, Acaz su hijo, Ezequías 14 su hijo, Manasés su hijo, Amón su hijo, Josías su hijo. 15 Y los hijos de Josías fueron: el primogénito, Johanán; el segundo, Jehoiaquim; el tercero, Sedequías; el 16 cuarto, Salum. Y los hijos de Jehoiaquim fueron 17 Jeconías su hijo, Sedequías su hijo. Y los hijos de 18 Jeconías como prisionero fueron Sealtiel su hijo y Malkiram y Pedaya y Senazar, Jeqamías, Hosamá y 19 Nedabías. Y los hijos de Pedaya fueron Zorobabel y Simeí; y los hijos de Zorobabel fueron Mesulam y 20 Hananías (y Selomit fue hermana de ellos); y Hasubá 21 y Ohel y Berekías y Hasadías, Jusab-hésed, cinco. Y los hijos de Hananías fueron Pelatías y Jesayá, los hijos de [Jesayá] Refayá, los hijos de [Refayá] Arnán, los hijos de [Arnán] Abdías, los hijos de [Abdías] Secanías;

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y los hijos de Secanías, Semaya, y los hijos de Semaya, Hatús e Igal y Barías y Nearías y Safat, seis. 23 Y los hijos de Nearías fueron Elioenai e Hizquías y 24 Azriqam, tres. Y los hijos de Elioenai fueron Hodavías y Eliasib y Pelayá y Aqub y Johanán y Delayá y Ananí, siete. 4 Los hijos de Judá fueron Pérez, Hezrón y Carmí y 2 Hur y Sobal. En cuanto a Reayá hijo de Sobal, él llegó a ser padre de Jáhat; Jáhat, a su vez, llegó a ser padre de Ahumai y de Lahad. Estas fueron las familias de los 3 zoratitas. Y estos fueron [los hijos] del padre de Etam: Jezreel e Ismá e Idbás, (y el nombre de la hermana de 4 ellos fue Hazelelponí,) y Penuel el padre de Guedor y Ézer el padre de Husá. Estos fueron los hijos de Hur el 5 primogénito de Efrata el padre de Belén. Y Asjur el padre de Teqoa llegó a tener dos esposas, Helá y 6 Naará. Con el tiempo Naará le dio a luz a Ahuzam y Héfer y Temení y Haahastarí. Estos fueron los hijos de 7 Naará. Y los hijos de Helá fueron Zéret, Izhar y Etnán. 8 En cuanto a Qoz, él llegó a ser padre de Anub y Zobebá y las familias de Aharhel hijo de Harum. 9

Y Jabez llegó a ser más honorable que sus hermanos; y fue su madre quien lo llamó por nombre 10 Jabez, diciendo: “Lo he dado a luz con dolor”. Y Jabez empezó a invocar al Dios de Israel, diciendo: “Si me bendices sin falta y verdaderamente agrandas mi territorio y tu mano realmente resulta estar conmigo, y realmente [me] conservas de calamidad, para que no me lastime...”. Por consiguiente, Dios hizo que llegara [a suceder] lo que había pedido. 11

En cuanto a Kelub el hermano de Suhá, él llegó a 12 ser padre de Mehir, que fue el padre de Estón. Estón, a su vez, llegó a ser padre de Bet-rafá y Paséah y Tehiná el padre de Ir-nahás. Estos fueron los hombres 13 de Recá. Y los hijos de Quenaz fueron Otniel y 14 Seraya, y los hijos de Otniel: Hatat. En cuanto a Meonotai, él llegó a ser padre de Ofrá. En cuanto a Seraya, él llegó a ser padre de Joab el padre de Gueharasim; porque artífices llegaron a ser. 15

Y los hijos de Caleb hijo de Jefuné fueron Iru, Elah 16 y Naam; y los hijos de Elah: Quenaz. Y los hijos de 17 Jehalelel fueron Zif y Zifá, Tiría y Asarel. Y los hijos de Ezrá fueron Jéter y Méred y Éfer y Jalón; y ella llegó a concebir a Míriam y a Samai y a Isbah el padre de 18 Estemoa. En cuanto a su esposa judía, ella dio a luz a Jéred el padre de Guedor y a Héber el padre de Socó y a Jequtiel el padre de Zanóah. Y estos fueron los hijos de Bitías la hija de Faraón, a quien Méred tomó. 19

Y los hijos de la esposa de Hodías, la hermana de Náham, fueron el padre de Queilá el garmita y Estemoa 20 el maacatita. Y los hijos de Shimón fueron Amnón y Riná, Ben-hanán y Tilón. Y los hijos de Isí fueron Zóhet y Ben-zóhet. 21

Los hijos de Selah hijo de Judá fueron Er el padre de Lecá y Laadá el padre de Maresah y las familias de la casa de los que trabajan en tela fina de la casa de 22 Asbea; y Joquim y los hombres de Cozebá y Joás y Saraf, que llegaron a ser dueños de esposas moabitas, y Jasubí-léhem. Y los dichos son de tradición antigua.

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Ellos eran los alfareros y los habitantes de Netaim y de Guederá. Con el rey en su obra era con quien moraban allí. 24

Los hijos de Simeón fueron Nemuel y Jamín, Jarib, 25 Zérah, Shaúl, Salum su hijo, Mibsam su hijo, Mismá 26 su hijo. Y los hijos de Mismá fueron Hamuel su hijo, 27 Zacur su hijo, Simeí su hijo. Y Simeí tuvo dieciséis hijos y seis hijas; pero sus hermanos no tuvieron muchos hijos, y ninguna de sus familias tuvo tantos 28 como los hijos de Judá. Y continuaron morando en 29 Beer-seba y Moladá y Hazar-sual y en Bilhá y en 30 Ézem y en Tolad y en Betuel y en Hormá y en Ziqlag 31 y en Bet-marcabot y en Hazar-susim y en Bet-birí y en Saaraim. Estas fueron sus ciudades hasta el reinado de David. 32

Y sus poblados fueron Etam y Ain, Rimón y Token 33 y Asán, cinco ciudades. Y todos sus poblados que estaban todo en derredor de estas ciudades se extendían hasta Baal. Estas fueron sus moradas y sus 34 registros genealógicos para ellos. Y Mesobab y 35 Jamlec y Josá hijo de Amasías, y Joel y Jehú hijo de 36 Josibías hijo de Seraya hijo de Asiel, y Elioenai y Jaaqoba y Jesohaya y Asaya y Adiel y Jesimiel y 37 Benaya, y Zizá hijo de Sifí hijo de Alón hijo de Jedayá 38 hijo de Simrí hijo de Semaya. Estos que entraron por nombres fueron los principales entre sus familias, y la casa misma de sus antepasados aumentó en cuanto a 39 multitud. Y procedieron a ir al paso de entrada de Guedor, hasta el oriente del valle, para buscar pastos 40 para sus rebaños. Con el tiempo hallaron pastos pingües y buenos, y la tierra era muy ancha y no tenía disturbio, sino que estaba en desahogo; porque los que 41 moraban allí en tiempos pasados eran de Cam. Y estos que estaban escritos por [sus] nombres procedieron a entrar en los días de Ezequías el rey de Judá y a derribar las tiendas de los camitas y a los meunim que se hallaban allí, de manera que los dieron por entero a la destrucción hasta el día de hoy; y empezaron a morar en su lugar, porque allí había pastos para sus rebaños. 42

Y de ellos hubo algunos de los hijos de Simeón que se fueron al monte Seír, quinientos hombres, con Pelatías y Nearías y Refayá y Uziel hijos de Isí a la 43 cabeza de ellos. Y procedieron a derribar al resto de Amaleq que había escapado, y continuaron morando allí hasta el día de hoy.

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