La internacionalización, como una extensión más de la vida profesional, tiene que vivirse con naturalidad y transparencia
Preparados para dar y recibir trabajo internacional Cruzar las fronteras con rumbo al extranjero es un paso que el sector hace tiempo que está llevando a cabo por proyección, entonces, y por necesidad, hoy en día. En cualquier caso, llegar al nuevo destino y lograr proyectos requiere de todo un proceso empresarial previo, contactos locales y mucho sacrificio, amén de los riesgos. Los profesionales no eluden la posibilidad de internacionalizarse también “desde casa” porque la marca España sigue teniendo mucho valor. Barcelona, abril 2013. La exclusiva comunidad del sector del interiorismo, arquitectura, diseño y
contract, InfinityInner, ha estrenado este año 2013 un nuevo Encuentro Profesional bajo el epígrafe de Arquitectura & Acción con el que pretende dar protagonismo a la arquitectura española siempre vinculándola a una cuestión de actualidad que incite al debate. Y dentro de ese afán de innovación que caracteriza dicha plataforma online, InfinityInner anuncia la creación del canal InTV en colaboración con la productora Nextic que se estrena, precisamente, con la grabación de dicho encuentro a modo de programa especializado en arquitectura, diseño e interiorismo. La cita, el jueves 4 de abril, y el lugar elegido, el Renaissance Barcelona Fira Hotel, precisamente uno de los nuevos iconos arquitectónicos que se alzan en el emergente entorno de negocios del recinto ferial Gran Vía, obra de Ateliers Jean Nouvel y Ribas & Ribas.
En esta primera edición, la cuestión recayó en el titular “Arquitectura en movimiento. Nuevos destinos. Nuevos proyectos”, porque hoy por hoy ‐más que nunca‐ el sector se plantea la internacionalización como parte de ese posicionamiento que necesitan muchos estudios de arquitectura para darse a conocer más allá de nuestras fronteras, pero también para tratar de capear la actual coyuntura económica de nuestro país. Sobra decir, además, los éxitos que acumula la arquitectura española gracias a aquellos que ya dieron el paso hace mucho tiempo y cuyas experiencias se pusieron sobre la mesa de este encuentro con el fin de mostrar el camino a seguir. Pero a todo ello, había que sumar como importante el hablar de destinos, de ciudades, de aquellos focos urbanos emergentes en los que están puestas todas las miradas como esperanzadores lugares de grandes proyectos para nuestros arquitectos. Brasil, Perú, China…, pero también Turquía, México, Tánger, Miami…, sin olvidar un destino fundamental: el nuestro propio, España, porque también se puede trabajar en proyectos internacionales sin necesidad de salir del país. La primera ponencia la llevó a cabo José Antonio Bernáldez, abogado de Bernáldez & Asociados, y la tituló “Perú. Mercado emergente, oportunidad de desarrollo”. Desde la propia experiencia, “como despacho pequeño, hemos de predicar con el ejemplo”, y por ello apostaron por Perú donde están trabajando desde que hace dos años les llamaron de la Universidad de Lima. Con una extensión del doble que España, este país de 30 millones de habitantes “genera economía y necesita de infraestructuras”, comenta Bernáldez, de ahí que lo considere una oportunidad para los profesionales españoles. Perú precisa de viviendas, de oficinas y de hoteles, faltan muchos servicios y el precio del suelo está creciendo, vendiéndose las promociones antes incluso de haberlas terminado. Según el abogado, “aquí no podemos hacer más de lo que hacemos. Hay que salir. Y además, vale la pena hacerlo allí, incluso como terapia”, en clara alusión a la vitalidad y optimismo que se respira en las calles peruanas, lejos de crisis y necesidades.
José Antonio Bernáldez
Rafael Nicolás y Domingo Hernández
La principal ventaja de cara al profesional español es que “les llevamos 30 años de ventaja”, porque aquel país es como la España de los años 70. Hay tal oportunidad de mejora en todos los aspectos…”, declara Bernáldez. Eso sí, consciente de que salir al extranjero no es fácil y que se necesita dinero, recomienda preparar un plan previo y aliarse con un arquitecto local que es quien podrá oficializar todas las gestiones en Perú. Además añade que disponer de una oficina allí es también un plus de cara a ofrecer confianza.
La experiencia sobre el terreno peruano la aportaron dos profesionales a los que Bernáldez acompañó durante unos días mostrándoles la realidad del país y éstos quisieron aportar su visión a los asistentes de Arquitectura & Acción. Domingo Hernández, director de Edificaciones Vilanova, considera que es un país “donde hay mucho recorrido por hacer y de todo, con vida y mucho dinamismo, donde existen muchas ganas de hacer cosas, con grandes oportunidades”, pero también quiere hacer saber que existen complicaciones y dificultades. Perú es un país muy rico gracias a sus recursos naturales, siendo la segunda potencia mundial en minería, por tanto, hay dinero y “el peruano inversor/promotor/profesional necesita ideas nuevas que aquí tenemos”, afirma Bernáldez, pero Hernández considera que trabajar con ellos es difícil. “Compartimos el mismo idioma, sí, pero la cultura es diferente. Entras en una dinámica que no conoces, que no controlas”. Dice que en Perú falta un sistema constructivo, que trabajan todo muy manual todavía y a pie de obra, que los acabados son muy pobres “y es muy complicado modificar sus costumbres”. También alaba, por otro lado, la alta seguridad en el trabajo y que la mano de obra peruana es cualificada aunque “el plus del concepto calidad no acaban de tenerlo”. Rafael Nicolás, gerente de Sistemtec, aludió a la cuestión de las titulaciones, dado que en Perú no existe la figura del arquitecto técnico ni tampoco la posibilidad de convalidación, sino la de ingeniero e ingeniero titulado. De ahí que resulte fundamental buscar socios peruanos para trabajar y para negociar “aportando nuestro conocimiento y experiencia, pero con humildad, sin soberbia”, recomienda Hernández. Pese a todo ello, ambos profesionales han decidido apostar por Perú. Y, en cualquier caso, consideran que “al país se le va a dar la vuelta, seguro, y que los peruanos no tienen capacidad para hacerlo solos, también”.
Conferencia Carlos Ferrater: Cómo implantarse en otros países La segunda ponencia estuvo protagonizada por el arquitecto Carlos Ferrater, del estudio OAB (Office of Architecture in Barcelona). A la cuestión planteada como titular de cómo implantarse en otros países, Ferrater reconoce que es un tema que “nos preocupa especialmente, sobre todo hoy. Hay que ampliar las posibilidades de trabajo y merece la pena salir fuera”. En OAB, empresa familiar formada por un equipo joven, vieron venir la crisis y no hicieron grandes obras de viviendas porque tampoco era un ámbito que les interesara demasiado. Su preparación para la internacionalización la basaron en dos puntos clave: dar conferencias en el extranjero y participar en concursos internacionales; éste último, según el arquitecto catalán, “ayuda a conocer partners y arquitectos locales y ese es el secreto para ir creando una red internacional de contactos”. Los proyectos de OAB fuera de nuestras fronteras los hacen siempre basándose precisamente en profesionales internacionales que ya ha trabajado en el estudio. Además, reconoce que con estos proyectos han aprendido a saber construir con la propia normativa del país o teniendo en cuenta determinados condicionantes particulares, por ejemplo, en Miami con los huracanes, algo para lo que se dejan asesorar por especialistas locales. Ferrater sabe que haber ganado determinados concursos les ha proporcionado reconocimiento internacional y, por tanto, les ha traído otros
trabajos. Y no se olvida de remarcar la importancia de tener una buena página web, “porque es la carta de presentación y esto vale para cualquier profesional”. Entre los últimos proyectos en los que su estudio está inmerso actualmente destaca un enclave turístico en la costa de Turquía de más de un millón de metros cuadrados. De este país dice que tiene un gran potencial de crecimiento, que aunque es árabe son bastante moderados, que poseen una gran cultura y que sus profesionales están muy bien formados. De ahí que diga que “construir allí está siendo más fácil”. Estados Unidos lo considera complicado, no así Miami que “es una gran ciudad, con una potencia enorme”. Allí han desarrollado edificios que aúnan hotel, tiendas de lujo, oficinas, restaurantes, jardines, etc. Al arquitecto catalán le gusta hablar más de ciudades que de países a la hora de referirse a destinos interesantes para internacionalizarse. Guadalajara, en México, es otro ejemplo, “mucho más segura que la capital azteca”, y Tánger, en Marruecos. Y siempre teniendo presente de trabajar “con la cultura y tradición del lugar”.
IDEAS A DEBATE “La exportación de la arquitectura española en el mundo” El primer debate contó con unos invitados “de lujo” que quisieron aportar su propia experiencia en el mercado internacional.
Juan Trias de Bes
Orlando de Urrutia
Fermín Vázquez
Carlos Ferrater
Como Juan Trias de Bes, arquitecto de TDB Arquitectura, cuyo estudio se planteó dar el salto allá por el año 2005‐06 viendo el panorama español, no obstante, afirma que su primera experiencia de internacionalización fue precisamente en Barcelona porque “también tiene mucho que ver el cliente”. El proyecto fue el Hotel Mandarín Oriental, “una experiencia fantástica”, donde trabajaron 14 equipos internacionales, con una compañía americana y donde se hablaba todo en inglés. Para Trias de Bes, la internacionalización “es una extensión más de la vida profesional que tienes que realizar con naturalidad y transparencia, pero sin olvidar el seguir perseverando en casa”. Recomienda poner la mirada en algún destino, saber de clientes y dónde están aquellos más interesados, organizar reuniones aquí y allá, asistir a conferencias y siempre transmitir la solvencia intelectual y profesional que se tiene. “Lo que hacemos fuera no deja de ser una proyección de lo que hacemos aquí”, opina. Con carácter optimista, recuerda que los resultados no vienen de forma inmediata e insiste que “hay que perseverar”.
Para Orlando de Urrutia, arquitecto de Orlando de Urrutia & Asociados, doctorado en sostenibilidad y especialista en arquitectura y urbanismo, la internacionalización le llegó antes porque él es chileno. Piensa que la experiencia de viajar y hacer proyectos internacionales es importante, así como tener respeto por la arquitectura y cultura del lugar, “porque esto genera una arquitectura diferente en cada destino”. La pieza fundamental es el cliente, sin olvidar el partner local “que facilita las cosas”, así como el apoyo de la constructora y del promotor, y la asistencia de congresos y universidades “también aporta contactos”. Fermín Vázquez, arquitecto del estudio B720, comienza su ponencia ensalzando, al igual que de Urrutia, el reconocimiento internacional de la marca Barcelona dentro de la arquitectura. Vázquez considera que su estrategia de internacionalización “no fue muy estructurada, sino que teníamos una estrategia oportunista. Es decir, te desplazas cuando te llaman y asumes un riesgo razonable”. Esto viene en relación a que en su estudio, reconoce, “somos empresarios por defecto, no vocacionales”. Piensa que lo difícil sigue siendo tener contratos, no proyectos, aunque éstos esconden una cantidad insufrible de dificultades, esfuerzos y riesgos. Vázquez, con un gran reconocimiento actualmente en Brasil, dice que “hay que pensar la escala necesaria, imaginándote lo peor porque uno nunca se queda corto y buscar ese nicho de mercado apropiado, el tuyo, donde haya una oportunidad”. Por su parte, Carlos Ferrater, añadiendo a lo dicho en su ponencia individual, considera que lo atractivo de la internacionalización es el riesgo intelectual: “en arquitectura, sin riesgo, no sería lo mismo. Lo de aquí ya lo conoces”. Su estudio OAB sigue trabajando mucho en España y él cree que las perspectivas pasan por la existencia de trabajo aquí pero con proyección internacional; lo dice con relación a Barcelona. Y añade que “hay empresas internacionales que ya quieren invertir en España porque los precios se han puesto en su sitio”. Para Ferrater, los jóvenes es otro cantar porque están muy preparados, viajan, hablan idiomas, etc., “pero en los despachos tradicionales el chip es otro en cuanto al tema de salir”. José Antonio Bernáldez, como dinamizador del debate y también consultor, plantea la cuestión de, como apuntaba en su ponencia inicial, la necesidad de establecer una estrategia empresarial bien definida antes de salir al exterior. “Porque, como bien decís, sois empresarios por defecto y ese es el problema del arquitecto”, dijo dirigiéndose a sus compañeros de mesa. En respuesta a esta falta de visión empresarial que muchos reconocen, Trias de Bes dice que, pese a ello, “frente al cliente te das cuenta que eres un buen estratega desde el punto de vista empresarial”. Porque la visión que se tiene del arquitecto es que puede liderar iniciativas, levantar proyectos, aportar valor añadido y eso se debe “a la capacidad estratégica de creer en la arquitectura porque ésta ilusiona”. Ciertamente, la principal ventaja de la arquitectura es que responde a un lenguaje universal que se puede transmitir a cualquier ciudad, tiene esa capacidad global. “Y los arquitectos tenemos la capacidad de creer en lo que sabemos hacer y transmitirlo y comunicarlo. Y en la medida en que lo haces, los resultados se superan”, concluye el arquitecto del estudio TDB.
IDEAS A DEBATE “La internacionalización del diseño español, clave del futuro. Emigración vs Exportación” La última parte del encuentro Arquitectura & Acción dio paso al sector del diseño y del interiorismo también centrado en ese proceso internacional que para la interiorista Elia Felices “tiene un coste económico, familiar, etc. que el estudio tiene que tener claro si puede o no asumir y, sobre todo, tener una estrategia clave a seguir: saber previamente a dónde vas, con quién, y tener partners locales”. Por su experiencia, Felices apuesta por el trabajo a distancia, aportando el conocimiento de su estudio desde aquí, no a pie de obra, y compartiéndolo con una empresa local con la que tengas cierta afinidad, de forma que te evitas todos esos riesgos que existen al trasladarte. El salto al extranjero Lagranja Design lo dio hace unos cuatro años probando con China a través de Hong Kong y buscándose un agente allí. Según el diseñador y socio del estudio, Gerard Sanmartí, “la cosa fue lenta pero ahora tenemos bastante trabajo allí, directamente interiorismo, no diseño, por un tema de royalties y copias”. Una persona que conoció en el país oriental le llevó hasta Turquía donde también llevan más de un año trabajando a través de un perfil de Product Manager que les ayuda. Reconoce Sanmartí que “cada país tiene sus problemas, pero nos hemos ido adaptando”. Para Nacho López, arquitecto de Lagula, lo de la internacionalización ya lo tienen asumido porque han trabajado mucho en el extranjero. En su opinión, “hay que buscar la pista que te da el cliente para hacer el diseño más radical. Te tienes que fijar en la materia, en la especificidad de cada cosa que hacemos, en el lugar, etc.”. Por su parte, la interiorista Silvia Alfaras, lo que se plantea es “cómo llegar a ese cliente que tiene una cultura tan diferente a la nuestra”. Considera que Internet ayuda mucho, acorta distancias, y “nos permite salir a los que estamos empezando”, pero sigue pensando que el tema de las ayudas continúa siendo difícil, así como el tener que asumir el rol de empresa. “Ves que detrás hay mucho más de lo que inicialmente te esperas”, opina, y aunque sabe que salir al extranjero es importante, también cree en la posibilidad de internacionalizarse desde aquí.
Elia Felices
Gerard Sanmartí
Nacho López
Silvia Alfaras
En este sentido, López también lo ve factible. Él habla del llamado Concept Design a distancia que funciona con ejecutivos de aquí. “Hay que intentar compartir las cosas, sino no se hacen”, declara. Para Alfaras, el concepto de creatividad, por ejemplo, “es la parte que solo tú puedes aportar como profesional”. Pero al planteamiento de un asistente del público que incide en la necesidad
de un seguimiento constante in situ en el lugar del proyecto, Sanmartí advierte que hay que tener cuidado con el tema de la internacionalización “porque estamos poniendo a todos los conceptos (arquitectura, diseño, etc.) dentro del mismo saco y cada uno tiene sus inquietudes”. El diseñador de Lagranja no cree en estrategias y técnicas preconcebidas, sino que “lo importante es conseguir proyectos y una vez los tengas, te organizas como sea. Cuando tienes el proyecto, ya tienes unas necesidades que resolver”. La cuestión que se plantea él es: ¿cómo conseguir proyectos fuera? Reconoce que se necesita de una inversión y ésta va ligada a un sacrificio, pero “nadie nos dirá el camino a seguir. Todos tenemos que aprender de nuestras experiencias nuevas”. Felices no está de acuerdo e insiste en la necesidad de hacer un plan previamente a salir fuera para valorar si se pueden asumir los riesgos porque, como dice Bernáldez, “lo importante es lograr proyectos, sí, pero ojo, éstos tampoco pueden acabar matándonos”, en alusión económica, ya que uno debe conocer de antemano, por ejemplo, algo tan básico como los honorarios de ese país. En conclusión, para el dinamizador del debate, “hay que estar expectantes a todo lo que pasa a nuestro alrededor, sin perder de vista las oportunidades que se van a producir en nuestro país”. Para más información: www.infinityinner.com ‐
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