de Ciencias Sociales y Humanidades de El Colegio Mexiquense, A.C. Página-e:

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EL COLEGIO MEXIQUENSE

z Número 24/25 z noviembre-diciembre/ enero-febrero z Año 2003/2004

de Ciencias Sociales y Humanidades de El Colegio Mexiquense, A.C. Página-e: http://www.cmq.edu.mx

Entregó EL COLEGIO estudio sociodemográfico de la población indígena Página 4 Falta democracia interna a los partidos: doctor Jean-François Prud’homme Página 6 El indígena ha sido imaginado desde el Estado: doctora María Bertely B. Página 6 Dos libros fueron presentados Páginas 9-11 Dossier Académico La moral y el cuerpo como recurso político Alicia Civera Página 1

Para conmemorar los 50 años del voto femenino

Realizó EL COLEGIO el foro «Mujeres y género en el Estado de México»; siguen subrepresentadas en la política y la administración pública

L

a práctica magisterial de la poeta Laura Méndez de Cuenca; los problemas que afrontaron las maestras socialistas en el Estado de México en el periodo cardenista por su condición de mujeres más que por su práctica docente; el análisis antropológico de dos acciones ritualizadas entre los mazahuas para entender el papel asignado a las mujeres como «cuidadoras»; la participación política de las mujeres en México y en el Estado de México y el caso de Tenería como ejemplo de la campaña en contra de la coeducación en las escuelas normales rurales fueron los temas presentados por investigadoras de EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C., para conmemorar los primeros 50 años del voto femenino en México en la mesa redonda «Mujeres y género en el Estado de México». El encuentro fue organizado por la investigadora Alicia Civera Cerecedo (de quien presentamos en el «Dossier Académico» el texto respectivo). En el Aula Mayor de la institución se abrió paso la reflexión y el análisis crítico para el abordaje de temas muy variados desde las perspectivas histórica, educativa, antropológica y política, y cuyos resultados fueron muy gratificantes para los asistentes por la calidad de los trabajos resultado de la investigación. Falta presencia de las mujeres en los puestos públicos y de representación

La doctora Cecilia Cadena Inostroza advirtió que en los últimos años, las mujeres han logrado una creciente visibilidad en la vida política de México y han aumentado su influencia en la toma de decisiones participando activamente en Organizaciones no gubernamentales (ONG) y en movimientos sociales tanto a nivel federal como local y municipal. La politóloga recordó la presencia de la comandante Esther en la marcha zapatista al DF y el memorable discurso en que subrayó EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C. C.,, organizó el foro «Mujeres y que lo importante no era su nombre ni su filiación, sino que fuera género en el Estado de México» para conmemorar los 50 años del voto femenino. En la gráfica, la doctora Cecilia Cadena Inostroza; indígena y mujer. Con datos del censo del año 2000 que hablan de a la derecha, el maestro Felipe González Ortiz, que fueron dos de la presencia de las mujeres en la sociedad mexicana, la los ponentes. investigadora comentó aspectos demográficos y laborales. Sobre Chayotes, burros y Sin embargo, en el meollo de su participación, habló en especial de la machetes, de Pablo Castro representación limitada que tienen las mujeres mexicanas pese a su importante papel en el desarrollo del país. Hizo recuento histórico de los derechos políticos de las mujeres Roberto V arela Varela desde el Congreso Constituyente de 1917 hasta la presidencia de Miguel Alemán Página 4 Valdés cuando se les permitió votar en las elecciones municipales, y en 1953, cuando se les concedió de manera amplia el derecho al sufragio, durante el gobierno del Dossier «Los alumnos de EL presidente Adolfo Ruiz Cortines. COLEGIO MEXIQUENSE, A. C. » C.» (pasa a la pág. 2)

Acerca del concepto de sociedad civil (Primera parte) Ricardo Ramírez Espinosa

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LA GACETA DE

En 1975 se celebró en México la Conferencia de la ONU para celebrar el Año Internacional de la Mujer y en los años ochenta el movimiento de las mujeres se transformó; nacieron los programas interdisciplinarios de Estudios de la Mujer de El Colegio de México y el Universitario de Estudios de Género en la UNAM, aparecieron las primeras ONG de feministas y se dieron otros hechos relevantes dentro del marco de la crisis económica, como la participación femenina en movimientos sociales cuyas principales demandas eran las relacionadas con mejorar las condiciones de los pobres en general. En su recuento, la investigadora de EL COLEGIO se refirió a la participación de las mujeres en los partidos políticos y las organizaciones civiles de fines de esa década, y su impulso a la Comisión Nacional de Derechos Humanos. En los noventa, esa presencia creciente alcanzó a los procesos políticos, añadió. La doctora Cadena Inostroza se concentró en el análisis de lo sucedido en los últimos diez años, lapso en que «las mujeres de los diversos sectores y signos políticos han conseguido cambiar la forma de ver a la mujer en México», gracias a lo cual se han institucionalizado las cuestiones de género en diversos ámbitos. Con todo, en el país sólo ha habido tres gobernadoras: Griselda Álvarez, en Colima (1979-1985); Beatriz Paredes Rangel, en Tlaxcala (1987-1993), y Dulce María Sauri Riancho, quien ocupó la gubernatura de Yucatán de manera interina entre 1991 y 1993. A partir del año 2000, la presencia de las mujeres en la política es todavía más notoria y tres de ellas llegan a la presidencia del PRI (Dulce María Sauri) y del PRD (Amalia García y Rosario Robles, quien también fue jefa de gobierno del DF). Ofreció cifras de la baja representatividad de las mujeres: actualmente sólo ocupan entre 22 y 23 por ciento de las curules de la Cámara de Diputados federal; en el Senado, sólo representan 18.7 por ciento; en el gabinete federal sólo hay una secretaria, la de Desarrollo Social. Al nivel estatal no hay datos que señalen una diferencia importante, pues si bien de los 230 mil servidores públicos que tiene el gobierno de la entidad 70 por ciento son mujeres, cuya presencia es más notoria en los sectores de salud y educación, solamente dos de las secretarías del Poder Ejecutivo están ocupadas por mujeres y únicamente 26 de los 228 servidores públicos de los niveles más altos son mujeres, aunque el Instituto Electoral está dirigido por una mujer. En la Cámara de Diputados hay once legisladoras de un total de 75 representantes populares, es decir, apenas 14.8 por ciento. Para la investigadora, las mujeres han estado al margen de la participación formal en la política. Citando a la investigadora Graciela Vélez, señaló que la participación política de las mujeres está obstaculizada por tradiciones y estereotipos de la sociedad patriarcal que propicia en la subjetividad femenina mayor inclinación por la vida familiar y doméstica que por las funciones públicas de poder. «Sin duda, la equidad de género y la participación política de las mujeres en el proceso de toma de decisiones sobre las políticas públicas contribuyen a fortalecer los valores democráticos de todo el país; por lo tanto, el número de las mujeres en la política es un factor que debe ser considerado», advirtió y propuso una pregunta: «¿cuáles son las razones par las que existe la tan citada disparidad entre la participación política de las mujeres y la representación en los espacios formales de poder?» Una mujer mujer,, poeta y profesora, de su tiempo: Laura Méndez de Cuenca Personaje clave para estudiar el siglo XIX y las primeras décadas del XX, Laura Méndez de Cuenca le ha dado tema de investigación a la doctora Mílada Bazant Sánchez, investigadora de EL COLEGIO, quien presentó en el foro un fragmento del amplio trabajo que ha venido desarrollando, en que se refirió al espíritu crítico de la profesora nacida en Amecameca en 1853. La poeta es conocida por los lectores tanto por su producción literaria como por su relación con el también poeta Manuel Acuña, de quien tuvo un hijo que falleció a muy corta edad. Luego se casó con otro poeta, Agustín F. Cuenca, del que tuvo varios hijos y que la dejó viuda cuando la escritora tenía apenas 31 años. La doctora Bazant abordó algunos aspectos del largo ejercicio docente de Laura, que abarcó 41 años de su vida, y en especial las experiencias que le depararon los viajes que realizó a varios países de Europa y a Estados Unidos en estancias cuya misión era comparar los sistemas educativos mexicano y de esas naciones para mejorar lo que se hacía en casa en años tormentosos. De esos viajes resultó una experiencia, dijo la investigadora, que acentuó el espíritu crítico de la profesora, el cual quedó plasmado en sus informes a la entonces Secretaría de Instrucción. Laura consideraba que gran parte de las deficiencias educativas mexicanas provenían del ineficiente profesorado. Asimismo, puso su atención en las contenidos como parte medular de la enseñanza y cuestionó el «ensalzamiento desmedido que se hacía de la raza sajona en las escuelas» de Estados Unidos, donde los niños inmigrantes escuchaban de sus profesores la afirmación de que esa nación tenía que realizar, por derecho divino, la obra civilizadora del mundo.

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EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C. Dr. Carlos F. Quintana Roldán Presidente Mtro. José Antonio Álvarez Lobato Secretario General Dra. Cecilia Cadena Inostroza Coordinadora de Investigación Dra. Diana Birrichaga Gardida Coordinadora de Docencia LAE Georgina Rescala Pérez Coordinadora de Administración y Finanzas

Gaceta de Ciencias Sociales y Humanidades de EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C. José Luis Cardona E. Coordinador Editorial Marlem Núñez Peñaflor Coordinadora de Información Luis Alberto Martínez López Diseño y formación

La Gaceta de Ciencias Sociales y Humanidades de El Colegio Mexiquense, A. C., es una publicación bimestral de distribución gratuita. Tiraje: 250 ejemplares. Apartado Postal 48-D, Toluca 50120, Estado de México. Ex hacienda Santa Cruz de los Patos, Zinacantepec, Estado de México, 51350, México. Tel. (01.722) 279.99.08, 218.00.56 y 218.01.00, ext. 160. Fax: (01.722) 218.03.58, exts. 200 o 201. Correo electrónico: [email protected] y [email protected] Certificado de licitud, contenido e ISSN, en trámite.

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La poeta consideró también que el desprecio de los mexicanos hacia sí mismos empezaba en las aulas, y admitía que la escuela norteamericana era más formativa, mientras la mexicana era más instructiva. La paradoja: si bien sus estancias en Estados Unidos y Europa le valieron a Laura formar parte del Consejo de Instrucción Pública presidido por don Justo Sierra e influir en la toma de decisiones con respecto a la educación integral, aquella experiencia no le valió un mejor sueldo o gozar de privilegios, pues obtuvo una insignificante jubilación en 1926, a los 73 años, sólo dos antes de morir, y luego de tener una cuarentena de trabajos que iniciaron cuando en 1885 obtuvo su título de maestra e incluyeron los puestos más variados en el DF y el Estado de México, entre ellos ser directora de la Escuela Normal de Profesores de la capital del estado, entre 1888 y 1889. Ah, cuando a los 65 años empezó a tramitar su jubilación debió interrumpir el trámite por la primera huelga de maestros que hubo en la capital del país, en la que Laura participó y por la que fue cesada hasta su reincorporación al servicio luego del acuerdo firmado por la Liga de Maestros y el presidente Venustiano Carranza. Ocho años después, concluyó su carrera docente y falleció en 1928, siendo presidente Álvaro Obregón. 75 años antes, estaba en la presidencia el inefable general Antonio López de Santa Anna. Como se ve, fue una larga e intensa vida la de la autora de “Adiós” y de una obra poética y docente que no tuvo en su momento los reconocimientos que merecía. Las mujeres que «cuidan» La voz masculina del foro fue la del maestro Felipe González Ortiz, quien presentó un valioso trabajo etnográfico sobre las mujeres mazahuas y dos de las prácticas ritualizadas de ese pueblo. «Ser mujeres indígenas es encontrarse o participar de un grupo doblemente subordinado. De ahí que las demandas de las mujeres indígenas reúnan dos reclamos: su pertenencia étnica y su condición de mujeres», explicó el antropólogo, quien propuso como objetivo de su trabajo el de conocer la forma como la estructura social, fundada en el parentesco, encuentra las ocasiones para la reproducción en las prácticas rituales, ceremoniosas y las creencias que se practican en las comunidades indígenas, asignando horizontes sociales y culturales a los géneros, es decir, otorgando cualidades a éstos y expectativas de comportamientos diferenciados. Las prácticas ritualizadas que analizó son las del enterramiento del cordón umbilical y el pedimento de la novia, las cuales «proyectan los roles sociales y las expectativas de los géneros, pues en ellas

se plasman las ideas colectivas sobre lo que se espera de cada género», aseguró. El maestro González Ortiz recorrió en detalle el camino de su exposición a partir de anotaciones como la de ver a la sexualidad humana transformada en productos de la actividad humana, es decir, explicó, «el género es una elaboración simbólica y social que se realiza en el contexto de un mundo institucionalizado». De ahí pasó al análisis de los rituales como dramatizaciones que proyectan la estructura social en el campo de lo simbólico, y de los rituales de paso para seguir el ciclo de vida de las mujeres indígenas. Hizo observaciones también sobre los sistemas de parentesco como segundo nivel de la organización tradicional y de los sistemas de cargos, como un tercer nivel. Sin embargo, acotó que el ritual expresa más bien un horizonte de relaciones sociales que puede proyectarse hacia la reproducción de la estructura social tanto como a su transformación. Su hipótesis es que hay algunos rituales que proyectan las cualidades de los géneros encubriendo relaciones de poder que derivan del sistema patriarcal. Así, «ser hija de» alude a un ritual y «ser esposa de» a otro ritual. Sobre de esta base, afirmó que del análisis de los rituales se descubrió que «cuidar» caracteriza al género femenino, aunque con distintos énfasis y objetivos según su ciclo de vida. Esto le llevó a asegurar que las mujeres cuidan y velan por los derechos legales y formales de sus esposos sobre la tierra. Con respecto al ritual del enterramiento del cordón umbilical dijo que éste asigna al hombre la función y rol de proveedor del ingreso de la familia y a la mujer el de cuidadora del hogar y, por extensión, de la comunidad; además,

define en buena medida la forma como entran en el mercado de trabajo las mujeres. En tanto, el ritual del pedimento de la novia proyecta el significado que se asigna a los géneros en el matrimonio, que para el caso de la mujer pone énfasis en cocinar, es decir, en «cuidar nutriendo». El investigador expuso otros aspectos ligados, como los de la propiedad de la tierra y la conformación de los barrios. Dijo entonces que las mujeres son incluso las cuidadoras de la cultura indígena al ser las que se quedan en la comunidad, para la que cocinan durante las fiestas comunitarias. Las ancianas alcanzan el cargo de tlatoteras, por el cual se llama, venera y celebra a los ancestros en la lengua indígena, de forma que la mujer se convierte en su vejez en cuidadora de los ritos de los ancestros. La crítica del investigador se centró en señalar que a pesar de que la mujer indígena es el soporte de la cultura de su pueblo, el sistema institucional indígena la silencia e invisibiliza. «Cuidar es solidarizarse con el otro (es amarlo); procurar el bienestar del otro es procurar el de todos, de ahí que el trabajo femenino debe ir acompañado por la valoración y dignificación. Sólo de esa manera podemos empezar a formular la utopía que delinea relaciones sociales incluyentes, distintas a las segregacionistas que se observan en la actualidad. Y esto último implica no sólo a las comunidades indígenas, sino a todas las sociedades», señaló en su conclusión. Ser maestra y socialista igual a problemas La doctora Elvia Montes de Oca Navas expuso su investigación sobre los

La doctora Belinda Arteaga, quien comentó las ponencias presentadas en el foro; la maestra Alicia Civera Cerecedo, responsable del foro, y la doctora Mílada Bazant Sánchez, quien dedicó su intervención a la experiencia educativa de Laura Méndez de Cuenca.

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academia problemas que tuvieron las maestras socialistas en el Estado de México durante el sexenio cardenista, cuya causa fue su condición femenina más que su magisterio o el peculiar socialismo mexicano que impulsó esa forma de educación. De inicio advirtió que «el hecho de que las profesoras que trabajaron durante esos años en la entidad aplicaran la reforma educativa no necesariamente quería decir que estuvieran convencidas de ella», de ahí que la expresión «maestras socialistas» habla más de una época que de un referente ideológico. Cuando en el sexenio del general Cárdenas (1934-1940) se aplicó la reforma que implantó la educación socialista en México hubo diversos problemas, unos, ideológicos, pues los profesores le dieron distintos significados a la reforma, y otros religiosos, por los rumores creados alrededor de la escuela socialista en el sentido de que se quería formar en los niños «conciencias ateas e impías». Como en el Estado de México se siguió lo mandado por el gobierno federal, los profesores tuvieron que hacer frente a la oposición de las comunidades, de las madres de familia y de los sacerdotes, y las maestras tuvieron todavía más problemas, por ser mujeres, lo que implicaba ser consideradas incapaces de mantener la disciplina de los niños y ser malos ejemplos cuando estaban embarazadas. El trabajo de la doctora Montes de Oca Navas pretende hacer un estudio de género y demostrar que el rechazo que sufrieron las maestras tuvo que ver con su condición de mujeres más que con su incapacidad profesional, que la autora también revisó. Primero se rechazó que las maestras ofrecieran educación básica en los penales, al tiempo que se llevaba a cabo la campaña nacional de alfabetización; después, se les señaló por ejercer una profesión para la cual se consideraba que les hacían falta cualidades masculinas. Con diversos ejemplos tomados de su investigación en el Archivo Histórico del Estado de México y de entrevistas con profesoras, la investigadora demostró sus afirmaciones. Hizo referencia a la huelga magisterial de 1940 y a los calificativos que se endilgaron a las participantes... que no fueron los de «revolucionarias», sino de «bastante conservadoras». Y es que la investigadora explicó la contradicción que vivían las maestras entre sus creencias y valores familiares y la práctica docente en ambientes de suyo hostiles a la participación de la mujer. «Diversas maestras acusadas de conservadoras y “mochas” prefirieron dejar el trabajo y mejor se casaron “que para eso nacieron las mujeres”. Otras fueron rechazadas no por ser casadas, sino por estar “amancebadas” y ser mal

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ejemplo para los niños, especialmente para las alumnas que veían a una maestra unida a un hombre sin estar “debidamente casada”», explicó, al tiempo que mencionó a la coeducación como una

racional de los varones?, luego, ¿por qué la crítica?», y consideró: «no basta oponerse a las ataduras y prejuicios genéricos; las mujeres deben proponer nuevas experiencias y formas de vida

En conjunto, la inmigración indígena al Estado de México de 1995 al 2000 constituye una experiencia de casi uno de cada diez indígenas de 5 años y más. Esta migración resulta ser mayor que la observada, en promedio, para el total de la población de la entidad, donde sólo 6.8% de sus habitantes en el 2000. Los indígenas nativos del estado casi no muestran movimientos en el periodo 1995-2000, lo cual estaría representando una migración de retorno, o bien, poca movilidad espacial para el cambio de residencia permanente.

medida rechazada por las comunidades. Hubo padres que amenazaron con no enviar a sus hijas a la nueva escuela socialista, pero las madres eran quienes más se oponían a las escuelas mixtas. En tanto, «las maestras no siempre fueron acusadas de incumplidas; a veces se reconocía que eran trabajadoras y cumplidas, a diferencia de algunos maestros que, además de holgazanes, eran acusados de embriagarse frecuentemente», dijo y comentó que el rechazo a las maestras tenía que ver con la percepción que las veía como «carentes de energía, incapaces de fortalecer el espíritu de los niños (varones) y prepararlos para las duras faenas de la vida y el natural cariño de los ejercicios viriles», según un expediente de Ixtlahuaca de 1935. Y así como este ejemplo, la historiadora dio otros abundantes de diferentes municipios del Estado de México. En tono crítico expresó que «el ser de la mujer fue reducido a su función específica de la reproducción». Además, «maestras perseguidas por ser fanáticas, otras por ser socialistas y ateas, otras por ser protestantes y otras sólo por ser mujeres que trabajaban fuera de sus casas, “cuidando los hijos de otras mujeres en lugar de los suyos”. Las mujeres debían depender económicamente de un varón, ésa era una de las características de su condición como género subordinado; luego, su autonomía fue vista como peligrosa, y más por el contagio que podía haber en el pensar de otras mujeres», analizó. No faltaron en su recuento los casos de maestras golpeadas por sus maridos... maestros también. La investigadora señaló en su conclusión que la maestras socialistas fueron acusadas, entre otras cosas, de ser «muy religiosas» y hasta fanáticas, pero cuestionó: «¿no es el carácter religioso una de las características “naturales” de las mujeres, a diferencia del carácter

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donde la sexualidad deje de ser el eje de la identidad, pero el precio que se paga es alto. La soledad y el rechazo son lo de menos; muchas veces, ese aislamiento y ese rechazo vienen más pronto y más fuertes de las otras mujeres, que ven en las “atrevidas” un peligro para todas y, por ello, deben éstas ser marginadas del grupo. Esto explica el porqué las maestras socialistas fueron rechazadas en esta entidad más por las madres que por los padres de familia».

Primero en su tipo que será referencia obligada

Entregó EL COLEGIO al CEDIPIEM estudio sociodemográfico de la población indígena del Estado de México TOLUCA, ESTADO DE MÉXICO.- El primer estudio integral dedicado a la sociodemografía de los pueblos y comunidades del Estado de México fue realizado por EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C., que lo presentó y entregó en la quinta sesión ordinaria del Consejo Estatal de Pueblos Indígenas del Estado de México, realizada en el Salón Gobernadores del Palacio de Gobierno. Ante la secretaria de Desarrollo Social del gobierno estatal, licenciada Ana Lilia Herrera Anzaldo; el presidente de EL COLEGIO, doctor Carlos Quintana Roldán, y el pleno del CEDIPIEM, el coordinador del proyecto de investigación «Estudio sociodemográfico de la población indígena del Estado de México», maestro Felipe González Ortiz, dio a conocer las partes sustanciales del documento, cuya entrega se formalizó en

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EL COLEGIO MEXIQUENSE

Entrega del documento resultante del proyecto de investigación «Estudio sociodemográfico de la población indígena del Estado de México». Habla la licenciada Ana Lilia Herrera Anzaldo; a la derecha, el doctor Carlos Quintana Roldán, presidente de EL COLEGIO.

la misma sesión a la vez que se entregaron en disco compacto las partes que lo integran. El investigador explicó las fases de desarrollo del proyecto y explicó que entre los elementos destacados están que la ubicación de los indígenas en los municipios muestra la existencia de indígenas inmigrantes de otras partes del país, pero a la vez que los propios indígenas de la entidad se han desplazado a vivir en los municipios metropolitanos, el cual es un punto muy importante a considerar. «La idea de ser originario o nativo es problemática en el trabajo, uno de cuyos aportes es problematizarla», detalló. En el Estado de México hay comunidades que se diferencian por su pertenencia étnica, por la lengua que hablan y también por el contexto socioespacial en que viven, algunas están en contextos más urbanizados que otras, por eso la entidad es un paradigma para poner a prueba los viejos conceptos y renovar la mirada a la luz de las circunstancias que le son propias, consideró. El maestro González Ortiz dio a conocer que para el proyecto se contrataron los servicios de investigadores experimentados que pudieron reorientar la mirada en las comunidades en que habían trabajado antes. Dichos investigadores participantes fueron Reyes Álvarez Fabela, Ángel Ávila Ramírez, Leif Korsbaek Frederiksen, Silvia Luna Santos, Susana Prado Tasch, Karla Vivar Quiroz y Pedro Zepeda Martínez. Amplió sus comentarios: un descubrimiento fue que las comunidades indígenas no son estables, como generalmente se piensa tanto para las consideradas de originarios como para las de inmigrantes, sino que son unidades

fragmentadas en unidades más pequeñas formadas por lazos de parentesco, que es la estructura fundamental, es decir, la estructura estructurante de las comunidades. Se pudo observar que el poder comunitario se presenta y está cargado de elementos civiles, pero también de elementos religiosos. En los cargos tradicionales se sintetizan esas dos funciones claves. Al referirse a otro de los apartados del documento resultante, afirmó que una revisión de las políticas públicas de los Estados nacionales, en especial los latinoamericanos, ilustra que las tendencias de las relaciones de las comunidades indígenas con las instituciones estuvo destinada a la integración homogeneizando al indígena. «Ésta no es la salida y el trabajo propone la integración pero con base en la diferencia, pues diversificar integrando significa construir una plataforma para el entendimiento cultural y atacar la segregación social que, por otro lado, es una característica de nuestros tiempos como el elemento a atender por la política social», consideró. El trabajo es relevante en la medida que proporciona información y conocimiento sobre los hablantes de las lenguas indígenas, en primer lugar; sobre las comunidades indígenas, su historia y sus relaciones con las instituciones de atención pública. Su orientación integral es una muestra de la interdisciplinariedad que deben continuar los trabajos académicos, dijo. «En este camino debemos aprender a discutir desde las distintas disciplinas, pero también —y esto fue clave en la investigación— discutir interinstitucionalmente. Se presenta un disco compacto que contiene cinco

carpetas con el análisis cuantitativo, el análisis institucional, las etnografías, la cartografía y un documento integral en que se observan las demás carpetas», expuso. De la misma manera, agradeció que las instituciones que dieron su apoyo al proyecto —el CEDIPIEM, el Consejo Estatal de Población (COESPO) y la Secretaría del Desarrollo Social del gobierno federal, a través primero de la delegación del Instituto Nacional Indigenista (INI) y después de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI)— hayan considerado a EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C., para llevarlo a cabo y a él como investigador para ser el responsable de la investigación. La presidenta del CEDIPIEM y secretaria de Desarrollo Social, licenciada Ana Lilia Herrera Anzaldo, pidió a los integrantes del Consejo sus comentarios a la presentación del proyecto. Entre las voces que se escucharon hubo coincidencia en reconocer a la propia funcionaria por el apoyo que brindó al proyecto cuando se desempeñó como secretaria técnica del COESPO, y la sugerencia de que se continúe con el esquema de investigación en los estudios dedicados a la población indígena, y que el documento sea difundido ampliamente y utilizado en el diseño de las políticas públicas en la materia. La secretaria Herrera Anzaldo reconoció la voluntad del COESPO, el CEDIPIEM y la SEDESOL. Relató que la iniciativa surgió de la entonces delegada del INI, Adriana Argüello, y del CEDIPIEM, que se acercaron al COESPO, «que no tiene la infraestructura académica para generar un estudio de esa amplitud, como la de EL COLEGIO, institución que podía ver con una mirada más objetiva lo que ahora es una herramienta valiosísima para el Gobierno del Estado de México para planear y replantear los esquemas de atención a los pueblos y comunidades indígenas, y a los que no son originarios pero que están aquí y como mexiquenses tienen una realidad bastante compleja». Añadió: «Quiero reconocer públicamente el apoyo del INI, en su momento, hoy la CDI, y del propio CEDIPIEM, que es el primer organismo en el país que da voz y voto a los pueblos indígenas para incidir sobre su desarrollo. En este tenor, el Estado de México, en un ambiente de unidad y entusiasmo generalizado y compartido, se vuelve a unir y estar a la vanguardia con un estudio tan importante encabezado acertadamente por EL COLEGIO MEXIQUENSE, del que reconozco el esfuerzo extra que hizo para que el estudio saliera con el cuidado con que salen todos los productos de esa institución académica». El presidente de EL COLEGIO, doctor Carlos Quintana Roldán, expuso por su parte el compromiso de la institución con la sociedad para investigar y difundir lo

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academia relacionado con las necesidades y retos de la entidad más poblada del país. (En el número 22 de la GACETA, julioagosto de 2003, se puede hallar más información sobre el tema general de la migración a partir de una entrevista al maestro Felipe González Ortiz.)

Conferencia del doctor Jean François Prud´homme

Falta democracia interna a los partidos políticos; les tiene poco aprecio la sociedad La sociedad tiene un aprecio muy bajo por los partidos políticos, a los que ve como organizaciones con pleitos internos permanentes que tienen consecuencias en la vida nacional por la falta de acuerdos en temas fundamentales, afirmó el doctor Jean François Prud’homme, coordinador general académico de El Colegio de México. Durante el inicio de los cursos de la segunda promoción del Doctorado en Ciencias Sociales que organiza EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C., el doctor Prud’homme ofreció una conferencia sobre instituciones y procesos electorales en México, en la que habló de los riesgos de la falta de institucionalización (democracia interna) en la vida interna de los partidos políticos. Para el investigador, mientras el PRI y el PRD quedaron en la orfandad a partir de las elecciones del año 2000 —el primero por la pérdida de la Presidencia de la República y el segundo por el ocaso del liderazgo carismático de Cuauhtémoc Cárdenas—, el PAN mantiene un acuerdo muy curioso con el presidente Vicente Fox, que lo hace cargar con los errores del gobierno sin que ese partido esté realmente en el gobierno. Además, después de muchos años de haber sido un partido de oposición pequeño y conformado por notables, el PAN es ahora víctima de su éxito electoral de los últimos 20 años, y mientras ha crecido su membresía formal, también ha sido utilizado por políticos ambiciosos, tiene serios problemas de coordinación interna y no se ha asumido como partido en el gobierno. El doctor Jean François Prud’homme destacó también los contrastes de la legislación electoral con la realidad de los tres partidos políticos más importantes y la de los pequeños que se han mantenido con registro. La ley los ve como entidades de interés público y los dota de generosos subsidios públicos, pero, a la vez, prácticamente no da

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opción de realizar política electoral fuera de ellos, además de que no hay regulación legal para su falta de democracia interna. En su repaso por la historia, evolución y situación actual de los partidos, explicó que el PRI tiene un frágil equilibrio interno debido a su división en bloques y grupos —gobernadores, bancadas, las antiguas corporaciones y las representaciones estatales—, debido a su falta de institucionalización interna y a que es más fácil expresar vetos que llegar a acuerdos. El investigador de El Colegio de México señaló que el PRD está en vías de sustituir el liderazgo carismático de Cárdenas por el de Andrés Manuel López Obrador, y dijo que ese partido tiene reglas formales muy minuciosas, pero que sólo sirven para mantener las treguas entre los grupos, como lo demuestran los resultados desastrosos de las elecciones de sus dirigentes. A la vez de que la ley electoral favorece la existencia de pocos partidos políticos fuertes, en los que concentra el oligopolio de la representación política, deja fuera la atención a la falta de institucionalización interna de los partidos, que los lleva a no controlar sus conflictos. Los mexicanos debemos acostumbrarnos a gobiernos divididos, pero en el horizonte se aprecian dos posibles vías políticas: una en la que se logren arreglos institucionales entre las dirigencias de los partidos sobre la base de valores y cálculos estratégicos de corto plazo —por ejemplo, un año—, y la segunda es la de un cambio de instituciones políticas que permita las coaliciones. Acompañaron al coordinador general académico de El Colegio de México, el presidente de EL COLEGIO MEXIQUENSE, A.

C., doctor Carlos Quintana Roldán; la coordinadora de Investigación, doctora Cecilia Cadena Inostroza, y la encargada de la Coordinación del Doctorado en Ciencias Sociales, maestra Alicia Civera Cerecedo.

Conferencia de la doctora María Bertely Busquets

El indígena ha sido imaginado desde el Estado; ahora es el «sujeto de la compensación» TOLUCA, ESTADO DE MÉXICO.- Del indígena imaginado por el Estado al maestro rural encargado de modelar en la práctica esas imaginaciones (más que imaginarios); del papel que juega el despotismo en las comunidades indígenas para preservar la identidad de éstas a la crítica de los programas de educación indígena; de los hallazgos de una especialista reconocida nacionalmente por su trabajo a la exposición amena y entusiasta. Esos fueron sólo algunos de los tránsitos que siguió la conferencia magistral impartida por la doctora María Bertely Busquets, investigadora del CIESAS, con el tema «Educación indígena», como parte del diplomado «Historia de la educación del Estado de México», coordinado por la doctora Elvia Montes de Oca Navas por parte de EL COLEGIO MEXIQUENSE A. C. La investigadora habló de su trabajo de tesis de doctorado que la llevó hacer una historia de un siglo de escolarización

El doctor Jean-François Prud’homme, diserta sobre instituciones y procesos electorales. Lo acompañan los doctores Carlos Quintana Roldán y Cecilia Cadena Inostroza, y el maestro José Antonio Álvarez Lobato.

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en el pueblo zapoteco de Yalalag. Advirtió que la historia social lleva a preguntarse cómo es posible que los indígenas todavía están vivos después de tanto tiempo de haber sido sometidos a políticas incorporativas y asimilacionistas. Compartió la pregunta inicial de su investigación: «¿cómo es posible que con una escuela tan violenta, alfabetizadora, que los niega, con tal grado de discriminación que hasta nosotros llegamos a negar nuestra indianidad —la categoría de mestizos nos ayuda a olvidarnos que tenemos mucho de indígenas—, los pueblos indígenas sigan vivos incluso en las metrópolis, desde la Ciudad de México hasta Los Ángeles y Nueva York, dado que el objetivo era asimilarlos, y después incorporarlos y mexicanizarlos?». E hizo historia: hay un indígena dibujado desde el Estado. En la etapa de Vasconcelos, el indígena bárbaro, al que debía civilizarse. Después, hacia 1924, con las políticas que impulsó Moisés Sáenz —en concreto la casa del estudiante indígena— debía ser integrado al espíritu rural atendiendo a la reforma agraria y a la naciente industrialización. Así, los maestros fueron pensados por Vasconcelos como civilizadores, campesinizadores por Sáenz, y en el periodo de Cárdenas, cuando el indígena es imaginado en vías de proletarizarse, ante el surgimiento del discurso de la

ejemplos locales baste pensar, lectora, en los centros ceremoniales otomí y mazahua, que la estudiosa no mencionó, pero son ilustrativos de esa política). También en esa década se exaltó esa especie de parafernalia relativa a la ornamentación, además de los ritos, los consejos de ancianos, los consejos supremos y los bastones de mando. Todo ello alimentó en ese momento la disputa entre «cultura propia» y «cultura ajena», con una idea de resistencia muy arraigada que detonó en la escuela indígena, creada también desde el Estado. A la par, aparece entonces el maestro bilingüe, creado igualmente desde el Estado, sin la participación de las comunidades, comentó. La doctora María Bertely Busquets. Educación indígena.

intervendría como agente de aculturación, al propiciar que las «regiones de refugio», según Aguirre Beltrán, se transformaran en regiones expulsoras de mano de obra. Así, se impulsaba la proletarización por el camino de la corporativización de los campesinos pensados, en todo caso, como integrados al mercado capitalista. Pero los indígenas tradujeron estas políticas, al apropiárselas, en un efecto calificado por la investigadora como «salamandra». En la etapa de Vasconcelos podían aparecer como cerrados y

Los pueblos indígenas siempre se han regido autonómicamente

En ese momento de su charla, la doctora Bertely Busquets comenzó el relato de la historia más reciente. A la fecha, expuso la conferenciante, encontramos a un indígena que ya no es necesariamente el de Bonfil. «Resulta que todo lo que tiene que ver con las escuelas indígenas es educación compensatoria, por lo tanto, el indígena actualmente puede ser visto como el sujeto de la compensación. Ahora, todo lo que es educación compensatoria está dirigido a educación indígena. Y el indígena es el sujeto de la compensación, el rezagado». La situación de la mujer y los estudios de género son abordados por Las políticas que atraviesan el siglo XX y llegan EL COLEGIO en diversos proyectos de investigación y en publicaciones a nuestras días han dibujado dedicadas al fenómeno migratorio, la historia de la educación, el también las visiones sociales trabajo y las cuestiones demográficas. Aunque no cuenta con un sobre lo indígena, de suerte programa de estudios dedicado a aquellas temáticas, la institución tal que cuando se hace las atiende desde variadas perspectivas en reconocimiento de su historia de la educación vital importancia para entender a la sociedad mexicana. indígena se puede caer en esas representaciones. La última puede llevar a la idealización del indígena integración nacional, el profesor debe bárbaros; en la etapa de Sáenz parecían como «el buen indígena» y a pensar que dispuestos a negociar a favor de sus «la reciprocidad es buena», «la vida en los cumplir esa misión por la vía de la pueblos se rige por la ayuda mutua, y el comunidades y a trabajar en las tierras; y institucionalización (aparecen en esa trabajo colectivo» como resultado del época, como conjunto de dispositivos, los en la época de Cárdenas muchas comunidades optaron por la escuela principio de «comunidad». sindicatos y el INI, que junto con otras instituciones empezó a hacer del asunto socialista, destinada a impulsar la Así se ha perfilado la historia que indígena un asunto de interés público, y integración del proletariado, para lo cual aparece en los archivos de la SEP y en se dio el fortalecimiento de un Estado había que terminar con el campesinado, muchos lugares. Sin embargo, es corporativo, en que el Departamento en seguimiento de una hipótesis que necesario preguntarse: «¿qué es lo que Autónomo de Asuntos Indígenas debía giraba alrededor del marxismo. explica que a pesar de todo siga vigente responder a dicha corporativización). «El Estado siempre ha estado la legitimidad de las comunidades Para la doctora Bertely Busquets, dibujando al indígena», dijo la indígenas?, ¿cómo es que se ha dado Gonzalo Aguirre Beltrán y Julio de la investigadora y continúo el recorrido este fenómeno?» La investigadora Fuente fueron los ideólogos del histórico con el indígena mitológico que respondió: hacer una historia de larga indigenismo institucionalizado, en el surge al final de los años 70, cuando se duración e integrarla desde los actores tiempo que se crea la Dirección General creó la Dirección General de Educación permite conocer que, efectivamente, «los de Educación Extraescolar en el Medio Indígena. Y este indígena resulto el del pueblos indígenas siempre se han regido Indígena y aparece la idea de los bastón de mando, el de Bonfil Batalla, el autonómicamente y han tenido la intermediarios culturales como parte de la del México profundo; es el indígena que capacidad de negociar, aun en las peores política que estuvo vigente casi 30 años, ya desde el periodo de Luis Echeverría circunstancias: simularon la entre 1934 y los años 70: la idea rectora Álvarez es inventado al tiempo que se evangelización, el ser socialistas —de era que el maestro iba a actuar como construyen los centros ceremoniales, que repente se declaraban socialistas y promotor, lo cual significaba que no son centros ancestrales. (Para después ya no lo eran porque las políticas

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academia eran algo diferentes—, pero sobre todo vivieron lo que denominaría una autonomía de facto históricamente anclada donde siempre; se han regido de acuerdo con sus propias redes y negociado con las políticas generales». La investigadora detalló: esa autonomía de facto no es una autonomía romántica, porque implica política, y la política interna implica despotismo. «Para que un pueblo sea autónomo y controle sus recursos escolares, materiales, simbólicos, tiene que ejercer muchas veces despotismo sobre los propios, y se refirió ampliamente a su trabajo en Yalalag, Oaxaca, «un pueblo en donde la historia de la escuela es la historia de los asesinatos permanentes; donde la escuela está hablándonos siempre de guerra». La razón es que el control de la escuela, desde el siglo XIX, por parte de los letrados implicó que la autonomía y el control de la escuela significara una pugna interna, es decir, no había una comunidad solidaria donde todos compartieran con todos y estuvieran cohesionados, pues había muchas divisiones, grupos y facciones. Pero esa división permite la autonomía y que los

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históricamente estos sectores indígenas al castellano escrito para que éste pueda ser útil en su vitalización como pueblos? En todo caso, esos letrados estarían ladinizados y no trabajarían a favor de su pueblo. Pasó revista a varios marcos teóricos y comentó que en su investigación encontró insuficiencia en los enfoques que sostienen, «y en los cuales creemos todos», la transición entre la comunidad indígena tradicional y la sociedad mestiza urbana. «Todos estamos preocupados de que los indígenas se van a asimilar y aculturar: se van a convertir en mestizos». Pero esos profesionistas hablan la lengua indígena y algunos han llegado a diputados sin por ello dejar de ser indígenas, es decir, participan en diferentes niveles de integración nacional o de integración a la nación, al pueblo y algunos, actualmente, hasta a la sociedad global, pues, por ejemplo, están integrados económicamente a la sociedad californiana y a la globalización, y no son bilingües, sino trilingües. Resumió que en la historia de la educación indígena nunca se planteó la ciudadanía indígena. En los discursos de Vasconcelos, Sáenz y Cárdenas no se

EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C., inició los trabajos académicos de la segunda promoción del Doctorado en Ciencias Sociales. En cuanto a la Maestría en Ciencias Sociales con Especialidad en Desarrollo Municipal se está haciendo un esfuerzo sin precedentes para superar los porcentajes de titulación, de tal manera que en sólo cuatro meses —los que cubre esta entrega— presentaron exitosamente su examen de grado doce egresados. Ambos programas forman parte del padrón de posgrados de excelencia del CONACYT.

que se reconstituyen como pueblo puedan luchar por controlar la escuela, aseguró. Luego de señalar que es posible derivar un modelo metodológico para hacer historia social en diferentes pueblos con resultados muy diferentes, dijo que en Yalalag, las políticas de asimilación, castellanización y alfabetización no han anulado ni borrado la legitimidad comunitaria ni la vigencia del proyecto étnico yalalteco en los migrantes que se encuentran en Los Ángeles, Chicago y la Ciudad de México. Dicho proyecto está vivo, promovido precisamente por quienes han sido castellanizados, alfabetizados, escolarizados y profesionalizados, algunos de los cuales estudian en la Universidad Iberoamericana, expuso. Resulta, abundó, que el proyecto étnico en Oaxaca y en muchos pueblos de México está en manos de profesionistas, de aquellos que han sido castellanizados, y volvió a cuestionar: ¿cómo explicar esto?, ¿qué usos sociales, culturales y étnicos han asignado

pueblo de Naranja hasta la dimensiones más estructurales y políticas del asunto. A mí me ayudó mucho. Además, como metodóloga — pues yo creo en el método— no todo es artesanal: el instrumento nos ayuda a navegar con mayor confianza y cuando alguien nos dice cómo lo hizo, se puede navegar con una mayor certeza de que se va a llegar a algún lugar».

Concluyó el diplomado «Historia de la educación del Estado de México»

Las IES han sabido responder a las demandas de la sociedad: doctora Susana Quintanilla Osorio El sistema de educación superior del país es diferente a como se le ha querido ver desde la historia: ni exlcuyente, ni al servicio de la oligarquía, ni elitista ni subordinado al poder. Por el contrario, es una fuerza emergente, dinámica en su interior y capaz de responder a las necesidades de la sociedad, afirmó la doctora Susana Quintanilla Osorio, investigadora del Centro de Investigación y Estudios Avanzados (CINVESTAV). La estudiosa ofreció una conferencia magistral en la ceremonia de clausura del diplomado «Historia de la educación del Estado de México», organizado por EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C., y la Sociedad Mexicana de Historia de la Educación. En su charla presentó un panorama de la historia y la historiografía de la educación superior al año 2003 que incluyó desde los institutos científicos y literarios fundados en el siglo XIX hasta el

habla de un ciudadano indígena, sino de un indígena que para ser ciudadano tenía que campesinizarse, proletarizarse o civilizarse, y ahora tiene que compensarse porque está rezagado del desarrollo nacional. La investigadora explicó así la importancia que tuvo para su trabajo la propuesta de Paul Friederich, autor, entre otros libros, de The princes of Naranja, un estudio antropohistórico de esa comunidad michaocana en que la idea de la historia social integra las dimensiones política y económica con la historia regional, la historia local, la micropolítica, el faccionalismo y aun la cultura y la personalidad. «Lo veo como un aporte metodológico fundamental en la historia social en general y en la historia de la escolarización, porque nos permite incursionar Conferencia de la doctora Susana Quintanilla Osorio. La acompañan desde los ámbitos de la el maestro Norberto López Ponce, el doctor Carlos Quintana Roldán, personalidad de los caciques del y la doctora Elvia Montes de Oca Navas.

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investigación, incluida la relativa a la propia Máxima Casa de Estudios del país. Se refirió también al Departamento de Investigación Educativa del CINVESTAV con un trabajo constante en tres núcleos temáticos: los procesos de Egresados(as) del diplomado «Historia de la educación del Estado de México». carácter intelectual y las instituciones educativas momento actual marcado por la del Porfiriato; la revolución y los años 20, diversidad de las instituciones de y la investigación científica en México. educación superior. Fuera de la capital del país trabaja un De esta manera, presentó un grupo cuya sede es Jalisco con la resumen oral de un trabajo ya publicado participación de la UDEG, El Colegio de cuyo propósito fue hacer un diagnóstico de la producción de los investigadores de Jalisco y el CIESAS; en el Estado de México —con El Colegio Mexiquense, A. C., a la la educación superior a lo largo del siglo pasado, y que la investigadora realizó con cabeza de la investigación local— y otras Antonio Padilla y Lourdes Alvarado, en los partes del centro del país hay grupos términos de elaborar un «estado del arte» constantes, una producción más o menos de la producción historiográfica de ese permanente, pero con iniciativas dispersas sin definición sobre las partes nivel educativo. En esos estudios hay huecos por la del saber, sino por acontecimientos falta de atención a los centros de locales, como los aniversarios de las instituciones. La investigadora consideró investigación, las instituciones tecnológicas, las escuelas normales y la que es bueno aprovechar las efemérides, pero con productos de investigación que Universidad Pedagógica Nacional, así como la educación privada, la cual ha las trasciendan. crecido mucho en la última década, La doctora Quintanilla Osorio habló explicó al referirse al trabajo que analiza igualmente de los productos en que ha la producción historiográfica de, resultado la historia de la educación precisamente, el último decenio, en la que superior y subrayó a autores destacados. también se nota la ausencia de las Y en cuanto a los resultados de ese asociaciones de la sociedad civil, el trabajo en relación con el Porfiriato, la Ejército, la Iglesia, el sector empresarial, revolución y los años 20, indicó que de que forman recursos humanos que esos años lo importante es que ahora se debieran considerarse en el universo de sabe que la mayor parte de las IES la educación superior, advirtió. sobrevivió a la lucha armada, aun sin Concentrados en el sistema cerrar sus puertas (aunque no faltaron las escolarizado, los investigadores han que dejaron de trabajar por lapsos dejado de lado procesos decisivos que breves) y se convirtieron en universidades. pasan por los medios de comunicación Reconoció que, en cambio, hace falta un estudio amplio del Instituto Politécnico masiva. Por ello, el análisis quiso dar Nacional (IPN), a pesar de que el periodo cuenta no sólo de la parte convencional, sino de procesos no estrictamente cardenista, en el cual nació, ha sido bien atendido por los investigadores. institucionales que son decisivos, sin Otro tema muy estudiado es el embargo, en la formación de las nuevas relacionado con el movimiento del 68, generaciones de mexicanos. pero hay necesidad de un recuento Repasó las instituciones en que se exhaustivo, momento por momento y produce la historiografía de la educación espacio por espacio, con un fin y superior, se refirió al trabajo de la propósitos determinados, consideró, pues doctora Luz Elena Galván —presente en a más de 30 años de distancia, los la conferencia— y destacó la presencia de acontecimientos de ese año han una nueva generación de investigadores; adquirido el carácter de históricos, pero asimismo, señaló que en 2003 el listado permanecen muy vivos en la memoria de las IES se ha vuelto preponderante en el ámbito de la historia de la educación colectiva. Los historiadores han en el siglo XX, sin embargo hay una encontrado nuevas vetas de investigación tendencia centralista que tiene al DF como con la necesidad de un recuento detallado núcleo, en donde está buena parte de las que, sin embargo, pone en cuestión el instituciones, por ejemplo la UNAM con su papel del historiador como juez. Lo Centro de Estudios sobre la Universidad, mismo sucederá en breve con la década el primero en su tipo para realizar de los 70 y la llamada «guerra sucia» de

los aparatos de Estado en contra de los movimientos guerrilleros, añadió. Los temas más abordados por los investigadores han sido los estudiantes, las instituciones y los nuevos actores políticos, así como antes lo fueron las instituciones y el Estado, dijo. Por su parte, la doctora Elvia Montes de Oca Navas informó que de 30 alumnos inscritos —profesores normalistas en su mayoría— 29 egresaron del diplomado, luego de 33 sesiones, cinco conferencias magistrales y casi diez meses de trabajo académico con expositores especializados en los temas abordados. El presidente de EL COLEGIO, doctor Carlos Quintana Roldán, comprometió el esfuerzo de la institución en seguir ofreciendo diplomados de alta calidad para poner al día a profesionales de muy diversos ámbitos y agradeció el apoyo de la Sociedad Mexicana de Historia de la Educación y de su presidenta, doctora Luz Elena Galván Lafarga, quien coordinó el diplomado con la doctora Montes de Oca Navas y el maestro Norberto López Ponce, también investigador de EL COLEGIO.

Fue presentado el libro Las relaciones de México con la Unión Europea: retos y oportunidades; hace falta conocimiento mutuo TOLUCA, ESTADO DE MÉXICO.- Como resultado de las dos promociones del diplomado «Las relaciones de México con la Unión Europea: retos y oportunidades», EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C., publicó el libro del mismo título que reúne once artículos escritos por profesores del diplomado y que están dedicados a ese gran tema y agrupados en dos partes, dedicadas, respectivamente, a «México y la Unión Europea» y «Temas de actualidad relacionados con las políticas de la Unión Europea». En el patio del Museo de Bellas Artes, en la capital del Estado de México, se hizo la presentación del libro, que es uno de los resultados del Programa Interdisciplinario de Estudios sobre Europa, creado en agosto de 1999 como el primer esfuerzo institucional para incursionar en los temas internacionales. Otros resultados del programa han sido las dos promociones del diplomado, más de 25 encuentros académicos y una difusión constante de la importancia de las relaciones que México tiene y puede ampliar con la Unión Europea.

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hechas. A la vez, explicó que la moneda única europea significa una oportunidad da dar fin al unilateralismo del dólar en el mundo e iniciar un bimetalismo para que la economía norteamericana tenga un interlocutor en la economía europea. Por su parte, la ministra consejera de la embajada de Francia, señora Jeanne Teixier, se refirió a las posiciones que ha sostenido su país y, en concreto, a la importancia de la Cumbre EuropaAmérica Latina que se realizará los días 28 y 29 de mayo de 2004, en Guadalajara. En tanto, el maestro Dámaso Morales, en representación del doctor Alejandro Chanona Burguete, coordinador del Centro de Estudios Europeos de la UNAM, leyó el texto que envió el investigador, en el que afirmó que el libro resuelve importantes cuestiones sobre la naturaleza de la Unión Europea, su funcionamiento y

En la reunión, el maestro Eduardo Morales Pérez, coordinador de la obra y del PIEE, afirmó que la situación mundial subraya la importancia que Europa tiene para México y la necesidad de que se dé un acercamiento mayor por la vía del conocimiento mutuo y del acortamiento de las distancias geográficas mediante el comercio y el transporte marítimo. México tiene la oportunidad de disminuir su dependencia del mercado norteamericano, señaló, en lo cual coincidieron los comentaristas. El maestro Morales Pérez dijo que entre 1997 y 2003, ha sido publicada apenas una decena de libros sobre le tema, pese a que se cumplen ya seis años de que fue suscrito el Acuerdo de Asociación Económica, Concertación Política y Cooperación entre México y los estados miembros de la Unión Europea. Asimismo, se refirió a algunos de los contrastes más llamativos entre México y las naciones de la UE como elementos para la reflexión y oportunidad para estrechar lazos. Entre esos datos destacó que mientras Dinamarca, Suecia y Finlandia destinan más de tres por ciento de sus productos internos brutos a la investigación y el desarrollo, México aplica menos de uno por ciento, es decir, la mitad del esfuerzo de Grecia en esa materia, que es el estado de la UE más rezagado en ese renglón; además, el número de científicos e ingenieros por cada millón de habitantes es en el Viejo Continente de dos mil 800, contra los 200 que hay en México. En una exposición analítica y precisa, el doctor Jordi Bacaria Colom, director europeo del Instituto de Estudios de la Integración Europea del Instituto Autónomo de México (ITAM), afirmó que el libro invita a una lectura íntegra, pues las contribuciones que incluye están muy bien

de Asociación Económica, Concertación Política y Cooperación México-Unión Europea: posibilidades y eventuales problemas»; del maestro Manuel Armendáriz Etchegaray, «Acuerdo de Asociación Económica, Concertación Política y Cooperación México-UE»; los maestros Fernando del Mateo Venturini y Ángel López Hoher escriben «The Free Trade Agreement Between Mexico and the European Union»; el artículo «Antecedentes de las relaciones de México con la Unión Europea en 1975 y 1991» es de la maestra Judith Arrieta Munguía, y de la maestra Agnes Celis Roca es el texto «El transporte marítimo en el marco del Acuerdo de Asociación Económica, Concertación Política y Cooperación entre los Estados Unidos Mexicanos y la Unión Europea». La segunda parte incluye: «Securité et défense en Europe, des concepts et des politiques en voie de refondation», del

En la presentación del libro Las relaciones de México con la Unión Europea: retos y oportunidades oportunidades,, coordinado por el maestro Eduardo Morales Pérez (extrema derecha), a quien acompañan los doctores Carlos Quintana Roldán y Jordi Bacaria Colom.

significado para las relaciones con México. Es estimulante encontrar en un solo texto las opiniones de diversos autores, enfoques multidisciplinarios y una amplia variedad de temas, expresó. El presidente de EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C., doctor Carlos Quintana Roldán, dijo que la importancia de la Unión Europea para México está fuera de duda e insistió en que la institución atiende temas relevantes para la sociedad en su conjunto, incluidos los relativos a la globalización y la ampliación de los mercados. El libro Las relaciones de México con la Unión Europea: retos y oportunidades incluye «México in the world economy», del doctor Jean –Marie Grether; del embajador emérito Sergio González Gálvez, «Aspectos políticos del Acuerdo

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doctor Bernard Labatut; «El euro y sus implicaciones en las relaciones internacionales», del maestro Eduardo Morales Pérez; «España y la Unión Europea: una relación ambigua», del doctor Walther L. Bernecker; «La integración de las dos europas en el marco de la Unión Europea: instrumentos, objetivos y efectos hacia el nuevo orden internacional del siglo XXI», del doctor Pedro Manuel Rodríguez Suárez, y «¿Cuáles son y cómo operan las instituciones comunitarias?», de la maestra Adriana Bazán Trouselle. Además, el libro incluye en su parte final estadísticas relevantes en las relaciones de México con la Unión Europea relativas a población, economía, comercio, educación y empleo, tecnología, servicios, medio ambiente y empresas, con lo cual las lectoras y los lectores tendrán un panorama muy completo de un tema sin duda relevante.

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Durante la presentación del libro La historia que viví viví,, del ingeniero Gonzalo Martínez ello Macías y el doctor Carlos Corbalá, a quien acompañan en la gráfica el maestro Carlos T Tello Garrocho Rangel.

Fue presentado el libro La historia que viví, testimonio sobre Cárdenas, Allende y Castro TOLUCA, ESTADO DE MÉXICO.- Libro memorioso y memorable. Ejemplo de crónica que es historia. Muestra notable de la importancia que tienen los escritos de quienes se han desempeñado en la política, la diplomacia y el servicio público cuando se refieren a las experiencias vividas en momentos históricos. La presentación de La historia que viví del ingeniero Gonzalo Martínez Corbalá, en coedición de EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C., y La Jornada, pasó de un encuentro entre autor, comentaristas y lectores, a sesión reflexiva sobre las enseñanzas que se pueden extraer de las decisiones patrióticas, inteligentes y oportunas. En el museo José María Velasco, la tarde se convirtió en velada, que dejó un grato sabor de boca y el convencimiento de que el libro de quien fue embajador en Chile y Cuba, entre otras misiones, llena un hueco y puede servir, si se le aprecia en su justo valor, para entender que en política exterior son necesarias las indicaciones claras y exentas de ambigüedades. Que en política interior debe prevalecer el servicio a la sociedad. Y que patriotismo e inteligencia no tienen por qué estar peleados. Comentarios a una obra que merece leerse Para iniciar, el maestro Carlos Tello Macías —ex embajador de México en la URSS y en Cuba, ex director general del Instituto Nacional Indigenista, entre otras

responsabilidades en el servicio público, y actualmente profesor investigador de la UNAM— aseguró que los momentos que relata el autor son importantes. La práctica de escribir memorias y apuntes es relevante porque permite al lector darse cuenta de la manera en que se trabajan, analizan y resuelven los asuntos públicos que a todos nos afectan. Habrá quienes puedan estar en contra de la manera como se resuelve un problema. Aunque los políticos de ayer han caído en desuso, en general se hacían bien las cosas. «No lo hacíamos mal: seguramente lo pudimos hacer mejor», consideró. El hombre que se hizo cargo del Banco de México cuando se nacionalizó la banca en septiembre de 1982, destacó tres momentos relatados en el libro: uno, a finales precisamente del gobierno del presidente López Portillo, cuando se dio la reunión Norte-Sur convocada por el gobierno mexicano, y el encuentro casi inmediato del mandatario mexicano con el presidente Fidel Castro. De esta manera, fueron bien atendidos los intereses de los países invitados, incluidos los de Estados Unidos, los de Cuba (que no asistió ante la exigencia del presidente Ronald Reagan en ese sentido) y, desde luego, los de México. Esa solución —descrita en el libro— fue contrastada por el maestro Tello Macías con el conflicto que se presentó hace meses en el reunión de Monterrey y que llevó a su punto más bajo en muchos años la relación entre México y Cuba. Otro momento corresponde al inicio de la misión del embajador Martínez Corbalá en Chile, cuyas instrucciones presidenciales (en la administración del presidente Luis Echeverría) fueron las de apoyar al gobierno de la Unidad Popular, encabezado por el presidente Salvador Allende. «No hay nada más importante, y se demuestra con el comportamiento mostrado por nuestro embajador, que

tener instrucciones precisas y claras. Se evita uno dar “paso sin huarache”. Actúa uno en función de los intereses del país y del gobierno que va a representar; no hay ambivalencia. Todo esto está demostrado en la segunda parte del libro, que recoge las vivencias del autor en Santiago de Chile». El tercer momento subrayado por el comentarista fue el relativo a la visita del presidente Salvador Allende a México, en particular el discurso que éste pronunció en la Universidad de Guadalajara. «Sus palabras tenían filo, cortaban el ambiente con su claridad y la profundidad de sus conceptos». Y finalmente resaltó la presencia de Cárdenas en el libro, en donde se subraya su obsesiva puntualidad como una generosidad del Jefe de Estado al tomar en consideración a los demás «porque sabe que el tiempo es de todos y no sólo de uno, el del poder. Por eso, entre otras muchas cosas, era tan querido: le importaban los demás». Y remató con el relato de Luis I. Rodríguez —un documento de alto valor histórico incluido en el libro— sobre la ruptura de los generales Cárdenas y Calles, a quien presenta antes de ser mandado al exilio. De todo el libro se pueden sacar conclusiones útiles sobre el gobierno y de cómo se trabaja bien, resumió. El doctor Carlos Garrocho Rangel, investigador de EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C., señaló que el libro es muy ágil y ameno. Enseñar divirtiendo es algo que no logra cualquier autor, expresó y dividió en tres secciones sus comentarios, con acápites sugerentes y reveladores del sentido de su lectura: «Lázaro Cárdenas: el general sí tiene quien le escriba»; «Salvador Allende o la inocencia perdida» y «Fidel Castro o yo me muero como viví». Lázaro Cárdenas es quizá la personalidad más carismática y dominante del pasado reciente de México, advirtió. Es un hombre llevado a la categoría de héroe nacional, aceptó el investigador, quien cuestionó la imagen del General hecha por la historia oficial: más que un hombre, un personaje diseñado para la mercadotecnia política; más que una persona, una leyenda para el discurso, y se refirió también a la información de los libros de texto. Pero con la lectura de González Corbalá, se pude apreciar lo que realmente fue Cárdenas: un hombre que en muchos aspectos transformó para bien a su país, de acuerdo a las exigencias de la historia, a su visión del futuro, a su momento y a sus circunstancias. Un presidente que supo tomar decisiones valientes y responsables, genuinas decisiones de Estado apegadas en todo momento a sus valores y a su ética personal, que fue también su ética política. En relación con Allende, el comentarista mencionó el aniversario 30, en septiembre anterior, de la caída del

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academia gobierno de la Unidad Popular. «Esta sección del libro fue para mí como un modelo para armar. El autor, quizá sin saberlo, va poniendo las piezas sobre la mesa, y el lector va armando el personaje como mejor puede: no hay instructivo y existen muchas maneras de embonar las piezas, así que el resultado puede coincidir o no con el personaje real que conoció el autor». La lectura del investigador le permitió ver en el personaje «a un hombre inteligente, preparado, valiente, decidido, idealista, carismático, humanista. Un hombre bueno, bien intencionado — incluso, tal vez demasiado bien intencionado—, pero también vi a un político que si bien fue hábil para conquistar el poder por la vía democrática del socialismo, resultó poco diestro para mantenerlo y acrecentarlo». Con base en la canción de Silvio Rodríguez «El necio», el doctor Garrocho Rangel hizo su acercamiento a la sección de La historia que viví dedicada a Fidel Castro. «Como en las demás secciones, resulta muy interesante conocer la historia desde el punto de vista de uno de los participantes», dijo. Mencionó diversos hechos, como la «participación brillante, por su ausencia, de Cuba, en la reunión Norte-Sur de Cancún» y otros para la anécdota personal, así como también los curiosos, o las soluciones diplomáticas a varios conflictos internacionales, «contadas siempre desde dentro». En particular, el texto leído por el doctor Garrocho Rangel fue agradecido por el público debido a su amenidad. En el remate de su intervención, parafraseó a un amigo del ingeniero Martínez Corbalá: «siempre me pasa igual cuando me sucede lo mismo», consideró al libro «lleno de detalles para quien sepa entender lo que dice, la forma como se dice y aun lo que no se dice». El maestro Pedro Canales Guerrero, profesor investigador de la Facultad de Humanidades de la UAEM, se sumó al reconocimiento a los coeditores. Dijo que es un libro de historia en varios sentidos. Es historia-crónica de tres maneras, de tres personajes: Castro, Allende, Cárdenas, pero es una crónica desde el interior de los hechos vividos por un político-ingeniero que deja su testimonio. Documento doble, de alguna manera, porque habla y testimonia lo que el autor vivió. Un autor privilegiado por la historia y un documento que habla también con inteligencia de la historia proceso-real, consideró. Es esta mirada la que multiplica el valor del documento y lo que permite al historiador desdoblarlo, observar en los pliegues, dialogar con el escrito que es también actor de estas historias. No es simple crónica, entonces, pues revela al actor pensante que analiza, interpreta y luego da su opinión, apuntó.

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En sus intervenciones para hacer las presentaciones de los comentaristas, el poeta Hugo Gutiérrez Vega, director del suplemento cultural La Jornada semanal, así como ex embajador en Grecia, hizo apuntamientos diversos. Aseguró que La historia que viví no es tan sólo un conjunto de memorias, sino una reflexión sobre el servicio público y una afirmación de los valores esenciales de la política exterior de México, que «siempre mantuvo una actitud que puede ser calificada de ejemplar en el campo de las relaciones internacionales, y que a últimas fechas ha sufrido desviaciones y ha sido tratada con descuido, torpeza e incoherencia, para dejarlo en estos tres adjetivos. «A principios de marzo de 2004 iré a Madrid — anunció— porque se inaugura una calle con el nombre de Luis I. Rodríguez. Ya era tiempo: luchamos mucho para ello». Comentó que cuando Rodríguez fue ministro de la legación de México ante Vichy, salvó al presidente español Manuel Azaña, en el exilio, de la exigencia de Franco de regresarlo a España para juzgarlo y vejarlo, «y recibiendo instrucciones del presidente Cárdenas, Rodríguez lo naturalizó mexicano, de tal manera que murió Azaña como ciudadano mexicano y su féretro fue cubierto con la bandera de México. «Sirva esto de ejemplo para todos los que estamos interesados en la tradición mexicana en materia de derechos humanas y el servicio exterior de relaciones internacionales». Se abordan en el libro, expresó en otra intervención, tres momentos «estelares de la historia política y socioeconómica de América Latina: del presidente Cárdenas, Allende y Fidel Castro. Pero la reseña que hace el autor no es un conjunto de ditirambos, sino una serie de reflexiones críticas; por lo tanto, el libro es doblemente útil». El ejemplo de la narrativa de V V.. S. Naipaul La esperada intervención del ingeniero Martínez Corbalá resultó una meditación sobre la memoria y la escritura que lo llevó a citar al Premio Nobel V. S. Naipaul. Tuvo palabras de agradecimiento para EL COLEGIO, el doctor Alfonso Iracheta Cenecorta, quien en su periodo aceptó que el libro fuera trabajado como un investigación; el doctor Carlos Quintana Roldán, quien dio continuidad al proyecto, y a la maestra Gloria Guadarrama Sánchez, coordinadora de Investigación. Sin embargo, acotó: no se trató estrictamente de una investigación como fue planeada al principio, sino de una narrativa en los términos en que Naipaul

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la describe con maestría en su libro Leer y escribir, donde da una definición de dicha narrativa, que «no es nada más contar lo que se ve, lo que sucede en el momento de la inmediatez de lo cercano, sino también el análisis y la investigación. «He tratado de hacer el análisis de los hechos que se relatan en libro que la opinión pública tiene ahora a su alcance. Lo que he tratado de hacer es seleccionar los hechos vividos con los tres personajes del libro», explicó. Compartió asimismo, unas palabras del general Cárdenas, a quien no le gustaba que los políticos escribieran memorias, «porque únicamente nos acordamos de lo bueno, nunca de lo malo, pero he tratado de no ocultar ni lo bueno ni lo malo. Fue tan rica la relación con los tres personajes que hubiese sido motivo no de un libro de 250 páginas, sino de una colección». Agradeció también el apoyo de la directora de La Jornada¸ la señora Carmen Lira, quien al conocer el voluminoso manuscrito en dos tomos y frente al periodista León García Soler, se concretó a preguntar «¿lo traes para que lo hagamos nosotros? Cuenta con ello». Es una obra narrativa, sí, pero esencialmente política, asumió, «de momentos que yo me sentí, como mexicano, obligado a escribir, porque, por razones generacionales y biológicas, creo que será difícil encontrar otra persona que haya tenido ese privilegio y esa suerte. Yo soy un hombre muy afortunado por haber podido tratar tan cercanamente y durante tantos años a Lázaro Cárdenas, desde que tenía yo 18 años». Compartió recuerdos y anécdotas sobre la relación de Cárdenas y Calles y relató la forma en que detectó que Luis I. Rodríguez, secretario particular de Cárdenas, fue el encargado por éste para llevarle un anuncio trascendental a Calles,

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EL COLEGIO MEXIQUENSE Con la producción lograda en el año 2003, el catálogo editorial de EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C., ser acercó a los 300 títulos publicados a lo largo de 17 años de vida institucional, que incluyen libros y documentos de investigación. Dicho catálogo se puede consultar en la página electrónica: www.cmq.edu.mx, que periódicamente se actualiza y mejora para difundir el trabajo de la institución.

el de la renuncia del gabinete cardenista integrado por amigos de uno y otro divisionarios, como resultado de una declaración del entonces Jefe Máximo de la Revolución. «En esa época no se usaban los relojes de pulso, sino los de “bolsita”. Le dijo: “Ponga usted su reloj a tiempo con el mío. Yo tengo la una de la tarde. Va usted a trasladarse a la finca Las Palmas del señor general Calles y le va usted a notificar que, cuando sean exactamente las cinco de la tarde, en la mesa de acuerdos del Palacio Nacional se le estará pidiendo la renuncia a todo el gabinete, a sus amigos y a los míos”». Cárdenas pidió entonces la renuncia no sólo del gabinete completo, sino de varios jefes políticos y gobernadores. El país estaba así sin gabinete en esos momentos, y no pasó nada, «ahora renuncia la secretaria de Turismo y hay conmoción y crisis nacional. Aquello pasó en 1935». Con su minuciocidad, Cárdenas le continuó diciendo a Rodríguez que observara quiénes estaban en la casa de Calles, quiénes saludaban al mensajero y cómo lo hacían. El señor general Calles se va a referir a las declaraciones. Dígale que cayeron mal en Palacio Nacional, que sabemos que son del señor general Calles. Continúe la conversación, sea amable con él, obsérvelo y esté pendiente de su reloj. Cuando dé la hora señalada, interrumpa la conversación y dígale: “Señor general Calles, en realidad a lo que he venido es a decirle a usted que en este momento, sobre la mesa de acuerdos de Palacio Nacional, están poniendo su renuncia todos los secretarios del gabinete, sus amigos y los amigos del presidente Cárdenas, quien sabe quiénes son sus amigos y los de él, y no quiere ponerlos en un conflicto de lealtades, sino dejarlos en libertad y que actúen como mejor quieran”. Así me lo contó Rodríguez, así lo escribí: en ese momento, se le rodó una lágrima a Calles y dijo “no era necesaria una medida tan fuerte. Yo soy buen jugador de pókar y sé que este juego ya lo había perdido. Quiero a Cárdenas como un hijo y dígaselo usted al Presidente”». Comentó: «así se trataban las cosas entonces. No se andaban con medias tintas y con pequeños calificativos y todas estas cositas de comadres alegres, pero la cosa no acabó allí. Rodríguez debía regresar a Palacio Nacional. El gabinete estaba citado de tal forma que no supieran sus integrantes que se reunirían, y que cada uno pensara que tenía un acuerdo individual con el Presidente. Todos los cuidados se habían tomado. Uno de los secretarios, amigo del general Cárdenas, se puso a llorar y dijo “yo qué culpa tengo de que mis jefes se hayan peleado”. De todas formas tuvo que dejar,

con todo y lágrimas la renuncia sobre la mesa de acuerdos de Palacio Nacional. «Calles se fue a su finca El Tambor, en los límites de Sonora y Sinaloa, luego a Estados Unidos, regresó y empezó a recibir el apoyo de sus amigos civiles y militares. Iniciaron los problemas en el país, hubo levantamientos de dos gobernadores, una balacera con un muerto en la Cámara de Diputados por el rompimiento Calles-Cárdenas. Muerte poco decorosa porque el diputado iba a gatas, escapando de la balacera, y ya se imaginarán por dónde le entró la bala. Siguieron los problemas y Cárdenas, un año después, instruye a su amigo Francisco Múgica que le dé un recado a Calles: “el Presidente de la República ha decidido que usted salga del país. Puede hacerlo con tres amigos civiles que usted designe y al país que decida, o puede permanecer en México y entonces saldrán del país tres generales amigos suyos”. Calles preguntó quiénes serían los generales. Múgica dijo no saberlo. Anuncia que al otro día volvería por la respuesta, pero Calles da una respuesta muy digna: “Salgo yo del país con tres de mis amigos”. Y así fue. «Ese rompimiento es un hecho poco conocido, pero de una gran trascendencia para la historia del país. Antes del acontecimiento, se decía durante los cortos periodos de Portes Gil, Ortiz Rubio y Abelardo Rodríguez, que en conjunto se conocen como el maximato, “aquí vive el Presidente y el que gobierna vive enfrente”, pues la residencia presidencial estaba en el Castillo de Chapultepec y la de Calles en Mariano Escobedo. Tengo una posición personal al respecto. Ese rompimiento no fue una cosa caprichosa ni un conflicto de vanidades, sino una cuestión en que estaba de por medio, en primer lugar, la dignidad del puesto de Presidente de la República; en segundo lugar, Calles presidente y Calles ex presidente eran cosas distintas. Yo prefiero recordar al primero por sus aportaciones al país, la creación de instituciones y su dignidad ante las empresas petroleras. Calles evitó la invasión del país por las tropas norteamericanas «Se puede seguir hurgando en la historia para explicar la posición de quienes estamos en contra de que se modifique la Constitución para “salvar” la situación de Pemex y de la Comisión Federal de Electricidad», señaló. Por su parte, el doctor Carlos Quintana Roldán expresó que EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C., ha

incursionado con La historia que viví en un nuevo tema. El abordado por el ingeniero Martínez Corbalá se presenta en un tono testimonial como momentos y circunstancias trascendentales para el país y América Latina. Los personajes de que da noticia —Cárdenas, Castro y Allende— han dejado una huella imperecedera en la historia del siglo XX. Además, la colaboración editorial de la institución con La Jornada implica la conjugación de un esfuerzo editorial con uno de los periódicos más importantes del país, que se traduce en un tiraje de 10 mil ejemplares al alcance de los lectores, dijo, y pidió al maestro Hugo Gutiérrez Vega llevar el mensaje de reconocimiento de EL COLEGIO a la directora de La Jornada, señora Carmen Lira Saade.

Participó la doctora Cristina Girardo en el seminario del PIETS

Narrativo, crítico y reflexivo, el modelo organizacional idóneo para las OSC La doctora Cristina Girardo, investigadora de EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C., participó en el Seminario permanente de estudios sobre organizaciones de la sociedad civil que organiza el Programa Interdisciplinario de Estudios sobre el Tercer Sector (PIETS) con una charla dedicada a cultura organizacional, profesionalidad y competencia de las organizaciones de la sociedad civil, en la que dio a conocer sus hallazgos sobre el aprendizaje que acumulan las organizaciones, los peligros de la «importación» de modelos de organización, la importancia de la cultura para explicar a las propias organizaciones, la necesidad de que éstas mantengan una actitud autocrítica y el sentido de la asesoría que puede dárseles en estos temas. Como resultado de la investigación realizada expuso que el de la profesionalización es un tema muy sentido en el tercer sector y en la cultura organizacional, de ahí que proliferen cursos y diplomados en estas materias. Detalló: se acusa a las organizaciones de la sociedad civil de carecer de profesionalización; más aún, las propias organizaciones se autoconvocan y terminan por autoflagelarse, pues se consideran poco profesionales para trabajar.

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academia La investigadora resumió los resultados de la revisión del tema que incluyó a la teoría organizacional en su conjunto y a autores como Etzioni, Barry Bozeman, P. Drucker y Clark y Wilson, con sus respectivas propuestas, en particular aquellas relativas a la cultura organizacional de la sociedad civil, las tipologías de organizaciones voluntarias, con énfasis en el boom de estudios que hubo en Estados Unidos concentrados en las organizaciones voluntarias, y las motivaciones personales de quienes actúan dentro de éstas, así como las distinciones hechas por algunos estudiosos entre asociaciones voluntarias y organizaciones públicas o privadas, e incluso los trabajos de quienes han considerado despectivamente a las actividades voluntarias como marginales e incapaces de crear cultura organizacional. La doctora Cristina Girardo insistió en que las organizaciones de la sociedad civil (OSC) tienen características particulares, con formas de gestión alternativa y la participación de recursos humanos que se mezclan, pues hay voluntarios y asalariados (en muchas ONG la casi totalidad de los funcionarios son asalariados). Una función que caracteriza a las organizaciones el tercer sector es la de ser productoras de un bien público que resulta de modos de producción alternativa y de una comunicación específica. Por ello, se concentró en explicar la cultura organizacional determinada por la identidad, los principios, los valores, la ética y la misión propias del tercer sector. Remitió a la que dijo es la definición clásica de organización como una construcción social compuesta por personas y recursos de variadas naturalezas, diseñada formalmente para alcanzar un objetivo. Esta definición es en realidad una construcción técnico racional que remite a un sistema cerrado y, por lo mismo, ha sido cuestionada por los teóricos de la administración, ya que explica de manera muy limitada a las organizaciones del tercer sector, advirtió. Fue útil para las organizaciones de una época y para modelos productivos como el fordismo o el taylorismo, pero no responde al componente cultural de las OSC, aclaró. Con respecto al modelo sistémico evolutivo dijo que éste sigue en uso, incluso en organizaciones del tercer sector. Se trata de un modelo abierto basado en una analogía entre organización y sistema natural. Propone un equilibrio homeostático cuya finalidad no es la máxima eficiencia sino la sobrevivencia de la organización. El modelo ve al sistema como flexible, variable, informal e interdependiente. Por lo anterior, previno sobre el peligro de la «importación» de modelos de cultura organizacional y de

LA GACETA DE

La doctora Cristina Girardo habla sobre la cultural organizacional del tercer sector sector..

profesionalización, en lo cual cae 80 por ciento de las organizaciones del tercer sector, pese a las diferencias de cultura, identidad y los tipos de organización entre países. Esto lleva a lo que denominó la colonización de los principios de las organizaciones del tercer sector. En todo caso, es necesaria una actitud crítica, señaló la doctora Girardo Pierdominici. También explicó que en los años 70 aparecieron modelos de organización en que prevalece el caos como metáfora, y las organizaciones son vistas como estructuras complejas. El concepto de organización vigente es el que la ve como una entidad en constante cambio, con procesos internos de renegociación, y con un ambiente externo y una intercomunicación continua; es decir, aquí entra en crisis la metáfora del orden como previsión y estandarización de los conocimientos. Como el tema de la identidad y la cultura asumen relevancia, el modelo a aplicar es el narrativo, crítico y reflexivo, consideró. La investigadora detalló que su trabajo parte de la premisa de que cada organización tiene un modelo de cultura, por lo cual se puede hablar de una cultura organizacional. De esta manera, el modelo propuesto establece que no hay separación entre profesionalización y organización, pues la primera equivale a la segunda, y la cultura organizacional es la acción organizativa tanto como la acción de profesionalizar que se identifica plenamente con las acciones. El espacio donde se da forma a la profesionalización no es el de los cursos, ya que evaluar la profesionalización considera a la organización en su acción conjunta, y profesionalizar coincide con un conjunto de funciones de la organización ejecutadas por los responsables de la supervivencia de ésta, explicó. También dijo que en la evaluación del desempeño organizacional de las fundaciones comunitarias el resultado ha sido que no es suficiente atenerse a los diplomados sobre el tema, sino que es

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necesario verificar si en el conjunto de sus funciones la organización es profesional. Sobre este tipo de fundación también se ha trabajo en los procesos relativos a su funcionamiento, visto no sólo como acciones de las personas, sino considerando el sistema social agregado que produce la organización misma. En la medida que el funcionamiento interno se da o no, se apoyan u obstaculizan las acciones externas de la organización, cuyo resultado es el bien público que resulta del trabajo de la organización. La experiencia que deja el proyecto de investigación es que las organizaciones del tercer sector deben interrogarse continuamente sobre su actuar y su funcionamiento, expresó, y con respecto a la formación señaló que se trata de una experiencia a través de la cual los sujetos se reapropian cognitiva y emotivamente de la organización, y de los procesos que contribuyen a obtener los resultados de lo que producen o hacen. Especificó que se trata de una formación llevada a cabo para reaprender o desaprender y modificar. El parámetro para analizar la cultura organizacional es la participación, debido a que se trata de buscar las condiciones necesarias tanto personales como organizacionales para alcanzar un nivel de funcionamiento o desempeño organizacional apoyado en el análisis del funcionamiento efectivo. Se habla así de una organización que busca lo posible además de lo ideal, y, en este caso, quien le brinde asesoría debe identificar lo que puede hacer la organización, sugirió. Dio a conocer que hay organizaciones que elaboran manuales en que se concentra su experiencia. Estos documentos de consulta evitan a las personas imprescindibles, pues las funciones se transmiten culturalmente. La revisión de los manuales permite afirmar que se trata de trasmisores efectivos de lo que la organización ha hecho, sus por qué y cómo, para que la gente que ingrese no entre en crisis, como en ocasiones sucede en las organizaciones privadas o burocráticas.

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EL COLEGIO MEXIQUENSE

Noticias de EL COLEGIO

Entregó EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C. C.,, a once ayuntamientos documentos base para elaborar sus planes de desarrollo municipal MÉXICO, D. F.- Los ayuntamientos de Almoloya de Juárez, Atlacomulco, Coacalco, Chalco, Malinalco, Metepec, Otumba, San Martín de las Pirámides, Temascalcingo, Teoloyucan y Valle de Chalco Solidaridad cuentan ya con documentos base para la elaboración de sus respectivos planes de desarrollo municipal y con los cuales podrán cumplir la obligación que en ese sentido les señala la Ley de Planeación estatal. En reunión de trabajo celebrada en la sede del Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (BANOBRAS), representantes de dichos ayuntamientos recibieron los documentos de manos del doctor Luis Pazos de la Torre, director general de esa institución, y el doctor Carlos Quintana Roldán, presidente de EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C. Gracias a los talleres realizados en EL COLEGIO con la participación directa y activa de los funcionarios municipales, fue

Sesión de la Asamblea General de Asociados de EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C. Se incorporaron como ayuntamientos invitados los de Ecatepec y Huixquilucan.

Se llevó a cabo el seminario interno de investigación

Los investigadores de EL COLEGIO participaron en el seminario interno de investigación coordinado por la maestra Gloria Guadarrama Sánchez. Expusieron las doctoras Cecilia Cadena Inostroza, Emma Liliana Navarrete y Diana Birrichaga Gardida; las maestras Rosaura Hernández Rodríguez y Susana Medina Ciriaco, la doctora Claudia Guarisco Canseco, el maestro Norberto López Ponce, la doctora María del Carmen Salinas Sandoval y el doctor Paolo Riguzzi. Los temas fueron muy variados, desde la descentralización y las ONG en un estudio de caso comparativo entre Estados Unidos y México, pasando por «Trabajo juvenil y dinámica familiar», «La hacienda de Acolman, año agrícola 1823», «Geografía histórica del Estado de México. Época prehispánica», «Suelo, empleo y ecología en el ex vaso de Texcoco: recuperación de plusvalías. Estudio de caso», «Ciudadanía y etnicidad. El caso de los indios de México y Perú, 1770-1850», «La intervención francesa en el Estado de México. La guerrilla mexiquense: 1861-1867», «Entre los derechos consuetudinarios y el liberalismo. Los indígenas del sur de la Huasteca Potosina, 1879-1882», hasta «Sistema financiero y crédito agrícola en México, 1897-1917». Con el seminario interno de investigación se produce un diálogo muy fructífero entre los investigadores de EL COLEGIO y los comentaristas invitados que trabajan en otras instituciones. Ese intercambio enriquece el proceso y el resultado de la investigación gracias a la El maestro en Ciencias Efrén Rojas Dávila, director general de los SEIEM, y el doctor Carlos discusión entre pares.

Quintana Roldán, presidente de EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C. C.,, en la firma del convenio entre ambas instituciones.

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LA GACETA DE

proyectos estratégicos. En la preparación de los documentos resultantes participaron más de 150 funcionarios municipales, detalló. El licenciado Castellanos Ramírez añadió que, en algunos casos, los trabajos fueron más allá de lo programado, e incluyeron la evaluación de proyectos y propuestas para mejorar la recaudación del impuesto predial y fortalecer a los organismos de agua, además de la contratación de créditos con BANOBRAS. Antes de entregar los documentos a los presidentes municipales o los representantes de quienes no pudieron acudir, el doctor Carlos Quintana Roldán, presidente de EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C., reiteró el compromiso social de la institución y su esfuerzo por sugerir políticas públicas para las necesidades más urgentes de la población del Estado de México. El director general de BANOBRAS, doctor Luis Pazos de la Torre, dijo en su intervención que esa institución se fundó hace más de 60 años con la idea de brindar una ayuda social real, es La Junta de Gobierno de EL COLEGIO celebró su segunda sesión decir, de servir a la sociedad en mayor medida que lo que le ordinaria de 2003. cuesta a ésta. No se debe olvidar lo básico, en el sentido de que los posible elaborar documentos que serán la créditos otorgados no endeuden a los base de los planes de ayuntamientos más allá desarrollo municipal de 11 de sus posibilidades, ni ayuntamientos les signifique el mexiquenses. Dichos talleres fueron coordinados descuido de sus compromisos de corto por el maestro Serafín plazo. BANOBRAS es más Maya Sotelo, investigador que un banco, por ello de EL COLEGIO. El director de da orientación para las Promoción de BANOBRAS, inversiones destinadas a licenciado Julio fines sociales, afirmó. Castellanos Ramírez, En la etapa final de señaló que la metodología la reunión tomaron la y el enfoque están palabra el alcalde de orientados a la acción, es Valle de Chalco, señor decir, permitirán llevar a la Miguel Ángel Luna práctica la planeación y Munguía —quien convertir los propósitos de anunció la contratación En la ceremonia realizada en BANOBRAS para entregar documentos base a once las administraciones de un crédito por 30 ayuntamientos mexiquenses. municipales en resultados millones de pesos que sean apreciados por la ciudadanía. A lo largo del trabajo, los destinado a renovar el alumbrado público—; el tesorero de propios presidentes municipales y los funcionarios de los Coalcalco y el presidente de Almoloya de Juárez, quienes ayuntamientos delinearon los objetivos y metas que buscan externaron su satisfacción con los documentos elaborados, pues cumplir en los tres años que durarán sus responsabilidades, de les permitirán cumplir en tiempo con la elaboración de sus tal manera que el ejercicio de la planeación no les resultó ajeno respectivos planes de desarrollo municipal. ni impuesto, dijo. El funcionario dio a conocer que antes de que tomaran posesión, esa institución presentó a los alcaldes mexiquenses el programa «Uno, dos, tres, para nuevos presidentes municipales», que les ofrece un paquete de asesoría integral para el arranque de sus respectivas administraciones e incluye el apoyo necesario para la elaboración de los planes municipales de desarrollo. La tarea fue encargada a EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C. Los trabajos realizados con los once ayuntamientos mexiquenses fueron los primeros en todo el país, por lo que constituyen un caso piloto —actualmente, el programa se aplica en diversos municipios del resto de las entidades federativas—, y, a lo largo de los dos meses en que se cumplieron, se elaboraron diagnósticos de los principales problemas que afrontan esos municipios y se definieron la visión, misión y objetivos principales de los ayuntamientos, así como Se llevó a cabo el seminario de tesis del Doctorado, con la participación de los integrantes de las prioridades a ser atendidas con la primera generación y sus respectivos asesores.

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EL COLEGIO MEXIQUENSE

Convenio entre EL COLEGIO y los

de Lerdo, 2000-2002». Yadira Contreras Juárez: «Capacitación en obreras de la rama del vestido. ¿Formación en el trabajo o un curso más en la vida laboral?».

SEIEM

TOLUCA, ESTADO DE MÉXICO.- Un amplio convenio de colaboración académica, científica y cultural fue firmado por el doctor Carlos Quintana Roldán, presidente de EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C., y el maestro en Ciencias Efrén Rojas Dávila, director general de los Servicios Educativos Integrados al Estado de México (SEIEM), en las oficinas centrales de este organismo público descentralizado del Gobierno del Estado de México. Durante la ceremonia, el maestro Rojas Dávila se refirió a los 58 mil

Maestro Juan Carlos Fabela Arriaga.

Maestra Martha Laura Hernández Pérez.

Francisco Herrera Tapia: «Agricultura empresarial y trabajadores agrícolas en el sur del Estrado de México. Las relaciones sociales en la producción de guayaba». Liliana Rendón Rojas: «La industria cervecera en México: aspectos locacionales y apertura externa». Saúl Ramírez Antonio: «El cambio electoral en los municipios y su impacto en las finanzas públicas». Juan Carlos Fabela Arriaga: La doctora Cecilia Cadena Inostroza fue nombrada coordinadora de Investigación. «Negociación laboral en tres empleados docentes que tienen los SEIEM, así como a la amplitud secciones del del convenio para desarrollar actividades conjuntas en materia Sindicato Único de académica, de investigación y difusión de la cultura. Trabajadores al El doctor Quintana Roldán habló del esfuerzo constante que Servicio del Estado ha venido realizando EL COLEGIO para ampliar su presencia en el y Municipios ánimo de la sociedad, del cual forman parte los convenios de (SUTEYM) con tres colaboración que ha establecido con diversas instituciones. ayuntamientos del En cuanto a los SEIEM, el doctor Quintana Roldán resaltó su Estado de México importancia como parte sustancial del sistema educativo estatal de distinta para la cobertura de los servicios de educación inicial, representación preescolar, primaria, secundaria y educación normal. partidista, 20012003». María de Logros en materia de titulación de egresados de la Jesús Gómez Maestría Adame: «Agua que Maestro Francisco Herrera T apia. Tapia. no has de beber... Como resultado de las acciones que se déjala correr. Poder han tomado para mejorar el índice de y conflicto en Temascaltepec». Raúl García titulación de los egresados de la Maestría Colomo: «Corrupción y política en el en Ciencias Sociales con Especialidad en Municipio. El caso de Metepec, México Desarrollo Municipal, sólo de noviembre a (1997-2000)». febrero presentaron su examen de grado A todas y todos, las más sinceras doce tesistas, con resultados positivos en felicitaciones de la GACETA. todos los casos. La lista de examinados y de los títulos de sus trabajos es la siguiente: Martha La doctora Cecilia Cadena Laura Hernández Pérez: «Capacidades Inostroza, coordinadora de institucionales para la implantación del Investigación Servicio Civil de Carrera en municipios rurales (Casos de estudio: Calimaya, El inicio del año fue ocasión para que se Coatepec Harinas y Villa Guerrero». José diera el relevo de la maestra Gloria Luis Estrada Rodríguez: «Introducción de Guadarrama Sánchez en la Coordinación agua potable y drenaje. El caso del de Investigación por parte de la doctora programa Seguimos en acción en Toluca Maestro José Luis Estrada Rodríguez.

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LA GACETA DE

Cecilia Cadena Inostroza, debido a que la primera de ellas presentó su renuncia al cargo a fin de continuar exclusivamente con sus tareas como investigadora de EL COLEGIO y a concluir sus estudios de Doctorado. Ante esta decisión, el doctor Carlos Quintana Roldán, presidente de la institución, nombró a la nueva coordinadora, no sin antes subrayar que el cambio obedecía a la renuncia de la maestra Guadarrama Sánchez y de hacerle un sentido y cálido reconocimiento a nuestra especialista en asistencia social, de quien resaltó su entrega y compromiso. De la misma manera le dio la bienvenida a la doctora Cadena Inostroza, de quien manifestó su certeza de que estará muy cerca de los investigadores. La investigadora es licenciada en Ciencias Políticas y Administración Pública por la UAEM y doctora en Ciencias Políticas y Sociología por la Universidad Complutense de Madrid, es candidata al Sistema Nacional de Investigadores y entre sus Maestra Liliana Rendón Rojas. publicaciones más recientes está «Decentralization and Non-governmental Organizations: Comparative US and México Case Study». En la institución ha sido coordinadora de Docencia y del doctorado en Ciencias Sociales. En su intervención ante la comunidad académica y administrativa, el doctor Quintana Roldán hizo un anuncio muy relevante: el rediseño institucional de EL COLEGIO para responder a los programas federales de apoyo a la investigación y la docencia con la integración de cuerpos académicos, a los que se denominará seminarios, con sus correspondientes coordinador(a) y líneas de investigación. De esta manera se logrará dar un perfil más preciso al trabajo que se viene desarrollando en la generación del conocimiento.

Maestra Y adira Contreras Juárez. Yadira

planta de investigadores buscando su puesta en práctica lo antes posible, dio a conocer. El presidente de EL COLEGIO advirtió que 2004 se anuncia como un año difícil en lo económico, pero con posibilidades de ser un buen periodo en lo académico. El Plan de Desarrollo Institucional 2002-2006 detalla los seis programas estratégicos de fortalecimiento dedicados a la investigación, la docencia, el apoyo académico, la difusión y vinculación interinstitucional, la organización académica y el mejoramiento de la administración, y es la base de la planeación estratégica sobre la que EL COLEGIO mantendrá firme su compromiso de alta calidad académica como institución pública al servicio de la sociedad, aseguró. Después de estas palabras del doctor Quintana Roldán, la maestra Guadarrama Sánchez expresó de manera emotiva su agradecimiento a los investigadores de EL COLEGIO, cuyo trabajo, afirmó, permite a la institución tener sentido y rumbo, así como mantener el prestigio que ha logrado. En tanto, la doctora Cadena Inostroza Maestra María de Jesús Gómez Adame. agradeció su nombramiento, al cual calificó como una alta responsabilidad que atenderá con dedicación y empeño. La maestra Rosaura Hernández Rodríguez en el coloquio internacional sobre otopames

En San Miguel Tolimán, Querétaro, se llevó a cabo el V Congreso internacional sobre otopames «Homenaje a Ricardo Pozas Arciniegas», cuya sede fue la Facultad de Filosofía de la Universidad Autónoma de Querétaro. La lista de instituciones convocantes fue muy larga, como prenda de la importancia del encuentro que incluyó temas arqueológicos, lingüísticos, etnológicos, etnohistóricos, de Antropología Física, Antropología Social e Historia, entre otros. Maestro Saúl Ramírez Antonio. Por parte de EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C., participó la maestra Con respecto Rosaura Hernández Rodríguez. a los seminarios Premios y reconocimientos individuales que se llevan a cabo para dar a conocer los La doctora Diana Birrichaga Gardida, coordinadora de Docencia avances de de EL COLEGIO, obtuvo el premio Banamex Atanasio G. Saravia investigación de de Historia Regional Mexicana 2002-2003, que otorga el cada proyecto, Fideicomiso de Fomento Cultural Banamex a la mejor tesis de anunció que doctorado, y también el de la Academia Mexicana de Ciencias a continuarán para la mejor tesis de doctorado en Ciencias Sociales y Humanidades complementar el 2003. Doble felicitación a nuestra investigadora, quien por cierto trabajo de los acudió al Museo de Antropología e Historia del Centro Cultural cuerpos Mexiquense a ofrecer la conferencia «Los usos del agua en el académicos. Sobre Estado de México, siglo XX», como parte del ciclo organizado por este rediseño se ese recinto dependiente del Instituto Mexiquense de Cultura. Lo mismo expresamos a la ahora doctora María del Pilar harían en los días siguientes las Iracheta Cenecorta, quien presentó su examen de grado en consultas Doctora en Historia en la Universidad de Zacatecas, con la brillantez que caracteriza a su trabajo. necesarias con la

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EL COLEGIO MEXIQUENSE

Más todavía: en la Universidad Autónoma Metropolitana plantel Xochimilco se realizó el examen de titulación de la maestra Rosario Rogel Salazar. La directora de la revista Economía, Sociedad y Territorio se graduó como Doctora en Ciencias Sociales. Repetimos las palabras de felicitación. La licenciada Gabriela Camacho Beiza, secretaria particular del Presidente de EL COLEGIO El doctor Carlos Quintana Roldán nombró a la licenciada Gabriela Camacho Beiza como su secretaria particular, en sustitución del licenciado Mario Albert Montiel Sánchez, quien concluyó con el encargo luego de haberse desempeñado en esa tarea con el actual presidente y con su antecesor, el doctor Alfonso Iracheta Cenecorta. El doctor Quintana Roldán tuvo palabras de reconocimiento y aprecio tanto para quien deja la encomienda como para quien la asume. La licenciada Camacho Beiza se venía desempeñando como jefa de la Unidad de Planeación y Procuración de Recursos, área de mucha importancia para una institución que está obligada a un esfuerzo permanente de diversificación de sus fuentes de ingresos. Como encargada del despacho de la misma quedó la licenciada Minerva Uribe Belmar. A la par de felicitar con mucho afecto a la licenciada Camacho Beiza y desearle éxito en su nueva encomienda, la GACETA le hace un reconocimiento amistoso al licenciado Montiel Sánchez y le desea lo mejor en las tareas que emprenda. Diálogo de instituciones de capacitación del Estado de México TOLUCA, ESTADO DE MÉXICO.- En el salón Juárez de la sede de la Cámara de Diputados se iniciaron los trabajos del foro «Retos y desafíos de los gobiernos municipales», como resultado del acuerdo de buena voluntad «Diálogo de instituciones de capacitación del Estado de México». Luego de la conferencia que ofreció el senador César Camacho Quiroz sobre la corresponsabilidad fiscal de las entidades federativas, los representantes de las instituciones dieron a conocer los planes, programas de trabajo y actividades de cada una de ellas. Tocó al doctor Carlos Quintana Roldán exponer lo relacionado con EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C., en una intervención en que enfatizó los programas de investigación, docencia y editorial, así como el vínculo de la institución con la sociedad y los sectores público y privado a través de actividades que resultan en conocimiento útil para la toma de decisiones. EL

Varios espacios de EL COLEGIO recibieron las obras de los alumnos de la Escuela de Artes de la UAEM, que presentaron la exposición «Ecos».

COLEGIO ha contribuido al desarrollo municipal con el estudio de las necesidades y problemas de ese nivel de gobierno, señaló. Se suma EL COLEGIO al homenaje póstumo a Norberto Bobbio

TOLUCA, ESTADO DE MÉXICO.- A iniciativa del Instituto de Administración Pública del Estado de México (IAPEM) y de la Dirección General de Desarrollo Político del gobierno del estado, y con el apoyo de diversas instituciones, incluido EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C., dio inicio el homenaje póstumo al que es considerado el más importante politólogo del siglo XX, el italiano Norberto Bobbio, fundador de la famosa Escuela de Turín. En la conferencia de prensa en la que se dio a conocer el programa de actividades estuvo presente la doctora Cecilia Cadena Inostroza, coordinadora de Investigación, quien en entrevista posterior con los medios de comunicación, señaló la importancia de hacer una revisión crítica de las ideas de Bobbio y de aplicar sus propuestas, marcadas también por un profundo sentido crítico, a la situación de las democracias modernas, en particular a la mexicana, que tiene todavía sombras y áreas de indefinición. Fueron anunciadas las conferencias que dictarán los doctores Lorenzo Córdova y José Fernández Santillán, y el maestro Pedro Salazar en un acto a realizarse en la Cámara de Diputados con intervenciones de la diputada licenciada Martha Hilda González Calderón y el presidente del IAPEM, doctor Luis García Cárdenas. Asimismo, se anunció el concurso estatal de ensayo dedicado a Bobbio, cuya fecha de recepción y cierre de trabajos será el 30 de abril. Los temas: vida y obra de Norberto Bobbio; liberalismo y democracia; Estado, gobierno y sociedad (por una teoría general de la política); pensamiento filosófico de Noberto Bobbio y el futuro de la democracia en México La comunidad de EL COLEGIO celebró, con su ya tradicional comida, las fiestas navideñas y de fin de año. desde la perspectiva bobbiana.

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publicaciones

LA GACETA DE

Nuevas ediciones

José Luis Coraggio Política social y economía del trabajo. Alternativas a la política neoliberal para la ciudad

U

na característica de la crisis de reproducción social por la que atravesamos es la incompatibilidad entre la libertad global de acumulación del capital y el derecho ciudadano a una vida digna. Para los fines del capital, la población trabajadora resulta estructuralmente excedente, generándose así la exclusión masiva que constituye a la nueva cuestión social. La respuesta desde el poder son las “nuevas políticas sociales”, asistencialistas y focalizadas, para aliviar la pobreza extrema. Más allá de las intenciones de quienes las aplican y del alivio temporal que puedan efectivamente producir, la función estructural de dichas políticas es remendar la legitimidad maltrecha de un sistema que no brinda igualdad de logros ni de oportunidades. Autónomamente o con el apoyo de una variedad de organizaciones sociales, los excluidos y empobrecidos buscan otras formas de sustento, pero chocan con la falta de

condiciones para realizar socialmente el potencial productivo de su principal recurso: el trabajo. ¿Será posible desarrollar otras estructuras económicas, eficientes, centradas en el trabajo, que permitan aflorar nuevos dinamismos y recursos para resolver las necesidades de todos? Tal alternativa es posible y viable, y las ciudades de América Latina pueden hacer una importante contribución en ese sentido. Eso requiere no solo una acción desde la sociedad sino políticas socioeconómicas activas desde el Estado, a fin de establecer otras relaciones entre la economía del trabajo, la economía del capital y la economía pública. Este trabajo

analiza críticamente la política social neoliberal y los límites que esta pone a la política urbana, recoge experiencias y propuestas de América Latina y Europa, y sugiere alternativas de acción colectiva, en la convicción de que es posible lograr acuerdos para transformar la sociedad en favor de las mayorías

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EL COLEGIO MEXIQUENSE

La moral y el cuerpo como recurso político. La campaña en contra de la coeducación en las Escuelas Normales Rurales a principios de los años cuarenta* Alicia Civera** [email protected]

DOSSIER

Académico M

ás que en otras profesiones, en el magisterio la vida privada y el desempeño profesional no tienen una frontera bien definida. Los maestros, como guías de la juventud y la niñez, han de tener un comportamiento intachable que les permita ser un ejemplo a seguir. En otras actividades profesionales o laborales, lo que suceda en lo privado no importa tanto si se cumple bien con el trabajo. Pero en el caso de los maestros, sobre todo de los rurales, cuya vida privada es difícil de ocultar a los vecinos, es diferente. El discurso de la moralidad en el magisterio no tiene como resultado que los docentes sean pura virtud, pero si se les sabe algo, ese algo puede ser utilizado en su contra aunque cumplan su trabajo con toda eficiencia. Así sucedía en los años veinte y treinta del siglo pasado, durante los cuales era frecuente que las comunidades rurales que querían que un maestro que atacaba la religión saliera de la escuela, denunciaran a las autoridades que el maestro era «un borracho». Independientemente de lo que las comunidades pensaran acerca de que un profesor consumiera alcohol, ello podía ser argumento poderoso para que la Secretaría de Educación Pública lo remplazara. El cuerpo es del maestro, pero no le pertenece del todo. Es un cuerpo público y en asuntos del cuerpo y la moralidad, muchas veces las mujeres tienen las de perder. Quiero compartir la historia de una estudiante de la Escuela Normal Rural de Tenería (hoy llamada Escuela Normal Rural Lázaro Cárdenas del Río), establecida en Tenancingo, en el Estado de México. Esta escuela, al igual que todas las normales rurales creadas desde los años veinte para formar maestros que atendieran las escuelas rurales, era un internado mixto que formaba principalmente a jóvenes campesinos * Texto leído por su autora en la mesa redonda «Mujeres y género en el Estado de México», que coordinó en EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C., el 4 de diciembre de 2003, para conmemorar el 50 aniversario de que se concedió el voto a las mujeres y en el que participaron otras investigadoras de la institución (véase la nota correspondiente en la sección «Academia» de esta misma entrega de la GACETA). ** Maestra en Ciencias con Especialidad en Educación por el Departamento de Investigaciones Educativas del CINVESTAV. Es investigadora de EL COLEGIO MEXIQUENSE A. C., y encargada de la coordinación del Doctorado en Ciencias Sociales. Ha coordinado Experiencias educativas en el Estado de México y participó en la coordinación de Debates y desafíos en la historia de la educación en México.

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LA GACETA DE

pobres. La estudiante, a quien llamaremos Martina por respeto a su privacidad, provenía de una familia campesina de Guerrero, y sabemos de ella por su expediente como estudiante, por los informes del director y el médico de la escuela, y por los informes de los inspectores de la Secretaría de Educación Pública. El 10 de octubre de 1942, el médico de la escuela, el doctor Amado G. Báez, escribió un certificado diciendo que Martina sufría una grave hemorragia y que debía darse aviso a sus padres para que la recogieran, pues en el plantel no había medicinas para tratarla. La hemorragia, decía el galeno, era consecuencia de una anemia aguda, enfermedad frecuente entre los jóvenes del medio rural. Martina no mejoró y fue trasladada al Hospital General de Toluca para una transfusión. En los informes del médico de la escuela, se anexó un certificado expedido por un colega suyo de dicho nocosomio en el que indicaba que, después de un cuidadoso estudio físico, había llegado a la conclusión de que la causa de la hemorragia había sido un embarazo y aborto y, agregaba, sin que ello tuviera importancia para el tratamiento a seguir, que el examen físico mostraba «un himen desgarrado y cicatrizado, por lo cual la mencionada alumna fue desflorada en épocas anteriores». El texto estaba dirigido a su amigo Amado G. Báez, a quien tuteaba, y estaba escrito en un tono coloquial. Eliminando los saludos y las despedidas afectuosas, la parte del diagnóstico se anexó al expediente de Martina y fue enviada a la SEP. El siguiente documento que aparece en dicho expediente es una carta del director de Tenería, el profesor José Santos Valdés, dirigida al padre de la estudiante, en respuesta a una carta que por lo visto el señor le había enviado, pero cuyo contenido desconocemos. El director decía que lamentaba mucho lo sucedido, y le rogaba que pidiera al médico que estaba atendiendo a su hija en Guerrero que escribiera y firmara un certificado en el cual se hiciera constar el estado en que se encontraba su hija. Ello era importante para hacer justicia, puesto que el médico de la escuela había modificado su parecer acerca de la enfermedad y él, como director, había sido el último en enterarse en la escuela de dicho cambio de opinión, lo cual le hacía pensar que se trataba de un caso de difamación. El médico, por su parte, reportaba a la SEP que él había dado aviso al maestro encargado de la escuela en ausencia del director, y que ese maestro había omitido darle la información a Santos Valdés, a quien a su vez acusaba de no tener confianza en su persona ni respeto por su profesión, pues le había enviado un oficio ordenándole, por petición de los estudiantes, que toda muchacha que fuera al consultorio debía ir acompañada por la ecónoma o por algún profesor, como se había establecido desde el inicio del año escolar. El expediente de Martina concluye ahí. El certificado del médico de Guerrero nunca llegó. Tampoco hay una reinscripción o petición de traslado a otro plantel, ni una carta de la alumna dándose de baja que le permitiera seguir sus estudios en el futuro. No sabemos, ni nos interesa averiguar, si la hemorragia fue provocada por una anemia o un aborto, tampoco quién era el difamador, sino constatar que las intenciones de Martina de concluir sus estudios para graduarse como maestra rural también concluyeron ahí. Hablar de este caso no tiene un sentido de morbo ni de indagación policiaca, sino destacar que la historia que impidió a Martina seguir con su proyecto de vida tenía poco que ver con su estado de salud o la destrucción añeja de su himen, y era sólo un hilo colgando de una tela tejida en otra parte: en las intenciones por modificar el Artículo Tercero Constitucional que, desde 1934 estipulaba, que la educación debía ser socialista —las cuales se realizarían en 1945—, y en el proceso de organización del magisterio que culminaría con la formación del SNTE, en 1943. Entre 1941 y 1942, los periódicos y los inspectores de la SEP sacaron a la luz pública diversos casos de embarazos, nacimientos, abortos y hasta suicidios provocados, decían ellos, por la coeducación en los internados de las normales rurales, manejados por «profesores comunistas» que sustentaban teorías extranjeras exóticas y estaban muy poco preocupados por formar

a los jóvenes en un camino recto. Cuando el gobierno de Manuel Ávila Camacho decidió, presionado por la derecha y la situación internacional, terminar con el radicalismo cardenista y especialmente con el programa de educación socialista, el comunismo se convirtió en sinónimo de inmoralidad. Aquellos informes formaban parte de una campaña de desprestigio de las instituciones educativas más radicales, como lo eran las Escuelas Regionales Campesinas que, desde 1941, fueron transformadas en Escuelas Normales Rurales, con lo cual se limitaron muchas de sus atribuciones, la mitad de los planteles fue cerrada y su presupuesto se redujo de forma drástica. La campaña era encabezada por el Partido Acción Nacional y la Unión Nacional de Padres de Familia, pero también por autoridades de la SEP y el Frente Revolucionario de Maestros de México, que actuaba dentro del Sindicato de Trabajadores de la Enseñanza de la República Mexicana (STERM), con el patrocinio de la Confederación Nacional Campesina. Es innegable que el rechazo a la coeducación provenía de diversos sectores sociales, pero ello fue aprovechado por diversas fuerzas políticas en el proceso de consolidación del Estado mexicano, en particular para la formación de un sindicato magisterial único en el país. Desde principios de los años veinte las escuelas normales rurales funcionaron como internados mixtos. Eran escuelas pequeñas (con un máximo de 60 alumnos) y funcionaban como familias en que el director fungía como padre y su esposa como la encargada de cuidar a las muchachas. Aún así, el sistema mixto generaba desconfianza entre la población, sobre todo en el centro del país, y la inscripción de mujeres era baja (en 1928, de sólo 35 por ciento). En Michoacán, como en otros lugares, circulaban rumores de que a las muchachas se les desnudaba; rumores que estaban enlazados, además de otros aspectos políticos, con el descontento provocado por la feroz campaña antirreligiosa callista, y que crecerían en los años treinta con el intento de Narciso Bassols, Secretario de Educación, de impulsar el programa de educación sexual, y posteriormente con la implantación de la educación socialista que, entre otras cosas, impulsaba la coeducación como condición de justicia y liberación de las mujeres. Durante el sexenio cardenista, las Normales Rurales, convertidas en Escuelas Regionales Campesinas al fusionarse con las Escuelas Centrales Agrícolas, extendieron sus atribuciones a la formación de técnicos agrícolas y sus actividades hacia las escuelas y comunidades cercanas. Algunas de ellas intervinieron en asuntos políticos regionales como el reparto de tierras o la formación de cooperativas para debilitar a los acaparadores. Estas actividades, al igual que las realizadas por las Misiones Culturales que serían desaparecidas en 1938, se salían del redil de un gobierno que pretendía concentrar el juego del poder en el interior del Partido de la Revolución Mexicana (que años después sería el PRI), y en el ámbito educativo, aglutinar al magisterio en una sola organización que fuera más controlable dentro de ese mismo partido. El aumento de actividades de las escuelas así como el incremento de su población estudiantil modificaron las formas de organización de los internados que en buena parte dejaron de funcionar como familias extensas (había escuelas de hasta 300 estudiantes, pero la mayoría tenían entre 100 y 200). Ello se agravó a raíz de la expropiación petrolera, pues el presupuesto para los internados se redujo considerablemente. Muchos directores escribían a la SEP que no tenían luz eléctrica ni personal suficiente para garantizar la seguridad de las alumnas. Sus informes, encaminados a obtener un mayor apoyo económico para las escuelas, se revirtieron y fueron convertidos en argumentos para modificar, en 1942, la Ley Orgánica de Educación Pública, lo que si bien no logró finiquitar la educación socialista, sí eliminó la posibilidad de impulsar la coeducación. A partir de 1943, tanto en la Escuela Nacional de Maestros en la Ciudad de México, como en las Escuelas Normales Rurales, se ubicó a hombres y mujeres en planteles unisexuales. En otras palabras, la batalla en contra de las reformas radicales cardenistas y comunistas se combinó con las visiones patriarcales

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EL COLEGIO MEXIQUENSE

de unos y otros, quienes en conjunto se escudaron en una actitud paternalista de protección a las mujeres de sí mismas y en la supuesta falta de control sobre su sexualidad. De hecho, también los padres de las estudiantes que pidieron o exigieron al gobierno que no cerrara los internados mixtos, argumentaban que si los planteles se hacían unisexuales y sus hijas debían ser trasladadas lejos de sus casas, dejarían de estudiar. Los mismos presuntos comunistas, los que según el Frente Revolucionario de Maestros de México proclamaban el amor libre y todo libertinaje, eran paternalistas y cuidaban de las muchachas. Durante los años treinta, los maestros, los directores y los propios alumnos que formaban parte del gobierno interno de los internados seguían reglas estrictas para evitar los noviazgos, así como prevenir las relaciones ilícitas y los embarazos. En la escuela de Tenería, que un muchacho platicara con una estudiante a través de la ventana del dormitorio femenil era suficiente para recibir un extrañamiento público por parte del director, quien además daba aviso a los familiares. En caso de que reincidiera, se recurría a la expulsión. Las parejas que eran descubiertas besándose o abrazándose eran expulsadas. A veces, si eran buenos alumnos, se avisaba a sus familiares y se les daba de baja para que pudieran trasladarse a otros planteles. Aunque los estudiantes proponían sanciones más leves que los maestros, tenían sus propias reglas informales para evitar que las muchachas tuvieran muchos novios, poniéndolas en evidencia en público. A veces tendían a ser más estrictos con las alumnas que con los jóvenes, pero la maestra Guadalupe Ceniceros de Zavaleta defendía que el castigo debía ser el mismo para hombres y mujeres, puesto que cometían la misma falta. De todos modos, aunque los castigos fueran iguales para ambos, sus efectos sociales, tanto en la escuela como en las casas, resultaban más severos para las muchachas. Por órdenes de la SEP, el médico de la escuela debía llevar un control de las menstruaciones de las estudiantes, y en este caso no sabemos si realmente se llevaba a cabo (aunque así lo reportaban a la SEP), pero en 1942 el médico informaba que el registro no se llevaba con toda regularidad, según él por la falta de interés del director ante la resistencia de las propias estudiantes y de la maestra ecónoma o la enfermera, que eran las encargadas de dicha verificación o, según el director y el inspector, por negligencia del médico. Dicho sea de paso, los inspectores nunca se preocuparon por verificar si esta medida se aplicaba. Donde hay medidas estrictas de control hay también deseos de transgresión, y el internado no fue la excepción. Seguramente hubo muchos noviazgos, aparte de los que fueron castigados, pero los casos de relaciones sexuales, embarazos y abortos que hubo fueron poco numerosos y probablemente no más frecuentes que fuera del plantel. Pero la cuestión es que los internados estaban en la mira de las autoridades. Las denuncias que salieron a la luz entre 1941 y 1942 no obedecieron a un incremento. Algunas eran ciertas. Otras fueron rumores que nadie quiso investigar, como la denuncia anónima de que en los alrededores de Tenería se encontraban fetos tirados pertenecientes a las estudiantes. Otros eran sumamente dudosos, como la queja de las estudiantes del plantel de Chihuahua, quienes acusaban al médico de la escuela de hacerles el amor, o el caso de Martina, protagonizado por el director, abiertamente comunista, y el médico de la escuela, que era miembro del Frente Revolucionario de Maestros de México. Lo que unos y otros consideraban inmoral no era investigado, pero sí utilizado en el terreno político. La campaña de desprestigio de las Normales Rurales fue efectiva en una sociedad temerosa del experimento coeducativo. Al hacerse los planteles unisexuales, la inscripción de mujeres subió significativamente (en 1936 era de 23 por ciento y en 1946 llegó a 45 por ciento del total de estudiantes). Con ello, más mujeres pudieron ingresar a una institución que era de las pocas opciones educativas con que contaban las jóvenes en el medio rural y que de hecho ofrecía la posibilidad de un ascenso de status económico tanto para ellas como para sus familias, generación tras generación. Sin embargo, quedaron truncadas o

postergadas las posibilidades de construcción de relaciones de género diferentes, como había sucedido en los años treinta (y de las cuales desafortunadamente no hay espacio para comentarlas). De paso, se ahorcó económicamente a las Normales Rurales y se desarticuló interiormente el movimiento estudiantil y magisterial. A partir de 1943, las Escuelas Normales Rurales dejaron de ser mixtas, salvo algunas excepciones temporales. Pero muchos años después, tras la descentralización educativa, una vez que estas instituciones quedaron bajo control de los gobiernos estatales, el internado de El Mexe, en Hidalgo, volvió a ser mixto. En meses recientes, a raíz de una huelga, el gobierno de Hidalgo resolvió cerrar el internado y otorgar becas a los estudiantes. En medio del conflicto, aparecieron declaraciones en los periódicos de una estudiante que acusaba a sus compañeros de abusar sexualmente de ella. Corrieron noticias de que ese tipo de asuntos era frecuente en el internado en el que, además, había una epidemia de enfermedades venéreas. Incluso, organismos no gubernamentales pro derecho de las mujeres exigieron al gobierno que cerrara el internado argumentando que las autoridades tenían la obligación de proteger a las mujeres. ¿Estos casos existían y salen a relucir ahora, gracias al conflicto, o son casos armados o exagerados precisamente por él? Los casos de violencia en contra de las mujeres, como se ha recalcado en estos días en los periódicos, son infortunadamente muy frecuentes en las calles, en los lugares de trabajo, en el seno de las familias y probablemente también en los internados. Pero El Mexe está en la mira, al igual que todas las Normales Rurales. Ojalá estas informaciones sobre El Mexe sean falsas o exageradas, e investigadas al igual que las denuncias fuera del plantel (como las de las mujeres de Ciudad Juárez, sin que se les acuse de querer provocar su destino por usar minifalda). Ojalá también que los cuerpos puedan tener su espacio privado, lejos de la esfera pública, en donde pueden ser utilizados como armas importantes, por diferentes actores, en las querellas políticas. Con ello perdemos todos, pero sobre todo las mujeres, como Martina. FUENTES Archivo Histórico de la Secretaría de Educación Pública: Dirección General de Educación Normal, expedientes de alumnos, Tenería (exp. 4257/32) y de otros alumnos, 1937-1951. Dirección General de Educación Superior e Investigación Científica, Inspección especial, Tenería, 1941-1943 (exp. 5194/6); informes de inspección, varias escuelas, 1941-1943, e informes de los directores, varias escuelas, 1940-1944. Subsecretaría: Estudios para que las Escuelas Normales Rurales sean unisexuales, 1942-1944, caja 9. SEP (1930), Noticia estadística sobre la educación pública en México correspondiente al año de 1928, Talleres Gráficos de la Nación, México, 1930, pp. 634-637 ————— (1946), La obra educativa del sexenio 1940-1946, México. ————— (1944), «Memoria de la Secretaría de Educación Pública, 1943-1944», mimiografiado, T. I, f. 0235. Medina, Luis (1982), «Hacia una escuela moderada y nacionalista», en Historia de la Revolución Mexicana, T. XVIII, México, El Colegio de México. Villela, Othón (1972), La primera Normal Rural, Cincuentenario en Tacámbaro 1922-1972, México, pp. 26-27. Vizcaíno, José (1999), Ecos de internado. (Varios fragmentos de esta novela autobiográfica fueron publicados en una antología de Martínez, Maximino (1999), «La Escuela Normal de Tenería en los umbrales del tercer milenio», Tenería, México.

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LA GACETA DE

Sobre Chayotes, burros y machetes, de Pablo Castro Domingo* Roberto Varela Velázquez**

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gradezco mucho al doctor Pablo Castro por esta invitación que me ha hecho de compartir con él la presentación de este magnífico libro que ahora está en posibilidad de que todos lo puedan leer. Con Pablo Castro he trabajado entre tres y cinco años, y ha sido siempre un placer el estar trabajando con él. Te agradezco entonces mucho, Pablo, que me hayas invitado. Pablo Castro Domingo, en su Chayotes, burros y machetes, trata de responder a un problema de alcance general que, sin embargo, él lo concreta en una realidad empírica delimitada y bien acotada. El problema general alude al impacto diferencial que reciben estructuras de poder subordinadas por parte de una estructura subordinante. La tentación del analista es fijar su atención sólo en la estructura mayor y hacer caso omiso de las estructuras menores como si éstas fueran iguales. Nuestro autor está atento, por el contrario, tanto a una como a las otras. Me atrevería a decir que hasta estudia estas últimas con una potente lupa para ver diferencias significativas en sus estructuras de poder. La realidad espacial que analiza son tres municipios del sur del Estado de México: Tenancingo —«chayotes»-, Villa Guerrero —«burros»— y Zumpahuacán —«machetes»—; la temporal, el siglo XX, dividido en tres cómodos y fácilmente justificados períodos: 1900-1940, fines del porfiriato, revolución, cristiada y reparto agrario; 1940-1970, la búsqueda de la paz, estructuración de la estabilidad política, intermediarismo; 1970-2000, crisis y continuidad. Así, transcurren tres historias paralelas. El libro aporta un conocimiento sustantivo sobre la evolución de las estructuras de poder de los tres municipios. Se trata de un trabajo minucioso, bien documentado, finamente analizado, que nos evita las fáciles generalizaciones que suelen hacerse a menudo cuando no se tiene la cantidad y calidad de datos que nos permiten ver las diferencias dentro de patrones comunes. Por otro lado, el material presentado es de tal calidad que nos incita a buscar comparaciones con

* Texto leído por su autor en la presentación del libro de referencia editado por EL COLEGIO MEXIQUENSE A. C. (2003). Museo-taller Nishizawa, Toluca, Estado de México, 21 de agosto de 2003. ** Doctor en Antropología Social por el Centro de Investigación y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS). Es miembro del Sistema Nacional de Investigadores (Nivel III). Actualmente es profesor-investigador del Departamento de Antropología de la UAMIztapalapa. Ha sido profesor de la UNAM y de la Universidad de Londres, entre otras instituciones nacionales y extranjeras. Es autor de numerosas publicaciones, entre ellas Caminos andados y por andar. Una reflexión sobre la formación de antropólogos en México. Fotografías: Archivo particular del Dr. Pablo Castro.

otros municipios de otras regiones del país. De hecho, yo encuentro muchas similitudes con investigación personal y de equipo que realicé en el estado de Morelos, y es semejante la estructuración de relaciones de poder. Sin meternos a relaciones de cultura, sino simplemente a relaciones de poder, encuentro un paralelismo muy cercano por el tipo de comunidades y por los periodos históricos. Me congratulo por encontrar en el análisis de Pablo la posibilidad de volver a reanalizar su propio material para avanzar en nuestro conocimiento o en nuestra inteligencia de los procesos dinámicos de transformación de estructuras de poder. El planteamiento del problema de investigación está bien puesto y bien resuelto: se apoya básicamente en los planteamientos teóricos sobre el poder social de Richard Adams. La metodología, strictu sensu entendida, lo lleva a identificar con

precisión las unidades operantes que interactúan en cada uno de los municipios. Trata de identificar las bases del poder de cada una: los recursos significativos que controlan, incluidos los elementos culturales y simbólicos. Las técnicas que empleó son las tradicionales de la Antropología Social: trabajo de campo en las comunidades y lo que conlleva de compenetración con la vida de sus habitantes, entrevistas, obtención de información documental de archivos y periódicos, etcétera. Sobresale la coherencia y claridad en su texto. Va siguiendo, por ejemplo, los mismos periodos y analiza los mismos rubros en cada uno de los municipios, de tal forma que va estableciendo una comparación entre ellos: no se pierde uno en la exposición.

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EL COLEGIO MEXIQUENSE

El libro se divide en tres partes y cinco capítulos. La primera parte, «Las redes del poder local», consta de los dos primeros capítulos en los que expone el objetivo de sus investigación y del enfoque teórico que va a utilizar para iluminar la realidad empírica, y nos da un acercamiento preliminar a sus comunidades. La segunda, «La expansión en la estructura de poder», con el capítulo tercero, documenta dicha expansión durante la Revolución, la Cristiada y el agrarismo en las tres poblaciones (19001940). La tercera, «La crucifixión del poder», desarrolla en los dos últimos capítulos. El cuarto trata de «La búsqueda de la paz» (1940-1970), y el quinto (1970-2000), «Crisis y continuidad». El libro se cierra con las conclusiones de la investigación. Me gustaría destacar, con las mismas palabras del autor, parte de sus conclusiones: En esta investigación nos pudimos percatar de que en nuestra región de estudio se presentaron una serie de correlaciones con base en las relaciones de poder. A lo largo del análisis observamos que en los momentos en que se ingresaron más recursos a los sistemas municipales, la población tendía a expandirse, había una mayor estabilidad social , se daba una mayor integración a niveles de integración superiores, y disminuían la participación política, el clientelismo político, las valoraciones negativas y los sentimientos de ira y frustración. Por otro lado, en los momentos de escasez y contracción de los recursos, la población crecía en forma más mesurada, se debilitaba la estabilidad política y se incrementaban la participación, el clientelismo y la intermediación política, la autonomía local, la integración a niveles superiores de integración, las valoraciones negativas y los sentimientos de ira y frustración, todo por no alcanzarse los anhelos colectivos. (p. 463) Si se me permite, quisiera hacer una breve reflexión sobre este párrafo. Con demasiada frecuencia, científicos sociales, siguiendo la moda para que no parezcan obsoletos sus puntos de vista teóricos, admiten sin mayor cuidado supuestos explicativos que no explican nada. Tomemos, por ejemplo la trillada «explicación» de comportamientos sociales por la «cultura política». Se habla de cultura política clientelar de los mexicanos. Pero da la casualidad que las relaciones clientelares las encontramos en todo el mundo e islas adyacentes. Si, por

otra parte, se sostiene la singularidad de cada cultura —de su famosa «identidad»—-, se ve difícil concebir una singularidad universal. Me parece que podemos entender en forma más satisfactoria las relaciones patrón-cliente en términos de estructuras de poder, sin acudir a una explicación causativa de la cultura. Ésta es justo la línea seguida por Pablo: nos hace entender la aparición intermitente del clientelismo sin tener que echar mano, como un Deus ex machina, de la aparición y desaparición de la cultura política. En mi opinión, estamos ante un trabajo sumamente bien estructurado, en que el instrumental teórico está operando en la presentación y análisis de los datos etnográficos. Rompe, con éxito, la no poco frecuente elaboración de textos en que aparecen una introducción teórica seguida de una presentación de hechos empíricos que no tienen nada que ver con la teoría expuesta y ensalzada, y terminan con unas conclusiones que tampoco tienen que ver ni con la teoría ni con los datos empíricos. Para no verme old fashion, quisiera terminar con una exhortación a fomentar la «cultura de la lectura»: lean el libro del doctor Pablo Castro, y sus esfuerzos se verán ampliamente recompensados.

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LA GACETA DE

Sobre el Encuentro Nacional de Programas de Posgrado en Estudios Territoriales Susana Medina Ciriaco* [email protected]

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l 12 y 13 de febrero de 2004, El Colegio de México y El Colegio de la Frontera Norte organizaron el Encuentro Nacional de Programas de Posgrado en Estudios Territoriales: Evaluación y Prospectiva, cuyo objetivo consistió en abrir una discusión evaluatoria y de prospectiva sobre diversos aspectos relacionados con los programas de posgrado en estudios territoriales. La atención se centró en cuatro cuestiones: Los Programas de estudio. Los vínculos entre docencia-investigación y programassociedad. El mercado de trabajo para los egresados. Los retos y las oportunidades. Los anfitriones invitaron a 18 instituciones de educación superior y a Colegios con programas académicos en estudios territoriales que forman parte del Programa para el Fortalecimiento del Posgrado Nacional del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT). Asistieron responsables directos o profesores investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (representantes de la maestría y del doctorado en Geografía y de la maestría y doctorado en Urbanismo), la Universidad de Guanajuato, la Universidad Autónoma del Estado de México, la Universidad Autónoma Metropolitana, la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, la Universidad de Quintana Roo, la Universidad Autónoma de Tlaxcala, la Universidad Autónoma de Coahuila, el Instituto Mora, el Instituto Tecnológico de Oaxaca, los Colegios de México, de la Frontera Norte, Sonora, Jalisco y Tlaxcala, así como EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C. Los representantes de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez no pudieron asistir. EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C., fue invitado para participar en la mesa III, dedicada a «Mercado de trabajo de los egresados». Como investigadora y profesora de las materias Estudios urbanos y Problemas del desarrollo regional en México, acudí en representación de las Coordinaciones de Docencia y de la Maestría en Ciencias Sociales con Especialidad en Desarrollo Municipal para presentar la ponencia «La Maestría en Ciencias Sociales con Especialidad en Desarrollo Municipal: los estudios territoriales en EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C.» Más que el contenido de dicho trabajo, quiero compartir con los lectores(as) de la GACETA las conclusiones generales a las que se llegó en el encuentro, con la finalidad de llamar a la reflexión sobre la base de la importancia que evidentemente tienen: Es urgente revisar tanto los contenidos teóricometodológicos de los programas de estudios territoriales como los contenidos instrumentales.

Es importante concebir el territorio como un objeto público de la sociedad, como un elemento integrador de las políticas territoriales. Se debe sensibilizar al gobierno sobre los estudiantes que se están preparando. El tema de los derechos de propiedad es uno de los más importantes de la agenda urbana. Se debe refundar el esquema del servicio social, con base en una propuesta mixta en la que interactúen los funcionarios públicos con la academia; por lo tanto, el conocimiento debe ser útil. No existe esta coordinación estratégica. Un porcentaje importante de los programas de maestría en estudios territoriales está enfocado a enseñar destrezas, pero esto debe ser compaginado con el desarrollo de la capacidad analítica de los alumnos que favorezca el cómo pensar de manera crítica los procesos socioespaciales. Hay que desarrollar también un compromiso éticoambiental entre los alumnos que les permita tener una posición clara con respecto al impacto de los procesos territoriales en el medio ambiente. Así mismo, los acuerdos a los que se llegó fueron: Se preparará una publicación con las memorias del encuentro. Dará inicio un seminario permanente sobre la teoría y práctica de los estudios del territorio en el país, que servirá como foro de discusión, análisis y publicación de investigaciones ya concluidas referidas a la problemática urbano-regional, así como las especificidades de la educación en estos campos de estudio. Se acordó establecer un comité de trabajo encargado de constituir una red nacional de programas en estudios territoriales que permita, entre otras cosas, el intercambio de profesores especialistas en determinadas áreas del análisis territorial (crear lazos de apoyo institucional con profesores por periodos cortos o estancias durante los años sabáticos), realizar un análisis teóricometodológico de las maestrías y de los paradigmas que se están trabajando, fortalecer el acervo bibliográfico y convocar a las próximas reuniones. La intención es constituir una comunidad en estudios de posgrado de análisis territorial. La exposición de los casos de Oaxaca, Quintana Roo y Tlaxcala permiten concluir que «son los tiempos de la periferia»; por alguna razón, el centro tiene problemas que no son los de la periferia», observó el investigador Crescencio Ruiz, de El Colegio de México. He aquí materia para el análisis, la reflexión y el trabajo docente.

* Maestra en Estudios Urbanos y Regionales por la Universidad Autónoma del Estado de México. Es investigadora de EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C., donde se concentra en el tema de suelo urbano para pobres.

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EL COLEGIO MEXIQUENSE

Sobre el trabajo de investigación Lazos de poder en municipios indígenas. Sur de la Huasteca Potosina, 1876–1883, de María del Carmen Salinas Sandoval* Felipe González Ortiz**

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rimero quiero agradecer la invitación que me hicieron la doctora María del Carmen Salinas Sandoval y la maestra Gloria Guadarrama Sánchez a comentar este interesante texto. También quiero manifestar mi acuerdo con EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C., por considerar de interés para la investigación regiones fuera del Estado de México, lo cual me parece fundamental para nuestra institución. El texto se compone de adelantos parciales de 11 capítulos, divididos en tres partes, de lo que es de suponerse que será un libro. La presentación del texto hace una metáfora de un drama en que cada parte representa un acto. La primera menciona a los actores, sus formas de propiedad y relaciones, las cuotas diferenciadas de poder entre cada uno de ellos, sus expectativas y formas utópicas de imaginar el futuro y de proponer proyectos de sociedad. El clímax del texto se halla en la segunda parte, donde se describen la lucha indígena y las relaciones entre ésta y cada uno de los actores sociales en escena, ya fueran aliados o enemigos (internos o externos a la región). El desenlace remite a la pacificación de la lucha indígena y describe a los triunfadores de los conflictos, para rematar con unas conclusiones que me parecen de sumo interés para comprender los obstáculos a la modernidad o a las instituciones liberales que la sociedad moderna ha querido implantar en las regiones donde habitan grupos de poder locales indígenas y no indígenas. De estas tres partes, la única que hace justicia al corte temporal mencionado en el título del trabajo («1876-1883») es la segunda, de ahí que mi propuesta sea ampliar el rango temporal del análisis. No sugiero reducirlo porque iría en contra de los objetivos de la autora: pensar la revuelta indígena «como una herramienta metodológica» (p. 5), «para conocer las entrañas de la estructura de poder y tratar de descifrar la clave de la persistencia de los sistemas normativos de las comunidades indígenas dentro de un orden constitucional liberal» (pp. 4-5). Es necesario señalar esto porque en el texto la fecha más antigua que tiene que ver con el argumento del tema del trabajo es 1857

* Versión del texto leído por su autor como comentarista en el seminario interno de investigación en que participó la doctora María del Carmen Salinas Sandoval, investigadora de EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C., el 2 de diciembre de 2003. El maestro González Ortiz aceptó su publicación en la GACETA ante el argumento de la conveniencia de ilustrar sobre los términos en que se da la discusión académica como un diálogo entre pares que enriquece proyectos destinados a la publicación. El texto ha sido editado y se ha modificado su encabezado original (N. de la R.) ** Maestro en Ciencias Sociales por EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C., e investigador de la misma institución. Es candidato a Doctor en Antropología por la UAM-Iztapala. Fue coordinador de la Maestría en Ciencias Sociales con Especialidad en Desarrollo Municipal de EL COLEGIO.

(en ocasión de las leyes liberales de 1858-1867, cuyo antecedente se encuentra en el pacto federal de 1857), y la más reciente es 1890, cuando, dada la derrota de los indígenas, el Ejecutivo «autoriza la conversión de los ejidos y tierras de repartimiento común, en terrenos de propiedad privada» (p. 160). Antes de entrar en materia, otro punto que merece mención es el relativo a algunas anotaciones sobre el concepto de raza, debido a que constituye una idea-fuerza que define a las identidades y a las otredades de la época investigadas por la autora. En el desarrollo del trabajo hay referencias a una categoría usada en la época por los distintos grupos, «los de razón» y los mismos indígenas; sin embargo, en las primeras páginas, el texto está redactado de tal manera que pareciera que dicha categoría es usada por la investigadora. De ahí que sería prudente matizar el uso del concepto y clarificar, desde el principio del trabajo, el sentido en que se usa. El concepto de raza es una idea-fuerza de la época en la medida que sirvió para definir categorías sociales de construcción de la otredad (se aprecia así cuando «los de razón» se asustan porque el conflicto se pudiera extender a otras regiones en las que habitaban los de «raza indígena») y de la identidad (como cuando Juan Santiago refiere que se alzó porque les quitaron la tierra a los de su raza). Después de esta entrada, me voy a referir a la parte introductoria del texto, en cuyo primer párrafo (p.1), se dice que el objetivo es «analizar los lazos de poder que obstaculizaron la práctica del liberalismo en los municipios indígenas del sur de la Huasteca Potosina, durantes los primeros años del régimen de Porfirio Díaz». Encuentro este objetivo acorde con el texto, excepto por una cuestión que contradice las conclusiones a que llega la autora por el énfasis que pone en la categoría territorial administrativa «municipios indígenas», el cual afecta el desarrollo del trabajo porque a lo largo del mismo se aprecia que no fue la existencia de los indígenas lo que impidió la aplicación de las reglas liberales, sino, precisamente, las relaciones de poder local y regional entre indígenas y no indígenas (el «proceso dominical» en las llamadas «zonas de refugio», según Aguirre Beltrán [1973]), tesis que este estudio de caso permite visualizar gracias a que construye al indígena no de manera aislada sino integrado a una dinámica regional particular y, además, porque permite no verlo como el único «culpable» de la no incubación de lo moderno, como pensaban algunos liberales para quienes «uno de los principales problemas del país era la existencia de muchos grupos indígenas, con costumbres y autoridades propias y una economía de subsistencia cerrada al mercado nacional» (p. 71), según da cuenta la investigadora. Por ello, sería conveniente para el trabajo no definir a la Huasteca como si estuviera formada por municipios indígenas, sino por una mezcla regional de indígenas y no indígenas. Otra tesis implícita en el trabajo es la relativa a la formación del Estado moderno, legal y nacional, y su manifestación en las regiones. Resulta muy interesante su análisis

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para el caso de la Huasteca, pues ayuda a pensar más en el Estado como un proceso en construcción con participaciones diferenciadas, que como una unidad social. En ese sentido, en el capítulo tres, «Relaciones de poder a nivel municipal», se hace una mapeo de los actores sociales de la región según su cargo o puesto en la administración municipal. Mencionar la adscripción étnica de cada uno de estos cargos, es decir, profundizar en las articulaciones entre los cargos de los indígenas y los no indígenas, daría una idea de la distribución del poder en la región y reforzaría el argumento que ilustra la separación territorial y de gobierno de las llamadas «razas» (la indígena y la no indígena), pero también ilustraría las formas asimétricas de articulación entre las dos formas de poder, pues, pese a su separación, alguna articulación regional tenían. Con respecto al capítulo 4 de esta primera parte, «El gobierno indígena», se debe decir que es muy explícito y claro, y le da su justa dimensión a la comunidad territorial, donde el gobernador —previa legitimación del consejo formado por los indios viejos que habían ejercido un cargo previamente— era el representante de la comunidad (aunque el esquema de la página 73 es un poco confuso, porque se puede interpretar como si el gobernador estuviera por encima de las comunidades, es decir, como si fuera un cargo que representaba a varias comunidades indígenas), la máxima autoridad al interior y el representante hacia el exterior. Sus principales ayudantes eran los regidores y los alcaldes, los tequihuas (sirvientes de la comunidad distribuidos según barrios) y los mayules (sirvientes de los ancianos). Esta descripción es básica para entender la parte dos del trabajo, en donde se expone la lucha armada de los indígenas encabezados por los gobernadores de las comunidades y bajo el mando de Juan Santiago; además, permitiría encontrar la red de poder indígena proyectada en los cargos tradicionales como estrategia de lucha de las comunidades indígenas. Sin embargo, en esta parte del trabajo se omiten las referencias a dichos cargos, los cuales se diluyen en la presentación de los acontecimientos, cuando podrían ilustrar en buena medida la función de los cargos indígenas en las coyunturas de las revueltas, las comunicaciones entre las comunidades, así como los secretos que los cargos esconden cuando el enemigo los construye e imagina como parte del folclore, sin darles su justa dimensión política. La información detallada de los cargos tradicionales indígenas arrojaría luz sobre la estrategia de lucha. Por otro lado, es interesante la información que se proporciona sobre las funciones de los cargos desde el siglo XIX, pues actualmente las comunidades indígenas siguen organizando sus cargos tradicionales según un modelo horizontal de distribución por barrios de las comunidades territoriales. Esto permite suponer que este tipo de organizaciones tradicionales es de larga duración. La autora menciona también el «Gobierno eclesiástico» (p. 62). Contrastan los dos párrafos que le dedica a esta jerarquía con las cuatro páginas (58–62) que ocupa el análisis del gobierno indígena, al que interpreto aquí como gobierno de carácter civil. La importancia de la diferencia del espacio dedicado a uno y otro radica en que el poder secular y el eclesiástico no están separados en las comunidades indígenas, ya que conforman una unidad cuando se toman decisiones, se reúnen los consejos y se emprenden acciones de castigo en contra de quien viola la normatividad de las comunidades indígenas. Es decir, la separación entre lo secular y lo religioso es más una invención occidental que una construcción indígena; por ello, resultaría adecuado ver en los cargos de carácter religioso formas de articulación con el gobernador, los alcaldes, los regidores, los tequihuas y los mayules. Una exploración de ese tipo permitiría encontrar datos que enriquecerían más todavía el trabajo. Como parte de su tesis sobre la formación del Estado liberal (basado en el federalismo), en la segunda parte del texto la autora advierte que el problema entre indígenas y no indígenas deriva de la ausencia de relaciones institucionalizadas basadas en la ley, y resalta que lo que domina son intereses de poder local. Ilustra esto al señalar que «el [E]stado de derecho estaba

clausurado por los abusos de poder». De esta manera se perdió, añade, la oportunidad de establecer relaciones cordiales entre estos dos grupos, pues el mismo Estado de derecho «hubiera servido para articular los dos mundos opuestos, el de los indígenas y el de los no indígenas en una realidad que compartían» (p. 79). Esta afirmación genera una duda: ¿son las relaciones locales de poder las que determinan que no se pueda conformar el Estado de derecho o más bien, dada la existencia de un Estado débil, éste no alcanza a hacer justicia sobre la totalidad de los ciudadanos y genera inseguridad en los actores locales, quienes prefieren seguir con la seguridad que proporcionan la comunidad o sus haciendas familiares a experimentar el riesgo de perderla ante una oferta que proviene de ese Estado débil? Esta segunda idea podría explorarse y llevar, tal vez, a conclusiones diferentes. La parte tres del trabajo, el desenlace, lleva a pensar que ante la derrota de la revuelta indígena, el reparto de la tierra se llevó a cabo sin la resistencia de las comunidades indígenas — que el lector esperaría encontrar por la intensidad con la cual se ilustra la lucha indígena en la parte dos del trabajo—. La importancia de la suposición está en que todo indica que seis años después de la lucha indígena, el reparto de la tierras comunes se realizó tan fácilmente que hasta los caciques resultaron beneficiados, en tanto que los mestizos compraron de manera fraudulenta a los indígenas y las tierras sobre las que éstos no pudieron demostrar su posesión ancestral fueron nombradas baldíos o terrenos nacionales (p. 160). Es necesario matizar. Al mismo tiempo, es posible dar más claridad a lo que pasó con los condueñazgos. Si bien se hace hincapié en lo que sucedió con las tierras de los indígenas (capítulo IX), sólo al llegar a las conclusiones se sabe que los condueñazgos quedaron sin sufrir cambios importantes. De esta manera se respondería a una pregunta que surge con la lectura del capítulo mencionado. La investigadora le da continuidad al empleo de la metáfora de la presentación del texto como un drama cuando expone el futuro de los distintos actores sociales. Luego presenta las conclusiones. De éstas, la central es la que define a la Huasteca como una región en la que se dan relaciones de poder local entre indígenas y no indígenas —y no como una zona indígena—, e incluye la hipótesis de que esas relaciones representan el mayor obstáculo para la implantación de la modernidad. Como consecuencia, se propician relaciones sociales asimétricas con las que no compagina el Estado moderno (en el federalismo). Ésta es la segunda reflexión que la investigadora propone a partir de la pregunta relativa a la obstaculización que dichas relaciones supondrían a la implantación de las reglas modernas o si más bien, esas relaciones de poder local se explican por la existencia de un Estado débil. Cierro el comentario con la mejor intención de que sirva para el enriquecimiento de este interesante trabajo. BIBLIOGRAFÍA Aguirre Beltrán, Gonzalo (1973), Regiones de refugio, el desarrollo de la comunidad y el proceso dominical en Mestizoamérica, México, Instituto Nacional Indigenista.

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EL COLEGIO MEXIQUENSE

Acerca del concepto de sociedad civil. Apuntes críticos* (Primera parte)

Ricardo Ramírez Espinosa** [email protected] [email protected]

INTRODUCCIÓN

D

esde hace algunas décadas, una expresión ha ido abriéndose paso entre los científicos sociales y ha empezado a formar parte del léxico público manejado en los ámbitos del periodismo, las organizaciones no gubernamentales, la política y entre algunos dirigentes sociales. La expresión sociedad civil ha sido utilizada recientemente para tratar de entender algunos de los más importantes procesos y cambios de las sociedades contemporáneas, fundamentalmente las occidentales.

DOSSIER

Los alumnos

D E E L C O L E G I O M E X I Q U E N S E Como concepto, ha sido abordado teóricamente por distinguidos pensadores, algunas veces de manera analíticamente diferenciada de otros conceptos o nociones; otras veces, se ha pretendido mostrar su articulación teórica y empírica con fenómenos como los movimientos sociales, conceptualizados anteriormente por orientaciones teóricas diferentes a las interesadas en la llamada sociedad civil. En las Ciencias Sociales no hay un planteamiento teórico que asuma a la expresión sociedad civil como una categoría con la orientación analítica más fuerte y que marque el rumbo a seguir en el estudio empírico de los fenómenos sociales que se pretende abarcar. Más bien, han ido apareciendo teorías u orientaciones teóricas que ubican a la sociedad civil como parte de un complejo teórico más amplio; algunas otras la abordan como un objeto de estudio que no requiere el apoyo de una teoría más abarcadora. Como ya es también una constante en el estudio de otros aspectos de lo social, parte de la literatura que se ocupa de esta categoría presenta un alto contenido normativo. Es pertinente advertir que al proponer una categoría analítica en términos normativos se corre el riesgo de construir idealizaciones —que no tipos ideales al modo weberiano— de aspectos diversos de la realidad social; es decir, elaborar teorías en que el acento prescriptivo opaca las dimensiones descriptiva y explicativa. Además del sesgo normativo que puede producir teorizaciones con poco rigor científico, existen otros factores que minan la solidez de la ciencia social. Por ejemplo, el intento de aprehender con este tipo de formulaciones analíticas realidades pertenecientes a otros contextos también constituye una fuente de tergiversación teórica. Y aunque este planteamiento ha sido expuesto por diversos autores, la tentación de importar teorías desde otros ámbitos es una constante que guía en la actualidad muchas * Por razones de espacio fue necesario editar algunas partes del trabajo (N. de la R.). ** Alumno de la séptima promoción de la Maestría en Ciencias Sociales con especialidad en Desarrollo Municipal de EL COLEGIO MEXIQUENSE, A. C.

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investigaciones. Afortunadamente, en América Latina hay autores que han manifestado actitudes precavidas con respecto particularmente al uso de la expresión sociedad civil. Incluso, hay quienes han puesto en duda la pertinencia científica de utilizarla de manera conceptual en el contexto latinoamericano. Con todo, hay también quienes caen en la tentación de darle un empleo acrítico y poco mesurado, al grado de presentarla como una categoría acabada y bien delimitada. ANÁLISIS DE LA TEORÍA DE LA SOCIEDAD CIVIL DE COHEN Y ARATO Sociedad civil y teoría política, de Jean Cohen y Andrew Arato, constituye una de las formulaciones teóricas más consistentes dedicadas a la sociedad civil. Los autores parten de procesos históricos en Europa del Este, Occidente y América Latina durante la década de los setenta, cuando se renovó el uso de la expresión. Describen igualmente el recorrido filológico de ésta en su sentido moderno como parte de las ideas filosóficas y políticas, con lo cual delimitan el marco histórico y semántico necesario para dar claridad y comprensión a su uso. Sin embargo, la formulación teórica adolece de historicidad, pues queda circunscrita a una visión eurocéntrica, tanto por sus referentes empíricos como por sus fundamentos teóricos, con lo cual relega a los procesos históricos de América Latina y Europa Oriental al desván de lo anecdótico, pese a que en estas regiones aparece con fuerza desde la década de los setenta el discurso sobre la sociedad civil. Retomando elementos del discurso hegeliano, principalmente las notas dedicadas a publicidad, pluralidad, legalidad y asociación, Cohen y Arato insertan su construcción analítica en el marco de la compleja teoría de la sociedad elaborada por Jürgen Habermas. Desde su perspectiva, la sociedad civil forma parte del mundo de vida, el cual está determinado por una racionalidad comunicativa, es decir, por una serie de procesos lingüísticos basados en la deliberación y el entendimiento, con el fin de obtener consensos que posibiliten acciones sociales intersubjetivamente aceptadas. Habermas delimita el mundo de vida contraponiéndolo a los subsistemas económico y político, formalmente organizados1 y orientados por una racionalidad estratégica y funcional. El mundo de vida es entendido como la reserva de tradiciones implícitamente conocidas y de suposiciones de fondo socialmente aceptadas que están integradas al lenguaje y la cultura, las cuales son usadas por los individuos en su vida diaria. Dicho de otra forma, es el conjunto de relaciones y acciones coordinadas por los individuos a través de normas que les permite reconocerse como un grupo solidario. Al pertenecer a una tradición cultural y participar en la vida del grupo, los individuos evalúan orientaciones, adquieren competencias generalizadas de acción y desarrollan identidades individuales y sociales. La reproducción de estas dimensiones del mundo de vida implica procesos comunicativos de transmisión cultural, de integración social y de socialización (creación de personalidad). La diferenciación del mundo de vida en cultura, sociedad y personalidad se da a través del surgimiento de instituciones especializadas en la reproducción de tradiciones, solidaridades e identidades. Para Cohen y Arato, es la dimensión institucional del mundo de vida la que se ajusta a su concepto de sociedad civil. Al igual que Habermas, aceptan totalmente los postulados «positivos» que trajo la modernidad y que orientan comunicativamente las relaciones y acciones que se suscitan en el mundo de vida: el Estado de derecho, los marcos jurídicos, las

1 Habermas define como formalmente organizadas a las relaciones sociales que se presentan en subsistemas regidos por medios como el dinero y el poder (político), en la medida que es el derecho positivo el que genera dichas relaciones, entre las cuales están también las de intercambio y de poder constituidas por el derecho privado y el derecho público, que tienen lugar más allá de los límites de la organización, es decir, que entroncan con el mundo de la vida y con la sociedad civil.

libertades civiles y políticas, la democracia, la secularización del mundo y el desarrollo de una racionalidad y acción comunicativa—en términos de Habermas— solidaria y productora de consensos. Desde esta perspectiva, Cohen y Arato se proponen una reconstrucción analítica de la sociedad civil en que ésta se sitúa dentro del marco de una estructura jurídica —una Constitución—, la cual articula los principios que fundamentan su organización interna. En otras palabras, la sociedad civil existe sólo donde hay la garantía jurídica de reproducción de las diversas esferas en la forma de conjuntos de derechos. Éstos deben ser de tres tipos: culturales, de integración social y de socialización, están reconocidos y salvaguardados constitucionalmente para constituir el terreno de la sociedad civil cuando son acompañados de una forma apropiadamente moderna de cultura política que valoriza la autoorganización de la sociedad y la publicidad.2 Al estar insertada en un mundo de vida modernizado, la sociedad civil presupone también la apertura comunicativa del fundamento sagrado de las tradiciones, las normas y la autoridad a procesos de cuestionamiento y de adjudicación discursiva. Esto trae consigo la sustitución de un consenso normativo basado en la convención, por uno reflexivo, posconvencional y fundamentado en procesos abiertos de comunicación. La sociedad civil, que por antonomasia debe ser «moderna», constituye la condición cultural e institucional para el surgimiento de identidades colectivas racionales y solidarias y de autores autónomos que desarrollan la capacidad y la responsabilidad de interpretar, cuestionar y dar nueva significación a su mundo, así como a las normas y tradiciones que lo integran social y culturalmente. En las sociedades civiles situadas en el mundo modernizado, una pluralidad de actores puede confiar sólo en un horizonte de significados y normas mutuamente presupuestos y participar, de ser necesario, en su redefinición o renegociación. Sobre esta base cultural, puede concebirse el reemplazo de una sociedad civil tradicional y una postradicional, es decir, por una sociedad civil realmente moderna. Es evidente el sentido prescriptivo e idealizado de la construcción analítica de la sociedad civil de Cohen y Arato. Y lo es tanto más cuanto que estos autores, de nuevo en consonancia con Habermas, reconocen que en ningún lugar del mundo se ha realizado la modernización plena de las sociedades. Además de esta insuficiencia histórica, los autores, de nuevo en consonancia con Habermas, reconocen otro grave factor que inhibe la generación de una sociedad civil vigorosa: el proceso histórico de modernización de las sociedades, sustentado en procesos de racionalización, que ha llevado a una diferenciación de aquéllas en dos niveles, uno sistémico y otro constituido por el mundo de la vida, se ha desarrollado de tal manera que los imperativos reproductivos basados en la racionalidad estratégica y sistémica de la economía y del Estado han evolucionado a expensas de la racionalización comunicativa de la sociedad civil, lo que ha propiciado que la institucionalización unilateral del potencial cognitivo funcional y estratégico de la racionalización cultural en los dos subsistemas promueve la penetración de los medios dinero y poder a las áreas de acción de la sociedad civil que requieren de integración por medio de procesos comunicativos. En este sentido, no es la propia modernidad cultural, sino su institucionalización selectiva, es decir, orientada mucho más por 2 Para Cohen y Arato, la expresión publicidad es entendida como la manifestación comunicativa abierta y deliberativa de la colectividad. Dicho en otras palabras, la definen como series continuas de procesos de deliberación y generación de opinión por parte de la sociedad en espacios abiertos y autónomos (con respecto al sistema político) acerca de problemas que conciernen a la colectividad. En tales espacios los problemas no son sólo percibidos e identificados, sino también son tematizados de forma convincente y de modo influyente, de tal suerte que puedan generarse comentarios, interpretaciones y contribuciones, dramatizadas para ser incorporadas a la agenda pública del gobierno. En este sentido, la publicidad se orienta a procesos políticamente relevantes suscitados desde la sociedad civil.

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una racionalidad estratégica y funcional que por una racionalidad comunicativa, la que resulta en el empobrecimiento cultural del mundo de vida. Desde esta interpretación, los individuos de la sociedad civil se subordinan a los imperativos de los sistemas que han devenido autónomos y sustitutos de la interacción comunicativa. A esto Habermas lo llama «colonización» del mundo de vida por parte de los subsistemas económico y político. Los procesos de colonización del mundo de la vida por los imperativos de los subsistemas económico y político surgen de los intercambios que se dan entre sistema y mundo de la vida en las sociedades modernas, el cual está constituido de manera general por el ámbito privado —institucionalizado fundamentalmente por la familia— y el público —centrado en la opinión pública-política a través de los medios masivos de comunicación y otros espacios forjadores de opinión—. El subsistema económico intercambia salario por trabajo, y bienes y servicios por la demanda de los consumidores. La administración pública intercambia realizaciones organizativas por impuestos y decisiones políticas por la lealtad de la población. A través de sus intercambios, la economía somete a sus imperativos reproductivos, a través del medio dinero, la forma de vida doméstica y el modo de vida de consumidores y trabajadores. Bajo la lógica de una racionalidad estratégica e instrumental propia del subsistema económico se generan consumismo e individualismo posesivo, así como motivaciones relacionadas con el rendimiento y la competitividad que adquieren una fuerza configuradora en el ámbito de la familia. La práctica comunicativa cotidiana experimenta un proceso de racionalización unilateral que tiene como consecuencia un estilo de vida marcado por el unilateralismo centrado en la especialización laboral y por ansias de obtener posición social mediante la elevación de los ingresos. Lo mismo que la esfera privada queda socavada por el sistema económico, la esfera de la opinión pública es minada por el sistema administrativo. La burocratización se apodera de los procesos espontáneos de formación de la opinión y de la voluntad colectiva, y los vacía de contenido; amplía, por un lado, el espacio para la movilización planificada de la lealtad generalizada de la población y, por otro, facilita la desconexión de las decisiones políticas y los aportes de legitimación procedentes de los contextos concretos del mundo de la vida formadores de identidad. Además, las relaciones entre el Estado, en su vertiente administrativa, y la sociedad, en tanto que su cliente, igualmente están circunscritas a una dominación por parte de la lógica burocrática del primero sobre las personas, las cuales, en tanto que receptoras de una serie de prestaciones sociales por parte del Estado, quedan limitadas a intervenciones estructuradas, burocráticas, que someten a las personas a una individualización abstracta,3 cuyas consecuencias potenciales son gravosas para los afectados en sus relaciones sociales —principalmente primarias y comunitarias—. De acuerdo con Habermas, las garantías sociales comportadas por el Estado contemporáneo fomentan la desintegración de los contextos del mundo de la vida que a consecuencia de la forma jurídica que la intervención del Estado adopta, quedan desligados del entendimiento como mecanismo de coordinación de la acción y acomodados a medios como el dinero y el poder. De esta manera, la sociedad civil presenta lados negativos que son expresión, como ya se indicó, tanto de una insuficiente modernización de las sociedades, como de una de las vías lógicamente posibles de la institucionalización de los potenciales de la modernidad cultural. En esta vía impera la lógica de la dominación y la racionalidad estratégica, y socava la práctica comunicativa de un mundo de la vida ya (parcialmente) modernizado, y obstaculiza la modernización adicional de la

Desde el punto de vista jurídico, la seguridad social (por ejemplo, la jubilación, la protección contra accidentes y el seguro de desempleo) está orientada estrictamente a sujetos en tanto individuos que mantienen una relación personal con el Estado. 3

sociedad civil. De acuerdo con estos autores, habrá más consecuencias patológicas en la medida que las instituciones especializadas en la socialización, la integración social y la transmisión cultural son funcionalizadas cada vez más para servir a los imperativos de los subsistemas en expansión continúa y sin control, y en tanto que la coordinación de la acción comunicativa en las áreas relevantes sea reemplazada por los medios dinero y poder político. A pesar de este diagnóstico y del pronóstico correspondiente sobre las sociedades contemporáneas, Cohen y Arato apuestan a una reconstrucción normativa del concepto de sociedad civil que recupere el horizonte utópico generado por la propia modernidad. Esta utopía, que es de diferenciación en vez de unificación, apunta a la creación y / o fortalecimiento de instituciones capaces de realizar plenamente los potenciales de la reproducción comunicativa y de un mundo de la vida moderno. En particular, el desarrollo de estructuras posconvencionales de cultura permitiría la proyección de instituciones interconectadas de la vida íntima y de la publicidad, que reemplazarían a las relaciones de dominación tradicionales por formas no limitadas de solidaridad, producidas y reproducidas a través de la interacción libre y voluntaria. Este tipo de utopía es de tipo democrático. Siguiendo nuevamente a Habermas, Cohen y Arato aceptan que los cambios sustanciales para transformar a la sociedad deben partir de la construcción de nuevas formas de solidaridad y de la expansión de los procesos comunicativos que son determinantes en la formación de la voluntad colectiva. La sociedad civil juega aquí un papel fundamental, pues su acción en el marco de su propia diversidad y diferenciación con respecto a los dos subsistemas es determinante para la democratización de las instituciones de la propia sociedad civil, para la refuncionalización4 del Estado y, de ser posible, del mundo de la economía. De esta forma se descolonizaría el mundo de vida. El propio Habermas, quien no había desarrollado una teoría de la sociedad civil, fue influido por el desarrollo teórico de Cohen y Arato, y en una obra que marca un nuevo hito en su pensamiento, Facticidad y validez (2000 [original, 1992]), retoma la formulación teórica de la sociedad civil elaborada por estos dos autores para apuntalar su idea de reconstitución de las sociedades mediante su propia autoorganización a través de varios mecanismos, fundamentalmente de tipo deliberativo (acción comunicativa), lo que implica la ampliación y el real funcionamiento del espacio público, sustento de una democracia radical que llevaría finalmente a la descolonización del mundo de vida. El concepto de sociedad civil de Habermas es básicamente el mismo de Cohen y Arato, ya que pone el acento en la capacidad de la sociedad civil para influir en las decisiones del sistema político. Su definición de sociedad civil está impregnada, pues, de este sentido normativo: «la sociedad civil se compone de esas asociaciones, organizaciones y movimientos surgidos de forma más o menos espontánea que recogen la resonancia que las constelaciones de problemas de la sociedad encuentran en los ámbitos de la vida privada, la condensan y elevándole, por así decir, el volumen o voz, la transmiten al espacio de la opinión pública-política. […] el núcleo de la sociedad civil, pues, lo constituye una trama asociativa que institucionaliza los discursos solucionadores de problemas, concernientes a cuestiones de interés general, en el marco de espacios públicos más o menos organizados» (2000:447). Cabe mencionar que Cohen y Arato van más allá del planteamiento de Habermas relativo a la capacidad de la sociedad como eje de convergencia y potencialización de una esfera pública-política que influya en los procesos decisorios políticos del Estado. Para ellos, la sociedad civil puede ser capaz también de crear formas de control social sobre el Estado e, incluso, la economía. Por ejemplo, a través de una política de inclusión, 4 La refuncionalización del Estado se sustentaría en la capacidad de la propia sociedad civil para influir en las decisiones públicas de los gobiernos, así como en la democratización de sus propias instituciones (partidos, agencias gubernamentales y administrativas, parlamento y poder judicial).

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dirigida a las instituciones políticas para obtener el reconocimiento de nuevos actores políticos como miembros de la sociedad civil y lograr beneficios a favor de quienes representan, o con medidas que tiendan a la democratización adicional de las instituciones políticas y económicas. En otras palabras, según Cohen y Arato, la sociedad civil tiene potencialidades de magnitud tal como para influir en las decisiones tomadas por el sistema político y para ejercer un fuerte control, al grado de influir en la lógica de su operación. Por otra parte, más allá del inicial planteamiento ambiguo de Habermas sobre cuáles serían las organizaciones o

asociaciones que podrían empujar hacia el propio fortalecimiento de la sociedad civil, Cohen y Arato apuestan por los movimientos sociales, los cuales, desde su perspectiva, constituyen el elemento dinámico en procesos que harían realidad los potenciales positivos de las sociedades civiles modernas. Como se pondrá de manifiesto en el siguiente apartado, el mínimo sustento empírico de esta última propuesta aumenta el grado de idealidad de la teoría normativa de la sociedad civil propuesta por estos autores.

Nuevas adquisiciones

320.972063 F727 Memoria del Foro (6-9 de Diciembre: 1991: México) 1991 El municipio en el rumbo de la modernidad nacional / ed. Augusto Isla, Jorge Arturo Muñoz — Cambio XXI: Fundación Mexicana : Cambio XXI: Fundación Mexicana, 1991. 278 p. — (Cuadernos de trabajo; 2) ISBN 968-6783-00-8 1. Reforma agraria - México - Congresos 2. México Política y gobierno - 1988 - Congresos 3. México - Política económica - 1988 - Congresos I. t. II. Isla, Augusto, coaut. III. Muñoz, Jorge Arturo, coaut. IV. Serie. 370.1 M293e Mantovani, Juan 1943 La educación y sus tres problemas / Juan Mantovani — Buenos Aires, Argentina : Universidad Nacional de Tucumán; Facultad de Filosofía y Letras. 150 p. — (Cuadernos de Pedagogía; 2) 1. Educación 2. Educación - Filosofía I. t. II. Serie. 338.72 F723 1978 Formación y desarrollo de la burguesía en México siglo XIX / coord. Ciro F. S. Cardoso — México : Siglo Veintiuno. 826 p. — (Sociología y política) 1. Burguesía - México - Siglo XIX 2. Empresarios - México 3. Capitalismo - México I. Cardoso, Cirio F. S., coord. II. Serie. 330.08 N937 Puiggrós, Adriana 1990 Imaginación y crisis en la educación Latinoamericana / Adriana Puiggrós — México : Consejo Nacional para la Cultura y las Artes: Alianza Editorial Mexicana. 190 p. — (Los noventa; 21) ISBN 968-39-0300-2 1. Educación - Hispanoamérica 2. Educación - Estudio y enseñanza I. t. II. Serie. C8348k Krauze, Enrique 1980 Daniel Cosío Villegas: una biografía intelectual / Enrique Krauze — México : Joaquín Mortiz, 1980. 318 p. — (Confrontaciones; Los críticos) ISBN 968-27-0123-6 1. Cosío Villegas, Daniel, 1898-1976 2. México - Vida intelectual I. t. II. Serie. 894.511 P289d Passuth, Laszlo 1975 El dios de la lluvia llora sobre México / Lazlo Passuth — La Habana, Cuba : Arte y literatura. 422 p. Título original: Esoistein siratja Mexikót I. t.

352.072 Z64m Ziccardi, Alicia 2000 Municipio y región / Alicia Ziccardi — México : UNAM, Instituto de Investigaciones Sociales. 49 p. — (Cuadernos de debate. Agenda de la reforma municipal en México) ISBN: 968-36-7703-7 1. Gobierno municipal - México 2. Planificación regionalMéxico 3. Municipios - México I. t. II. Serie. 352.0072 I355g 2002 Innovación en gobiernos locales: un panorama de experiencias municipales en México / coord. Enrique Cabrero Mendoza — México : Centro Nacional de Desarrollo Municipal; Instituto Nacional para el Federalismo y Desarrollo Municipal:CIDE: Fundación Ford. 593 p. Premio y gestión local ISBN: 968-7420-26-X 1. Gobierno municipal - México 2. Gobierno local México 3. Gestión municipal - México I. Cabrero, Enrique, coord. 338.972 D158ce Damián, Araceli 2002 Cargando el ajuste: los pobres y el mercado de trabajo en México / Araceli Damián — México : El Colegio de México, Centro de Estudios Demográficos y Desarrollo Urbano. 349 p. : tbs. Incluye bibliografía: p. 333-349 1. Ajuste estructura (Política económica) - México 2. Pobres - México 3. Pobreza - Ciudad de México (México) 4. Mercado de trabajo - México 5. México – Condiciones económicas - Siglo XX I. t. 330.107 U83e Urzúa, Carlos M. 2002 Ejercicios de teoría microeconómica / Carlos M. Urzúa — México : El Colegio de México, Centro de Estudios Económicos. 156 p. : tbs. Incluye bibliografía: p. 155-156 ISBN: 968-121-044-1 1. Microeconomía - Problemas, ejercios, etc. 2. Microeconomía - Estudio y enseñanza I. t. 335.0972 F491p Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática 2002 Finanzas públicas estatales y municipales de México1997-2000 / Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática — México : INEGI. XII, 429 p. 1. Finanzas públicas - México - 1997-2000 I. t.

4 noviembre-diciembre 2003/enero-febrero 2004 Número 24/25