“Mi familia, mi mundo. Historias para descubrir, rescatar, leer y compartir” 1 Luciana I. de Vera 2

La Maratón nacional de lectura, que organiza la Fundación Leer, es definida por ellos mismos como un evento dedicado a celebrar y compartir la lectura. Su propuesta consiste en que durante el día de la maratón, simultáneamente en diferentes puntos del país, miles de niños, jóvenes y adultos escuchen y lean textos literarios, al tiempo que realizan diversas actividades vinculadas con la lectura. Cada institución participante destina tiempo de la jornada exclusivamente a la lectura y crea un clima y un ambiente adecuado para que todos disfruten leyendo. En varias oportunidades, el Instituto Peralta Ramos se ha sumado, con entusiasmo, a esta iniciativa; apostando a la lectura de una literatura que “habla de las cosas que conmueven, que estimulan el pensamiento sobre lo que nos está pasando, que arranca sonrisas o lágrimas, y que deja como única enseñanza, ese contacto con la palabra que abre un mundo nuevo, desconocido tal vez, antes de leer ese texto. [Una literatura que] pertenece al campo de la creación artística en el que no existen moldes establecidos.” 3, tal como se enuncia en el Diseño curricular para la Educación inicial. Si bien la lectura de literatura es una práctica habitual en las salas del Jardín de infantes Marcelino, las modalidades que adopta el día de la maratón ofrece a los alumnos diferentes oportunidades de acercamiento al libro, creativas y atractivas; oportunidades que enriquecen significativamente sus experiencias de lectura. Tal como impulsa la Fundación Leer, se trata de una celebración. Lejos está de convertirse en una propuesta redundante y, en consecuencia, tediosa; temor que se les presenta a algunos docentes, pero que se desvanece con una planificación que le abre la puerta a la creatividad y a la diversidad, dónde entran en juego diversos escenarios y recursos, una planificación que se sostiene en los actuales marcos teóricos y que se centra en los niños. Leer mirando ilustraciones, leer como si se leyera, leer palabras; leer, escuchar al que lee, observar al que dramatiza; leer solo, con algunos compañeros, con alumnos de otras salas y de otros niveles; leer en la sala, cerca de la biblioteca, en otra sala, en el S.U.M.; leer sentado, leer acostado, sobre una alfombra, sobre un almohadón, son algunas de las tantas formas que adopta la lectura durante el día de la maratón.

Como todos los años, la Fundación Leer propone un eje en torno al cuál se piensa la propuesta. El lema de la 7ma. Maratón nacional de lectura fue Mi familia, mi mundo. Historias para descubrir, rescatar, leer y compartir. El mismo se vincula con nuestra identidad y cobra un especial sentido en el contexto del bicentenario de la Revolución de Mayo. Invita, a través de las palabras de Víctor Massuh, a “recordar que lo mejor de nuestro país, aquello de lo que no podemos avergonzarnos, fue el resultado de una hazaña increíble: la integración de tradiciones culturales antitéticas: la indígena, la hispana de la Conquista y la Colonización, la criolla de la Independencia y la Organización Nacional, y la inmigratoria de fines del siglo XIX hasta comienzos del siglo XX. La historia fue acogiendo cada uno de esos legados y mediante una lenta sedimentación, los convirtió en implícitos mandatos de una voluntad argentina.” 4 A partir del lema se definieron los participantes de la maratón, los alumnos, y especialmente en esta oportunidad, sus familias. También se tuvo en cuenta, cómo se verá más adelante, en el momento de seleccionar los textos literarios a leer. Realizada esta introducción, se pasará a mencionar y describir cómo se pensó y se llevó a cabo la 7ma. Maratón nacional de lectura en el Jardín de infantes Marcelino, revisando los resultados, sus logros y fallos. El propósito, como siempre y en función de lo que la Fundación Leer fomenta, fue que los niños descubran, junto con sus familias y otros miembros de la comunidad educativa, el placer de la lectura. A partir de aquí y considerando lo que se esperaba en esta maratón, se enunciaron los siguientes objetivos: − multiplicar las experiencias de lectura que se ofrecen desde la institución; − promover el desarrollo de actividades de lectura compartidas que fomenten el diálogo y la comunicación; − crear un clima que apoye el desarrollo de la alfabetización; y − profundizar los vínculos entre las familias y la institución. Para la planificación de los diversos momentos de la maratón se tuvieron en cuenta las sugerencias de los docentes del nivel, basados en las experiencias anteriores. También se contó con el apoyo y la colaboración de la Coordinadora del área del nivel Primario. La misma contempló actividades para antes y durante el día de la maratón.

Se comenzó con la difusión de esta propuesta, enviando notas a las familias que invitaban a informarse acerca de este evento, a través del sitio web de la fundación y la publicidad realizada en diversos medios de comunicación. También se utilizaron las carteleras de la sala para informar que el jardín participaría de este evento y para compartir frases y/o reflexiones en torno a la lectura. Tanto los alumnos como sus familias, expresaron su entusiasmo y compromiso con la propuesta y la práctica de la lectura. Fueron varias los que aprovecharon los recursos que se ofrecen a través del sitio de la fundación, preparando el terreno para el día de la maratón. Respondiendo al lema, se propuso rescatar historias familiares. Para esto se invitó a las familias a compartir una anécdota familiar inspirada en alguna de las historias presentadas en los textos literarios seleccionados: Secreto de familia, de Isol; El tren más largo del mundo, de S. Schujer; A Lucas se le perdió la A, también de S. Schujer; y Las velas malditas, de G. Montes. Estos textos fueron escuchados por los alumnos con anterioridad en las salas, de modo que pudieran colaborar con sus familias en esta tarea. También se puso a disposición de los padres una copia del texto. Las anécdotas se expusieron en el pasillo de ingreso, sobre un afiche para cada libro, con los datos correspondientes; sobre la marcha se agregó uno más para otras anécdotas que valía la pena compartir. Luego del día de la maratón, cada docente tuvo la oportunidad de compartir estas producciones con sus alumnos y de anexarlas a los libros correspondientes, destinados al préstamo. En función de la cantidad de familias que hacen a la comunidad educativa marista, no fueron muchas las anécdotas compartidas. Pero no se desestima la propuesta por la cantidad de textos literarios que llegaron a los hogares y que fueron comentados durantes esos días entre sus miembros. Otra de las actividades previas, de la que participaron los alumnos de la 2da. y 3ra. sección, consistió en seleccionar de 10 a 15 libros que quisieran compartir con el resto del alumnado. La selección la realizaron los nenes, bajo algún criterio previamente elaborado. Estos libros se pusieron a disposición para su lectura el día de la maratón, en un “stand” especialmente confeccionado, con indicadores que invitaban a leer (palabras, dibujos y otros elementos decorativos e informativos). Este espacio, proponía una lectura libre, dónde cada uno elegía qué leer y cómo leer. Los alumnos se encontraron con libros sobre miedos y cosas de asustan,

cuentos clásicos, la colección Del pajarito remendado, libros con información de animales y cuentos donde los protagonistas son animales, entre otros interesantes recortes. El entusiasmo de los alumnos y su compromiso con esta tarea se vio reflejado en la búsqueda en sus hogares de otros materiales literarios para incorporar en su “stand”. Por su lado, los alumnos de 1ra. sección y de las salas maternales, presentaron las bibliotecas de sus salas, de una manera atractiva, según como ellos proponían y con producciones propias. También se los invitó a leer libremente, pasando por alguna/s de las otras salas. Otro de los momentos de lectura previstos para el día de la maratón se llevó a cabo con los libros que cada niño había traído de su casa. Previa notificación y solicitud a las familias, durante los días previos cada alumno trajo su libro favorito, lo expuso delante de sus compañeros, contando porqué era ese su favorito, quién se lo había regalado o porqué lo había comprado, cuándo lo leía, cómo lo leía, cuál era la parte qué más le gustaba, etc. Luego de esta instancia de promoción, el día de la maratón los libros se colocaron sobre una alfombra, dónde cada uno podía elegir el que lo había atraído o impactado e ir a leerlo sobre su almohadón. Retomando nuevamente el lema de la maratón, cada docente seleccionó una obra literaria, una historia a descubrir y que los alumnos quisieran oír. Es decir, el día anterior, cada docente presentó a los alumnos de la sección el texto a leer y/o narrar para que ellos pudieran elegir cuál querían escuchar. Los textos seleccionados respondían al recorte Los cuentos que nos cuentan nuestras familias, e incluían cuentos o leyendas argentinas, cuentos tradicionales, cuentos de autores argentinos contemporáneos y cuentos de autores extranjeros. Con este criterio cada docente eligió el texto y preparó su presentación de una manera especial. En esta instancia se escuchó El quirquincho tejedor (leyenda quechua); El chingolo (en Cuentos con plumas y sin plumas); El gallo que se ensució el piquito (cuento de Buenos Aires); Los tres chanchitos; Rapunzel; El zapatero y los duendes; Sapo verde, de Graciela Montes; Las locas ganas de imaginar, de Beatriz Ferro; Un día animal, de Margarita Mainé; El llorón. Diario de un hermano desesperado, de María Inés Falconi; y El delantal que el viento lleva, de Ana Maria Machado. Finalmente, con el propósito de compartir lecturas con alumnos de otros niveles, los niños de las 1ras. secciones fueron invitados por los de 3er. año de

Primaria, quienes dramatizaron un cuento de María Elena Walsh; los de 2da. sección de Inicial escucharon un cuento escrito y leído por los de 1er. año de Primaria; y los de 3ra. sección de Inicial visualizaron una presentación del libro Dónde viven los monstruos, de Maurice Sendak, acompañados por los niños de 1er. año de Primaria. Luego de haber participado de todas estas propuestas, los alumnos se llevaron un certificado que acreditaba su participación en la 7ma. Maratón nacional de lectura. A los comentarios positivos sobre esta experiencia, escuchados tanto los días previos como los posteriores, de boca de los niños y de sus familias, a las repercusiones de los textos escuchados y al impacto de la propuesta, se le suma el entusiasmo de los alumnos por organizar otra maratón, de juegos, de disfraces, de pintura, etc. Cabe destacar que estas actividades estuvieron acompañadas por los habituales momentos de juego y merienda, aunque sin restarles importancia a las protagonistas del día, la lectura y la literatura. Lectura y literatura porque sí, lectura y literatura sin más, lectura y literatura que conmueve, lectura y literatura que libera. Simplemente, maravillosas lecturas literarias.

_____________________________________ 1 Lema

de la 7ma. Maratón nacional de lectura.

2 Profesora

de Educación inicial egresada del I.S.F.D. Nº19, de Mar del Plata. Con diversas

capacitaciones en el ámbito de las prácticas del lenguaje y la literatura, así como de otras áreas de la enseñanza. Actualmente, ejerciendo en el Jardín de infantes Marcelino, del Instituto Peralta Ramos (Mar del Plata). También, socia de la Asociación civil Jitanjáfora. 3 DGCyE, 4 En

Diseño currícula para la educación inicial, 2007.

su exposición en la cátedra sobre Rasgos perdurables de una identidad argentina.