MAYO 2016 CATEQUESIS 1 EL QUE ME AMA GUARDA MI PALABRA I) OBJETIVO Concientizar que el amor a Dios se demuestra siguiendo sus enseñanzas, para que el joven viva su amor a Jesús con coherencia, guardando sus mandatos. II) ORACION INICIAL R/ QUE PUEDA AMARTE SEÑOR VIVIENDO TU PALABRA Señor Jesús permite que mi juventud no sea una fuerza desperdiciada en la rebeldía, desobediencia y altanería, si no que pueda ser obediente y dócil a tu palabra. R/ QUE PUEDA AMARTE SEÑOR VIVIENDO TU PALABRA Dios de bondad que no me quede en leer tu palabra, que pueda asimilarla y vivirla en cada jornada, entre mis compañeros, amigos y familiares. R/ QUE PUEDA AMARTE SEÑOR VIVIENDO TU PALABRA Jesús amigo, el amor se muestra obedeciendo, y yo quiero seguir tu palabra, que ella me guíe en mi juventud y en toda mi vida. R/ QUE PUEDA AMARTE SEÑOR VIVIENDO TU PALABRA Quiero demostrarte mi amor a ti Jesús por ello seré obediente a tus mandatos, a tus enseñanzas, a tu evangelio, a ti, que eres el camino la verdad y la vida. III)PALABRA DE VIDA. Jn 14, 23-29

IV) PROFUNDIZAMOS LA PALABRA El verso 23 es maravillosamente profundo, es en teología un dato interesante que se llama la inhabitación del alma, que expresa la presencia de la Santísima Trinidad en el corazón del creyente, pues habla de que quien ama a Cristo, es amado por el Padre y por ello, el Hijo y el Padre harán morada en esa vida, obviamente incluimos al Espíritu Santo que se mencionará en el verso 26. Es claro que el amor se manifiesta en cumplir lo que pide el amado. El verso 26 es clave para confiar en que esta Iglesia está en la verdad pues es guiada por El Espíritu Santo. Y finalmente el verso 27 es uno de los reiterados mensajes del Resucitado “Os dejo la paz”, es aquella experiencia no sólo por la ausencia de guerra si no por la armonía y paz que brotan de la presencia Divina. V) APLICAMOS LA PALABRA En el día de la madre una mujer recibe una tarjeta de su hijo de 14 años, quien le dice feliz día mamá, ella lee con alegría y felicidad la tarjeta, le da un fuerte abrazo y se siente dichosa, pero luego con voz suave pero firme le dice a su hijo, el mejor regalo que puedes dar es hacerme caso… Cuantas veces le decimos a Dios que le amamos, y le ofrecemos esfuerzos, sacrificios, desvelos, pero lo que realmente El espera de nosotros es la obediencia a sus mandamientos. Por lo tanto además de encender una vela en el templo, además de rezarle un padre nuestro y ave maría, además de ir a misa, debo reconciliarme con mi hermano, honrar a mis padres, dejar la mentira, poner al Señor en el primer lugar de mi existencia, es decir cumplir sus enseñanzas, sus mandamientos. El amor no son discursos, si no hechos bien concretos, por ello querido joven la mejor manera de mostrar que amo a Dios, es haciendo vida su palabra, ya sea del servicio a los pobres, ya sea de vivir los sacramentos, ya sea de perdonar a quien te ofende, etc. En repetidas ocasiones hemos entendido el amor como sentimiento, el sentir algo por alguien, el regalarle tarjetas, golosinas, flores, etc., cuando el amor que enseña Cristo, son opciones para toda la vida, son decisiones serias que involucran a la persona. Cuando una pareja se casa, se promete fidelidad para siempre no solamente para cuando se siente o no se siente, pues los sentimientos son pasajeros y variables. Por ello amar a Cristo es una decisión de cada día, es el esfuerzo de ser fiel siempre no solamente por un día o por un tiempo determinado, de hecho el mismo nos dio ejemplo cuando en su vida siempre su alimento fue obedecer al Padre, no buscaba otra cosa que ser consecuente con la voluntad de El, al cual siempre escuchó, buscó y obedeció. Es más en el momento supremo, en el huerto de los olivos, exclamó: “Padre si quieres, aparta de mí esta copa; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya” (Lc 22, 42).

Querido joven si sientes un amor profundo o por Jesús y quieres demostrarlo, esfuérzate por obedecer y complacer a tus padres, lucha por no discutir con tus hermanos, compañeros, vecinos, etc., saca de tu corazón odios, rencores y resentimientos. Dedícate a tus estudios, no pierdas el tiempo, lucha por dedicar tiempo a tu oración, a tu confesión y a tus sacramentos; evita los conflictos, apártate de las discusiones. Evitar peleas no es de cobardes, sino de valientes que saben detener sus instintos, sus corajes, sus enojos y manteniendo la serenidad, saben retirarse sin dejar dolor, ni molestias, con la frente en alto porque supieron vencerse a si mismos. San Agustín dijo: “Ama y has lo que quieres”, si estas lleno del amor de Dios, eso te llevará a ser obediente, fiel, generoso, solidario, fraternal, misericordioso y firme en los caminos de Dios querido joven. VI) VIDA QUE NOS ILUMINA ROSALIO BENITO (Quiché) Cumpliendo el mandato de amar a sus hermanos, incluso hasta la vida, “no hay amor más grande que dar la vida por los amigos”, pues involucrado en organizaciones comunitarias luchó por los derechos de su comunidad y ello le costó la vida; Rosalío Benito fue asesinado el 22-7-1982, tenía al morir unos 80 años. Fue uno de los primeros catequistas del cantón La Puerta en Chinique, cuando se inició el trabajo de la Acción Católica en la década de los años 40; por la falta de sacerdotes de toda la región del Quiché, en muchas comunidades se escogían “rezadores” para circunstancias religiosas especiales de la vida de la comunidad, sobre todo en casos de las velas que se hacían por los muertos. Allá por el año 1940, Rosalío Benito, como reconocen los que lo conocieron, aprendió a rezar el rosario y a cantar cantos religiosos para las celebraciones. Todo lo hacían de memoria, las oraciones, el Padre Nuestro, el Credo, las letanías, etc. Con la animación de las comunidades impulsadas por el sacerdote Rafael González Estrada, por medio de la Acción Católica, creció en los habitantes del lugar el compromiso por animar y fortalecer su fe cristiana. Rosalío Benito fue uno de los impulsadores más decididos de este trabajo, era un señor ya maduro, ysu esfuerzo y servicio a la comunidad le habían ganado el respeto, el cariño y la admiración de todos, de modo que su liderazgo era indiscutible. Impulsaron la catequesis, la reconstrucción de las familias, preparándolas para el matrimonio; se preparaba igualmente a los niños para la primera comunión. La vivencia religiosa de la comunidad crecía día a día. Luego se decidieron a construir el oratorio de la Aldea y a buscar mejoras sociales, salubres y educativas para la comunidad, lo cual le atrajo enemigos y rechazo de personas poderosas, que convenía a sus interese el retraso de las comunidades rurales.

La gente que les recuerda cada 22 de julio dice: “Cuando llegó a la violencia, los malos tiempos, la persecución, ellos se entregaron al martirio. Ninguno de ellos levantó la mano para señalar al hermano como culpable de su muerte: aceptaron humildemente la muerte. Murieron según el trabajo que había realizado. Los que se dedicaban a la Palabra de Dios, los torturaron hasta la muerte. Los que hacían otros trabajos, como el desarrollo comunitario, la salud, arreglo de carreteras, los martirizaron de otra forma.” (Testigos de la fe por la paz, ODHA, pags. 97-99). VII) PALABRA QUE NOS AYUDA “Me preguntan qué espero de los jóvenes. En el libro Cruzando el umbral de la esperanza, he escrito que “el problema esencial de la juventud es profundamente personal (…). Los jóvenes (…) saben que su vida tiene sentido en la medida en que se hace don gratuito para el prójimo” (p.132). Por eso, les pregunto personalmente a cada uno: ¿Sois capaces de entregaros a vosotros mismos, de entregar vuestro tiempo, vuestras energías, vuestros talentos, por el bien de los demás? ¿Sois capaces de amar? Si lo sois, la Iglesia y la sociedad pueden albergar grandes esperanzas con respecto a cada uno de vosotros. La vocación a amar, entendida como auténtica apertura a nuestros hermanos los hombres y como solidaridad con ellos, es la más fundamental de todas las vocaciones. Es el origen de todas las vocaciones en la vida. Es lo que Jesús buscaba en el joven cuando le dijo: “Guarda los mandamientos” (cf. Mc. 10,19). En otras palabras: Sirve a Dios y a tu prójimo de acuerdo con todas las exigencias de un corazón fiel y recto. Y cuando el joven aseguró que ya estaba siguiendo ese camino, Jesús lo invitó a un amor más grande: “Déjalo todo y sígueme: deja todo lo que se refiere sólo a ti mismo y colabora conmigo en la inmensa misión de salvar el mundo” (cf, v. 21). A lo largo del camino de la existencia de cada persona el Señor tiene para cada uno algo que hacer” (Beato Juan Pablo II, meditación en la vigilia de la X Jornada Mundial de la Juventud en Filipinas, 14-1-1995). VIII) ORACION FINAL Quiero pedirte Señor por todo mi ser, para que viva el verdadero amor, aquel que se compromete con madurez y sinceridad, que pueda tomar mi existencia como la oportunidad de demostrarte cuanto te amo, entregando lo mejor de mi juventud en el servicio a los demás, en el honrar a mis padres, en no cansarme de cumplir tus santos mandatos, que al final son orientaciones preciosas para poder conservar y desarrollar el tesoro que me diste de la vida, que pueda siempre con firmeza y perseverancia tomar tu mano y jamás soltarme de ella. AMEN.

IX) HAGAMOSLO VIDA 1) Proponerme al menos esta semana de no contradecir a mis papás, si no obedecer en todo. 2) Demostrar mi amor a Jesús yendo además de la Misa de Domingo a otra misa durante la semana. 3) Si no tengo trabajo, ahorrar aunque sea poco de lo que me dan en casa, para dar a algún mendigo que encuentre por la calle. 4) De entre los 10 mandamientos leer cuál me cuesta más y al menos esta semana cumplirlo al pie de la letra. (Preparar la actividad del mes, entrando en contacto con un hogar para niños huérfanos, preparando función de payasos, conseguir golosinas, además pelotas plásticas. Recordemos que esta actividad se hace en lugar de la última reunión normal del mes).

CATEQUESIS 2 SE VOLVIERON CON GRAN GOZO I) OBJETIVO Ayudar al joven a comprender que la Ascensión es una verdad que todo cristiano puede vivir, para que cumpliendo el mandato de evangelizar se preparen a su Ascensión personal al final de sus días. II) ORACION INICIAL R/ QUE PUEDA TAMBIEN VIVIR LA ASCENSION Señor nuestro testimonio de vida durante toda nuestra existencia es la oportunidad de ser dignos de vivir nuestra ascensión. R/ QUE PUEDA TAMBIEN VIVIR LA ASCENSION Jesús tú nos enviaste a evangelizar cuando subías a los cielos, que mi vida pueda ser una constante proclamación de tu evangelio a más jóvenes. R/ QUE PUEDA TAMBIEN VIVIR LA ASCENSION Dame siempre la experiencia de encontrarme con tú persona en la oración, la palabra, la Eucaristía para mantener siempre aquel gozo de los apóstoles. R/ QUE PUEDA TAMBIEN VIVIR LA ASCENSION Señor desde hoy puedo vivir la ascensión, teniendo actitudes de renovado, de resucitado, al luchar por la vida, defender al desprotegido, hacer presente el bien. III)PALABRA DE VIDA. Lc 24, 46-53

IV) PROFUNDIZAMOS LA PALABRA El acontecimiento de la Ascensión, no es un hecho en donde nosotros los que intentamos seguir a Jesús nos quedemos como meros espectadores, y batiendo palmas digamos, ¡Felicidades Jesús¡ por haber ascendido, si no que es una motivación a que nuestra vida siendo fiel al Señor, cumpliendo sus mandatos, pueda también un día vivir la alegría de ser elevados a la presencia de Dios.

Es importante también diferenciar Ascensión de Asunción, la segunda la experimenta la Virgen María y lo celebramos el 15 de agosto, y en esta no sube la Virgen por su poder, sino que es subida, es Asunta a los cielos, en el caso de Cristo él si sube por su propio poder pues es Dios. V) APLICAMOS LA PALABRA Podemos dividir en tres partes el texto que nos ocupa queridos jóvenes, en primer lugar del verso 46 al 48, en donde se nos enfatiza la actividad misionera que todo cristiano posee desde su bautizo, y que se renueva con el encuentro personal y real con la persona vivía de Jesucristo, por ello somos nuevamente enviados, para que con nuestras palabras, nuestra creatividad, con nuevos métodos podamos impactar y sacudir la vida de otros jóvenes, con el anuncio del siempre joven Jesús. Es importante que usando nuestra creatividad podamos generar nuevas estrategias, novedosos momentos que pueda despertar en la generación actual un renovado entusiasmo por conocer la persona y el mensaje de Cristo nuestro amigo. Pero no podemos olvidar amigo joven, que más que estrategias, métodos, creatividad, se necesitan testigos, es decir jóvenes que encarnen la palabra, para que se compruebe a todo el mundo, que esas letras del Evangelio no son vana palabrería, si no realidad que al ser asumidas por personas concretas muestran su eficacia y verdad. La palabra convence pero el testimonio arrastra dice el conocido refrán, por ello el mejor y mayor esfuerzo es el de ser jóvenes que conviertan su existencia en páginas vivas del evangelio. En segundo lugar tomamos el verso 49, donde se expresa la promesa del Padre que es precisamente el Espíritu Santo, dentro de 8 días estaremos en la fiesta de Pentecostés que celebra precisamente esa tercera persona de la Santísima Trinidad. Sabemos que es el Espíritu Santo quien es el primer evangelizador, es él quien transforma los corazones, por ello debemos invocarlo diariamente, para que genere conversiones, pero también para que asista a quienes llevan los destinos de la Iglesia de Cristo con el fin de que tomando las mejores decisiones puedan conservar el objetivo primordial de la Iglesia que es evangelizar (EN # 14). Es el Espíritu Santo quien se hace presente en los sacramentos, quien purifica y santifica a la Iglesia, por ello ella es consciente de la necesidad de su presencia en todo lo que realiza.

Y en tercer lugar versos del 50 al 53, donde se realiza la Ascensión, esto debe provocar en ustedes jóvenes el anhelo de un día vivir también la experiencia de la Ascensión, así como el Señor cumplió su misión, de igual manera todos los bautizados tenemos la misión de evangelizar, al realizarlo estaremos preparados para algún día experimentar la gracia de ser llevados a la presencia del Señor, por exige esfuerzo diario, lucha constante, camino de espiritualidad, oración, lectura de la palabra, perseverancia, confesión y Eucaristía. Ya podemos tener la experiencia de la Ascensión asumiendo actitudes nuevas llenas de espiritualidad, alejadas del pecado y de esta sociedad lejana a nuestro buen Dios. Seamos jóvenes en proceso de Ascensión, que se entusiasmen por lo trascendente, lo espiritual, lo que va más allá de nuestros ojos y así revolucionemos la juventud de hoy. VI) VIDA QUE NOS ILUMINA GILBERT La Ascensión queridos jóvenes puede vivirse desde nuestro hoy con acciones y decisiones que provoquen una vida en constante ascenso hacia Dios. Gilbert es un joven que acaba de terminar su carrera de arquitecto. El trabajo le da la satisfacción de ejercer una profesión que le gusta y le brinda seguridad económica. Es apreciado por su inteligencia y su buen carácter le facilita tener amigos. Todo está bien… pero hay una pregunta que se repite cada día con mayor insistencia:¿ Qué quiere el Señor de mí?. Una jornada vocacional le abre el mundo de las misiones desconocido para él. Y se da cuenta de que puede ser misionero y arquitecto a la vez; la profesión que aprecia tanto puede ser puesta al servicio de la causa misionera. La idea lo seduce y la voz de Dios resuena más claramente en su corazón. Pero, ¿cómo lo tomará su familia? ¿Cuántos años se van a necesitar para ser misionero? ¿Y el problema de aprender huevos idiomas? ¿ Y…? Gilbert toma las cosas con madurez y va resolviendo los problemas de uno en uno, la familia respeta su decisión y poco a poco se solidariza con su ideal. Los años de formación pasan rápidamente. Hoy el Hermano Gilbert está de misionero en uno de los países más pobres de África, en Malawi, y es el responsable de una Escuela Técnica en la que muchos jóvenes reciben una formación integral, humana, profesional y cristiana. (Llamado a la Misión 2, Misioneros Combonianos, pag. 76)

VII) PALABRA QUE NOS AYUDA “Queridísimos jóvenes, iluminados por la Palabra y fortificados con el pan de la Eucaristía, estáis llamados a ser testigos creíbles del Evangelio de Cristo, que hace nuevas todas las cosas. Pero ¿por qué se reconocerá que sois verdaderos discípulos de Cristo? Porque “os amáis los unos a los otros” (cf. Jn 13, 35) siguiendo el ejemplo de su amor: un amor gratuito, infinitamente paciente, que no se niega a nadie (cf. 1 Co 13, 47). Será la fidelidad al mandamiento nuevo la que certificará vuestra coherencia respecto al anuncio que proclamáis. Esta es la gran novedad que puede asombrar al mundo desgraciadamente todavía herido y dividido por los violentos conflictos, a veces evidentes y claros, otras, sutiles y escondidos. En este mundo vosotros estáis llamados a vivir la fraternidad no como utopía, sino como posibilidad real; en esta sociedad estáis llamados a construir, como verdaderos misioneros de Cristo, la civilización del amor”. (Beato Juan Pablo II, mensaje para la Jornada Mundial de la Juventud 1997, 15-8-1996) VIII) ORACION FINAL Señor la solemnidad de la Ascensión no es para quedarme viendo hacia el cielo, estancado sin actividad, al contrario debe ser el estímulo para volver a mis actividades de estudio, de trabajo, y tener actitudes de Ascensión, con mi búsqueda de lo espiritual, con mi valoración y no obsesión por lo material, con actitudes renovadas de bien para superar el mal. Sé que con la ayuda de tu espíritu estas acciones nuevas podrán generar una evangelización verdadera, profunda y eficaz. AMEN IX) HAGAMOSLO VIDA 1) Sin dar explicaciones hacer algo que mis papás me piden y a mí no me gusta hacer, por ejemplo, lavar trastes, arreglar mi cama, barrer, etc. 2) Ir al hospital más cercano, visitar algún enfermo que no tenga visita, escucharle y platicarle sobre Jesús. 3) Durante esta semana buscar en radios católicas, o si tengo acceso a internet, música con mensaje cristiano católico y elegir la que más me guste para compartirla en la próxima reunión de grupo. 4) Dentro de mi oración diaria incluir el pedir Espíritu Santo para la Iglesia en general, mi párroco, mi grupo juvenil, mi familia y para mí mismo.

CATEQUESIS 3 PODER DE PERDONAR LOS PECADOS I) OBJETIVO Reflexionar sobre el poder que Jesús concede a sus discípulos para perdonar los pecados para que integren dentro de su vida el hábito del importante sacramento de la reconciliación. II) ORACION INICIAL R/ QUE PUEDA VIVIR LA DIVINA RECONCILIACION Señor muchas veces dejo pasar mucho tiempo y no me confieso, a veces me cuesta, otras veces pongo excusas pero en definitiva lo evito, cuando sé que es un bien para mi vida. R/ QUE PUEDA VIVIR LA DIVINA RECONCILIACION Tú no cesas de llamarme para volver a la bella relación de amistad que generalmente no he sabido apreciar ni conservar. R/ QUE PUEDA VIVIR LA DIVINA RECONCILIACION Señor por momentos siento que no puedo reconciliarme ni con migo mismo, me siento insatisfecho de lo que soy y hago, por ello te pido que primero me pueda reconciliar con mi vida misma. R/ QUE PUEDA VIVIR LA DIVINA RECONCILIACION Que pueda dejar atrás mis temores y me dirija con decisión y serenidad a confesarme pues al final tu eres un Padre de amor que me espera. III)PALABRA DE VIDA. Jn 20, 19-23

IV) PROFUNDIZAMOS LA PALABRA El verso 22, muestra el soplo de Jesús que simboliza al Espíritu principio de vida, 6, 63. También en Génesis 2,7. Cristo resucitado da a los discípulos el Espíritu que realiza como una re-creación de la humanidad. Poseyendo desde ahora este principio de vida, el hombre ha pasado de la muerte la vida, 5, 24, y no morirá jamás, 8,51. Es el principio de un final de los tiempos ya realizado (escatología ya realizada).

V) APLICAMOS LA PALABRA El verso 19 queridos jóvenes nos evidencia que los apóstoles estaban encerrado y había miedo; esto puede ya hacernos pensar en jóvenes que se encierran en su cuarto, o bien son cerrados de carácter, no son capaces de compartir lo que les sucede, de contar sus tristezas, se van quedando solos aislados y temerosos sin poder ser ayudados porque no se dejan ayudar. Es importante darse cuenta en este tema que el Resucitado viene a todo joven que se considere incomprendido, despreciado, ignorado, para sacarlo de su situación, para no permitir que siga encerrado en sí mismo, para que borre de su corazón todo tipo de miedo, y pueda vivir en la fe y confianza del Resucitado que está presente y brilla en medio de nosotros. Jesús se presenta y sus palabras son: “LA PAZ CON VOSOTROS”, uno de los regalos del resucitado es la paz, ella entendida no como ausencia de guerra, conflictos o discusiones, si no algo más como ambiente de serenidad, de fraternidad, de colaboración mutua, en total ausencia de tensiones y discordias. Esa paz que trae el resucitado debe darse en primer lugar al interior de tu vida joven, pues muchas veces no estamos conformes con nosotros mismos, por como somos, físicamente, intelectualmente, socialmente, etc. quisiéramos otra realidad, otro país, otra situación, pero no es así. Por ello la paz en cada vida es la capacidad de cada persona de aceptarse como es, y lo que tiene, sin renegar por lo que le falta o la sociedad le hace creer que le falta. Pero además la paz es con el hermano con el prójimo, con mis hermanos y hermanas, con mis papás, con mi primo, tío o tía, vecino o compañero de estudios, de trabajo etc. Si no podemos vivir en perfecta armonía con todos, al menos poder tener una relación normal de saludo, de buenas tardes, buenos días, etc. Esto implica capacidad de perdón y de pedirlo cuando nos hemos equivocados, es la madurez de reconocer sus errores. También la paz con Dios, reconciliarme con El, pues el distanciamiento no se da porque El se aleje o se enojo con migo, soy yo quien me alejo, me voy a otras actividades y no sigo el camino de nuestro Padre; por ello es importante el sacramento de la Reconciliación, del que habla el verso 23, la facultad que Jesús ha dejado a algunos hombres, no por méritos, pues nadie merece ese regalo, si no por elección libre del Señor, de querer siempre involucrar al hombre en la salvación de sus hermanos.

Es importante tener presente este texto pues hoy por hoy amigo, existen sectas que se dicen cristianas, que critican el sacramento de la reconciliación, ¿será que no leen la Biblia?, pues aquí está claro ese poder y que es la única manera, no da otras opciones. Por ello debemos recordar que la Iglesia que más cumple la Biblia es la católica, pues en ella está lo que pide el texto que leemos hoy, además está la Eucaristía otro sacramento que aparece en los cuatro evangelios, en las cartas de San Pablo y es más, está anunciado desde el Antiguo Testamento. Acerquémonos al sacramento de la confesión, es cierto que no es fácil pero eso nos proporciona gracia, paz y la tan esperada absolución y reconciliación con Dios. VI) VIDA QUE NOS ILUMINA SAN JUAN MARIA VIANNEY Conocido y amado como “el cura de Ars”, un pueblito francés al norte de Lyón en donde ejerció su ministerio sacerdotal, Juan María Vianney (1786-1859) es uno de esos hombres a quienes se aplican muy bien las palabras de san Pablo: “Dios ha escogido a los más insignificantes para confundir a los grandes”. Campesino de mente rústica, nación en Dardilly, había pasado por la borrasca revolucionaria y la exaltante epopeya napoleónica sin casi darse cuenta. En 1815 recibió las Ordenes Sagradas, pero no la facultad de confesar porque no lo consideraron idóneo para dirigir las conciencias. ¿Quién iba a imaginar que Juan Vianney llegaría a ser uno de los más famosos confesores que la historia recuerde?. Confesaba hasta 16 horas seguido, y sus feligreses sabían que había que acomodarse por horas, cuando constataban que el sacerdote se había quedado dormido, pues todos saben en Ars que su párroco duerme poco. Enseño el valor de la confesión y la gracia que este sacramento confería a los fieles, quienes poco a poco se dejaron arrastrar por la santidad de San Juan Maria que generaron un Ars nuevo. Murió a los 73 años de edad, el 4 de agosto de 1859. Aun antes que Pio XI lo inscribiera en la lista de los santos ya Ars era meta de peregrinaciones. Vivamos queridos jóvenes con amor, conversión, gratitud y santidad el sacramento de la reconciliación.

VII) PALABRA QUE NOS AYUDA “Cristo es la imagen viva de nuestra reconciliación. En la mañana de la resurrección, El va a anunciar a sus discípulos la paz y los reúne para comunicarles su Espíritu, el don de la reconciliación con el Padre, el dinamismo de la reconciliación entre los hombres (…). El Hijo crucificado y resucitado es fuerte del Espíritu de amor. Este Espíritu penetra en las raíces más escondidas de la iniquidad y suscita en los corazones un movimiento de conversión que lleva a la reconciliación con el Padre y los hermanos, en el seno de la Iglesia, mediante el sacramento de la Penitencia. (…) El mensaje de Jesús, su obra redentora, el don de su Espíritu está presente en la Iglesia para realizar la reconciliación universal, para vencer el pecado y sus consecuencias, para construir un orden nuevo en la justicia y el amor”. “La primera exigencia de la reconciliación en Cristo, que es don misericordioso del Padre, es la conversión personal como actitud previa para la concordia entre las personas. Superar la ruptura radical del pecado para reconciliarse con Dios, consigo mismo y con los demás, presupone una transformación interior que exige esfuerzo y sacrificio, renuncia y cruz, según el espíritu de las bienaventuranzas. A esta conversión radical, a esa transformación de la mente y del corazón, que culmina en el sacramento de la reconciliación, os invito a todos, para que seáis mensajeros de paz, para que seáis hombres y mujeres reconciliados y reconciliadores” (Beato Juan Pablo II Alocución en Barranquilla, Colombia, 7-7-1986) VIII) ORACION FINAL Padre Bondadoso, tú que siempre me has buscado para la reconciliación perdóname por evitar ese encuentro con tú persona en ese bello e importante sacramento de la confesión. Te pido que me ayudes a vivirlo a cabalidad, que pueda experimentarlo como un momento de cercanía amorosa a ti, y que encuentre allí tu rostro de Padre misericordioso. Te ruego además que comprenda que este sacramento me da la paz, para que pueda ejercitarla en mí mismo y con mi prójimo. Concédeme el poder perdonar y la valentía de pedir perdón, para poder construir relaciones más sanas y verdaderas con mis amigos AMEN.

IX) HAGAMOSLO VIDA 1) Realizar la dinámica diaria en esta semana, verse al espejo al levantarse y decirse. “Me acepto como soy, me reconcilio con migo”. 2) En esta semana acercarme al sacramento de la reconciliación, no sin antes haber hecho un profundo y despacio examen de conciencia. 3) Si hay distanciamiento con alguien del hogar, del trabajo, estudio o del grupo juvenil, buscar el momento oportuno teniendo antes un momento de oración, para poder reconciliarse. (Preparar la actividad del mes, entrando en contacto con un hogar para niños huérfanos)

ACTIVIDAD DE MAYO 1) Haber hecho contacto con hogar para niños huérfanos, de tal manera que se establezca, día, hora y tiempo que se va a estar, pueden ser dos horas; explicar las actividades a realizar para ver si les parece y poseen las instalaciones necesarias. 2) Comprar pelotas plásticas para organizar partidos con los niños, que algunos jóvenes se vistan de payasos y preparen actividades para hacer reír a los niños; llevarles golosinas para regalar, además hojas en blanco y crayones para colorear. 3) Realizamos el siguiente programa: 3.1) Oración inicial 3.2) Dar una catequesis breve sobre el Espíritu Santo 3.3) Darles las hojas para que dibujen lo que captaron del tema y las coloreen. 3.4) La función de payasos 3.5) Organizar los partidos con las pelotas plásticas. 3.6) Oración final y despedida 4) Tratar de delegar todas las funciones que participen todos los del grupo juvenil. 5) En la siguiente reunión iniciar evaluando esta actividad con los niños.

PASTORAL JUVENIL ARQUIDIOCESANA www.pastoraljuvenil.org 22851657 P. Manuel Armando Abac