1

JOSE Y LOS TRES PEDIDOS. RESUMEN: El sketch muestra a un docente deprimido por la vida que se encuentra con una lamparita de genio. Los tres deseos del docente son de mejorarse a si mismo, sus relaciones con los demás, y la unidad de su comunidad. El genio le concede sus tres deseos pero no de la forma que él espera (le ofrece cursos del Instituto Ruhí). DURACIÓN: 15 – 20 minutos REPARTO: José Palma Silvia, esposa de José Juancito, hijo de José

Ruhí, el Genio Sra. Talavera

MATERIALES:  Llanta de auto  Lamparita de genio (puede ser una botella de vidrio de colores)  Juguete de Juancito  Delantal para Silvia y artículos de cocina  Disfraz de genio

 Sonido fuerte de trueno o dos bombitas/fuegos artificiales que echan mucho humo (cuando aparece el genio de la lamparita y cuando desaparece al final).  Libro Ruhí 1  Libro Ruhí 3

Entra José, esposo de Silvia y padre de Juancito. Se nota que esta enojado y esta cargando la llanta de repuesto del vehículo. En el escenario, Silvia esta cocinando y Juancito esta jugando. Silvia le ve agitado y le pregunta: Silvia: "Qué te sucedió mi querido? ¿Porque vienes con la llanta del auto en mano? ¿Paso algo en el colegio?" José: "Qué desastre en el colegio hoy con los chicos pero eso es otra historia. ¡Esos baches y el vidrio roto de las botellas de cerveza en nuestro barrio ya son el colmo! Esta es la segunda vez este mes que se me pincha la rueda. Tuve que dejar el auto sobre el gato a tres cuadras." Juancito: "¿Sobre un gato dejaste al auto, papi? Je, je. ¿Y se murió el pobrecito?" José (frustrado): "No Juancito...no ESE tipo de gato." Silvia: "¿Y porque no recorres el barrio, mi cielo, y haces una colecta para recoger plata para reparar la calle y para darle una propina a los que recogen basura para que limpien la calle de paso? Eres miembro de la Junta Vecinal."

2

José: "Colecta...¡Seguro! ¿Para que? Herminia esta peleada con Paula porque sus hijos tiran piedras por su techo de chapa a la medianoche y le despierta. Lucho le esta cuidando a su abuela enferma y no tiene ni un peso que le sobra. La Familia Paredes esta peleada con la Familia Pizzo porque había sido esta mal marcada los límites de sus terrenos. La vieja de la esquina es una gruñona y cada vez que le saludo me tira una mirada mortal. Y esa familia Talavera...Ellos pertenecen a una religión extraña...dice llamarse buhá'í o algo por estilo. ¡Este es un barrio de locos! Si paso para juntar plata se van a reír en mi cara." Juancito: "Papi. Te olvidaste del borracho del Sr. Alvarez. Cuando la vecina pinto su buzón de blanco, el se orinó por él pensando que era el inodoro? Je, je." Silvia: "¡Qué buen ejemplo eres para tu hijo! Dale leña al fuego, querido...habla mal de los vecinos en frente de él para que se vaya y lo repita por allí" José (muy irónicamente): "Ay, Disculpaaaame." Silvia se calla y sale enojada del escenario. José baja la llanta y agarra su espalda ya que le duele. Se arrastra hacia su silla y se sienta. Al sentarse grita de dolor. Quita de su trasero un objeto puntiagudo. José: "¡AAAAAayyy! ¡¿Y ahora qué diablos es esto?!" Juancito (que esta jugando): "No es del diablo, es mío...papi! Je, je." José: "¡Te crees el simpático! ¿Por qué esta esto en mi silla? Casi me agujerea el trasero." Juancito: "No sé que es, papi. Lo encontré en un lote baldío a varias cuadras. Lo traje ya que parecía que no era de nadie." José: "¿Parecía? ¿Cuántas veces te dije que no tomaras las cosas ajenas?...aunque no parezcan tener dueño." Juancito: "¡Bueno! ¡Bueno! Disculpaaame..." José (enojado): "¡No me faltes el respeto!” Juancito le imita al padre en el trato que le dio a la mama anteriormente. Y sale del escenario del mal humor. José (gritando solo): “¿Alguien mas necesita un blanco a que tirar? ¿Alguien más se quiere tomar conmigo." Toma la lamparita mágica en la mano y la empieza a girar.

3

José (pensando en voz alta): "¿Qué me pasa? Paso todo el día como profesor atendiendo a los hijos de otros padres en el colegio y no tengo tiempo de pasar un rato grato con mi propio hijo. Se esta volviendo un niño bastante irrespetuoso. No me gusta. A mi esposa tampoco no le tengo paciencia. Y a mis vecinos, menos. ¡Algo anda muy mal!" "¡Que sucio que esta esta lámpara! Parece una de esas lámparas viejas de aceite...¿De quién será? ¿Que dice allí abajo?" Juan soba la lamparita. Hay una explosión de humo y aparece el genio. El genio es muy simpático y salta como el chavo del ocho. Genio: "¡No contaban con mi astucia!” José se asusta. José: "¿Qué? ¿Quién eres? ¿Y de donde vienes?" Genio: "¿Quién soy yo? ¿Quién eres tú? Yo soy un Genio. Me llamo Ruhí. Hace diez mil años que estoy encerrado en esa lamparita y tú me liberaste. Por eso te estoy endeudado." José: "¿H-hace diez mil años se hablaba castellano?" Genio: “Soy un genio, amigo. Me adapto rápido. Bueno. Manos a la obra. ¿Cuál es tu primer deseo?" José: "¿Qué?" Genio: "No tartamudeo, amigo. ¿Cuál-es-tu-primer-deseo? Yo soy un genio, vos me liberaste, y ahora te tengo que dar tres deseos. Eres profesor de matemática en tu colegio...¿Te es tan difícil entender esto?" José: "¿C-cómo sabes que soy profe..? No puedo creerlo...eres un genio de verdad." Genio (sarcástico): "¡No, soy un genio bromista con mucha paciencia y espere 10,000 AÑOS para hacerte una broma! ¡Por favor! No puedes ser tan denso. Y ahora rápido. No tengo todo el día: ¿Cuál es tu primer deseo?" José piensa un segundo y después dice. José: "¿Porqué no? Si esto es solo un sueño, vamos a divertirnos un rato. ¿Qué problema voy a tener?...Yo quiero...emmmmm....yo quiero....ser una mejor persona. Más paciente, menos criticón, más tolerante, etc."

4

Genio: "¿Eh? Hubieras pedido ganar la lotería o algo fácil como un auto último modelo...” El genio estira las manos y hace un poco de calentamiento. Genio: “Dame un ratito, ¿si? Hace tiempazo que no hago esto y estoy un poco oxidado." El Genio saca su libro de recetas (es el Libro I de Ruhi). Genio: “Sujeto...quiere...'poseer un corazón puro, bondadoso y radiante'....aquíiii. Abra cadabra pata de cabra. ¡Aquí esta! ¿Y tu segundo deseo?" José: "¡Quiero....quiero que mi hijo, Juancito, sea mejor que yo!" El Genio saca otro libro de recetas (esta vez el Libro 3 de Ruhí). Genio: "Espera. Un momentito. Aquí...Libro III, Unidad 3. “Bendito es el maestro que se levanta para enseñar a los niños” Ábrete Sésamo…. Muy bien. ¿Y tu tercer deseo?" José: "Quiero...que mi barrio sea unido." El Genio nuevamente un libro de recetas (esta vez el Libro 1 de Ruhí otra vez). Genio: "Un ratito. Otra vez el Libro I...Dame espacio... Un pensamiento de odio debe ser destruido por uno más grande de amor. Acereje, ja, dejeve, tu dejivi. ¡Ya esta! José: “¿Ya esta qué? Pero no me siento diferente.” Genio: “Abre tu puerta, bobo, y tendrás tus tres deseos." José se dirige a la puerta para abrirlo y alguien toca antes que llega. Se sorprende. Abre la puerta. José: "¡B-buenas tardes! ¿Cómo le puedo ayudar?...¿Eh? ¿Usted es la Sra. Talavera?" Sra. Talavera: "¡Buenas tardes! Así es, soy la Sra. Talavera. Mucho gusto. Usted es el Sr. Palma, ¿verdad?" José: "Así es. ¿Cómo le puedo ayudar?"

5

Sra. Talavera: "Le quiero dar una invitación Sr. Palma. Entiendo que Ud. es docente. No hay que mirar muy lejos para ver que la dimensión espiritual de nuestros alumnos esta con problemas. El vocabulario obsceno que usan, la forma común en que los varones y las chicas se tratan, el hacer trampa en las tareas y exámenes, el uso de la violencia y agresión para solucionar sus problemas, la falta de respeto a los maestros y a la autoridad, todos son señales de un decaimiento espiritual de esta generación. ¿Qué opina Sr. Palma? José: “Si. Todo eso es cierto. De hecho lo veo todos los días en mi colegio y hasta con mi propio hijo ahora.” Sra. Talavera: “Con este difícil panorama que tenemos en frente, Sr. Palma, para nosotros los educadores (yo también soy docente como Usted) hace falta un espacio para recargar nuestras baterías espirituales. Necesitamos un momento para enfrentar a los desafíos de enseñar a nuestros alumnos, alumnos asaltados por medios masivos irresponsables que agresivamente les impulsan a la satisfacción de sus apetitos básicos, a la violencia, al sexo, a las drogas. Estos medios le bombardean a nuestro alumnado, muchos que sufren por disfunción familiar, o carecen de necesidades básicas. ¿Qué le parece Sr. Palma?” José: “Y si. Yo llego a mi casa con mal humor de mi trabajo y noto que contagio a mi familia también. Y es cierto lo que usted dice de los medios. ¡Es vergonzoso!” Sra. Talavera: “Soy bahá’í, Sr. Palma. La Comunidad Bahá'í le ofrece un curso que se llama El Brillo de la Vida del Espíritu en que podrás aprender a recurrir al poder de la oración cuando viene el inevitable bajón, podrás afianzar tu entendimiento de los Escritos Sagrados como fuente de inspiración - tu pan espiritual de cada día - y alcanzarás la serenidad al captar el verdadero sentido espiritual de nuestras vidas con un estudio de la vida y la muerte." José: "Hhhmmm. ¿Ese libro lo he visto antes?...” José mira hacia atrás al genio quien sonríe y esconde el Libro 1 que tiene en la mano. José: ¡Ah!...¿Cuándo va a ser este curso?" Sra. Talavera: "Todos los miércoles a las 17 horas, en mi casa." José: "Excelente. Nos veremos allí entonces." Sra. Talavera: "Ojala nos vemos. Gracias por su tiempo, Sr. Palma. Hasta luego." José: "Me puedes llamar José. Gracias por la visita. ¡Chau!"

6

José cierra la puerta. Genio: "Y bueno...¿Qué te pareció?" José: "¿Qué me pareció QUÉ?” Genio: “¿Y viste que se cumplió tu primer deseo?” José: “¿De qué hablas? Una señora de una religión rara me vino a ofrecer un curso. ¿Qué tiene que ver con mi primer deseo?" Genio: "¡Hijole! Y te llamas profesor... Dime: Si yo quiero aprender matemática...¿voy a lograrlo diciendo: ‘Quiero aprender matemática, quiero aprender matemática, quiero aprender matemática' tres veces bien rápido?” José: "OBVIO que no. ¿Cuál es tu punto?" Genio: "¿Piensas que después del último mundial de fútbol dijeron los ganadores: voy a ganar el próximo mundial, voy a ganar el próximo mundial, voy a ganar el próximo mundial y con decirlo no más tres veces rápido van a ganar el próximo mundial?" José: "Es obvio que no per..." Genio: "Si quiero aprender matemática, entró en un programa de estudio...Si quiero mejorar mi fútbol, entró en un programa de entrenamiento. Si quieres mejorar tus cualidades espirituales, amigo, entra-en-un-curso-donde-se-estudia-eso." José: "¡Aaaaah! ¿Donde?" Genio: "¿Y QUE PIENSAS QUE TE VINO A OFRECER LA SRA. TALAVERA?" José: "¿Los Talavera? ¿Qué?...Ellos son de una religión extraña...buhá'í o algo por el estilo.” Genio: “Aaaah. Extraño. Raro. ¿Y no te parece que es un poco raro y extraño que estés hablando con un Genio ahora mismo?” José: “Eh. Pues si. Tienes razón.” Genio: “No vas a solucionar tus problemas con las mismas soluciones de siempre. Con lo que usabas antes. Los tiempos han cambiado, estimado. Necesitamos unos remedios nuevos y fuertes. Distintos. Extraños.” José: “Tienes razón. Bueno. Voy a tomar ese material que tienen y aprender solo no más. Además, termino más rápido.

7

Genio: (irónicamente) "¿A si? GENIal. ¿Cuantas personas conoces que aprendieron matemática solito con el libro? ¿CUANDO le viste a un jugador de fútbol aprender a jugar bien solito? “ José: “Y muy pocos legalmente.” Genio: “ Lo que te vino a ofrecer la Sra. Talavera fue un libro que se llama El Brillo de la Vida del Espíritu donde se aprende en conjunto sobre el verdadero propósito de la vida, la oración, y la comprensión de los Escritos Sagrados. Se estudia en grupo en algo que se llama un círculo de estudio. Comparten sus ideas, consultan, se refuerzan el uno al otro." José: "¡Genial! Ok. Ya esta entonces. ¿Y mi segundo deseo?" Genio: "Abre la puerta otra vez, amigo!" José suspira y se dirige a la puerta y alguien toca. Otra vez esta sorprendido. Abre la puerta. José: "¡Buenas tardes! ¿Eh? ¿ Sra. Talavera...¿otra vez?" Sra. Talavera: "¡Buenas tardes! Así es, soy la Sra. Talavera. Pero...es la primera vez que paso por aquí señor...Usted es el Sr. Palma, ¿verdad?" José: "Así...es. ¿Qué desea?" Sra. Talavera: " Le quiero dar una invitación Sr. Palma. Entiendo que Ud. es docente. No hay que mirar muy lejos para ver que la dimensión espiritual de nuestros alumnos esta con problemas. El vocabulario obsceno que usan, la forma común en que los varones y las chicas se tratan, el hacer trampa en las tareas y exámenes, el uso de la violencia-" José: "Si...si...gracias...y se van a reunir en su casa los miércoles a las 17:00, ¿verdad?" Sra. Talavera: (sorprendida) "Ah...¡Que suerte! Ya sabe sobre nuestra reunión... Excelente... Esperamos verle entonces, Sr. Palma!" José: (irónicamente) "Si. Nos veremos. Gracias por la visita." Sra. Talavera: "Gracias. Hasta luego." José: "¡Chau!" José cierra la puerta.

8

José: "¡Que farsa! Genio impostor...¿Qué es esto? ¿Tres deseos por el precio de uno? ¿Porqué estoy gastando mi tiempo contigo?" Genio: "¡Mi estimado! ¿Te llamas docente y no le respetas a mis 10,000 años de sabiduría? Lo que te ofrece la Sra. Talavera, mi pequeño saltamontes, es el primer libro de una secuencia de libros del Instituto Ruhi. Es una educación de POR VIDA que te ofrece la señora, papa...desde la cuna hasta la tumba. El tercer libro de esta secuencia se llama Enseñamos los Niños, Nivel 1. Cuando llegas allí vas a entender la importancia de la educación espiritual de los niños y si no te inspira a dar clases de niños TÚ MISMO, por lo menos, te convencerá de la importancia de que tu Juancito pase por las clases de niños. La familia Talavera tiene clases de niños los sábados a las 17:00 horas." José: "Aaaah. Ahora Entiendo. Pero no sabía que esto iba a ser tan difícil." Genio: "En diez mil años de vida, tengo una certeza en la vida, humilde mariposa: 'Nada que valga la pena es fácil.' Lo que viene rápido, rápido también se va." José: "Déjame adivinar...mi tercer deseo...me voy a la pueerrta." Genio: "Que inteligente que eres. ¡Impresionante!" José se va a la puerta y abre antes de que toque. La Sra. Talavera toca por su nariz por accidente. José (irónicamente): “Sra. Talavera...¡Qué ENORME sorpresa! ¿Cómo le puedo ayudar?" Sra. Talavera: "¡Buenas tardes! Así es, soy la Sra. Talavera. Usted es el Sr. Palma, ¿verdad?" José: "Correcto. ¿Qué desea?" Sra. Talavera: "Le quiero dar una invitación Sr. Palma. Entiendo que Ud. es docente. No hay que mirar muy lejos para ver que la dimensión espiritual...." José: "Si…de nuestros alumnos esta en problemas. Bla, bla, bla. Ya se. Ya se....Este miércoles, 17:00 horas, en tu casa ¿verdad? Estudio del Brillo de la Vida del Espíritu." Sra. Talavera: (sorprendida) "Ah...¡Que bien! Ya sabe sobre nuestra reunión... Excelente... Esperamos verle entonces, Sr. Palma!" José: "Si. Nos veremos." Sra. Talavera: "Gracias por su tiempo. Hasta luego."

9

José: "¡Chau!" José cierra la puerta. José: "¿Ahora, explícame, querido genio, como un curso va a solucionar el problema gigante de unidad que hay en el barrio?" Genio: "Atiende bien mi pequeño grillo. El proyecto de servicio que es la aplicación del primer curso del que estuvimos hablando, El Brillo de la Vida del Espíritu, es justamente hacer una reunión devocional, reunión de oraciones. Imagínate si invitas a tus vecinos del barrio a reunirse para orar para la vieja de la esquina, para la abuela de Lucho, para que se resuelva el problema entre las familias Paredes y Pizzo, o para la unidad del barrio...Allí ellos van a tener contacto con la Palabra Sagrada. Si no se suavizan con la Palabra Sagrada, no hay cosa que les va a suavizar. Allí en esa reunión aprovechas la concurrencia para hacer tu propuesta para reparar la calle ya que eres miembro de la comisión vecinal. ¡Solucionado el problema!" José: "¿Eso no mas?” Genio: “Eso no mas es. No tan ‘raro’ y ‘extraño’ ahora.” José: “No. Tienes razón. Y dime Genio: ¿Quién es el genio que inventó todo esto?" Genio (con falsa humildad): “Bueno. Yo soy genio pero yo no fui el genio que inventó todo esto. Eso es un cuento para otro día.” José: “¿Dónde? ¿Cuándo?” El Genio le abraza a José y le mira detenidamente. Genio: “¿Deseas saberlo verdad? Pero yo ya te di tres deseos. Colorín colorado…este cuento se ha acabado." Se tira otra bombita/fuego artificial y desaparece el genio.

EL FIN