I N F O R M E F I N A L

INFORME FINAL Aspectos florísticos y dinámica de regeneración de los bosques de Belloto del norte, presentes en el Sitio Prioritario, Cordillera El M...
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INFORME FINAL

Aspectos florísticos y dinámica de regeneración de los bosques de Belloto del norte, presentes en el Sitio Prioritario, Cordillera El Melón, Comuna de Nogales, Provincia de Quillota.

Investigador principal: Prof. Lorena Flores Toro Magíster en ciencias mención Botánica [email protected] Colaboradores: Enzo Brito Rosas (Estudiante de Biología P.U.C.V.) Claudia Acevedo (Estudiante de Biología P.U.C.V.)

NOVIEMBRE 2008

INTRODUCCIÓN Conscientes de la importancia de la Cordillera El Melón como sitio prioritario para la conservación de la biodiversidad, y sabiendo de la vulnerabilidad de los bosques de belloto del norte, que prosperan en la zona central de Chile y específicamente en algunas de las quebradas de esta Cordillera, es que la Corporación Laguna Verde, postuló al XI CONCURSO NACIONAL DEL FONDO DE PROTECCIÓN AMBIENTAL 2008 (CONAMA), con el proyecto titulado: Estudio fitogeográfico para un plan de conservación del bosque relicto, del Sitio Prioritario, Cordillera El Melón, Comuna de Nogales, Provincia de Quillota. En el marco de este proyecto, la Corporación Laguna Verde solicitó mis servicios profesionales como apoyo técnico en el área botánica. De acuerdo a lo anterior, este estudio tiene por objetivo general diagnosticar el estado de conservación de los bosques de belloto del norte, que prosperan en las quebradas de la cordillera El Melón, sector Nogales, a través de la caracterización de su flora vascular y la dinámica de regeneración de las especies leñosas. Como objetivos específicos se planteó lo siguiente:  Caracterizar la flora del área de estudio, su nivel de endemismo y estado de conservación, definiendo su ubicación geográfica.  Caracterizar la estructura de la vegetación boscosa, entendiéndose en el concepto de estructura, no solo la composición de todas las especies sino también su abundancia, frecuencia y cobertura. Además, la densidad y tamaño de los árboles (Diámetros y áreas basales).  Identificar la capacidad regenerativa de las especies arbóreas y determinar la dinámica de regeneración de estas comunidades boscosas. METODOLOGÍA La ejecución del proyecto se llevó a cabo en un lapso de 8 meses, organizados del siguiente modo:  Prospecciones previas de terreno (abril, mayo, junio)  Colecta e identificación de especies vegetales en el laboratorio de Botánica PUCV (durante todo el desarrollo del proyecto).  Aplicación de métodos de ecología vegetal en las quebradas (agosto, septiembre, octubre)  Análisis de los resultados. (octubre, noviembre 2008)

A.- Área de estudio: En las prospecciones previas de terreno, se recorrió un vasto territorio de la Cordillera El Melón, pertenecientes a los bienes comunes especiales Nº1 y Nº2 de la comuna de Nogales, abarcando todo el gradiente altitudinal, accediendo hasta las partes más altas, sobre los 2.000 msnm. Luego de esta etapa inicial de prospección, el estudio se centró específicamente en las quebradas con vegetación boscosa.

Figura 1. La imagen muestra la ubicación de las quebradas El Pedernal, La Madera, La Ramadilla y El Infiernillo, pertenecientes al bien común especial Nº 1 de la Comuna de Nogales. B.- Métodos: Para determinar la composición florística de los bosques ubicados en los fondos de quebrada, se trabajó en las quebradas: Ramadilla, El Pedernal, La Madera y El Infiernillo, ubicadas en sectores del bien común especial Nº1 (Fig. 1). Y en los sectores del Garretón (específicamente quebrada El Maqui) y quebrada El Infiernillo, pertenecientes al bien común especial Nº2. En estas quebradas, se colectó e identificó las especies de plantas vasculares de acuerdo a los métodos clásicos de la botánica sistemática; utilizando la literatura pertinente y

comparando con ejemplares de los herbarios de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso. Las especies colectadas fueron herborizadas en el Laboratorio de Botánica de la P.U.C.V., para depositarlas posteriormente, en el Herbario del Museo Nacional de Historia Natural. Para la nomenclatura científica se siguió a Marticorena & Quezada (1985), excepto los casos en que se adoptaron combinaciones válidas posteriores. El origen fitogeográfico se obtuvo de la literatura con la que fueron identificadas las especies. El espectro florístico se construyó en base a las formas de vida, de acuerdo a Raunkaier y descritos en Steubing et al. (2002). El estado de conservación de las especies se tomó de Benoit (1989) y Hechenleitner et al. (2005). Para las bulbosas se siguió a Ravenna et al. (1998) y para los helechos a Baeza et al. (1998). Para determinar la estructura florística, se levantaron 26 censos de vegetación de acuerdo a la metodología fitosociológica de la escuela de Zürich-Montpellier (BraunBlanquet 1979), en parcelas florística, fisonómica y ecológicamente homogéneas de 200 m2,(20 x 10 m), realizadas a lo largo de los fondos de las quebradas, a distintas alturas. Estos censos se levantaron en las quebradas: La Madera (censos 1 al 9) El Pedernal (censos 10 al 17). y El Infiernillo (bien común especial Nº1) (censos 18 y 19) y El Infiernillo (bien común especial Nº2) (censos 20 al 26). Cada censo fue georeferenciado usando un GPS marca GARMIN. Para ver la ubicación geográfica exacta de cada censo, remitirse a la tabla fitosociológica (ANEXO 3). En cada censo se hizo un inventario exhaustivo de todas las especies presentes (autóctonas e introducidas) y se determinó por simple apreciación visual directa, el porcentaje de cobertura de todos los individuos de cada especie en la parcela. Con los 26 censos de vegetación se construyó la tabla fitosociológica inicial, en base a la cual fueron calculadas las frecuencias y coberturas relativas de cada especie. La frecuencia relativa se obtuvo sumando las frecuencias absolutas (censos en que están presentes) de todas las especies, llevando el total a 100 y determinando el porcentaje de ese total que le corresponde a cada una. La cobertura relativa se obtuvo sumando las coberturas de todas las especies en los censos en que están presentes, llevando el total a 100 y determinando el porcentaje que le corresponde a cada especie. Finalmente, se sumó la frecuencia relativa y cobertura relativa de cada especie para obtener su valor de importancia. Este valor sirve para jerarquizar las especies de acuerdo a la importancia que tienen dentro de la comunidad analizada, su máximo valor es 200 y no tiene unidad de medida. Tampoco es comparable con valores de importancia obtenidos para las mismas especies en otras comunidades vegetales (Wikum & Shanholtzer 1978). Para determinar la dinámica de regeneración de los bosques de belloto, se aplicó el método de los cuartos, descrito en Donoso (1998). Considerando que el número

recomendable de puntos a tomar en un rodal para obtener un muestreo adecuado es de 20, según Cottam & Curtis (1956), se tomó entre 25 a 30 puntos, distribuidos a lo largo de cada una de las quebradas, tomando una distancia de 20 metros entre un punto y el siguiente. En cada punto se trazó una línea en el sentido del rumbo de la quebrada y otra perpendicular al punto, de tal modo de formar cuatro cuadrantes o cuartos cada vez. En cada punto y para cada cuarto, se midió la distancia al árbol más cercano, y su D.A.P. (diámetro a la altura del pecho). Los parámetros que se obtuvo con la aplicación del método de los cuartos fueron: densidad, frecuencia, dominancia, área basal y valor de importancia, de las plantas leñosas para cada una de las quebradas en que se trabajó; en el Pedernal se tomaron 30 puntos. En quebrada La Madera 21 puntos y en quebrada El Infiernillo (bien especial Nº2), 25 puntos. Los D.A.P. de las especies leñosas, fueron agrupados y graficados en clases diamétricas, para inferir los tipos de regeneración de las especies arbóreas y predecir la composición futura de la comunidad. Además, se levantaron censos de regeneración, en cada una de las Quebradas antes mencionadas. Para esto, se levantaron 100 censos de regeneración de 1 m2, cada uno, a lo largo del fondo de la quebrada, distanciados cada 5 metros. En cada censo se contaron las especies leñosas menores de 5 cm de D.A.P.

RESULTADOS Y DISCUSIONES Prospecciones previas de terreno: Como producto de las prospecciones previas de terreno, y siguiendo las clasificaciones de Gajardo (1994) y Luebert & Pliscoff, 2006), la vegetación de los lugares visitados en la Cordillera El Melón, sector nogales, se enmarcan dentro de dos Regiones ecológicas: I.- Región de la estepa altoandina. II.- Región del matorral y del bosque esclerófilo. Dentro de estas Regiones vegetacionales se pudo distinguir una serie de comunidades vegetales que se mencionan a continuación, pero que no han sido detalladas, porque no forman parte del objetivo central de este trabajo, el cual es la caracterización de los bosques de belloto que prosperan en los fondos de quebrada. Teniendo esto en consideración, se describen las siguientes comunidades: I.- REGIÓN DE LA ESTEPA ALTOANDINA. (desde los 1.200 msnm app. hacia arriba). Aunque estas formaciones vegetacionales son descritas en Gajardo (1994), para la Cordillera de Los Andes, es importante señalar que debido a las grandes alturas alcanzadas

por los cerros de la Cordillera de la Costa, en los sectores de la Cordillera El Melón (donde algunos cerros superan los 2.000 msnm), se puede observar claramente este tipo de vegetación altoandina. Dentro de esta Región, se distinguen las siguientes comunidades vegetales: A.- Matorral esclerófilo Andino. Comunidad con fisonomía de matorral alto o incluso arbóreo, donde abunda Kageneckia angustifolia (“frangel” u “olivillo”) y Quillaja saponaria (“quillai”). Esta formación, constituye el límite altitudinal de la vegetación arbóreo. Siendo Kageneckia angustifolia el árbol que alcanza las mayores altitudes en la Región.

B.- Matorral Bajo Mediterráneo Costero de Chuquiraga oppositifolia y Mulinum spinosum (Luebert y Pliscoff, 2006). Esta comunidad se caracteriza por la presencia de arbustos bajos (caméfitos), generalmente espinosos, como Chuquiraga oppositifolia (“chuquiraga”), Mulinum spinosum (“neneo”) y herbáceas (hemicriptófitas cespitosas y terófitas). De acuerdo a nuestras colectas, destaca la presencia de especies de los géneros Haplopappus, Senecio, Baccharis, Calceolaria, entre otros. Y cactáceas del género Eryocise (algunas con problemas de conservación).

II.- REGION DEL MATORRAL Y BOSQUE ESCLEROFILO

A.- Estepa de Acacia caven (400 – 600 msnm).

Es una formación que se encuentra en sectores de lomajes suaves, en las partes bajas, a los pies de los cerros. Ocupa terrenos que en el pasado, se cree estuvieron cubiertos de bosque esclerófilo, el cual fue reemplazado por cultivos, los que a su vez fueron abandonados hasta hoy en día. El aspecto fisonómico de esta formación, es de arboles pequeños y/o arbustos aislados, que solo en primavera presentan un estrato herbáceo abundante, compuesto predominantemente por terófitos y geófitos, la mayoría alóctonos. Entre las leñosas nativas más abundantes observadas en terreno, se encuentran: Acacia caven (“espino”) y Retanilla trinervia (“tebo”).

B.- Bosque esclerófilo (600 – 1000 msnm en laderas de mayor humedad).

El aspecto fisonómico de esta formación, es de un bosque denso, sin embargo este aspecto varía a un bosque abierto y/o matorralizado (matorral esclerófilo), en función de las condiciones ambientales y topográficas (exposición, humedad, etc), o debido a la intervención antrópica que haya sufrido históricamente el bosque original (extracción de leña, carboneo, apertura de terreno para pastoreo, etc.). Entre las especies colectadas en estos bosques se encuentran: Cryptocarya alba (“peumo”), Peumus boldus (Boldo), Quillaja saponaria (Quillay), Lithraea caustica (Litre), Kageneckia oblonga (Bollén), etc. C.- MATORRALES (ubicados en planicies bajas y laderas secas entre los 400 – 800 msnm app.). Estas formaciones de matorrales se presentan como parches de vegetación, de distinta composición florística dependiendo de la altura, topografía, suelos, régimen de alteraciones, etc. C.1.- Matorral esclerófilo degradado: Este matorral se encuentra en las partes bajas, donde producto de la actividad antrópica, el bosque esclerófilo original ha sido degradado al estado de matorral. Entre las especies nativas abunda Porlieria chilensis (guayacán).

C.2.- Matorral de quila:

(Fotografía de quila en flor, en quebrada El Pedernal, mes de octubre 2008)

Este matorral forma asociaciones casi puras de Chusquea cumingii (quila), en diversos sectores de las quebradas, sin distinción de laderas. La quila es una especie pionera, que se caracteriza por colonizar áreas que han sido devastadas por el fuego (Quintanilla & Reyes 1999; Villaseñor & Sáiz, 1993). De acuerdo a lo observado en terreno, hay grandes extensiones de estos matorrales colonizando las laderas, lo que da cuenta del régimen de incendios reiterados al que han sido sometidas estas quebradas en el pasado, como en el presente. Es importante señalar, que de acuerdo a P. Novoa (com. Pers.), esta especie de quila no sería Ch. cumingii, sin embargo, mientras no se cuente con una revisión actualizada del genero Chusquea, la seguiremos llamando Ch. cumingii, en este trabajo.

C.3.- Matorral espinescente con suculentas:

Es una formación de aspecto xerofítico dominada por arbustos bajos y suculentas, entre las que destacan Puya berteroniana (chagual) y Echinopsis chiloensis (quisco), sobre el cual, se observó creciendo con bastante frecuencia, la especie holoparásita Tristerix aphyllus (quintral del quisco).

D.- Bosques higrófilos (500 – 900 msnm, en fondos de quebrada).

El aspecto fisonómico de esta formación, es de un bosque alto, denso, pluriestratificado, con enredaderas uniendo los distintos estratos. Fue en esta comunidad vegetal, en la que se centró el presente estudio botánico. ESTRUCTURA FLORISTICA DE LOS BOSQUES DE BELLOTO DEL NORTE: De acuerdo a nuestros resultados, la flora vascular de los bosques de belloto, se compone de 79 especies (Anexo 1), Las que se distribuyen en 4 clases, 49 familias y 67 géneros. Entre las familias con mayor riqueza de especies se encuentran: Apiaceae con cinco especies, Fabaceae y Myrtaceae con cuatro especies respectivamente. Asteraceae, Geraniaceae, ,Euphorbiaceae, Lauraceae y Alstroemeriaceae con tres especies cada una. El resto de las familias están representadas solo por una o dos especies cada una. Origen fitogeográfico: De las 79 especies encontradas, 43 son endémicas, 25 nativas y 11 introducidas (Figura 2). El 100% de las especies introducidas (11) se encuentran en la clase Magnoliopsida y todas son terófitos (plantas anuales).

Figura 2. Origen fitogeográfico de la flora de los bosques de belloto de la Cordillera El Melón, comuna de nogales. Plantas introducidas creciendo en los bosques de belloto del norte. 1. Anthriscus caucalis 2. Capsella bursa-pastoris (bolsita del pastor) 3. Euphorbia peplus (pichoga) 4. Fumaria agraria (hierba de la culebra) 5. Galium aparine (lengua de gato) 6. Geranium robertianum (core-core) 7. Medicago arabica (hualputra) 8. Stellaria media (quilloi-quilloi) 9. Torilis nodosa 10. Urtica dioica (ortiga) 11. Lamiun amplexicaule (gallito) Mas del 50% de las plantas que habitan los fondos de quebrada en la Cordillera El Melón, son endémicas de Chile. Esta cifra es un poco mayor a la dada por Marticorena (1991), quien señala que el 45,83% de la flora vascular continental es endémica de Chile. Pero no solo hay un gran porcentaje de especies endémicas, sino también, estas quebradas albergan generos endémicos de Chile central, entre los cuales destacan Gilliesia, Miersia, Adenopeltis, Ercilla, Lardizabala, Peumus, Cryptocarya, entre otros. También, en la flora de Chile existen muchas familias monotípicas, entre las que viven en estas quebradas destaca la familia Aextoxicaceae, cuya único género es Aextoxicon y la especie Aextoxicon punctatum (olivillo).

Ejemplos de géneros endémicos de Chile central presentes en estas quebradas:

Adenopeltis

Gilliesia

Ercilla

Lardizabala

Algunos de estos géneros, no solo son endémicos, sino que las especies que lo conforman son muy escasas en la Región. Este es el caso de Lardizabala, Ercilla y Gilliesia, este último aquí representado por la especie Gilliesia gramínea, la que fue considerada en categoría de conservación VULNERABLE según Benoit (1989). En la actualidad no está en ninguna categoría de conservación, como producto de la revisión

posterior de las bulbosas que hicieran Ravenna et al (1998). Sin embargo no deja de ser una especie escasa. El otro genero interesante y extraordinariamente escaso es Ercilla, el cual fue observado exclusivamente en la quebrada El Infiernillo del bien común especial Nº2, entre los 730 y 880 msnm (Anexo 3). Espectro biológico: En el catálogo florístico (anexo 1), se incluyen las formas de vida para cada especie, siendo las más abundantes las fanerófitas (plantas leñosas con las yemas de renuevo sobre los 50 cm de altura) con 29 especies, seguida por los terófitos (herbáceas anuales) con 17 especies, la mayoría introducidas. Los hemicriptófitos (herbáceas perennes) están representados por 13 especies, la mayoría corresponde a helechos. Los Criptófitos (herbáceas bulbosas) cuentan con 9 especies. Los fanerófitos trepadores (lianas leñosas), están representadas por 6 especies. Los criptófitos trepadores (lianas herbáceas, bulbosas) cuentan con 2 especies. Finalmente los caméfitos (subarbustos, cuya yema de renuevo se encuentra a menos de 50 cm de altura), están representados por 3 especies (Fig. 3).

Figura 3. Espectro florístico de la flora de los bosques de belloto de la Cordillera El Melón, comuna de nogales. Si bien es cierto, en el espectro biológico de estos bosques están representadas todas las formas de vida, con abundancia de fanerófitos, lo cual es normal para una formación boscosa, llama la atención la abundancia de terófitos. La presencia de estas herbáceas anuales indica sequedad ambiental. Y si a esto le agregamos el hecho que todas las herbáceas introducidas en estos bosques, son terófitos. Es evidente que estos bosques higrófilos enfrentan un proceso de aridización. Por otra parte, la abundancia de

ciptófitos, que si bién es cierto, todos son endémicos, sin embargo, son plantas propias de las laderas mas soleadas, o de las partes mas altas de la cuencas, como por ejemplo, las alstroemerias, Solenomelus, Pasithea, etc. Y su presencia en el fondo de estas quebradas, también nos indica aridización de estos ambientes. Especies en categoría de conservación: Las comunidades de los bosques de los fondos de quebrada, albergan tres especies leñosas en categoría de conservación vulnerable, dos con datos insuficientes y un helecho en estado de vulnerable a la extinción.  Beilschmiedia miersii (V)  Blepharocalyx cruckshanksii (V)  Persea lingue (V)  Citronella mucronata (D.D.)  Porlieria chilensis (D.D.)  Dennstaedtia glauca (V)

Blepharocalyx cruckshanksii (palo colorado)

Denstaedtia glauca

Porlieria chilensis (guayacán)

Entre las especies que si bien es cierto no se encuentran en ninguna categoría de conservación, pero que son escasas en la V región y que fueron observadas en estas quebradas se puede mencionar a:    

Myrceugenia exsucca (pitra) Raphithamnus spinosus (espino negro Miersia chilensis var. bicolor Ercilla volubilis

Dentro de éstas destaca Miersia chilensis var. bicolor, taxon descrito recientemente por Muñoz (2003), y cuyas únicas poblaciones han sido reportadas solo para Laguna de Aculeo en la Región Metropolitana, y en la Región de Valparaíso, en quebrada El Cura. En nuestro estudio encontramos poblaciones circunscritas exclusivamente a la Quebrada El Pedernal, entre los 750 y 790 msnm (Anexo 3).

Miersia chilensis var. bicolor en quebrada El Pedernal. Hay que considerar que Miersia chilensis, al igual que Gilliesia graminea, también fue considerada en estado de conservación VULNERABLE en Benoit (1989). Situación corregida mas tarde en Ravenna et al (1998). Sin embargo no hay que olvidar que este taxon específico (M. chilensis var. bicolor), fue descubierto mucho después de los trabajos citados anteriormente. Si se considera el hecho de que el genero Miersia es endémico de Chile central y que se conocen solo tres poblaciones de esta variedad distribuidas ente las regiones Metropolitana y de Valparaíso, es evidente que nos

encontramos frente a un taxón extraordinariamente escaso y por lo tanto de mucho interés científico. Valor de Importancia: De la tabla fitosociológica inicial (Anexo 3), se obtuvo los valores de importancia de todas las especies de plantas vasculares de la comunidad, separadas por estratos (Tabla I) Tabla I: Especies mas importantes de los bosques de belloto, de la Cordillera El Melón, comuna de Nogales. ESTRATO ARBÓREO (hasta 20 m de alto) Frecuencia relativa

Cobertura relativa

Valor de Importancia

Beilschmiedia miersii (belloto del norte)

4.45

46.30

50.75

Cryptocarya alba (peumo)

3.48

25.87

29.35

Aextoxicon punctatum (olivillo)

1.16

12.37

13.53

Myrceugenia exsucca (pitra)

0.77

4.91

5.68

Crinodendron patagua (patagua)

0.38

4.87

5.25

Peumus boldus (boldo)

2.90

7.53

10.53

Cryptocarya alba (peumo)

2.32

6.86

9.18

Myrceugenia obtusa (arrayán)

2.32

3.59

5.91

ESTRATO HERBACEO (20 a 50 cm de alto). Loasa triloba (ortiga)

3.68

16.46

20.14

Adiantum chilense (palito negro)

4.84

14.58

19.42

* Alstroemeria sp.

3.87

5.92

9.79

Sanicula crassicaulis (pata de león)

3.10

1.64

4.74

Proustia pyrifolia (parrila blanca)

4.26

0.82

5.08

Dioscorea bryoniaefolia (camisilla)

2.71

0.52

3.23

Tropaeolum tricolor (soldadillo)

1.93

0.37

2.3

ESPECIE

ESTRATO ARBUSTIVO (2 a 8 m de alto)

TREPADORAS

* Alstroemeria sp. Corresponde a dos especies observadas en las quebradas: Alstroemeria ligtu y Alstroemeria pulchra var. máxima. Debido a que habitualmente durante el levantamiento de censos fitosociológicos se encontró solo las hojas, se nos hizo imposible discriminar cuando era una especie u otra en cada caso. De acuerdo a esto decidimos nombrarlas solo como Alstroemeria sp. Ejemplos de especies herbáceas importantes de los bosques de belloto del norte: Loasa triloba (ortiga) Alstroemeria pulchra var. máxima (mariposa delcampo)

Sanicula crassicaulis (pata de león)

Alstroemeria ligtu L. ssp. Simsii (flor del gallo)

La Tabla I muestra las 15 especies más importantes de los bosques higrófilos de la Cordillera El Melón, sector Nogales, separadas por estratos. Ninguna de ellas es introducida, lo cual que indica que si bien es cierto existen plantas introducidas en estos ecosistemas, aun estos bosques no han perdido totalmente su estructura florística original. La aplicación de las metodologías fitosociológicas nos permiten ponderar todas las especies de la comunidad en cuanto a cobertura y frecuencia, y no restringir el análisis a las especies leñosas solamente. Así podemos constatar que de las tres especies más importantes de estos bosques higrófilos; dos son leñosas: Beilschmiedia miersii y Cryptocarya alba, y la tercera es una herbácea: Loasa triloba. DINÁMICA DE REGENERACIÓN DE LOS BOSQUES DE BELLOTO: 1) Quebrada El Pedernal: La quebrada El pedernal se ubica en los 32º36’ S – 71º12’ O. Tiene una longitud de 3 Km con orientación oeste. Presenta un flujo de agua continuo y pendientes que oscilan entre 30 a 50º (Fig 4 y anexo 2). Es importante reiterar que estos muestreos se realizaron estrictamente por el fondo y a lo largo de las quebradas. En este caso, abarcando desde los 450 a 790 msnm. N

Figura 4. Quebrada El Pedernal. Cordillera El Melón, comuna de Nogales.

Tabla II. Tabla de rodal de los bosques de belloto del norte de la Quebrada El Pedernal. ESPECIE

Nº árb/ha

Beislchmedia miersii Cryptocarya alba Myrceugenia obtusa Schinus molle Aristotelia chilensis Aextoxicon punctatum Citronella mucronata Peumus boldus Senna stipulaceae Lithraea caustica

124 273 43 38 33 14 14 14 10 10

Densidad relativa 21.60 47.56 7.41 6.63 5.75 2.44 2.43 2.44 1.74 1.74

Dom. relativa 66.09 22.33 0.67 1.98 1.06 6.07 1.31 0.26 0.13 0.06

Frec. relativa 22.36 36.84 10.52 7.89 6.57 3.94 3.94 2.63 2.63 2.63

Valor de Importancia 110.05 106.73 18.53 16.5 13.38 12.45 7.68 5.33 4.5 4.43

Nº árboles/ha

Clases de diámetro (cm)

Figura 5. Clases de tamaño de los rodales de belloto del norte. Quebrada El Pedernal. Los bellotos se concentran en el fondo de las quebradas y en el tercio inferior de las laderas de exposición sur. Sin embargo, en la mayoría de los lugares, su ubicación estaba restringida absolutamente al fondo de quebrada, de tal modo que los bellotos no se encontraban mas allá de 30 metros del fondo de la quebrada. No encontramos

bellotos creciendo a media ladera. Esto es importante, pues no se puede extrapolar, las densidades de belloto encontradas en este trabajo, suponiendo que los bellotos ocupan la mitad de las laderas de exposición sur. En referencia a las especies leñosas, se observa claramente en la Tabla II, que las especies mas importantes son el Belloto y el Peumo. El Belloto por su dominancia dada por los elevados diámetros que alcanzan algunos individuos (Fig 5) y el Peumo, debido a su frecuencia y densidad (Tabla II). En la Figura 5, se observa la curva perfecta en j inversa que forma el Peumo, indicando que es la especie que se está autoperpetuando exitosamente en la comunidad. Por otra parte, el Belloto, si bien es cierto presenta una baja cantidad de individuos jóvenes, igual se constata ciertos niveles de regeneración. La Tabla III, muestra a las plántulas y brinzales, (individuos menores de 5 cm de DAP), en la que se observa la misma tendencia que en el gráfico de estructura diamétrica de los adultos. Es decir, el peumo presenta una cantidad considerablemente mayor de plántulas que el belloto.

Tabla III. Número de plántulas de las especies leñosas de Quebrada El Pedernal. Especie

Nº plántulas/100 m2

Criptocarya alba Beilschmedia miersii Lithraea caustica Schinus molle Azara celastrina Peumus boldus Myrceugenia obtusa Citronella mucronata Senna stipulacea

200 19 6 3 2 1 1 1 1

TOTAL

234

La mayoría de las plántulas de Belloto tenían sus hojas blanquecinas, lo que daba la impresión de que fueran hongos. Desafortunadamente no tomamos muestras de esto para su posterior análisis. Sólo un 16% de las plántulas de belloto se encontraron en sitios abiertos. La gran mayoría se encontró bajo dosel cerrado (sobre 70% de cobertura) o semiabierto (entre 50 y 70% de cobertura). Sin embargo en todos los casos, las plántulas estaban en el

fondo de la quebrada, en sitios con humedad permanente y varias creciendo entre rocas. Las plántulas de Peumo, se encontraron bajo dosel abierto, semiabierto y cerrado. En cuanto al sustrato, solo plántulas de Belloto y Peumo se encontraron creciendo en sustratos anegados.

2) Quebrada La Madera: la quebrada La Madera se ubica en los 32º36’S-71º10’ O. Tiene una longitud de 3,5 Km con orientación sur, sur oeste. Con un flujo de agua continuo y pendientes que oscilan entre 30 a 45º (Fig. 6). Sin embargo a los 680 msnm, había laderas rocosas con pendientes de 80º. Los puntos se tomaron en el fondo de la quebrada desde los 560 a 750 msnm (Anexo 2).

Figura 6. Quebrada La Madera. Cordillera El Melón, comuna de Nogales.

Tabla IV. Tabla de rodal de los bosques de belloto del norte de la Quebrada La Madera. ESPECIE Beischmiedia miersii Cryptocarya alba Peumus boldus Myrceugenia obtusa Crinodendron patagua Myrceugenia exsucca Citronella mucronata Quillaja saponaria Aextoxicon punctatum Schinuna molle Lithraea caustica Azara celastrina Aristotelia chilensis

Nº árb/ha Densidad relativa 150 30.89 122 25 46 9.49 40 8.29 23 4.69 23 4.69 23 4.69 17 3.49 11 2.29 11 2.29 5 1.09 5 1.09 5 1.09

Dom. Relativa 64.56 21.44 3.02 1.64 6.30 1.70 0.08 0.23 0.30 0.09 0.35 0.18 0.07

Frec. relativa 26.31 21.05 8.77 8.77 5.26 7.01 7.01 5.26 3.50 1.75 1.75 1.75 1.75

Valor de Importancia 121.76 67.49 21.28 18.7 16.25 13.4 11.78 8.98 6.09 4.13 3.19 3.02 2.91

Nº árboles/ha

Clases de diámetro (cm)

Figura 7. Clases de tamaño de los rodales de belloto de la Quebrada La Madera.

Tabla V. Número de plántulas de las especies leñosas de Quebrada La Madera. Especie

Nº plántulas/100 m2

Cryptocarya alba Lithraea caustica Crinodendron patagua Schinus molle Beilschmedia miersii Myrceugenia exsucca Aextoxicon punctatum Peumus boldus Myrceugenia obtusa Citronella mucronata Porlieria chilensis Quillaja saponaria Azara celastrina

140 28 20 9 8 8 8 7 5 3 3 2 1

TOTAL

242

En el gráfico de clases de tamaño (Fig. 7), muestra que hay tres especies regenerando; Peumo, Belloto y Boldo. De las cuales, el Peumo, al igual que en la quebrada El Pedernal, es la especie que presenta un número considerablemente mayor de individuos jóvenes, ya establecidos, como también plántulas (Tabla V). El 70% de las plántulas de Peumo se encontró regenerando en lugares cerrados y 30% restante en lugares semiabiertos. En cambio el 100% de las plántulas de Belloto, Patagua y Arrayán se encontraron exclusivamente bajo dosel cerrado. Y en el caso particular del belloto, siempre en agua, entre grandes rocas. Las plántulas de las otras especies se encontraron regenerando en un 50% en sitios semiabiertos y el otro 50% en sitios cerrados. La única plántula de Azara celastrina se encontró en un sitio semiabierto. 3) Quebrada El Infiernillo: Se ubica en los 32º42’S-71º04’ O. Es una quebrada con un lecho mucho mas amplio, abierto y profundo que todas las anteriores. Se orienta al oeste. Los puntos se tomaron entre los 730 y 880 msnm., siempre a orillas del curso de agua, en la ladera de exposición sur este y no en el fondo mismo como en los casos anteriores, debido a la profundidad, ancho y abundancia de caudal de la quebrada (Anexo 2).

Figura 8. Quebrada El Infiernillo (bien común Nº 2), Cordillera El Melón, comuna de Nogales. Tabla VI. Tabla de rodal de los bosques de belloto del norte de la Quebrada El Infiernillo (Bien común Nº 2 ) ESPECIE

Nº árb/ha

Beilschmiedia miersii Cryptocarya alba Peumus boldus Lithraea caustica Azara serrata Persea lingue Quillaja saponaria Azara celastrina Crinodendron patagua Adesmia arbórea Colliguay macho Aristotelia chilensis

149 267 134 79 39 47 24 16 8 8 8 8

Densidad relativa 18.95 33.95 17.04 10.04 4.96 5.97 3.05 2.03 1.01 1.01 1.01 1.01

Dom. Relativa 83.91 5.15 3.75 1.20 0.79 0.83 2.60 1.03 0.42 0.05 0.03 0.0

Frec. relativa 20.89 25.37 19.40 7.46 7.46 5.97 4.47 2.98 1.49 1.49 1.49 1.49

Valor de Importancia 123.75 64.47 40.19 18.7 13.21 12.77 10.12 6.04 2.92 2.55 2.53 2.53

Nº árboles/ha

Clases de diámetro (cm)

Figura 9. Clases de tamaño de los rodales de belloto de la Quebrada El infiernillo (Bien común Nº 2)

Tabla VII. Número de plántulas de las especies leñosas de Quebrada El Infiernillo. Especie

Nº plántulas/100 m2

Cryptocarya alba Beilschmedia miersii Porlieria chilensis Azara celastrina Peumus boldus Lithraea caustica Senna candoleana

20 10 10 4 4 2 1

TOTAL

51

Al igual que en los casos anteriores, el gráfico de clases de tamaño (Fig. 9), muestra que hay tres especies regenerando; Peumo, Boldo y Belloto. De las cuales, el Peumo, es evidentemente la mas exitosa, generando el mayor número de plántulas (Tabla VII) y autoperpetuando su población, estableciéndose exitosamente en el lugar como muestra la figura 9.

Mas del 60% de las plántulas de Peumo se encontraron en lugares semiabierto (50-70% cobertura), el 40% restante, dividido entre lugares cerrados (mas de 70% de cobertura) y sitios abiertos (menos de 50% de cobertura. En cambio mas del 85% de las plántulas de belloto se encontraron en sitios cerrados y semiabiertos. En el caso del guayacán, el 50% de las plántulas estaban en sitios abiertos, el 30% en lugares semiabiertos y solo el 20% restante en lugares cerrados. En cambio, no se encontró ninguna plántula de Boldo en lugares cerrados, por el contrario, en el 70% de los casos, estaban en lugares semiabiertos. Respecto del sustrato, tal como en las quebradas anteriores se repite el hecho de que el Belloto regenera principalmente en fondos húmedos y rocosos. Muchas de sus plántulas estaban en sitios anegados y bajo grandes rocas. En cambio, el Peumo y el Guayacán si bien en cierto en un bajo porcentaje también estaban en el fondo de la quebrada, prefieren sustratos mas secos y germinan entre la estrata herbácea de las laderas. El Boldo germina exclusivamente sobre la estrata herbácea de las laderas. Llama la atención que una especie como Porlieria chilensis (guayacán), típico de lugares secos y soleados, esté germinando en los fondos de quebrada. Si bien es cierto se constató la presencia de plántulas, inclusive mas del doble que las generadas por el Boldo, no se encontró ningún individuo joven en los sitios estudiados (Figura 9). Probablemente al aumentar la apertura del dosel en estos bosques, el Guayacán encuentre las condiciones necesarias de luz para establecerse definitivamente en estos lugares. Las siguientes son imágenes que muestran algunos aspectos de la regeneración observada en estas quebradas:

1) Semilla de Belloto germinando

2) Numerosas plántulas de Peumo en fondo de quebrada anegado.

3) Plántula de Belloto de 20 cm de alto, entre rocas del fondo de quebrada.

4) Plántula de belloto de 30 cm de alto, bajo dosel cerrado del fondo de quebrada.

Figura. 10. Detalle de Quebrada El Infiernillo. Si se observa la imagen que muestra la Fig. 10, se puede ver claramente, una quebrada con vegetación abundante, especialmente en los fondos de quebrada y ladera de exposición sur. Perfectamente uno puede pensar a priori, que el 50% de la vegetación de la ladera de exposición sur está cubierto por bosques esclerófilos y la otra mitad (inferior), por bosques higrófilos de fondo de quebrada. Sin embargo, esta idea es absolutamente errónea, ya que producto del trabajo de terreno, se pudo constatar que en todas las quebradas estudiadas, los bosques higrófilos propiamente tal, están circunscritos a una delgada franja en el fondo de las quebradas. Al realizar mediciones en todos los rodales estudiados, se observó que prácticamente no se encuentran Bellotos a mas de 30 o 40 metros del curso de agua. Además, de lo anterior, hay que agregar que en algunas de estas quebradas, por ejemplo en Quebrada El Pedernal, los bellotos no crecen en forma continua. En el Anexo 3 (Tabla fitosociológica) se puede observar que entre los 450 y 600 msnm, había sitios carentes absolutamente de bellotos. Esto indica que extrapolar datos a partir de imágenes satelitales, en las cuales uno puede ver un paño de vegetación continuo y suponer que se refiere a tal o cual formación vegetacional no es confiable. Además, observar el estado real en que se encuentra la vegetación que aparece como continua en la imagen, es muy interesante. Ya que al recorrer estos sitios, se comprobó en terreno que la vegetación esclerófila presente, se encuentra bastante degradada, matorralizada y con signos claros de la antigua explotación de estos bosques, para leña, carbón, etc. Además de la presión antrópica actual.

CONCLUSIONES  Beilschmiedia miersii (belloto del norte), se encuentra creciendo en La Cordillera El Melón, en poblaciones circunscritas exclusivamente a los fondos quebrada, en forma fragmentada a lo largo de estas.  Los fragmentos de bosques de belloto, están insertos en un mosaico de bosques esclerófilos, matorrales esclerófilos degradados, matorrales de quila, espinales (estepa de Acacia caven) y matorrales de suculentas y espinescentes.  Estos bosques alcanzan alturas de 20 m de alto, como máximo, con coberturas de copa que puede llegar al 90%. Presentan claramente tres estratos: arbóreo, arbustivo y herbáceo, además de varias lianas que los unen.  Los bosques de belloto del norte albergan 79 especies de plantas vasculares, de las cuales mas del 80% de especies son autóctonas (nativas y endémicas).  Estos bosques albergan además géneros y familias endémicas y monotípicas. Y cuatro especies en categoría de conservación VULNERABLE y dos especies con daos insuficientes para su clasificiación.  Las especies más importantes en los bosques de belloto, de acuerdo a frecuencia y cobertura son, en orden decreciente son: Beilschmiedia miersii (belloto del norte) Criptocarya alba (peumo) Loasa triloba (ortiga) Adiantum chilense (helecho palito negro) Aextoxicon punctatum (olivillo)  La presencia de Mirtáceas propias de bosques pantanosos: Blepharocalyx cruckshanksii (palo colorado), Myrceugenia exsucca (pitra), Luma chequén (arrayán blanco) y la abundancia de lianas, confirman el carácter higrófilo de estas comunidades.  Cryptocarya alba (peumo), propia de los bosques esclerófilos, es la especie que se está autorremplazando exitosamente en estos bosques.  La presencia de numerosas hierbas anuales introducidas, la presencia de plántulas de especies leñosas típicas de ambientes semiáridos como Porlieria chilensis y el éxito de Cryptocarya alba para autorreemplazarse en estos bosque higrófilos,

corroboran la aridización estas formaciones vegetacionales. fundamentalmente por la apertura de dosel.  La baja abundancia de individuos de belloto de clases dimétricas bajas y la escasa presencia de plántulas, sugiere la falta de regeneración de bellotos en los últimos años, posiblemente causado por: herbivoría, desecación, ataque de hongos, arrastre de la semilla por agua de lluvia en invierno.  Los bosques de belloto de la cordillera El Melón, Sector Nogales, si bien es cierto aun albergan un importante elenco de plantas autóctonas, y algunas de ellas en categorías de conservación, su permanencia en el futuro se ve seriamente amenaza de continuar actividades que alteran su frágil equilibrio. CONSIDERACIONES FINALES Aspectos florísticos: Es preciso mencionar que producto de las prospecciones iniciales, se encontró muchas otras especies que no están incluidas dentro del catálogo florístico de este informe, porque si bien es cierto, se encontraron creciendo en fondo de quebrada, estas no formaban parte de los bosques, lo cual era el objeto de este trabajo. Entre estas especies, podemos mencionar algunas de las que fueron colectadas en el mes de abril, en la Quebrada El Maqui (sector Garretón), a los 1.492 msnm (32º 40’S –71º 03’O). Sobre el límite de la vegetación boscosa, en lugares totalmente descubiertos de vegetación arbórea, pero en fondo de quebrada.

Ourisia sp. Esta herbácea probablemente sea una Ourisia, pero se necesita hacer nuevas colectas para proceder a su identificación definitiva.

Eccremocarpus scaber (chupa-chupa) ENDEMICA .

Mimulus luteus (berro) ENDEMICA Particularidades vegetacionales: Durante las prospecciones, sobre los 1.000 msnm, se observó una comunidad arbustiva de Adesmia rubrovirids que debiera ser estudiada en detalle más adelante, porque de acuerdo a Novoa, P (com. personal), esta especie no

habría sido citada antes para la V Región. Con lo cual no sólo es interesante desde el punto de vista vegetacional, sino también florístico. Otras comunidades interesantes para estudios posteriores, serían todas aquellas asociaciones presentes en la estepa alto andina, ubicadas en las planicies de altura que recorren todo el cordón montañoso de la Cordillera El Melón. Estas asociaciones no han sido estudiadas, desde el punto de vista fitosociológico, ni florístico, por lo que representan una gran oportunidad para aumentar el conocimiento de la biogeografía vegetacional de Chile y distribución fitogeográfica de muchas especies que quizás tienen sus límites norte y sur en esta región. Esto nos indica que queda mucho por investigar en cuanto a la biodiversidad de la Cordillera El Melón, al mismo tiempo, nos invita a seguir explorando y redescubriendo nuestro patrimonio fitogenético resguardado en este Sitio Prioritario para la Conservación de la Biodiversidad.

BIBLIOGRAFÍA CITADA BAEZA, M., E. BARRERA & J. FLORES. 1998. Categorías de conservación de Pteridophyta nativas de Chile. Boletín del Museo Nacional de Historia Natural 47:2346. BENOIT, I. 1989. Libro Rojo de la Flora Terrestre de Chile, Primera parte. CONAF. Santiago, Chile. 157 p. BRAUN BLANQUET J. 1979. Fitosociología. Bases para el estudio de las comunidades vegetales. H. Blume Ediciones. España. 820 pp. DONOSO, C. 1998. Bosques Templados de Chile y Argentina: variación, estructura y dinámica. 3ª Edición Universitaria. 485 pp. GAJARDO, R. 1994. La vegetación natural de Chile. Editorial Universitaria. Santiago, Chile. 165 p. HECHENLEITNER, P., M. GARDNER, P. THOMAS, C. ECHEVERRÍA, B. ESCOBAR, P. BROWNLESS & C. MARTÍNEZ. 2005. Plantas Amenazadas del Centro Sur de Chile. Distribución, Conservación y Propagación. Primera Edición. Universidad Austral de Chile y Real Jardín Botánico de Edimburgo. 188 pp. LUEBERT, F. y P. PLISCOFF. 2006. Sinopsis bioclimática y vegetacional de Chile. Editorial Universitaria, Santiago, Chile. 307p.

MARTICORENA, C. 1991. Contribución a la estadística de la flora vascular de Chile. Gayana Botánica 47: 85-113.

MARTICORENA, C. & M. QUEZADA. 1985. Catálogo de la flora vascular de Chile. Gayana Botánica 42: 1-157. MUNOZ-SCHICK, MÉLICA. 2003. Tres nuevas monocotiledoneas descubiertas en chile: Alstroemeria mollensis M. Muñoz et a. Brinck (alstroemeriaceae), Miersia chilensis var. bicolor M. Muñoz (gilliesiaceae) y calydorea chilensis M. Muñoz (iridaceae). Gayana Botánica (60) 2:101-106. ISSN 0717-6643. RAVENNA, P., S. TEILLIER, J. MACAYA, R. RODRÍGUEZ & O. ZÖLLNER. 1998. Categorías de conservación de las plantas bulbosas nativas de Chile. Boletín del Museo Nacional de Historia Natural 47:47-68. STEUBING, L., R. GODOY, M. ALBERDI. 2002. Métodos de Ecología Vegetal. Edición Editorial Universitaria. Valdivia, Chile. 345 pp. WIKUM, D., G. SHANHOLTZER. 1978. Application of the Braun-Blanquet coverabundance scale for vegetation analysis in land development studies. Environmental Management 2:323–329.

ANEXO Nº1: Catálogo florístico de la flora vascular de los bosques higrófilos presentes en la Cordillera El Melón, sitio prioritario para la conservación de la biodiversidad. El catálogo incluye la siguiente información para cada especie: Clase, Nombre científico, Familia, Nombre común (cuando tiene), Origen fitogeográfico (O.F.), Forma de vida (F.V.) y Estado de conservación (E.C.) CLASE / Nombre científico

Familia

Nombre común

O. F.

F.V.

E.C.

Equisetaceae

yerba del platero

N

Cr

---

Adiantaceae palito negro Adiantaceae Adiantaceae Blechnaceae Woodsiaceae Dennstaedtiaceae Thelypteridaceae

N E N N N N N

H H H H H H H

----------V ---

Euphorbiaceae Aextoxicaceae Asteraceae Apiaceae Elaeocarpaceae Flacourtiaceae Flacourtiaceae Asteraceae Lauraceae Myrtaceae Apiaceae Brassicaceae Solanaceae Euphorbiaceae Vitaceae Icacinaceae Elaeocarpaceae Lauraceae Asclepiadaceae Winteraceae Phytolaccaceae Escalloniaceae Euphorbiaceae Francoaceae Fumariaceae Rubiaceae Rubiaceae

E N N I N E E N E E E I N E N E E E E N E E I E I I N

F F F T F F F F F F T T F C Ftr F F F Ftr F Ftr F T H T T C

----------------V V ----------D.D. -----------------------

SPHENOPSIDA (equisetos) Equisetum bogotense Kunth

FILICOPSIDA (helechos verdaderos) Adiantum chilense Kaulf. Adiantum excisum Kunze Adiantum sulphureum Kaulf. Blechnum hastatum Kaulf. Cystopteris fragilis (L.) Bernh. Dennstaedtia glauca (Cav.) C.Chr. ex Looser Thelypteris argentina (Hieron.) Abbiatti

MAGNOLIOPSIDA (dicotiledóneas) Adenopeltis serrata (W.T.Aiton) I.M.Johnst. Aextoxicon punctatum Ruiz et Pav. Ageratina glechonophylla (Less.) R.M.King et H.Rob. Anthriscus caucalis M. Bieb. Aristotelia chilensis (Molina) Stuntz Azara celastrina D.Don Azara serrata Ruiz et Pav. Baccharis salicifolia (Ruiz et Pav.) Pers. Beilschmiedia miersii (Gay) Kosterm. Blepharocalyx cruckshanksii (Hook. et Arn.) Niedenzu Bowlesia uncinata Colla Capsella bursa-pastoris (L.) Medikus Cestrum parqui L’Her. Chiropetalum berteroanum Schltdl. Cissus striata Ruiz et Pav. Citronella mucronata (Ruiz et Pav.) D.Don Crinodendron patagua Molina Cryptocarya alba (Molina) Looser Diplolepis menziesii J.H.Schult. Drimys winteri J.R. et G. Forster Ercilla volubilis A.H.L.Juss Escallonia pulverulenta (Ruiz et Pav.) Pers. Euphorbia peplus L. Francoa appendiculata Cav. Fumaria agraria Lag. Galium aparine L. Galium suffruticosum Hook. et Arn.

colliguay macho olivillo barbón maqui lilen corcolén belloto del norte palo colorado barba de gato bolsita del pastor palqui pilpil voqui naranjillo patagua peumo canelo corontillo pichoga Llaupangue hierba de la culebra lengua de gato

Geranium berteroanum Colla Geranium core-core Steud. Geranium robertianum L. Lamiun amplexicaule L. Lardizabala biternata Ruiz et Pav. Lithrea caustica (Molina) Hook. et Arn. Loasa triloba Dombey ex Juss. Luma chequén (Molina) A.Gray Medicago arabica (L.) Hudson Muehlenbeckia hastulata (J.E. Sm.) Johnst. Myrceugenia exsucca (DC.) O.Berg Myrceugenia obtusa (DC.) O.Berg Osmorrhiza chilensis Hook et Arn. Oxalis rosea Jacq. Persea lingue (Miers ex Bertero) Nees Peumus boldus Molina Porlieria chilensis I.M.Johnst. Proustia pyrifolia DC. Raphithamnus spinosus (A.L. Juss.) Mold. Ribes punctatum Ruiz et Pav. Sanicula crassicaulis Poepp. ex DC. Schinus latifolius (Gillies ex Lindl.) Engler Senna candoleana (Vogel) Irw. et Barneby Senna stipulaceae (Aiton) Irw. et Barneby Sophora macrocarpa Sm. Stachys grandidentata Lindl. Stellaria chilensis Pedersen Stellaria media (L.) Vill. Torilis nodosa (L.) Gaertner Tropaeolum tricolor Sweet. Urtica dioica L. Vicia nigricans Hook. et Arn. Vicia magnifolia Clos

Geraniaceae Geraniaceae Geraniaceae Lamiaceae Lardizabalaceae Anacardiaceae Loasaceae Myrtaceae Fabaceae Polygonaceae Myrtaceae Myrtaceae Apiaceae Oxalidaceae Lauraceae Monimiaceae Zygophyllaceae Asteraceae Verbenaceae Saxifragaceae Apiaceae Anacardiaceae Caesalpiniaceae Caesalpiniaceae Fabaceae Lamiaceae Caryophylliaceae Caryophylliaceae Apiaceae Tropaeolaceae Urticaceae Fabaceae Fabaceae

core-core core-core core-core gallito coguilera litre ortiga brava arrayán blanco hualputra quilo pitra arrayán asta de cabra culle colorado lingue boldo guayacán parrilla blanca espino negro zarzaparrilla pata de león molle quebracho

Alstroemeriaceae Alstroemeriaceae Alstremeriaceae Poaceae Cyperaceae Dioscoraceae Gilliesiaceae Gilliesiaceae Liliaceae Iridaceae Alliaceae

flor del gallo mariposa del campo Mariposa del campo coligüe

mayú

quilloi-quilloi soldadillo ortiga caballuna arvejilla arvejilla

N N I I E E E E I N N E E E N E E E E N N E E E E E N I I E I N E

H H T T Ftr F T F T Ftr F F H T F F F Ftr F F H F F F F C T T T Crt T T T

----------------------------V --D.D. ---------------------------------

E E E E N E E E E E E

Cr Cr Cr F H Crt Cr Cr Cr Cr Cr

-----------------------

LILIOPSIDA (monocotiledóneas) Alstroemeria ligtu L. ssp. Simsii (Sprengel) Bayer Alstroemeria pulchra Sims var. maxima Phil. Alstroemeria pulchra Sims var pulchra Chusquea cumingii Nees Carex setifolia Kunze ex Kunth Dioscorea bryoniaefolia Poepp. Gilliesia graminea Lindl. Miersia chilensis var. bicolor M. Muñoz Pasithaea coerulea (Ruiz et Pav.) D.Don Solenomelus pedunculatus (Gillies ex Hook.) Hochr. Tristagma bibalve (Lindl.) Traub.

camisilla

pajarito maicillo

Origen fitogeográfico: Endémico (E), Nativo (N), Introducido (I) Forma de vida: Fanerófito: (F), Fanerófito trepador (Ftr) , Caméfito (C), Hemicriptófito (H), Criptófito (Cr), Criptófito trepador (Crt), Terófito (T) Estado de conservación: Vulnerable (V), Peligro de extinción (P.E.), Datos insuficientes (D.D.), No evaluado (---).

ANEXO Nº 2: IMÁGENES QUE MUESTRAN EL ASPECTO GENERAL DE LAS TRES QUEBRADAS DONDE SE LEVANTARON CENSOS DE REGENERACION.

Quebrada El Pedernal (bien común especial Nº1). Comuna de Nogales.

Quebrada La Madera (bien común especial Nº1). Comuna de Nogales.

Quebrada El Infiernillo (bien común especial Nº 2). Comuna de Nogales.

ANEXO Nº 3 Tabla fitosociológica inicial de los bosques higrófilos presentes en la Cordillera El Melón, sitio prioritario para la conservación de la biodiversidad.