el hombre y

sus obras

LA ETERNIDAD A TRAVÉS DE LOS ASTROS Hipótesis astronómica

por LOUIS-AUGUSTE BLANQUI traducción y nota preliminar de LISA BLOCK DE BEHAR

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Fotograffa de Louis-Auguste Blanqui. Fotógrafo: tmile Appert.

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ÍNDICE

siglo veintiuno editores, s .a. de c.v. CERRO DEL AGUA 248, DELEGACIÓN éoYOACÁN, 04310,

M~XICO, D.F.

NOTA PRELIMI NAR,

por LlSA BLOCK DE BEH AR

X lll

LA ETERNIDAD A TRAVÉS DE LOS ASTROS

3

l. El uni verso· El infinito

S

11. Lo indefinido

lli. Prodigiosas di stancias de las estre llas

7

IV. Constitución ñsica de los astros

9

V. Observaciones sob re la cosmogonía de Laplace.

15

Los cometas VI. Origen de los mundos

24

VII. Aná lisis y síntesis del universo

37

58

VIIT. Resumen

portada de pablo thiago rocca grabado: carceri d'invenzione de giova.nni baltista piranesi primera edk ión, 2000 ©siglo x.xi editores, s.a. de c.v. isbn 968-23-2230-8 derechos re~erva dos conforme a la ley impreso y hecho en méxico 1 printed and made in mexico

[vii]

A Jacqueline Chénieux-Gendron, a la lucidez poética de su visión literaria.

A Arturo Rodríguez Peixoto, a la precisa gracia de su sabiduría s.ilenciosa .

.

1

En esa celda circular, un hombre que se parece a mJ escribe en caracteres que no comprendo un largo poema sobre un h ombre que en otra celda circular escribe un poem a sobre un hombre que e n otra celda circular... El proceso no tiene fin y nadie podrá leer lo que los prisioneros escliben. JORGE LUIS BORGES

Al borde de las cosas que no comprendemos del todo, inventamos relatos fantásticos para aventurar hipótesis o para compartir con otros los vértigos de nuestra perplejidad . ADOLFO BIOY CASARES

La eternidad de las penas del infierno tal vez ha privado a la idea antigua del eterno retorno de su ángulo más terrible. Pone la eternidad de los tormentos e n el lugar que ocupaba la e ternidad de una revolución sideral. WAI..TER BENJAMlN

E n la actualidad, es responsabilidad legítima de los científicos, como lo fue dos mil trescientos a ños atrás, dar c uenta de la formación del s is tema solar y del conjunto de estrellas que form an la galaxia con el concurso fortuito de á tomos. Al preguntársele al mayor expositor de esta teoría, cómo pudo escribi r un inme nso libro sobre el sistema del mundo s in mencionar a su a utor, respondió, m uy lógicamente: "Je n'avais pas b esoin d e cette hypolhese-la." CH ARLES SANDERS PE IRCE

NOTA PRELIMINAR

I/ 1~ TEHN1T1~ PAR LES ASTRES HYI'OTHESE ASTTIONOMil}IJE

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I:~Col.t: - rH:· N ~D t: r.INI:

1872

Portada de la 1a. edición de L'éternité par les astres. Hyphotese astronomique, editada por Librairie Germer Bailliére, París, 1872.

En más de un sentido, La eternidad a través de los astros, publicado en París a principios de 1872, es un libro extraño. Escrito por Louis-Auguste Blanqui (1805-1881), un revolucionario que la historia registra por la audacia de sus conspiraciones y la perseverancia de su agitación política, el libro sorprende en virtud de la lucidez poética de una imaginación que habilita un itinerario inesperado, sideral y familiar a la vez: "Me refugio en los astros donde uno puede pasearse sin límites", le escribe a su hermana, en una carta dirigida desde la prisión, como haciendo referencia a un acogedor amparo estelar al que recurriera habitualmente. Su autor fue reconocido como el jefe natural de la Comuna y, más tarde, como "el mayor luchador del período que se extiende entre 1827 y 1881". 1 Baudelaire, que admiraba a Robespiene, veía en Blanqui, en su temple "ardiente y puro", la reencarnación de quien alentó Terror y Virtud. Mereció el aprecio de Karl Marx quien, a pesar de las marcadas discrepancias, no dejó de reconocer en Blanqui "la cabeza y el corazón del partido proletario de Francia". 2 Sus opositores veían en él al más peligroso de sus enemigos; quienes formaban con él filas y compartían afinidades ideológicas tampoco disimulaban las aprensiones que la resonancia de su clamorosa prédica sediciosa les suscitaba. Fue para Walter Benjamín "la voz de bronce [que] estremeció el siglo x rx". 3 En las anotaciones que adelantan su libro sobre Baudelaire, Benj&min se propone confrontarlos a ambos, a fin de despejar de una bu~­ na vez - son sus palabras-las brumas que ocultan las "ilJlminaciones" de quien suele recordarse según la vehemencia disconti1 André Mitry, Auguste Blanqui. Révolutionnaire trois fois condamné a mort (panfleto político publicado por la "Société Amis d e Blanqui" el 2 de febrero en su asamblea constitutiva), 8, avenue Mathurin Moreau. , París, 1951. 31 pp. 2 En una carta de Karl Marx dirigida al doctor Watteau el 10 de noviembre de 1861. 3 Walter Benjamín, "Theses d'histoire de la philosophie", en Poésie et Révolution, Paris, Denoel, 1971, p. 284.

xiv

NOTA PRELIMI NAR

GUSTAVE GEFFROY

L'ENFERMÉ ED/7101\" REI'V/J E7' AUGMENTJU> PMI I.'AU1"/JCII

P' ORTRA I T

1

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BLANQUI

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LES ~DITIONS G. CRES ET C'' :!1 1

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Portada del tomo 1de L'enfermé de Gustave Geffroy, editado por Les ~di tions G. Crés et Cie., París, 1926.

nua de sus partidruios: "Baudelaire se encuentra tan aislado en el mundo literario de s u época como Blanqui en el mundo de los conspiradores" .4 Interpret a, además, que la den-ota d e Blanqui significó la victoria de Baudelaire y de la pequeña burguesía. "El abismo" (Le gouffre), entre otros poemas de Baudelaire, replica su visión vertiginosa del infinito y d el s ilencio, el silencio de la prisión y del espacio insondable pero también el deseo y los sue-

NOTA PRELIMINAR

XV

ños de un terrorisla que en plena acción no dejaba de pensar. Blanqui ha sucumbido, Baudelaire h a alcanzado el éxito, y en el vaivén comparativo B enjamin encumbra al autor de La eternidad a través de los astros por sobre otros personajes de la época. Condenado por sus insurrecciones contra la monarqwa, temido por sus violentas acusaciones contra el clero, contra la burguesía, contra la francmasonería, perseguido como denodado organizador d e sociedades secretas, víctima de las calumnias de quienes fueron sus compañeros, Blanqui fue encarcelado más de veinte veces, deportado y tres veces sentenciado a muerte. Pasó más de treinta años de su vida encerrado en las prisiones más severas: en el Monte Saint-Michel, en la isla Belle-Íle-en-Mer, en el Fuerte de Taureau, donde fue sometido, a raíz de los acontecimientos de la Comuna de París, a las condiciones carcelarias más terribles sólo porque se sospechaba de que hubiera participado en las encarnizadas luchas de entonces. Durante circunstancias de continua disensión política y constante desasosiego social, concibe y escribe este libro extraño a su fervor político, a sus maniobras revolucionarias, donde asombra que no se insinúen ni los excesos de su ánimo combativo ni la adversidad de la condena ni las penurias de la prisión. Desde el interior más reducido de la celda, su escritura le habilita la entrada a otros mundos a los que accede por una imaginación en fuga hacia espacios insonm-os y tiempos repetidos. Contemporáneo del flé/.neur que demora su ocio en las calles de París, Blanqui se complace en d eambular por el espacio infini to más allá de las incertidumbres, de las conLinge ncias que prevé a dis tancia, comprometido con su tiempo pero escribiendo al margen de la historia y d e sus estrépitos, de las acciones en sordecedoras que él mismo provocaba desde la p enumbra de calabozos cada vez más sólidos y sórdidos. La notable biografía que le dedica Gus tave Geffroy lo presenta como "el encerrado" (L'enfenné),S un título que podría haber sido la inscrip ción emblemálica d e su divisa. Los desvelos del biógrafo abarcan en dos volúmenes las vicisitudes de su lucha, las tribulaciones d e una época en la que no escasearon las aflicciones d e su sacrificio brulal, el rescale doctrinario y visionario,

4

Waltcr Benjamín, París, capitule du x1xe siec/e. Le livre des passages, edición original e intmducción d e Rolf Tiedemann, París, Les Éditions du Cerf, 1989, p. 384.

5

Gustave Geffroy, L'enfermé (2 vols .), Paris, Les Éditions G. Crés et Cie., 21,

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