MARIA ROSA MIRANDA

“EL ALMA VUELVE A CASA”

  ENTREGA XVII: LA MENTE Y SU RELACIÓN CON LA MATERIA Desde que tenemos recuerdo, siempre hemos dudado sobre lo que era la Mente, el Espíritu, e incluso los pensamientos. Hemos llegado a creer que no podíamos acceder a una comprensión completa y fácil de su funcionamiento ¿Era algo que pertenecía a lo físico? ¿Tal vez a lo abstracto? ¿Qué definición podíamos darle, para que complaciera nuestras dudas? Algo tal vez incorpóreo que nacía de alguna conexión… Nada nos ha satisfecho, hasta en la actualidad… que algunas definiciones cobran algo de sentido y al menos el hombre, nuestro intelecto, compuesto por la mente… puede interpretarlo… Lo que si os garantizo es que es algo sencillo su funcionamiento. Que solo entender al estilo de nuestros ancestros, lo que es la mente, resulta mucho más evidente que las definiciones tan abstractas que nos han hecho estudiar, sin comprenderlas… Tal vez si tratamos el tema desde la sencillez, podamos encontrarle mucho más sentido del que hasta ahora hemos reunido en todo lo que hemos intentado, porque el Universo nunca crea nada que no se pueda comprender con el conocimiento del mismo. Solo crea cuestiones que nacen de la propia Mente Universal, de la que somos extensiones, aunque muy densificadas. Cuando nos planteamos avanzar en el camino, aparte de entender lo que hemos visto hasta ahora sobre cómo funciona el Universo, porque no sabríamos llegar a un sitio si no conociéramos las carreteras que hay, debemos saber que somos mentales. El Universo es mental y eso quiere decir que todo lo que nosotros pensamos, creamos a través de la mente, es una energía directa con la Fuente. Nunca muere, es la Voluntad. Por eso se dice que el Universo es mental, porque la propia Fuente lo es. La primera energía es la mental. Si entendemos lo que significa el proceso de la mente en toda su trayectoria, somos capaces también de entender hasta qué punto es importante en nuestra vida. Por ejemplo, la mente en su Dualidad es pura. La mente tiene el poder de: -

Estar en un lado o en otro. De ser conocimiento y mover la Energía, o no hacer nada. De estar en un estado muy positivo o muy negativo. De elegir qué es y en qué se quiere convertir.

Cuanto más se cristalizan los pensamientos, si son positivos la Vibración cada vez es más elevada, pero si son negativos llega un momento en que, esa energía mental, al cristalizarse, genera materia densa. Y ¿Qué ocurre? Que una idea que era puramente Energía sin ningún calificativo, la vamos densificando hasta que entra en la materia y se realiza. Con lo cual, la mente es la máquina que gestiona todas nuestras realidades. 1

Hay muchas formas de hablar de la mente, pero a mí me gusta esta porque es muy sencilla: Nosotros creamos la realidad que hay a nuestro alrededor, en función de la mente que utilizamos. Si nos levantamos con dudas, con falta de confianza, sintiendo miedos… Entonces voy a crear a mi alrededor un estado similar, con sentimientos negativos, por lo que voy a atraer todo eso a mí. Por tanto lo que siento crecerá y se materializará y terminaré sintiendo todo lo que no debo sentir. Si por el contrario, cuando entran estos pensamientos negativos, que no son más que esas fuerzas de las que hemos hablado, intentando hacer su labor, su trabajo, que es evitar nuestra Evolución, yo voy transformando mi mente eligiendo pensar bien, crear bien, elijo lo correcto y automáticamente eso va a traer a mi vida todas las cosas que yo estoy pensando. Este es el mayor problema que tiene la Humanidad ahora en su Dualidad. Si somos capaces de entenderlo, deducimos que es un mecanismo de esas fuerzas (nuestras partes más densas), que en todo momento están intentando que no avancemos. En cuanto tengamos esas grietas, entrarán para conseguir sus objetivos. No hay que pensar que en el Universo está la luz y la oscuridad, lo que debemos pensar es que hay dos fuerzas que conjuntamente potencian el que nosotros avancemos con un trabajo, porque si no hubiera una, la otra no podría existir. Digamos que la mente es el motor con el que ellas gestionan. En cualquier momento en que esa mente esté en un estado no muy positivo, como de duda, confusión, las fuerzas que tratan de que no avancemos, toman esa grieta y se apoderan de la situación. Todo es Energía, pero una potencia la luz para que avancemos y otra intentará que no lo hagamos y ahí es donde nosotros tenemos que saber elegir. Porque si decidimos que esa fuerza no es lo que queremos, evidentemente no tiene nada que hacer. Una Energía del Universo Superior siempre puede a una inferior y la luz siempre será superior porque tiene implícita a la oscuridad, solo que la oscuridad es la ausencia de la luz. Queda claro que la mente es la que favorece la elección para que estemos en un lado o en otro; es la que favorece el libre albedrío para que elijamos dónde queremos estar. Si en un estado de calma, paz y seguridad o bien en un estado de caos, miedo y conflictos. La mente es Divina, por eso cuando las personas dicen que deben matar al ego. Yo siempre digo que no hay que matarlo, porque al ego lo que utiliza la mente para hacer lo que yo ahora estoy haciendo. Mi mente se expresa a través del ego y ella me permite hacer y escribir todo lo que mi Alma quiere expresar. Os recuerdo que la mente tiene 3 niveles: El yo básico o yo consciente; el yo subconsciente y el yo supra consciente. Si al yo básico le quitamos la mente subconsciente y el supra consciente, se quedará sin información, sólo está el ego, 2

el que habla, el que dice voy a hacer esto, pero no podrá decir ni manifestar nada, porque el ego sin las demás mentes no tiene datos para gestionar. Todo lo que el ego muestra, lo hace desde el conocimiento registrado de la mente subconsciente. Cuando decido y digo, voy a trabajar mis memorias, ya estoy en una mente más elevada y acude al subconsciente para que le muestre cuáles son las más importantes y ahí entro en una relación con mi mente subconsciente. Pero resulta que esa mente subconsciente tampoco tiene acceso a la Divinidad. El único acceso es la supra consciente que es la que permite que podamos transmutar las memorias. Si no lo autoriza la Divinidad, la supra consciente en este caso, la mente subconsciente lo único que ha hecho ha sido sacar las memorias, porque es como si fuera el disco duro de un ordenador. Si el yo básico no tiene esa mente subconsciente, no puede avanzar. Lógicamente, debemos saber que hemos de usar las tres para poder dirigir la mente. De lo contrario, estaremos usando nuestro potencial de forma indebida. Si trabajas con el yo básico, no tienes datos. Yo os hablo ahora a través de mi mente básica, pero estoy accediendo a mi subconsciente y al supra consciente, mi Divinidad Espiritual. Entonces la mente que está conectada es la que va a la velocidad de la luz. Claro ahí hay que tener una conexión a través de la Dualidad Espiritual ¿Y qué ocurre? Que nosotros no utilizamos esa mente con todo su potencial. Hasta ahora sólo se conocía de la mente, el ego, el apego… Se hablaba de una forma muy superficial, porque lo más importante era calmarla y eso está bien porque vivíamos a una velocidad por encima de nuestras posibilidades. Pero ahora no es cuestión de velocidad, es cuestión de Conocimiento. Tenemos que saber que yo puedo hablaros desde el no me importa nada, no sé nada o te puedo hablar desde el voy a tratar de comprender esto, que es desde el subconsciente, o voy a pedir a mi mente supra consciente, a mi Divinidad, que me ayude a comprender lo que quiero hablar y estoy utilizando las tres mentes. Cuando elijo mal en esa actuación, voy cristalizando los pensamientos que voy teniendo y en esa cristalización ¿Qué ocurre? Que se convierten en materia. Por ejemplo: Supongamos que una persona tiene unos sentimientos de enfado continuos, está en cólera, rencor, resentimiento… Y no lo está cambiando y cada vez que entra en ellos, las emociones siguen manejándose con el mismo ímpetu e intensidad con que están acostumbradas a hacerlo. Llegará un momento en que la densidad será tan profunda que se cristaliza y ¿Dónde lo hace? En el cuerpo físico y esas emociones, por lo general, en el hígado, con lo que habrá problemas físicos de desequilibrio en él. Cuando entra una idea, lo hace por todo el campo energético hasta que se manifiesta y la mente la exterioriza con un pensamiento y al tomar consciencia de ella, generamos la emoción y ahí entra la conexión. Esa emoción ya está viva, la manifestamos. Por eso cuando nosotros manifestamos tantos pensamientos negativos (porque los positivos no hacen daño, alimentan al Universo), llega un momento en que la propia Mecánica del Universo hace que ese pensamiento que ha conectado con el núcleo que alimenta los pensamientos de la misma calidad y 3

categoría, por Ley, empieza a densificarse y termina por convertirse en materia, que es el cuerpo físico. Por eso os digo que sin cuerpo físico no podemos experimentar. Y ahí se manifiesta la enfermedad y luego trataremos de cambiarla. En la actualidad, todavía deseamos cambiarla desde la medicina que, se supone, debe protegernos, sin embargo cada día son más las personas que intentan vías más naturales y que acudan a la causa de la enfermedad y no a los síntomas que esta conlleva y así poder superar la posible cronificación. Ahora que entendemos toda esta Mecánica, veremos a la medicina como un parche, porque si el origen sigue estando ahí, lógicamente pasado mañana volverá a activarse. Es la Medicina del Alma la que debe actuar, sanar al Alma, nos traerá la curación del cuerpo. Pero si nosotros entendemos que somos parte de la memoria colectiva que lo está alimentando y decidimos no prestarnos más y, cómo no, comenzamos a trabajar la nuestra, la memoria personal, lógicamente nos hallaremos en una situación de PODER. ¿Qué factores entrarán para que esa cristalización se subsane y se cure? Pues, entre otros, la propia Evolución del Alma, la Ley de Causa-Efecto… O sea que si esa persona debe vivir esa experiencia, posiblemente no curará, porque la enfermedad es una transformación dentro de nuestra sutilidad; si es una experiencia a vivir para su propia evolución, obviamente tampoco va a poder curarla. Pero normalmente la enfermedad se manifiesta porque hay una llamada del Universo para poder re-equilibrar otra vez. Y no nos tiene que importar el resultado, sino que por naturaleza cósmica debemos entrar a equilibrar continuamente. Cada vez la mente tiene más trabajo, nuestra parte densa no quiere que el Alma coja el control y es Ella la que tiene que llevarlo. El Alma, para ser Ella, tiene que utilizar la mente y todas las herramientas físicas que tenemos. Pero en nosotros hay una Dualidad, porque el ego ha tomado las riendas de la Vida. El Alma no muestra su importancia, apenas sabe que debemos llevar a cabo ese trabajo. Debe recordar por su parte quién es y de que está compuesta, con lo cual cuando intenta dar un paso hacia delante, nuestra parte densa lo desmonta, porque está perdiendo el control. Y ahí no hay excepciones. Solo será exitoso el papel del Alma, cuando ésta consiga recordar que sólo Ella, exclusivamente Ella, está destinada a evolucionar. Cuando recuerde que todo lo que la domina, son precisamente sus herramientas y los vehículos que ha traído para avanzar. Cada vez estamos más sutiles, más cerca de nuestra Espiritualidad total ¿Y cuál es el objetivo? Que la densidad se integre en la otra parte y siga siendo sencillamente una Dualidad energética, Espíritu y Materia, sin perjudicarse una a la otra y a esto no está acostumbrada. ¿Cómo integrar la densidad? Reconociendo que el miedo que sentimos nace de que somos dos fuerzas y que una tiene que luchar por mantener su sitio, mientras que la otra permanece ahí, porque es la Totalidad. Ante esto, tengo dos formas de actuación: O lucho como hace la densidad o no lucho como hace la Luz y sencillamente acepto que es mi parte densa, no le doy el protagonismo y paso por encima. Una vez más el Conocimiento nos hace entender esto. 4

Si en la Humanidad aplicáramos la filosofía Huna, sería una energía que se iría extendiendo, en la solución de los problemas de la Globalidad. El lema de “Un problema, una Humanidad” marca una Unificación, que pone de manifiesto que todo lo que ocurra en la Humanidad, es problema de todos. La Consciencia Grupal no es que se reúna una serie de personas para vivir en convivencia, es la reunión de varias personas para adquirir Conocimiento y ponerlo en práctica. Y ahí debemos pensar con el corazón, porque se supone que en él está la minúscula partícula, que nos tiene en Conexión Divina. Entonces quiere decir: Ø Ø Ø Ø Ø

“Piensa con tu Mente Divina”, “Piensa como Divinidad”, “Como Ser Cósmico”, “Como Mente Multidimensional que eres”, “Como una Deidad que eres”.

“PERO SOBRE TODO SÉ PENSADOR, NO DEJES QUE LA MENTE TE CONVIERTA EN PENSAMIENTO” María Rosa Miranda

5