Año VII

marzo 2002 No. 88

Comida del 15 de enero de 2013 ingresar al IFAI hace seis meses y la novela tiene siete meses), porque lo que yo retrato en ella es lo abrumadoramente oscuro que es nuestro sistema de justicia penal, en el que todo puede pasar. Hoy día tenemos un sistema penal absolutamente medieval. Estaba leyendo la entrevista que le hacen a Rodolfo de la Guardia. Él era el director de Interpol México, de pronto alguien dijo “el señor es socio de los narcos”, el MP lo consignó y el juez le dictó sentencia; estuvo cuatro años en prisión. Yo no lo conozco ni sé si es un pillo detenible, lo que me asusta es que por el solo dicho de alguien el señor estuvo cuatro años en prisión. A usted yo lo puedo acusar y decir “el señor es socio de un narcotraficante” y el juez dice “sí”. ¿Quién lo acusa? No le podemos decir. ¿Qué pruebas presenta? Tampoco le podemos decir. ¿Qué evidencias? No le podemos decir, y se va a prisión 20 años. Eso está sucediendo en México en esta época, vivimos el sistema medieval más espeluznante que puedan imaginar.

Gerardo Laveaga

Para el Club de Editores, un refugio en el trajín de la Ciudad de México y un oasis en el mundo del debate intelectual, con el aprecio enorme de su amigo.

En la comida de enero nuestro presidente, el ingeniero José Luis Rosas Rivero, dio la bienvenida a otro hijo pródigo que ha vuelto a su casa, Porfirio Romo, que es un hombre de libros. El invitado especial en esta ocasión, el licenciado Gerardo Laveaga, catedrático y autor de varios libros, dirigió estas palabras a los asistentes. En la novela Justicia reúno mis dos vocaciones más importantes, mi vocación como abogado y mi vocación como escritor. Cuando estoy ante el espejo me veo como las dos cosas. En algún momento de mi vida tuve la duda, ¿soy novelista o soy abogado? Hoy creo que soy ambas cosas y en esta novela, reúno precisamente mis dos vocaciones. No soy un abogado muy conservador, soy más bien liberal, muy crítico con el sistema y creo que eso lo plasmo en las páginas de Justicia. Actualmente soy comisionado del IFAI y también podría decir que en esta novela se reúne esta inquietud (la publiqué antes de

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Asistentes a la comida del 15 de enero de 2013

Editorial Santillana, S.A. de C.V. Juan Carlos Valdivia

CANIEM Victórico Albores

Elof Hansson de México, S. de R.L. de C.V. José Luis Rosas Rivero

Cellmark Paper, S.A. de C.V. Juan Manuel Olvera Cengage Learning Editores, S.A. de C.V. Raúl Zendejas Comercializadora Copamex, S.A. de C.V. Gonzalo Ramos Guillén Comvecap, S.A. de C.V. SOFOM ENR Jaime Martí Daniela Orozco Ediciones Culturales Internacionales, S.A. de C.V. Mireya Cuentas Montejo Edimpro José Ignacio Echeverría

Fuentes Impresores, S.A. Javier Fuentes E. Grupo Papelero Scribe, S.A. de C.V. Marco Antonio Landa Impresora y Encuadernadora Progreso, S.A. de C.V. Javier Germán Castilla García T. Gabriel Rubio Miranda Servando Rodríguez Medrano Independiente Martín Guerrero Vicente Serradilla Oscar González Inmobiliaria Acribia, S.A. de C.V. Agustín Mateos Gay

Editorial Lectorum, S.A. de C.V. Porfirio Romo L.

Interjet José Luis Ramírez Cota Diana Ramírez Magnani Ángel Junquera José Luis Ramírez Magnani Invitada Sra. Bárbara de Laveaga Masari Casa de Bolsa, S.A. Ramón Sordo Porrúa

Procesos y Acabados en Artes Gráficas, S.A. de C.V. Jorge Flores Suari Francisco Flores Suari Ríos de Tinta, S.A. de C.V. Jorge Velasco y Félix Santillana Ediciones Generales, S.A. Carlos Ramírez V.

MC Iniciativa Gráfica, S.A. de C.V. Lourdes Favela Gavia

Servicios Papeleros Vela, S.A. de C.V. Carlos Landero José Armando Vértiz

Office Club, S.A. de C.V. Omar Alvarado

Star Paper de México, S.A. de C.V. Gustavo De Gortari Sánchez

Offset Universal, S.A. Rodrigo Castellanos

Stora Enso Guillaume Le Jeune

Papel, S.A. de C.V. José Sánchez Lizardi

Vergara y Riba Editoras, S.A. de C.V. Federico Catalano

Papelerías Lozano Hnos., S.A. de C.V. Juan José Lozano Rodrigo Lozano

Hoy hay cinco generales en prisión. No sé si son inocentes o culpables, pero me parece temible imaginar que porque un testigo protegido, que no es sino un delator anónimo, dijo “el señor es socio de los narcotraficantes”, y se condena a estos cinco generales a muchos años en la cárcel; yo creo que es un ajuste de cuentas. La pregunta es ésta: ¿puede México transitar y presentarse como un país moderno, como un Estado democrático de derecho, cuando ocurre esto en 2012 y 2013? ¿Puede México presentar esto ante el mundo? Y de esto trata justamente mi novela. Justicia es una desilusión personal de nuestro sistema penal. Durante 10 años fui director general del Instituto Nacional de Ciencias Penales; hicimos muchas reformas constitucionales, de leyes, de reglamentos, de políticas públicas, y hoy presento Justicia con una profunda sensación de desilusión y desencanto. Justicia trata de cómo el sistema opera de manera absolutamente oscura y todo puede ocurrir; el inocente puede acabar en prisión, como ocurre aquí, y el culpable puede quedar libre, es lo que he vivido. Justicia, la novela, comienza cuando una joven aparece en la Alameda de Santa María. Le han torcido el cuello, le doblaron la cabeza y le rompieron las vértebras cervicales. El momento en que aparece la convierte en importante; ella pertenece a la clase media, no tiene ninguna relevancia, pero aparece justo cuando el Jefe de Gobierno del Distrito Federal está pronunciando un discurso. Alguien da un alarido, señalan a la niña con uniforme de secundaria, todas las cámaras que atendían al Jefe de Gobierno se distraen para señalar a la joven. El Jefe de Gobierno promete que resolverá el asunto en tres días y se lo encarga a su procurador. 2

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El procurador del Distrito Federal es un académico serio que ha estudiado en Alemania y España, es un hombre con gran visión académica, pero no tiene la más remota idea de cómo esclarecer un crimen de esta naturaleza. Se siente desolado porque además ha tenido una experiencia muy desagradable en una discoteca en que se le murieron personas, hay un operativo de derechos humanos. Siente que es el fin de su carrera, pero el subprocurador, un hombre avezado en estas leyes, le dice que él se encargará de encontrar al responsable, aunque no haya pista alguna.

El subprocurador va al reclusorio y encuentra a un enfermero que ya estaba condenado a 40 años porque envenenó a su madre. Le dice “Amigo, vengo a hacerle el trato de su vida, vamos a darle 20 años de prisión, a pesar de su primera sentencia y amparo. Si usted sale hoy en la noche a los medios de comunicación y dice que usted le torció el cuello a la niña de la Alameda, usted va a tener 20 años”. Entonces, el enfermero que tiene casi 40 años de edad y una condena de 40, va salir a los 80; y si hace este trato, se ahorrará 20 y si se porta bien, como dijo el procurador, se ahorrará 10 con los beneficios que otorga el sistema penitenciario y saldría, en vez de los 80, a los 50, acepta. Esa noche este enfermero sale a los medios y dice “en efecto, yo maté a la niña de la Alameda”. Aunque ella tenía 14 años y él, 30, dice que lo engañaba y por eso le torció el pescuezo y le puso “puta” con lápiz labial.

Gran logro del procurador, se cubre de gloria; en menos de tres días tiene preso al responsable de este horripilante asesinato. El problema es que la mejor amiga de la niña muerta, una de las protagonistas de la novela, sabe perfectamente que ese sujeto no mató a su amiga, ella sabe quién y por qué la mató. Decide hacer justicia y se lanza a la policía, a la procuraduría; no le hacen el menor caso, le dicen que el asunto está cerrado. Teclea en un café Internet, ve Suprema Corte de Justicia, piensa que ahí resolverán el tema. En la corte conoce a la otra protagonista de la novela que se llama Emilia, estudiante de la Libre de Derecho, escuela donde yo mismo estudié. Emilia se siente un poco descorazonada con el derecho, siente que está aprendiendo un montón de tonteras y sí, en la Libre de Derecho yo aprendí las 18 formas de manumitir esclavos, algo absolutamente inútil. Eso aprenden hoy los abogados en una de las escuelas importantes de México. Me engolosino criticando a mi alma mater, porque Emilia estudia derecho y se pregunta para qué diablos sirve todo esto y hacia dónde va; esa es la tragedia de Emilia. Quería criticar a las escuelas de derecho y creo que lo consigo en alguna medida. Emilia trabaja en la corte porque un tío suyo es ministro, y trabaja en la ponencia de otro ministro que está enamorado de ella. Llega la chiquita amiga de la muerta y le pide ayuda. Cuando Emilia escucha la historia que le cuenta y se da cuenta de que está preso un inocente, un pagador, como les dicen, y el verdadero asesino está libre, decide tomar el caso de manera directa. Le pide a su jefe que la ayude a sacar el asunto, aunque éste le contesta que éste no les toca a ellos. Emilia entra en una vorágine pavorosa y terrible en su afán de ayudar a la chiquita y poco a poco se da cuenta con pavor de que, a pesar de que ella es sobrina de un ministro y trabaja con otro ministro en la corte, a pesar de que está vinculada con el secretario de Seguridad Pública y con importantes senadores, esto es una masa amorfa compulsiva y asfixiante que va a acabar con el inocente en prisión y con el responsable del delito, libre. Quise criticar un poco la ley porque la peor forma de corrupción son las malas leyes y hay una escena en que van a ver al secretario de Seguridad Pública, quien por cierto odia al procurador del Distrito Federal y cuando se entera de la fechoría que hizo éste, dice “aquí lo tenemos listo para meterlo al tanque”. De pronto detienen al responsable real del crimen y hay dos asesinos confesos. Suena gaceta noticlub editores

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al caso de Alejandro Martí, en el que hay dos güeras presas, una en el ámbito local y otra en el ámbito federal. Cuando van a ver al secretario de Seguridad Pública la adolescente Rosario se sienta en el coche de Emilia, toma un libro titulado Agenda Fiscal con casos prácticos, lo abre donde una etiqueta de plástico marca la hoja y lee: “el ajuste por inflación se determinará multiplicando el saldo promedio diario de la inversión que generen los intereses por el factor que se obtenga de restar la unidad del cociente que resulte de dividir el índice nacional de precios al consumidor del mes más reciente del periodo de la inversión entre el citado índice correspondiente del primer mes del periodo”. A la pregunta de Rosario, Emilia contesta que es un libro de leyes, sobre la ley del impuesto sobre la renta, y a sus 14 años Rosario comenta que tiene que ser muy inteligente para entenderlo. Emilia responde que no le entiende muy bien, que el hecho de que estudie derecho no quiere decir que entienda todas las leyes; uno estudia derecho para explicarle a los clientes qué significan las leyes así que, cuanto más enredadas sean éstas, más clientes tendrás y más te van a pagar para que tú aclares qué quieren decir. En verdad, tenemos un marco jurídico asfixiante, tenemos leyes que no se entienden, que se contradicen, que aquí dicen una cosa y allá dicen otra y esto no es una buena señal para México, esto no hace confiable a nuestro país. Piensen, por ejemplo, en lo que se está debatiendo en la corte hoy, el fuero militar. La Constitución es clarísima, dice que no subsiste el fuero militar cuando hay un paisano, un civil, involucrado. La Constitución es contundente, pero luego el código de justicia militar dice bueno, pero lo que hay que entender es que cuando un militar está en funciones o está cumpliendo su deber, el artículo constitucional no aplica. Caramba, ¿la ley modifica la Constitución? ¿No es muy clara la Constitución? Pues resulta que no, hay una ley que dice lo contrario. Tenemos muchas leyes complejas, absurdas, ininteligibles en muchos casos, y parece que eso está diseñado para que así funcione el país, para que unos pocos puedan salirse con la suya y unos no lo logren. Una institución tan generosa, tan amable como debiera ser el amparo, sólo es un instrumento para que los que pueden pagar un abogado se salgan con la suya y los que no pueden pagarlo no lo hagan. Si de repente ponen un nuevo impuesto del 20% a quien genere más de, digamos, 100 mil pesos al año, y tú que generas más que eso, tienes abogados, te amparas. Yo estoy en las mismas circunstancias pero no conozco abogados ni me amparo oportunamente. Entonces, yo sí tengo que pagar el impuesto y tú no; para mí esa ley es constitucional, pero para ti que te amparaste es inconstitucional. ¿Con ese tipo de leyes pretendemos ser un país moderno, un Estado de derecho donde las leyes son inconstitucionales para unos y constitucionales para otros? Bueno, de esto hablo un poco en Justicia. He criticado a los senadores, los diputados, las escuelas de derecho, los despachos de abogados, bien sea corporativos o fiscalistas, he criticado a los jueces y a los agentes del MP. Esto es un poco Justicia; al final la protagonista se da cuenta de que no puede luchar ella sola contra un mundo diseñado para que el más fuerte se salga con la suya porque así está diseñado el país, así está diseñado el sistema penal, nuestro sistema constitucional. 4

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Panorámica de la comida del 15 de enero de 2013

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Agradecimientos Presidente

José Luis Rosas Rivero

Vicepresidente

Javier Fuentes Echevarría

Tesorero

Gustavo de Gortari Sánchez

Vicetesorero

Omar Alvarado Díaz

Secretaria

Mireya Cuentas Montejo

Vicesecretario

Rodrigo Castellanos Fajardo

Vocales

Juan Arzoz Arbide



José Calafell Salgado



Joaquín Díez-Canedo Flores



Gustavo González Lewis



José Sánchez Lizardi



Amparo Vega Arenal

Pepe Sánchez y Papel, S.A. con generosidad obsequiaron un libro, una litografía y un fantástico calendario a los asistentes a la comida. Gracias. Asimismo, a Editorial Santillana, concretamente a Alfaguara, por el ejemplar de Justicia, libro de nuestro expositor, el cual se obsequió a los asistentes.

Calendario de comidas 2013 Agosto 13 Septiembre 10 Octubre 8 Noviembre Cena/Baile 8 Diciembre 10

Febrero 12 Marzo 12 Abril 16 Mayo 14 Junio 11 Julio 9

Ésta es una publicación del Club de Editores, A.C.

Visita guiada al Munal (Museo Nacional de Arte) El sábado 12 de enero el Club realizó una visita al Museo Nacional de Arte, con la guía de María Eugenia Lara Rangel, historiadora egresada de la UNAM, con maestría en historia en la Universi-

dad de Oxford, y doctorado en Historia de México por el Colegio de México. Inmediatamente después se llevó a cabo una agradable comida en el restaurante Los Girasoles.

Cumpleaños de nuestros socios Febrero 2 Victórico Albores Santiago 3 Gonzalo Ramos Guillén 4 Ignacio Uribe Ferrari 6 José Luis Rosas Rivero 7 Juan Calafell Badía 13 José Carlos Dosal Montero 18 Gian Carlo Corte Truffello 23 Jaime Martí 27 José Leonel Pérez Cervantes

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