BOLETIN INFORMATIVO NUM de setiembre de 2010

BOLETIN INFORMATIVO NUM. 25 – 9 de setiembre de 2010 Espero y deseo que todos hayamos pasado un feliz verano y estemos dispuestos a afrontar una nue...
2 downloads 1 Views 123KB Size
BOLETIN INFORMATIVO

NUM. 25 – 9 de setiembre de 2010

Espero y deseo que todos hayamos pasado un feliz verano y estemos dispuestos a afrontar una nueva etapa de ADECUR, llenos de energía e ilusiones, para transmitir a nuestras reuniones de los jueves; con todos los proyectos que ya están en marcha (Programación de Setiembre-Octubre) y los nuevos que nos vayan proponiendo los componentes de la Junta Directiva. Así pues, !! FELIZ REENCUENTRO PARA TODOS !!. Ana Jiménez .-.-.-. A continuación transcribimos los premios del Concurso Literario : PRIMER PREMIO Seudónimo: Aurora Autora: Dolores Soria SUEÑOS Anoche tuve un sueño: Creía estar tocando tu sonrisa luminosa. Viajé otra vez a lugares imposibles donde el sonido del agua se hace eco de tu voz y el dulce trino de los pájaros me lleva al cobijo de tus brazos. Tu aliento cálido me envuelve como un bálsamo que amortigua mi dolor y las palabras no son necesarias, todo lo llena tu presencia. Pero suena el despertador de realidades y me llena de angustia la mirada. De nuevo el silencio me invade de realidad desnuda y abro la ventana. Un suspiro se escapa de la profundidad del alma … Pero una bocanada de aire fresco me rescata, otra vez, de tu recuerdo. Marzo 2010

EL FUEGO ACCESIT Autora: Leticia Gómez Junio 2010. ¿No te parece que hace frío? Yo la verdad no tengo ni pizca de frío, pero es lógico, ya que me estoy moviendo constantemente de acá para allá, lleva varias horas sentado, dedicado a su deporte favorito, “zapear” de un canal a otro, buscando deportes, cualquiera, el que sea, documentales, etc. Lleno la cesta de troncos, busco las cerillas, pastillas de petróleo, astillas, piñas y demás. Un chispazo primero, una pequeña llamita azulada, se inflaman las astillas y luego, con un siseo, la chimenea se invade de pequeñas y medianas lenguas de fuego, que se agitan y se enredan en los leños. Retirándome un poco las contemplo hipnóticamente y me dejo arrastrar por la magia de la explosión cromática, cálidos naranjas, agresivos amarillos, morados azulados, malvas … El calor que emana de la madera en combustión acaricia mi rostro y las manos protegidas por guantes se afanan en colocar debidamente los maderos. Siento en mi interior, que este movimiento de atizar el fuego es como algo mecánico, gravado profundamente en el subconsciente histórico, prehistórico más bien. Retrocedo en el tiempo, cientos de años, miles, millones … ¿Cómo, en qué lugar de nuestro planeta y quién conseguiría por primera vez entrar en contacto con la pequeña llamita? ¿Cómo conseguiría el primer homínido ser dueño de este maravilloso tesoro? Perdida la vista en las danzantes llamas multicolores, un escalofrío recorre todo mi ser. Ahora empiezo a tener frío … mucho frío … y miedo; el lugar donde me encuentro está oscuro, sólo ser percibo, allá en el fondo, un poco más de claridad, es la entrada de … ¿la cueva? ¡Estoy en una cueva! … es pequeña, con techo áspero y bajo, con salientes agudos y entrantes oscuros. Me acerco a un grupo de seres que se encuentran cerca, a los que miro con curiosidad, como si los viera por primera vez. Parecen ser niños y adultos, pero apenas se distingue bien lo que realmente son, están apelotonados unos contra otros para darse calor, sus cuerpos peludos y mugrosos cubiertos por las pieles de los animales que han cazado, descalzos y sus cabezas son una maraña de pelos llenas de suciedad. La aparente tranquilidad del interior del habitáculo, casi todos dormitan, se ve rota de pronto al entrar en el recinto un grupo de criaturas vociferantes, similares a las anteriores; al frente de las cuales avanza el que parece ser el jefe, portando como trofeo una gruesa rama, en cuyo extremo parpadea chisporroteante una luz. Pasado el primer instante de terror y confusión, nos acercamos todos para contemplar el prodigio; entre gritos guturales y saltos gesticulantes van transmitiendo el relato de lo ocurrido. Se encontraban cazando, la gran luz de lo alto se ocultó, sonó un ruido ensordecedor, un trozo de luz se desprendió desde lo alto y prendió en un árbol, se cercaron con temor y, al notar calor sobre sus cuerpos semidesnudos rodearon el fuego saltando entusiasmados, tomaron una rama encendida y se la llevaron a la cueva. Esa extraña luz les proporcionaría calor, y quizás asustase a los animales peligrosos. También haría que el resto de las tribus les temieran, ya que eran dueños de una parte de la luz de lo alto. -2-

¿Te has dormido? Se te apaga el fuego de la chimenea. ¿Me habré dormido realmente? No lo creo, pienso que el encuentro entre el hombre primigenio y el fuego puede haber sucedido tal y como yo lo imaginé. Casi todas las civilizaciones han adaptado una leyenda para explicar la posesión del fuego. Prometeo robándoselo a los dioses para dárselo a los humanos, siendo castigado por ello a ser devoradas sus entrañas por las aves rapaces. Remuevo las brasas, añado varios troncos más a la lumbre que instantáneamente se inflaman, llenando de llamas el interior de la chimenea. Entre las llamas me parece distinguir a las gentes de Roma que huyen despavoridas, empujándose unas a otras por entre las estrechas callejuelas. Siento como ellos un calor espantoso en todo mi cuerpo, el humo parece estar a punto de asfixiarme, los ojos me lagrimean, me zarandean de un lado a otro de la calle, ensordecida por los gritos de los que me preceden, tratando de no ser atropellada, pisoteada por los que me siguen y que tratan de alejarse de las viviendas que se consumen, con parte de sus habitantes dentro, ya que no pudieron escapar a tiempo. El único lugar seguro, para los que huimos, es el campo abierto, donde no hay construcciones de ningún tipo que se puedan desplomar sobre los supervivientes. En esta ocasión, el elemento mágico que el hombre prehistórico adoró como al mayor de sus dioses, ha servido para, de alguna forma, limpiarme, purificarme, que dirían los poetas, o más sencillamente avasallarme, aniquilarme, dominarme, sin poder evitar, no obstante, mi propia resurrección, igual que la ciudad de las siete colinas que, como la mítica Ave Fénix, renació de sus cenizas y volvió a alcanzar tanto esplendor como antes había poseído. El fuego ha estado y estará siempre formando parte de la existencia de la humanidad, para bien o para mal. A través del fuego intentaron, en la Edad Media, purificar a todas aquellas personas que éramos consideradas raras por nuestro entorno y a las que se nos acusó de brujas, de realizar prácticas nigromantes … Algunas perecieron en la hoguera, otras no, las que logramos sobrevivir fuimos testigos de su sufrimiento, el espantoso eco de su gritos enloquecidos, el olor a carne chamuscada permanecerá para siempre en nuestra memoria. Y cuando las grandes pestes asolaron Europa, fue también el fuego el que consiguió cortar de raíz la transmisión de los virus de un país a otro, quemando todos los enseres que habían estado en contacto con los infectados, así como la incineración de los cadáveres en grandes piras, sin que se nos permitiera a los familiares acercarnos demasiado. Veo como el fuego forma parte de las ancestrales costumbres de los campesinos que, cuando finaliza la cosecha, queman los rastrojos para eliminar los insectos y las enfermedades y como de sus cenizas, con la colaboración de las lluvias, abonan la tierra y renacen los cultivos. Yo también volveré a renacer con ellos. Fuego, eres calor, bienestar, pasión, renovación. Junto a ti, el agua, el aire y la tierra, sois el origen de la creación. .-.-.-. NECROLOGICA : Aunque ha pasado algún tiempo, no queremos dejar de dar nuestro más sentido pésame a nuestro socio y amigo D. Pedro Pablo Gómez, por el fallecimiento de su esposa Dña. Soledad Salgado, acaecido el pasado día 2 de abril. Todos los socios de Adecur queremos transmitirte nuestras sinceras condolencias. Descanse en paz. -3-

CUESTIONARIO EXPRES : En esta ocasión, hemos entrevistado a nuestra amiga y socia Dña. Rosa Calvo. Su mejor momento del día : Por la mañana, al levantarme y ver que estoy bien y con alegría. Un recuerdo de su infancia : Un día de Reyes Magos, en el que me regalaron una muñeca más grande que yo. Si quiere darse un capricho ¿Qué hace? : Me compro un libro. Un libro para recomendar a nuestros socios : “El corazón de la piedra verde”, de Salvador de Madariaga (para los más lectores) y “El vagón de las mujeres”, de Anita Nair. El consejo que agradece : Depende de el momento. Si quiere perderse, ¿Adonde va? : Me perdería por Roma, Florencia... y muchas ciudades más. Lo que no perdona : La mentira. ¿Qué o quien le produjo la mayor alegría? : He tenido varias alegrías desbordantes, a lo largo de mi vida, que son cronológicamente: mi primer trabajo, en el aspecto material. En el sentimental: el día de mi boda; el nacimiento de mis tres hijos y, posteriormente, el de mis cinco nietos. ¿Qué hecho le produjo la mayor tristeza? : El fallecimiento de mis padres. El de mi padre, por mi tierna edad y el de mi madre, porque creí que iba a ser eterna. ¿Le asusta envejecer? : No. ¿Tiene algún hobby? : La lectura. Y, por último, su autocrítica : Soy excesivamente nerviosa, en el aspecto emocional, a lo mejor necesitaría reflexionar más en unos momentos determinados. Queremos agradecer a Rosa todas sus respuestas, por su sinceridad y espontaneidad, al contestar a nuestras preguntas. .-.-.-. RECORDATORIO : Si algún socio tiene pendiente de pagar el segundo semestre de la cuota de Adecur, que como todos sabéis es de 20 Euros, le recordamos el número de BANESTO: 0030-8141-98-0002710271, para que hagan su ingreso.