A. Por la cultura vocacional (kerigma vocacional)

2012-2015 Tres son los focos de atención que tiene, como telón de fondo, este Plan de acción vocacional. - En primer lugar, la Iglesia universal ha ad...
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2012-2015 Tres son los focos de atención que tiene, como telón de fondo, este Plan de acción vocacional. - En primer lugar, la Iglesia universal ha adquirido una conciencia viva de la particular impronta de nuestro tiempo, de la oportunidad que este cambio de época entraña para la inculturación del Evangelio y del gran desafío que comporta ponerse manos a la obra en esta tarea. - Asimismo, el proceso de revitalización y reestructuración de la Orden iniciado por el LIV capítulo general llama a todos los religiosos a desarrollar una pastoral vocacional que parta de la renovación a fondo de la calidad de nuestra vida consagrada y de nuestra misión apostólica. - Y el último capítulo provincial de mayo de 2012 ha acogido estas dos llamadas de la Iglesia, invitando a su vez a todos los religiosos a una conversión personal y comunitaria y a una atención cuidada de las tareas de la evangelización. Por su parte, en el mensaje que los religiosos capitulares de este último capítulo provincial dirigen a todas las personas e instituciones vinculadas a la provincia, se invita a la fe, la esperanza y la caridad. Este Plan de acción vocacional para el próximo trienio 20122015 también quiere acompañar las distintas iniciativas vocacionales programadas con una pro-vocación a la fe, a la esperanza y a la caridad. - Fe vocacional para creer que Dios sigue llamando. - Esperanza vocacional para confiar en que hay jóvenes -y no tan jóvenesgenerosos, que quieren responder a la llamada del Señor. - Y caridad pastoral para desencadenar esta llamada y acogerla con delicadeza en el seno de nuestras comunidades. La estructura de este Plan de acción se corresponde con la metodología empleada en el Programa de pastoral vocacional de la Orden, cuyo objetivo principal es impregnar de cultura vocacional los nuevos tiempos de evangelización y las cuatro dimensiones de la vida cristiana: liturgía, koinonía, diakonía y martiría.

A. Por la cultura vocacional (kerigma vocacional) Se pretende abrir espacios vocacionales dentro de nuestras comunidades agustinorecoletas y presentar el mensaje de la vocación como algo significativo y relevante. Por ello designamos este momento como kerigma vocacional, pues se trata de hacer el primer anuncio de la vocación, objetivo principal de la cultura vocacional y momento especial del proceso evangelizador. 1.

Promoción de la cultura vocacional “ad intra” que lleve a todos los religiosos de la comunidad a despertar al “trabajo vocacional” como tarea primordial y signo de la alegría de la propia existencia.

2.

Organizar un taller sobre “cultura vocacional” en alguna de las semanas de formación que se programen durante el trienio, de común acuerdo con el equipo de animación de la formación permanente.

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3.

Aprovechar al menos una de las reuniones anuales de las fraternidades seglares para sensibilizarlas sobre la cultura vocacional.

4.

Hacer extensiva la cultura vocacional a las religiosas agustino-recoletas, laicos de nuestros ministerios y el voluntariado, a través de los EAVs locales.

5.

Sensibilizar a los jóvenes en formación inicial, principalmente los de la última etapa de la formación, sobre la cultura vocacional por los siguientes medios: a. conocimiento de documentos, artículos y bibliográfica específicamente vocacional; b. charlas, talleres, espacios de reflexión, retiros sobre el tema.

B. Celebración de la dimensión vocacional (liturgía) La dimensión litúrgica de la vida cristiana pide y exige celebrar la intervención amorosa de Dios en la vida de cada creyente. Y pide, sobre todo, insistir con perseverancia al Eterno Llamante que continúe suscitando la fe y la entrega total de cada creyente. 1. Celebrar la dimensión vocacional de la vida cristiana con nuestras fraternidades seglares y los laicos de nuestros ministerios. Para ello, se rezará con regularidad: a. la oración por las vocaciones agustino-recoletas en los ministerios en los que nos encontramos; b. la Hora Santa vocacional, alguna Eucaristía votiva vocacional, rosario vocacional... 2. Favorecer entre los jóvenes de nuestros ministerios la experiencia de Dios y de comunidad a través de: a. la creación de grupos de oración con modalidad de la lectio divina (encuentros cada quince días con materiales bien preparados…); b. la realización de experiencias tales como el camino de Santiago; encuentros semanales en Taizé; peregrinaciones a Lourdes…; c. encuentros de jóvenes de nuestros ministerios en los que se interpele directamente sobre la dimensión vocacional de la vida cristiana. 3. Celebrar en todos nuestros ministerios la semana agustiniana y vocacional. El Secretariado elaborará guiones litúrgicos, catequesis, oraciones, etc., para su celebración. 4. Ofrecer recursos y materiales para el día de retiro anual comunitario de temática vocacional.

C. Comunión en la animación vocacional (koinonía) El corazón de la animación vocacional está en el compartir los gozos y las esperanzas, las tristezas y los afanes de quienes colaboran en la animación vocacional, tanto en nuestra Orden como en la Iglesia universal. Esta espiritualidad de comunión nos pide ser responsables y creativos a la hora de trabajar como equipo en la elaboración de proyectos compartidos. 1. Encuentros nacionales anuales de los EAVs. 2. Realizar un encuentro anual por zonas de los EAVs.

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3. Incorporarse a través del orientador vocacional a los equipos de pastoral vocacional de las diócesis donde están presentes nuestras comunidades. 4. El coordinador mantendrá una comunicación fluida con los responsables de la pastoral vocacional de las demás provincias de la Orden en España, para estar al corriente de las actividades vocacionales que realizan y ver la posibilidad de organizar encuentros conjuntos. 5. Colaborar con el Secretariado general de pastoral juvenil en la organización y realización de la Jornada Mundial de la Juventud de Río de Janeiro –JMJR–. 6. Mantener una comunicación atenta y una cooperación fluida con el resto de religiosos de la provincia y de la Orden que colaboran directamente en la animación vocacional y la pastoral juvenil; conocer sus proyectos y compartirles los nuestros. 7. Divulgar en todas las comunidades, a través del orientador vocacional, el “guión general” para el sexenio, y atender a su contenido en la elaboración de materiales vocacionales.

D. Servicio a una promoción vocacional explícita (diakonía) La animación vocacional exige anunciar a Cristo mediante la Palabra que provoca, exhorta, estimula y mediante la acción pastoral que organiza, estructura y ordena. Pero, la palabra que evoca y las estructuras que organizan se quedarán estériles si falta la labor cálida, humana y sensible del orientador a la hora de acoger y acompañar a quienes experimentan la llamada. 1. Atender y acompañar con esmero a las personas que quieran crecer en su fe o discernir acerca de la dimensión vocacional de su vida cristiana. 2. Crear de forma progresiva el equipo de animación vocacional -EAV- allí donde no existe. 3. Consolidar los EAVs allí donde ya existen, invitando a nuevos miembros a integrarse y atender su formación específica, de acuerdo con sus necesidades y expectativas. Para alcanzar este objetivo se propone lo siguiente: a. que los mismos miembros del EAV propongan un elenco de temas que les gustaría tratar y se programen encuentros específicos para abordarlos; b. el secretariado de pastoral vocacional elabore materiales de apoyo con temas específicos -san Agustín, carisma agustino-recoleto, Historia de la Orden, etc.para la formación de los miembros de los EAVs, y ponga a su disposición los ya existentes; c. el orientador vocacional dé a conocer y ponga en práctica el Itinerario Vocacional Agustino Recoleto (IVAR) de la provincia; d. el orientador vocacional asuma con ahínco la labor de la formación específicamente vocacional del EAV e invite a nuevos miembros a formar parte del mismo. 4. En las visitas del coordinador vocacional que se piden en la Ordenación nº 10 del último capítulo provincial se deberá: a. tener presente los nuevos números de las Constituciones referidos a la animación vocacional; b. retomar el Plan de pastoral vocacional de la Orden, dar a conocer el Programa de pastoral vocacional de la Orden, y ver qué actividades de las que en ellos 3

se proponen se pueden realizar en esa comunidad y saber de qué materiales se dispone para ello; c. reflexionar sobre el apartado del Directorio de la Provincia donde se habla de la animación vocacional y dialogar acerca de las Ordenaciones del último capítulo provincial; d. ayudar al orientador vocacional a perfilar, en caso de que sea necesario, el plan vocacional de la comunidad que se incluye en el Ordo Domesticus; coordinar el trabajo de los orientadores vocacionales y estimular su trabajo específico; apoyar con ahínco la formación de los EAVs en cada ministerio y evaluar, revisar y animar en general toda la pastoral vocacional comunitaria. 5. Potenciar la presencia de lo juvenil y lo vocacional en la página web de la provincia “Entra y verás” en relación estrecha con la comisión de publicaciones. Esta iniciativa es conveniente que se amplíe a las vicarías y delegaciones de la provincia: a. hacernos presentes en las redes sociales al menos a través del Facebook de la provincia; b. FAQ Vocacional: preguntas y respuestas sobre asuntos referidos directamente a la cultura vocacional y al discernimiento vocacional; c. entrevistas puntuales a algunos de los religiosos que hagan la profesión simple o solemne; d. editar algunos testimonios vocacionales de formandos, religiosos, laicos, obispos, etc., para colgarlos en las páginas web de la provincia y en You Tube; e. filmar alguna jornada de puertas abiertas de las distintas casas de formación de la provincia; f. colgar algunas pequeñas notas de interés vocacional y acompañarlas con iconografía cuando se celebre algún santo agustino o agustino recoleto; g. establecer un link con la página web de la Orden en su sección vocacional; h. publicar en “agustinosrecoletos.org” crónicas de las distintas actividades vocacionales; i.

referencias esporádicas a los documentos hitos del magisterio de la Iglesia sobre la cultura vocacional en la página “agustinosrecoletos.org”.

6. Hacer un inventario de los materiales vocacionales de los que se dispone en nuestra provincia (tanto en soporte informático como elementos físicos) y hacerlo llegar a todos los frailes de todos los ministerios. 7. Elaborar materiales de difusión vocacional: carteles, calendarios de mesa, calendarios de bolsillo, marca páginas, folletos de oraciones de adviento y cuaresma...

E. Testimonio gozoso y alegre de la propia vocación (martiría) El animador vocacional es ante todo testigo de los valores que se proponen en el evangelio, los cuales expresan su propia vocación y la definen. Hay autenticidad y, por tanto, un testimonio vocacional válido cuando se dan pasos significativos para apropiarse estos valores y convertirlos en estilo de vida. Y es, principalmente, a través de la alegría que se comunica, con espontaneidad y creatividad, lo que es una convicción profunda de fe. 1. Hacer presente en nuestros lugares de trabajo la exposición vocacional “Entra sin llamar” elaborada en nuestra provincia hace algunos años, para difundir la vocación 4

agustino-recoleta en nuestros ministerios en el marco de la celebración del primer centenario de la Orden y de la llamada a la Nueva Evangelización. 2. Habilitar encuentros-convivencia en nuestras casas de formación de los grupos de catequesis de nuestros ministerios, con presencia de los miembros del EAV, del orientador vocacional y de algunos de los formandos. 3. Que algunos de nuestros formandos se hagan presentes en nuestros ministerios para participar en alguna Eucaristía y darse a conocer a los laicos de allí, principalmente entre los grupos juveniles JAR y nuestras fraternidades seglares. 4. Colaborar con el orientador vocacional de la comunidad en la acogida y acompañamiento de los jóvenes con inquietud vocacional a la vida religiosa agustinorecoleta. Madrid, octubre de 2012

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